El autor. Principales datos biográficos. Antonio Buero Vallejo nace en Guadalajara en 1916. Su primera vocación fue la pintura y estudia Bellas Artes en Madrid. Su formación dramática procede de las lecturas de la biblioteca paterna. Asiste con frecuencia al teatro acompañando a su padre. Sus inquietudes políticas le llevan a alistarse en el ejército republicano en 1936. Escribe y dibuja en un periódico del frente y participa en otras actividades culturales. Conoce a Miguel Hernández con el que comparte las mismas preocupaciones. Al finalizar la guerra es recluido en un campo de concentración y posteriormente es detenido y condenado a muerte por “adhesión a la rebelión”. Permanece recluido en diversas prisiones hasta 1946. En una de ellas coincide con Miguel Hernández, también condenado a muerte, y al que hace un famoso retrato para enviarlo a su familia, como a otros condenados a muerte. Después de sucesivas rebajas de la condena, se le concede la libertad condicional con destierro en Madrid en 1947. Deja la pintura y comienza a escribir teatro. En 1949 presenta dos obras al premio Lope de Vega del Ayuntamiento de Madrid: En la ardiente oscuridad e Historia de una escalera. Esta última recibe el premio y es estrenada en el Teatro Español de Madrid con gran éxito de público y crítica. El galardón obligaba a representar la obra en este primer teatro oficial español. De otra manera, dados los “antecedentes”de Buero, no hubiese sido posible. El estreno de la obra fue un auténtico acontecimiento, decisivo para el teatro español de la posguerra: significó la aparición de un nuevo teatro, cargado de hondas preocupaciones. Hasta la aparición de esta obra, el teatro español se caracterizaba por el triunfo de lo intranscendente, lo comercial: la comedia de salón y el teatro cómico. Con Buero, comienza un teatro grave, inconformista, que se centra, en sus comienzos, en lo existencial, y que irá derivando hacia lo social en los años siguientes. Desde entonces y, pese a ciertos problemas de censura, se abren para Buero los más importantes escenarios españoles. Con pocas excepciones, sus éxitos se suceden año tras año. Muchas de sus obras alcanzan centenares de representaciones. Buero cosecha importantes premios, entre ellos el Nacional de Teatro en dos años consecutivos: 1956 y 1957. Durante los años 60, se consolida su fama, que se extiende por Europa y América. Allí se estrenan muchas de sus obras, algunas prohibidas en España. En nuestro país, participa en actividades de oposición política: su filiación marxista es un secreto a voces. En 1971 es elegido miembro de la Real Academia Española para ocupar el sillón X. Su máximo reconocimiento llegará en 1986 con el Premio Cervantes, que lo coronará como la primera figura del teatro español de la posguerra. Buero Vallejo muere en abril del año 2000. Buero es ante todo un trágico. La tragedia supone para él una mirada sobre el hombre, pero no pesimista, sino que pretende un doble objetivo: inquietar y curar. INQUIETAR: planteando problemas pero sin imponer soluciones. En ello radica una de las características del teatro de Buero: el final de sus obras es un interrogante lanzado al espectador. Será este quien con su reflexión completará el sentido de lo visto en escena y cerrará el conflicto que ha quedado “abierto”. Es una forma de invitarnos a tomar partido, a comprometernos. CURAR: la obra de Buero se propone que se produzca en el espectador una especie de catarsis,* es decir, una transformación profunda, una superación personal, que lo impulsaría a luchar contra todas las fuerzas que se opongan al desarrollo de la dignidad humana. Sus obras, aunque en apariencia amargas, siempre dejan un lugar a la esperanza de un mundo más humano y más justo. Se sitúa así por encima del pesimismo. ( *Catarsis: liberación o transformación interior debido a una experiencia vital profunda. Según los antiguos griegos , era el efecto que causaba la tragedia en el espectador al moverlo a compasión.) Temas principales de sus obras. La obra de Buero gira en torno al deseo de realización del hombre: la búsqueda de la felicidad, de la libertad, de un mundo mejor...pero