NUNCA. la historiaunade ondina la na tación, enconsiguió el ritmo es de cuatro golpes por cada brazada, en lugar de los seis de costumbre. Ligerlsima sobre el agua, la Gould demostró una faci lidad de tracción digna de Dawn Fraser, de -la cual, por. otra parte se distingue por su más reducido impulso de pies. ¿Es, pues, el estilo, la clave de los éxitos de Shane Gould? No lo es, sin duda. Una- vieja- regla de los técnico5 australianos consiste en no obligar a sus nadadores a seguir normas filas. Así lo afirma Harry Gallagher, el hombre que en los Juegos del 56 lanzó a los olímpicos Fr-asary Renricks y que en Ciudad de Méjico fue también entrenador del equipo australiano. Don Talbot, el entrenador de tos hermanos prodigio ¡olm e lisa Konrads así como de muchos otros campeones australianos, ha repeti do esas mismas ideas. Pero Shane no es alumna suya. Su entrenador es Forbes Carlile, a quien se con sidera el mayor ecientificos de los técnicos australianos, bien sea por haber sido ayudante de Fisiología Humana en la Universidad de Melbourne, o por haber aplicado -algunos stestsa de control a la pre paración de los nadadores. Ostentar al mismo tiempo, lo sé cords mundiales en las cinco dis tancias del estilo libre: 100,200, 400, 800 y 1.500 metros. Esta sensacio nal empresa, como saben nuestroslectores, ha sido alcanzada por la quinceañera y rubia australiana Shane Gould. En el campo de la natación, ha ce ya un siglo que se habla de Aus tralia. Se ha dicho 4ue el crowl nació en la tierra de los canguros, en las espléndidas playas austra lianas Infestadas por los tiburones.. Lo capítulos más revolucionarios de la historia de la natación olím pica con frecuencia han sido es critos por los «aussies». Baste ci tar el nombre de Fanny Durack, primera ondina que ganó las Olim piadas, o de Dawn Frases, que venció en tres ediciones consecuti va de los Juegos, para abrir y ce rrar la conversación. La marca de la Fraser en los 100 metros libres (58”9 en 1956) continúa siendo la mejor del mundo y ha sido iguala lada, pero no batida por la estrella naciente Shane Gould. Ahora -cstáJane y --sin-duda -una nueva era será dominada por esa extraordinaria ondina que el vera no próximo en Munich podría Ile EL ElENADOR varse la palma tanto en velocidad CIENTIFICO como en -medio fondo. -Entretanto, El nombre de Casille suena se dfdi a tnIøi’,40 réonrds, a siempre en les iriunfos de la na borrar nombres ilustres, comenzan tación australiana. Cuándo en 1956 do por el de la estadounidense Deb bie Meyer, lue se convirtió en se preparó la gran ofensiva en los de Melbourne, coronada plusmarquista mundial e cuatro Juegos distancfa.s del estilo libre (no era - - por un auténtico triunfo (ocho vic tosías en quince pruebas, con, ple lo bastante rápida para conquistar no en las siete pruebas de estilo el limite de los 100 metros). Deb hin fue la gran protagonista en las libre), los técnicos australianos constituyeron un verdadero coman última5 olinrofadas de Ciudad de Méjico. donde triunfé en los 200, do en ToWnsville, donde Carlile tuvo un papel sin duda notable, 400 y 800 metros (los L500 no en aunque ninguno de los grandes traban en el nrograma olímpico fe menino), y continúa en la brecha. campeones como Rose, Henricks, Pero el fulgurante ascenso de la Theile, la Fraser y la Crapp, eran Gould sugiere que la Meyer ya no entrenados directamente por él. En 1962, Casille entrenó al equi podrá conservar su trono. po holandés para los Campeonatos europeos de Leipzig. Los resultados LA CLAVE DEL EXITO fueron evidentes, sobre todo en un Nadadora de clase natural, SM par de atletas, Bontekoe y Adrie fle sorprende por el aleteo de pies, Lasterie. Luego, después de otras apenas perceptible, absolutamente experiencias europeas, Carilla vol Inhabitual en su velocidad porque vió a Australia, donde