LA CIENCIA Y LA CIENCIA FICCION Alumno: ESCOBAR, Fernando Martín Escuela: E. E. T. Nº 5141, Salta Profesor Guía: PAY, José Luis “Nómbrenme cualquier problema del mundo y yo le puedo decir que aunque es posible que la ciencia y la tecnología no puedan resolverlo ninguna otra cosa podrá resolverlo’’. Isaac Asimov INTRODUCCIÓN El mundo en el que vivimos desarrolla su vida dentro de un tiempo de progreso, innovación y desarrollo científico-tecnológico cada vez más grande y abarcador. Sería difícil imaginar para nosotros la situación en la que se encontraría la sociedad humana, si no contara con todos los adelantos que actualmente vemos delante nuestro. Ahora bien, quizás nosotros nos hemos acostumbrado a todos estos cambios, y de ninguna manera nos parecen una gran novedad. Ver cómo el hombre ha avanzado en diferentes campos del saber, cómo la Ingeniería Genética, el aprovechamiento de la energía atómica o el estudio del universo, por mencionar solo algunos, no nos causa tanta extrañeza. Aunque, si meditamos un poco y vemos todos estos logros y la velocidad con la que se produjeron, no podemos menos que asombrarnos y preguntarnos a qué ritmo seguirá este avance y de las sorpresas que encierra el futuro. Cuando encendemos la televisión y vemos las imágenes de los transbordadores espaciales, levantando vuelo con sus potentes propulsores, nos maravillamos de la gran capacidad de la inteligencia humana, aunque a esas imágenes las hayamos visto muchas veces. Pero ahora, detengámonos e imaginemos otra situación. En esta escena, estamos en el mismo marco anterior, viendo cómo los hombres, a bordo de una nave de metal, dejan su hogar natural, la tierra, para dirigirse al espacio exterior. Pero esta vez, estamos acompañados por otra persona, que no necesariamente es un amigo o un familiar, sino que es un viajero en el tiempo, que vivió originalmente en el siglo XIX. Este hecho no nos parecería tan normal; sin embargo, nuestro acompañante esta ahí, mirando estupefacto junto a nosotros las imágenes ya mencionadas. De más está decir las razones de su asombro. En el siglo XIX no existían las naves espaciales, ni los medios de transporte rápidos. Ahora quizás podríamos llegar a entender cómo verían las generaciones pasadas todos los adelantos de nuestros tiempos, tan comunes a nuestra vista. Pero todavía podríamos preguntarnos qué era lo que le llamaba tanto la atención, si eran las imágenes de la nave, o el mismo televisor. Aunque esos detalles no nos interesen tanto, la visita de alguien del pasado nos parece imposible; una verdadera historia sobrenatural. Pero para ese viajero, su experiencia sería un auténtico viaje de ciencia ficción. Es sobre esta última, en la cual nos centraremos en esta monografía. Se analizará cual es la relación de la ciencia ficción con la ciencia, y de que manera podemos ver a este género literario como una herramienta para estudiar la situación actual de la humanidad. UNA DOSIS DE MAQUINISMO Y TECNOLOGÍA Con la llegada de la Revolución Industrial y el auge de las máquinas y la tecnología, aparecieron también los relatos de anticipación, en los cuales los autores se imaginaban el futuro. Mostraban en sus historias la posible evolución de la humanidad y las consecuencias de los descubrimientos científicos .Algunos tenían gran afición a los temas de la ciencia, tal es el caso del norteamericano Isaac Asimov. Este es un buen momento para citar un libro que leí con gran interés. Se publicó en el año 1870 y se titulaba “Veinte Mil Leguas de Viaje Submarino”. Su autor, Julio Verne (Francia 18281905), ideó una historia muy original, la cual contemplaba los adelantos científicos de la época. Transmitió a sus lectores información sobre la navegación y la zoología, y aportó datos de ciertas máquinas ideadas por el, como el submarino Nautilus. Adelantándose a su tiempo, Verne predijo en otros escritos ciertos inventos como los cohetes, los satélites y la bomba atómica. Ahora bien, no todas las predicciones realizadas por la ciencia ficción se cumplieron. Es evidente que en nuestro mundo no existen ciertos elementos de los cuales se valieron algunos escritores para elaborar sus historias. Entre estos podemos mencionar los extraterrestres, los platos voladores o los mutantes. Pero ahora la propuesta es realizar un análisis de la ciencia ficción desde un punto de vista diferente, aplicándola a problemáticas actuales y situaciones que tienen lugar en la vida real. En este enfoque, toda la sociedad está implicada, porque veremos de qué manera la ciencia ficción se relaciona con los inconvenientes del ser humano. PROBLEMAS DE FICCIÓN Si en el siglo XIX hubiéramos leído una historia que tratara el tema de un desastre mundial, en el cual la especie humana hubiera sido destruida, habríamos pensado que ese relato era pura ficción, y que nunca podría ser llevado a la práctica. Sin embargo, el progreso científico del siglo XX posibilitó el adelanto en el campo de las armas y además estuvo marcado por el dominio del átomo, que proporcionó al hombre una fuente de energía considerada inagotable. Con el inicio de la era atómica y el peligro latente para la humanidad, el hecho de catástrofes nucleares dejó de ser puramente ficción literaria. Los escritores lo comprendieron así y empezaron a comprometerse con el rol que desempeñaban en la sociedad, a saber, de informar a la población mediante la ficción, sobre las consecuencias nefastas de un mal uso de los recursos tecnológicos .Todos los hechos que siguieron a la segunda guerra mundial y el periodo posterior de la guerra fría, introdujeron