EL DERECHO A LA EDUCACIÓN Y EL ESTATUTO DE AUTONOMIA PARA ANDALUCIA Introducción Inicialmente la educación no debería haber sido un tema controvertido en la asunción de competencias dentro de las Comunidades Autónomas, el articulado constitucional entregaba a las mismas, el desarrollo de esta competencia dejando en manos del Estado la competencia exclusiva en la materia en un muy reducido sentido, el artículo 149 lo expresaba de la siguiente manera: ¨ Regulación de las condiciones de obtención, expedición y homologación de títulos académicos y profesionales y normas básicas para el desarrollo del artículo 27 de la Constitución a fin de garantizar el cumplimiento de las obligaciones de los poderes públicos en esta materia ¨. De una profunda lectura del articulado se desprendía por parte del legislador constitucional un mandato al gobernador estatal de mantener la homogeneidad dentro de todo el territorio en lo que a enseñanza de todos los españoles se trataba. La evolución autonómica unida a los nacionalismos radicales que han ido afianzándose, han dado como resultado que la materia de educación haya sido un elemento arrojadizo usado de manera sesgada en función de los intereses de unos y otros. Así no son pocas las Comunidades Autónomas que han visto en la educación una forma más de diferenciación con respecto a las demás, potenciando ese hecho diferenciador no solo en los contenidos educacionales sino en la instrumentación que de los mismos se ha hecho para condicionar a las jóvenes mentes, radicalizando en muchos casos el carácter independentista de los mismos. Ha llegado a ser el tratamiento de la educación junto con el de la lengua, una materia que no se puede separar, pues ambas son consustanciales la una a la otra, siendo las dos cuestiones controvertidas, además al uso que se hace por parte de las Comunidades Autónomas de dichas cuestiones se une el uso que han hecho muchas veces los partidos políticos, usando las diferentes posturas como estiletes con los que punzarse y lejos de dar respuesta al mandato constitucional, en el que lo que se pretendía era crear un campo homogéneo en todos los territorios, lo que se crea es aun mas diferenciación y crispación, ya que parecen haber llegado a posturas inconcebibles e irreconciliables, no solo en cuestiones practicas como la propia simbología religiosa en las escuelas, sino mas allá de esta, respecto a los contenidos de determinadas materias educacionales como pueda ser ¨ educación para la ciudadanía ¨, o incluso en la metodología de la enseñanza al considerar que una gran parte de la población en determinadas Comunidades Autónomas se ve desamparada lingüísticamente. Es pues la educación, si bien algo que el propio legislador constitucional no considero baladí al dejarlo regulado dentro de la Constitución, si algo que nunca pensó que pudiera derivar en esta situación actual, donde lejos de ser un tema de encuentro y concordia se ha convertido en un tema de crispación diaria y desencuentro que unida a al tratamiento de las diversas lenguas del territorio y a los sentimientos nacionalistas, regionalistas y partidistas, parece algo a punto de estallar. El cambio estatutario en nuestra Comunidad Autónoma ha dado como resultado un precedente legislativo que permite ver la evolución de este derecho en Andalucía, al tiempo que nos puede servir como reflexión del avancé que están sufriendo el resto de competencias dentro de la misma, pues a nadie se nos escapa que asumir un derecho es asumir todo lo que de suyo le va, es decir todo el desarrollo legislativo y de ejecución que ese derecho necesita. La Ley Orgánica 6/1981, de 30 de diciembre, de Estatuto de Autonomía para Andalucía, contenía tres artículos claves en la materia, el primero de ellos el artículo 11 donde se consagraban los derechos de los andaluces en al marco constitucional, esta referencia ponía la constitución como espejo al que mirarse dando valor a ese contenido de homogeneidad que subyacía a la propia Constitución. Destacan también el artículo 12 el cual tomaba como objetivo fundamental de la Comunidad Autónoma el acceso de todos los andaluces a la educación en todos sus niveles, además ya dentro de este artículo se destaca como objetivo definido el ¨afianzar la conciencia de identidad andaluza a través de la investigación, difusión y conocimiento de los valores históricos, culturales y lingüísticos del pueblo andaluz en toda su riqueza y variedad¨ este párrafo ya suponía la existencia de una conciencia andaluza independiente del resto del territorio, que podría ser tomada como trampolín a una mayor diferenciación en un futuro si fuera necesario. Finalmente el extinto Estatuto de Autonomía contenía el derecho a la educación en el artículo 19. Artículo 19. 