Documentos. - XIV EL INSTITUTO PASTEUR POR J A G Q U E S Director del TRÉFOUEL Instituto Pasteur y R. DUJARRIC DE LA RIVIÉRE Secretario General del Instituto Pasteur E d i t a d o con motivo d e l cincuentenario de la muerte de Loujs Pasteur MINISTERIO DE INFORMACION DE LA REPUBLICA FRANCESA '(OFICINA CENTRAL PARA AMERICA DEL SUR) EL INSTITUTO P A S T E U R Por JA.CQUES TREFOUEL y R. DUJARRIC DE LA R1VIERE Director del Instituto Pasteur' Secretario General del Instituto Pasteur I N T R O D U C C I O N didos de suero antidiftérico afluyeron de todas partes, y los locales del Instituto Pasteur resultaron insuficientes para albergar estos nuevos servicios. El diario "Le Fígaro" tomó la iniciativa de organizar una suscripción cuyo producto fué de un millón de francos. EBta suma fué empleada en poner en condiciones la propiedad de Garches, que el Gobierno había puesto a disposición de Pasteur cuando realizaba sus estudios sobre la rabia; allí se instalaron las caballerizas para los caballos productores de suero. En una gris mañana de octubre de 1895, en el atrio de Notre-Dame, el Presidente Poincaré, que en ese entonces era Ministro de Instrucción P ú blica, saludaba los despojos mortales de Pasteur: "Mucho más que el carácter oficial de las exequias, más que los honores militares que se tributan, el mudo y respetuoso recogimiento de la población de París testimonia lo cruel de la per dida que sufren a la vez Francia y el mundo civilizado". La importancia de los servicios rendidos por Pasteur justificaba este duelo universal. Con sus estudios sobre los fermentos, las enfermedades de los gusanos de seda y el carbunclo, contribuyó ;a restablecer industrias desfallecientes, a tranquilizar a miles de agricultores* a sembrar la prosperidad o evitar la devastación en provincias enteras, prodigando en torno suyo los tesoros de su genio. Cuando el curso de sus trabajos lo llevó a inclinarse sobre el dolor humano, consagró todas sus fuerzas a aliviarlo, dió "a su piadosa ciencia, el soplo del amor y el encanto de la bondad". Más adelante, nuevas donaciones permitieron adquirir un amplio terreno entre la Rué Dutot y la Rué Vaugirard, en el cual se edificó un I n s tituto para los servicios de Química, y un hospital en que los métodos de Pasteur se aplicarían a la terapéutica. EL SERVICIO Se tendrá una idea del valor de la vacunación antirrábica si se considera que antes de 1886 las estadísticas oficiales indicaban que de 100 personas mordidas, cerca de 47 morían de rabia: esta mortandad alcanzaba un 80 o]o de las personas mordidas en la cara. Entre 1886 y el 1 ? de enero de 1942', de 53.755 pacientes tratados por el método de Pasteur sólo fallecieron 151, o sea un promedio de 0.28 por mil. Desde 1925 no se registraron decesos entre las personas tratadas. El valor de la obra de Pasteur aseguraba ya su perennidad, pero además, el maestro dejó una doctrina, una técnica de trabajo, alumnos animados por su espíritu, y un Instituto de Investigaciones. Cuando se conocieron los resultados de la vacuna antirrábica, los enfermos acudieron de todas partes del mundo y el local que ocupaba P a s teur en la Escuela Normal, aún ampliado, llegó a ser insuficiente en 1886. Por iniciativa de la Academia d e Ciencias, se abrió entonces una suscripción publica internacional para ofrecer a pasteur un Instituto de Microbiología en el que Podría desarrollar sus métodos y formar a jóvenes sabios. Franceses y extranjeros de todas las SCK al s ? ® contribuyeron a esta suscripción, cuyo producto alcanzó a 2.500.000 francos; diPermitió adquirir un terreno en la caaue lie™ J ® e l . c u a l s e construyó el Instituto que lleva el nombre de su fundador. (1). df R™,v SPscoUbÍL í r e la la El método de vacunación que se emplea siguo siendo el de Pasteur; al mismo tiempo que se