Test de la Figura Humana de Karen Machover

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Test de la Figura
Humana de Karen
Machover
Lic. Ingrid Marissa Cabrera
Zamora
Antecedentes.

Los principios de esta prueba tuvieron un
crecimiento empírico en una amplia variedad
de material clínico recolectado en clínicas y
hospitales durante más de 15 años, que fue
el tiempo que le llevo a Karen Machover a
diseñar su instrumento.
Antecedentes
Machover indica que la personalidad no se
desarrolla en el vacío, sino a través del:

Movimiento

Sentimiento

Pensamiento específico.
Teoría Psicoanalítica

Karen Machover usa la teoría psicoanalítica.

En esta teoría se manejan las tres instancias
psíquica de Freud: ello, yo y super yo.

Para Machover, el cuerpo de una persona es
el propio YO y será el punto mas íntimo de
referencia en cualquier actividad.
Cuadrantes de Karen Machover
SUPER YO
Regresión
Inmaduro
Esquizoide
Miedo al entorno
Necesidad de apoyo
Nostalgia
Delirios
Huida de la realidad
Inseguridad
Poca tolerancia
Fantasías
Proyecciones
Paranoica
Psicopatías
Narcisismo
Histeria
Fuera de la realidad
YO
Dependencia
Pobre en recursos
Olvido
Equilibrio
Estabilidad
Autodirección
Aceptación
Autoestima
Ubicación
Realidad
Idealismo
Dependencia
Muy demócrata
Mucha apertura
ELLO
Conflicto
Depresión
Aislamiento
Pesimismo
Baja autoestima
Inseguridad
Evasión
Depresión
Pesimismo
Represión
Traumas
Complejos
Tendencias depresivas
Maniacodepresivos
Poca creatividad
Inmadurez
Rebeldía
Insatisfacción
Materiales e Instrucciones






Hojas blancas
Lápices
Goma
Sacapuntas
“Dibuja una figura humana lo más completa
posible”.
Si es necesario, aclaramos que no
calificamos la CALIDAD del dibujo.
Resumen a Grosso Modo
Concepto del YO
Fuerza física
Unión intelecto y afecto,
control de impulsos
Control de impulsos corporales
Contacto físico
Contacto social
Rasgos de contacto
Soporte social, energía
Apoyo social, seguridad
Resumen a Grosso Modo
Contacto con el medio
que lo rodea,
comunicación social
Atención
Símbolo fálico
Comunicación, carácter
1. Tamaño de la Figura

Exaltación del yo
Infravaloración del medio ambiente
Impulsividad
Con proporción a la fantasía
Autodominio precario

Equilibrio emocional (12 y 13 cm. Aprox.)

Sobrevaloración del medio ambiente
Disminución del yo
Tendencias depresivas
Reacciones sumisas


Grande


Normal
Pequeña



2. Posición de la Figura

Hacia arriba



Hacia arriba a la
derecha



Hacia arriba a la
izquierda



Hacia abajo a la
derecha



Inseguridad
Poca tolerancia a la ansiedad
Tendencias al retraimiento
Con fantasía
Paranoide
Fantasías
Desligamiento de la realidad
Necesidad de apoyo
Inmadurez
Esquizoide
Tendencias depresivas
Poca creatividad
Rebelión
2. Posición de la Figura

Hacia abajo a la
izquierda




Hacia el centro



Fuera del margen


Inhibición
Inseguridad
Evasión
Evita la estimulación exterior
Equilibrio
Persona autodirigida
Se acepta bien
Criterio pobre de la realidad
Respuestas inadecuadas al medio ambiente
Pocas facultades creativas.
3. Figura
Acorde con su sexo

Buena identificación con su propio sexo
No acorde con su
propio sexo

Conflicto con la identificación sexual.
Tendencias homosexuales


Figura de Perfil




Figura de Frente

Con Fondo


Evasión
Evita enfrentarse a las exigencias del medio ambiente
Impulsividad
Relaciones interpersonales reservadas.
Deseo de enfrentamiento a las exigencias del medio
ambiente.
Existe franqueza y sociabilidad en la persona.
Necesidad de apoyo para reducir la ansiedad.
Fuera de control intelectual.
3. Tipo de Líneas
Línea Firme



Ansiedad
Temor
Bajo nivel de energía

Ansiedad que llega a afectar el control motor.


Preocupación por la propia forma de actuar.
Necesidad de reforzarse ante el medio ambiente.

