Viaje de memoria al campo de Gurs (Oloron-Sainte-Marie) IES Medina Albaida (Zaragoza) e IES Miguel Servet (Zaragoza) 26 y 27 de febrero de 2013 Cuadernillo elaborado por el Grupo Henek Gurs, une drôle de syllabe, comme un sanglot qui ne sort pas de la gorge. Louis Aragon Gurs, una extraña sílaba, como un sollozo que no consigue salir de la garganta. Autor desconocido Campo de Gurs, hacia 1941 Yad Vashem Cronología de Gurs, según Claude Laharie. Gurs, 1939-1945. Ed. Atlántica. Biarritz, 2005 contexto fechas Historia del campo 1939 Toma de Barcelona por las tropas franquistas. Declaración de guerra a Alemania ---26 de enero 2 de abril-------------------3 de sept. Otoño-------------------- Apertura de Gurs, internamiento de la Brigadas Internacionales y del ejército republicano. Incorporación de los combatientes del ejército republicano español a las compañías de trabajadores extranjeros. 1940 Ofensiva alemana, comienzo de la guerra. Convocación de alemanes y austriacos residentes en París Firma del armisticio Voto de plenos poderes al Mariscal Pétain Decreto-ley sobre el estatuto de los judíos ----10 de mayo ----15 de mayo 21-23 de mayo-------------22 de junio -----10 de julio Fin de julio-------------------3 de octubre 24-25 de octubre-----30-31 de octubre------ Llegada de “indeseables” Salida de “indeseables” Transferencia a Gurs de judíos alemanes deportados del País de Baden y del Palatinado y del Sarre Transferencia de judíos internados a Saint Cyprien Invierno----------------Primavera-------------- Fuerte mortalidad Transferencia masiva hacia otros campos del sur ----junio ----16 de julio 6 de agosto------------8 de agosto------------24 de agosto----------1º de septiembre----- 1º convoy de deportación vía Drancy hacia los campos de exterminio 850 deportados. 2º convoy 800 deportados 3º convoy 60 deportados 4º convoy 502 deportados 27 d enero ------------3 de marzo------------25 de septiembre----1º de noviembre------ 5º convoy 125 deportados 6º convoy 770 deportados Golpe de mano de la resistencia Cierre provisional del campo 9 de abril---------------5 de junio--------------------6 de junio ------15 de agosto ------22-23 agosto ------24 de agosto Fin de agosto---------- Reapertura del campo e internamiento de gitanos Llegada de mujeres internadas en Brens (Tarn) Transformación de una parte del campo para la cautividad de prisioneros alemanes e internamiento de colaboradores -------8 de mayo 31 de diciembre------- Cierre definitivo del campo, transferencia de los prisioneros alemanes a Polo de Beyris (barrio de Bayona) 1941 1942 Primeras deportaciones Redada del Velódromo de Invierno en París 1943 1944 Comienzo de desembarco aliado en Normandía Comienzo de desembarco aliado en la Provenza Liberación completa de los Países Bajos Instalación del Gobierno provisional 1945 Capitulación alemana Ayer INTERNADOS EN GURS (1939-1944) 25.577 republicanos españoles (de los cuales 6.555 eran vascos) 6.808 voluntarios de las Brigadas Internacionales, originarios de 52 países 26.641 judíos originarios de Alemania (de los cuales 6.538 fueron deportados de la región de Baden y Palatinado), Polonia y Austria 1.470 franceses 63 gitanos En total, 60.559 hombres, mujeres y niños. Hoy Orígenes del campo La toma de Barcelona por las tropas nacionales de Franco, el 26 de enero de 1939, anuncia la derrota del ejército republicano español. En dos semanas, medio millón de hombres, mujeres y niños huyen, cruzan la frontera de los Pirineos y vienen a apilarse sobre las playas del Rosellón. El 23 de febrero, el Ministerio del Interior de la III República, desprevenido por este éxodo masivo, decide construir una decena de “centros de acogida” en el sur de Francia. Entre ellos, se construirá uno de los más grandes en Gurs, entre el Béarn y el País Vasco Francés. ¿Dónde instalarlo? ¿En Ogeu, entre Pau y Oloron? ¿O en Gurs, que forma parte de la circunscripción electoral de León Mendiondou? Al revés de otros cargos políticos, el alcalde de Olorón, diputado del Frente Popular francés apoya el proyecto. ¿No es una solución aceptable para los hombres y mujeres de la República española hacinados en los campos de la costa oriental como Argelés? La decisión de crear un campo de refugiados es mal acogida en Béarn. Los periódicos provinciales se posicionan pronto contra los “rojos”, cuya anunciada presencia, en una vieja región de economía rural, generaría inseguridad. Eso es tanto como decir que las poblaciones consideraban este campo de extranjeros como algo impuesto. Gurs está situado en la región de Aquitania, en el departamento de los Pirineos Atlánticos, 84 kilómetros al este de la costa atlántica y 34 kilómetros al norte de la frontera española. Una construcción ejecutada con mucha rapidez Finalmente, el campo se instala sobre una landa insalubre que pertenece a tres municipios del valle del río de Oloron: Gurs, Dognen y Prechacq-Josbaig. Se construye en un tiempo récord, en 42 días, entre marzo y abril de 1939. Una doble red de alambre de espino encierra 382 barracones distribuidos en 13 manzanas, a uno y otro lado de la larga carretera central de 1.800 metros. Con sesenta internos por barracón, su capacidad de “acogida” es de 20.000 personas aproximadamente, lo que pronto será la tercera aglomeración del departamento, después de Pau y Bayona. En la foto, el campo. 