practicaban las vacunaciones, se proseguían las investigaciones originales, con el fin ya de facilitar la vacunación en ciertas condiciones, ya de determinar con mayor precisión la naturaleza y el comportamiento del virus rábico, las distintas formas en que este virus pasa a la saliva de los animales enfermos o su progresión en los troncos nerviosos. (1) "Ya está construida esta gran casa; puede decirse que cada una de sus piedras es el s i g n o material de un pensamiento generoso". (Discurso de Pasteur en la inauguración del I n s t i t u t o ) . cé ebre i comunicación del doctor aeroterapia de la difteria, los pe— ANTIRRABICO 3 _ OTROS SERVICIOS DEL PASTEUR siguen alumnos llegados de todas partes del mundo, comprende más de cien lecciones. Pero por más importantes y útiles que sean, estas lecciones no pueden ser suficientes. En los distintos laboratorios del Instituto Pasteur, los alumnos se ponen al corriente de las técnicas que han de serles útiles para las investigaciones que realicen. La enseñanza mutua, con todas slis ventajas, f u é siempre una regla en el Instituto Pasteur. En torno al Servicio de Microbiología Técnica, se agrupan diversos servicios de Bacteriología: el de los Anaerobias, el de los Ultra-Virus y el de I n m u nología. a) Servicio de los Anaerobias. — Empezando con los magníficos trabajos de Pasteur, los de Veillon y de Weinberg, el estudio de los anaerobias ocupó siempre y con razón un lugar importante en el Instituto Pasteur. El diagnóstico de las especies según los caracteresde sus culturas, las lesiones que provocan en el animal, y sus caracteres inmunológicos, se completa en la actualidad con investigaciones bioquímicas. b) Servicio de los Ultra-Virus. — Ya en 1881 Pasteur había emitido la hipótesis de que el virus rábico es t a n pequeño que no es posible verlo, y Roux escribía en 1903 que "las dimensiones de los microbios pueden ser menores que lo que alcanzamos a ver con un microscopio". El poder patógeno de ciertos productos patológicos en los que los métodos habituales no revelaban la presencia de microbios visibles permitía afirmar la existencia de virus llamados "ultravirus" porque rebasaban las posibilidades de los medios ópticos de los cuales se disponía entonces. Importantes perfeccionamientos de la técnica bacteriológica permitieron en estos últimos años precisar los caracteres de estos "ultravirus". Como lo escribía Roux, "los microbios invisibles no eran sino seres teóricos; los trabajos recientes les dieron una realidad". Los demás servicios corresponden también a las diversas investigaciones realizadas por Pasteur. Representan actividades muy diversas, ligadas entre sí por técnica de base común. En efecto, la técnica de Pasteur se h a adoptado en numerosos dominios; en la medicina, en la veterinaria, én la agricultura, en las industrias de fermentaciones, etc. Fueron discípulos de Pasteur quienes descubrieron las toxinas microbianas y su acción sobre el organismo, las antitoxinas y su poder curativo, quienes penetraron el secreto de las reacciones celulares y humorales que constituyen la inmunidad, quienes inventaron- los m é todos de diagnóstico basados en ciertas propiedades de la sangre y los humores, quienes, por fin. descubrieron sueros y vacunas. Discípulos de P a s teur demostraron el papel de los microbios en la etiología de las epizootias; descubrieron que ciertos microbios del suelo eran nitrificadores, y que otros, que viven en simbiosis con las leguminosas, absorben el nitrógeno del aire; lv'cieron realizar importantes progresos a la industria, estudiando los fermentos. I. — SERVICIO DE MICROBIOLOGIA TECNICA Constituye la base esencial del Instituto P a s teur, ya que el valor de los trabajos bacteriológicos depende de la perfección de la técnica. P a s teur no nos dejó solamente