HISTORIA DE LA FILOSOFÍA LA FILOSOFÍA EMPIRISTA Siglos XVIII DEFINICIÓN Es una corriente filosófica del siglo XVII paralela al racionalismo cuyos principales representantes son ingleses. Empirista es, en términos generales, toda filosofía según la cual el origen y el valor de nuestros conocimientos depende de la experiencia CARACTERÍSTICAS 1. EL ORIGEN DEL CONOCIMIENTO ES LA EXPERIENCIA. La mente es una página en blanco en el que todos los conocimientos tienen que ser escritos por la experiencia. 2. El criterio de verdad empirista es la contrastación con la experiencia, la reducción de mis ideas a una impresión, sensación. 3. El objeto del conocimiento son las ideas. La mente se relaciona únicamente con las ideas, las representaciones de las cosas. En esto coinciden con los racionalistas, adoptando también una actitud subjetivista 4. NEGACIÓN DE LAS IDEAS INNATAS. La mente es pasiva, puramente receptiva. 5. El método empirista es el método de Newton: observación, inducción, deducción, contrastación. 6. Las ciencias naturales y su método experimental servirán como modelo a la filosofía empirista 7. Se interesan por el valor técnico-práctico del conocimiento, orientado a la resolución de problemas humanos, más que por el conocimiento en sí. 8. La RAZÓN tiene un carácter eminentemente práctico y crítico. 9. Imposibilidad de un conocimiento universal, necesario. Si la experiencia sensible produce un conocimiento limitado y particular, nunca podremos llegar a un conocimiento científico de lo que es la realidad. 10. El límite y el alcance del conocimiento humano será un tema preferente para los empiristas. Si no podemos ir más allá de la experiencia sensible, de nuestras impresiones, cualquier realidad suprasensible es incognoscible: Dios, Alma, Mundo. Bastará un conocimiento probable y un asentimiento (creencia o belief) para afirmar la existencia de estas realidades. REPRESENTANTES Francis Bacon (1551-1626) John Locke (1685-1704) David Hume (1711-1776) George Berkeley (1685.1753) Isaac Newton (1642-1727) También se suele caracterizar el empirismo inglés contraponiéndolo al racionalismo continental. Ambos coinciden en señalar que el objeto del conocimiento son las ideas, pero mientras que los racionalistas sostienen el origen innato de las mismas, los empiristas consideran que todas las ideas proceden de la experiencia 1 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA John LOCKE BIOGRAFÍA Nacido en Bristol, 1632. De familia liberal, defendió siempre el liberalismo y los ideales ilustrados de racionalidad, tolerancia, filantropía y libertad religiosa. Estudió teología, química y medicina y viajó por Holanda, Francia y Alemania. Murió en 1704, a los 72 años. OBRAS: Ensayo sobre el entendimiento humano (1690) Dos tratados sobre el gobierno civil (1690) La racionalidad del cristianismo (1695) Carta sobre la tolerancia DOCTRINA CONCEPTO, ORIGEN y CLASE DE IDEAS Las ideas son el objeto del pensamiento, Se caracterizan por: 1. La inmediatez. Se imponen directamente a nuestra percepción. 2. Son imágenes o representaciones de la realidad exterior. No existen las ideas innatas. Nuestra mente es como un tabla en blanco que se va llenando con los contenidos de la experiencia. Las facultades mentales que configuran las ideas son : la percepción (accede a los datos de la experiencia) ; la retención o memoria (conserva las ideas) ; la comparación (para distinguir unas ideas de otras) ; la composición ( nos permite asociar unas ideas con otras) y la abstracción (genera las ideas universales). Hay dos clases de ideas: Las ideas simples y las ideas complejas Las ideas simples proceden de la experiencia y el entendimiento las recibe de un modo totalmente pasivo. Se distinguen, según su procedencia: 1. Ideas de origen sensorial externo o Ideas de Sensación (se originan en la experiencia con objetos exteriores) Pueden ser Ideas de cualidades primaria ( figura, tamaño, extensión. Son objetivas, y existen en los cuerpos; e Ideas de cualidades secundarias ( colores, sonidos, olores que tienen sentido para el sujeto) 2. Ideas de reflexión (las sensaciones que tenemos de nuestro funcionamiento interno: pensamiento, dolor...). Es el conocimiento de las ideas que se hallan en la meNTE Ideas compuestas: Las restantes ideas -las complejas- surgen por combinación de ideas simples. En este caso el entendimiento adopta un papel activo, combinando y relacionando ideas simples. Las ideas complejas son: Sustancia (idea de una cosas que puede subsistir