1. Corresponde a la Comunidad Autónoma la regulación y administración de la enseñanza en toda su extensión, niveles y grados, modalidades y especialidades en el ámbito de sus competencias, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 27 de la Constitución y Leyes Orgánicas que, conforme al apartado 1, del artículo 81 de la misma, lo desarrollen; de las facultades que atribuye el Estado el número 30 del apartado 1, del artículo 149 de la Constitución y de la alta inspección necesaria para su cumplimiento y garantía. 2. Los poderes de la Comunidad Autónoma velarán porque los contenidos de la enseñanza e investigación en Andalucía guarden una esencial conexión con las realidades, tradiciones, problemas y necesidades del pueblo andaluz. El artículo entregaba la ejecución del derecho a la Comunidad Autónoma, subordinaba su ejecución a la Constitución y a las Leyes Orgánicas que de dicha materia se desprendieran. Lo más destacable de este artículo es su apartado segundo en el cual volvemos a ver como se realza aquello que da independencia y diferenciación a Andalucía, si esgrimiéramos este párrafo y lo extrapoláramos a otras Comunidades Autónomas hasta sus últimas consecuencias veríamos como la defensa de realidades, tradiciones, problemas y necesidades, podría llegar a extremos como los de Cataluña si compartiéramos un acervo cultural y lingüístico del mismo carácter independentista. Es pues necesario también tener en cuenta como una misma regulación puede ser entendida de forma muy diferente según las circunstancias que rodean al hecho autonómico de tal manera que un mismo articulado en Andalucía y por ejemplo Cataluña puede ser entendido de muy diferente manera siendo en el fondo el mismo contenido doblemente interpretado. Regulación en el nuevo Estatuto de Autonomía El nuevo Estatuto de Autonomía de Andalucía, toma como regulación del derecho el mismo esquema que su predecesor de tal mantera que como objetivo a conseguir dentro del artículo 10 donde se reconoce como fundamental el acceso de todos los andaluces a una educación permanente y de calidad que les permita su realización personal y social. El artículo fundamental en esta materia es el artículo 21 en el que el legislador autonómico se centra y desarrolla el derecho como nunca antes se había hecho no solo por la profusión del propio artículo, sino por la generación de nuevos subderechos de nuevo cuño, los cuales antes no hubieran sido nunca considerados derechos como tales sino meros desarrollos necesarios para la ejecución del derecho principal, cuya codificación en el nuevo Estatuto de Autonomía ha hecho de los mismos algo pétreo e inamovible. Intentaremos realizar un estudio esquematizado del propio artículo 21. 1. Se garantiza, mediante un sistema educativo público, el derecho constitucional de todos a una educación permanente y de carácter compensatorio. La educación es un derecho universal que a todos los seres humanos asiste de tal manera que no hay declaración de principios o derechos que pueda en un momento dado omitir mención y regulación de la misma. Pero más allá de esto es necesario pensar en que como derecho puede ser usado e interpretado de formas variables y dentro de las mismas es siempre necesario garantizar unos principios básicos, ya que una regulación del propio derecho mal entendida podría llevar a desencuentros constitucionales por ejemplo discriminación étnica en materia de educación, por poner un ejemplo las leyes raciales que privaron a los judíos de poder asistir a la escuela en la Alemania nazi. Desde este punto de vista no es gratuita la mención a la Constitución, que se hace en el articulado, ya que el propio artículo 27 de la Constitución pone en valor los principios del constitucionalismo bien entendidos en los que todos somos iguales y no se permite ningún tipo de segregación en materia de derechos y mucho menos en materia educativa siendo las siguientes expresiones reflejo de lo mismo: 1. Todos tienen el derecho a la educación Se reconoce la libertad de enseñanza. 2. La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana en el respeto a los principios democráticos de convivencia y a los derechos y libertades fundamentales. Es pues el marco constitucional al que gira nuestro nuevo estatuto igual que su predecesor hiciera en un primer momento para marcar y acotar posibles limites que ajenos a la voluntad del legislador no queden del todo definidos en el propio artículo. Destacan dentro del propio párrafo del artículo estatutario los términos permanente y compensatoria, para definir la educación, términos macadamente solidarios con los que se hace referencia a la posibilidad de un déficit educativo bien en una parte de los territorios o bien en determinados grupos sociales, aduciendo un sistema educativo de carácter inclusivo, donde todos tienen cabida no solo los que en un primer momento son considerados aptos, sino aquellos que por tener alguna deficiencia necesitan mayor apoyo o estimulo para incorporase al sistema educativo, asegurando pues que estos últimos recibirán la atención necesaria tanto para acceder como para desarrollarse dentro del marco educativo. 