Agresividad


Incertidumbre
Falta de decisión
Insatisfacción consigo mismo

Expresión de conflicto en esa región

Línea Débil
Temblorosas
Reforzadas
Salientes
Borraduras
Omisiones
Gran cantidad de ambición
Buen nivel de energía (tensión interna)


4. Cabeza


Grande




Sentimientos de debilidad
Impotencia social y emocional.
Ego débil
Signos de dependencia
Preocupaciones somáticas.

Signos de depresión.

Rechazo hacia el cuerpo
Mucha importancia a aspectos intelectuales.
Dominante.


Pequeña


Alargadas
Muy marcadas
Dependencia
Sobrevaloración de la inteligencia por frustración.
Fantasía como fuente primaria de satisfacción
Ajuste social y emocional pobre.
Vanidad moral o intelectual narcisista.


4. Cabeza

Timidez
Retraimiento
Omitida

Persona incontrolada (actúa sin pensar)
De perfil y cuerpo de
frente

Evasión
Tendencia a alejarse del medio.
Borrosa



Rasgos faciales
omitidos




Evasión
Mucha preocupación
Superficialidad interpersonal.
Hostilidad
Contacto inadecuado con el medio ambiente.
5. Cabello

Abundante compensación
Deseos de virilidad y vitalidad sexual.
Tendencias narcisistas.
Rizado

Narcisismo.
Excesivo sombreado

Tendencias narcisistas agresivas.
Omitido

Vigor físico bajo.

Abundante

6. Ojos
Grandes y elaborados
Pequeños
Cerrados

Hipersensibilidad a la opinión social.
Tendencias agresivas.

Introversión.

Tendencias a irse hacia adentro
Cerrar los ojos al mundo.



Tendencias paranoides.
Agresividad.
Proporcionados

Sin conflicto
Omitidos

Culpabilidad con lo que ha visto.
Pupila marcada

7. Orejas

Demasiada atención


Manifestación paranoide.
Extrema atención a la opinión ajena.
Sensibilidad a la crítica.
8. Nariz
Ancha y abierta
Tamaño grande




Rechazo
Desprecio.
Conflictos sexuales
Sentimientos de impotencia.
9. Boca

Enfatizada


Una línea



Sonrisa forzada




Con dientes


Defensas agresivas
Tendencias depresivas.
Arranques de carácter
Verbalmente agresivo.
Tendencias sádicas.
Deseo de agradar
Preocupación ajena
Simpatía forzada
Afecto inapropiado.
Oral agresivo.
Tendencias infantiles.
Normales en agresivos.
9. Boca
Abierta
Labios Completos
Barba Enfatizada

Dependiente

Afeminamiento
Indicaciones narcisistas.




Boca omitida



Tendencias agresivas de dominio
Alto nivel de impulsos
Renuncia a comunicarse
Tendencias agresivas
Depresión
Sentimientos de culpa.
10. Cuello

Corto y ancho




Largo



Largo y delgado
Tamaño proporcionado
Omitido
Impulsividad
Evita que impulsos obstaculicen su inteligencia.
Importancia en el dominio de impulsos.
Rígido
Formal
Dificultad en controlar
Dirigir
Distanciamiento entre lo afectivo y lo intelectual.

Sentimientos de debilidad corporal
Dificultad en control de impulsos básicos.

Proporcional a las necesidades de control.

Inmadurez
Poca habilidad para manejar impulsos racionales.


11. Brazos
Vigorosos y
extendidos
Débiles y recogidos
Pegados al cuerpo
Muy grandes
Largos y fuertes




Necesidad de protección
Actitud pasiva.

Sentimientos defensivos.
Pasividad.

Necesidad de protección.

Ambición
Necesidad de fuerza física.
Necesidad de contacto con el ambiente.



Musculosos
Ambición
Sentimientos externos de agresión directa.


Tendencias agresivas.
Deseo de poder físico.
11. Brazos
Muy cortos
Muy reforzados




Falta de ambición
Sentimientos inadecuados.
Tendencias agresivas.
Deseo de poder.

Ansiedad
Sentimientos de culpa.
Doblados

Ansiedad a la actividad de contacto.
Desiguales en longitud

Ansiedad por la actividad manual.
Relajados y flexibles.

Normales.
Sombreados

12. Manos

Falta de confianza en situaciones sociales
Baja productividad.
No hay actividad.
Sombreadas

Ansiedad a la actividad de contacto.
Muy pequeñas

Falta de contacto.

Dificultades de contacto
Inactitud social.