por sí) Modos (Estados o propiedades de las cosas) Accidentes Relaciones (proceden de la comparación de las ideas simples) Causa, Identidad Universales (unificación de una colección de ideas) 2 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA ONTOLOGÍA A diferencia de Descartes, Locke nunca dudó de que existiera una realidad exterior a nuestras ideas. El mero hecho de tener una idea ya supone, según su propia definición de «idea», la existencia de una realidad exterior que la idea representa. Los tres grandes ámbitos de la realidad son: • EL «YO», del que tenemos certeza intuitiva (= «Pienso, luego existo»). • DIOS, del que tenemos certeza demostrativa (puede demostrarse a partir del principio de causalidad). • OBJETOS FÍSICOS, de los que tenemos certeza sensitiva (nuestras sensaciones de objetos exteriores son producidas, causadas por ellos. Mientras Dios es la causa última de nuestra existencia, los objetos físicos provocan nuestras sensaciones. GRADOS Y LÍMITES DEL CONOCIMIENTO Hay tres grados de conocimiento: La Intuición (el conocimiento directo de nuestras ideas, es la forma básica del conocimiento); La Demostración y la Sensación ( información obtenida a través de los sentidos) De los objetos sólo percibimos cualidades aisladas, impresiones individuales, sueltas e inconexas: tamaño, color, olor, figura, etc. El objeto no se reduce a ninguna de esas impresiones, pero suponemos que debe haber algo por debajo de esas cualidades que les sirva de soporte -vuelta al sentido etimológico-. La sustancia, como soporte de las cualidades, es incognoscible, algo misterioso, inespecífico. Consecuencia: Desconocemos la estructura profunda y la sustancia de los objetos; sólo conocemos lo que la experiencia nos muestra de ellos: un conjunto de cualidades sensibles. La experiencia, por tanto, es origen y límite de nuestro conocimiento. EL PENSAMIENTO POLÍTICO Locke tuvo un enorme influjo en el origen de la filosofía política liberal. Sus ideas fueron recogidas por Montesquieu, se plasmaron en la revolución americana y en toda la corriente liberal progresista que se opuso al absolutismo político en el XVIII. Intentó dejar claro (en el "Tratado del gobierno civil") que si al poder se le atribuye un origen divino, no podremos sostener entonces que los seres humanos son libres e iguales por naturaleza, una de las reivindicaciones políticas fundamentales en Locke. Como los sofistas, Locke parte de la distinción entre naturaleza y convención. Antes de establecer las normas que regirán la sociedad política, es preciso conocer cuál es el estado natural del ser humano. En estado natural, los hombres son libres e iguales entre sí ?recoge la tesis renacentista del hombre naturalmente bueno, como Rousseau, mientras se opone a la afirmación contraria, recogida por Hobbes del protestantismo?. Pero en un estado natural donde no existe organización política, los humanos pueden violar derechos y libertades de los demás -el hombre no es necesariamente bueno en estado natural-. Sin embargo, en estado natural la razón ayuda a descubrir una ley moral natural, que impone unos límites a la conciencia y conducta de los seres humanos. Derechos naturales humanos. Además de la ley moral, los hombres poseen naturalmente ciertos derechos como el derecho a la propiedad, cuyo fundamento es el trabajo. 3 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA LA SOCIEDAD POLÍTICA Se necesita una organización política y una ley objetiva que solucione los conflictos y deficiencias del estado natural. Por tanto: • Locke no cree que la sociedad política sea antinatural, contraria a la naturaleza: es, más bien, algo útil y adecuado para hacer posible el disfrute de los derechos naturales. • El consenso constituye el único fundamento racional de la sociedad política. El acuerdo, el pacto consentido por todos los individuos origina la sociedad política. Mediante este pacto, formal o implícito, los individuos renuncian a parte de su libertad para ganar en seguridad, y se someten de buen grado a la voluntad de la mayoría. • EL ESTADO LIBERAL Los representantes del poder político reciben del pueblo su poder y son responsables ante el pueblo del desempeño de su función, que consiste en promover el bien común. Debe estar constituido por el poder legislativo, el poder judicial y el poder ejecutivo. El poder es recibido del pueblo. Este tiene derecho a rebelarse contra cualquier sistema político que le limite sus derechos naturales. LA RELIGIÓN Locke defiende el deísmo