una obra científica de admirable ordenación, y que es en sí para los trabajadores un ejemplo de concepción potente y realización perfecta. Nos dió además una técnica, que en el Instituto Pasteur ss trasmite de una a otra generación de experimentadores, m u cho más por la enseñanza oral y práctica que por los escritos. Es una verdad evidente para todos los discípulos de Pasteur qüe una rigurosa técnica es la base de toda educación bacteriológica. Allí se conservan las culturas microbianas que permiten a los trabajadores del mundo entero estudiar con facilidad los caracteres de los microbios que les interesan. Allí se precisan los c a racteres morfológicos, biológicos, y las condiciones de cultura y de virulencia de los gérmenes. Allí sigue estudiándose esa variabilidad de las formas bacterianas que Pasteur, Cliamberland y Roux señalaban ya en 1880; allí se precisan las condiciones antigénicas de las bacterias y las r e laciones que existen entre sus caracteres morfológicos y sus diferencias antigénicas. Este laboratorio permanece en contacto directo con los hospitales, según la tradición de Pasteur, quien, como Chamberland y Roux, visitaba a menudo los hospitales para efectuar tomas. Aquí, la clínica y el laboratorio se prestan u n mutuo apoyo; el clínico no puede prescindir de los recursos del laboratorio para los diagnósticos de cada día, y las enfermedades ofrecen al bacteriólogo un magnífico material de estudio. La enseñanza de la bacteriología constituye una importante actividad de este servicio. Desde la inauguración del Instituto Pasteur se organizó un curso de Microbiología, que comprendía treinta lecciones. La claridad y la precisión de la enseñanza que impartía entonces el Dr. Roux quedaron célebres en el Instituto Pasteur, y aseguraron desde el principio un amplio y legítimo éxito a los cursos. Hoy, el curso del Instituto Pasteur, que — INSTITUTO Así f u é como los discípulos de Pasteur descubrieron virus en la etioloeía de la perineumonía, de la rabia, de la polymielitis, de ciertas encefalitis, de la grippe y de la psitacosis. Recientemente el Servicio de los Virus fué reacondicionado para permitirle utilizar las nuevas e interesantes técnicas de estudio de los virus: luz ultravioleta, microscopio electrónico, centrifigadoras de gran velocidad y ultra-filtración. El descubrimiento de un principio bacteriófago realizado por d'Hérelle en el Instituto Pasteur originó numerosos trabajos. ¿Se t r a t a de la acción de un ser vivo o de una autolísis trasmisible? ¿Son los bacteriófagos soporte material de nuevos caracteres hereditarios? ¿Cuál es la radio-sensibilidad del bacteriófago? Tales son los temas de las investigaciones que se prosiguen en nuestros laboratorios. c) Serología e Inmunología. — En muchos de sus trabajos, Pasteur demostró que atribuía una importancia particular a las cuestiones de "terreno". Especialmente en sus publicaciones sobre el cólera de las gallinas, el carbunclo y las enfermedades de los gusanos de seda, son numerosos los textos que lo demuestran formalmente (1). (1) Pasteur-Vallery 22[XI|3'3; pág\ 4 mT-W. Raclot; Presse Médicale. Por eso, desde que empezó a funcionar el Instituto Pasteur sé confió un servicio a E. Me-chnikoff, que aportaba una nueva teoría de la Inmunidad. Desde entonces fueron numerosos los trabajos que se realizaron en este Servicio del Instituto Pasteur, sobre inmunidad local, anafilaxia, vacunación a n t i a n a f i l á c t i c a , alergia y anergia. Desde hace algunos años se han emprendido investigaciones sobre la anatomía patológica de la inmunidad. II. — SERVICIOS DE FISIOLOGIA Se logró realizar interesantes investigaciones adaptando ciertas técnicas fisiológicas a la Bacteriología. En efecto, los fisiólogos aportaban una rigurosa técnica experimental que permitía abordar