juicio de revisión constitucional electoral expediente: sup-jrc

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JUICIO
DE
REVISIÓN
CONSTITUCIONAL ELECTORAL
EXPEDIENTE: SUP-JRC-017/97
PARTIDO POPULAR SOCIALISTA
VS.
SEGUNDA SALA UNITARIA DEL
TRIBUNAL ESTATAL ELECTORAL DEL
ESTADO DE GUANAJUATO
MAGISTRADA PONENTE: ALFONSINA
BERTA NAVARRO HIDALGO
SECRETARIOS:
ESPERANZA
GUADALUPE FARIAS FLORES Y
ROBERTO RUIZ MARTÍNEZ
México, Distrito Federal a veintisiete de mayo de mil novecientos
noventa y siete.
VISTO para resolver el juicio de revisión constitucional electoral
al rubro citado, promovido por el Partido Popular Socialista, por
conducto de su representante Salvador Gallardo Bravo, en contra
de la resolución de fecha doce de mayo del año en curso, dictada
por el Magistrado de la Segunda Sala Unitaria del Tribunal
Estatal Electoral del Estado de Guanajuato, dentro del
expediente del recurso de revisión número 004/97, que resolvió
sobreseer dicho recurso al declararlo improcedente por falta de
pruebas para establecer si el acto reclamado es acorde o no a la
Ley Electoral del Estado, y,
R E S U L T A N D O:
I.- Mediante resolución de tres de mayo de mil novecientos
noventa y siete, el Consejo Municipal Electoral de Irapuato,
Guanajuato, negó el registro de la planilla de candidatos a
miembros del Ayuntamiento de la ciudad mencionada, propuesta
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por el Partido Popular Socialista.
II.- Inconforme con el sentido de la resolución anteriormente
referida, Salvador Gallardo Bravo, como representante del
Partido Popular Socialista, mediante escrito de siete de mayo del
presente año, interpuso recurso de revisión ante el Tribunal
Estatal Electoral del Estado de Guanajuato, mismo que fue
radicado en el expediente número 004/97, en el cual, su Segunda
Sala Unitaria, dictó resolución el 12 de mayo del propio año, cuya
parte considerativa y resolutiva dice:
"C O N S I D E R A N D O
PRIMERO.- De conformidad a lo dispuesto por los artículos 299 doscientos
noventa y nueve y 300 trescientos, del Código de Instituciones y
Procedimientos Electorales para el Estado de Guanajuato y en razón de
turno, esta Segunda Sala Unitaria del Tribunal Estatal Electoral, resulta
competente para conocer del Recurso de Revisión interpuesto por el
Representante Propietario del Partido Popular Socialista, quien estando en
tiempo, mediante escrito presentado ante la Oficiala de partes de este
Tribunal, en contra de la Resolución dictada por el Consejo Municipal
Electoral de Irapuato, Guanajuato, de fecha 3 tres de mayo de 1997 mil
novecientos noventa y siete, notificada al Partido recurrente ese mismo día;
habiéndose admitido dicho recurso mediante auto de fecha 7 siete de mayo
del año en curso, al considerarse que de acuerdo a los artículos 286
doscientos ochenta y seis, 287 doscientos ochenta y siete y 288 doscientos
ochenta y ocho párrafo segundo del Código de la Materia, los requisitos de
forma se encontraban satisfechos, al haber manifestado el recurrente bajo
protesta de decir verdad que no tenía acceso a la obtención de pruebas
documentales que ofrecía en ese momento, procediendo este Tribunal, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 323 trescientos veintitrés de la
Ley Electoral, a solicitar de la autoridad responsable el informe
correspondiente sobre dicho particular.
SEGUNDO: El recurrente expresa como agravios que la Resolución
impugnada es violatoria de los artículos 153 ciento cincuenta y tres, fracción
VII, 177 ciento setenta y siete, 179 ciento setenta y nueve y 180 ciento
ochenta, del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales para el
Estado de Guanajuato, al sostener: "PRIMERO.- El I.E.E.G., por conducto
del C.M.E. de Irapuato Gto. y este por medio de su Presidente o Secretario,
causan agravios al Partido que represento, así como a la Ciudadanía y al
Pueblo Guanajuatenses, al negar el registro de la planilla de candidatos a
renovar el ayuntamiento Municipal de Irapuato, Gto. al no aplicar, con
puntualidad, pulcritud y legalidad lo establecido por los artículos 177 y 180
del Código de Instituciones y procedimientos electorales de Guanajuato,
toda vez que el artículo 180, en su primer párrafo dice: "Recibida una
solicitud de registro de candidaturas por el Presidente o Secretario del
órgano electoral que corresponda, se verificará dentro de los tres días
siguientes, que se cumplió con todos requisitos señalados en el artículo
anterior". Ahora bien, a las claras se ve que el consejo municipal electoral,
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referido pasó por alto y por los lados, ese mandato de la Ley, ya que el
órgano electoral agraviante, debió, en el supuesto de que faltase
documentación, y en acatamiento al punto Sexto del considerando de la
Resolución dictada por la Cuarta Sala Unitaria del Tribunal Electoral, en
virtud de que ese Considerando establece: "En razón de que el agravio
analizado en el punto Cuarto de este capítulo de considerandos resultó
fundado y procedente, se modifica la resolución tomada por el Consejo
Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, con fecha 18 de los corrientes
donde se registraron las planillas de candidatos a miembros del
ayuntamiento presentadas por diversos partidos y se omitió referirse a la
presentada por el Partido Popular Socialista, para el efecto de que ese
órgano dicte nueva resolución en la que se pronuncie sobre la solicitud de
registro de la planilla de candidatos a miembros de ayuntamiento presentada
por el Partido Popular Socialista, cuya resolución deberá ser debidamente
fundada y motivada".