en los su- - UNA SUPERCLASE JAMAS VISTA - —Shane GOUM nació el 23 de noviembre de 1956. —Mide 1 so. ‘72y pesa 57 kilos. —Empezó nadar a los tres años. - —Entrena con Turbes Cariñe desde septiembre de 1970, —Sus r4eord del mundo som 100 sn., 58.9, 200 so., 2.05.8; 400 m. 4.21.2; 800 n, 8.56.111.500 so., 17.00.6. - - - burbios de Sydney creó una gran organización que se ocupa de na tación. El cRyde Swim Club,, que lleva el nombre de la localidad donde se encuentra la piscina, aco ge a centenares de muchachos de diversas edades, cuyos padres pa gan un instructor o un entrenador. Carlile, jefe de toda la organiza ción y consultor científico, es ayu dado por un gran número de per sonas que siguen más de cerca a los alumnos. Siempre acompañado por .su -es posa, Ursula, delgadi’ima y de grandes ojos, .que le hace las veces de asistente, el eduro» Forbes Cas lile —pelo de cepillo, perfil aguile ño—, es -un personaje -que sabe in fundir resoeto a sus colegas. Hace años se le atribuía a Car me experimentos de hipnotismo. En realidad, sobre algunos indivi duos especia1men emotivos, el en ttunador-biólogo había llevado- a cabo con -éxito algén intento -de -su gestión. Pero la verdad fue nota blemente deformada, También Tosbes Casille, al igual que tantos otros técnicos que han estudiado menos, es un hombre afortunado. A una Shane Gould no se la fa brica en casa. La muchacha, qu’ ha vivido en las islas Fii desde los diecioch meses hasta los once años, conoció a Carilla -en septiem bre de 1970, cuando ya era una atleta hecha. Shane aprendió a undar a los tres años y comenzó su actividad a los nueve. Shane nada diariamente de 8 a 12 kilómetros, cifras que no constituyen nada nuevo. A sus quince años tiene la talla de una muchacha de veinte. Sobre sus posibilidades, Dawn Fraser, cuando Shane igualé el récord de lo 100 metros con 58” 9, declaró que Gould podrá llegar a los 56” y- —pronóstico que nos parece to davía más éxtraordinarjo.— a 2’ en les 200 metros. Por ahora, Shane está en 2’05’8... ¿Por -qué surgen tantos campeo nes de natación en Australia? 01— videmos la tesis de las piscinas y el mar, demasiado socorrida. Y abandonemos también la de la sa lud, que no falta a los australia nos, y de la constitución fiica. In sistamos, en cambio, en el campo técnico, entendiendo con este adje. tivo no el estilo, sino la organiza ción y el método. En Australia los- entrenadores de natación son profesionales bien preparados y bien retribuidos, a a los que nunca falta trabajo. Ese es el verdadero secreto del erowi australiano. El equívoco nace cuan do escs técnicos son invitados aotros países. Inmediatamente e les piden milagros. Son Konrads, e- ex fimo prodigioha intentado actuar como entrenador en Fran— cia, con escasa fortuna. - Ahora trabaja como representan te de artículos deportivos. -Por lo demás su tiempo (17.16.6) con -el que ganó los ¿5. 00. de- Roma ha -sido ridiculizado sor Shane Gould el domingo pasado. - No es sólo John Konráds úni co que ha sabido con asombro la hazañi de Gould. Esta niña de 15 años ha superado el tiempo de Murray Rose. Es decir que sólo tiene SIETE AÑOS de retraso so bre el récord mundial masculino. Por lo demás su promedio cada cien metros (1.08) es Inferior sólo en cuatro segundos al conseguido por John Kinsella, actual plusmar quista mundial masculino, mientras que su récord mundial de los 100 metros (58.9.) está a 7 égundos delrécord mundial masculino (51.9.). Esta sensacional media de cien en cien metros comparativamente a los hombres (de 58.9, a 1.08 es decir 9”10 de diferéncla contra 51.9 a 1.04, es- decir 12”l-lO) señala la ventaja de las ondinas sobre los tritones. Shane sólo tiene que im pulsar 1 so. 72 de estatura y 57 kilos mientras que KInsella debe remolcar su 193 esos, de altura y sus 85 kilos de peso. J. U.. M.