MISIÓN PERMANENTE DE MÉXICO ANTE LA ORGANIZACIÓN DE NACIONES UNIDAS Participación del Ministro Ricardo Alday en la reanudación del proceso de negociaciones intergubernamentales para la Reforma del Consejo de Seguridad “La relación entre el Consejo de Seguridad y la Asamblea General” Nueva York, febrero 3, 2016 Señor Presidente de la Asamblea General, Señora Facilitadora: Gracias por el compromiso de ambos con el proceso de reforma del Consejo de Seguridad y por la convocatoria a una ronda más de negociaciones intergubernamentales. México y el resto de los miembros del Movimiento Unidos por el Consenso apoyan decisivamente la ruta de debates temáticos que nos ha propuesto para los próximos meses, regresando al formato de los cinco pilares de la decisión 62/557. Estamos convencidos que debates temáticos como este, son ejercicios clave para tratar de encontrar las áreas de convergencia que nos permitan avanzar el objetivo común de una reforma del Consejo de Seguridad con el apoyo más amplio posible. Señora Presidenta, México considera que la relación entre el Consejo de Seguridad y la Asamblea General debe sustentarse en la cooperación, no en la rivalidad, y que debe abordarse desde la perspectiva de transparencia y rendición de cuentas. Transparencia de los procesos de toma de decisiones, y rendición de cuentas en la interacción del Consejo con el resto de los Estados a nombre de los cuales actúa para mantener la paz y seguridad internacionales. La Carta de nuestra Organización tiene herramientas específicas para mejorar la manera en que el Consejo responde a miembros y órganos de Naciones Unidas. Los informes anuales del Consejo de Seguridad a la Asamblea, por ejemplo, deben ser sustantivos y analíticos, y deben incluir un apartado con proyectos de resolución y medidas aprobadas, así como los temas y propuestas que no alcanzaron acuerdo. Esta práctica fomentará mejor rendición de cuentas en el mantenimiento de la paz y seguridad internacionales, fortalecerá el acopio y uso de lecciones aprendidas y generará una reflexión e interacción real, no de trámite, con la Asamblea General. Somos partidarios de que el Consejo auspicie más sesiones públicas y consultas abiertas, y que impulse, no inhiba, la participación de Estados o actores involucrados en temas de la agenda del Consejo, conforme a los Artículos 31 y 32 de la Carta. Como el órgano más representativo de la Organización y de la comunidad internacional, la Asamblea General debe actuar con mayor independencia en asuntos monopolizados por el Consejo, tomando en cuenta las atribuciones relacionadas con paz y seguridad internacionales que le dicta la Carta. Señora Presidenta, México considera que la rendición de cuentas solo puede garantizarse si colocamos principios democráticos en el corazón de la composición del Consejo y sus métodos de trabajo. Si elecciones y rendición de cuentas son cruciales para el buen funcionamiento de organismos e instituciones internacionales, para nuestros gobiernos, congresos o parlamentos, no tiene por qué ser distinto para los miembros del Consejo de Seguridad. Ninguna de las medidas que he señalado usurpa el territorio del Consejo de Seguridad o busca administrar su trabajo al detalle. La membresía puede abordar también la percibida apropiación del mandato de la Asamblea, si lleva a cabo una evaluación más profunda del trabajo del Consejo. Esto reforzaría la rendición de cuentas entre ambos órganos. Señora Presidenta, México considera que la mejor manera de garantizar un Consejo de Seguridad que responda por sus decisiones, es mediante el fortalecimiento del papel y la autoridad de la Asamblea General. Damos la bienvenida a la cooperación entre el Consejo de Seguridad y la Asamblea General para el proceso de selección del próximo Secretario General de la Organización. Si bien el perímetro de colaboración es aún limitado e insuficiente, constituye un paso en la dirección correcta. Hacemos votos para que ese espíritu de cooperación se traslade a esta tribuna durante todo el proceso de las negociaciones intergubernamentales para la reforma del Consejo de Seguridad. Señora Presidenta, El proceso de negociaciones intergubernamentales durante la 69 sesión ordinaria nos dejó un balance lleno de contrastes. La participación de los Estados Miembros fue muestra inequívoca de nuestro interés sostenido por cambiar el estatus quo; aunque al mismo tiempo, las contribuciones al debate revelaron que mantenemos profundas divisiones sobre la forma y fondo para reformar el Consejo de Seguridad. La reforma del Consejo de Seguridad es un proceso que no puede ser guiado por unos cuantos Estados Miembros, debe conducirse por toda la membresía de nuestra Organización. Si persiste el empeño para otorgar privilegios a perpetuidad a algunos Estados, en detrimento del interés colectivo y en aras de satisfacer ambiciones nacionales, no alcanzaremos nuestro objetivo. Quisiera señalar que mi delegación se opone a las propuestas para que durante su mandato genere un nuevo documento de resumen o consolidación de posiciones, Este proceso cuenta ya con documentos suficientes para nuestras deliberaciones y agregar uno más previsiblemente acentuará nuestras diferencias y nos alejará de progresos tangibles en los aspectos clave de la reforma. No necesitamos documentos adicionales sino voluntad política de todos para encontrarnos a mitad del camino e impulsar el mejor acuerdo posible. Confiamos en que con plena consciencia sobre las posiciones divergentes en esta materia, su hábil liderazgo y el del presidente de la Asamblea General, nos dirijan a la solución de compromiso que todos albergamos. En este ejercicio, le reitero la activa participación y apoyo de México. Muchas gracias.