Borradas
Muy grandes
Por detrás




Evasión
Sentimientos de culpa.
13. Dedos

No hay contacto de las manos con el medio
ambiente.
Dedos sin manos

Tendencias agresivas infantiles.
Garras

Tendencias agresivas primitivas.
Muy sombreados

Sentimientos de culpa.

Agresión
Rigidez.
Cortos y redondos
Extendidos o abiertos


Puño cerrado


Agresión
Rebeldía
Agresividad contenída
14. Hombros
Grandes

Preocupación por la fuerza física.
Muy pequeños

Sentimientos de inferioridad.
Omitidos

Conflicto con esa área
15. Cintura
Cinturón destacado
Genitales expuestos
Cadera (marcada)


Defensa del yo.
Control de impulsos corporales.

Tendencias primitivas de comportamiento.
Esquizofrénico.

Desviación sexual.

16. Piernas

Desaliento
depresión
Muy largas

Necesidad de autonomía.
Muy cortas

Sentimientos de inmovilidad.
Reforzadas

Tendencias agresividad.

Rigidez
Tensión
Rechazo sexual.
Enfatizadas
Muy juntas



Débiles, delgadas o
sombreadas


Deterioro psicofísico
Inadaptación.
16. Piernas
A través del pantalón
Omitidas

Pánico homosexual.
Tendencias homosexuales.

Perturbación sexual.




Test: Machover
Abstract del libro publicado por Karen Machover llega en 1949.
Hasta hace pocos años se veía el cuerpo como lo contrario del espíritu, originándose las aberraciones neurotizantes de la conducta. Hoy,
toda persona sana comprende fácilmente cómo el cuerpo es un signo del espíritu. El cuerpo es la persona misma, el hombre que es. La
actitud hacia uno es actitud hacia el otro. ¿Cómo capta el niño la realidad del mundo, si no es mediante su cuerpo: tocando,
mordiendo,..? Mediante el cuerpo la persona da testimonio de su espíritu, al mismos tiempo que se ve mediatizado, al situarnos en el
ahora y aquí de nuestra existencia. Es decir, mediante el cuerpo llegamos a la verdadera individualización. Más aún: el cuerpo es
símbolo de la condición humana. El cuerpo nos obliga a eliminar para elegir. Con esto, el cuerpo se convierte en condición, estructura y
elección de la persona. Es el motivo por el cual se puede juzgar al hombre, por su cuerpo: por el significado que tiene para el: por su
actitud ante el mismo. Por nuestro cuerpo manifestamos lo que somos y lo que queremos en lo más profundo de nuestro ser. El cuerpo
nunca miente. Desde el punto de vista psicológico, nos lleva a tener bien presente una condición clara: La persona sana es la que se
encuentra centrada frente a la realidad,. eficaz en su trabajo y amistad. y esto ¿cómo conseguirlo sin arrinconamos nuestro esquema
corporal? Pero esto no es tan fácil. hay muchas personas que sienten la enfermedad en su cuerpo, a pesar de que, desde el punto de
vista médico, la única respuesta que reciben es: “No tiene nada”. Y es que la íntima convicción del hombre sano con su organismo se ha
desbaratado, lo acepte o no. Y en ese mismo momento la persona humana ya no se considera su mismo cuerpo; se siente espectador
de su cuerpo. El cuerpo se ha constituido en algo aparte. La persona está enferme y este accidente de la enfermedad la separa de su
cuerpo. El enfermo es una víctima, pero una víctima de su pasado, de sus autismos, de su ambiente, de su aprendizaje. El cuerpo
enfermo responde a un conflicto total y es una actitud de defensa, haciendo surgir el dualismo. Toda ansiedad, según Shilder,
menoscaba la experiencia de nuestra imagen corporal. Así el cuerpo se convierte en un signo, mal formulado, de un problema invisible,
en el que encuentra razón de su vivir. El cuerpo en esta ocasión es la oportunidad y la posibilidad de descentrar al ser humano. El cuerpo
ciertamente, es la esfera de la humanidad. Pero el hombre no tiene cuerpo, sino que es esquema corporal, y lo que acontece a su cuerpo
alcanza también a su alma. Es la persona humana en su totalidad, la que participa, con su cuerpo y con su alma, en la salud y en la
enfermedad, disfrutando de la una o padeciendo la otra. Es claro que la persona se ha de enfrentar en el dibujo a la vivencia que tiene de
su esquema corporal. En el análisis profundo de esta vivencia proyectada, con las implicaciones psicológicas que arrastra, podremos con
toda seriedad deducir su personalidad sin temor a equivocarnos. Schilder consideró la imagen del cuerpo humano como una estructura
antropológica, es decir, psicológica total. De ahí que la conciencia que una persona tiene de su personalidad no será más que la
conciencia que tiene de su esquema corporal, proyectado en definitiva en el dibujo. La persona que llevamos dentro, que somos, lanza
sus vivencias al exterior, a pesar del control consciente. El dibujo de la figura humana no sólo expresará ciertos pensamientos, ciertos
sentimientos, ciertas aptitudes prácticas, sino que proyectará una imagen total de sí mismo, sus reacciones emocionales, sus actitudes
afectivas.