6 de abril de 1939. En primer plano, l’ilot M en construcción; a la dcha, la calle central; al fondo, los Pirineos Una miserable ciudad de madera Construidos para un verano, los barracones miden 24 metros de largo por 6 metros de ancho. Las paredes y el techo son de tablas finas, apenas bien unidas, recubiertas de cartón asfaltado para la protección contra la lluvia. Dentro, ningún equipamiento: ni camas, ni estanterías o armarios donde organizar los escasos bienes que acompañan a los internos. La promiscuidad es total en estos refugios que alojan a unas sesenta personas cada uno. En cada manzana hay instalaciones comunes: cocinas, letrinas, lavabos. Esta miserable ciudad de madera también tiene edificaciones de servicios: electricidad, conducto de agua con cisternas, correos, almacenes, “hospital”, “campo de deportes” y cementerio. Gurs en 1939 Vista del campo de Gurs fotografiado desde un depósito de agua. Gurs, Francia (1941) USHMM Klaus Gerhards. El campo de Gurs en 1939 (Fonds Dachary) El primer período (de abril de 1939 a mayo 1940) Los primeros internos de Gurs (“Gursiens”) Los primeros transportes llegan a la estación de Oloron el 2 de abril de 1939. En total, 24.530 combatientes pasan por el Campo de Gurs en 1939. Tres grupos de españoles ocupan 9 de las 13 manzanas: los vascos (manzanas A,B,C y D), los pilotos de la Aviación Republicana (manzanas K,L y M) y el resto (manzanas E y F). A sus lados, se agrupa a los voluntarios de la guerra de España, las Brigadas Internacionales (manzanas G,H,I y J). La mayor parte de estos últimos son militantes comunistas, originarios de 53 países y que forman el grupo más estructurado y disciplinado del campo. Son los principales animadores de la vida cultural, intelectual y artística de Gurs. Internos vascos detrás de las alambradas que separan su ilot de la calle central (1939) Con los 18.985 “hospedados” (60 refugiados por cada barraca, más la enfermería al completo) del 10 de mayo, se llegó a la capacidad máxima del campo. Las condiciones, aún siendo próximas a las de una cárcel, eran mucho mejores que las de Argelès y los otros campos de la playa. Con la cifra del 10 de mayo se llegó a la capacidad de “acogida” fijada por el general Ménard para Gurs. Sucesivamente la población del campo disminuyó: las repatriaciones y aquellos que encontraban un empleo, sobre todo en la agricultura, superaban de hecho las nuevas llegadas desde Saint Cyprien y Barcarès. En general, la población del campo siguió disminuyendo, pasando de los 14.977 internos del 1 de septiembre de 1.939 a los 8.171 del 1 de febrero de 1940 hasta llegar a los 2.470 del 1 de mayo del mismo año. Esta drástica disminución era fruto de las repatriaciones, favorecidas por la amnistía de Franco de octubre de 1939 y consideradas por los franceses el único modo de deshacerse de los refugiados, así como de las numerosas solicitudes de mano de obra que llegaban al campo para sostener la economía de guerra francesa. De otra parte, alrededor de 4.000 combatientes antifranquistas internados en Gurs, gracias a la intervención del Ministerio de Relaciones Exteriores francés, se refugiaron en México, Chile, Venezuela, Uruguay y Colombia. Un hormigueo de actividades Dentro de las manzanas de barracones, todo queda por hacer y no existen medios. Primero se organizan alrededor de los jefes de barracón, elegidos por sus compañeros. Se proponen cocineros, enfermeros y carteros. La prioridad es mejorar las condiciones de vida: construir camas, deshacerse de pulgas, piojos y ratas, curarse, arrancar los tocones del “campo de deportes” y cavar pozos bajo los barracones. Prisioneros hacinados en una barraca del campo de detención de Gurs, Francia (1940) American jewish Joint Distribution Committee Se desarrolla una vida social. Algunos internos se enteran de información y la difunden por el interior del campo; otros organizan cursos y conferencias; otros se dedican a la escultura o al dibujo. Gracias a las visitas se establecen, poco a poco, relaciones con el exterior. Un curso en el campo. 