Diabetes y sociedad La diabetes y la Organización Mundial de la Salud ` Rhys Williams, Gojka Roglic, Hilary King El objetivo de la Organización Mundial de la Salud (OMS) es la consecución del nivel más alto posible de salud para todas las personas del mundo. Desde sus oficinas centrales de Ginebra y sus Oficinas Regionales, ayuda a los gobiernos nacionales a conseguir este objetivo estableciendo normas y estándares internacionales y ofreciendo liderazgo y apoyo técnico. La OMS tiene una gran influencia y prestigio y algunos logros importantes en su haber, como la erradicación de la viruela en 1979 e importantes reducciones de la carga de la polio, la lepra, la oncocercosis y la tuberculosis. La relación laboral formal entre la OMS y la FID viene de muy atrás en el tiempo. Las dos organizaciones se formaron más o menos al mismo tiempo, la OMS en 1948 y la FID 2 años más tarde. Establecieron su relación profesional oficial en 1957. La FID fue tan sólo la segunda organización de este tipo que se reconoció en este sentido. En virtud a su mandato único, el trabajo de la OMS con la diabetes es crucial en muchos aspectos (ver cuadro en el reverso de la página). Al recopilar y diseminar datos También ha patrocinado colaboraciones internacionales para la investigación, y, junto con la FID, ha ofrecido oportunidades para que los profesionales sanitarios se formen en la epidemiología de y la atención sanitaria a la diabetes.También ha estimulado que los países formalicen y evalúen sus programas de prevención y control de la diabetes. En asociación con la FID, en la actualidad está mirando hacia el futuro para aumentar la concienciación en todo el mundo sobre la diabetes, luchar por un mundo mejor para las personas con diabetes, y estimular acciones de su parte. La diabetes como problema sanitario mundial >> Contribución mundial mundial. En varias ocasiones, ha reunido a expertos internacionales para estandarizar las definiciones de diabetes y afecciones relacionadas, y para acordar criterios de diagnóstico. Ha estimulado la recopilación de cálculos de prevalencia de diabetes en muchos países. estadísticos fiables e imparciales relacionados con la diabetes, ha conseguido llamar la atención sobre esta afección como problema sanitario mundial y mantenerla dentro de la agenda sanitaria 39 En 1964, la OMS organizó su primer comité experto sobre diabetes. Las conclusiones y recomendaciones de este comité se publicaron un año más tarde.1 Éstas resultaron ser proféticas en cuanto a que incluyeron preocupaciones sobre el >> Septiembre 2003 Volumen 48 Número 2 Diabetes y sociedad Contribuciones de la OMS en la lucha contra la diabetes mantener la diabetes dentro de la agenda sanitaria mundial coordinar la opinión de los expertos sobre la definición y los criterios de diagnóstico calcular la carga mundial de la diabetes y sus complicaciones patrocinar la investigación internacional apoyer la formación profesional en la epidemiología de la diabetes y la atención sanitaria estimular los programas de prevención y control de la diabetes problema en aumento de la diabetes, incluso aunque los datos disponibles mostraron prevalencias bastante más bajas que las que se ven hoy día en la mayoría de los países. El informe afirmó que "había un consenso general acerca de los síntomas de creciente prevalencia de diabetes mellitus en la mayoría de las partes del mundo", y "hay hoy día signos de un rápido aumento de la enfermedad". Sin embargo, los cálculos de prevalencia a partir de los estudios citados en el informe de 1965 son muy bajos al compararlos con valores más actualizados. Los últimos cálculos indican que hay al menos 194 millones de personas con diabetes en el mundo y que más de dos tercios de las mismas viven en países en vías de desarrollo.2 ( ) Queda mucho por hacer para asegurar que todos los países tienen una política para luchar contra la diabetes. En 1962, la Junta Directiva de la OMS aprobó su primera resolución sobre diabetes. En 1985, un Grupo de Estudio de la OMS llamó a la Septiembre 2003 Volumen 48 Número 2 cooperación entre la OMS y la FID a nivel regional, y en 1989 (el mismo año de la Declaración de San Vicente), la Asamblea Mundial de la Salud adoptó su primera resolución sobre prevención y control de la diabetes. Este reconocimiento de la diabetes como problema mundial, que se puede prevenir y controlar, fue crucial a la hora de animar a las naciones a que incluyan la diabetes, su tratamiento y su prevención, en sus agendas sanitarias. Sin embargo, tal y como ha mostrado un estudio reciente de la OMS, queda mucho por hacer hasta asegurar que todos los países tienen una política para la diabetes entre sus planes de control de