BOTÁNICA. 173 En los diversos lugares donde se le encuentra, el mycelium n o tiene la misma forma : ya son copos de filamentos blancos flojamente enlazados, especies de fibrillas ó de raices, ó bien se extiende en m e m b r a n a s lisas y radiantes del mas delicado tegido (ex. HIMANTIA), Ó ya en fin se desliza bajo la corteza de los árboles ó entre las mismas fibras leñosas para formar esas líneas ó manchas negras que se observan con frecuencia. M. Fríes nota que en la m a y o r parte de los casos el mycelium es vivaz, y esta es la causa porque se halla estéril, sin producir fruto hasta después de un tiempo definido para cada especie y bajo ciertas condiciones meteorológicas, condiciones que como todos saben son el calor y la humedad. Si la luz no es tan necesaria al desarrollo completo del mycelium, puesto que por el contrario es en las cuevas y en las minas donde crece, es indispensable para el de la fructificación que está destinado á producir Lo mismo que en las plantas de un orden superior, es á su exuberancia á la que se debe a t r i b u i r l a esterilidad del Hongo. Estos vegetales no son plantas nocturnas como falsamente se ha asegurado. Ya he expuesto en otra parte la. naturaleza de los filamentos que componen el mycelium; como varía poco en su apariencia exterior y m e n o s todavía en su naturaleza íntima en el instante mas c e r c a n o á su nacimiento, n o insistiré mas sobre ello. E n cierta época, difícil de m a r c a r y variable para cada especie, aparecen sobre el mycelium uno ó muchos tuberculitos ovoides ó esféricos, cuyo crecimiento sucesivo acaba por manifestar el Mongo que se o b s e r v a ; porque en la juventud todos están cubiertos bajo un velo aranoso mas ó menos denso, que la mayor parte separan para terminar su desarrollo, pero con el que algunos permanecen siempre envueltos. Bajo este aspecto n o se puede desconocer la notable analogía que existe entre los Hongos y los Insectos, analogía mui bien vista y señalada por mi ilustre amigo el profesor de Upsal. El velo de que he d i c h o q u e estaban cubiertos los tubérculos de que se trata, á veces está tejido á m a n e r a de una m e m b r a n a mas ó menos gruesa, mas ó menos resistente, la cual después de haber envuelto á el Hongo, como los elementos del huebo lo son p o r la concha, acaba por romperse en la extremidad ó de lado, dejando libre acceso al aire y á la luz. Esta m e m b r a n a , llamada volva (volva, velum universale) es con frecuencia persistente en la base del pedículo, y proporciona entonces excelentes caracteres para las distinciones específicas. Puede suceder también que se rompa circularmente al r e d e d o r del s o m b r e r o y que su emisferio s u p e r i o r , soldado en la superficie de aquel, forme m a n c h a s ó verrugas discoloras como en el AGARICUS muscarius. E n otros casos se resuelve toda entera en escamas persistentes sobre el himenóforo, En fin, consiste algunas veces en este tegido bisoide tan delicado, del que n o hai señal alguna. Además de la volva, que falta en muchos géneros, varias Himenomicetes están aun provistas de otra cubierta que después de su ruptura suele persistir bajo el pedículo en forma de u n collar ó de una mangueta : se llama collarín, anillo (velum partíale). E s completa cuando encierra todo el s o m b r e r o , é incompleta cuando fijándose en el borde de este no cubre mas que las hojillas. El anillo, regularmente blanco, es m e m b r a n o s o ó a r a ñ í d e o , persistente ó fugaz, adherente al pedículo ó libre y móvil. Su faz superior ó i n t e r n a tiene frecuentemente estrias correspondientes á las laminillas con las que ha estado en contacto. Eslá fijado á diferentes alturas sobre el pedículo, lo mas regular hacia su tercio superior. El velo parcial n o siempre es m e m b r a n o s o ; en una tribu del género Agárico, u n tegido a r a ñ í d e o u n e en la juventud el borde del s o m b r e r o al estipo. Este tegido extremadamente delicado, que se llama cortina (cortina), se compone de filamentos blancos ó coloreados, y deja señales de su presencia ya sobre el pedículo ya en la margen del himenóforo. El pedículo ó estipo (supes) es aquella parte del Hongo que cuando existe nace inmediatamente del mijcelium y sostiene el s o m b r e r o . Su presencia no es esencialmente necesaria, puesto que falta en muchas especies, que por esta razón se llaman apodes, resupineas. En las que le tienen ocupa el centro del s o m b r e r o , en cuyo caso se llama central (centralis), ó bien por último está colocado en el borde del s o m b r e r o ó lateral, y entonces al Hongo que persenta esta disposición se da el n o m b r e de pleuropode (pleuropus). El estipo puede ser cilindrico ó fusiforme, ó inflado en bulba , EI CANTHARELLUS Dutrochctii, Montag. (C. Crucibulum, Fr. Epicr.), experimenta toda su morfosis sobre tablas de pino en la obscuridad de las cuevas. Uk