con probabilidades de éxito el estudio de ciertos problemas, como la acción de los microbios y las toxinas sobre los animales que hayan sufrido la ablación quirúrgica de ciertos órganos; por ejemplo, el estudio de las relaciones del sistema neuro-endocrino con las reacciones de defensa del organismo a las infecciones. Merced a la disciplina fisiológica, nuestros laboratorios pudieron emitir interesantes interpretaciones del modo de producción y del senlido de ciertas reacciones como el choque anafiláctico y la cuti-reacción. Este estudio se prosigue, en el Instituto Pasteur en el "Laboratorio de fisiología del terreno". III. — FISIOLOGIA MICROBIANA No menos importante es el servicio de Fisiología Microbiana, en el que se estudian los diversos problemas relativos a la nutrición de las bacterias y de los protozoarios libres o parásitos: identificación de los factores de crecimiento necesarios a la vida microbiana, determinación del grado de especificidad de estos factores de crecimiento, de su papel fisiológico, y de su significado con respecto a la evolución y al parasitismo. IV. — SERVICIO DE LA TUBERCULOSIS Este servicio, concebido y organizado por Calmette, es el tipo de un organismo perfectamente adaptado al estudio científico de un importante problema médico y social. Dos grupos de laboratorios corresponden a dos clases de estudios claramente separados: VI. — SERVICIO DE DIAGNOSTICO DE ENFERMEDADES DE ANIMALES El jefe de este servicio recibe animales enfermos, piezas anatómicas o serosidades provenientes de animales enfermos, y establece un diagnóstico bacteriológico, mediante el cual puede dar valiosos consejos a los criadores. VII. — SERVICIO DE FERMENTACIONES La Industria de las fermentaciones, renovada por Pasteur, sigue acudiendo a los Laboratorios del Instituto, donde se realizan investigaciones teóricas: perfeccionamiento de los métodos de f e r mentación que son útiles Para las destilerías, para la fabricación del vino, y en general para todas las industrias de fermentación. Por ejemplo en el actual período de escasez de combustibles, el servicio de fermentaciones estudia problemas de i m portancia primordial como la fabricación de alcohol por fermentación de azúcares de cotufa. Desde el puntó de vista teórico, la principal preocupación fué caracterizar los cuerpos intermediarios que se producen en el curso de las f e r m e n taciones. Existe en este servicio una enseñanza teóricopráctica (Escuela de Cervecería) en la que se formaron varias generaciones de químicos cerveceros. El Instituto Pasteur prosiguió el trabajo comenzado por Duclaux sobre la industria lechera. El aislamiento de fermentos puros y de mohos permitió renovar la industria de los quesos. Servicio Agrícola. — Los trabajos de Pasteur h a n dado un nuevo impulso a la agricultura como a la industria, demostrando el papel de los fermentos en las transformaciones de la materia orgánica y en la nutrición de los vegetales. Los trabajos proseguidos durante más de veinte años permitirán luchar eficazmente contra las enfermedades de degeneración causadas por virus filtrantes que se propagan año tras año por los tubérculos enfermos, con la consiguiente disminución progresiva de las cosechas de papas. El Instituto Pasteur instaló varios centros de estudios: en Brie-Comte-Robert, donde el eminente sabio Winogradsky pudo continuar sus trabajos sobre bacteriología agrícola, en la g r a n j a de R e n nemoulin, en el Pic-du-Midi, etc. a) El bacilo tuberculoso virulento; los procesos de defensa del organismo; la inmunidad y los procedimientos de inmunización contra la tuberculosis. VIII. — QUIMICA b El bacilo B.C.G. vacuna antituberculosa; su preparación; el ensayo de su inocuidad; una organización modelo de ficheros que permiten seguir los resultados de la