TERCERA PARTE EL CASO PORTUGUES INTRODUCCION Portugal ha representado, junto con nuestro país, uno de los casos más significativos de organización corporativa en la agricultura. Casi^medio siglo de corporativismo estatal en el marco de un régimen dictatorial como el Estado Novo salazarista, ha marcado sustancialmente las dinámicas asociativas en la agricultura portuguesa y los procesos , de articulación entre los poderes públicos y las organizaciones agrarias. Como se sabe, la restauración democrática se inició el 25 de abril de 1974 con el golpe militar dado por el M.F.A. (Movimiento de las Fuerzas Armadas), desarrollándose un proceso de cambio social que atravesó los lugares más recónditos de la sociedad portuguesa, y en el que la agricultura protagonizó acontecimientos de la máxima relevancia: El caso portugués constituye, pues, un caso de diFicil comparación con los otros .dos ya estudiados. Por eso, el análisis que aquí se expone tiene unas particularidades que lo distinguen del realizado para Francia e Italia. En primer lugar, se ha dedicado una especial atención a la organización corporativa instaurada por el Estado Novo, ya que su análisis constituye un paso obligado para comprender la génesis y desarrollo del asociacionismo democrático iniciado tras el 25 de abril. En este análisis se ha procurado deslindar, de un lado, los aspectos jurídicos e ideológicos del corporativismo portugués, y de otro, la realidad de las formas organizativas y de las dinámicas sociales en que se materializaron sus distintas instituciones ^remios, siñdicatos, casas do povo, corporación da lavoura, federaciones, cámara corporativa... La distinción de estos dos niveles es necesaria para comprender la naturaleza y funcionamiento de un sistema de organización social, económica y política que fue construyéndose sobre la marcha, sin responder a un modelo previamente diseñado. 447 En segundo lugar, se ha analizado de forma descriptiva la política agraria desarrollada a lo largo de las casi cinco décadas de duración del Estadó Novo, estableciéndose una periodización que guarda cierta coherencia desde el punto de vista de los objetivos de ésta investigación. Así, se ha situado el punto de partida en la instauración del Estado Novo tras el derrocamiento de la I República en 1926, cerrándose la primera etapa con la promulgación de las normas relativas a los O.C.E. (Organismos de Coordinación Económica) en 1936. Después, el análisis se ha ^entrado eri una segunda etapa caracterizada por lo que se ha denominado, en un sentido amplio, «coyuntura de guerra» .(1936-1945), entendiendo por ella el impacto en Portugal de la guerra civil española y de la II guerra mundial. Los años de postgue• rra y de reconstrucción económica en Europa (1946-1960), son aquí tratados como una ter^era etapa, especialmente rica en debates sobre el modelo de desarrollo que debía seguir Portugal para unirse al tren del crecimiento económico que estaba comenzando a marchar en los países europeos occidentales. Las guerras coloniales iniciadas a comienzos de los años sesenta y la crisis política consecuente, abren una cuarta etapa, de tipo involucioñista, en la que el régimen del Estado Novo se replegaría sobre sí mismo en un intento por cerrar filas ante las amenazas de inestabilidad tanto interna como externa. En tercer lugar, se ha abordado el proceso de-restauración democrática, tomando como punto inicial de referencia el estallido revolucionario del 25 de abril de 1974. La «revolución de los claveles» se entiende aquí como el resultado de las contradicciones económicas, politicas y socia.les que venían acumulándose a lo largo de los últimos años del salazarismo y durante la llamada «reforma mar ^elista», representando, pues, el comienzo de la restauración democrática en Portugal y el: comienzo también de un período intensamente conflictivo, en el que los contenidos de la politica general y agraria no fueron rnás que el reflejo directo de las reivindicaciones emanadas de los movimientos sociales. La institucionalización del proceso democratizador portugués en 448 la línea de las democracias occidentales, significó encauzar el proceso de elaboración y aplicación de la política agraria por cauces de mayor centralización, iniciándose, con ello, una etapa de reafirmación del poder público central en detrimento de la dinámica generada en los niveles locales y regionales. La culminación de todo este proceso ha sido la adhesión de Portugal a la C.E.E., abriendo un período de incertidumbre para amplios sectores de la agricultura portuguesa. Por último, en cuarto lugar, se ha analizado el actual panorama asociativo existente en la sociedad rural portuguesa, y la participación de las organizaciones profesionales en las instituciones relacionadas con la politica agraria. En este sentido, se ha centrado el análisis en las estructuras organizativas de los dos grandes sindicatos -C.A.P. y C.N.A.- y en su participación en instituciones como la E.P.A.C., la J.N.V. o el Gabinete do Planeamento. El análisis se cierra con la victoria electoral del P.S.D. en 1986 y el nombramiento de Cavaco Silva como presidente de gobierno, por lo que no se mencionan aquí las reformas introducidas recientemente por su gabinete en los temas agrarios. No obstante, y salvo los recientes proyectos sobre la reforma agraria, la politica seguida por el gobierno de Cavaco Silva apenas ha tenido incidencia en el tema asociativo y en los ejes principales del marco institucional que aquí se expone. 449