ALVA REIMER MYRDAL (1902 / 1986) Neix a Uppsala. Estudia a les universitats d'Estocolm i Uppsala. Es casa amb Gunnar Myrdal, va ser premi Nobel de la Pau el 1982, i té dos fills. Juntament amb el seu marit impulsa l'estat del benestar suec i escriu les seves teories sobre la decreixent tassa de natalitat sueca en el llibre El problema de la sociedad en crisis. Als anys 30 a Suècia existia la preocupació per la disminució de la natalitat i l'envelliment progressiu de la població que s'havia de combinar, segons Myrdal, amb la regulació racional de la natalitat. Les mesures de suport a la família havien d'harmonitzar les funcions productores i procreadores de la dona. Un dels requisits del model suec era la plena ocupació. Si el finançament de la despesa social ha de provenir bàsicament d'una fiscalitat progressiva, és necessari que treballi tothom que pugui, per tal de fer front a les enormes despeses de l'Estat. El model es basa en la socialització màxima de les despeses del treball de reproducció de les famílies amb la finalitat que no s'exhaureixin els recursos dels seus membres. Per altra banda, l'Estat assumeix la responsabilitat de tenir cura de la gent gran, als incapacitats i als menors. Aquest model és el que més estimula la inserció completa de les dones en el mercat de treball. Va estar sempre afiliada al Partit Socialdemòcrata suec i hi va ocupar diversos càrrecs executius. El 1943 és designada per realitzar un programa de postguerra que contribuís a la reconstrucció d'Europa. Després de ser directora general de l'Oficina d'Assumptes Socials de l'ONU (1949-1950) i directora del departament de Ciències Socials (1951-1955) de l'UNESCO, ocupa diversos càrrecs diplomàtics i oficials per al Govern suec. Així el 1955 és nomenada ambaixadora de Suècia a l'Índia i el 1962 és representant de Suècia en la Conferència Internacional de Desarmament de Ginebra. Durant les negociacions de Ginebra té un paper molt actiu, se la considera líder dels països no alineats. Entre el 1966 i el 1973 forma part del Govern com a ministra de desarmament. Escriu diversos llibres: Nación y familia (1965), Mujeres: dos papeles (1968), El juego del desarme: Cómo Estados Unidos y Rusia funcionan en la carrera de armamentos (1976), Guerras armadas y violencia diaria (1977), Dinámica del desarme nuclear europeo (1981). El 1982 va compartir el premi Nobel de la pau amb el polític i diplomàtic mexicà Alfonso García Robles, per la seva feina a favor del desarmament col·lectiu. Mor a Estocolm. Per a Alva l'arma extrema del terror era la bomba atòmica, ja que constituïa una amenaça per a la supervivència de la humanitat. També explicava que la idea que eren necessàries noves armes nuclears per dissuadir l'altre era falsa. Per a ella, una política de desarmament havia de començar per congelar la fabricació de tota classe d'armes de destrucció massiva, tant les A (atòmiques), com les B (biològiques), com les C (convencionals). És a dir, s'havia de parar la cursa armamentística sobre tot entre els EEUU i l'URSS. Fruit d'aquestes idees van sorgir, entre altres, el Tractat de Tlatelolco (1967), Tractat Internacional per a la desnuclearització d'Amèrica Llatina, i a Suècia es van crear el SIPRI (Institut d'Investigació Internacional suec per a la pau) i l'estació sismològica de Hagfors, que permetia conèixer l'existència de proves nuclears subterrànies. Més Lectures recomanades El problema de la población en crisis (1934) La mujer y la sociedad contemporánea (1969) El juego del desarme (1976) Guerras, armas y violencia diaria (1977) Altres http://elpais.com/diario/1982/10/14/internacional/403398002_850215.html http://www.youtube.com/watch?v=kyERWY0mBjk ALVA REIMER MYRDAL (1902-1986) BIOGRAFÍA: Alva Reimer Myrdal nació en Uppsala el 31 de enero de 1902. Estudió en las universidades de Estocolmo y Uppsala. Contrajo matrimonio con Gunnar Myrdal (premio Nobel de economía de 1974) en 1924 y tuvo tres hijos. Junto a su marido impulsó el Estado de bienestar sueco y escribió sus teorías sobre la decreciente tasa de natalidad sueca en el libro “El problema de la población en crisis”. Alva Myrdal compartía la teoría económica de su marido que establecía la interdependencia de los fenómenos económicos, sociales e institucionales, en consecuencia no se puede aislar el análisis económico del análisis social y político. Siempre estuvo afiliada al partido socialdemócrata sueco, ostentando diversos cargos ejecutivos dentro del mismo. En 1943 fue designada para realizar un programa de posguerra que contribuyera a la reconstrucción de Europa. Tras ser