vacunación. Completan este servicio laboratorios de química, de anatomía patológica, etc. Los magníficos trabajos de Calmette y de sus colaboradores franceses y extranjeros salieron de este servicio. La bacteriología fué obra de un químico; es natural pues que en los Institutos de Bacteriología la Química tenga un lugar destacado. No solo les aporta el rigor científico de sus técnicas, sino que permite además a los bacteriólogos obtener p r e cisiones indispensables sobre la naturaleza de las sustancias útiles ya para destruir los microbios, ya, al contrario, para favorecer su desarrollo en los medios de cultura. V. — SERVICIO DE ENTOMOLOGIA Y PARASITOLOGIA Allí se realiza el estudio zoológico de los Artrópodos y de los insectos trasmisores de enfermedades. Se estudian teórica y prácticamente los p a rásitos de la sangre y del intestino. Por eso todos los Institutos de Bacteriología tienen laboratorios de Química. En el Instituto Pasteur existen dos grandes secciones; un servicio de Química terapéutica, y un servicio de Química Biológica, de los cuales salieron numerosos t r a bajos originales, y en los cuales se instruyeron varias generaciones de químicos franceses y extranjeros. La Quimioterapia lucha contra los agentes p a t o - genos, no ya mediante sueros o vacunas, sino mediante productos químicos de fórmula conocida. En este laboratorio de química terapéutica se descubrieron y estudiaron recientemente las propiedades curativas de la p a r a - aminofenilsulfamida en las inyecciones bacterianas de tipo estretocóccico, gonococcico, etc. Este medicamento, de constitución química simple, ataca directamente a los gérmenes. Se difunde fácilmente en el organismo del paciente infectado, lo que le permite actuar hasta sobre las bacterias refugiadas en los espacios en que los cuerpos químicos penetran difícilmente, como por ejemplo, en el canal céfalo-raquídeo. Eso explica, por otra parte, el éxito excepcional de esta terepéutica en el tratamiento de las .meningitis puógenas. Este nuevo método, lejos de oDonerse a la terapéutica por sueros, la completa armoniosamente, ya que los sueros actúan sobre las toxinas, y las sulfamidas actúan sobre los gérmenes mismos. Las aplicaciones de la sulfamidoterapia son cada vez más numerosas: la cirugía es uno de los últimos dominios que acaba de conquistar esta nueva técnica. La quimioterapia se dedicó también con éxito a los protozoarios patógenos, en particular a los agentes de enfermedades tropicales rebeldes a la seroterapia, como los hematozoarios del paludismo, los tripanosomas, agentes de la enfermedad del sueño, las amibas de la disentería, etc. En el laboratorio de Química Biológica se investigó por primera vez el papel catalítico de los infinitamente pequeños químicos, primordialmente importante en todos los fenómenos vitales. IX. — SERVICIO DE FOTOMICROGRAFIA Este servicio, instalado en el Instituto Pasteur gracias a Duclaux y a Roux. es un importante anexo al servicio de investigaciones, por la extensa documentación que posee, por la interpretación de las preparaciones que se le confían, v por el valor de las fotomicrografías que allí se ejecutan. X. — SERVICIO DE SUEROS Y VACUNAS Son los "Servicios Prácticos'' del Instituto Pasteur. Su importancia es muy grande porque contribuyen al mantenimiento de la salud pública, porque permiten interesantes investigaciones teóricas de serología, y finalmente porque el producto de la venta de sueros y vacunas permite hace frente a los importantes e indispensables gastos de los servicios de investigaciones. El más antiguo de los servicios prácticos es el de la vacuna anticarbunculosa. oue empezó ron la célebre experiencia de PouilIy-le-Fort, en 1881; fué organizado por Chamberland. Varias vacunas microbianas í an< i tífica. antiesta filocóccica, antigonocóccica) se