DIPTICO BERNARDO COLLADO 23/11/15 13:07 P gina 1 C Y CM MY CY CMY K ? POR QUÉ? Y CÓMO? ? Es esta una de esas ocasiones que a uno se le presenta en la vida, donde hacer unas reflexiones sobre una obra resulta complicado, y cuando menos delicado, porque hay que hilar muy fino para no dejar nada importante sin comentar. Esta que me ocupa, tiene para mí una importancia muy destacada, por la amistad que me une a Bernardo y porque tengo conocimiento del interés y empeño que ha puesto en todos los trabajos que presenta en esta su segunda exposición. A Bernardo le conozco hace ya muchos años, y he visto cuán fructífera y rica ha sido su trayectoria, tanto en su variedad como en sus logros. Comienza siendo Ingeniero Técnico de Minas, ha sido profesor de Dibujo Lineal y Geometría Descriptiva, Director de la Escuela de Arte de Jerez, y paralelamente a estas actividades ha sido fotógrafo aportando sus conocimientos en este campo a la industria y a la publicidad. Sus primeros pasos en el mundo de la creación artística los da en Tarifa, creando el Taller Municipal de Artes Plásticas en el año 2004, del que actualmente es Director. Es fácil pensar cómo con este bagaje tan rico y variado, Bernardo se haya lanzado al mundo de la creación pictórica. Y aquí ya tenemos la respuesta a la primera pregunta que da título a estas reflexiones. Por qué se entrega Bernardo con tanto afán y tanta ilusión a este mundo del arte? Me consta que nunca había pintado hasta que presentó su primera exposición el pasado año en Tarifa. La respuesta la encontramos en su alma inquieta, en su deseo de dar respuesta a muchas interrogantes, que le sirvan para dar firmeza a su personalidad, que a estas alturas de la vida aún son muy positivas. La segunda pregunta era Cómo? Pues está muy claro, a una personalidad inquieta y cultivada en muy diversos campos le es muy apetecible explorar esos caminos llenos de misterio y belleza que nos regala el mundo del arte, y es ahí donde ha puesto todas sus fuerzas y capacidades. Cómo las utiliza? Pues como mejor sabe hacerlo, poniendo al servicio de sus creaciones sus experiencias y vivencias, evidenciando su interés por no quedarse en lo superfluo o banal. Cabe destacar que buena parte de su dibujo está apoyado en la geometría y la perspectiva que conoce muy bien. La obra de Bernardo tiene dos denominadores comunes: uno, toda está inmersa en la búsqueda, en la forma de un lenguaje que dé respuesta a sus interrogantes; dos, el modo rico y variado con que se expresa, atrevido pero con control. Busca nuevas maneras apoyándose en maestros a los que él admira. Es lógico que busque referencias que le den luz al lenguaje y a las formas. También hay que destacar que a pesar de que el camino que queda por recorrer es largo, con su tenacidad y esfuerzo ha logrado alcanzar resultados que nos hacen detenernos delante de sus obras, que nos invitan a pensar y sobre todo a buscar respuesta a las interrogantes que él mismo se ha hecho. Gonzalo Martínez Andrades Catedrático Emérito de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Sevilla Composici n M Del 3 de diciembre al 10 de enero Jerez • 2015-2016 Horario: Todos los días, de 9.30 a 15.00 horas Palacio Villavicencio • Alcázar de Jerez e x p o s i c i ó “ DEAMBULANDO POR LA CREACIÓN” Bernardo Collado n DIPTICO BERNARDO COLLADO 23/11/15 13:07 P gina 2 C M Y CM MY CY CMY K Los gestos expresivos de la emoción El nombre de Bernardo Collado ha estado siempre absolutamente ligado al arte de esta ciudad, sobre todo, desde la parcela de docente en la Escuela de Arte, que llegó a dirigir hasta su jubilación y, también, desde el espacio creativo, sobre todo, en cuanto a una fotografía a la que él supo darle sentido, seriedad y, también, planificar estamentos para que, muchos equivocados, supieran a qué atenerse. Pero Bernardo Collado es mucho más; su espíritu inquieto lo ha llevado por otros muchos horizontes, algunos materializados al mando de un barco donde podía atisbar perspectivas diáfanas para seguir creando; ahora, se encuentra inmerso de lleno en una pintura que, desde siempre, había estado latente en su posición de artista en ejercicio. Estamos, pues, ante un Bernardo Collado nuevo, pintor pasional que busca desarrollos y desenlaces plásticos adecuados para manifestar una realidad creativa a la que quiere imponer su ilusionada marca pictórica. Un artista que se vale del proceso representativo para ilustrar un universo mucho más amplio. En su pintura encontramos un proyecto reflexivo, una preocupación por el mundo, el arte, la sociedad, su experiencia vital, lo doméstico y cualquier otra circunstancia que se encuentra anexa a su poderosa posición existencial. De esta manera el autor nos conduce por una obra, a veces, barroca, a veces, sintética, a veces ecléctica, siempre llena de entusiasmo. Por los soportes deambulan los fantasmas internos que hacen vivir a un artista que quiere transformar su pozo insondable de ideas en un profundo ejercicio de expresividad, de contención representativa y de poder sugeridor; y todo mediante un lenguaje lleno de inquietante sentido metafórico. Creo que es importante decir que Bernardo Collado llega hasta la pintura desde una clara formación visual; es decir, primero como fotógrafo importante en ejercicio, eso ya imprime un determinante carácter pues lo capacita para poder sentir y tamizar la