La Teoría Psicoanalítica El Descentramiento De La Razón Y Las Vicisitudes De Lo Inconsciente Ps. Wilfredo Tapia San Martín1 Contenidos: - Contexto Histórico – Epistemológico en que surge el psicoanálisis. Fundamentos de la Investigación Freudiana. La Disociación Psíquica. El Trauma. El Tratamiento. EN LA CUNA DEL PSICOANÁLISIS La perspectiva psicoanalítica de la personalidad se ha transformado en uno de los enfoques más ampliamente conocidos. El presente curso, tiene como objeto, ofrecer una clara visión psicoanalítica para el comportamiento humano, que se sostiene fundamentalmente en Una idea central, propiamente analítica, que es sin duda, la noción del hombre gobernado por fuerzas “inconscientes”. Ahora bien, antes de entrar en materia, es preciso entender el contexto en que surge esta teoría y saber cuáles fueron las vicisitudes que debió sortear este proyecto. Por lo anterior, antes de revisar los conceptos más centrales de esta teoría, daremos una mirada global al contexto, en el que vieron la luz los primeros descubrimientos Freudianos sobre el inconsciente. I. La cuna del psicoanálisis y los fundamentos de la investigación Freudiana: Ante todo, resulta fundamental señalar que el psicoanálisis surge precisamente en una época, a la llamaremos pre - psicoanalítica, a finales del siglo XIX y a comienzos del siglo XX, cuando el 1 Psicólogo, Licenciado en Psicología, Diplomado en Psicoterapia de Parejas, Diplomado en Teología, © Doctorado en Educación y Cultura. 1 paradigma mecánico- causal dominaba la escena científica. Las ciencias positivistas desplazaban hacia lo “esotérico” todo el conocimiento que no respondía al modelo empírico. En esta época, la razón consciente era la gran protagonista. El positivismo, propio de la época moderna, supone una realidad dual que se expresa en los contrarios: sujeto/objeto, alma/ cuerpo, superestructura/infraestructura, interioridad/exterioridad. Por lo anterior, no es extraño que Freud2 (1856-1939), intentara hacer una ciencia de la vida psíquica. Él era médico y se había especializado en histología y neurología. En sus investigaciones neurológicas había seguido los preceptos de la biología mecanicista inspirada en el gran físico Helmoltz, quien postulaba que “todos los procesos orgánicos pueden y deben explicarse mediante fuerzas materiales físicas o químicas”. En 1876 trabajó en el laboratorio de fisiología de Ernst Brücke3 (1819-1892), el más brillante representante de la escuela positivista, antivitalista, organicista y mecanicista, por quien Freud sentía una gran admiración. Freud (1933) en sus comienzos abrigaba una esperanza, “que el intelecto – el espíritu científico, la razón – establezca con el tiempo la dictadura dentro de la vida anímica”. 2 Sigmund Freud: Nacido en Morovia, Imperio Austriaco. Fue un médico y neurólogo austriaco, creador del psicoanálisis y una de las mayores figuras intelectuales del s. XX.Su interés científico inicial como investigador se centró en el campo de la neurología, derivando progresivamente sus investigaciones hacia la vertiente psicológica de las afecciones mentales, de la que daría cuenta en su práctica privada. Estudió en París con el neurólogo francés Jean-Martin Charcot las aplicaciones de la hipnosis en el tratamiento de la histeria. De vuelta en Viena y en colaboración con Joseph Breuer desarrolló el método catártico. Paulatinamente, reemplazó tanto la sugestión hipnótica como el método catártico por la asociación libre y la interpretación de los sueños. De igual modo, la búsqueda inicial centrada en la rememoración de los traumas psicógenos como productores de síntomas, fue abriendo paso al desarrollo de una teoría etiológica de las neurosis más diferenciada. Todo esto se convirtió en el punto de partida del psicoanálisis, al que se dedicó ininterrumpidamente el resto de su vida. 3 Ernst Brücke: Nacido en Berlín, este prusiano rígido y anticlerical, de sonrisa "mefistofélica" y cabellera roja, según Moriz