Monografía Curso de Capacitación Docente en Neurociencias Alumna: Anabel Pekel www.asociacioneducar.com Mail: [email protected] MSN: [email protected] INTRODUCCIÓN: El siguiente trabajo propone presentar la relación de dos temas vistos a lo largo del curso, ellos son la Atención y el Cerebro Emocional. Si bien me centro en estos dos temas, también se unen otros que se han desarrollado en esta capacitación, debido a que hablamos constantemente de una Unidad Cuerpo Cerebro Mente y por lo tanto la integridad de las funciones físicas y psíquicas como orgánicas y cerebrales, son la base para pensar a un ser humano. Estas temáticas se relacionan, a su vez, en la medida en que no podemos dejar de considerar el entorno (medio natural) en el que vive, se desenvuelve, se desarrolla e interactúa constantemente el individuo, el cual le propone estímulos que llegan a su cerebro produciendo emociones y sensaciones físicas que por momentos nos dominan y quizá no favorecen, en algunas circunstancias, nuestra calidad de vida. Por eso en el trabajo también se hace hincapié en la capacidad de tomar conciencia de nuestras emociones y sentimientos, y automodelarnos. DESARROLLO: El Cerebro Emocional o también llamado Sistema Límbico, está formado por varias estructuras que se relacionan con respuestas fisiológicas ante estímulos emocionales. Este cerebro está sumamente relacionado con la memoria, las emociones, la atención y el aprendizaje. El aprendizaje emocional está dirigido al mundo interior. El aprendizaje intelectual es aquel orientado al mundo exterior. El área que nos hace realmente humanos y nos diferencia de las otras especies son los Lóbulos Prefrontales. Algunas de sus capacidades son razonar, pensar, evaluar, auto-observarse, trazar estrategias, vetar impulsos emocionales; planificar, coordinar y monitorizar el comportamiento (“funciones ejecutivas”: dentro de ellas, la atención). Además son los responsables de nuestra inteligencia emocional, tanto a nivel personal como social. Es el área más evolucionada de nuestro cerebro y hogar de la autoconciencia. Conocer cuándo los impulsos primitivos guían nuestro comportamiento, es el primer paso hacia el poder gestionarlos apropiadamente y así alcanzar el desarrollo de poder ser más humanos, y aquí es donde la Neurosicoeducación juega un papel fundamental. La forma en que los cerebros responden a la información sensorial del entorno, demuestra cuál atrae su atención. Los educadores pueden utilizar estrategias compatibles con el cerebro para captarla como: anticipación positiva, novedad, intereses individuales, técnicas para focalizar la atención, sorpresa. De este modo vemos como el aprendizaje emocional influye en la capacidad de aprendizaje cognitivo. Dentro de los tipos de atención tenemos la atención focalizada que consiste en la concentración directa en un estímulo en particular ligado a la percepción y a la relación con el medio. Dentro de los niveles de atención se encuentra la alternancia de atención, permite cambiar el foco de atención y moverse entre tareas que requieren procesos cognoscitivos diferentes. Los Lóbulos Prefrontales son el asiento de las capacidades más elevadas de nuestro cerebro, ya que se comunican con el resto de las áreas cerebrales de quienes reciben información. A la vez se comunican con las mismas para poder modelar las respuestas instintivas, emocionales. La atención ejecutiva ayuda a mantener enfocada la Unidad Cuerpo Cerebro Mente (baúl de herramientas destinadas a resolver los diferentes problemas que plantea la supervivencia en el mundo natural) en los procesos del comportamiento dirigido a metas, incluyendo las acciones planificadas, la anticipación de consecuencias, la posibilidad de modificarlo. 2 LA ATENCIÓN PUEDE ENTRENARSE Y MEJORARSE. Los estímulos novedosos y atractivos, activan un Neurotransmisor (NT) que interviene en la motivación y entusiasmo, la DOPAMINA. La cual genera un circuito anticipatorio, haciendo que la UCCM se anticipe a considerar que si algo fue atractivo, lo volverá a ser la próxima vez. Por ejemplo: aquellos alumnos que miran una película con la cual se identifican y luego realizan un debate con el docente, sumamente enriquecedor pudiendo expresar libremente sus pensamientos, sintiéndose cómodos. La próxima vez que vean un film con la misma docente, esperarán recibir la misma recompensa de reconocerse en historias de vida y opinar sin ser juzgados, obteniendo recompensa personal. La emoción es el impulso para la acción. Cuando la hacemos consciente se transforma en sentimiento. Cuando las emociones son muy fuertes los Lóbulos Prefrontales y las capacidades matemáticas faltan. Desviar la atención ayuda a automodelar el estado emocional. Básicamente las respuestas son de dos tipos: Acercarse a todo estímulo placentero o pro supervivencia (PLACER) Alejarse de todo estímulo doloroso o contra supervivencia (DOLOR). La automodelación consiste en mantener las emociones o desviar la atención para salir de estado emocional. Si la emoción es negativa, es bueno pensar a la noche en tres cosas buenas que me pasaron en el día, así enfoco la atención en estas cosas y puedo descansar mejor. Si es una cuestión de supervivencia inmediata la emoción es más importante que la razón. Por ejemplo voy sola caminando por la calle en una zona oscura y siento pasos, alguien me está siguiendo, mi reacción es la huída y comienzo a correr. Prestando atención a un estímulo (escuchar canciones, observar imágenes, leer cuentos y fábulas, mirar una película, etc.) se despiertan en nosotros una o varias emociones que traen aparejadas a su vez sensaciones físicas (malestar en el cuello, dolor de