1939 La administración y la vigilancia Desde el primero al último día, las autoridades francesas se encargaron de la administración y la vigilancia del campo. En primer lugar fueron los militares del ejército francés hasta el armisticio del 22 de junio de 1940; después la Guardia Móvil (cuerpo de la gendarmería departamental) y civiles contratados en la misma región. En la administración, el jefe de campo, funcionario del Ministerio del Interior, es el interlocutor directo del Prefecto. Sus servicios administran el personal, el abastecimiento y los bienes de los internos. El servicio de seguridad se encarga de tramitar los expedientes de traslado y liberación, las encuestas y las investigaciones. El servicio de Salud dispone de un barracón denominado “hospital”, construido de una forma más sólida que los demás, pero carente de cualquier medicamento. El campo se va vaciando Desde la primavera de 1939, empieza a vaciarse el campo. Algunos internos se utilizan como mano de obra barata y experimentada para las necesidades de la economía local. En mayo y junio de 1939 se deportan a España cerca de 6.000 internos que rápidamente tienen que afrontar detenciones, encarcelamiento y ejecuciones sumarísimas. El 2 de septiembre de 1939, Francia e Inglaterra declaran la guerra a Alemania. Para sustituir a los movilizados en los campos y fábricas, se recurre a los internos de los campos, incluyendo a Gurs. En el otoño el campo está casi vacío de españoles. Los últimos internos republicanos son incorporados al ejército francés a través de las Compañías Militarizadas de Trabajadores Extranjeros y se destinan al frente, en la Línea Maginot. Allí serán capturados por los alemanes y considerados prisioneros de guerra. Sólo los brigadistas rechazan este alistamiento forzado y permanecen en el campo hasta mayo de 1940. “La última granada de Dombrowski” Monumento de los voluntarios de la brigada francopolaca Dombrowski, llamada así en honor de un general de la Comuna de París muerto en 1871. El segundo periodo (de mayo de 1940 a octubre de 1940) Los “indeseables” El ataque alemán del 10 de mayo de 1940 inaugura el segundo periodo de la historia del Campo de Gurs. Lejos de cerrar este campo ya deteriorado y malsano, el Gobierno francés decide enviar allí, como medida de “seguridad nacional” a los súbditos de países enemigos, detenidos en la región parisina y declarados “indeseables”. Se trata de mujeres y niños alemanes, austriacos, polacos, etc. Entre ellos muchos judíos que habían huido de las persecuciones en su país para refugiarse en Francia. A finales de mayo, comunistas franceses, republicanos españoles y gitanos se unen a ellos. El número de internados pasa brutalmente de 1.500 a 12.000. En Gurs, desde entonces, solo estarán encerrados civiles. Algunas mujeres judías “indeseables” internadas en Gurs entre mayo y julio de 1940 Hanna Arendt (1906- 1975). Una de las figuras filosóficas más importante del siglo XX. Escribió, entre otras obras, “Los orígenes del Totalitarismo” (1951) y “Eichmann en Jerusalén: un estudio sobre la banalidad del mal” (1963). Lou Albert-Lazard (Metz, 1885París,1969) Desde 1908 hasta 1914, estudió arte en Múnich y luego en París. En 1914-1916, tuvo un romance con el poeta austríaco Rainer Maria Rilke en Viena. Se relacionó con un círculo de artista que incluyen, entre otros, a Romain Rolland, Stefan Zweig, Paul Klee y Oskar Kokoschka. En 1928, volvió a París donde conoció a Henri Matisse, Alberto Giacometti. y Robert Delaunay. Charlotte Salomon (1917-1943). Artista. Asesinada en Auschwitz Justo cuando parecía inminente el cierre del campo, el ataque de la Wermacht en Bélgica y en el norte de Francia, hizo que numerosos judíos alemanes, polacos y austríacos, escaparan a París huyendo del veloz avance del ejército alemán. Pocos días después, el gobierno francés tomó una serie de duras medidas que disponían el agrupamiento de todos los ciudadanos de países enemigos, o sea, de alemanes (categoría que en este momento incluían también a los austríacos) y de polacos en los estadios de París. Para los hombres se eligió el estadio “Buffalo” y para las mujeres el Vel d’Hiv (“Velódromo de invierno”). Los primeros fueron conducidos a Rivesaltes, las segundas a Gurs. De este modo, las mujeres, 9.771 internas entre el 1 de mayo y el 23 de octubre, de las cuales más de la mitad provenían de París (“Les Parisiennes”), fueron, durante esta fase, el contingente más numeroso del campo. La mayor parte de éstas eran judías. Löw y Bodek Los indeseables, 1940 Löw y Bodek Familia separada por las alambradas 1941? El gobierno francés estableció además la transferencia de los presos (esencialmente militantes del PCF y de la CGT) detenidos en las cárceles de Santé y de Cherche-Midi a Gurs. Ellos eran conocidos como los “políticos” y en este período eran más o menos 1.300. El otro grupo de internos estaba constituido por los cerca de 3.700 combatientes del ejército republicano que todavía quedaban en el campo. Todos los nuevos internos eran definidos como “indeseables” en cuanto sospechosos de “quintacolumnistas”. Durante el verano de 1940 mucha gente partió del campo, a tal punto que el 1 de octubre quedaban solamente 3.594 internos haciendo pensar nuevamente que el cierre del campo estaba próximo. Léon Bérody en el campo de Gurs (1940). Dibujo de René Kunz. Léon Bérody, fue un sindicalista de la CGT, futuro presidente de l'Amicale du camp de Gurs, El tercer periodo (de octubre de 1940 al verano de 1943) Vichy y la colaboración francesa en el exterminio El 3 de octubre de 1940 el Estado francés promulga un primer estatuto de los judíos. Vichy inaugura de esta manera su