Benedikt, fue alumno de Johannes Peter Müller (18011858), antes de instalarse en Viena, en 1849. En la cátedra de fisiología, y en el instituto fundado por él, se convirtió en el más brillante representante de la escuela positivista, antivitalista, organicista y mecanicista, derivada de la enseñanza de Hermann von Helmholtz y de Emil Du Bois-Reymond (1818-1896). Merece ser considerado el fundador de la fisiología en Austria. A través de él y sus alumnos se realizó la unión de la medicina de laboratorio alemana con la medicina hospitalaria vienesa. En 1879 fue el primer rector protestante de la Universidad de Viena. Autor de varios estudios de anatomía, cuya enseñanza él desarrolló gracias al microscopio, se hizo célebre por sus trabajos sobre la fisiología del ojo, la digestión y la voz. Aunque incómodo en la sociedad de Viena, cantó loas a esa ciudad, que consideraba la metrópoli oriental de la cultura germánica. Después de haber sido iniciado en el darwinismo por los cursos de Carl Claus, Sigmund Freud pasó seis años (entre 1876 y 1882) estudiando fisiología en el laboratorio de Brücke. Consideraba a ese gran médico como su maestro venerado. 2 La creación Freudiana surge en el seno del positivismo- mecanicista de finales del siglo XIX, cuando Freud pretendía que “la contribución del psicoanálisis a la ciencia fuera, justamente, haber extendido la “investigación científica” al ámbito anímico”. Por esta razón, inició su investigación buscando las causas físicas de los trastornos psiquiátricos. Como neurólogo, sabía que un daño en el cerebro y las neuronas podría causar que los individuos se comportaran de formas extrañas, incluyendo los síntomas físicos como la perdida de la sensación (anestesias) o la perdida de la movilidad (parálisis) y los síntomas emocionales como la ansiedad o la depresión. Como buen “científico” el motor central de su metodología era precisamente “buscar la respuesta” yendo en busca de la verdad científica, y es esta motivación, la que paradójicamente, a medida que lleve adelante sus investigaciones, le permitirá notar que en las afecciones de algunos pacientes no se podían encontrar las causas físicas y empíricas que explicara el fenómeno. Esta cuestión que lo inquietó, sobre todo, porque en cierta forma, su interés empieza a llevarlo hacia los fenómenos psiquiátricos. En la búsqueda de alguna respuesta a estas cuestiones, Freud se interesa en los trabajos de otros médicos de la época, y es así como comienza un peregrinaje entre diversos puntos de vistas; de esta manera Freud va recogiendo información de diferentes ámbitos del mundo médico de la época. Hasta que su encuentro con “las histericas” le suscitarán ciertas interrogantes que le permitirán abrir surcos hasta ese momento no explorados. En su trabajo de investigación, Freud avanza entre diversas escuelas de pensamiento, comenzará por la interpretación fisiológica de la Escuela Helmholtz4, para posteriormente sumergirse en la 4 Escuela de Helmhotz: En su juventud, Helmholtz se trasladó a Berlín para estudiar medicina en el Instituto Federico Guillermo Médico-Quirúrgico, escuela que formaba a médicos militares. Eligió estudiar allí porque no había que pagar matrícula, cosa importante debido a que su familia no era demasiado acaudalada. Sin embargo, a cambio se comprometía a servir ocho años en el ejército. Cuatro años más tarde Helmholtz abandonó la Pipinière como doctor en anatomía para realizar prácticas en el hospital de la Charité. En 1841 empezó una tesis doctoral bajo la dirección de Müller. Estudiaría la estructura del sistema nervioso en los invertebrados. Así descubrió que las fibras nerviosas surgen de unas células, anteriormente identificadas por Christian Gottfried Ehrenberg.En 1843 fue destinado al hospital de Potsdam, donde trabajó durante cinco años. Pudo compatibilizar su trabajo con las investigaciones, ya que tenía bastante tiempo libre. Habilitó un barracón para transformarlo en laboratorio. Allí