directora general de la Oficina de Asuntos Sociales de la ONU (1949-1950) Y directora del departamento de Ciencias Sociales (1951-1955) de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) desempeñó diversos cargos diplomáticos y oficiales para el gobierno sueco. Así en 1955 fue embajadora de Suecia en la India y en 1962 fue nombrada representante de Suecia en la Conferencia Internacional de Desarme de Ginebra. Durante las negociaciones de Ginebra desempeño un papel muy activo, siendo considerada la líder de los países no alineados. Entre los años 1966 y 1973 formó parte del Gobierno sueco como ministra de Desarme. (1966-1973). Escribió diversos libros entre los que destacan: Nación y familia ( 1965), Mujeres: dos papeles (1968), El juego del desarme: Cómo los Estados Unidos y Rusia funcionan en la carrera de armamentos (1976), Guerras, armas y violencia diaria (1977) y Dinámica del desarme nuclear europeo (1981) Por su trabajo en favor del desarme colectivo compartió en 1982 el Premio Nobel de la Paz con el político y diplomático mexicano Alfonso García Robles. Falleció en Estocolmo en 1986. POLITICA SOCIAL: Alva Myrdal fue una de las inspiradoras del Estado de Bienestar Sueco y de las políticas demográficas y de apoyo a la familia de dicho país. En los años treinta existía en Suecia la preocupación por la disminución y el envejecimiento progresivo de la población que debía combinarse, según Myrdal, con la regulación racional de la natalidad. Las medidas de apoyo a la familia debían facilitar a las personas con cargas familiares un mejor desempeño de sus responsabilidades y sin que ello comportara para ellas ningún tipo de penalización económica, social y profesional, por lo que se debía armonizar las funciones productora y procreadora de la mujer. En ese sentido advertía “el culto sentimental de las virtudes domésticas es el método más barato de que dispone la sociedad para mantener calladas a las mujeres sin considerar seriamente sus agravios ni mejorar su condición”. Uno de los requisitos del modelo sueco era el pleno empleo. Si la financiación del gasto social tiene que provenir básicamente de una fiscalidad progresiva, es preciso que trabaje todo el mundo que pueda con el fin de hacer frente a los enormes gastos del Estado. Todos contribuyen al sistema, todos se benefician de él, pero al mismo tiempo todos dependen de él. El modelo se basa en la socialización máxima de los costes del trabajo de reproducción de las familias con la finalidad de que no se agoten los recursos de sus miembros, Por otra parte, el Estado asume la responsabilidad de prestar cuidados a la gente mayor, a los incapacitados y a los menores, por lo que son éstos los beneficiarios directos de las transferencias. Este modelo es el que más estimula la inserción completa de las mujeres en el mercado de trabajo. Alva Myrdal impulsó la ley del aborto sueca, la disponibilidad de los anticonceptivos, la educación sexual en las escuelas, la eliminación de las distinciones legales y sociales entre los adultos casados y solteros y la responsabilidad del Estado de establecer metas y controles en asuntos de población. PREMIO NOBEL El Premio Nobel le fue concedido por su labor a favor del desarme y la no proliferación de armas nucleares en los diferentes países del mundo. Para ella “el arma extrema del terror” era la bomba atómica, ya que constituía una amenaza para la supervivencia de la humanidad. Así, la idea de que “una victoria puede valer su precio”, tiende en la era nuclear a convertirse en una ilusión total, ya que no existiría victoria sino exterminio total. Por otro lado, Myrdal explicaba que la idea de que eran necesarias nuevas armas nucleares para disuadir al otro era falsa. Si sólo son necesarios 400 misiles intercontinentales de largo alcance para la destrucción total para qué fabricar más armas nucleares - “m{s no es necesario cuando uno tiene m{s que suficiente”-. En primer lugar, una política de desarme debía empezar por congelar la fabricación de toda clase de armas de destrucción masiva, tanto las llamadas A (atómicas) como las B (biológicas) como las C (convencionales) Es decir, se debía para la carrera armamentística sobre todo entre las dos grandes potencias, EEUU y URSS. Fruto de estas ideas surgieron, entre otros, el Tratado de Tlatelolco (1967), Tratado Internacional para la desnuclearización de América Latina. Y en Suecia se crearon el SIPRI (Instituto de Investigación Internacional sueco para la paz) y la estación sismológica de Hagfors, que permitía conocer la existencia de pruebas nucleares subterráneas.