EN TIEMPO DE CRISIS ¿QUE ES MEJOR, REPARAR EL ORDENADOR O COMPRAR UNO NUEVO? Una cuestión que se nos plantea cuando se nos estropea el ordenador o incluso un periférico del mismo es precisamente esta: ¿Qué es mejor, arreglarlo o cambiarlo por uno nuevo? La respuesta no es fácil, y menos en tiempos de crisis económica. Es una respuesta que va a depender siempre de una serie de factores a tener en cuenta, sobre todo porque en tiempos de crisis la teoría del por un poco más... no es tan válida como en tiempos normales. Además, siempre tenemos que ver qué es exactamente lo que hay que reparar, ya que, por costos y por otros puntos a considerar, no es lo mismo que lo que se nos haya estropeado sea un lector de DVD, un disco duro o la placa base. A esto se une el que en informática prácticamente no existe la reparación de componentes. Casi siempre esta consiste en la sustitución del componente estropeado por uno nuevo, y esto es así no solo por la dificultad técnica que implica reparar un componente estropeado, sino porque es generalmente también la opción más económica, y pongo un claro ejemplo. Siguiendo con los lectores de CD/DVD, si se estropea el láser o el motor (que además es lo que se suele estropear) es muchísimo más caro repararlo que comprar un lector (o regrabador, que están en el mismo caso) nuevo. Y no es este el único componente en el que se da este caso, se da en la práctica totalidad de componentes, con el agravante de la falta de materiales para realizar estas reparaciones. Por otro lado, la frase se me ha roto el ordenador, tomada como la ruptura del conjunto, es cierta en un número realmente limitado de ocasiones, ya que en el 99% de las veces tan solo se ha roto un componente del mismo. Vamos a ver este tema separando por un lado lo que es el ordenador en sí (la CPU, para entendernos) y por otro los periféricos (componentes externos conectados al ordenador). UNIDAD CENTRAL (CPU): En tiempos de crisis no es tan válida la idea de aprovechar una avería en el ordenador para cambiarlo por uno nuevo, pero tampoco es una opción que debamos descartar a priori, ya que actualmente hay ordenadores (me refiero solo a la unidad central) con unas buenas prestaciones y unos precios realmente bajos. Como ya he dicho antes, en un ordenador se suele estropear uno de sus componentes, dos a lo sumo, y con los precios actuales la sustitución de estos no suele ser muy cara. Una placa base de gama media suele estar por debajo de los 60 euros, por poner un ejemplo, a lo que hay que sumarle la mano de obra. Pero hay una muy importante cuestión a tener en cuenta, y es, en ordenadores con una cierta antiguedad, la imposibilidad de encontrar componentes que le sean compatibles. Placas base para ordenadores INTEL por debajo de P4-775 o de AMD por debajo de las actuales con socket AM2 hay muy pocas (y por debajo de P4-478 o AMD 754, ninguna), lo que nos obliga a recurrir al mercado de 2ª mano, y con los procesadores ocurre algo muy similar. Los discos duros más pequeños que se encuentran son de 160 GB, incompatibles con la mayoría de las placas base antiguas, y en cuanto a las memorias, tampoco es ya fácil encontrar módulos por debajo de DDR-400. Es cierto que siempre se puede recurrir a compras Online, pero aun así no es fácil encontrarlas, y menos asegurar que nos van a servir. Además, en estos casos los precios suelen subir bastante. La teoría de que al ser antiguo va a ser más barato, en el caso de los componentes informáticos, no se cumple. Por poner un ejemplo, una memoria DDR-400 de 1GB es mucho más cara (y al decir mucho más cara me refiero a casi el triple) que una memoria DDR2-800 de 1GB de la misma marca. Realmente, si salvamos el problema que puede suponer encontrar el elemento a sustituir, va a salir más barato reparar un ordenador (sustituir la pieza estropeada) que comprar uno nuevo, pero por otro lado hay que tener en cuenta que se va a tratar de una inversión a fondo perdido. Esto es algo que en tiempos de crisis hay que asumir más que en otras épocas, pero aun en estos tiempos, a veces reparar no es la opción más interesante. Ahora bien, en todo caso se debe pedir un presupuesto de reparación, ya que en muchísimos casos podemos tener de nuevo operativo nuestro