enfermedades no contagiosas. En dicho estudio, el 43% de los ministerios de sanidad del mundo manifestaba tener un plan nacional para el control de la diabetes, que iba desde el 64% en los países de la Región del Pacífico Occidental de la OMS hasta tan sólo el 13% en África.3 Más recientemente, un "seminario técnico" abierto a los delegados que asistieron a la LV Asamblea Mundial de la Salud en 2002 destacó los problemas de la obesidad infantil y la diabetes tipo 2. Bajo el título de 40 "Diabetes: nuestro fracaso al tratar una epidemia moderna", se presentaron datos de varios países. La experiencia de un país en particular (la República de Mauricio) fue descrita por su Ministro de Sanidad y Calidad de Vida. Este seminario técnico fue un proyecto conjunto entre la unidad de diabetes de la OMS, la FID y el Grupo de Trabajo Internacional para la Obesidad (IOTF). Definiciones y criterios de diagnóstico para la diabetes y otras afecciones asociadas Dado el extendido uso hoy día de definiciones y criterios de diagnóstico estandarizados para la diabetes y la alteración de la tolerancia a la glucosa (ATG), quizá resulte difícil apreciar cuánta confusión existía hasta el momento en que se acordó por primera vez dichos estándares. Kelly West (el reconocido padre de la epidemiología de la diabetes) mostró en este estudio clásico que los médicos de América del Norte y Europa tenían una idea muy diferente sobre los niveles límite de azúcar en sangre que eran indicadores de diabetes. Esto no sólo influía en las decisiones terapéuticas, sino que Diabetes y sociedad también hacía que resultase imposible comparar, con resultados mínimamente válidos, los cálculos de prevalencia de diabetes en distintos países. ( La OMS estableció criterios bioquímicos aceptados internacionalmente para la diabetes e introdujo el término alteración de la tolerancia a la glucosa. ) El segundo comité experto de la OMS sobre diabetes estableció criterios bioquímicos internacionalmente aceptados para la diabetes, y también introdujo el término ATG y sugirió criterios de diagnóstico para el mismo.4 Éstos se ajustaron mediante el informe de 19855 y se definieron con más precisión en 1999.6 Desgraciadamente, la OMS y la Asociación Americana de Diabetes (ADA) no siempre han estado de acuerdo. Ambas organizaciones han revisado sus criterios con meses de distancia la una de la otra y, desgraciadamente, no han llegado a las mismas conclusiones. Las últimas series de criterios de ambas organizaciones difieren ligeramente pero al menos están de acuerdo en descender el nivel límite de azúcar en sangre en ayunas (glucosa en plasma) para determinar el diagnóstico de diabetes desde una concentración de 7,8 a 7,0 mmol/l. Tanto la OMS como la ADA apoyan la introducción de una nueva categoría denominada alteración de la glucemia en ayunas (AGA), que se puede identificar tan sólo con el nivel de glucosa en sangre en ayunas. Sin embargo, la ADA quiere simplificar el diagnóstico y el test epidemiológico de la diabetes y enfermedades relacionadas mediante argumentos para reducir la necesidad del test oral de tolerancia a la glucosa a las 2 horas en favor del test de glucosa en sangre en ayunas solamente. Colaboración para la investigación internacional El primer ejemplo de investigación internacional en colaboración aprobada por la OMS es el Estudio Multinacional de la OMS sobre Enfermedades Vasculares en la Diabetes (OMS MSVDD). Este estudio, que implica a 14 centros de 13 países, surgió a partir de una conversación, a principios de los años 70, entre Harry Keen y Eishi Miki de la Universidad de Tokio, durante la cual se observó que la enfermedad coronaria arterial y la enfermedad vascular periférica, tan características de los efectos a largo plazo de la diabetes en los EEUU y en Europa, no se observaban en Japón. Ante este hecho, se desarrolló un protocolo de investigación para recopilar, de manera estandarizada, información sobre las complicaciones vasculares de la diabetes en distintos países. El estudio fue importante, no sólo para demostrar la utilidad de la recopilación de información compleja, de una manera estandarizada, en muchos lugares de todo el mundo, sino también a la hora de destacar diferencias vitales en los resultados de la diabetes en muchas de estas ubicaciones. La inferencia extraída a partir de esto 41 fue que estas consecuencias adversas de la diabetes se podían, en gran medida, prevenir. A este estudio le siguió el Proyecto Multinacional para la Diabetes Infantil (DIAMOND) para investigar los patrones mundiales de incidencia,7 y los primeros cálculos de prevalencia mundial estandarizados,8 de diabetes infantil de tipo 1. A esto le siguió el cálculo