colaboración con la Alemania nazi. En toda la Francia libre, las autoridades reciben la orden de censar a los judíos, apartarlos de ciertas funciones, detenerlos, internarlos y más tarde deportarlos. La política de exterminio de los judíos decidida por Hitler y los dignatarios nazis en la Conferencia de Wannsee, el 20 de enero de 1942, encuentra un buen aliado en Francia, porque Vichy, desde hacía varios meses, ya había preparado e institucionalizado las herramientas necesarias para establecer políticas de represión. " En lugar de hacerlo con nuestros policías y soldados, lo hacemos con los policías y los gendarmes de Petain. Esto supone un ahorro significativo ". Philippe Pétain y Adolf Hitler, el 24 de octubre de 1940 en Montoire-sur-le-Loir. Adolf Hitler Deportación de judíos alemanes de Gailingen a Francia en octubre de 1940. Bildarchiv Preussischer kulturbesitz En la llamada operación Bürckel, el 22 de octubre de 1940, fueron deportados 6.538 judíos de la zona de Baden (2.335 de Mannheim, 1.380 de Heidelberg, 750 de Karlsruhe y el resto de Fribourg-en-Brisgau y Constanza), y, 1.125 de la zona de Sarre. Son en su mayoría mujeres, niños y ancianos. Se dirigen en tren hacia la Francia de Vichy. El Estado francés decide internarlos inmediatamente. Llegan al campo el 25 de octubre de 1940. Se enfrentan a unas condiciones de vida en el campo extremas, agravadas por la crudeza del invierno de 1940-1941. Al frío se suma la lluvia, que convierte el campo en un inmenso lodazal que impide todo movimiento y obliga a los internos a permanecer enfermos en el interior de las barracas donde las condiciones sanitarias son dramáticas De todos ellos 820 murieron en el campo, 1.710 puestos en libertad, 2.820 reclutados para trabajos forzados y 755 lograron escapar. Durante los meses siguientes, otros judíos extranjeros, detenidos por la policía francesa, se unen a ellos. En total, 18.185 personas, entre el 24 de octubre de 1940 y el 1 de noviembre de 1943. “Les Gursiens” de esta época, se dividieron en tres grandes categorías: . los judíos alemanes originarios de Baden, del Palatinado y del Sarre (alrededor de 6.500), la mayor parte ancianos forzados por la Gestapo a transferirse a Francia; . los judíos, hombres, mujeres y niños, (7.000 aproximadamente), trasferidos de los otros campos del sur (sobre todo de Saint Cyprien); . las víctimas de las redadas (alrededor de 6.000 personas), esencialmente exiliados, desplazados y personas expulsadas de otros centros de “acogida”. Junto a las llegadas se sucedían los traslados hacia diferentes destinos. Un tercio de los internos es transferido hacia otros campos (Rivesaltes, Noè, Récébédou, Nexon, Brens y Vernet), otro tercio es reclutado por las compañías de trabajo extranjeras o son transferidos a centros de acogida y a hospitales, mientras cerca de 4.000 personas fueron deportadas (la mayoría a Auschwitz pasando por Drancy). El último tercio (3.500) se obtienen sumando los muertos en el campo (1.038 según las estimaciones oficiales), los liberados, los prófugos y los repatriados voluntarios. Llegada de 400 mujeres judías provenientes del campo de Noé. 4 de marzo de 1941 Grupo de niños en Gurs. 1943. USHMM Grupo de 38 internos del ilot H posan delante de la barraca 14 (primavera de 1942) Archives Hans Kahn / Wally M. de Lang Cuatro prisioneras en el ilot L en el campo de Gurs. Foto de Alice Resch-Synnestvedt Prisioneras en el campo de detención de Gurs, Francia. Abril, 1941 USHMM Las Deportaciones Las “salidas en convoy hacia un destino desconocido” forma terminológica utilizada por la administración de Gurs, constituyen los acontecimientos más dramáticos de la historia del campo, situado en zona libre. En siete meses, del 6 de agosto de 1942 al 3 de marzo de 1943, seis convoyes enviaron a 3.907 internos judíos hacia Drancy, última etapa antes de Auschwitz – Birkenau. Estas deportaciones, organizadas por las autoridades francesas a petición de los alemanes, añaden la desesperanza a los sufrimientos físicos y morales de los internos. Todas las actividades artísticas, culturales y religiosas cesan de repente. La única preocupación de los internos de Gurs, los Gursiens, es entonces saber si estarán o no en la próxima lista. Las cuatro primeras deportaciones (agosto-septiembre 1942) son organizadas por el capitán Theodor Danneker en persona tras su visita al campo el 18 de julio de 1942. Danneker, antiguo jefe del campo de Drancy, era el jefe en París de la sección IV B 4 de la Gestapo, responsable de la represión antijudía en todo el territorio. Salida de un convoy desde la estación de Oloron Theodor Dannecker (Tubinga, 27 de marzo de 1913 – Bad Tölz, 10 de diciembre de 1945) ¿Quién olvidará las largas columnas de hombres y mujeres cruzando el campo silenciosamente y dejando detrás de ellas un vacío donde uno creía ahogarse? Siegbert Plastereck Convoyes de agosto de 1942 Deportación. Embarque en un camión (1). 1942. Julius C. Turner Deportación. Grupo de mujeres con un niño. 1942. Julius C. Turner Frente a las deportaciones Deportación. Embarque en un camión (2). 