como la religión natural humana. La idea de un ser creador, omnipotente no requiere revelación divina, ni es necesario una institución religiosa que la sostenga. La propia racionalidad del hombre demuestra la necesidad de una primera causa generador del mundo. Afirma la separación del Estado y de la religión. La función del estado es velar por la vida, la integridad, las propiedades y libertades de sus ciudadanos. Pero nunca la salvación de su alma. El Estado aconfesional deberá garantizar la libertad de culto Rechaza además el tipo de religión organizada en torno a los rituales , dogmas, milagros y ceremonias irracionales que se asocian más al miedo y a la superstición que a una religión propiamente racional. 4 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA GEORGE BERKELEY BIOGRAFÍA Nació en Dysert (Irlanda) en 1685. Graduado en Oxford, fue nombrado Obispo de Cloyne, En 1752, se estableció en Oxford. Murió en 1753. OBRAS Tratado sobre los principios del conocimiento humano 1710 Tres diálogos de Hylas y Philonus. 1713 DOCTRINA ESSE EST PERCIPI EXISTIR ES SER PERCIBIDO. El problema de la relación entre las ideas y las cosas no existe. No es necesario afirmar la existencia de una realidad externa que cause mis percepciones. Hay una identidad entre mis ideas y las cosas que existen fuera de mi mente. Estrictamente hablando, solo podemos tener sensación de la extensión (y de la figura y del movimiento), a través de las cualidades secundarias. Pero lo que realmente podemos afirmar es que tenemos constancia de nuestras percepciones, no si existe el objeto extramentalmente. Los objetos percibidos son los únicos acerca de los que se puede conocer y afirmar su existencia. El único tipo de sustancias que existen son las espirituales. El Universo es inmaterial y esta formado de espíritus percipientes : los finitos (almas) y los infinitos (Dios) Dios es la causa de nuestras percepciones, la garantía de que las ideas que tengo sobre la realidad y de las cualidades de los objetos que percibo permanecen inalterables . La existencia de Dios esta demostrada por la necesidad de que sea la causa de nuestras experiencias. 5 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA DAVID HUME BIOGRAFÍA Nació en 1711, hijo de un terrateniente escocés. Comerciante primero, la afición por las letras y la filosofía terminó acaparando sus intereses. Murió en 1776, a los 65 años. Enorme influjo posterior, precursor de Kant y de aspectos fundamentales de su doctrina. OBRAS Tratado acerca de la naturaleza humana Investigación sobre el entendimiento humano Investigación sobre los principios de la moral DOCTRINA TEORÍA DEL CONOCIMIENTO Todo nuestro conocimiento se forma a partir de las percepciones. Las percepciones son los contenidos de nuestra conciencia y los actos en que se presentan tales contenidos. Las percepciones se pueden dividir en impresiones e ideas. Las Impresiones son los actos inmediatos de la experiencia. Las impresiones de sensación son las cualidades de los objetos del mundo externo. Las impresiones de reflexión son nuestros estados de conciencia interna Las Ideas son copias o huellas derivadas de las impresiones cuando estas han desaparecido. Las ideas se diferencian de las impresiones en que son más débiles que las impresiones y que pueden aparecer un orden temporal distinto. No existen las ideas innatas. Las impresiones de reflexión se derivan de las ideas El proceso del conocimiento es el siguiente: las impresiones de sensación surgen en nuestra conciencia a partir de una causa externa desconocida. Cuando estas desaparecen dejan una huella en la mente que reaparecen (debido a la memoria o a la imaginación) en forma de ideas. Estas ideas son el origen a su vez de las impresiones de reflexión. La mente puede producir por sí misma ideas complejas a partir de las ideas simples, siguiendo las tres leyes de asociación psíquica : 1. Ley de semejanza. Nos permite agrupar ideas en virtud de un parecido o identidad. 2. Ley de contigüidad en el espacio y el tiempo. Nuestra mente tiende a relacionar ideas que aparecen cercanas unas a otras en el tiempo y el espacio. 3. Ley de causalidad (relación causa-efecto) Hay dos tipos de conocimientos: las relaciones de ideas y el conocimiento de hechos 1. Las relaciones entre ideas. Son conocimientos que no se refieren a hechos de la realidad, se basan en el principio de no contradicción y son siempre verdaderas. Lo forman todos los enunciados de las matemáticas. Son las proposiciones analíticas. 