preparan en un servicio especial, el "Servicio de Vacunas". EL En este dominio, dos descubrimientos estuvieron en primer plano de la actualidad científica de estos últimos años. Son vacunas que ya han preservado a millones de niños. La vacuna antituberculosa B.C.G. de Calmette y Guérin, y l a vacuna antidiftérica, o anatoxina Ramón, que se obtienen respectivamente transformando un microbio patógeno y una toxina activa en productos no patógenos o no virulentos, pero sí dotados de un alto poder de vacunación; ambos están en la más pura t r a dición • pasteuriana. El importante descubrimiento de las anatoxinas tuvo considerables consecuencias teóricas y prácticas. Una nueva vía se abría a las investigaciones teóricas sobre inmunidad y, métodos de vacunación (antidiftérica, antitetánica, antiestafilccóccica i que ya son de práctica universal, y que salvan la vida de millones de hombres. El descubrimiento de las anatoxinas fué felizmente completado por el de las vacunaciones asociadas. Algunas de estas vacunaciones por anatoxinas solas o asociadas son actualmecte obligatorias en Francia. En un pabellón especial se prepara la vacuna contra el tifus exantemático, que consiste en emulsiones formoladas de ricketsias. Un laboratorio del Instituto Pasteur dosifica y distribuye los sueros humanos destinados a la determinación de grupos sanguíneos. Estos sueros son Titiles para las trasfusiones, los estudios de antropología, y los peritajes médico-legales. En el importante anexo de Garches, dirigido por el Sr. Ramón, se preparan los sueros terapéuticos. Pasteur vivía aún cuando Roux y Yersin descubrieron la toxina diftérica, aue había de hacer posible el descubrimiento por Behring de la antitoxina, y más tarde el de la anatoxina por G. Ramón. Se sabe que el congreso de Budapest, en 1894, Roux, en una comunicación histórica, presentó en colaboración con L. Martin y Chaillou el resultado del tratamiento por el suero de trescientos casos de difteria. Desde entonces, se aportaron perfeccionamientos a las técnicas primitivas, como la separación de las toxinas por floculación, lo que permite inyectar toxinas de elevado- poder ántigénico, y también como la inmunización de los caballos mediante antitoxinas, lo que disminuye su mortandad, y permite obtener sueros con un elevado porcentaje de unidades antitóxicas. El Instituto Pasteur prepara en la actualidad varios sueros: antidiftérico, antitetànico, antidisentérico, antivenenoso, antimicrobiano y antigangrenoso. Desde hace unos años, el Anexo del Instituto Pasteur en Garches posee un laboratorio de investigaciones donde se estudian las cuestiones de serología, particularmente las que se refieren al importante problema de los "antígenos glucidolípicos". H O S P I T A L P A S T E U R Fué construido para aplicar los métodos pasteurianos, y rindió importantes servicios (1). Desde su fundación fueron asistidos en él 40.000 enfermos. Se le edificó según el principio del aislamiento en "box". Allí se hicieron importantes descubrimientos terapéuticos. (1) El ofrecimiento de asumir los gastos necesarios a la edificación de este Hospital fué hecho a Pasteur pocos m e s e s antes de su muerte, y según el Dr. gran alegría, Roux, le proporcionó su última INSTITUTO p,,é fundado en 1910, por u n acuerdo entre la Universidad de París y el Instituto Pasteur. comprende u n a sección de biología en la que se estudia la acción de las radiaciones sobre la célula viva v la célula cancerosa, y el grado de radiosensibilidad de cada especie celular. * Además, el instituto Pasteur participa en la solución de las cuestiones de Higiene en los Consejos del Ministerio de Salud Pública o de diversas administraciones de las ciudades, s u actividad 110 se limita a los tiempos de paz. En las trágicas horas de guerra, el Instituto