Mexicano por nacimiento, para ocupar cargos públicos

Las Leyes de Reforma: su actualidad
Ministro Sergio A. Valls Hernández
Mexicano por nacimiento, para ocupar cargos públicos
Organización Editorial Mexicana
11 de julio de 2013
A lo largo de los últimos años, un tema muy debatido por el Pleno de la Suprema Corte de Justicia de la Nación ha
sido el establecimiento en las leyes locales del requisito de ser mexicano por nacimiento y no ostentar otra
nacionalidad, a efecto de acceder a distintos cargos públicos. Un primer criterio se sustenta en una cuestión de
incompetencia por parte de las Legislaturas de las entidades federativas para establecer dicho requisito; y, el
segundo, se basa en motivos relacionados con los principios de igualdad y no discriminación.
Así, el pasado dos de julio, se analizó la constitucionalidad del artículo 63, apartado A, fracción I, de la Ley del
Sistema Estatal de Seguridad Pública del Estado de Baja California Sur, que establece los requisitos para ingresar y
permanecer en el Servicio Profesional de Carrera de las instituciones policiales y de procuración de justicia de la
entidad, entre los que se encuentra el relativo a ser mexicano por nacimiento.
El proyecto de resolución sometido a la consideración de los integrantes de ese Alto Tribunal propuso declarar la
inconstitucionalidad de este precepto, en la medida que contraviene el artículo 32 de la Constitución Política de los
Estados Unidos Mexicanos, ya que no hace distinción alguna respecto de los cargos a los que debe aplicarse la
reserva de ser mexicano por nacimiento, y en tanto que lo impone como requisito para ingresar al servicio
profesional de carrera de las instituciones policiales y de procuración de justicia del Estado de Baja California Sur,
con independencia de las funciones que vayan a realizarse, las cuales podrían no tener relación directa o inmediata
con aspectos que pongan en riesgo la soberanía y seguridad nacional. Asimismo, se propuso que el artículo en
cuestión vulnera el principio de igualdad y no discriminación contenido en el artículo 1° constitucional, toda vez que
tal exigencia no es razonable y resulta discriminatoria a los mexicanos por naturalización.
En este asunto, en una primera postura, expresé que es necesario que el Pleno de la Suprema Corte fije un criterio
que deba seguirse al resolver los asuntos con esta temática, con el ánimo de dar claridad y congruencia a las
resoluciones que se vayan emitiendo. También, estuve a favor en cuanto a declarar la inconstitucionalidad del
artículo 63, apartado A, fracción I, de la Ley del Sistema Estatal de Seguridad Pública del Estado de Baja California
Sur; sin embargo, no compartí las consideraciones del proyecto, ya que considero que el Congreso de la Unión es el
único órgano facultado para establecer la limitante consistente en ser mexicano por nacimiento, cuando se trate de
actividades estratégicas o prioritarias del Estado Mexicano que por su naturaleza sustentan el fortalecimiento de la
identidad y soberanía nacionales, con la finalidad de que sus titulares estén libres de cualquier posibilidad de vínculo
jurídico o sumisión hacia otros países.
De ahí que en el artículo 32 de la Ley Fundamental, se establezca que los cargos que se señalen en la propia
Constitución y en otras leyes del Congreso de la Unión, se reservan de manera exclusiva a mexicanos por
nacimiento que no adquieran otra nacionalidad.
De esta forma, los Congresos locales no tienen facultad para establecer esta reserva y, en esa medida, resulta
irrelevante analizar si las normas estatales que incorporen esta limitante respectan o no el principio de igualdad y no
discriminación, pues simplemente las legislaturas no son competentes para legislar este tema. Por tanto, con
independencia de la razonabilidad del establecimiento del requisito de ser mexicano por nacimiento como exigencia
para ingresar y permanecer en el servicio profesional de carrera de las instituciones policiales y de procuración de
justicia del estado de Baja California Sur, lo cierto es que el órgano legislativo que estableció dicha exigencia no está
facultado para ello, por lo que resulta inconstitucional la norma desde su origen.
Aprovecho para informarles que debido a que la Suprema Corte gozará de su primer periodo vacacional, estaré
fuera de estas páginas hasta el próximo 08 de agosto.
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