en la ciencia ficción preocupaciones de tipo político. Con todo, los problemas de la humanidad no se limitaron a las guerras ni a los usos indebidos de la energía nuclear. Nuevos inconvenientes, quizá nunca pensados, aparecieron de repente en el panorama mundial. Si mencionáramos algunos, tendríamos que nombrar el flagelo de las nuevas enfermedades y las formas más inesperadas del terrorismo. Sin duda, el progreso de la ciencia trajo consigo una enorme cantidad de problemas, que hace un siglo solo formaban parte de la imaginación de los autores de ciencia ficción. Pero antes de analizar este progreso, (y concluir que es totalmente negativo, como muchos han afirmado, y que por cierto es una concepción incorrecta, porque no tienen en cuenta todas las variables que entran en juego) analicemos nuevas concepciones que nos ayudarán a aclarar nuestra visión sobre este tema. UNA ÓPTICA DISTINTA Llegado este punto, vamos a partir de la opinión de un gran autor de la ciencia ficción, que nos dejó una mirada diferente sobre lo que en realidad debía expresar este género. Se trata de George Orwell (India- 1903-1950) quien fue uno de los precursores de la ciencia ficción, y uno de los principales escritores de esta en la lengua inglesa. Tuvo particular interés por las ciencias y estuvo muy preocupado por las consecuencias negativas que podría llegar a tener el crecimiento tecnológico desmedido. Su mayor obra se titula “1984” y fue publicada en 1949. En ésta describió un universo totalitario dominado por un partido único, bajo el control de un jefe a quien nada se le escapa: el Gran Hermano. El mundo anterior es olvidado y tres lemas rigen la sociedad: “La guerra es la paz. La libertad es la esclavitud. La ignorancia es la fuerza.” Esta novela fue un reflejo y una dura critica hacia el sistema comunista, que dominaba toda Europa Oriental. Como se puede notar, este autor se interesaba profundamente en las cuestiones sociales. Para él “la ciencia ficción debía hablar del hombre, de sus miedos y de sus esperanzas”. DISTINTAS CONCEPCIONES Sobre el avance científico, (tratado ampliamente en la ciencia ficción), y los problemas que éste acarrea si no se realiza de forma responsable, es importante saber qué factores entran en juego a la hora de determinar las causas por las cuales la tecnología (valiéndose de los principios de la ciencia) trajo tantas consecuencias graves. Para algunos, existen ciertas concepciones optimistas de la ciencia. Esto se expresa claramente en las palabras de Isaac Asimov, citadas al principio de este trabajo. Para él la ciencia es la única que podría solucionar los problemas humanos. En contraposición, algunos le atribuyen características negativas, y la señalan como la causa de las adversidades del hombre. En las siguientes palabras de Ernesto Sábato se mencionan las causas de la crisis actual: “Ciencia y máquina se fueron alejando hacia un olimpo matemático, dejando solo y desamparado al hombre que les había dado vida .Triángulos y acero, logaritmos y electricidad, sinusoides y energía atómica ,extrañamente unidos a las formas más misteriosas y demoníacas del dinero, constituyeron finalmente el gran engranaje del que los seres humanos acabaron por ser oscuras e impotentes piezas”. Sin embargo, en esta última frase se puede entrever que, entre los factores que contribuyen a la problemática mundial, se encuentran el egoísmo y las malas actitudes humanas, factores que generan un uso inapropiado de los recursos de la tecnología moderna. CONCLUSION Una visión personal La ciencia y la ciencia ficción han contribuido enormemente al ampliar la visión del entorno que rodea al hombre. La primera gracias a sus descubrimientos, y la segunda, ayudándolo a imaginar el futuro. Ambas han tenido fallas, pero sus logros hablan mejor de ellas. En cuanto al progreso científico-tecnológico que nos espera en un futuro no muy lejano, es importante mantener un sano optimismo que nos permita creer que las nuevas innovaciones, traerán soluciones a problemas aún no resueltos. Sin embargo, como la ciencia es una actividad humana, no podemos pretender la existencia de una ciencia pura, no contaminada y con científicos que se comprometan totalmente con la verdad. Siempre hay intereses en juego y muchas veces hay personas que creen tener la razón absoluta. Pero aspirar a cambios, no es creer en una historia de ciencia ficción, sino más bien tener una visión objetiva de la realidad. Sin duda, puede haber soluciones a los problemas del ser humano, pero por ahora, todavía no las hemos encontrado. Quizás en el futuro veamos un mundo en el cual no se vean tanto los efectos negativos del avance científico. Pero mientras tanto, veamos qué cambios podemos realizar en nosotros mismos, en nuestras actitudes y acciones. Seguramente algún día pueda existir la siguiente definición, única y universal, conocida para todos los habitantes de este planeta, a saber: “Ciencia y Sociedad son sistemas que coexisten, pero no se perturban”. BIBLIOGRAFÍA CONSULTADA • Pensamiento Científico. Guillermo Boido y otros. Pro Ciencia. Conicet. Ministerio de Cultura y Educación de la Nación. Buenos Aires. Argentina.1997 • Perspectivas Filosóficas Acerca de la Ciencia. Daniela Bargardi y otros. Universidad Nacional de Salta.CIUNSa.Salta Argentina.2003. • Enciclopedia del Estudiante-La Literatura . Larousse. Santiago de Chile.2000. • Veinte Mil Leguas de Viaje Submarino. Jules Verne.Grupo Anaya S.A. Barcelona España.2007. • 1984. George Orwell. Ediciones Destino. Barcelona España. Emecé Editores Buenos Aires Argentina.2007.