Valentina Tereshkova: 50 años de una hazaña pionera

Reportaje
La primera mujer en volar al espacio
Valentina Tereshkova posa antes de una
rueda de prensa que concedió con motivo de
su 70 cumpleaños.
Valentina Tereshkova:
50 años de una hazaña
pionera
Texto: Alberto Velázquez
Fotografías: Corbis
Todo un país y, por extensión, el mundo, estuvieron pendientes del primer
vuelo de una mujer al espacio. En una época de desafíos, la ‘gaviota’
Tereshkova culminó con éxito su misión, e inscribió su nombre en la historia
en plena ‘carrera espacial’.
T
iempo de cambios. El mismo
año en el que John F. Kennedy
pronunciaba su célebre “Yo soy
berlinés”, después de visitar el checkpoint
Charlie del muro de Berlín; y en el que
Martin Luther King proclamó “Tengo un
sueño…” en el Lincoln Memorial de Washington D.C., ante más de 250.000 personas, Valentina Tereshkova decía desde el
espacio: ‘‘Aquí Gaviota, aquí Gaviota. Veo
en el horizonte una raya azul: es la Tierra.
¡Qué hermosa!’’. Eran las palabras de la
primera mujer que voló, a bordo del Vostok 6, al espacio.
Historia espacial
‘‘Rusia ha lanzado a una mujer a los espacios ayer, según se ha anunciado oficialmente en esta capital. El anuncio fue
hecho a las 14.00 hora local –12.00 hora
española– del domingo, y por medio de
la televisión, que reflejó en las pantallas
a la mujer cosmonauta volando sobre la
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Unión Soviética en una nave espacial’’.
Así reflejaba la hazaña el diario ABC el
martes 18 de junio de 1963 y, 50 años
después, José Manuel Nieves, corresponsal de Ciencia y Tecnología del diario, comenta: ‘‘Fue un hito, desde luego,
aunque pienso que la propaganda tuvo
algo que ver: pasaron 20 años para que
el hito se repitiera, la misión no se desarrolló todo lo bien que se esperaba...
Afortunadamente, hoy es habitual que
tanto hombres como mujeres protagonicen misiones espaciales. Se ha demostrado ya con creces que en el espacio, los
sexos no importan’’.
Por su parte, Javier Ventura-Traveset,
doctor ingeniero de Telecomunicación y
portavoz de la Agencia Espacial Europea
en España, destaca la relevancia de esta
misión espacial: ‘‘Realizó un vuelo de casi
tres días, estando en órbita más tiempo
del que acumulaban todos los astronautas americanos conjuntamente en esa
fecha. Tuvieron que pasar casi 20 años
más hasta que una mujer estuviera de
nuevo en órbita, Svetlana Savitskaya, en
el año 1982. Además, Tereshkova es la
única mujer astronauta en la historia que
ha estado sola en una nave espacial’’.
La gran oportunidad
La vida de Valentina Tereshkova empezó, en 1937, en un entorno similar al de
millones de compatriotas –padre, conductor de tractores; madre, granjera–,
en un pequeño pueblo a 200 km de Moscú, en una URSS que se enfrentaría poco
más tarde a la II Guerra Mundial, donde
el padre de Valentina murió cuando ella
tenía tres años. A pesar de todo, la futura
cosmonauta pudo empezar a estudiar
Ingeniería Técnica Industrial, mientras
trabajaba en una fábrica textil, después
de haberlo hecho en una de neumáticos.
El camino que la situaría en ‘lanzadera’ hacia el espacio comenzó cuando, con
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¿Y los próximos 50 años?
22 años, empezó a practicar paracaidismo. El club al que asistía pertenecía a la
Fuerza Aérea Soviética lo que, unido a su
decidida inclusión en el sistema comunista –era secretaria local de la Liga de
Juventudes Comunistas– facilitaría su
ingreso en el prestigioso Centro de Entrenamiento para Astronautas.
Ideología, preparación, audacia y valor propiciaron que fuera elegida, entre
400 aspirantes, para participar en la ya
histórica apuesta de la carrera espacial
soviética por las naves Vostok. El que no
fuera necesario contar con depuradas
nociones técnicas, como ocurriría después con los tripulantes que sucedieron
a los pioneros, no resta trascendencia a
este hecho, como destaca Ana Laverón
Simavilla, catedrática de Ingeniería Aeroespacial de la ETSI Aeronáuticos de
la UPM y directora del Centro de Operaciones y Soporte a Usuarios (E-USOC),
centro delegado español de la Agencia
Espacial Europea: ‘’Esa fue la primera misión con una mujer a bordo, se hicieron
adaptaciones al traje para que pudiera
ser usado por ella. Pero, sobre todo, la
misión fue pionera en el vuelo junto a
Cronología: los hitos más destacados
–4/10/1957: Sputnik 1, el primer
satélite artificial (URSS).
–3/11/1957: la perra Laika viaja en el
Sputnik 2 (URSS).
– 11/9/1959: Luna 2, el primer satélite
en llegar a la Luna (URSS).
