procedencia de la consulta / discrepancia

PROCEDENCIA DE LA CONSULTA / DISCREPANCIA.- INTERVENCIÓN DELEGADA EN LA
CONSEJERÍA DE MEDIO AMBIENTE
CODIGO.- 4DMAM/11/07
CUESTION PLANTEADA: Tramitación de documentos contables de retención de crédito RC
FECHA.- 27 de abril de 2011
CONTESTACIÓN:
El artículo 108 de la Ley 2/2006, de 3 de mayo, de la Hacienda y del Sector Público de
la Comunidad de Castilla y León establece el carácter limitativo de los créditos y prohíbe que se
autoricen, se comprometan y se reconozcan obligaciones por cuantía superior al importe de los
créditos autorizados en los estados de gastos de los Presupuestos. En el artículo 109 de la
citada Ley, se determina el carácter vinculante de los créditos, con sujeción a las clasificaciones
orgánica y funcional.
Para garantizar el cumplimiento de las obligaciones y evitar el incumplimiento de la
limitación cualitativa y cuantitativa de los créditos a que se ha hecho referencia en el párrafo
anterior, en el procedimiento de gestión de los gastos con cargo al Presupuesto de la
Comunidad, se requiere la tramitación y aprobación de un expediente de gasto en el que, de
acuerdo con la naturaleza de este, resulta necesaria la acreditación de la existencia del crédito
adecuado y suficiente en las partidas presupuestarias a las que ha de imputase. Dicha
acreditación se efectúa a través de un documento de retención de crédito (RC). De manera
específica, en materia de contratación administrativa, la Ley de contratos del Sector Público, en
su artículo 93, dispone expresamente que deberá incorporarse al expediente el certificado de
existencia de crédito o documento que legalmente le sustituya y, en materia de subvenciones, el
artículo 33 de la Ley de Subvenciones de la Comunidad, exige que con carácter previo a la
convocatoria o a la concesión en los casos en los que aquella no proceda, deberá efectuarse la
aprobación del gasto en los términos previstos en la Ley de la Hacienda y del Sector Público de
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la Comunidad de Castilla y León, para lo cual es necesario acreditar la existencia de crédito
adecuado y suficiente mediante el oportuno certificado de retención.
En cuanto al procedimiento de retención de créditos para gastar, a falta de normativa
propia en la Comunidad, podemos acudir a lo dispuesto en la Instrucción de Operatoria
Contable del Estado, aprobada por la Orden del Ministerio de Economía y Hacienda de 1 de
febrero de 1996. No obstante, teniendo en cuenta tanto las distintas estructuras orgánicas entre
la Administración del Estado y la Administración de la Comunidad, como las diferencias de
concepción de los sistemas contables de ambas Administraciones, únicamente sirve a estos
efectos los principios básicos del procedimiento.
La Regla 14 de la referida Instrucción Contable parte de la base de que al inicio de
cualquier expediente de gasto ha de certificarse la existencia de crédito disponible para su
realización. En la Administración del Estado, participan inicialmente en este proceso el servicio
gestor, a quien corresponde la tramitación del expediente, y la oficina de contabilidad. El primero
expide el documento de retención de crédito; la oficina de contabilidad efectúa su registro y el
sistema expide un certificado que la intervención valida y remite al órgano gestor. No obstante,
actualmente, en virtud de lo dispuesto en la Resolución de la Intervención General de la
Administración del Estado de 22 de octubre de 2004, los servicios gestores no precisan remitir
los documentos a la oficina de contabilidad, debiendo proceder en tal caso a la captura directa
de los datos en el sistema de información contable.
En la Administración de la Comunidad, aparte del servicio gestor del expediente y de la
intervención, participan otras unidades administrativas: los servicios de asuntos económicos
(gestión económica o administración económica, según los casos), y son precisamente estos los
encargados de expedir los documentos de retención de crédito a solicitud de los servicios
gestores. Una vez expedidos y firmados por los jefes de los servicios de asuntos económicos,
se remiten a la intervención solicitando su validación en el sistema contable. Por lo tanto, son
los servicios de asuntos económicos quienes, a la vista de la petición recibida del órgano gestor,
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han de verificar la disponibilidad de crédito en las partidas presupuestarias con cargo a las que
se imputará el gasto proyectado y evaluar su adecuación a la naturaleza del mismo, expidiendo,
si lo estiman conforme, el documento de retención de crédito RC. El registro definitivo en el
sistema contable se realiza por las intervenciones delegadas, quienes validarán o rechazarán el
documento a la vista de las comprobaciones que le permita realizar la documentación que le
sea remitida. Hay que tener en cuenta que las verificaciones realizadas en esta fase no forman
parte de las propias de la función interventora; son meros actos de gestión contable que no
condicionan el sentido de posteriores informes que se lleven a cabo en el momento de la
fiscalización del expediente. No obstante, creemos conveniente, con objeto de evitar futuros
reparos derivados de la inadecuación del crédito, que el servicio de asuntos económicos adjunte
al documento RC que remite a la intervención la petición realizada por el servicio gestor del
expediente, entendiendo por tal el centro de gasto según la clasificación orgánica de los
créditos, teniendo en cuenta también las normas de desconcentración o delegación que
resulten aplicables. La aportación de esta documentación cobra especial relevancia en los
expedientes exentos de fiscalización previa, ya que en estos, la subsanación de posibles
defectos derivados de la aprobación de gastos con cargo a créditos inadecuados exigirá
posteriormente complejos procesos de subsanación.
La siguiente cuestión planteada en la consulta hace referencia a quién debería suscribir
la petición de retención de crédito dirigida a los servicios de asuntos económicos. Si tenemos en
cuenta que en la dinámica de gestión de la Administración, una unidad administrativa, de
acuerdo con las competencias que le corresponden, es la que tramita los expedientes de gasto
y reúne toda la documentación que sea necesaria para proponer al órgano competente la
aprobación del expediente y en su caso, la autorización del gasto, entendemos que dicha
petición debería formularse por la unidad administrativa a quién corresponde proponer
aprobación del expediente. En cualquier caso, en lo que a la intervención respecta, en
consonancia con lo expuesto en el párrafo anterior, lo esencial es que el documento RC esté
firmado por el jefe del servicio de asuntos económicos, siendo este quien debe valorar en todos
sus aspectos la petición recibida del órgano gestor.
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Como resumen de lo expuesto y en contestación a las cuestiones planteadas, esta
Intervención General concreta su parecer en las siguientes
CONCLUSIONES:
1. En el procedimiento de gestión de los expedientes que den lugar a la realización de
gastos, ha de acreditarse la existencia y retención del crédito adecuado y suficiente mediante la
incorporación a los expedientes de los documentos RC, con carácter previo a su aprobación.
2. La solicitud del documento contable de retención de crédito suscrita por el jefe de la
unidad administrativa a quien corresponda proponer la aprobación del expediente, deberá
dirigirse al servicio de asuntos económicos, quién valorará la procedencia de su expedición, en el
marco de las funciones que tenga atribuidas.
3. Una vez expedida la retención de crédito se remitirá a la intervención para su
validación, acompañando, si se estima oportuno, la solicitud del servicio gestor, con objeto de
completar la información que permita valorar la adecuación de la naturaleza del crédito al
expediente de gasto.
4. La validación por la intervención delegada de los documentos contables RC tiene la
consideración de un acto de gestión contable; no forma parte de las verificaciones propias del
ejercicio de la función interventora y, por tanto, no condiciona el sentido de futuras actuaciones
de control.
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