realizó investigaciones sobre la producción de calor durante la contracción muscular. Demostró que el calor no era transportado por la sangre o por los nervios, sino que era producido en los propios músculos. Dedujo un equivalente mecánico del calor, incorporado en su disertación de 1847, Über die Erhaltung der Kraft (Sobre la conservación de la energía). Esto significaba que no existían "fuerzas vitales" para mover un músculo. Helmholtz rechazó la tradición especulativa de la 3 observación clínica de la Escuela de Salpetrière5 y tratará finalmente de abrir un surco a través de la sugestión hipnótica de la Escuela de Nancy6. En el transcurso de esta búsqueda, Freud se encontró con un movimiento marginal a la cosmovisión imperante, las denominadas “fuerzas externas a la corriente principal” que finalmente lo llevará a tomar en serio ciertas cuestiones que hasta ese momento eran desestimadas por el modelo médico imperante. encontró con los “curanderos populares”, que En estos movimientos marginales, Freud se trataron estas afecciones con métodos alternativos a los tradicionales, realizaban procedimientos mediante la colocación de las manos, en base a los postulados del “magnetismo animal”. En la escuela de Nancy, descubrió que incluso algunos médicos franceses trataron a estos pacientes con la hipnosis, aunque fueron estigmatizados como “charlatanes” por la corriente positivista de la época (Cloninger, 2003). En este contexto, Freud, se impresionó por el trabajo de dos médicos que probaron un camino alternativo para la cura de estas afecciones; Jean Martin Charcot (Salpetrière) era uno de éstos, que a pesar de las críticas pudo demostrar que los síntomas psiquiátricos podían inducirse7 a través de la hipnosis. Y al mismo tiempo, Josef Breuer (prestigioso médico de Viena) demostraba que una paciente al traer a la memoria recuerdos tempranos durante un trance hipnótico, se alivió de sus síntomas cuando el trance terminaba. Ahora bien, como vemos, el hipnotismo tiene sus antecedentes metodológicos en el denominado “Magnetismo animal” de Franz Anton Mesmer (1734-1815), que como veremos tendrá mucha relevancia en los albores del psicoanálisis. Este modelo postulaba que: 1) filosofía natural, paradigma dominante entonces en la fisiología alemana. Tras esto, pudo abandonar el ejército y empezar a enseñar anatomía en la Academia de Bellas Artes de Berlín gracias a la ayuda que le proporcionó Alexander von Humboldt. 5 Escuela de Salpetrière: Freud, Gracias a la obtención de una beca para un viaje de estudios, viajó a París, en donde trabajó durante cuatro meses y medio en el servicio de neurología de la Salpêtrière bajo la dirección de Jean Martín Charcot, por entonces el más importante neurólogo francés. Allí tuvo ocasión de observar las manifestaciones de la histeria y los efectos de la hipnosis y la sugestión en el tratamiento de la misma. 6 Escuela de Nancy: El más importante centro de investigación del hipnotismo en toda Europa. 7 Charcot descubre que si ejerce presión sobre una zona (parálisis) los síntomas histéricos desaparecen, y su vuelve a presionar, reaparecen. Luego, mediante sugestión hipnótica, procura implantar en el hipnotizado un conjunto de ideas semejantes a las producidas por el traumatismo. Debido al estado de hipnosis, estas ideas quedan aisladas del estado de vigilia. Así, el médico logra que aparezcan parálisis y contracturas histéricas que luego hace desaparecer con la misma técnica. 4 hay un fluido físico que llena el universo y constituye el medio de unión entre el hombre, la tierra y los cuerpos celestiales, así como entre hombre y hombre. 2) la enfermedad es la consecuencia de la distribución desigual de este fluido en el cuerpo humano; la recuperación se logra cuando se restaura el equilibrio original. 