Por la Señal de la Santa Cruz. De nuestros enemigos, líbranos, Señor, Dios nuestro. En el Nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén. Creo en Dios, s, Padre Todopoderoso… 1º DOLOR DE MARÍA La Aflicción que Causó a Su Tierno Corazón, la Profecía del Anciano Simeón, cuando le dijo dijo: “Una espada de dolor atravesará Tu Alma.” Oración: ¡Oh, Bendita Virgen María, Madre de Dios! Por aquel Dolor que Tú, Señora, sentiste cuando Simeón Te profetizó que habrían de quitarle la vida a Tu Hijo Santísimo y que Él Te sería ‘Espada de Dolor’ que traspasaría Tu Alma: Te suplico humildemente, mildemente, nos alcances del Señor, ñor, verdadero dolor y arrepen arrepentimiento por nuestros pecados. Amén. 1 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. 2º DOLOR DE MARÍA La Tribulación que Padeció Su Sensible Corazón en Su Huida y Permanencia en Egipto, porque Herodes quería Matar al Niño. Oración: ¡Oh, Serenísima Reina de los Ángeles, Madre de Dios! Por aquel Dolor que Tú, Bendita Virgen, sentiste cuando tuviste que escapar a Egipto, para salvar de la muerte a Tu Hijo recién 1 “Ramillete de Divinas Flores”, 1910. Nacido, cido, ya que Herodes había mandado matar a todos los niños menores de dos años: Te suplico humildemente, nos alcances del Señor la sanación de todas nuestras culpas y heridas del pasado. Amén. 1 Padre re Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. 3º DOLOR DE MARÍA La Angustia que Experimentó Su Solícito Corazón, cuando Su Hijo Jesús, de Doce Años, se Perdió en el Tempo de Jerusalén. Oración: ¡Oh, Santísima Virgen María, Madre de Dios! Por aquel Dolor que Tú, Señora, tuviste cuando perdiste a Tu Amado Hijo y estuviste tres días sin hallarle: Te suplico humildemente, nos alcances de Su Divina Majestad todas las virtudes que perdimos por nuestros pecados, para que Le amemos y Le sirvamos con perseverancia, de ahora en adelante. Amén. 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. 4º DOLOR DE MARÍA La Agonía que Sintió Su Maternal Corazón al Encontrarse con Jesús, Camino al Calvario y verlo todo Flagelado y con la Cruz a Cuestas. Oración: ¡Oh, Soberana Reina de los Cielos! Por aquel Dolor Tuyo tan amargo, cuando viste a Tu Hijo querido cargado con el pesado leño de la Cruz sobre Sus Hombros, que era la carga de nuestros pecados: Humildemente Te suplico, nos alcances de Su Divina Majestad la l remisión de todas nuestras culpas, para que podamos gozar de la vida eterna. Amén. Amén 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. 1 5º DOLOR DE MARÍA El Martirio de Su Generoso Corazón, Asistiendo a Su Hijo Jesús en Su bárbara Crucifixión y Muerte. Oración: ¡Oh, Dolorosísima Virgen María, Madre de Dios! Por aquel Dolor que traspasó Tu Amante Alma, cuando viste a Tu Santísimo Hijo Crucificado en la Cruz, puesto entre dos ladrones, mofado y burlado de todos y muriendo en el mayor de los sufrimientos: Te suplico humildemente, nos alcances del Señor el don de la Gracia Santificante; y que antes de nuestra muerte podamos recibir Su Santísimo Cuerpo, con gran fe, pureza, devoción y amor. Amén. 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. Sepulcro, y la Soledad que sufrió hasta la Resurrección. Oración: ¡Oh, Afligidísima Virgen María, Madre de Dios! Por aquel gran Dolor que sentiste, cuando viste que llevaron a Tu Santísimo Hijo al Santo Sepulcro: Te suplico humildemente, nos ayudes y ampares, Bendita Virgen, y en la hora de nuestra muerte supliques a Tu Hijo, que por Su Infinita Misericordia, por Su Pasión y Muerte, y por Tus grandes Merecimientos, reciba nuestras almas en la vida eterna. Amén. 