ordenador por menos de 100 euros (a veces, bastante menos), y a este precio sí que no hay ningún ordenador nuevo. Por supuesto es esta una decisión que cada uno debe tomar según su situación, pero, en tiempos de crisis, alargar la vida del ordenador es siempre una opción a tener en cuenta. PERIFERICOS: En este apartado entra un número muy importante de elementos, que van desde los más básicos e imprescindibles (teclado, ratón, monitor y, en algunos casos, impresora o altavoces) hasta cualquier cosa que conectemos al ordenador. Teclado y ratón La reparación del teclado o del ratón, salvo en muy limitados casos (teclados o ratones especiales, de muy alto precio), queda descartada, ya que ni hay disponibles piezas para repararlos ni por costo compensaría hacerlo. Si somos manitas podemos intentarlo nosotros mismos, por si se tratara solamente de un problema de suciedad o de un cable suelto (que es bastante raro), pero en general la opción lógica es comprar uno nuevo. Además, los hay realmente económicos, que para salir del paso nos van a servir. Monitor Si de una avería del monitor se trata, lo primero que hay que ver es el tipo de monitor y lo segundo, su antiguedad. los monitores por lo general tienen una garantía de 3 años, y desde luego, nunca menos de 2 años. En caso de avería una vez terminado este periodo, lo que procede es llevarlo al taller y que nos hagan un presupuesto de la reparación (es posible que este presupuesto lo cobren si no se acepta). Aquí se nos plantean también dos posibilidades: - Monitor CRT Un monitor CRT no se encuentra (al menos es bastante difícil) nuevo, ya que son muy pocos los modelos que siguen en producción, pero hay un mercado muy extenso de este tipo de monitores de 2ª mano, en muy buen estado, y con unos precios (para un monitor de 17'') a partir de 25 euros. Ante esto, salvo que sea un fusible roto, nunca va a interesar repararlo. - Monitor TFT (LED) Aquí es más difícil la elección y se hace necesario un presupuesto. Lo que sí que tenemos que tener siempre presente es que hay monitores TFT nuevos (con pantalla panorámica de 19'') a partir de 100 - 120 euros, que por marca desconocida o bajos de gama que sean van a tener unas prestaciones superiores a un TFT con 3 años de antiguedad y que nos vamos a encontrar con solo con un monitor nuevo sino con otros 2 o 3 años de garantía. Además, las posibilidades de que una reparación de un monitor de este tipo baje de ese precio no son muchas, y prácticamente se limitan a un fallo en la fuente de alimentación. Impresora Estamos ante un caso muy similar, en el que hay que tener muy en cuenta el tipo de impresora que tenemos. La regla de que impresoras con más de dos/tres años no merece la pena repararlas sigue siendo válida, sobre todo por precio, ya no se trata solo de por un poco más tengo impresora nueva, sino de que, salvo en impresoras de gama alta, o es una tontería la avería o siempre va a salir más cara la reparación que una impresora nueva, sobre todo si tenemos en cuenta el costo de los cartuchos. No obstante, siempre es interesante pedir un presupuesto de reparación, pero una vez que tengamos el presupuesto, si este pasa de los 50 euros es el momento de darse una vuelta por algunas tiendas de informática y centros comerciales a ver qué ofertas hay. En general, cuando de un periférico se trata, y una vez fuera de garantía se entiende, no son muchas las ocasiones en las que sale más rentable reparar que sustituir, aunque en productos de un cierto valor se debe pedir siempre un presupuesto de reparación. CONCLUSION: En el caso de la unidad central, siempre que se encuentren los componentes necasarios y compatibles, va a ser más rentable reparar nuestro ordenador que comprar uno nuevo, y aunque es esta (la avería en el ordenador) una de las circunstancias que se suele aprovechar para cambiar de equipo, esto siempre va a suponer un gasto mucho mayor. Cuando de un periférico se trata, la cuestión cambia bastante, y salvo en monitores TFT, impresoras de gama alta o averías realmente de poca importancia, la opción de cambiarlo por uno nuevo suele ser la mejor. No obstante, siempre debemos pedir un presupuesto de reparación, y una vez que lo tengamos, ver las opciones que el mercado nos ofrece.