3) con la ayuda de ciertas técnicas, ese fluido puede ser canalizado, adecuado y trasmitido a otras personas; y 4) de este modo se puede provocar crisis en los pacientes y curar sus enfermedades (Belloch, 2008). Mesmer propuso la teoría de que el cuerpo humano funciona como un imán de dos polos, con un flujo magnético invisible que atravesaba todo el cuerpo y era expulsado por uno de sus polos. Mesmer trató a una paciente usando el “magnetismo animal”, le hizo tomar un preparado de hierro y le adhirió tres imanes y pensó en crear una corriente artificial en su paciente: la paciente empezó a sentir extrañas corrientes que le recorrían el cuerpo hacia abajo, y paulatinamente sus síntomas fueron despareciendo durante varias horas. El imán, lo que hacía era, reforzar el magnetismo propio de la paciente y le daba una dirección. Más adelante descubrió que podía generar los mismos efectos sin hacer uso de imanes. De aquí en adelante, para Mesmer los estados hipnóticos serían consecuencia de la irradiación magnética del hipnotizador sobre el sujeto. Lo importante de la perspectiva mesmeriana, es que de ella se desprende la idea de “movimiento psicodinámico” como causa generadora de los cambios de estado físico y/o estado de movimiento de las corrientes magnéticas. En esta idea Mesmeriana Se sientan las bases para la idea de “fuerzas inconscientes” que están en movimiento (Belloch, 2008). Todas estas evidencias (la psicodinámica, el hipnotismo, los recuerdos olvidado, las histéricas, entre otros) hicieron que Freud cambiara finalmente el modelo puramente físico a un modelo psicodinámico, que se sostiene en el “determinismo psíquico”, en el que se entiende que los factores psicológicos (energía psíquica) son la causa del comportamiento. Lo anterior, en el entendido de que hay fuerzas (energía) a nivel inconsciente que van a determinar el comportamiento de una persona. Este cambio, marcó el curso del psicoanálisis y al mismo tiempo, generó una persistente distancia entre el modelo de la ciencia positivista y el modelo clínico psicoanalítico. En la actualidad, es posible darse cuenta que el psicoanálisis al estudiar el inconsciente, tiene como objeto de estudio una realidad que no responde a las leyes de la razón, por lo que, en 5 definitiva, el objeto de estudio es otro que el de las ciencias naturales. Hoy se asume que el saber del psicoanálisis es un no-saber, en la medida que el objeto (lo inconsciente) es extramundano y no empírico (Kaulino A. 2008). La sentencia del psicoanálisis para la época Victoriana es perentoria, “El sujeto nunca es lo que cree ser”, poniendo la sospecha sobre “el saber consciente”, toda vez que los motivos últimos son “inconscientes”. De esta manera, el psicoanálisis aporta con la “sospecha”: “puesto que las personas son falibles y capaces todas ellas de engañarse a sí mismas, y también de engañar a otros, se requiere la sospecha para entender los dobles sentidos” toda vez que el síntoma, o la conducta misma, no es sino un mensaje cifrado, en base al desplazamiento, la condensación y otros mecanismos de protección (Barton, J. 1998). De esta manera, para entender la propuesta psicoanalítica de la personalidad, tenemos que posicionarnos desde esta nueva lógica del pensar analítico. Ver al hombre en el doble sentido de su conducta, de sus síntomas o de su personalidad. El cifrado, como una relación entre fuerza (energía psíquica) y sentido, como significado (Ricoeur, P.1970). Más adelante, presentaremos antecedentes que permiten entender que toda formación inconsciente se ofrece con un sentido otro, mediante el desplazamiento y la condensación, dejando al sujeto consciente “despojado del dominio de su propia conciencia” en tanto que, lo consciente, deviene tal, como resultado de un arduo trabajo de “transformación”. El Inconsciente Freudiano: “La impotencia para curar desordenes mentales con métodos físicos era particularmente evidente en casos de histeria. La investigación en las parálisis histéricas mostró que el área afectada no correspondía a ninguna región anatómica o fisiológica objetivamente definible, sino a las nociones subjetivas, populares, muy erróneas en algunos casos, de los pacientes sobre la anatomía. Imposible pensar entonces que la parálisis estaba gobernada por factores mentales y no fisiológicos” (Maclntryre, A. 1958. P. 42). En un trabajo escrito por Freud y Breuer, se anuncia lo que habría de ser una de las doctrinas claves para el psicoanálisis: “Los Histéricos padecen por la mayor parte de reminiscencia”. Para entender lo que ellos afirman, es preciso entender los conceptos de Acontecimiento Traumático y el de Abreacción. 