2. El conocimiento de hechos. Se refieren a hechos de la realidad, obtenidos a partir de las impresiones. La verdad de cada enunciado debe ser contrastado con la experiencia. Lo forman todos los enunciados de las ciencias empíricas, Solo genera opiniones que se fundamentan en el hábito y la costumbre, un cierta disposición psicológica. 6 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA CONSENCUENCIAS EPISTEMOLÓGICAS. El criterio de verdad empirista. Para saber si una idea es verdadera, basta con comprobar de qué impresión procede. Las ideas que no se corresponden con ninguna impresión son pura ficción o fantasía. El límite y alcance del conocimiento son las impresiones que nos suministran los sentidos. El problema del método. El método deductivo e inductivo no pueden ofrecer criterios válidos para establecer conocimientos fiables sobre lo real. La inducción es un proceso siempre incompleto porque establecemos leyes universales a partir de un número limitado de observaciones particulares. El principio de causalidad. Aplicado a la idea de causa y al conocimiento de hechos: o Nuestro conocimiento de hechos queda limitado a las impresiones actuales ?lo que vemos, oímos, etc. y a nuestros recuerdos de impresiones pasadas. Pero no puede haber conocimiento cierto del futuro porque no tenemos impresión alguna de lo que sucederá en el futuro. o Sin embargo, constantemente hacemos predicciones sobre el futuro: si no estudiamos será difícil encontrar un buen trabajo; si no buscamos cobijo nos mojaremos, etc. Esto sucede porque continuamente hacemos inferencias causales: ciertos trabajos existen porque hay gente preparada para realizarlos, y sin preparación es imposible acceder a ellos; el agua moja y llueve con frecuencia, etc. Por tanto, o La idea de causa es la base de todas nuestras inferencias acerca de hechos de los que no tenemos impresión alguna. Y entendemos, habitualmente, la conexión causal como una conexión necesaria entre el efecto y la causa. Después de observar en muchos casos que el fuego calienta, podemos predecir que el agua hervirá si permanece cierto tiempo sobre el fuego. Dicho efecto se seguirá necesariamente de su causa. o Sin embargo, nuestra experiencia no justifica el establecimiento de conexiones necesarias entre fenómenos: ¿En qué impresión está basada la idea de «conexión necesaria entre fenómenos»? En ninguna, excepto en el número de veces que hemos visto cómo el fuego calentaba agua o la lluvia mojaba. Pero esto sólo significa que, en el pasado, después de un fenómeno vino otro, no que siempre y necesariamente la misma causa produzca idénticos efectos. Hablando con propiedad, no sabemos que el fuego calentará el agua; sólo lo creemos. Por tanto, nuestro pretendido conocimiento del futuro sólo es suposición y creencia, nada más. Aunque el hábito y la costumbre nos hagan estar completamente seguros de que tales hechos sucederán. Pero nuestras certezas no siempre se corresponden con las leyes naturales Límites y alcance de nuestros conocimientos basados en las inferencias causales. Aunque nuestro conocimiento de hechos no observados sólo se base en creencias, en la práctica esto resulta suficiente para vivir sin problemas. Pero al científico le interesa saber hasta dónde puede llevar sus inferencias causales para obtener conocimientos verdaderos sobre la realidad. Hume recurre en este caso a la costumbre como mecanismo psicológico para averiguar hasta dónde pueden llegar nuestras inferencias causales: las inferencias sólo funcionan por impresiones: como fuego y calor van unidos con frecuencia en la experiencia, podemos pasar de esa impresión a otras que venían asociadas a ella. Es decir: «De unas impresiones podemos inferir otras, pero no podemos pasar de una impresión a otra cosa de la que nunca hemos tenido impresión». El fundamento de nuestro conocimiento de hechos es la costumbre, el hábito que engendra una creencia. La creencia es un sentimiento, un modo determinado de pensar las cosas. La causalidad no es algo real que se de en el mundo sino que es una ley psicológica de nuestro pensamiento sobre la realidad. Locke afirma que este principio de causalidad tendría que ser verdadero porque de lo contrario nos encontraríamos con que algo pueda existir sin causa. Y eso sería absurdo 7 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA LA SUSTANCIA Para Hume la idea de sustancia era una idea compleja surgida por la actividad asociativa de la mente. Pero nadie tiene una impresión de