No se trata de tener en consideración tal o cual nota de la vida afectiva, sino de considerar la personalidad como una totalidad de ver cómo se revela
más de lo que pensamos, rasgos permanentes de la personalidad, dimensiones de la personalidad ignoradas, como se ignoran los mecanismos que
ponen en movimiento la mano con la cual se realiza el dibujo de la figura humana. Si en su conjunto refleja una vista de conjunto de la personalidad,
todo análisis de la imagen corporal proyectada en el dibujo que la considera aisladamente necesariamente será incompleto. Un esquema corporal es
siempre la expresión de un yo y de una personalidad rodeada de un medio ambiente e inmersa y afectada por el mundo. Una expresión no puede
divorciarse de lo que expresa. La imagen del cuerpo es el reflejo de todo lo que el sujeto ha vivido en sus relaciones con lo que le rodea. Cuando
proyectamos en el dibujo la imagen corporal reflejamos la tendencia vital total, determinada por una combinación de factores culturales, de
entrenamiento personal y psicodinámicos. Todo dibujo tiene una historia organizada y dinámica de la que surgió, y los pensamientos y sentimientos
inconscientes, en el sentido psicoanalítico de la palabra no estarán ausentes en la construcción de esa historia. Es, por tanto, la imagen corporal una
síntesis viviente, en cualquier momento, de nuestras experiencias emocionales, vividas a través de nuestro cuerpo. De ahí que el dibujo llevará la
marca de la vida emocional. Y aunque el esquema corporal es algo variable, dinámico y en continuo desarrollo, siempre la persona humana se
encuentra atada y ligada por su imagen corporal, y, en consecuencia, su evidente tendencia a una estabilidad relativa de la misma. No conviene olvidar
que la construcción de la imagen corporal se basa no sólo en la historia individual de un sujeto, sino también en sus relaciones con los demás. No es
posible para una persona formarse su imagen personal sin la imagen corporal de los demás. Vinculación tan estrecha entre nuestra imagen y los otros
que origina un constante intercambio, causa de un mayor acercamiento interpersonal. Por tanto, la imagen corporal no es un fenómeno estático; la
imagen corporal se adquiere, se construye y se ve afectada no sólo en el contacto con los demás seres vivientes, sino merced a un continuo contacto
también con el mundo. Se puede afirmar que es parte del mundo. Otro factor importante en la vivencia del esquema corporal es la vida social. Es el
resultado de la vida social. La propia imagen corporal se ve influenciada por imágenes corporales de otras personas. La proyección del esquema
corporal en el dibujo es un símbolo. Hay que conocer la clave para interpretar su mensaje. El sujeto, en la prueba de la Figura Humana, se comporta
ante un estímulo: la página en blanco. El examinado se ha de enfrentar a la realidad. Ha de dar una solución y observa una conducta moral, verbal y
expresiva. Tan importante, en el test, como el dibujo es el comportamiento y el significado que pueda tener éste. Todos estos datos le llevarán al
psicólogo clínico a examinar y detectar la personalidad del sujeto examinado. Según la afirmación de Levy, hemos de estar atentos a los datos clínicos
que puedan aparecer en la investigación de la personalidad, fruto de la noción corporal y distorsiones frente a ella. El cuerpo es la concretización
diferencial del yo y será, por lo mismo el camino adecuado para proyectar la personalidad. De ahí que mirando el dibujo de la figura humana podamos
dar un adecuado retrato psicológico. A las preguntas ¿qué aspectos abarca? ¿es más amplio en el estudio de la personalidad que otros? ¿mide el
rendimiento escolar y los intereses profesionales? ¿puede ser indicativo de dimensiones fundamentales de la conducta?, etc. Responderemos con la
afirmación de Alvarez Villar: “Se pone en relieve el cómo a costa de qué” Karen Machover llega en 1949, con esta técnica a investigar la personalidad
sin distinción de edad, educación, estado mental o medio cultural. Machover consigue explorar la influencia de la cultura en el desarrollo de la imagen
corporal normal y patológica, juntamente con los rasgos, actitudes y conflictos. Baste citar las palabras de su autora para captar la importancia y
condicionamientos del test: “El análisis de los dibujos, al igual que otras técnicas proyectivas, requiere que el psicólogo clínico posea conocimientos
acerca de los dinamismos de la personalidad. Es una técnica, un instrumento que requiere un artesano que lo maneje; no es la puerta secreta de la
personalidad. Requiere el talento suficiente para calar en lo esencial y dirigir la atención al meollo y motivaciones de la personalidad. La experiencia y la
práctica clínicas contribuyen a afirmar, y aquilatar su administración”. Se afirma, a veces que muchos de los signos detectados en este test solo sirven
como sugerencia y pocas veces como hallazgo definitivo. Sin embargo, puede verse lo contrario. ¿No será que no se ha tomado demasiado en serio?.

