De: cendoj Hora de envío: martes, 09 de octubre de 2012 12:49:30 Para: [email protected]; Carrera Judicial; Situaciones Especiales Asunto: LA REDUE INFORMA DERECHO MERCANTIL 12/12 Adjuntos: Sentencia C­321.pdf CONSEJO GENERAL DEL PODER JUDICIAL L A REDUE INFORMA Derecho de la Competencia, Propiedad Intelectual, Industrial y Mercantil Comunicado nº 12/2012 (Comunicado no oficial, sólo a título informativo) ENRIQUE GARCÍA-CHAMÓN CERVERA Audiencia Provincial de Alicante e.garcia­[email protected] JACINTO JOSÉ PÉREZ BENÍTEZ Audiencia Provincial de Pontevedra [email protected] CONTRATO DE TRANSPORTE AÉREO. DENEGACIÓN DE EMBARQUE. REGLAMENTO (CE) Nº 261/2004. Estimados/as compañeros/as: Os adjuntamos las sentencias del Tribunal de Justicia de fecha 4 de octubre de 2012, en los asuntos C­321/11 y C­22/11. La primera da respuesta a una cuestión prejudicial planteada en su día por el Juzgado de lo Mercantil nº 2 de La Coruña, en la que se preguntaba al Tribunal si dentro del concepto de “denegación de embarque”, empleado en el art. 2, j), en relación con los arts. 3.2 y 4.3, todos del Reglamento 261/2004, podía entenderse comprendido el supuesto en el que la compañía de transporte aéreo denegaba el embarque en un vuelo de conexión (contrato de transporte único con vuelos sucesivos y facturación conjunta del equipaje) por motivo de haber sufrido el vuelo anterior un retraso que impidió a los pasajeros llegar a tiempo al siguiente vuelo y no, por ejemplo, por un exceso de reservas. El Tribunal toma en cuenta los trabajos preparatorios del Reglamento e indaga sobre su finalidad, advirtiendo de que su propósito fue el de reducir el número de pasajeros a los que se deniega el embarque en contra de su voluntad, por lo que el concepto de “denegación de embarque” no tiene por qué identificarse con el de “overbooking” o exceso de reservas. Por tal razón, en el supuesto de hecho enjuiciado, considera el Tribunal que se ha producido una denegación de embarque en el sentido empleado en la norma. Seguidamente el TJ advierte, no obstante, de que es preciso también asegurarse de la inexistencia de motivos legítimos para que el transportista deniegue el embarque, tales como el empleo de documentos de viaje inadecuados o cuestiones de seguridad. Para los hechos del caso, la respuesta del Tribunal ha sido la siguiente: “Habida cuenta de las consideraciones expuestas, procede responder a la cuestión planteada que el artículo 2, letra j), del Reglamento nº 261/2004, puesto en relación con el artículo 3, apartado 2, del mismo Reglamento, debe interpretarse en el sentido de que está comprendida en el concepto de «denegación de embarque» una situación en la que, en el contexto de un contrato de transporte único que comprende varias reservas en vuelos inmediatamente sucesivos y para los cuales la facturación se ha realizado simultáneamente, un transportista aéreo deniega el embarque a ciertos pasajeros porque el primer vuelo incluido en la reserva ha experimentado un retraso imputable a ese transportista y este último ha previsto erróneamente que esos pasajeros no llegarán a tiempo para embarcar en el segundo vuelo.” Por su parte, la sentencia de 4 de octubre de 2012, recaída en el asunto C­22/11, analiza también el concepto de “denegación de embarque” del Reglamento (CE) nº 261/2004, referido a un supuesto en el que la causa de el retraso en la llegada al destino del pasajero demandante vino causada por la huelga producida en el aeropuerto de Barcelona en julio de 2006. La demanda fue presentada contra la compañía finlandesa Finnair, que a la sazón tuvo que reorganizar sus vuelos y programar un vuelo especial para llevar a los pasajeros a su destino. La demanda se interpuso ante un juzgado de Helsinki, que absolvió a la compañía, pero el tribunal de apelación estimó el recurso y declaró que en el supuesto de denegación de embarque se incluía un supuesto como el analizado, condenando al pago de una indemnización. En el marco del recurso de casación el Tribunal Supremo finlandés preguntó, en primer término, si el concepto de denegación de embarque se debía limitar a situaciones de exceso de reserva creadas por el transportista aéreo por razones económicas, o podía también aplicarse en casos en las que la denegación obedezca a otros motivos, por ejemplo de carácter operativo. La respuesta del Tribunal de Luxemburgo a la primera cuestión es coincidente con la de la sentencia primeramente referida, al contestar que el concepto de «denegación de embarque» a que se refieren los artículos 2, letra j), y 4 del Reglamento nº 261/2004, debe interpretarse en el sentido de que se refiere no sólo a las denegaciones de embarque debidas a situaciones de exceso de reserva, sino también a las denegaciones de embarque por otros motivos, como los motivos operativos. También preguntó el TS finlandés si la concurrencia de “circunstancias extraordinarias” que obligan al transportista a reorganizar vuelos posteriores puede justificar la denegación de embarque de un pasajero por haber reasignado a los pasajeros de otros vuelos. A ello responde el TJUE que no cabe admitir que un transportista aéreo pueda ampliar sensiblemente los supuestos en los que esté facultado para denegar justificadamente el embarque. El Tribunal afirma que las «circunstancias extraordinarias» del art. 15 sólo pueden referirse a «una aeronave determinada y en una fecha determinada», lo que no sucede en el supuesto en que se deniega el embarque a un pasajero por la reorganización de vuelos debida a circunstancias de ese tipo que han afectado a un vuelo anterior. En efecto, el concepto de «circunstancias extraordinarias» tiene por objeto limitar las obligaciones del transportista aéreo, incluso eximirlo de éstas, cuando el acontecimiento de que se trate no hubiera podido evitarse incluso si de hubieran adoptado todas las medidas razonables. Si dicho transportista se ve obligado a cancelar un vuelo previsto el día de una huelga del personal de un aeropuerto y después decide reorganizar sus vuelos posteriores, no puede en modo alguno considerarse que dicho transportista se haya visto obligado por la citada huelga a denegar el embarque a un pasajero que se ha presentado debidamente al embarque dos días después de la cancelación del vuelo. C­321/11: http://eur­lex.europa.eu/LexUriServ/LexUriServ.do?uri=CELEX:62011CJ0321:ES:HTML C­22/11: http://eur­lex.europa.eu/LexUriServ/LexUriServ.do?uri=CELEX:62011CJ0022:ES:HTML ENRIQUE GARCÍA­CHAMÓN CERVERA JACINTO JOSÉ PÉREZ BENÍTEZ