6 Un Trauma es un suceso que despierta emoción y es tan penoso por sí mismo o por las circunstancias en que se produce que esa emoción no se consigue expresar. Cuando esta, así estrangulada, se libera luego, se dice que es abreaccionada, de lo cual Freud tenía experiencia en pacientes a quienes había tratado mediante sugestión hipnótica. Esta liberación se asocia con el recuerdo de una escena que no se podía recuperar en la conciencia normal. Freud, relaciona sucesos traumáticos y abreacción, con la etiología de la histeria por medio de un tercer concepto que Freud hizo suyo. Es el de Represión. Un trauma provoca una emoción reprimida que, si no es abreaccionada y hasta que no lo sea, causará síntomas neuróticos como los que se manifiestan en las parálisis histéricas. Y sólo se podrá curar si se halla para la emoción reprimida, una salida diferente de ellos mismos: Algún método de abreacción (Maclntryre, A. 1958). De esta forma, el inconsciente es el reino de los recuerdos y las emociones reprimidas. A partir de estas observaciones, el inconsciente o lo inconsciente, entra en escena. Freud descubrió que aunque el paciente deseara recordar el evento traumático, para traerlo a la vida consciente, alguna fuerza interior le impedía hacerse consciente, y mantenía inconsciente los recuerdos. Por lo que, un poco más adelante, Freud, denominó a esa fuerza represión (ver recuadro 1) , y la describió como aquella operación psíquica que consiste únicamente en el hecho de separar y mantener a distancia de la conciencia los contenidos que pueden provocar displacer al yo- consciente (Laplanche, J. 1996). De esta manera, el reconocimiento de la represión condujo a un entendimiento dinámico de los procesos inconscientes, en la medida que son producto de fuerzas que están activas, “haciendo de las suyas”, pero de las cuales la persona no se percata, el psiquismo se resiste, por razones dinámicas, a unir, afecto y representación (Guiloff, N. 2009). 7 Recuadro 1. Aspectos Relevantes en la dinámica de la represión La represión actúa sustrayendo la investidura, es decir la carga afectiva a una representación. El representante de la representación sigue teniendo capacidad de acción dentro de lo inconsciente, lo que implica que sigue teniendo algo de investidura. Lo que se le quitó era la necesaria para acceder a la conciencia. La represión se hace necesaria debido a la tendencia del psiquismo a evitar el displacer. De los estímulos displacenteros externos podemos huir, de los internos no. Una condición para la represión es que la satisfacción de la pulsión conlleve más displacer que placer, por lo que se hace necesario reprimirla. La asociación libre es la producción de los eslabones entre el representante reprimido y la representación sustitutiva. Guiloff (2009) señala que el inconsciente incluiría todo aquello que no somos capaces de recordar incluye todo lo que no es capaz de acceder a la consciencia. Puede que estos contenidos no puedan acceder al campo de la consciencia porque son poco tolerables por ella, estos contenidos han sido reprimidos, o son propios del inconsciente se han creado ahí. Los contenidos del inconsciente son difícilmente accesibles a la consciencia, la información ahí contenida está reprimida, en este contexto la represión tiene un papel muy activo, es un esfuerzo o energía que se ejerce con el fin de alojar ciertos contenidos en el inconsciente, o desalojar contenidos de la consciencia olvidándolos activamente. Estos contenidos reprimidos están activos, vivos aún cuando olvidados, es decir ejercen una influencia total en el funcionamiento de la personalidad. 