–12/4/1961: Yuri Gagarin viaja al
espacio (URSS).
– 16/6/1963: Valentina Tereshkova viaja
al espacio (URSS).
– 18/3/1965: Alekséi Leónov realiza el
primer paseo espacial (URSS).
–21/12/1968: Apolo 8: la primera misión
tripulada en órbita lunar (EE UU).
– 21/7/1969: el hombre pisa la Luna
(EE UU).
– 19/3/1971: Salyut-1, la primera
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estación espacial (URSS).
– 14/7/1975: las naves Apolo y Soyuz se
acoplan en el espacio (URSS y EE UU).
– 31/5/1975: creación de la Agencia
Espacial Europea (ESA). El 24 de
diciembre de 1979 se lanzó Ariane, el
primer cohete europeo.
– 12/4/1981: primer vuelo del
transbordador Columbia (EE UU).
– 28/1/1986: el Challenger explota en el
aire, mueren sus siete tripulantes.
– 20/2/1986: la estación espacial MIR,
en órbita (URSS).
– 18/10/1989: la sonda Galileo, rumbo a
Júpiter (EE UU).
– 30 /4 /2001: Dennis Tito se convierte
en el primer ‘turista espacial’.
L
otro vehículo (el Vostok 5), al que se
acercaron unos cinco kilómetros y con el
que mantuvieron comunicación desde
el Vostok 6. Fue el último vuelo tripulado
de la serie que tenía como objetivo obtener conocimiento sobre la adaptación
de los astronautas al entorno espacial’’.
Pasaron 19 años hasta que otra mujer
viajara al espacio.
El 16 de junio de 1963 a las 9:29 UTC,
el Vostok 6 despegó desde la base espacial de Baikonur con rumbo al espacio,
llevando consigo como tripulante a Valentina Tereshkova, que a la edad de 26
años se convertiría en la primera mujer
y el primer civil en viajar al espacio. 70
horas y 50 minutos para dar 48 vueltas
alrededor de la Tierra en un vuelo accidentado, deudor de una gesta de ese
calibre, de un desafío a la fuerza de la
gravedad: la tripulante sufrió problemas
con la alimentación, molestias físicas y
un tortuoso regreso a la Tierra.
Alta política
En tiempos de carrera espacial, el éxito
de la misión con Tereshkova como protagonista fue apurado al máximo por las
autoridades –EE UU no envió una mujer
al espacio hasta 1983–, y supuso el principio del camino para que la conocida
popularmente como chaika (gaviota en
ruso) se convirtiera en toda una celebridad implicada a fondo con el régimen
político soviético. Continuó tanto su for-
Arriba, Valentina Tereshkova en
una de las simulaciones realizadas
antes de volar al espacio y con Nikita
Khrushchev. Sobre estas líneas, con u
marido, el también astronauta Andriyan
Grigórievich Nikoláyev, y su hija recién
nacida.
a profesora Laverón analiza lo que
nos puede deparar el futuro: ‘‘Cada
vez existe mayor cooperación
entre las agencias espaciales. Ejemplo
de ello es el JWST, el telescopio
espacial que sustituirá al Hubble, y el
máximo exponente es la cooperación
en la Estación Espacial Internacional
(ISS), imposible para un solo país’’. Al
hablar de países, la profesora destaca:
‘‘En EE UU estamos asistiendo a un
cambio importantísimo en cuanto a los
vehículos tripulados, al haber decidido
la NASA la paralización del programa del
Shuttle. Desde entonces, son empresas
privadas las que de la mano de la NASA
han asumido la responsabilidad del
desarrollo y explotación de los nuevos
vehículos tripulados. Este puede ser
el primer paso para la explotación
comercial de los vuelos tripulados, que
se incrementará rápidamente en pocos
años. Rusia mantiene una importante
ventaja en numerosos aspectos,
prueba de ello es que es el único país
que mantiene la capacidad de llevar a
astronautas a la ISS’’.
Como comenta José Manuel Nieves,
el progreso nos deparará sorpresas:
‘‘Desde luego, los próximos grandes
pasos de la exploración espacial no son
algo que pueda abordar un país por su
cuenta. Ahí esta, por ejemplo, la ISS,
que es un esfuerzo conjunto de muchos
países, el principio, creo, de una nueva
era de colaboración y de avances...
Pronto veremos cómo los astrónomos
encuentran un planeta gemelo de la
Tierra; cómo se desarrollan los nuevos
motores que nos permitirán viajar, por
ejemplo, a Marte, en dos o tres meses
en vez de en dos años; veremos seres
humanos en Marte y bases en la Luna...”.