1942. Julius C. Turner “Pedí permiso para pasar la noche con ellos. Se me concedió. Estaban allí sentados con su pobre hatillo, consternados, agobiados, inmóviles. Parecían haber perdido todas sus fuerzas, toda posibilidad de expresarse. Algunos ya parecían muertos, otros tenían cara agonizante. Algunos reaccionaron y me dijeron “así es como nos trata Francia”. Busqué caras conocidas. En pocas horas muchos se habían vuelto irreconocibles. En el fondo reconocí dos siluetas de pie, con la insignia judía bien a la vista. Al verlos así, les manifesté mi admiración. Respondieron recitando el salmo 130: “Desde las profundidades del abismo, Señor, escucha mi voz”. Las lágrimas invadieron mis ojos. Luego fueron embarcados en el convoy” Jeanne Merle d Aubigné. Ayuda protestante. Convoy del 6 de agosto de 1942. Elise y Ludwig Vollweiler (îlot I, barraca 16) (1942) Archives Theo Levi Originarios del país de Baden, Ludwig y Elise Vollweiler fueron expulsados de su domicilio el 25 de octubre de 1940 e internados en Gurs el 29. Permanecieron en el campo durante 22 meses. Fueron deportados el 6 de agosto de 1942 (convoy nº 18) y exterminados en Auschwitz-Birkenau el 15 de agosto. Elise dejó escrito un diario en el que describía minuto a minuto su internamiento en Gurs Morir en Gurs. Kurt Löw y Karl Bodek. (Fonds Wauquier- Dusart) El sacerdote Iñaki Azpiazu viajaba cada domingo desde Oloron a Gurs para impartir misa, y contó en una carta a otro canónigo qué es lo que vio allí: «Si entraras en el campo, sentirías romperse tu corazón. Verías caras anémicas y miradas tristes; vestidos rotos y pies desnudos; oirías quejas y no pocas protestas. Esta es la verdad. Creo que no pasarán del dos por ciento los que tienen muda interior. La inmensa mayoría cubre sus carnes con un mal pantalón y una chaqueta vieja o una guerrera (...) Es horroroso ver ancianos que padecen enfermedad, enfermos con paludismo, reuma, fiebres, etcétera, y constatar que junto a la buena voluntad de los médicos no existe ningún medicamento. Ni una sencilla purga, ni un bote de linimento. Ayer mismo tuve que hacer un esfuerzo para no llorar al ver tendido en una barranca, sin colchón ni manta, a un joven que sufría terriblemente con ataques de reumatismo articular. Ya que te hablo con toda franqueza, no puedo ocultarte que me parece bárbaramente inhumano ver a enfermos nuestros en esa situación. Cinco mil vascos, encerrados entre alambradas y en barracas, sin colchón todos, sin mantas gran número, sin medicamentos, sin vestidos.” "Gurs, el campo vasco", del historiador Josu Chueca. ¡Hambre! Löw y Bodek (1940) Sobrevivir “Nuestra comida se componía de una especie de café para la mañana, a las 7, de una sopa y a veces de un plato de legumbres con trazos de carne (de la peor calidad) a las 11.30h y de topinambures a las 17.30. La ración de pan era de 250 gramos. La ración de azúcar: una cucharadita de café. Una vez por semana medio litro de vino. La cantidad y calidad de esta comida eran justo suficientes para mantener en el hombre un soplo de vida. Los paquetes eran visados exhaustivamente por el control del campo. El destino de los productos confiscados era fácil de adivinar”. Arkadius Hercfelds, judío letón internado desde el 20 de febrero hasta el 17 de marzo de 1943 “Sobrevivir en Gurs era un esfuerzo sobrehumano. Y conservar allí intacta la dignidad y la humanidad representaba casi un milagro” Laure SchindlerLevine, internada desde el 28 de octubre de 1940 hasta el 18 de mayo de 1941, con 13 años Partiendo el pan de Kurt Löw y Karl Bodek. (1941) “Me siento muy mal, muy cerca del desastre total de mi alma y del derrumbamiento de mi cuerpo. He adelgazado 28 kilos en dos meses, desde el principio de mi internamiento” Johan Papez Carta del 14 de diciembre de 1940 Julius C. Turner Esperando la sopa de la noche, 1941 Foto: Archiv für Zeitgeschichte ETH Zürich La miseria y el barro “En cuanto salíamos del barracón, nos hundíamos en un suelo esponjoso hasta los tobillos, y a veces, más profundamente todavía. A menudo he llegado a ayudar a un pobre hombre extrayéndolo de esa cloaca de la que había sido incapaz de salir por sus propios medios. El combate comenzaba cuando se caminaba por la manzana. Para luchar contra un suelo tan cruel. El barro se metía por todas partes y dejaba el pie totalmente empapado.” Löw y Bodek. El barro en Gurs (1941) Eugen Neter, Recuerdos de Gurs Mujer caminando en el barro Las obras de ayuda mutua Ante la miseria y el aislamiento casi total de los internos, algunas personas intentaron ayudarles. Para ello era necesaria una autorización especial del jefe de campo, que la daba sólo después de asegurarse de que el recién llegado no iba a ser una fuente de disturbios. Hay que decir que solamente autorizaban las obras de carácter religioso. Entre ellas, las más activas fueron: el Socorro Protestante (Madeleine Barot crea el CIMADE en Gurs), el Socorro Suizo para los niños (Elsbeth Kasser), el