"SEGUNDO.- Toda vez que el Partido que represento hizo llegar en tiempo,
todos los documentos pedidos por el artículo 179 del Código de la Materia,
para que nuestra planilla fuese registrada, estamos en perfectas condiciones
legales, para aspirar al registro, como lo debió pensar y obrar
consecuentemente, el consejo municipal electoral agraviante. Si ahora, esa
autoridad electoral después de haber transcurrido 18 días, descubre que
faltan requisitos o documentos en la integración del expediente de solicitud
de registro que nos ocupa, ese no es problema nuestro, y en cambio sí es
responsabilidad y muy grave del órgano electoral agraviante, pues se revela
falta de cuidado y de profesionalismo en el cumplimiento de la encomienda
político, jurídico y electoral, pues esa función de organizar y desarrollar
elecciones, es atribución del ESTADO, quien, la encomienda a
CIUDADANOS, pero esto no quiere decir que no tenga responsabilidad el
Estado y el Gobierno.
"Tan es así, que en la sesión de 18 de abril del año en curso, en que se
celebró por parte de la autoridad agraviante la sesión, en que los consejeros
ciudadanos, ni siquiera se molestaron, en decir al partido que represento que
en todo caso no se otorgaba el registro, por omisiones en requisitos que pide
el artículo 179 de la Ley de la Materia".
"Como es fácil comprender C. Magistrado, después de 18 días de
permanecer en el limbo jurídico, la documentación que se acompañó a la
solicitud de registro rechazada, ahora es muy fácil, argumentar que se
omitieron requisitos contemplados en el artículo 179 de la Ley de la Materia".
TERCERO: Previamente al estudio de la controversia planteada, se deben
analizar las causales de improcedencia que en la especie puedan
actualizarse, por ser su examen preferente y de orden público de acuerdo al
artículo 1 primero del Código de Instituciones y Procedimientos Electorales
para el Estado de Guanajuato. Lo anterior en virtud de que al momento de
interponerse el recurso el promovente manifestó no estar en posibilidad de
aportar las pruebas necesarias a su escrito inicial, argumentando no tener
acceso a ellas, por lo que en ese momento de la admisión, este Tribunal
consideró que no se actualizaba ninguna de las causales de improcedencia,
resultando, una vez que ha llegado el momento de resolver el presente
recurso y tomando en consideración que de la documental aportada por el
Consejero Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, al contestar el
requerimiento que se le hizo, señaló y se demuestra, que el recurrente pese
a que manifestó: "Protesto lo necesario", que significa que en los
argumentos que hace valer en el recurso se conduce con verdad, esto, ha
quedado claro, no es así, pues el C. SALVADOR GALLARDO BRAVO
estuvo presente en la sesión de fecha 3 tres de Mayo del año en curso,
celebrada en el Consejo Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, donde
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en cumplimiento a la resolución dictada por la Cuarta Sala Unitaria del
Tribunal Estatal Electoral, sesión en la cual se negó el registro a la planilla
propuesta por el Partido Popular Socialista, y en la misma, como consta en
el acta levantada con ese motivo, el representante del partido recurrente
solicitó la expedición de la copia de dicha acta, la cual le fue entregada
debidamente certificada en la misma fecha, documental que desde ese
momento el ahora recurrente tenía en su poder, por lo que lo aseverado por
el C. SALVADOR GALLARDO BRAVO, resulta contrario a la verdad.
