www.intervencionpolicial.com POSESIÓN PARA TRAFICAR CON DROGAS Artículo 368 del Código Penal: Los que ejecuten actos de cultivo, elaboración o tráfico, o de otro modo promuevan, favorezcan o faciliten el consumo ilegal de drogas tóxicas, estupefacientes o sustancias psicotrópicas, o las posean con aquellos fines, serán castigados con [...] Estamos hablando aquí de la posesión como elemento esencial de la preordenación al tráfico. Al tratarse de un delito de consumación anticipada, el mero hecho de poseer para traficar está penalizado. A priori, es difícil distinguir entre un traficante y un consumidor por la posesión, en cuantías mínimas, de droga. El problema se plantea porque el hecho de la mera tenencia de la droga, por sí sola, en cantidades pequeñas, no cualifica al poseedor como consumidor o traficante. Por ello es muy frecuente que el poseedor sorprendido alegue que destina la droga poseída al propio consumo. El Policía debe en estos casos ser especialmente cuidadoso en su actuación, debiendo de acudir a todo tipo de factores de índole objetiva que permitan determinar si el ánimo de la posesión era el tráfico de drogas o simplemente su consumo. El Tribunal Supremo viene señalando entre los principales factores a tener en cuenta los siguientes: 53 | P á g i n a www.intervencionpolicial.com • Condición o no de consumidor del portador de la droga y acreditación de la cantidad habitualmente consumida por el mismo. • Cantidad de droga poseída y capacidad adquisitiva del acusado en relación con el valor de la droga. • Distribución de la droga en dosis listas para su posible venta y presentadas en la forma habitual en el mercado ilegal. • Tenencia de productos habitualmente utilizados para adulterar la droga 17. • Tenencia de productos utilizados habitualmente para dividir la droga en dosis18 • Circunstancias del hallazgo policial de la sustancia, zonas en las que es habitual el tráfico de drogas, lugar de 17 Especialmente glucosa, pero también cafeína, lactosa, suero en polvo, carbonato cálcico, almidón de trigo, y bicarbonato sódico, así como una variada gama de preparados comerciales en cuya composición se encuentran las sustancias antes reseñadas, además de excipientes, y algunos medicamentos que, al menos en principio, no deberían generar peligro alguno 18 Balanzas de precisión, cuchillos con restos de droga o señales de haber sido calentados para cortar mejor hachís, pajitas de plástico para contener cocaína, pequeños recortes de plástico para confeccionar bolsitas termo selladas con heroína, speed, cocaína, etc. 54 | P á g i n a www.intervencionpolicial.com aprehensión y razones del poseedor de la droga para encontrarse allí. • Incautación de cantidades notables de dinero o billetes fraccionados sin procedencia lícita justificable. • Existencia en poder del poseedor de la droga o en su domicilio de notas o contabilidades manuscritas indicativas de ventas de drogas. • Trasiego continuo de consumidores de drogas en el domicilio de la persona a la que se le ocupa la sustancia, con visitas muy breves, como indicio de posibles operaciones de venta al menudeo. Cuando la cantidad de droga poseída en pequeñas cantidades, es el único elemento para poder determinar el tráfico o el autoconsumo, en este supuesto, y teniendo en cuenta el principio in dubio pro reo19, se debe considerar siempre que la tenencia estaba destinada para el propio consumo, siempre que no exista ninguna prueba o indicio que indique lo contrario, y por tanto sancionar administrativamente tal conducta. No obstante, la Jurisprudencia ha declarado, que aun en los casos de que el portador de la sustancia estupefaciente sea consumidor, se considerará destinada 19 En caso de duda a favor del reo. 55 | P á g i n a www.intervencionpolicial.com al tráfico, cuando la cuantía de la misma exceda del acopio medio de un consumidor. El Tribula Supremo utiliza una tabla elaborada por el Instituto Nacional de Toxicología el 18 de octubre de 2001 sobre las dosis medias de consumo diario, que se mantiene en su jurisprudencia, así las sentencias de 14 mayo 1990, 15 de diciembre de 1995, 1778/2000 de 21 de noviembre y de 1 de noviembre del 2003. El Instituto Nacional de Toxicología mantiene que un consumidor habitual suele adquirir para sí mismo la cantidad necesaria para cinco días, siendo estas las siguientes: Sustancia Cantidad Heroína 3 gramos Cocaína 7,5 gramos Marihuana 100 gramos Hachís 25 gramos LSD 3 miligramos Anfetamina 900 miligramos MDMA 1.440 miligramos 56 | P á g i n a