8 Recuadro 2. Situación Traumática Represión Afecto/ Representación Representación sustitutiva . Consciente Icc Representante de la representación. Resto de Afecto, Flotante, desligado de la representación. (recuerdo, con un poco de afecto) Síntoma, Sueño, Chiste Lapsus. Acto fallido (Nota: Ver Película, “el día en que Nietzsche Lloró”) Sínto ma La disociación de conciencia se describe por la existencia de contenidos conscientes y II. La Disociación Psíquica contenidos inconscientes. De esta manera la defensa por parte del yo, se instala como causa de esta disociación. La defensa es el conjunto de operaciones cuya finalidad consiste en reducir o suprimir toda modificación susceptible de poner en peligro la integridad y la constancia del individuo “biopsicológico”. El yo es aquella región de la personalidad que se intenta proteger de toda perturbación (por ejemplo: conflicto entre los deseos opuestos Amor/Odio). (Laplanche, 1996). De esta manera, la defensa actúa para mantener alejado de la conciencia todo cuanto altere el “estatus Quo” que pretende el yo. La defensa actúa tanto para los estímulos (traumas, excitación) externos. Como así también, la estimulación (deseos, instintos, afectos) que procede del mundo psíquico interno. 9 III. El Trauma. 3.1 Primera Teoría del tarumá: Una vivencia se torna traumática cuando el exceso de excitación sobrepasa la capacidad de elaboración psíquica. La vivencia traumática puede constituirse tanto a través de un único acontecimiento de gran intensidad como por una serie de sucesos que provocan excitaciones que serían tolerables si se dieran aisladamente. En todos los casos, el aumento de la cantidad de excitación es vivida como displacer. La hipótesis en esta época, sostiene que cualquier vivencia puede constituirse en traumática a condición de que después de producida, no se realice la descarga del afecto ni se integre en otras representaciones. En consecuencia, al permanecer como un cuerpo extraño en el psiquismo, se constituye un trauma y puede retornar mediante la producción de síntomas (Corrales, N. 2002) ). En un principio Freud creía que “siempre había una situación, una vivencia real, que generaba el trauma” (Pr ejemplo: en la histeria, corresponde a la seducción) 3.2 Segunda Teoría del Trauma. En el 18978 Freud escribe que “ya no cree más en su teoría de las neurosis” en especial en el ámbito del trauma, señala que ha dejado de considerar que el trauma que origina las neurosis sea ocasionado exclusivamente por una “seducción real” en la infancia, ya que, a pesar de lo investigado, no ha sido posible confirmar que todos los padres de los neuróticos sean perversos. Freud considera que lo inconsciente no se rige por el principio de realidad, razón por la cual no le es posible distinguir lo que es ficción de los que es verdadero. IV. El Tratamiento: Método Catártico. El método catártico es el primer método de trabajo clínico usado por Freud, su aplicación aparece como una variable al método de la hipnosis. Se estima que el método catártico aparece después de que la hipnosis fue abandonada por Freud, debido a que él no era un buen hipnotizador. 8 Carta a Fliess nº 69, del 21 de septiembre de 1987. 10 Freud se dio cuenta que no todas los pacientes eran susceptibles de ser hipnotizados, se dio cuenta que además, después de la hipnosis, los síntomas volvían y los más importante, como le interesaba llegar al recuerdo y que el paciente supiera de este recuerdo, se dio cuenta que la hipnosis no permitía que el paciente enriqueciera su personalidad, debido al olvido posthipnósis. De esta manera, el método catártico surge bajo la hipótesis de que éste lo que hace es descargar una carga afectiva que no se había descargado (en un primer momento se hace luego de inducir al paciente en un estado de hipnosis