Y si tomamos en cuenta que el artículo 321 trescientos veintiuno, del Código
de Procedimientos Electorales, obliga a que el promovente acompañe a su
escrito inicial las pruebas que obren en su poder, y en este caso dicha
documental, que además como única prueba hace valer el recurrente para
sostener sus agravios, la misma no la acompañó como era su obligación,
por lo que se actualiza la causal de improcedencia que señala el artículo 325
trescientos veinticinco fracción IV cuarta de la Ley de la Materia, tomando en
cuenta además que el recurrente debió acompañar a su recurso las
probanzas en las que se acreditara, precisamente, que cumplió con los
requisitos del artículo 179 ciento setenta y nueve, que son: "La solicitud
deberá acompañarse de la declaración de aceptación de la candidatura... en
la solicitud se deberá asentar bajo protesta de decir verdad, el tiempo de
militancia en el partido; copia del acta de nacimiento y de la credencial para
votar, así como, en su caso, la constancia de residencia de propietarios y
suplentes". Además de las documentales referentes a la resolución que cita
fue emitida por la Cuarta Sala del Tribunal Estatal Electoral; documentos sin
los cuales este Órgano resolutor se ve imposibilitado a poder analizar los
agravios esgrimidos y su relación con las pruebas que resultan
indispensables para emitir un juicio conforme a derecho.
Es necesario precisar al recurrente porqué se le sobresee el recurso que
hace valer, empezando por definir lo que por sobreseimiento se entiende: es
una institución a través de la cual se va a poner fin a un juicio o recurso
(como el que nos ocupa) sin que la autoridad jurisdiccional competente, vaya
a decidir sobre la controversia planteada; en otras palabras por medio del
sobreseimiento, el Tribunal Estatal Electoral va a terminar con el recurso de
revisión o a darlo por terminado, sin que en la resolución respectiva se haga
una declaratoria sobre la legalidad o ilegalidad del acto reclamado, por no
entrar al fondo del negocio.
La palabra sobreseimiento, tiene su origen etimológico en las expresiones
súper cederé que significan, en sentido etimológico, "sentarse sobre", o sea
que este Tribunal desecha el fondo del recurso, y por lo tanto, ya no va a ser
estudiado en toda sus partes, por presentarse alguna de las causas
previstas por la propia legislación que contenga tal institución.
En el presente litigio la causal de sobreseimiento que se actualiza, es la
contenida en el artículo 326 trescientos veintiséis fracción IV cuarta de la ley
en comento que a la letra dice: "Procede el sobreseimiento de los recursos:
I.II.III.IV.- Cuando se declare improcedente el recurso interpuesto, de acuerdo a lo
establecido en el artículo que antecede; y
V.En el caso, la causal de improcedencia que se actualiza es la que nos
señala el artículo 325 trescientos veinticinco en su fracción IV cuarta, de la
ley de la materia, la cual es; "No se acompañen las pruebas
correspondientes en términos señalados por este Código, salvo que por
razones justificadas no obren en poder del promovente". Y de acuerdo a lo
antes narrado en este considerando, se advierte que en el caso concreto el
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recurrente siempre tuvo en su poder la copia certificada del acto reclamado,
por lo tanto no existe ninguna justificación del porque no acompañó este
documento al momento de hacer valer su recurso, y si bien es cierto que la
copia certificada de la resolución de fecha 3 tres de Mayo, ya obra en este
expediente, esto obedece a que este Tribunal, solicitó a la autoridad
responsable un tanto del documento en mención, pero esta circunstancia no
exime al promovente de recurso de cumplir con las obligaciones procesales
que la ley de la materia le impone, dentro de las cuales está el presentar las
pruebas que conforme a este Código resultan admisibles, la anterior
obligación se consigna en el artículo 287 doscientos ochenta y siete fracción
VII séptima del citado ordenamiento legal, y su inobservancia da como
consecuencia la improcedencia del recurso, la que en este caso no se
decretó al momento de radicar el expediente, porque como se ha
manifestado el recurrente expresó que no tenía acceso a la documental
tantas veces mencionada, por lo tanto se admitió el recurso para su estudio
y en este momento procesal, que es el de dictar sentencia, se establece el
sobreseimiento del juicio, por haberse actualizado la causal de
improcedencia antes mencionada.
Es de mencionarse que el artículo 321 trescientos veintiuno del cuerpo de
leyes antes invocado establece que el promovente aportará con su escrito
inicial las pruebas que obren en su poder, y si el partido recurrente no
acompañó a su promoción inicial de este proceso la documental antes
citada, esta inobservancia de la ley, le es castigada con la improcedencia del
recurso porque está incumplimiento con sus obligaciones procesales.
Así mismo como ya ha quedado establecido en los párrafos que nos
anteceden de este considerando, el recurrente tampoco acompañó a su
escrito de interposición del recurso la prueba documental necesaria para
acreditar los extremos de sus agravios, lo que es indispensable para la
procedencia de éstos, pues de conformidad con el artículo 322 trescientos
veintidós párrafo segundo del Código de Instituciones y Procedimientos
Electorales para el Estado de Guanajuato, que señala: "El que afirma está
obligado a probar", y si el recurrente asevera que él presentó todos los
documentos que nos establece el artículo 179 ciento setenta y nueve del
ordenamiento legal en cita, estaba obligado a probar estas circunstancias,
con los medios de prueba a su alcance e idóneos, en igual situación nos
encontramos respecto a la resolución dictada por la Cuarta Sala de este
Tribunal Estatal Electoral a que alude en su escrito inicial de este proceso,
que también fue omisa en acompañar al recurso.