Socorro “quaker” y el OSE (Obra de Socorro a los Niños). Muchos internos consideran que la dedicación de aquellos “Justos” constituyó una de las pocas razones para mantener la fe en el hombre y en Dios. Después de las deportaciones de 1942, casi todos los responsables de las obras humanitarias abandonaron el campo desesperados. Elsbeth Kasser “el ángel de Gurs” Madeleine Barot, secretaria general del Socorro Protestante (CIMADE), nombrada Justo entre las Naciones por Yad Vashem en 1988 LA AYUDA SUIZA Este pequeño refugio es el único vestigio de madera que se conservó. Se trata del más pequeño de los dos barracones de la Ayuda Suiza. En este refugio vivía Elsbeth Kasser, la enfermera suiza que había organizado un suministro especial de leche y queso destinado a los lactantes y jóvenes internos. Por su amabilidad, su energía infatigable y la dulzura de su cara la llamaban “el Ángel de Gurs”. Amaba a los niños, les hacía leer, jugar y cantar. En el campo se habían instalado otras “obras filantrópicas” tales como el CIMADE protestante de Madeleine Barot o los Quakers. Ellos contribuyeron a aportar a los internos un halo de esperanza, pero no les libraron ni del agotamiento físico y moral, ni de las deportaciones Interior de la barraca del Socorro Suizo. Kurt Löw y Karl Bodek (1941) Dibujo infantil hecho en el campo por Ventura, de 12 años, en agradecimiento al Socorro Suizo. Madres, enfermeras y bebés en el campo de Gurs en 1942. (Fonds Jerzy Torunczyk) Tres bebés en Gurs. Los trillizos Manuel, José y Carlos Rodríguez. Nacidos el 6 de marzo de 1942 de Carlos Rodríguez y Frieda Marx. Los internos en busca de dignidad La voluntad de salvaguardar su dignidad empuja a los internos hacia numerosas actividades que les mantienen en su lucha por la supervivencia. La religión y todas las formas de cultura adquieren una considerable importancia. Los internos de Gurs escriben, pintan, dibujan, tocan con el instrumento que guardan cuidadosamente con ellos, componen canciones, montan obras teatrales, redactan poemas… Lo que era secundario en su vida anterior se convierte ahora en parte fundamental. Durante tres años, en el mundo cerrado de los barracones, las actividades artísticas y literarias, a pesar de la penuria y la soledad, se desarrollan sobre un único tema: los sufrimientos. El campo es entonces uno de los centros culturales más activos del Suroeste francés. El 14 de julio de 1939, fiesta nacional francesa, los 17.000 internados formaron marcialmente en el campo de deportes y cantaron La Marsellesa, ofreciendo a continuación demostraciones deportivas y conciertos de coro e instrumentales También había mucha actividad en el área de las artes visuales en Gurs, con exposiciones de dibujos y pinturas. El principal estallido de creatividad comenzó a disminuir hacia el verano de 1942, cuando empezaron a producirse deportaciones en masa desde los campos del sur de Francia hacia los del norte (particularmente Drancy). De allí los internos eran deportados a los campos de exterminio de Europa Oriental. Invitación para una exposición artística en junio de 1941 en el campo de Gurs. Kurt Löw Flores, 1941 Monumento a Durruti (Photo Stroppolo) Una veintena de internos posan delante del monumento que simboliza al partido comunista español. (Photo Campana) Haggadah o Hagadá (del hebreo , "narración", es el texto utilizado para los servicios de la noche de Pésaj, que contiene la lectura de la historia de la liberación del pueblo de Israel de Egipto conforme está descrito en el Libro del Éxodo) del rabino Leo Ansbacher. Leo Ansbacher internado en Gurs a finales de octubre de 1940, con el grupo de 3.870 “indeseables” provenientes del campo de SaintCyprien, organizó junto con su hermano Max, un comité de ayuda para luchar contra el hambre y promover la cultura en los barracones. Sus sermones, llenos de fervor y humanismo, ayudaron a los internos a soportar la cruda vida en el campo. Autor desconocido La orquesta vasca (1939) Una orquesta internacional, bajo la dirección de Ebrhard Schmidt, de la Filarmónica de Berlín, reunía a una quincena de instrumentistas: violinistas, guitarristas, acordeonistas, flautistas, etc. También contaba con cantantes de ópera, como el tenor Ennio Tofoni, del teatro de Roma y el barítono Winterstein. Fue Toffoni quien cantó “La Marsellesa” en la ceremonia en el campo de Gurs del 150 aniversario de la Revolución Francesa el 14 de julio de 1939. La coral de Gurs Josep Franch Clapers A pesar de las condiciones de deterioro, los internos de Gurs estaban determinados a mantener cierta actividad artística y cultural. A partir de marzo de 1941, una barraca de cada "isla" fue convertida en una especie de "centro cultural", donde se llevaban a cabo conferencias, conciertos, obras clásicas y cabarets. Los actores recibían raciones de comida extra como forma de pago, como lo describe un poema de Heini Walfisch ("Teatro en Gurs"): Actuamos para vivir Qué significa eso? Por Ibsen - una rodaja de pan Por Shakespeare - un huevo Y tal