ENTREVISTA TELEFÓNICA A CLAUDIO LAVAZZA EN LA CÁRCEL DE TEIXEIRO (LA CORUÑA) TRANSCRIPCIÓN DE LA ENTREVISTA R EDICIONES AUTONOMAS Entrevista a Claudio Lavazza ENTREVISTA TELEFÓNICA A CLAUDIO LAVAZZA EN LA CÁRCEL DE TEIXEIRO (A CORUÑA) PARA LA EMISORA “RADIO BLACK OUT” DE TURÍN. Transcripción y traducción al castellano . − Entrevistador. “Visto que pronto sale también en italiano tu autobiografía hemos pensado que para presentarla, la mejor manera es sentir de tu propia voz cuáles son los motivos que te han empujado a escribir este libro, y también si escribiéndolo pensabas en un tipo específico de lector a quien dirigirte.” − Claudio. “Sí, en un principio lo he escrito para el movimiento anarquista aquí en España, pues es un lector específico el que me interesa particularmente. Yo los llamo los que luchan por un mundo nuevo y sin cárceles. Sobretodo es para que entiendan que se puede vivir la lucha con entusiasmo aun cuando todo parece inútil por la falta de éxitos a nivel social, digamos que he ensalzado el coraje individual y el mantenerse en una linea rebelde permanente, frente al valor y paciencia que se requiere para permanecer en la lucha social. Después, otro factor..., sabes aquí, en España, de lo poco que he leído, que ha circulado aquí sobre los “años de plomo”, los años 70 y 80, era todo en un tono de derrota en general, todos los libros que eran después traducidos de la experiencia de allí, traducidos al español, y la imagen que había aquí de lo que sucedió en Italia era, bah, sólo conocían a las Brigadas Rojas. Luego, cuando yo en la autobiografía he hecho referencia a los múltiples grupos que existieron, casi 120, la gente se queda con la boca abierta, “¿cómo tantos grupos? Nosotros aquí sólo hemos conocido a las Brigadas Rojas, a los NAP,...” Pues no, la historia es mucho más amplia y por eso, en este sentido, lo he hecho. Principalmente por lo que te decía al principio.” − E. “Bien. Cierto. Escucha, visto que has introducido la cuestión de los años 70 en Italia, respecto a tu experiencia de prisión, tú has vivido primero la cárcel en los años 70 en Italia y ahora estás en la cárcel del estado español, ¿qué diferencias o similitudes encuentras entre las dos experiencias?” − C. “Eh... La cárcel que he conocido en los años 70 en Italia era completamente distinta de la que conozco ahora. Al principio, cuando estaba en el FIES, era igual, más o menos, a lo que conocí en el ala política de San Vittore (Italia), te hablo aquí de cuando entré en el 96, aquí en España, la gente que había allí para mí eran todos compañeros, los que 2 Ediciones Autonomas estaban allí recluidos, eran y continúan siéndolo, claro, compañeros aunque después ideologicamente hablando existieran diferencias que en el fondo, para mí, no han sido tan importantes. Siempre he visto en el preso social un potencial luchador que es capaz de entender los ideales anarquistas, o sea, veo en él una persona que rechaza la sumisión a las leyes del trabajo obligado. Pero, atención, las motivaciones tienen que ir más allá del sencillo hecho de tener dinero, digamos que tiene que tener ese espíritu de vida y de lucha por un ideal que siempre aprecié en los hombres y mujeres que conocí. A ver, es un poco la diferencia que existía en Italia, cuando entré ya estaban los políticos, ya estaban allí por motivaciones políticas, y cuando he entrado aquí estaba el preso social, que después se ha vuelto político, con el tiempo claro, pero al principio no se consideraba como tal y no entendía bien lo que era el anarquismo.” − E. “Visto que estamos hablando de la situación, de la diferencia que ha habido respecto a la situación que has encontrado en el FIES, ahora la situación ha cambiado, ahora tú estás en segundo grado, ¿no?” − C. “Sí”. − E. “Esto es. Así que para que los compañeros puedan entender un poco ¿cómo pasan los días allí dentro en Teixeiro?” − C. “Aquí en segundo grado ¿no? El cambio del régimen FIES al segundo grado ha sido notable. Actualmente vivo mezclado con otros 140 presos, tengo más libertad de movimiento y los días los paso entre el gimnasio donde enseño jiu-jitsu a unos pocos, a poca gente interesada, y me paso prácticamente toda la mañana allí, luego a la tarde normalmente permanezco encerrado en la celda para escribir, leer,... y aunque parezca un poco absurdo te diré que echo de menos un poco el FIES (risas), lo echo de menos un poco porque no tengo el tiempo que tenía antes para leer y escribir (risas), aquí puedo leer dos o tres horas máximo al día, y cuando estaba en el FIES leía siete, ocho, hasta diez horas al día.” − E. “¡La virgen!” − C. “ Sí, era debido al hecho de que las horas de patio eran muchas menos, eran cuatro horas, mientras que aquí en total son más de ocho, la diferencia es esa.” − E. “En fin, si estuvieses en buena compañía habría más tiempo para socializar.” − C. “Sí, si estuviese en buena compañía sí, pero ya sabes cómo es el segundo grado, es una mezcla de todo un poco.” − E. “ Escucha un momento, mira, respecto a este tema, la actual 3 Entrevista a Claudio Lavazza crisis del sistema capitalista ha creado muchas contradicciones en distintos niveles de la sociedad. Según tu opinión estas contradicciones y las consiguientes reacciones sociales pueden influir también en la situación que se vive entre los muros de una prisión ¿cuáles son las perspectivas de lucha que se pueden aún dibujar dentro de las cárceles?” − C. “La cárcel es el reflejo de lo que pasa ahí fuera, entonces claro, todas las consiguientes reacciones sociales influirán en la vida dentro de las cárceles, no hay duda. Pero nunca será como en los años 60. La realidad social que tenemos hoy está totalmente adormilada, ha perdido el instinto reivindicativo que hacía de las luchas duras el punto más alto del enfrentamiento contra el sistema de dominio. Hoy, aquí dentro y allí fuera existe una clase de opinión pública más light, más dulce, más predispuesta a la mediación utilizando a sus representantes. Hay menos autonomía de elección y de movimiento, hay menos ideas claras y los que quedan han perdido todo el valor ideológico que tenían. Después hay un factor importante y es que la represión ha sido tan fuerte y eficaz en estos últimos tiempos que el sistema ha dejado solamente un camino reivindicativo de lucha, que es el reformista. Y aquí dentro encontrar un lugar para nosotros anarquistas requiere una capacidad de análisis difícil de comprender y sobretodo de poner en práctica. Yo creo que las perspectivas de luchas en las cárceles hay que encuadrarlas dentro de una linea de larga preparación, porque el fenómeno de la cárcel es un tema desconocido para la mayoría de los compañeros. Nos hemos quedado en la prehistoria, mientras ellos, el sistema penitenciario, ha avanzado hasta la era moderna. Luego hay un factor de conocimiento, cosa que necesitará el tiempo para entender bien cómo funciona y sobre todo cómo se puede luchar, porque claro que se puede luchar, pero se necesita una capacidad estratégica de conocimiento.” − E. “Además de revolucionario, estás considerado por los policías de media Europa como un profesional del atraco a bancos. ¿Qué consejos darías a un joven con iniciativa que quiere enfrentarse a la difícil faena de la re-apropiación? “ (risas) − C. (risas) “Le diría de buscarse un buen maestro en el arte del robo a bancos. Y sino lo encuentra, prepararse bien a nivel tecnológico, científico y táctico militar... a costa de entrar en las universidades del Sistema para estar a la altura de la situación actual. Digamos que cuanto más conocimiento haya en el campo tecnológico más posibilidad habrá, si nos quedamos atrás en este conocimiento creo que hoy es complicadísimo. Es muy difícil, no imposible, pero muy, muy difícil, se necesita un buen 4 Ediciones Autonomas nivel tecnológico para poder ser un buen ladrón de bancos.” − E. “Entiendo... bien... escucha... recorriendo el camino de la experiencia armada ¿cuáles son las valoraciones que harías hoy en referencia a las ventajas y a los límites de esta forma de lucha?” − C. “La experiencia de la lucha armada se ha producido en un periodo muy particular, en donde la idea principal era la realización de una revolución contra el estado capitalista. Hoy tras haber vivido aquella experiencia si tengo que hacer una valoración respecto a las ventajas y los límites, tendría que preguntároslos a vosotros que estáis ahí fuera ¿qué posibilidades existen para volver a repetir la experiencia de los años 70 y 80? Bromas a parte, yo diría que no es posible partir de aquella idea revolucionaria. A mí personalmente no me interesa apoderarme de un Estado. Lo que sí me interesa es defender una ideología y una manera de ser como la nuestra. Crear espacios nuestros de libertad donde sea posible no solamente hablar sino sobretodo realizar proyectos concretos. Estos espacios nuestros tendremos que defenderlos con todos los medios a nuestro alcance, que van desde el difundir la belleza de nuestra manera de vivir con la creatividad que desde siempre hemos tenido: creando música, teatro, trabajos artesanales, enseñanza, escuelas, etc... si el sistema nos acepta así... mejor para todos, si nos echa a la calle con la violencia y las armas tendremos que estar a la altura de contestarles con la misma moneda, entonces para mí no será una revolución social, porque la mayor parte de la gente, de la opinión pública, no quiere saber nada de cambiar lo que tienen, están bien así y mientras tengan trabajo y bienestar no lucharán nunca por un cambio. La nuestra será una defensa y un contrapoder permanente para seguir siendo lo que somos. Esta manera de ser y pensar viene de las ventajas y los límites de una experiencia armada que viví.” − E. “Escuchando y leyendo las noticias que te llegan desde Italia, ¿tienes motivos para tener nostalgia de tu “bello país1”? ” − C. “Tengo nostalgia, la nostalgia la tengo siempre que pienso en vosotros compañeros italianos. Del “bello país”, por lo general, no me importa nada. Me pone nervioso escuchar y leer las noticias que llegan de allí.” − E. “Entiendo, escucha, para concluir... ¿consideras que los movimientos de solidaridad y lucha anticarcelaria de afuera tienen la capacidad de hacer que los presos se sientan parte integrante del movimiento revolucionario?, ¿cómo interpretas la situación actual del movimiento, su potencial y sus defectos?, ¿os sentís como presos en lucha 5 Entrevista a Claudio Lavazza parte de algo que existe también fuera? − C. “Mira, los movimientos de solidaridad y lucha anticarcelaria, como dije antes, tienen un problema, no conocen la realidad de la cárcel, este es un defecto grande que impide el crecimiento y el potencial del que disponen. Todo está ligado al conocimiento, no se puede luchar contra un avanzadísimo sistema penitenciario sin conocerlo a fondo. Para que los presos se sientan parte integrante del movimiento revolucionario, éstos, estos últimos (los presos), tendrían que transmitir sus experiencias a los de fuera, con lucidez mental y estrategia ideológica y práctica, un poco como lo he escrito en la autobiografía. Es un poco el problema que he visto yo aquí, aquí y también en otras partes, no sé, se trata de entender un poco, porque a veces se escuchan propuestas de fuera que son un poco absurdas, absurdas porque yo estoy aquí y veo como funcionan las cosas. Hay compañeros que dicen “se debe luchar por los derechos” pero el problema es que el 85% de la población que está aquí dentro de la cárcel, de los derechos en la cárcel no quiere saber nada, te hablo de los derechos de todos, de cuando hay una propuesta de lucha general pero, claro, si le hablas de derechos individuales, para uno solo, un permiso, la condicional, para salir antes, para un trabajo, para eso sí, pero sólo para ellos, de las luchas para todos, de las luchas en general no quieren saber nada.” − E. “Entiendo”. − C. “Yo, en cualquier caso, cuento con un pequeño porcentaje de presos con los cuales estoy siempre dispuesto a trabajar, pero para hacer algo bueno se necesita tiempo, mucho tiempo. Las luchas aunque sean pocos los que las piensan, son necesarios muchos para hacerlas si no, acaban antes de empezar. Cuando entré aquí, en la cárcel, para mí todos los presos eran víctimas de sistema, pero ahora, con la experiencia de estos años, veo las cosas con más claridad, he perdido el concepto de definir al preso por el simple hecho de estar en la cárcel, como si tuviera la razón en todo. Este cambio de visión ha sido significativo para mí, me ha permitido entender con quien se puede y se debe luchar. − E. “Entiendo, en fin, me parece que hemos tocado todos los argumentos de la cuestión, respecto a tu autobiografía qué es lo que piensas que se pueda destacar más.” − C. “En este momento no te escucho, está el altavoz aquí.” − E. “Decía, respecto a tu autobiografía ¿cuáles son los momentos que más te han emocionado al revivirlos: los momentos de la lucha o los momentos más vinculados a tu experiencia de vida?, por ejemplo 6 Ediciones Autonomas los momentos de clandestinidad, porque tú tienes una experiencia en clandestinidad larguísima, casi única con respecto a la situación de los compañeros revolucionarios italianos, esto es, ¿qué te ha parecido desde dentro de la cárcel revivir aquellos momentos que has vivido en libertad con tanta pasión y energía?, ¿te ha servido revivirlo?” − C. “El hecho de escribirlo no sé, quizá me ha emocionado más cuando estaba fuera. Me ha dado la impresión de que aún en la cárcel se puede ser siempre útil, porque a parte de que vives una experiencia aquí dentro, la exaltas por lo que has hecho fuera, es verdad que esto te da emoción, te da la vida, a fin de cuentas estoy en la cárcel pero no estoy muerto. Todavía puedo hacerme entender, hacerme comprender, dialogar con los otros; sí, quizás aquellos momentos de cuando estaba fuera son los que más me han emocionado.” − E. “Cierto, escucha, ... para concluir antes de que nos den la próxima llamada, un abrazo de todos los compañeros que estamos aquí, obviamente toda la fuerza para continuar adelante, y que nosotros fuera y vosotros dentro: la lucha es única...” − C. “Os abrazo también yo a todos con fuerza, todos unidos.” La dirección del compañero: CLAUDIO LAVAZZA. Centro Penitenciario Teixeiro. Carretera Paradela S/N 15310 Curtis-A Coruña El audio original de la entrevista está colgado en la red (internet). Transcripción y traducción al castellano a cargo de ediciones autónomas. Distribución y pedidos de “autobiografía de un irreductible”: [email protected] NOTAS: 1 “Bello país” (“Bell paese”) forma de denominar al estado italiano usada con ironía por el entrevistador. 7 256 páginas. Portada en cartulina plastificada mate de 280 gramos. Encuadernado rústico cosido. Impresión offset. Tirada mil ejemplares. Sin depósito legal, ni copyright. Ningún derecho, ningún deber. P.V.P. : 8 euros. Distribución: ediciones autonomas