No existiendo obstáculo legal alguno para no presentar los documentos en
mención, ya que el partido recurrente tiene un representante acreditado ante
el Consejo Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, en donde, al tenor
de lo establecido por el artículo 153 ciento cincuenta y tres fracción IX
novena, del cuerpo de leyes antes invocado, tiene la obligación de
desahogar su petición, o bien pudo presentar la razón de recibido que obre
en la copia de su solicitud de registro de planilla presentada ante el
organismo electoral antes dicho, en donde consten los anexos que
acompañó a su solicitud de registro, asimismo estuvo en posibilidad legal de
solicitar a la mencionada sala de este Tribunal, copia certificada de la
resolución que invoca en sus agravios, pues el recurrente es parte de este
litigio y por lo tanto no existe obstáculo legal alguno para que recabe esta
resolución.
En tal estado de cosas se actualiza la causal de improcedencia en estudio,
que motiva el sobreseimiento del juicio, porque esta autoridad está impedida
para establecer si el acto reclamado por el quejoso es acorde a la Ley
Electoral del Estado, y esto en razón a que no existen pruebas con las
cuales se pueda analizar la situación anterior, siendo como ha quedado
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establecido, obligación legal del recurrente de acompañar a su recurso todas
las probanzas que tiene en su poder o están a su alcance, máxime que en el
caso se desvaneció la aparente justificación del recurrente para no aportar
las pruebas en su escrito inicial.
Este criterio sobre la improcedencia de los recursos, por falta de aportación
de las pruebas necesarias, ha sido sostenido por este Tribunal Estatal
Electoral, tanto en el proceso Electoral de 1995 por la Primera Sala en el
expediente de revisión registrado bajo el número 2/95, así como por esta
Segunda Sala en el recurso de revisión 2/95. Y en el presente proceso
electoral dicho criterio se sigue sosteniendo como así quedó plasmado en el
expediente 003/97-I radicado en la Primera Sala sobre el recurso de
revisión, así como en los expedientes 001/97 y 003/97 radicados en la
Quinta Sala de este Tribunal, y sustentado por esta Segunda Sala en los
precedentes expedientes radicados bajo los números 002/97 y 003/97.
CUARTO.- Por lo que al actualizarse la causal de improcedencia procede el
sobreseimiento del recurso planteado, de conformidad con lo dispuesto por
el artículo 326 trescientos veintiséis fracción IV cuarta del Código de
Instituciones y Procedimientos Electorales para el Estado de Guanajuato, sin
entrar al estudio de los agravios planteados, por lo tanto se dejan las cosas
tal y como se encontraban antes de la interposición del recurso, y la
autoridad responsable está facultada para obrar conforme a sus
atribuciones.
En mérito de lo expuesto y legalmente fundado se resuelve con apoyo legal
en los artículos 31 treinta y uno párrafos diez y once de la Constitución
Política del Estado Libre y Soberano de Guanajuato, 1 uno, 3 tres, 286
doscientos ochenta y seis, 287 doscientos ochenta y siete, 288 doscientos
ochenta y ocho, 299 doscientos noventa y nueve, 300 trescientos, 301
trescientos uno, 307 trescientos siete, 308 trescientos ocho, 311 trescientos
once, 312 trescientos doce, 313 trescientos trece, 314 trescientos catorce,
317 trescientos diecisiete, 321 trescientos veintiuno, 322 trescientos
veintidós, 323 trescientos veintitrés, 324 trescientos veinticuatro, 325
trescientos veinticinco fracción IV cuarta, 326 trescientos veintiséis fracción
IV cuarta, 327 trescientos veintisiete, 335 trescientos treinta y cinco y 336
trescientos treinta y seis del Código de Instituciones y Procedimientos
Electorales para el Estado de Guanajuato, 1 uno, 3 tres, 4 cuatro, 34 treinta
y cuatro, 36 treinta y seis, 44 cuarenta y cuatro y 46 cuarenta y seis del
Reglamento Interior del Tribunal Estatal Electoral de Guanajuato.
RESOLUTIVOS
PRIMERO.- Esta Segunda Sala Unitaria del Tribunal Electoral del Estado,
resultó competente para conocer el presente Recurso de Revisión,
interpuesto por el representante propietario, ante el Consejo Municipal
Electoral de Irapuato, Guanajuato, del Partido Popular Socialista, en contra
de la Resolución recaída a su solicitud de registro de planilla de candidatos a
miembros de ayuntamiento de dicho Municipio, pronunciada por el Órgano
electoral, agotándose el trámite para su substanciación conforme a lo
establecido en el Código de la Materia.