estos anhelos se ven obstaculizados por los condicionantes sociales en los que vive. Buero es autor de un teatro ético y moralista. Elementos clave de su obra son la honradez consigo mismo, el amor a la justicia, la búsqueda de la verdad. El conflicto se desencadena por una trasgresión moral que ha cometido un personaje libremente, por lo que es responsable del mismo. Estas ideas de responsabilidad y de libertad son fundamentales en el teatro de Buero Vallejo. En aquellos años de la Dictadura, se plantea una interesante polémica entre los dramaturgos: adoptar o no adoptar una postura abiertamente crítica en las obras teatrales, aun con el riesgo de que fueran prohibidas por la censura franquista. En este sentido se distinguen dos corrientes: - el posibilismo, en la que se encuentran aquellos autores que están dispuestos a mostrar la crítica social y política indirectamente, a través de símbolos y alegorías con el fin de superar la censura - el imposibilismo, que defiende la necesidad de expresarse libremente a pesar de que la censura impida larepresentación. La obra de Buero se inserta claramente dentro del posibilismo. Como representante del imposibilismo encontramos a Alfonso Sastre. Trayectoria Se suelen diferenciar tres etapas en la trayectoria de este dramaturgo. Primera etapa: en ella predomina el enfoque existencial. En las obras de esta época se hace una reflexión sobre el sentido de la vida, las ilusiones, los fracasos, la soledad del ser humano. Desde el punto de vista técnico es todavía un teatro tradicional con algunas innovaciones en el espacio escénico y en la luminotecnia . Las obras más importantes de esta época: En la ardiente oscuridad , e Historia de una escalera. En la primera se presenta la ceguera como símbolo de las limitaciones humanas. A un colegio de ciegos, que viven felices, resignados con su condición, llega un nuevo personaje que no se resigna y que va contagiando su angustia y su rebeldía a los demás hasta que uno de ellos lo mata, para que la comunidad recobre la paz. La cuestión que plantea Buero es: ¿Debe el ser humano aceptar sus limitaciones y tratar de ser felices con ellas, o debemos rebelarnos a pesar de saber que es imposible superarlas? En Historia de una escalera, que estudiaremos con detalle más adelante, se nos presenta la historia de tres generaciones de varias familias modestas, con sus amores, sus rencores y sus fracasos, pero, sobre todo, de sus frustraciones tanto por la presión del medio social como por la debilidad de sus personajes, incapaces de sobreponerse a él para conseguir sus ilusiones. Segunda etapa: en ella predomina la preocupación social y política. En las obras de esta época se denuncian las injusticias sociales, los excesos de un poder opresivo, las formas de explotación, la búsqueda de la libertad. En general se trata de teatro histórico con un tema central: el destino de un pueblo en una sociedad injusta. Los títulos destacados de esta época: Un soñador para el pueblo, sobre Esquilache, ministro de Carlos III que sueña con un futuro mejor para España y tropieza con los intereses reaccionarios Las Meninas, inspirada en Velázquez, el artista amante de la verdad y la justicia combatido por la corrupción que rodea al poder. El tragaluz, es una obra fundamental de transición entre la segunda y la tercera etapa. En ella aparecen como novedad, unos narradores que sirven de intermediarios entre la historia y los espectadores. Desde el siglo XXV, unos investigadores proponen a los espectadores una investigación: volver a una época pasada (el s.XX), para estudiar al drama de una familia cuyos miembros sufrieron “una” guerra civil, con sus secuelas. La intención reflexionar sobre la historia inmediata de España y caminar hacia el futuro venciendo los odios. Tercera etapa: en esta época destacan dos carac terísticas fundamentales. La primera, desde el punto de vista técnico: las obras muestran la preocupación del autor por las innovaciones e inquietudes experimentales. La segunda, desde el punto de vista temático: los contenidos políticos se hacen más explícitos Obras fundamentales de esta etapa: Llegada de los dioses y La