Existe una estrecha relación MENTE CUERPO

Existe una estrecha relación MENTE CUERPO
Cuantas veces hemos pedido un milagro a un médico. Los médicos hacen lo que pueden y
nos ayudan y mucho. Pero de nosotros depende el volver a enfermar o no.
Hay personas a las que se les extirpa un tumor y al poco tiempo, aún habiendo limpiado
totalmente la zona en una intervención quirúrgica, se vuelve a reproducir. Ha habido casos
por el contrario en los que los médicos se han quedado sorprendidos de cómo un tumor
puede llegar a mermar, a encapsularse o incluso a remitir totalmente, lo que han llamado
remisión espontánea.
El médico y escritor hindú Deepak Chopra explicaba que en 1985 una universidad
norteamericana hizo un estudio en el que se comprobó científicamente que la mayoría de
muertos consecuencia de una parada cardiorrespiratoria en un estado de EE.UU. se
producían estadísticamente el lunes por la mañana, justo cuando la persona en cuestión
se reincorpora a su trabajo después del fin de semana. Con ello quedó constatada la
estrecha relación que existe entre el cuerpo y la mente, entre la salud/enfermedad y
nuestras emociones. De hecho, el asegura que "la salud es mucho más que la ausencia de
enfermedad; es ante todo bienestar físico, emocional y espiritual".
El Dr. Alemán Ryke Geerd Hamer, tras el asesinato de su hijo él desarrolló un cáncer de
testículo y su mujer uno de mama. Comenzó entonces a investigar en su hospital con más
de 30.000 casos buscando si, detrás de cada cáncer o enfermedad similar, había un
conflicto emocional fuerte. Y no sólo encontró una relación entre conflicto emocional y
enfermedad, sino que halló una etapa intermedia entre ambos: una alteración
electromagnética en el cerebro detectable mediante un TAC. Así fue como encontró una
relación clara entre el tipo de conflicto, el punto del cerebro alterado y el órgano enfermo.
De este modo, era capaz de diagnosticar el órgano afectado por el cáncer con sólo un
scanner cerebral.
Según Hamer, cuando ocurre una emoción muy fuerte y negativa, y la persona no logra
exteriorizar su emoción y además la vive en soledad, ésta produce un daño en el
organismo, que puede convertirse en un cáncer. Según sus estudios el cáncer puede
aparecer como unos seis meses después de la situación traumática. Actualmente hay
estudios que confirman que existe una relación muy estrecha entre determinado tipo de
personalidad y las personas que generan un cáncer.
Por tanto, podríamos decir que la enfermedad es consecuencia de un desequilibrio
energético. Tenemos un cuerpo energético que nutre al físico y, que al ser impactado por
un sufrimiento emocional, hace que no llegue suficiente energía a determinadas áreas del
cuerpo, las cuales van perdiendo su vitalidad, pudiendo llegar a enfermar de cáncer o de
otras patologías.