SEGUNDO.- Se declara IMPROCEDENTE el recurso hecho valer por el C.
SALVADOR GALLARDO BRAVO, Representante Propietario ante el
Consejo Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, del Partido Popular
Socialista, en términos del considerando tercero de esta resolución.
TERCERO.- Se SOBRESEE el presente recurso al haberse actualizado la
causal de improcedencia de falta de aportación de pruebas, de acuerdo al
considerando cuarto de esta resolución.
CUARTO.- Notifíquese personalmente..."
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III.- Mediante escrito presentado ante la autoridad responsable el
día quince de mayo del año que corre, el Partido Popular
Socialista, por conducto de su representante Salvador Gallardo
Bravo, interpuso juicio de revisión constitucional electoral,
establecido por el artículo 86 de la Ley General del Sistema de
Medios de Impugnación en Materia Electoral, en contra de la
resolución acabada de transcribir.
IV.- En cumplimiento a lo previsto por los artículos 17, 90 y 91 de
la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación, el
Magistrado Propietario de la Segunda Sala Unitaria del Tribunal
Estatal Electoral de Guanajuato, mediante oficio número 007/97II, de dieciséis de mayo de mil novecientos noventa y siete,
remitió a esta Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación, el escrito que contiene el medio de
impugnación que se resuelve, el informe circunstanciado y el
expediente relativo al recurso de revisión en donde se dictó la
sentencia ahora impugnada; documentación que fue recibida en
la Oficialía de Partes de este Tribunal el diecinueve de mayo de
este año.
V.- Asimismo, el Magistrado Propietario de la Sala señalada
como responsable, mediante el oficio 007/97-II ya citado, remitió
a esta Sala Superior la cédula de notificación del acuerdo de
recepción del medio de impugnación y la razón en la que la
responsable hace constar la fijación de esa cédula en los
estrados, de dieciséis de mayo de mil novecientos noventa y
siete.
VI.- Por auto de fecha veinte de mayo de mil novecientos noventa
y siete, el Magistrado Presidente del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación, turnó el presente expediente a la
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Magistrada Alfonsina Berta Navarro Hidalgo; admitiéndose para
su trámite.
VII.- Concluida la tramitación del juicio y cerrada que fue la
instrucción, se formuló el proyecto de sentencia correspondiente;
y,
CONSIDERANDO:
PRIMERO.- Esta Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder
Judicial de la Federación es competente para conocer y resolver
el presente asunto, con fundamento en lo dispuesto en los
artículos 41, base IV, y 99, párrafo cuarto, fracción IV, de la
Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos; 186
fracción III, inciso b), y 189 fracción I, inciso e), de la Ley
Orgánica del Poder Judicial de la Federación; así como el artículo
87 de la Ley General del Sistema de Medios de Impugnación en
Materia Electoral, por tratarse de un juicio de revisión
constitucional electoral, promovido por un partido político contra
una resolución proveniente de una autoridad jurisdiccional de una
entidad federativa que resolvió una controversia surgida durante
la etapa de organización (preparación) de comicios locales.
SEGUNDO.- La parte actora hace valer como agravios los
siguientes:
"Primero.- El C. Magistrado responsable, en la resolución por él emitida, nos
causa agravios, mismos que se contienen en el Considerando Tercero, y
que fue concebido en los siguientes términos: (Como ya fue transcrita
textualmente en el resultando II, de esta sentencia, se omite su
reproducción).
Ahora bien C. C. Magistrados Electorales que integran la Sala Superior del
Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, como les será fácil
inferir, el Magistrado del Tribunal Electoral de Guanajuato, responsable,
dando muestras sobradas de que conoce muy bien los vericuetos formales
de la ley, agravió, desde luego al partido político que represento, pero sobre
todo a la sociedad y pueblo guanajuatense, toda vez que si bien es verdad
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que invoca el artículo primero del Código de Instituciones y Procedimientos
Electorales para el Estado de Guanajuato, el cual a la letra dice: "Las
disposiciones de este Código son de orden público y reglamentan la
Constitución Política del Estado de Guanajuato, relativos a garantizar el
ejercicio de los derechos políticos de los ciudadanos; la organización
funciones y prerrogativas de los partidos políticos, regular la preparación,
desarrollo, vigilancia y calificación de los procesos electorales ordinarios y
extraordinarios, que se celebran para elegir gobernador, diputados al
Congreso del Estado y miembros de los Ayuntamientos", no menos cierto es
que el artículo de marras, está previniendo, a la sociedad, a los partidos
políticos, al Estado, y desde luego a las autoridades y sobre todo electorales,
de que las disposiciones contenidas en el Código aludido, tienen la
característica de ser de ORDEN PUBLICO, lo que quiere decir, que se debe
a la hora de aplicar e interpretar el dicho Código, justamente el interés
público, esto es el interés de la sociedad y de los guanajuatenses, mismos
que para ejercer sus derechos políticos, se expresan por medio de entes de
interés público, que son los partidos políticos. Por lo tanto, el C. Magistrado
nos agravia al no aplicar con justicia el mencionado artículo primero.