visión de la realidad, así como de los trabajos de los demás y el intercambio constante de inquietudes que esto posibilita; extrayendo de ello datos suficientes para conformar una base importante y madurar una personalidad que, poco a poco, se fue haciendo de especial significación en el contexto general de la plástica contemporánea. De esta manera nos encontramos a un autor con una pintura analítica, poseedora de solvencia creativa, que genera infinitas miradas escrutadoras para, después, poder estructurar todos los esquemas y todos los registros que se formulan desde el conocimiento y que permiten un adecuado dominio de los estados evocadores para acceder a una calculada decantación hacia el estamento emocional. Todo ello aderezado con un sentido de la medida, de la contención y del rigor plástico. De esta forma podemos transitar ante unas obras de gran pureza, sin excesos desvirtuantes, estableciendo justamente los apoyos estructurales para que se desarrollen unas sabias experiencias significativas que nos conduzcan por un universo de gestos, formas y modos entroncados con sutiles postulados metafóricos y, si se me apura, hasta filosóficos. La pintura del artista jerezano se circunscribe a un expresionismo figurativo con muchos buenos argumentos para desarrollar nuevas y abiertas posiciones plásticas. Sin embargo, en su obra no hay una argumentación conceptual ni una forma rígida. Cada una de las piezas que encontramos están sustentadas por un personal criterio plástico sometido a las necesidades que cada pintura exige; piezas tremendamente expresivas pero sin sucumbir a las rigideces de unos modos demasiados presupuestados. Bernardo Collado se deja llevar por la propia pasión creativa, por la necesidad de plantear esquemas únicos que determinen un desenlace pictórico desde un desarrollo muy bien conformado ideográficamente. De esta manera su pintura siempre se estructura desde unos planteamientos compositivos básicos, con un organigrama material muy definido, de pastosa plasticidad que sirve de soporte a un lenguaje representativo contundente, de gran expresividad, con la figura jugando un papel definitorio y marcando perfectamente los tiempos pictóricos de una realidad sabiamente manifestada. La pintura de Bernardo Collado se nos presenta como salida un artista que sabe sacar mucho partido a la reflexión. En sus obras se siente cercana la presencia de la emoción plástica porque en ella subyace un arte consciente donde todo queda supeditado a la esencia de la representación que se manifiesta desde esa base reflexiva, allí donde nada queda sujeto a la simple experimentación sino que todo es así porque lo avala un perfecto entramado conceptual, si se quiere hasta poético, que provee de fórmulas evocadoras a un patrimonio formal acorde a las necesidades. En esta exposición del jerezano Palacio de Villavicencio, Bernardo Collado recrea una estética de muy amplia naturaleza, en la que se pone de manifiesto un interés por el equilibrio y la serenidad desde unas marcas externas que muestran un creciente de compromiso con la materia plástica y con sus desenlaces representativos, aunque esa vehemencia formal no está exenta de una sutil poética donde se acrisolan realidades convertidas en puras esencias. Ha desprovisto a la pintura de su hojarasca distorsionante y ha retomado una especie de análisis intimista de la forma y de sus circunstancias compositivas. Bernardo Collado se nos aparece como un pintor convencido, entusiasmado con lo que hace, relator de los que se cuece en un alma llena de emoción por la pintura, por una plástica en permanente ebullición, por la creación poderosa que sustrae a la realidad los mejores de sus perfiles significativos y que él sabe como ilustrar, siempre, poseído de esa ansia desmedida por dejar constancia de su entusiasmo como creador abierto a todo cuanto sea susceptible de mantener viva la llama de lo verdaderamente emotivo. Por eso, podemos decir que la pintura de Bernardo Collado manifiesta, en fondo y forma los gestos expresivos de la emoción. Bernardo Palomo Doctor en Historia del Arte Composici n Fotografías, M. García Araujo Bernardo Collado Bernardo Collado nace en Jerez de la Frontera. Es ingeniero Técnico de Minas (Huelva, 1970), profesor de Dibujo Lineal y Geometría Descriptiva (Jerez, 1977) y catedrático de Artes Plásticas y Diseño (Madrid, 1982). Como docente desarrolló su actividad académica en el ámbito de las Escuelas de Artes. Ha sido profesor y Director de la Escuela de Artes de Jerez y Presidente de la Asociación de Escuelas de Artes de Andalucía. Paralelamente a su labor educativa, ha ejercido una intensa actividad como fotógrafo profesional, dedicado a la fotografía industrial y publicitaria, y como realizador de vídeo profesional. El año 2004 crea el Taller Municipal de Artes Plásticas de Tarifa y Facinas del cual es actualmente profesor y director. Desde hace cinco años su actividad artística se centra en el campo de la creación pictórica. En el mágico universo de la creación, por qué una hoja de árbol tiene que parecerse a una hoja de árbol? No hay nubes que parecen rostros, y son nubes, y manchas que parecen paisajes, y son simples manchas? Por qué, pues, no puede haber hojas de árboles que, aún siendo hojas de árboles, no se parezcan a hojas de árboles? Es fantástico elucubrar con esas posibilidades reflexiones/6