2. Los poderes públicos de la Comunidad Autónoma de Andalucía garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones. La enseñanza pública, conforme al carácter aconfesional del Estado, será laica. Los poderes públicos de la Comunidad tendrán en cuenta las creencias religiosas de la confesión católica y de las restantes confesiones existentes en la sociedad andaluza. Es bastante frecuente que cuando queremos contentar a todos al final encontremos regulaciones como la contenida en este artículo, así pues vemos como por un lado garantizamos que todos tendremos derecho a ver como nuestros hijos son educados en las creencias que deseamos y por otra parte consagramos el sistema educativo a un carácter aconfesional y laico. Como es posible enseñar religión y decir que somos laicos algunos podrían decir que la solución es salomónica y no en defecto sino en exceso, es decir en vez de erradicar las religiones vamos a enseñar todas aquellas que sean demandadas, eso que en un primer momento parece ser descabellado, no debería serlo tanto si tenemos en cuenta que la pluralidad de religiones que están presentes en nuestra sociedad no es tan amplia. Incluso manteniendo la postura anterior la incompatibilidad existe, muchos han creído ver esa incompatibilidad producto del propio articulado constitucional donde lo que sé producido es un híbrido estatutario mezcla del artículo 27.3 y del artículo 16.3, dando como resultado una incompatibilidad bastante llamativa. Artículo 27.3 Los poderes públicos garantizan el derecho que asiste a los padres para que sus hijos reciban la formación religiosa y moral que esté de acuerdo con sus propias convicciones. Artículo 16.3 Ninguna confesión tendrá carácter estatal. Los poderes públicos tendrán en cuenta las creencias religiosas de la sociedad española y mantendrán las consiguientes relaciones de cooperación con la Iglesia Católica y las demás confesiones. La última parte del párrafo estatutario no es mas que una refundición en giro autonómico del artículo 16.3 de la Constitución. 3. Todos tienen derecho a acceder en condiciones de igualdad a los centros educativos sostenidos con fondos públicos. A tal fin se establecerán los correspondientes criterios de admisión, al objeto de garantizarla en condiciones de igualdad y no discriminación. Es bastante frecuente encontrar en el Estatuto referencias a la transversalidad y a la igualdad, es una máxima impuesta por el legislador autonómico dejar patente su intención de que la discriminación sea erradicada de todos los ámbitos en Andalucía. Es importante como el propio legislador hace una mención a los centros educativos sostenidos con fondos públicos y no privados, permitiendo de esta manera la existencia todavía de esa doble dicotomía o regulación diferenciada, pero al mismo tiempo no permitiendo que centros que se nutren con fondos públicos lleven acabo políticas segregacionistas y discriminatorias. 4. Se garantiza la gratuidad de la enseñanza en los niveles obligatorios y, en los términos que establezca la ley, en la educación infantil. Todos tienen el derecho a acceder, en condiciones de igualdad, al sistema público de ayudas y becas al estudio en los niveles no gratuitos. Es una máxima de la sociedad andaluza que la enseñanza sea accesible a todos los Andaluces, esta máxima queda recogida por el legislador dentro de uno de los párrafos más importantes y novedosos de la regulación estatutaria del derecho sí bien por otra parte es reflejo del articulado constitucional donde se nos dice en el artículo 27.4 la enseñanza básica es obligatoria y gratuita. El legislador es consciente de que articular un sistema educativo puede generar descompensaciones y discriminación ya que el acceso al mismo puede quedar privado para aquellas partes mas desprotegidas económicamente de la sociedad para ello articula la segunda parte del párrafo en la que se establece un sistema de ayudas publicas en aquellos niveles del sistema educativo donde por no ser obligatorio no va a ser gratuita la enseñanza. 5. Se garantiza la gratuidad de los libros de texto en la enseñanza obligatoria en los centros sostenidos con fondos públicos. La ley podrá hacer extensivo este derecho a otros niveles educativos. Este punto es consecuente con el anterior y hoy por hoy con la situación económica que estamos viviendo, resulta reseñable no solo que los libros de texto se hagan gratuitos en los niveles de enseñanza obligatoria donde ya el párrafo anterior y la propia Constitución marcan esa gratuidad como máxima a exigir y por tanto que los libros de texto sean gratuitos es una consecuencia lógica, sino por que el propio artículo deja abierta la misma hacia niéveles que ya no son obligatorios casando desde este punto de vista con el apartado segundo del párrafo numero 4 de políticas publicas que favorecerán el acercamiento al mundo académico y el desarrollo intelectual de las personas. Cuando analizamos un artículo determinado dentro de un código