vez algo de semolina Programa de uno de los espectáculos de Alfred Nathan (Arch. Dép. Pyr. Atl) Los últimos meses de Vichy: un campo ingobernable Al final del verano de 1943, el campo acoge todavía a un centenar de internos. En la noche del 25 de septiembre, dos grupos de la Resistencia de las Fuerzas Libres de Pau y Mauléon asedian el campo, neutralizando a los guardias y llevándose todas las armas almacenadas. El jefe del campo es destituido, así como algunos guardias. El ministerio del Interior decide disolver el campo el 1 de noviembre de 1943. Sin embargo el campo no se cierra. Se mantiene en previsión de ser reutilizado más adelante. El 9 de abril de 1944 recibe a 78 gitanos que venían del campo de nómadas de Saliers (Bouches-du-Rhone) y el 5 de junio a 151 mujeres procedentes del Campo de Brens (Tarn). Todos se escapan el 25 de junio cuando las tropas alemanas atacan a los miembros de la Resistencia de la zona del Hospital de Saint Blaise, a cinco kilómetros de Gurs. Los guardias huyen también de forma inmediata. Familia gitana Démétrio El final del campo Las semanas que siguieron a la liberación (22 de agosto de 1944) se desarrollan en una gran confusión. ¿Quién tiene la autoridad en Gurs? ¿La Resistencia, que decidió administrar una parte del campo y encerrar allí a 310 prisioneros de guerra alemanes capturados en el valle de Aspe? ¿El nuevo Prefecto que mandó internar a 1.585 “colaboracionistas” sospechosos de estraperlo o errores administrativos? La confusión llega a su paroxismo cuando 1.475 republicanos españoles, alguno de los cuales ya habían sido internos del campo, son encerrados allí después de volver de la invasión del Valle de Arán, en 1944, en su lucha contra la dictadura fascista española. El 31 de diciembre de 1945, por fin, el campo se cierra definitivamente. Sus ruinas se queman en 1950 como medida de salubridad y se planta un bosque en toda su superficie. Cae en un profundo olvido durante varias décadas. El cementerio del Campo de Gurs En 1962, el cementerio estaba en semejante estado de ruina, que las ciudades del País de Baden, en especial Karlsruhe, solicitaron y obtuvieron un arrendamiento para restaurar y mantener el lugar donde reposan muchas personas originarias de esa zona. En el cementerio de los deportados descansan los cuerpos de 1.073 hombres, mujeres y niños, en su mayoría judíos, muertos en el campo entre los años 1939 y 1943, en condiciones de indigencia extrema. En su interior se levantan dos estelas. La situada a la derecha homenajea a los Republicanos y a los voluntarios de las Brigadas Internacionales. En el centro está situado el elevado en recuerdo de los hombres, mujeres y niños judíos muertos en Gurs. A la entrada del cementerio, esta pequeña escultura recuerda a las víctimas judías de la región de Baden Tumba de Michael Dreyfuss. Natural de Diersburg (cerca de Estrasburgo), deportado a Gurs en la Operación Bürckel, el 22 de octubre de 1940, murió en el campo a los 77 años. LISTA DE ESPAÑOLES Y BRIGADISTAS FALLECIDOS EN EL CAMPO DE GURS • • • • • • • • • • • • • • • • • • • ALBUIN-GONZALEZ Dorotea + 13.06.39 ARANAWIWAZ Venancio + 09.02.40 BANCELS José + 12.05.39 BREROVOSKY Jean + 09.06.39 DURAN CAMPOS José + 08.09.39 DURO GOMEZ Antonio + 11.05.39 ECHARRY CULUAGO Jesús + 09.07.39 GOMEZ-SANTAMARIA Federico + 07.03.40 GRANDO CHACO Miguel + 08.06.39 GYERTYAC Joseph + 09.07.39 HUSTI Esau + 19.05.39 JUNG Joseph + 17.06.39 LOPEZ DOMINGUEZ Rafael + 30.12.39 LUNA FERNANDEZ Gregorio + 27.10.40 MARTINEZ MORCIDA José + 23.11.39 OLOVAR LOPEZ Eduardo + 07.06.39 PEREZ CATIVIELLA Francisco + 11.05.39 PEREZ PEREZ Julián + 30.12.39 VILLARROLLA SUAREZ Florencio + 19.12.39 Concebido por el artista israelí Dani Karavan, es uno de los tres Monumentos Nacionales (junto con el del Velódromo de Invierno y la Casa de Izieu). Tiene una función simbólica pues no existía en la época de funcionamiento del campo. Se trata de un conjunto con tres elementos a lo largo de un camino de 230 metros: (1) Una gran losa de hormigón que soporta el armazón de un barracón de Gurs, (2) una vía férrea que simboliza la deportación a los campos de exterminio y (3) una gran losa de hormigón rodeada de alambre de espinos que simboliza estos campos de exterminio, como el de Auschwitz. (1) (3) (2) (1) (2) (3) Estelas conmemorativas de (1) voluntarios de las Brigadas Internacionales (950 polacos de la Brigada Dombrowski y 902 italianos de la Brigada Garibaldi). (2) Republicanos aragoneses. (3) “Indeseables”: 9.771 mujeres, redada del velódromo de invierno, refugiados, antinazis alemanes y austriacos y resistentes alemanes. Estela conmemorativa de los 3.907 hombres, mujeres y niños judíos deportados a Auschwitz y asesinados allí. Campo de Gurs, 1942-43, Régimen de Vichy El bosque lo ha cubierto todo Un bosque oscuro, vagamente hostil, un suelo pantanoso, el ruido del viento, el canto de los pájaros. Y sin embargo, hay que imaginar aquí un verdadero pueblo de miseria. Un universo cerrado, separado de todo. Un campo de concentración