Por otro lado el Magistrado responsable también nos agravia, al no
considerar la problemática jurídico política, que nuestro partido ha vivido con
relación a los integrantes del Consejo Municipal Electoral de Irapuato,
Guanajuato, y en especial con el Presidente de dicho órgano electoral y en
menor medida, con la C. Secretario del propio Consejo, pues en nuestro
escrito de recurso de revisión, le hicimos saber que el Consejo Municipal
Electoral referido, así como el funcionario cabeza del mismo, de diversas
formas y maneras nos estuvo hostigando, de tal modo que expresó en varias
ocasiones que por sus puros caprichos, no se le daría el registro a la planilla
presentada por nuestro partido para renovar el Ayuntamiento del municipio
aludido. Todo lo anterior, el C. Magistrado, si de verdad hubiese aplicado el
artículo primero, con la justicia que debiera, hubiese concluido que el
suscrito como representante del partido, desempeño esa honrosa función,
en aras de la convivencia social, en aras también del pluralismo político, en
aras, asimismo de la democracia electoral y como sistema de vida. El
Magistrado responsable debió analizar, todo el conjunto, pues el suscrito no
soy ningún profesional, dedicado a la política, sino que me desempeño y
vivo del trabajo de albañil, lo que revela que como es claro, mi desarrollo en
la cultura política, no es todo lo adecuado que quisiera. Por otra parte, si le
estoy haciendo saber al Magistrado que no tengo acceso a la documental
pública, consistente en el acta de fecha 3 de mayo del año en curso, emitida
por el Consejo Municipal Electoral de Irapuato, es porque así es, cuando yo
pedí la copia certificada de la resolución, los ánimos de las autoridades
electorales, no eran nada favorables ni para el suscrito, ni para mi partido y
me la negaron. Si bien es cierto, que como dice el Magistrado, en los autos
aparece que yo signé de conformidad la recepción de una copia,
indudablemente que los señores consejeros, pensaron en darme la dicha
copia, o a lo mejor me dieron, el hecho es de que yo estaba sumamente
molesto e indignado por la razón de que no nos habían dado el registro,
aparte, de que en ese momento yo me sentía menoscabado
psicológicamente, pues vuelvo a repetir que el Presidente del Consejo, en
varias oportunidades manifestó: "que no nos daría el registro", aunado a lo
anterior, todo lo que esto conlleva en el sentido de que cada que hago una
solicitud para tener acceso a los documentos, se presentan fricciones con la
autoridad del Consejo Municipal Electoral de Irapuato. Así pues, el
Magistrado responsable del Tribunal Estatal Electoral de Guanajuato nos
agravia al mal aplicar los artículos 325 trescientos veinticinco y 326
trescientos veintiséis, en sus fracciones IV cuarta, respectivamente del
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Código de Instituciones y Procedimientos Electorales para el Estado de
Guanajuato, toda vez que como de la misma resolución dictada por él, se ve
tuvo al alcance de su jurisdicción, las pruebas correspondientes, mismas
que anexé y que además expuse claramente el porqué en el momento de la
presentación del recurso no las podía acompañar; asimismo, como ya quedó
establecido violentó el artículo 326 trescientos veintiséis en su fracción
señalada, toda vez que mal aplicó ese dispositivo, pues jamás debió
declarar improcedente el recurso, sino entrar al estudio del fondo del
mismo".