Fundación,. En una celda de presos políticos, uno de ellos, trastornado, cree hallarse en un centro de investigación, hasta que comprende la situación real y comparte las angustias de los demás. Los cambios de decorado nos van llevando a través de lo que cree ver el personaje ( el confortable salón de una residencia de investigadores)a la realidad que, poco a poco va admitiendo ( la celda de un presidio) Argumento Historia de una escalera cuenta las frustraciones , amarguras y estrecheces de cuatro familias modestas que viven en una casa de vecinos. El drama se centra sobre todo en la historia de amor de Fernando y Carmina, frustrada por el carácter débil del joven, que acaba casándose con Elvira por interés. Carmina por su parte, abandonada por Fernando, se casa con otro vecino, Urbano, del que tampoco está enamorada. Con el paso de los años, los hijos de ambas parejas se enamoran a su vez, a pesar de la brutal oposición de sus padres. La obra termina con la joven pareja haciendo proyectos de futuro, que no sabemos si llegarán a llevar a cabo. Personajes. Elvira: Una chica guapa, es hija de don Manuel, mimada y consentida por su rico padre. Carmina: Preciosa muchacha de aire sencillo y pobremente vestida. Enamorada de Fernando, pero se casa con Urbano por lástima y buscando su amparo. Fernando: Es un muchacho muy guapo pero muy gandul y soñador. Estaba enamorado de Carmina, pero se casa con Elvira por interés. Urbano: Humilde y proletario que vive para los suyos. Realista, confía en el trabajo, en los sindicatos, sus sueños los supedita a la felicidad de los demás. Se casa con Carmina, de la que está enamorado, y sabe que ella no le ama pero que siempre le será fiel con ese corazón roto. Carmina hija: Hija de Carmina y Urbano, es una joven de 18 años que se enamora de Fernandito. Romántica y entregada a una causa de amor, pero con la responsabilidad de apoyar con su esfuerzo esa ilusión que comparte, cierto temor a sentirse engañada. Fernando hijo: Hijo de Fernando y Elvira, tiene 21 años. Se comporta igual que su padre,y corresponde a Carmina. Apuesto, vago e idealista. Personaje abierto que se desconoce si seguirá los pasos hipócritas de su padre o aprenderá de su experiencia Otros personajes son Generosa: madre de Carmina, (ya nombrada) y de Pepe, joven achulado y vividor que enamora y se aprovecha de Rosa: hermana de Urbano, se va a vivir con Pepe al mismo descansillo que sus padres, lo que provoca la ruptura con su familia. Trini: hermana de la anterior. Entregada a su familia. Paca : mujer decidida y habladora, madre de Urbano, Rosa y Trini. Junto a todos ellos destacan doña Asunción ( viuda, madre de Fernando), don Manuel ( padre de Elvira y persona adinerada), señor Juan ( marido de Paca ) Manolín ( hijo pequeño de Fernando y Elvira) etc. Todos estos personajes desfilan a lo largo de esta escalera y nos proporcionan un retrato social de la época. Se podrían considerar como un personaje colectivo, dadas las afinidades que tienen todos: la pobreza, la frustración vital, el deseo de ascender socialmente y la imposibilidad de hacerlo. Cada un de ellos está sin embargo fuertemente individualizado y dotados por el autor de una gran complejidad psicológica. El conflicto dramático surge de las relaciones conflictivas entre ellos. Temas Son también varios: el paso del tiempo, “el eterno retorno” de la vida, es decir, la repetición de actos y situaciones, la frustración vital, el determinismo*, la desilusión, el fracaso la imposibilidad de abandonar la pobreza y la miseria, los prejuicios, el rencor. Pero la obra no se deja ganar por el pesimismo, Buero deja un final abierto donde la perspectiva juvenil llenará de esperanza el desenlace. De esperanza y de incertidumbre, pues el espectador no sabe si los personajes conseguirán sobreponerse y salir de ese ambiente miserable. (* Determinismo: la voluntad humana está condicionada de antemano por fuerzas diversas: el ambiente, las circunstancias familiares y sociales...) Estructura. La obra se divide en tres actos, que se corresponderían con la división tradicional de planteamiento, nudo y desenlace. Toda la obra se desarrolla en torno