sustancia, ninguna experiencia de sustancia. Solo aparecen ante nuestra mente impresiones agrupadas siempre de una manera determinada. La idea de sustancia y de realidad extramental. Para Hume, es producto de la dinámica combinatoria de la mente y no de las impresiones. No corresponde a nada real. Hume rechaza el argumento lockeano que reconocía la existencia de una realidad extramental porque era la causa de nuestra «idea» o convicción sobre la existencia del mundo exterior. Lo rechaza porque Locke pretende inferir de impresiones particulares una pretendida realidad que va más allá de ellas y de la que no tenemos impresión o experiencia alguna. Por tanto, creer que existe una realidad física distinta de nuestras impresiones no puede justificarse apelando a la idea de causa. La idea y existencia de Dios. Descartes y Locke recurrieron al principio de causalidad para demostrar que Dios existe. Pero Hume considera inválidos sus argumentos porque pretenden dar el salto de impresiones particulares a Dios, del que no tenemos impresión alguna. Para Hume es imposible averiguar si existe Dios o un mundo más allá de nuestras impresiones: nuestras nociones de Dios y de mundo exterior son un misterio, constituyen la frontera y el límite de nuestro conocimiento. La noción de yo o de identidad personal. Tanto racionalistas como empiristas (Locke, Berkeley) habían considerado indudable la existencia de un yo o sustancia cognoscente, pensante, origen de las acciones que atribuimos a humanos. Su existencia resultaba evidente por intuición inmediata, no por inferencia causal. Pero Hume halla un punto débil en esta argumentación: o o Hablar de un yo como sustancia o sujeto permanente de nuestros actos psíquicos no tiene justificación apelando a la experiencia, porque las impresiones son efímeras y se suceden unas a otras ininterrumpidamente. Si tuviésemos una impresión del yo, permanecería invariable y constante a lo largo de toda nuestra vida, pues hablamos del yo como un sustrato permanente de nuestras conductas y procesos mentales. Pero no existen impresiones constantes e invariables: unas se suceden a otras y no se dan todas al mismo tiempo. Y todos experimentamos una evolución y cambios radicales a lo largo de nuestra vida. No existe un yo como sustancia distinta de nuestras impresiones e ideas, como sujeto de nuestros actos psíquicos. Aunque todos tenemos conciencia de identidad personal mantenida a lo largo del tiempo y a través de las múltiples ideas e impresiones, esto no es más que un efecto de la memoria: la memoria nos permite recordar la conexión existente entre las múltiples impresiones. Pero la memoria sólo es un mecanismo útil para seguir la sucesión de impresiones, no una identidad. Esto no convencía ni al propio Hume, y adoptó una actitud escéptica al respecto. Fenomenismo y escepticismo El empirismo radical de Hume le llevó al fenomenismo y al escepticismo: las impresiones aisladas con el punto de partida absoluto de nuestro conocimiento, la única realidad incuestionable. Y entre las impresiones no cabe establecer más conexión que su contigüidad o sucesión espacio-temporal. Es imposible encontrar un fundamento real a la conexión entre percepciones o impresiones: ni conocemos una realidad exterior distinta de la suma de impresiones ni un sujeto con identidad personal: la realidad queda reducida a mera sucesión de fenómenos (etim.: lo que aparece/se muestra). El fenomenismo lleva a una actitud escéptica respecto a las capacidades de nuestro entendimiento: no podemos conocer nada más allá de las impresiones, ni establecer conexiones verdaderas y firmes entre ideas o fenómenos. 8 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA ÉTICA : EL EMOTIVISMO MORAL de Hume Todo grupo humano tiene algún código moral o conjunto de juicios mediante los cuales expresa su aprobación o reprobación de conductas y actitudes. Los grandes filósofos se han planteado antes o después cuál es el fundamento de nuestros juicios morales, cómo se originan y qué justifica nuestras aprobaciones o rechazos de conductas y acciones. El fundamento tradicional de la moral, desde los griegos: el entendimiento o la razón, que puede conocer el orden natural y derivar así normas de convivencia adecuadas. Por tanto, la adecuación al orden natural fundamenta nuestros juicios morales. Pero Hume opina que el conocimiento intelectual no puede ser el fundamento de nuestros juicios morales, porque la razón no puede determinar ni impedir nuestro comportamiento (p.ej.: por mucho que conozcamos de matemáticas, no nos sentimos obligados a aplicar ese conocimiento en la realidad). • El conocimiento de hechos o de relaciones entre ideas es útil para la vida pero no impulsa por sí mismo a actuar. • Y el conocimiento de los hechos simplemente nos informa de lo que sucede, pero no de lo que debe suceder o de la valoración moral que merece un suceso o actuación. • No presenciamos cosas tales como vicios, inmoralidades o iniquidades. Sólo tenemos noticia de ciertas acciones, intereses, motivos, propósitos o pensamientos. • El único hecho del que tenemos impresión clara es del sentimiento interior de aprobación o reprobación que ciertas conductas provocan en nosotros, pero no tenemos impresión de su justificación o fundamento racional. El sentimiento, único fundamento de los juicios morales Ni la razón, ni el entendimiento ni el conocimiento pueden servir de fundamento a los juicios morales: sólo el sentimiento es capaz de explicar por qué actuamos como lo hacemos y hacer comprensibles nuestras decisiones. Ante ciertas acciones o maneras de actuar experimentamos un sentimiento de aprobación o reprobación moral, y ese sentimiento es natural y desinteresado. Esta argumentación sobre los fundamentos de la moral es típica de una corriente de filósofos moralistas desarrollada a comienzos del XVIII en Inglaterra por Shaftesbury (1671-1713) y Hutcheson (1694-1746), con seguidores actuales adscritos a la doctrina que se conoce como motivismo moral. La simpatía (padecer con) es un sentimiento que experimentamos y observamos en los seres humanos cuando establecemos comunicación con los demás y nos cuentan lo que sienten. Esto nos permite colocarnos en su lugar (empatía) y sentir aprobación y desaprobación hacia determinados actos que benefician o perjudican a los demás. 9 HISTORIA DE LA FILOSOFÍA RELIGIÓN : Crítica a la religión natural y al deísmo Crítica a los argumentos que demuestran la existencia de Dios. Hume rechaza todo tipo de argumentos filosóficos que han intentado demostrar la existencia de Dios vía racional: 1. 2. 3. El argumento ontológico de San Anselmo y de Descartes. Deducir la existencia de Dios a partir de la idea de Dios es absurdo, porque no tenemos ninguna impresión de esa idea y porque también podemos concebir la idea de su no existencia. El argumento de Tomás de Aquino, basada en la experiencia de los efectos para deducir la causa, es igualmente absurdo. El principio de causalidad es producto de un hábito mental que rige como una ley de combinación de nuestras ideas. Y si creyéramos en que todo lo que sucede tiene una causa, podríamos prolongar hasta el infinito las causas que a su vez son causadas. Por que es absurdo pensar en que exista una primera causa incausada. El argumento cosmológico, basado en la idea de que hay un orden en el universo y que por lo tanto debe haber una causa inteligente de ese orden. (quinta vía de Tomás de Aquino). Podemos creer que existen otro tipo de causas que no se identifique con Dios. Crítica al deísmo. Hume niega que exista una «naturaleza humana» que pueda servir de base a la religión. Eso a lo que llamamos naturaleza no es más que un complejo de impulsos, instintos y pasiones, ordenados y fijados de cierta manera por unos principios cuya naturaleza última es en sí misma inexplicable. No existe un sentimiento religioso y la religión no es una superstición útil A la religión no se le puede encontrar ni fundamento ni explicación racional. Surge de los sentimientos, y son el temor, la ignorancia y el miedo a lo desconocido lo que la alimenta. Las creencias y los principios religiosos no son «más que sueños de hombres enfermos». Pero no existe una respuesta tajante y categórica al problema de la religión: constituye un enigma, un misterio. Una vez más, el resultado de la crítica humeana es el escepticismo y la incapacidad de ir más allá de lo que él considera límites naturales del conocimiento humano. Origen de la religión. La religión monoteísta surge del miedo y de la ignorancia de los pueblos, que adulan a un único dios con el fin de conseguir sus favores. Pero el monoteísmo es una religión peligrosa porque fomenta actitudes fanáticas e intolerantes y genera sentimientos destructivos entre los hombres. Si solo hay un único dios verdadero el pueblo se impone la necesidad de hacer creer a los demás que su verdad revelada es la única verdad. Esto históricamente ha generado sufrimientos en los seres humanos y muchos conflictos religiosos. . 10