Es verdad que hay datos ambiguos como en otras técnicas proyectivas. Y, al igual que en las mismas, el método de interpretación ha de ser a
posteriori. Concluyendo, podemos afirmar que el dibujo de la figura humana puede ser una proyección de: La imagen corporal, o del concepto de sí
mismo. Las cualidades que pertenecen al propio sujeto, proyectadas con frecuencia simbólicamente. Las actitudes hacia otra persona en el medio
ambiente La imagen del yo ideal. Los patrones de hábitos Efectos de circunstancias exteriores. Tono emocional- expresión del estado de ánimo. Las
actitudes hacia la vida y la sociedad en general. Tensiones emocionales –conflictos. Experiencia o modo organizativo. Los impulsos Ansiedades
Compensaciones. Lo que evitar es todo enfoque arbitrario, ingenuo o dogmático, con respecto al dibujo de una persona si no queremos caer en la
arbitrariedad del diagnóstico. EL DIBUJO PERSONAL. Es claro que la persona se ha de enfrentar en el dibujo a la vivencia que tiene de su esquema
corporal. Por tanto, en el análisis profundo de esta vivencia proyectada, con las implicaciones psicológicas que arrastra podremos con toda seriedad
deducir su personalidad sin temor a equivocarnos suele afirmarse. Sin embargo, nos encontramos con un grave problema, generalmente la persona
proyecta la vivencia que posee de los demás, fundamentalmente en sus aspectos negativos. Alguno podrá decir que, partiendo de ahí, es fácil llegar
con suficiente precisión a determinar la personalidad del examinado. No es posible olvidar la afirmación de Zazzo: “La imagen del otro es percibida en
relación a uno mismo pero no es aceptada, sino evitada”. Pero ¿por qué se lanza la persona a hacer un modelo corporal de si mismo y se siente
espectador ante los demás.? Realmente el test, tal como lo planteó Karen Mmachover, ¿es acertado?. ¿O mas bien nos da el medio que rodea a la
persona y en el que se ve inmersa y afectada? ¿O a causa de esta sociedad incomunicada, sobre todo, podemos deducir los mecanismos que
movilizan el ser aquí y ahora del sujeto, viéndose en los otros como en un espejo? ¿Qué proyección nos está dando realmente? Para superar este
inconveniente hemos introducido la tercera figura, o dibujo de la propia persona, con lo que, opinamos queda paliado el análisis parcial e incompleto de
la imagen corporal proyectada en el dibujo al enfrentarle con su propia vivencia de un modo real y exhaustivo. No se trata de “enriquecimiento”como de
compromiso, impresión que da Portuondo en su libro, llevándonos a pensar que no captó bien el sentido de la técnica cuando en 1970 la expusimos
por vez primera, y que aparece ligera e indecisamente recogida en su segundo tomo, publicado en Biblioteca Nueva, junto con otras técnicas de relleno
y bastante superficiales. El dibujo de la figura humana, si tenemos en cuenta el “dibujo personal”, expresará una dimensión fundamental del ser. No
solo expresará ciertos pensamientos, ciertos sentimientos, ciertas aptitudes prácticas, sino que proyectará una imagen total de sí mismo. No se trata de
tener en consideración tal o cual nota de la vida afectiva, sino de considerar la personalidad como una totalidad en sí y en su interrelación. Cuando
proyectamos la imagen corporal, es siempre la expresión de un yo junto con una personalidad rodeada de un medio ambientes y afectada por el
mundo. Reflejará todo lo que el sujeto ha vivido en sus relaciones con lo que le rodea, la tendencia vital total determinada por una combinación de
factores culturales, de entrenamiento personal y psicodinámicos, y fundamentada en intenciones, propósitos y tendencias. Recordemos la afirmación
de Laing al hablar de la relación interpersonal y que olvidamos con frecuencia al interpretar las técnicas proyectivas: “La vida social no está constituida
sólo por una mirada de yoes y míes, sino también de túes, de nosotros, de ellos y de ellas, y de que la experiencia de tú o él o ella o ellos o nosotros
puede ser por cierto tan primordial y decisiva como la experiencia de mí o más aún. Y en el tema que nos ocupa tiene pleno sentido su conclusión. “La
presencia de estos otros tiene un profundo efecto reactivo sobre mí”. En consecuencia, la tendrá también sobre mi esquema corporal. Si yo supongo
“mi visión de la visión que tiene el otro” en consecuencia seré “ a la luz de las actitudes, opiniones, necesidades, etc., reales o supuestas que el otro
tiene con respecto a mí. El yo, pues, será por la observación de los otros observación que es imposible ignorar a la hora de nuestra “autoidentidad” y
por lo mismo proyectada. Será una síntesis viviente de nuestras experiencias emocionales, vividas a través de nuestro esquema, al que, aunque
dinámico y en continuo desarrollo, se siente ligada la persona. Así aclararemos otra faceta con la introducción del “dibujo personal”: las relaciones con
los demás y el modo cómo han intervenido en esa construcción su influencia en la propia dinámica. No es posible para una persona formarse su
imagen corporal sin la imagen corporal de los demás. Vinculación que da lugar a un intercambio, causa de un mayor acercamiento o de un fenazo
interrelacional; influencia y proyección como consecuencia de una realidad erótica. No tratamos de dar un fundamento exhaustivo de las exigencias de
la interrelación en la vivencia del esquema corporal. Lo damos por supuesto. Simplemente le insinuamos. No sólo servirá esta técnica, que hemos
añadido como complemento del test formulado por Karen Mmachover, para evitar la ambigüedad en la interpretación, como hemos podido comprobar.