Y el doctor Javier Ventura (ESA)
ratifica todo lo que nos queda por ver:
‘‘Quién nos hubiera dicho hace 50 años,
por ejemplo, que seríamos capaces de
captar la primera luz del Universo hace
13.800 millones de años y hacerlo con
la resolución del satélite Planck de la
ESA; o que podríamos posar con éxito
una sonda espacial en Titán, una de
las lunas de Saturno, a más de 1.300
millones de km de la Tierra, como
hicimos en 2005; o que habríamos
descubierto casi 900 planetas fuera
de nuestro sistema solar, por citar
solo unos ejemplos. Hemos pasado
del Sputnik –83 kg de masa, solo tres
meses en órbita–, a tener en órbita una
estación espacial de 450 toneladas de
masa, con una tripulación permanente
de seis astronautas y con una duración
mínima operacional en órbita de 20
años. Estamos solo al principio de una
gran aventura… Su importancia en la
economía global va a seguir creciendo;
el turismo espacial será una realidad
en esta década y los avances en la
comprensión de nuestro planeta y del
universo van a multiplicarse en los
próximos años’’. ❚
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Reportaje
mación –llegó a ser doctora en Ingeniería Espacial y coronel ingeniero del Ejército del Aire– como su implicación con el
sistema comunista: miembro del Soviet
Supremo y de su Presidium; del Concilio Mundial de Paz; del Comité Central
del Partido Comunista, presidenta del
Comité de Mujeres Soviéticas… Un recorrido vital por el que recibió dos órdenes de Lenin –como Heroína de la Unión
Soviética– y la Medalla de Oro de la Paz
de Naciones Unidas: Tereshkova luchó
activamente por la paz mundial y por la
igualdad entre hombres y mujeres.
El mismo año de su hazaña se casó
con el astronauta Andriyan Grigórievich
Nikoláyev –el tercer cosmonauta soviético, por su vuelo en la misión Vostok
3–, una boda a la que asistió el líder Nikita Khrushchev, secretario general del
Valentina Tereshkova
fue elegida para
la misión Vostok
entre más de 400
aspirantes
PCUS. Curiosamente, el nacimiento, un
año después, de su hija Elena, levantó
especulaciones sobre cuál sería su estado físico, al haber nacido de dos personas que habían viajado al espacio. Respuesta: completamente normal.
El legado
Estos 50 años (ver cronología) han mostrado al mundo la lucha entre potencias
–la carrera espacial–, las propuestas
de países como China, la llegada de la
Agencia Europea Espacial… Como comenta la catedrática Laverón: “El desarrollo del sector ha sido espectacular. En los primeros años, se restringía
prácticamente a EE UU y la URSS, y era
enteramente público. Actualmente, el
panorama es muy distinto, existe una
explotación comercial del espacio cada
vez mayor y muchos países han conseguido acceder a la tecnología espacial.
Siguen estando las grandes agencias
nacionales (NASA, Roscosmos, CNES,
DLR, ASI, CNSA, CSA) y la Agencia Espacial Europea (ESA), que lideran el
desarrollo de nuevas tecnologías y las
misiones más complejas y arriesgadas,
así como misiones científicas’’.
Entre tanto, Valentina Tereshkova
visitó Madrid en junio de 2011 –en esos
momentos, era vicepresidenta del Parlamento de su región como independiente en el partido de Vladimir Putin, Rusia
Unida–. Y en una entrevista publicada en
el diario El País recordó las palabras que
pronunció cuando el Vostok 6 estaba
muy cerca de hacer historia. ‘‘Cielo, ¡ahí
voy!’’. Una forma sencilla de concentrar
la esencia de uno de los desafíos más
audaces de la Humanidad. ❚
ESA: el papel de Europa
J
avier Ventura, el portavoz de la Agencia
Espacial Europea, resume para Acción
Telefónica, las acciones de la ESA para los
próximos años: ‘‘La Agencia Espacial Europea
está viviendo el periodo de más actividad
en sus 40 años de historia. En 2013 vamos
a poner en órbita 12 satélites en un total
de siete lanzamientos, algo nunca hecho
en un solo año y, además, estas misiones
cubren toda la faceta de actividades de la
ESA. Si miramos a más largo plazo, tenemos
previsto lanzar un total de 35 satélites en
solo 30 meses. Durante esta década, vamos
a completar el sistema de navegación
europeo Galileo y a desarrollar el sistema
más completo del mundo en observación de
la Tierra, el programa Copernicus/GMES’’.
‘‘En el campo científico –continúa–,
la ESA está desarrollando siete misiones
científicas nuevas que deberán ser lanzadas
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durante lo que queda de esta década:
desde la exploración detallada de la
atmósfera y la superficie de Marte hasta
la caracterización de la energía oscura del
universo; explorar Mercurio; profundizar en
los estudios del sol y preparar la realización
de experimentos de física fundamental
de altísima precisión con LISA Pathfinder;
observar en detalle la actividad del Sol y
su impacto en nuestro entorno, con Solar
Orbiter. Y Europa dispondrá de tres cohetes
lanzadores operacionales –Ariane-5, Vega
y Soyuz– y desarrollaremos el futuro
lanzador europeo para la próxima década.
La ESA participará en las próximas misiones
tripuladas a la Luna, contribuyendo con el
módulo de servicio de las naves Orión, y
tendrá su propio vehículo de exploración
(un rover) en la superficie de Marte en 2018,
la misión Exomars’’. ❚