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. Una Salve a la Santísima Virgen por la conversión de todos nosotros, pecadores: 6º DOLOR DE MARÍA 1 Padre Nuestro, 7 Ave Marías y Gloria. 7º DOLOR DE MARÍA La Tristeza que Padeció Su Amantísimo Corazón, cuando contempló a Su Divino Hijo en el ¡Dios Te Salve, Reina y Madre!... LETANÍA DE LA DOLOROSA Madre del Crucificado. Madre Corredentora. Madre Dolorosa. Madre Lagrimosa. Madre Abandonada. Madre Despojada del Hijo. Madre Traspasada por la Espada del Dolor. Madre Colmada de Tristezas. Madre Colmada de Padecimientos. Madre de Corazón Lacerado. Fuente de Lágrimas. Ejemplo de Serenidad y Paciencia. Roca de Integridad. NOSOTROS Dios, Padre Celestial. Ten piedad de nosotros. Dios, Hijo Redentor del mundo. Ten piedad de… Dios, Espíritu Santo. Ten piedad de nosotros. Santísima Trinidad, Un Solo Dios. Ten piedad de… POR Oración: ¡Oh, Soberana Reina, Dulcísima Madre y Señora nuestra! Por aquel gran Dolor que padeciste, cuando recibiste muerto en Tus Brazos a Tu Hijo, completamente desfigurado: Te suplico humildemente, nos ayudes a traspasar nuestro corazón de dolor por el pecado del mundo para que, llenos de misericordia por los demás, podamos llegar a ver a Dios en la Gloria. Amén. RUEGA La Herida que penetró Su Piadoso Corazón, al recibir en Sus Brazos a Su Hijo Muerto, enteramente llagado y traspasado por la lanza. 2 N O S O T R O S Promesas de la Santísima Virgen a quienes Honren Sus Dolores Santa Brígida, Suecia (1302-1373) P O R Ancla de Seguridad. Escudo de Defensa. Hogar de los desamparados. Fortaleza de los débiles. Sosiego de los atribulados. Consuelo de las viudas Libertad de los oprimidos. Salvación de los náufragos. Paz en las tormentas. Esperanza de los incrédulos. Medicina de los moribundos. Perla de las Vírgenes. Visión de los Profetas. Modelo de los Apóstoles. Luz de los Confesores. Corona de los Mártires. Primicia de los Bienaventurados. Alivio de las Almas del Purgatorio. Terror de la Serpiente. Vencedora del Mal. R U E G A La Santísima Virgen concede 7 Gracias a las almas que le honran diariamente, meditando Sus Dolores, con el rezo de una Avemaría en cada Dolor. 1. 2. 3. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo. Perdónanos, Señor. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo. Escúchanos, Señor. Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo. Ten Misericordia de nosotros. Oración: Te suplicamos, ¡oh, Señor Jesucristo!, que la Bienaventurada Virgen María, Tu Madre, cuyo Corazón Inmaculado fue traspasado por la Espada del Dolor, interceda por nosotros, ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén. 4. 5. 6. 7. “Pondré paz en sus familias.” “Serán iluminadas en los Divinos Misterios.” “Los consolaré en sus penas y acompañaré en sus trabajos.” “Les daré cuanto Me pidan, con tal que no se oponga a la Voluntad adorable de Mi Divino Hijo, y a la santificación de sus almas.” “Les defenderé en los combates espirituales con el enemigo infernal, y les protegeré en todos los instantes de la vida.” “Les asistiré visiblemente en el momento de su muerte; verán el Rostro de su Madre.” “He conseguido de Mi Divino Hijo: Que, cuantos propaguen esta Devoción, sean trasladados de esta vida terrenal a la felicidad eterna, directamente, pues serán borrados todos sus pecados, y Mi Hijo y Yo seremos su eterna Consolación y Alegría.” 3