inmenso, sin árbol ni verdor, sin sombra en verano, sin nada para protegerse de las ráfagas de viento o de la lluvia del invierno. Hay que imaginarse la soledad, el frío, el hambre y la miseria. Hay que imaginar la angustia permanente, la angustia de no tener noticias de los tuyos, la angustia del sufrimiento, la angustia de la muerte, la angustia de la deportación a los campos nazis o a la represión franquista. La naturaleza lo ha cubierto todo. Sin embargo cada metro cuadrado de este lugar conoció el dolor. ¿Podemos olvidar? A modo de conclusión Este es un lugar simbólico de xenofobia, sufrimiento y crueldad. Este lugar sólo debe su existencia al abandono de las conciencias y a la irresponsabilidad, en nombre de principios que hacían caso omiso de la dignidad humana. Durante cuatro años y medio, desde abril de 1939 hasta octubre de 1943, una mecánica despiadada pudo funcionar, fuera de todo sentimiento humano. Justificado por razones de seguridad nacional, por razones de excepción, por voluntad de represión o por el antisemitismo del Estado, esta mecánica contribuyó a destrozar a miles de hombres, mujeres y niños. ¿No habría que reflexionar sobre esto? ¿Estamos seguros de que esto no se reproducirá? Löw y Bodek, Una primavera, 1941? Löw y Bodek, El día llegará LECTURA DE TESTIMONIOS Y HOMENAJE A LAS VÍCTIMAS ¿Quién olvidará las largas columnas de hombres y mujeres cruzando el campo silenciosamente y dejando detrás de ellas un vacío donde uno creía ahogarse? Siegbert Plastereck, Convoyes de agosto de 1942 “Pedí permiso para pasar la noche con ellos. Se me concedió. Estaban allí sentados con su pobre hatillo, consternados, agobiados, inmóviles. Parecían haber perdido todas sus fuerzas, toda posibilidad de expresarse. Algunos ya parecían muertos, otros tenían cara agonizante. Algunos reaccionaron y me dijeron “así es como nos trata Francia”. Busqué caras conocidas. En pocas horas muchos se habían vuelto irreconocibles. En el fondo reconocí dos siluetas de pie, con la insignia judía bien a la vista. Al verlos así, les manifesté mi admiración. Respondieron recitando el salmo 130: “Desde las profundidades del abismo, Señor, escucha mi voz”. Las lágrimas invadieron mis ojos. Luego fueron embarcados en el convoy” Jeanne Merle d Aubigné. Ayuda protestante. Convoy del 6 de agosto de 1942. «Si entraras en el campo, sentirías romperse tu corazón. Verías caras anémicas y miradas tristes; vestidos rotos y pies desnudos; oirías quejas y no pocas protestas. Esta es la verdad. Creo que no pasarán del dos por ciento los que tienen muda interior. La inmensa mayoría cubre sus carnes con un mal pantalón y una chaqueta vieja o una guerrera (...) Es horroroso ver ancianos que padecen enfermedad, enfermos con paludismo, reuma, fiebres, etcétera, y constatar que junto a la buena voluntad de los médicos no existe ningún medicamento. Ni una sencilla purga, ni un bote de linimento. Ayer mismo tuve que hacer un esfuerzo para no llorar al ver tendido en una barraca, sin colchón ni manta, a un joven que sufría terriblemente con ataques de reumatismo articular. Ya que te hablo con toda franqueza, no puedo ocultarte que me parece bárbaramente inhumano ver a enfermos nuestros en esa situación. Cinco mil vascos, encerrados entre alambradas y en barracas, sin colchón todos, sin mantas gran número, sin medicamentos, sin vestidos.” "Gurs, el campo vasco", del historiador Josu Chueca. “Nuestra comida se componía de una especie de café para la mañana, a las 7, de una sopa y a veces de un plato de legumbres con trazos de carne (de la peor calidad) a las 11.30h y de topinambures a las 17.30. La ración de pan era de 250 gramos. La ración de azúcar: una cucharadita de café. Una vez por semana medio litro de vino. La cantidad y calidad de esta comida eran justo suficientes para mantener en el hombre un soplo de vida. Los paquetes eran visados exhaustivamente por el control del campo. El destino de los productos confiscados era fácil de adivinar”. Arkadius Hercfelds, judío letón internado desde el 20 de febrero hasta el 17 de marzo de 1943 “Sobrevivir en Gurs era un esfuerzo sobrehumano. Y conservar allí intacta la dignidad y la humanidad representaba casi un milagro” Laure Schindler-Levine, internada desde el 28 de octubre de 1940 hasta el 18 de mayo de 1941, con 13 años “Me siento muy mal, muy cerca del desastre total de mi alma y del derrumbamiento de mi cuerpo. He adelgazado 28 kilos en dos meses, desde el principio de mi internamiento” Johan Papez, Carta del 14 de diciembre de 1940 “En cuanto salíamos del barracón, nos hundíamos en un suelo esponjoso hasta los tobillos, y a veces, más profundamente todavía. A menudo he llegado a ayudar a un pobre hombre extrayéndolo de esa cloaca de la que había sido incapaz de salir por sus propios medios. El combate comenzaba cuando se caminaba por la manzana. Para luchar contra un suelo tan cruel. El barro se metía por todas partes y dejaba el pie totalmente empapado.” Eugen Neter, Recuerdos de Gurs APUNTES DE INTERÉS