estómago, sequedad en la garganta, etc.) En este proceso se pone en juego la atención ejecutiva y la autoconciencia emocional. PODEMOS PENSAR LAS EMOCIONES QUE NOS GENERA ESTA IMAGEN Y LAS SENSACIONES FÍSICAS QUE LAS ACOMPAÑAN: 3 AMPLIANDO INFORMACIÓN: Si trabajamos nuestra Inteligencia Emocional (capacidad de reconocer nuestras emociones y sentimientos y la de las otras personas, automotivación y manejo adecuado de las relaciones con los otros) estamos en condiciones de reconocer el compromiso emocional que tenemos y la posibilidad de variar su respuesta. Existen estrategias de automodelación del estado emocional. Cuando uno quiere mantener el estado emocional que produjo un estímulo determinado, se dirige la atención y el pensamiento hacia historias, películas, recuerdos, etc. que mantengan la emoción para transformarla en un estado emocional. También se puede crear una historia breve que lleve a la UCCM a mantener ese estado, activando la capacidad de creatividad. Por ejemplo, para mantener la emoción que genera la imagen anterior puedo pensar en casos de violencia de género que suceden a diario y nos muestra la televisión, puedo recordar escenas del unitario “Maltratadas”; puedo imaginar que me suceda a mí o a un ser querido, etc. Podemos salir de estados emocionales que pueden ser inadecuados para determinadas situaciones o que nos lleven a niveles emocionales inapropiados, llevando la atención a recordar cosas neutras sin demasiada carga emocional; es el desvío de la atención o el mecanismo voluntario de desatención. También podemos pensar en situaciones positivas, lectura de escritos propios o ajenos que lleven a la UCCM a estados constructivos. Todo esto es a favor de nuestra calidad de vida, lo cual se va a ir trasladando a otras situaciones y personas con las que interactuamos. Prestemos atención al siguiente cuento: “Había un tipo que andaba por el mundo con un ladrillo en la mano. Había decidido que a cada persona que lo molestara hasta hacerlo rabiar, le tiraría un ladrillazo. Sucedió que se cruzó con un prepotente amigo que le contestó mal. Fiel a su designio, el tipo agarró el ladrillo y se lo tiró. No recuerdo si le pegó o no. Pero el caso es que después, al ir a buscar el ladrillo, esto le pareció incómodo. Decidió mejorar el “sistema de autopreservación a ladrillo”, como él lo llamaba: Le ató al ladrillo un cordel de un metro y salió a la calle. Esto permitiría que el ladrillo no se alejara demasiado. Pronto comprobó que el nuevo método también tenía sus problemas. Por un lado, la persona destinataria de su hostilidad debía estar a menos de un metro. Y por otro, que después de arrojarlo, de todas maneras tenía que tomarse el trabajo de recoger el hilo que además, muchas veces se ovillaba y anudaba. El tipo inventó así el “Sistema Ladrillo III”: El protagonista era siempre el mismo ladrillo, pero ahora en lugar de un cordel, le ató un resorte. Ahora sí, pensó, el ladrillo podría ser lanzado una y otra vez pero solo, solito regresaría. 4 Al salir a la calle y recibir la primera agresión, tiró el ladrillo. Le erró... pero le erró al otro; porque al actuar el resorte, el ladrillo regresó y fue a dar justo en su propia cabeza. El segundo ladrillazo se lo pegó por medir mal la distancia. El tercero, por arrojar el ladrillo fuera de tiempo. El cuarto fue muy particular. En realidad, él mismo había decidido pegarle un ladrillazo a su víctima y a la vez también había decidido protegerla de su agresión. Ese chichón fue enorme... Nunca se supo si a raíz de los golpes o por alguna deformación de su ánimo, nunca llegó a pegarle un ladrillazo a nadie. Todos sus golpes fueron siempre para él”. Pensando en la imagen anteriormente presentada podemos desviar la emoción que nos genera, recordando o leyendo este cuento, considerando que toda esa bronca, ese fastidio, esa agresión me vuelve a mí mismo. A veces con conductas reales de autoagresión (daños físicos, comida en exceso, drogas, riesgos inútiles) otras veces con emociones o manifestaciones disimuladas (depresión, culpa, somatización). Así nuestras emociones cambian y serán de paz y tranquiidad. La ventaja de poseer un Cerebro Cognitivo, es que mediante un proceso de introspección podemos determinar si una emoción experimentada es la correcta o no. Nuestra experiencia subjetiva nos puede enseñar que muchas de las emociones experimentadas ante diversos estímulos son incorrectas y así determinar cuál es la que mejor se corresponde con la realidad del momento. Lo que recordamos con facilidad tiene que ver con lo que resulta significativo para nuestra vida, lo que está a favor de nuestros paradigmas, lo que capta nuestra atención; lo que está vinculado a nuestros conocimientos previos; lo que comprendemos fácilmente, lo que nos causa gran impresión, etc. En cambio, olvidamos con facilidad por ejemplo lo que no capta nuestra atención ni resulta significativo para nuestra vida. Afrontamiento, es el proceso que un individuo adopta cuando se encuentra ante situaciones que le producen estrés. Al saber qué es lo que se puede esperar y va a suceder, se produce una disminución del estrés, porque el individuo puede prepararse, además de saber en qué circunstancias el estresor estará presente y en cuáles no. Capacidad de tener herramientas de control, permite atenuar los estímulos estresores, al considerarse que podrá manejarlos. Conservando la autoestima y estabilidad personal. 5 CONCLUSIÓN: Es importante autoobservarnos y automodelarnos, ya que al percibir que tenemos control sobre nuestras vidas, nos sentiremos más plenos y nos conduciremos con altos valores al actuar. Contribuyendo a su vez en la calidad de vida de otras personas.