TERCERO.- El estudio de los anteriores agravios permite arribar
a las siguientes consideraciones jurídicas:
De la resolución impugnada, transcrita en el resultando segundo
de esta ejecutoria, se advierte que el Magistrado del Tribunal
Electoral responsable sobreseyó en el recurso de revisión
interpuesto por el Partido quejoso, con base en lo que dispone la
fracción IV del artículo 326 del Código de Instituciones y
Procedimientos Electorales del Estado de Guanajuato, por
considerar se surtía la causal de improcedencia prevista por el
artículo 325 fracción IV del propio Código de Instituciones y
Procedimientos Electorales del Estado de Guanajuato, en razón
de que dicho Partido inconforme no aportó, como era su
obligación, las siguientes probanzas: a). Copia certificada de la
resolución pronunciada el tres de mayo de mil novecientos
noventa y siete, por el Consejo Municipal Electoral de Irapuato,
Guanajuato, mediante la cual dicho Consejo negó el registro a la
planilla propuesta por el Partido inconforme, para contender en
los comicios del próximo seis de julio, para ocupar diversos
cargos en el Ayuntamiento de Irapuato, Guanajuato; pues que,
agregó, en el caso era trascendente que tal elemento de
convicción lo hubiese aportado el recurrente porque en él,
fundamentalmente, se apoyaban los agravios y, además,
constaba en autos, que tal probanza obraba en su poder, por
cuya circunstancia debió de aportarla con su escrito inicial, como
lo
establece
el
artículo
321
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de
la
legislación
citada,
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puntualizando, igualmente, que si bien existía en autos copia
certificada de la resolución de mérito, porque el propio Tribunal la
había solicitado a la responsable, esa circunstancia no eximió al
promovente del recurso, de cumplir con su obligación procesal de
presentar
las
pruebas,
cuya
inobservancia
originaba
la
improcedencia de dicho recurso; b). La documental que
acreditara que el Partido inconforme presentó todos los
documentos que señala el artículo 179 del propio Ordenamiento
legal, ante la autoridad entonces responsable (Consejo Municipal
Electoral de Irapuato, Guanajuato), pudiendo haber presentado la
razón de recibido que obrase en la copia de solicitud de registro
de planilla presentada ante el organismo electoral recurrido, en
donde constaran los anexos que acompañó a dicha solicitud de
registro; y, c). Copia certificada de la resolución emitida por la
Cuarta Sala del Tribunal Estatal Electoral (que sirvió de apoyo
para que el Consejo Local Municipal, entonces responsable,
dictara la resolución recurrida), pues que, concluyó el Magistrado
del Tribunal Estatal Electoral, sin tales documentos se veía
imposibilitado para examinar los agravios esgrimidos, ya que
dichos agravios debían relacionarse con las pruebas aludidas
que resultaban indispensables para emitir un juicio conforme a
derecho.
Ahora bien, cabe estimar que tal apreciación del Magistrado del
Tribunal responsable es parcialmente errónea, por cuanto a que
si el Partido inconforme no acompañó a su escrito recursal,
pudiendo haberlo hecho, copia certificada de la resolución del
tres de mayo del año en curso, cuya legalidad se debatió a través
del recurso, tal omisión, por sí sola, resultaría insuficiente para
declarar la improcedencia del recurso, dado que, si como lo
señala la propia autoridad enjuiciada, tal probanza se la había
remitido la autoridad entonces responsable, ello la facultaba para
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que, de ser posible, la examinara con independencia de que se la
hubiese hecho llegar quien no estaba obligada a hacerlo, dado
que, lo importante es que dicho elemento de convicción lo tenía a
su alcance al resolver el asunto que se le sometió a su
consideración, pues, en tal supuesto, opera la figura jurídica de la
adquisición procesal, que consiste en que como las pruebas de
una de las partes pueden resultar benéficas a los intereses de la
contraria del oferente, así como a los del colitigante, las
autoridades están obligadas a examinar y valorar las pruebas
que obren en autos, a fin de obtener con el resultado de esos
medios de convicción, la verdad histórica que debe prevalecer en
el caso justiciable, puesto que las pruebas rendidas por una de
las partes, no sólo a ella aprovechan, sino también a todas las
demás, hayan o no participado en la rendición de las mismas.