a la escalera de una casa de vecinos, que permanece siempre como testigo inmutable de todo lo que acontece a su alrededor Planteamiento: (1º acto) presentación de los personajes. Elvira proyecta un futuro para Fernando con el capital de su padre. Fernando promete un futuro mejor a Carmina, promesas de felicidad y proyectos de superación laboral. Nudo: (2º acto) diez años después, las relaciones consolidadas entre Fernando y Elvira: se han casado y tienen un hijo. Soltería de Carmina que pierde a su padre y promesa de matrimonio con Urbano. Amor ilícito entre Pepe y Rosa. Desenlace: (3º acto) Veinte años después, los personajes iniciales no han cambiado, pero han envejecido. Nueva clase social en la escalera nuevos inquilinos. Amor entre Carmina hija y Fernando hijo. Duro enfrentamiento entre ambas familias que dejan entrever frustraciones y antiguas rencillas. Promesas de amor y felicidad entre Carmina y Fernando hijos. Proyectos de superación laboral. Como se puede ver, la última escena reproduce exactamente la sucedida entre los padres de los jóvenes protagonistas. Es el eterno retorno, la repetición, que dentro de la esperanza, nos hace dudar de la posibilidad de cambio para los jóvenes. Espacio Aunque en el texto no se especifica claramente, podemos deducir que la acción se desarrolla en una gran ciudad española de la posguerra. El espacio escénico está constituido por una escalera en la que confluyen cuatro pisos y donde transcurrirá la vida de tres generaciones. El espacio de la escalera está perfectamente descrito desde la primera acotación. Este espacio tiene también un valor simbólico, porque se presenta como decrépito y desgastado, en lo que coincide con el proceso seguido por las vidas de los seres que viven a su alrededor y también simboliza la imposibilidad de estos seres para cambiar su destino. En se 2º acto se observa que nada ha cambiado en esos diez años transcurridos ni en los veinte siguientes ha habido cambios sustanciales, si exceptuamos un “blanqueo” superficial. Pero hay otros dos espacios que el espectador puede imaginar, pero de los que no se dice nada en la obra: el exterior ( que podemos imaginar lleno de conflictos sociales y políticos) y el interior de la viviendas ( donde se adivinan los conflictos individuales). Tiempo La disposición cronológica de los hechos es lineal, aunque con alusiones al pasado y al futuro. Como sabemos, cada acto nos muestra cronológicamente a tres generaciones distintas de varias familias. Entre cada acto hay una elipsis temporal de varios años: diez , entre el primero y el segundo y veinte entre el segundo y el tercero. En total, la acción dramática se desarrolla a lo largo de treinta años. El espectador debe reconstruir lo que ha sucedido durante estos años. Mientras que en los dos primeros el tiempos se presenta de forma imprecisa, es esencial la caracterización temporal del tercer acto ( “Es ya nuestra época”): por los indicios de las acotaciones se puede situar la acción en los años 40, es decir, en plena posguerra y con el país hundido en una profunda crisis social y económica. Nada se habla, sin embargo de la Guerra, que debió transcurrir en esos años omitidos. Diálogos y lenguaje. La lengua empleada en los diálogos se caracteriza por su realismo. Se emplea el registro coloquial y a veces vulgar. Los intercambios son fluidos y destacan por su emotividad y, con frecuencia por su apasionamiento. En general las oraciones son cortas, con predominio de la modalidad exhortativa y exclamativa, especialmente en los momentos de mayor tensión dramática. Buero no suele emplear figuras retóricas, aunque es posible encontrar algún recurso como la metáfora y las repeticiones. Acotaciones. Las acotaciones de Buero no solo dan información sobre el espacio escénico, los movimientos de los personajes, los sonidos... sino que también permiten la caracterización física y psicológica de los mismos. Urbano, es un muchacho fuerte, moreno, de fisonomía ruda pero expresiva: un proletario. Aparece Rosa que es una mujer joven, guapa y provocativa. Fernando baja tembloroso la escalera, fija su vista con ansiedad en la esquina del “casinillo”