La Cantaora H. 1917. Óleo sobre lienzo Colección F. Luque

La Cantaora
H. 1917. Óleo sobre lienzo
Colección F. Luque Cabrera
Esta obra, pintada en la fase de madurez artística del autor, es un claro ejemplo del
dominio alcanzado por Diego López en el género del retrato. En esta ocasión el artista
retrata a una de sus modelos predilectas, María Romero Navarro, popularmente conocida
como “María la guapa”. Ella posa sentada, apoyando con sutileza su cabeza sobre su
mano izquierda, y viste una camisa blanca adornada con volantes en las mangas, mientras
se cubre parcialmente con un mantón negro. En esta pintura, el artista, de manera
excepcional, ha logrado obtener una representación global de la persona retratada,
tanto de su psicología interior como de su belleza. Otra circunstancia que se hace
evidente es la especial conexión que artista y modelo mantenían, hecho que también
se transmite directamente al público. A esta característica, fundamental para un género
como el retrato, se le une el virtuosismo en el empleo del color, lo que le otorga a la
imagen mayor viveza expresiva, además de una singular vibración lumínica. Este hecho
es apreciable en la resolución del fondo de la obra, finalizado con una amplia gradación
cromática del verde, aplicado mediante pinceladas de largo recorrido. De similar modo
ha resuelto la compleja representación de la indumentaria negra de la joven.
La niña del canario
1918. Óleo sobre lienzo
Colección F. Luque Cabrera
En este lienzo, de formato ovalado, pueden apreciarse las mejores aptitudes de Diego
López en lo que a la realización de retratos se refiere. En él destaca, sobre todo, el
manejo de un variado y vibrante colorido, dispuestos en combinaciones sorprendentes,
que el artista ha resuelto a partir de pinceladas de gran decisión, algunas, como en el
caso del fondo, de largo recorrido. Más certeras y suaves parecen las que conforman la
indumentaria de la joven, con las que consigue sutiles gradaciones cromáticas. A pesar
de tratarse de un retrato, la escena representada refleja una amable cotidianeidad, a ello
se le une la inusual posición de la modelo. Ésta, aún posando con las piernas recogidas,
como queriéndose adaptar al formato ovalado del lienzo, aparenta una gran naturalidad.
Esta posición del personaje y su brazo derecho, situado en primer término, hacen
destacar la figura sobre el lienzo de manera excepcional. En esta ocasión, Diego López
ha optado por retratar, una vez más, a María Romero Navarro,“María la guapa”, logrando
una perfecta captación psicológica del personaje, además de una particular interacción
con el espectador que observa la obra, al que dirige su mirada de manera directa.
Diego López García (Sevilla, 1875-1969)
Diego López García nació en Sevilla el 22 de febrero de 1875. En 1886, desde muy joven,
comenzó su formación como artista en la Academia de Bellas Artes de Sevilla. Aquí fue
donde maestros consagrados, como García Ramos o Eduardo Cano, le introdujeron en
la práctica de la pintura. Sus inicios como artista estuvieron encaminados a abrirse paso
entre certámenes y exposiciones, hasta que, en 1902 y 1908, el Ayuntamiento de Sevilla
premió dos de sus carteles conmemorativos de las Fiestas Mayores de Sevilla, hecho que
le llevó a ser reconocido como un reputado cartelista. En lo referente a otros géneros artísticos, Diego López también dio notables muestras de su talento, como en la Exposición
Nacional celebrada en 1908, en la que obtuvo la tercera medalla por un retrato. Durante
estos años enriqueció su estilo realizando viajes por Italia, Francia, Alemania, Inglaterra,
Estados Unidos o México. En algunos de estos países pudo admirarse su obra, incluso
fueron destacadas en la exposición de 1907 en Londres y en el Certamen de Pintura
Española en México celebrado en 1911.
En 1921 contrajo matrimonio con María de Palma García, pasando a instalar su residencia y su taller en un palacio modernista, situado en la calle Gerona, de Sevilla. En 1956
su mujer fallece y decide trasladarse de domicilio, circunstancia que paralelamente motivó el depósito de una serie de obras a instituciones culturales de su ciudad, destacando
entre ellas La niña del canario, aquí expuesta, o Sevillana en su patio, ubicada en la sala XIII
del museo. Sus últimos años de vida transcurrieron en el popular barrio sevillano del Tiro
de Línea, hasta su muerte el 23 de junio de 1969.
Diego López fue un pintor que vivió intensamente en los ambientes artísticos y
culturales tanto de Sevilla como de Madrid, tal y como muestran las relaciones con otros
artistas del momento que por aquellos años trabajaban en el vecino taller de La Casa
de los Artistas, situado en la calle feria, o la estrecha amistad que le unía con el escritor
Valle Inclán en el Ateneo madrileño. Del mismo modo fue un gran admirador de la obra
de pintores coetáneos como Gonzalo Bilbao, Gustavo Bacarisas, José María Labrador,
González Santos o José Arpa, además de compartir amistad con otros como Antonio
Illanes, Félix Lacárcel y Joaquín Sorolla. De todos ellos pueden observarse en su obra
paralelismos y conexiones, tanto en lo estilístico como en lo técnico, además de la predilección manifiesta por la representación de temas concretos. Su obra estaba dominada,
fundamentalmente, por la representación del paisaje, el bodegón y, sobre todo, el retrato,
donde sobresalió y alcanzó cierta fama. En sus retratos, delicados y sutiles, es habitual la
imagen femenina, representada en cuidadas composiciones a las que les otorga un cierto
aire melancólico y romántico. En estas obras mantiene los criterios clásicos de retratistas
como Van Dyck, aunque sus brillantes tonos le acercan a las maneras de los pintores del
renacimiento italiano. Desde el punto de vista técnico, su pintura se caracteriza por la
precisión en el dibujo y por el empleo de una amplia gama de tonos brillantes, aplicados
con una gran decisión, sin retoques ni repintes, buscando siempre destacar el color y la
luminosidad.
La obra invitada
Diego López García
Diego López retratando a “María la guapa” para su obra “Sevillana en su patio” 1918
HORARIO:
De martes a sábado de 9:00 a 19:30 horas. Domingos y festivos, de 9:00 a 15:30 horas
Lunes cerrado
D.L.: SE 17-2015
27 de enero – 5 de abril, 2015
La Cantaora
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La niña del canario
Museo de Bellas Artes de Sevilla
Plaza del museo, 9
41001 Sevilla
Tlf. 955 54 29 42
consejería de educación, cultura y deporte