podemos llegar a pensar que muchas veces el propio legislador lo que persigue en algunos casos o partes de dicho código es un oportunismo mal entendido que permita a una norma que no tiene mayor transcendencia por si sola cobra dicha trascendencia a raíz de la colocación de artículos populistas que llamen la atención al pueblo llano. Desde ese punto de vista este artículo podría haber sido criticado ya que para muchos pudiera no ser necesario la inclusión de estos dos párrafos o por lo menos su redacción tan determinante dentro del mismo Estatuto y si podían haber quedado relegados a una presencia en ley independiente, pero lo cierto es que como muchos otros sostienen incluso aun cuando admitiéramos que el legislador pretendía obtener ese reconocimiento popular a través de este tipo de artículos, cosa que no sostenemos, la consecuencia real de lo mismo ha sido sumamente ventajosa para todos ya dichos artículos no han sido solo brindis al sol sino que han quedado recogidos dentro de un texto complejo y son directamente invocables, de tal manera que no han sido meras promesas sino una realidad. 6. Todos tienen derecho a acceder a la formación profesional y a la educación permanente en los términos que establezca la ley. 7. Las universidades públicas de Andalucía garantizarán, en los términos que establezca la ley, el acceso de todos a las mismas en condiciones de igualdad. Se reconocen las existencias de otros ámbitos educativos al tiempo que se remiten sus regulaciones a leyes posteriores, pero lo que sigue resultando curioso es como de forma directa e indirecta la igualdad sigue estando presente en el articulado y en el lenguaje del legislador pues todos tienen derecho y en las mismas condiciones de igualdad son claros ejemplos de que el legislador no esta dispuesto a en que su articulado pueda quedar duda de ello. 8. Los planes educativos de Andalucía incorporarán los valores de la igualdad entre hombres y mujeres y la diversidad cultural en todos los ámbitos de la vida política y social. El sistema educativo andaluz fomentará la capacidad emprendedora de los alumnos, el multilingüismo y el uso de las nuevas tecnologías. Volemos a ver en este párrafo las políticas de igualdad que van imponiéndose poco a poco en la sociedad, se trata de ir paliando las diferencias que han ido surgiendo entre hombres y mujeres y llegar a un Estado mucho mas igualitario y justo, para imponerla de manera efectiva esta política ha de ser enseñada desde la más tierna infancia y por eso este artículo toma justificación, la educación en valores es una labor de todos y los poderes públicos son conscientes de que la misma ha de iniciarse desde el propio sistema educativo. La diversidad cultural es ya un hecho en nuestra sociedad en la que contamos con una pluralidad de culturas intentando integrarse con las ya existentes, eso puede crear conflictos por lo que es normal que el legislador consciente de ello, lejos de pensar que es algo a erradicar quiera ponerlo en valor en las aulas el mejor sitio para tomar contacto con esa diversidad y donde educar en valores y en la pluralidad se hacen esenciales. Junto con todo ello el legislador es consciente de que el mundo evoluciona y que las nuevas tecnologías son esenciales y que se tiende a una mayor globalización por lo que el multilinguismo va ha ser necesario si bien es cierto que muchas veces los propios códigos nacen para perdurar, desde ese punto de vista se hacen previsiones no para el presente y si para el futuro, esta parece una de ellas un objetivo que el propio legislador marca a la sociedad. 9. Se complementará el sistema educativo general con enseñanzas específicas propias de Andalucía. Es normal que Andalucía tome conciencia de sí misma y que eso no se consiga de manera aislada sino que por el contrario se consiga con el esfuerzo de todos, el sistema educativo toma un papel trascendental ya que desde el primer momento es un elemento formador, así pues que lo que nos hace nosotros mismos sea enseñado en las escuelas, es tomar en valor lo que nosotros mismos somos y por tanto algo coherente. 10. Las personas con necesidades educativas especiales tendrán derecho a su efectiva integración en el sistema educativo general de acuerdo con lo que dispongan las leyes. Finalmente este artículo se cierra como comenzó intentando imponer un sistema educativo inductivo donde todos tenemos cabida con nuestras peculiaridades y diferencias, e incluso con nuestras deficiencias, hacer de la diversidad algo importante y digno es una máxima que el sistema educativo tenia desde hace tiempo y es a través de artículos como este cuando se consiguen, ya que toman la integración como elemento fundamental para construir una sociedad mas justa y digna. BIBLIOGRAFÍA. Ley Orgánica 2/2007, de 19 de marzo, de reforma del Estatuto de Autonomía para Andalucía. Ley Orgánica 6/1981, de 30 de diciembre,(ES) de Estatuto de Autonomía para Andalucía La Constitución Española de 1978