262500. . Primera Sala. Sexta Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen XXV, Segunda Parte, Pág. 48. DAÑO EN PROPIEDAD AJENA. MUROS MEDIANEROS. Para que un delito sea intencional o doloso se requiere que el sujeto obre con intención o dolo, integrándose esta forma de culpabilidad cuando, existiendo representación en el agente, sobre el resultado y su ilicitud, realiza la actividad en forma voluntaria. Ahora bien, si el quejoso construyó obra nueva, rebajando el espesor del muro divisorio entre su propiedad y la de la ofendida, y tal forma de proceder trajo como consecuencia el debilitamiento del referido muro y la causación de los daños aparecidos en la casa vecina, este hecho es de naturaleza previsible y evitable, y es imputable a título de culpa o imprudencia, pero no intencional, pues para ello debió haberse probado que la construcción de la obra nueva estaba dirigida ex profeso a causar daño, es decir, que toda la actividad desplegada por el agente, desde su inicio, era ilícita, porque ilícito era el resultado representado y querido. Amparo directo 469/59. Luis Martínez Velasco. 7 de julio de 1959. Cinco votos. Ponente: Juan José González Bustamante. -1-