Y la utilidad no queda solamente en el terreno de la normalidad, que la justificaría con creces.
Importante resulta en el terreno nosológico para una evaluación cualitativa del desarrollo patológico y su
predicción futura, al indicarnos en qué situación personal se encuentra el examinado. Sobre todo, útil
resulta en la organicidad, difícil de precisar en algunas ocasiones si prescindimos de la evaluación
personal mediante su propio dibujo. Como complemento para la interpretación dinámica, después de
haberle pedido al sujeto “ que se dibuje a sí mismo lo más completo posible”, pedimos que el examinado
defina con ocho frases a esa persona (dibujo personal). A continuación, se le manda numerar las frases
del 1 al 8, teniendo en cuenta la calidad de las respuestas. A la frase que defina mejor al dibujo personal
( que es su propia personal) debe corresponder el número 1, y así sucesivamente. Finalmente, se le
pide que se fije en la octava respuesta y que indique qué sería esa persona, prescindiendo de lo que allí
se indica. Y así hasta finalizar con la número 1. Se trata de un complemente útil en la interpretación.
Quien tome en serio esta prueba se convencerá de la imposibilidad de prescindir del “dibujo personal”
por ningún motivo para llegar a hallazgos definitivos en el test. Se trata de una aportación y, como tal,
creemos que cumple su cometido en la interpretación del mensaje del esquema corporal. Interpretación
El dibujo de la figura humana vehiculiza especialmente aspectos de la personalidad del sujeto en
relación a su autoconcepto y a su imagen corporal. De esta forma el dibujo de una persona al envolver
la proyección de la imagen de un cuerpo ofrece un medio natural de expresión de las necesidades y
conflictos del cuerpo mismo. Cada vez que un sujeto gráfica una persona en esta proyección de su
propio Yo que realiza confluyen: · Experiencias personales y sus representaciones psíquicas, ·
Imágenes de estereotipo sociales y culturales que tienen un mayor o menor peso para el sujeto. ·
Aceptación o no de su etapa vital · Identificación y asunción del propio sexo. · El grado de estabilidad y
dominio de sí mismo. · La figura graficada debe asemejarse en sus atributos e imagen al sujeto mismo,
es como que ante ella deberíamos poder decir, es igual a el/ella. solicita el manual de interpretación a
[email protected]
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