Fastsur rinde importantes servicios: proporciona químicos a la Defensa Nacional, instala laboratorios para el Ejército y entrega miles de dosis de sueros y vacunas, tanto al Ejército como a la población civil. * De 1888, fecha en que se inauguró, a 1895, el Instituto Pasteur fué dirigido por Pasteur. Emile Duclaux. que le siguió en este puesto, ocupó la dirección hasta 1904. Había vivido toda la obra biológica de Pasteur. Su libro ya clásico, "Historia de un Espíritu", demuestra hasta qué punto había penetrado el pensamiento del Maestro. Duclaux p u blicó trabajos personales sobre las acciones diastásicas, los fenómenos de adhesión molecular y las tensiones superficiales, trabajos de firme pensamiento y de una exactitud tal que los investigadores los consultan aún con provecho. Su "Tratado de Microbiología" es una obra f u n d a m e n t a l de fisiología microbiana. Cuando se votó la ley del 15 de Febrero de 1902, que constituye en Francia la Carta de Salud Pública, Duclaux arrastró la opinión pública con su "Tratado de Higiene Social". Fué un profesor notable. La claridad, la p r e cisión, el encanto de sus clases son legendarios en nuestro Instituto. Tenía más que nada el talento de comunicar a su auditorio el fuego sagrado que estaba en él. ¡Cuántos alumnos recibieron del alma generosa de Duclaux el impulso hacia la Ciencia, el choque que determina la vocación! En la época de las memorables luchas que m a n tenía Pasteur, muchos jóvenes venían, a instalarse en lo alto de las gradas del pequeño anfiteatro de la Academia de Medicina para oír sus comunicaciones. Uno de ellos era particularmente asiduo. "Era, dice el Sr. René Vallery-Radot, un ayudante DEL RADIUM de clínica del Dr. Béhier. Pese a estar muy ocupado con análisis médicos, repetía para su enseñanza personal, los experimentos de Pasteur sobre f e r mentaciones. La seguridad de los métodos pjisteurianos le encantaba. Estaba al corriente de las grandes controversias ya entabladas, y se i m p a cientaba por conocer las que seguirían entablándose, las mencionaba y las comentaba con un e n t u siasmo, una fiebre que se advertían en el brillo de su mirada. Esta fiebre se manifestaba también en el timbre de su voz clara, breve a veces un tanto imperiosa, en la que dominaba la necesidad de una lógica implacable. Era de carácter solitario, 110 ambicionaba conquistar puestos ni presentarse a concursos. Solo le interesaba el t r a bajo por amor al trabajo mismo. Este joven de veintiún años, a quien Pasteur no conocía, tenía un solo deseo: ser admitido, aun en el puesto más modesto, en el laboratorio de la Escuela Normal. Se llamaba Emile Roux". Monsieur Roux fué de 1904 hasta su muerte en 1933, director del Instituto Pasteur; su obra científica, que goza en el rfrundo de una merecida fama, ha hecho mucho en favor del renombre de nuestro Instituto, pero personalmente había conservado una gran sencillez. Sus colaboradores conocían su fuerte erudición, su maravilloso espíritu critico que descubría inmediatamente el punto débil de un experimento, la nitidez y la precisión de su palabra. También apreciaban la activa y discreta bondad de su corazón. Hasta fines de 1940, los Sres. Louis Martin y Ramón, sucesivamente, dirigieron el Instituto según la más pura tradición pasteuriana. • La familia de Pasteur quiso que los restos del Maestro descansasen en el Instituto que él habíít fundado y que lleva su nombre. Los despojos mortales de Pasteur descansan bajo la pesada estela de granito de Suecia, en la cripta planeada por Girault, y artísticamente decorada por Gilbert Martin y Luc Olivier Merson. Pero su espíritu sigue vivo en nuestra casa. Anima a los investigadores, une sus esfuerzos, y da al gran cuerpo d'e nuestros trabajadores, un alma, un estilo, una unidad. de Primer «PATRIE» uño: 1942.