Sin embargo, no obstante que el relatado proceder del
Magistrado del Tribunal responsable sea incorrecto, el mismo
deviene irrelevante, ya que, de todas suertes, deben prevalecer,
por acertadas, las restantes consideraciones que vertió dicha
autoridad en sustento de su fallo, las cuales bastan para sostener
su sentido, porque, en efecto, el Partido inconforme no
acompañó a su recurso las probanzas que evidenciaran lo
fundado de sus agravios, como son aquéllas que acreditaran que
cuando se formuló la solicitud de registro de la planilla a que se
hizo mención con anterioridad, se cumplieron la totalidad de los
requisitos que señala el artículo 179 del Código de Instituciones y
Procedimientos Electorales del Estado de Guanajuato (relativos a
que a la solicitud debía acompañarse de la declaración de
aceptación de la candidatura; que la solicitud se debía formular
bajo protesta de decir verdad; indicarse el tiempo de militancia de
los candidatos en el Partido, copia de su acta de nacimiento y de
la credencial para votar, así como, en su caso, constancias de
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residencia de los propietarios y suplentes), ello en virtud de que
en la resolución recurrida que negó el registro de planilla de
candidatos
a
miembros
del
Ayuntamiento
de
Irapuato,
Guanajuato, postulados por el Partido Popular Socialista,
aparece que tal negativa obedeció, entre otras cosas, a que faltó
de entregarse la documentación que en la propia resolución se
describe (copias de actas de nacimiento, de constancia de
residencia, etcétera), desprendiéndose del propio acuerdo, del
que por cierto obra copia certificada a fojas 57 a 60 de los autos,
que el mismo se dictó en cumplimiento de la diversa resolución
emitida el veintinueve de abril de mil novecientos noventa y siete
por la Cuarta Sala Unitaria del Tribunal Estatal Electoral del
Estado de Guanajuato, de cuya resolución, el Partido impugnante
tampoco aportó copia certificada del fallo relativo, para, en este
supuesto, ver los alcances jurídicos que emanaron de la propia
resolución; probanzas estas últimas que, como lo apreció el
Magistrado del Tribunal responsable, resultaban trascendentes
para la decisión del recurso de revisión, por cuanto a que, los
agravios hechos valer versaron, entre otras cosas, en que,
oportunamente
se
había
acompañado
la
documentación
necesaria para obtener el registro de la planilla de referencia, así
como que la autoridad recurrida (Consejo Municipal Electoral de
Irapuato, Guanajuato), debió acatar la resolución dictada por la
Cuarta Sala Unitaria del Tribunal Electoral, cuyos asertos no
demostró ante el Tribunal Electoral responsable, ante quien no
ofreció probanza alguna encaminada a comprobar la veracidad
de tales agravios, ya que la única que propuso, sin aportarla
materialmente, fue la concerniente a la resolución recurrida, de
tres de mayo del presente año.
En tales condiciones, es claro que, como lo concluyó el
Magistrado del Tribunal responsable en la resolución combatida,
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se surte la causal de improcedencia del recurso de revisión
intentado, prevista por la fracción IV del artículo 325 del Código
de Instituciones y Procedimientos Electorales del Estado de
Guanajuato, al no haberse aportado los elementos necesarios,
indispensables, que demostraran lo fundado de los agravios
aducidos, lo que justifica el sobreseimiento del mismo, al tenor de
lo dispuesto por la fracción IV del artículo 326 del propio
Ordenamiento; sin que puedan atenderse los motivos de
inconformidad en los que se arguye que al presentarse el recurso
se indicó que el Presidente del Consejo Municipal Electoral,
entonces responsable, de diversa manera estuvo hostigando al
promovente del recurso; quien se sentía "menoscabado"; que el
Magistrado Unitario del Tribunal responsable, debió tomar en
consideración que dicho promovente, por ser albañil, carece del
desarrollo cultural deseado, dado que esas expresiones y otras
semejantes que se externan, no reúnen los requisitos para
estimarse como verdaderos agravios, en tanto que, no son los
agravios de hecho, sino los de derecho, los que pueden ser
examinados, esto es, los agravios deben ser, siempre,
consecuencia de una violación de la ley, pues aunque una
resolución o sentencia cause perjuicio, por muy grave que sea,
mientras no se compruebe que ha sido pronunciada con
infracción a disposiciones legales, la misma no puede ser
alterada.
Así visto el asunto, se impone, con base en lo que dispone el
artículo 93 de la Ley General del Sistema de Medios de
Impugnación en Materia Electoral, confirmar la resolución
impugnada.
Por lo expuesto y fundado es de resolverse y SE RESUELVE:
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ÚNICO.- Se confirma la resolución impugnada, dictada por el
Magistrado de la Segunda Sala Unitaria del Tribunal Estatal
Electoral del Estado de Guanajuato, en el expediente 004/97, que
decretó el sobreseimiento en el recurso de revisión interpuesto
por Salvador Gallardo Bravo, como representante del Partido
Popular Socialista, contra la resolución de tres de mayo de mil
novecientos noventa y siete, pronunciada por el Consejo
Municipal Electoral de Irapuato, Guanajuato, que negó el registro
a la planilla propuesta por el Partido inconforme, para contender
en los comicios del próximo seis de julio para ocupar diversos
cargos en el Ayuntamiento de Irapuato, Guanajuato, por
considerarse improcedente dicho recurso.
Notifíquese a las partes la presente resolución en los términos
de ley; devuélvanse a la autoridad responsable los documentos
atinentes, después de lo cual archívese el expediente como
asunto total y definitivamente concluido.
Así, por Unanimidad de votos, lo resolvieron y firmaron los
señores Magistrados José Luis de la Peza Muñoz Cano, Leonel
Castillo González, Eloy Fuentes Cerda, Alfonsina Berta Navarro
Hidalgo, quien fue la ponente, José Fernando Ojesto Martínez
Porcayo, José de Jesús Orozco Henríquez y Mauro Miguel
Reyes Zapata, quienes integran la Sala Superior del Tribunal
Electoral del Poder Judicial de la Federación, ante el Secretario
General de Acuerdos que da fe.
(Firmas)
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