de la carga sanitaria de la diabetes ahora y en un futuro próximo.9 Formar a profesionales en epidemiología de la diabetes En 1981, el primer Seminario de la OMS y la FID sobre epidemiología y aspectos de sanidad pública de la diabetes se celebró en Cambridge, Reino Unido. Este evento fue conceido y organizado por John Jarrett y otros con el fin de reunir a profesionales sanitarios de una serie de países, con el fin de que aprendiesen los métodos de epidemiología y los aplicasen a cuestiones relacionadas con la diabetes. No se cobró ningún tipo de cuota por la asistencia; los miembros de la facultad ofrecieron estos servicios de modo gratuito. Esto fue importante para facilitar la asistencia de personas de países de ingresos bajos, y de organizaciones que no podían permitirse más que el coste del transporte hacia y desde Cambridge. Los miembros de la facultad incluyeron a algunos de los mejores científicos en el terreno de la diabetes y la salud pública. Estos seminarios de gran éxito han ofrecido formación para más de 200 profesionales sanitarios y han contribuido en gran manera a la >> Septiembre 2003 Volumen 48 Número 2 Diabetes y sociedad creación de una red de investigadores activos en todo el mundo. Los miembros de esta red, guiados por personal de la OMS y por otros, han documentado la epidemia de diabetes y aportado importante información referente a las causas de la diabetes, genéticas y medioambientales, y a las mejoras de la atención a la diabetes. Se han celebrado seminarios similares en las Regiones de la OMS. Hasta el momento, han tenido lugar cuatro seminarios en África, cuatro en la región del Pacífico Occidental, uno en la región del Mediterráneo Oriental y tres en las Américas. Programas de prevención y control de la diabetes El Informe Mundial sobre Salud del año 2002 cuantifica la importancia de la obesidad y de una vida sedentaria en el aumento del riesgo de desarrollo de diabetes tipo 2.10 Casi dos tercios de la carga mundial de la diabetes se pueden atribuir al exceso de peso. Sin embargo, incluso una reducción moderada de la obesidad presente y futura, y de la inactividad física pueden disminuir de modo importante la carga de estos dos factores de riesgo. Al mismo tiempo, al menos un tercio de la población mundial con diabetes no es consciente de su afección, y muchas personas con diabetes ya diagnosticada está recibiendo un tratamiento inadecuado. La OMS ha desarrollado directrices para el desarrollo y la implementación de programas nacionales de diabetes,11,12 y ha Septiembre 2003 Volumen 48 Número 2 apoyado varias declaraciones regionales sobre diabetes (la de San Vicente, la DOTA, la del Pacífico Occidental). Junto con la FID, su antigua aliada, pronto se embarcará en una campaña global para aumentar la concienciación sobre la diabetes, su prevención y la mejora del control, y la actitud a largo plazo de las personas con diabetes. 3. Assessment of national capacity for noncommunicable disease prevention and control. OMS/MNC/01.2. OMS Ginebra, 2001. 4. WHO Expert Committee on Diabetes. TRS 646. OMS, Ginebra, 1980. 5. WHO Expert Committee on Diabetes. TRS 727. OMS, Ginebra, 1985. 6. Definition, Diagnosis and Classification of Diabetes Mellitus and its Complications. Report of a WHO Consultation OMS/NCD/NCS/99.2. OMS, Ginebra, 1999. ` Rhys Williams, Gojka Roglic, Hilary King Rhys Williams es catedrático de Epidemiología Clínica de la Universidad de Gales Swansea, RU. Es vicepresidente de la FID y en la actualidad dirige el Grupo de Trabajo sobre Aspectos Económicos de la Diabetes de la FID. Gojka Roglic es Funcionario Técnico del Departamento de Control de Enfermedades no Contagiosas de la OMS, en Ginebra. Hilary King es la Funcionaria responsable de la Diabetes del Departamento de Control de Enfermedades no Contagiosas de la OMS, Ginebra. Bibliografía 1. Diabetes Mellitus: Report of a OMS Expert Committee. WHO Technical Report Series 310. OMS, Ginebra, 1965. 2. Global Burden of Disease. OMS, Ginebra, 2003 (en rotativas). 42 7. Karvonen M et al. Incidence of Childhood Type 1 Diabetes Worldwide. Diabetes Care 2000; 23: 1516-1526. 8. King H, Rewers M. WHO Ad Hoc Diabetes Reporting Group. Global estimates for prevalence of diabetes mellitus and impaired glucose tolerance in adults. Diabetes Care 1993; 16: 157-177. 9. King H, Aubert RE, Herman WH. Global burden of diabetes, 1995-2025. Diabetes Care 1998; 21: 1414-1431. 10. The World Health Report 2002. Reducing risks, promoting healthy life. OMS, Ginebra, 2002. 11. Guidelines for the development of national diabetes programmes. OMS/DBO/DM/91.1. OMS, Ginebra, 1991. 12. Implementing national diabetes programmes. OMS/DBO/DM/95.2. OMS, Ginebra, 1995.