ligera). El Método catártico supone la existencia de una representación que no está en la consciencia y que se ha disociado de la carga afectiva que le corresponde, por lo que los síntomas lo que hacen es descargar de manera indirecta esa carga afectiva (energía). El método catártico lo que hace es, precisamente, descargar esta energía pr medio de la palabra, de tal forma que una paciente de Breuer (Ana O) denominó a este método como “Cura por la palabra” (Talking Cure). Luego, este método sufrió ciertas modificaciones, y después de probar muchas formas tales como la sugestión, Freud llegó al método utilizado hasta hoy en día para escuchar al inconsciente, al que denominó el “método de la asociación libre”, que consiste en que a un paciente se le pide que verbalice, que diga, todo lo que le venga a la cabeza, sin importar cuán insignificante, trivial o incluso desagradable, ridícula, vergonzosa, pueda parecer la idea, pensamiento o imagen. La asociación libre se basa en la premisa de que ninguna idea es arbitraría e insignificante (Guiloff, 2009) para el inconsciente. El análisis se puede comprender como un “trabajo” que se lleva cabo por medio de la construcción de un descifrado. Sin embargo, el significado descifrado no lo encontramos en el contenido que se realiza en la formación inconsciente (contenido manifiesto), sino, en el desciframiento del deseo reprimido que se realiza allí (Pérez, C. 2009). El acceso a este desciframiento del deseo, tiene una sola vía, “la forma” del contenido manifiesto, y tiene que ver con apuntar hacia el deseo que se realiza en esa transformación, el trabajo del psiquismo es precisamente producir estas formaciones, que son a su vez “deformaciones psíquicas”, es mantener el desalojo que permite el sentido en la escena social “normal”. 11 El análisis en este contexto, es un “trabajo” contra las resistencias, un trabajo que se enfrenta al “trabajo” del inconsciente. Lo que el analista quiere para su analizado, es que ese sentido inconsciente, devenga consciente para el analizado, sustituyendo así una conciencia inmediata y disimuladora, por una conciencia inmediata e instruida por el principio de realidad (Ricoeur. 1970). V. El Psicoanálisis es (Freud, 1922): a) Un método para la investigación de procesos mentales prácticamente inaccesibles de otro modo; b) Un método, basado en esta investigación, para el tratamiento de los trastornos neuróticos; c) Una serie de concepciones psicológicas adquiridas por este medio y que en conjunto van en aumento para formar progresivamente una disciplina científica”. Guiloff (2009) señala que a partir de estas apreciaciones podemos suponer que lo que quería decir aquí Freud es que: el Psicoanálisis es un método de investigación, es una forma de hacer psicoterapia pues tiene un procedimiento técnico y es además una teoría, una teoría de la personalidad. 12 Bibliografía de la Clase: - Barton, J. 1998. La Interpretación Bíblica. SalTerrae.Presencia Teológica. España. - Belloch, A. (2008). Manual de Psicopatología. Vol 1. McGrawHill. España. - Corrales, N. (2002). Teoría del Trauma. Longseller. Buenos Aires. - Cloninger, S. (2003). Teorías de la Personalidad. Pearson. México. - Freud, S. (1922). Encyclopédie. Viena. - Freud, S. (1933). 35ª conferencia: En torno a una Cosmovisión, O.C., Vol. XXII, Amorrortu. Buenos Aires. 1989. - Guiloff, Natasha. (2008) . Teoría de la Personalidad. UNIACC. Santiago. - Hernández Rodríguez, A. 2001. El Pensamiento de Sigmund Freud. Club Universitario. Alicante. España. - Kaulino A. (2008).Cartografía de la Psicología Contemporánea .Santiago. LOM - Laplanche, J. (1996). Diccionario de Psicoanálisis. Paidós. Buenos Aires. - Pérez Villalobos, C. (2009). Apuntes de Clase: Seminario de Hermenéutica y Psicoanálisis. ICHPA. Santiago. - Maclntryre, A. (1958/2001). El Concepto de Inconsciente. Amorrortu. Buenos Aires. - Ricoeur, P. 1970. Freud: Una Interpretación de la cultura. Siglo veintiuno Editores. España. 13