POSESION PRECARIA. LIBRE REVOCABILIDAD DE LA. La

Anuncio
271063. . Tercera Sala. Sexta Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen XLVI, Cuarta Parte, Pág. 113.
POSESION PRECARIA. LIBRE REVOCABILIDAD DE LA. La posesión a ruegos es de
facto y no tiene relación contractual, por lo que la actitud tomada por el poseedor contra la
voluntad del dueño es razón suficiente para generar la legitimación pasiva en la acción
reivindicatoria. La institución del precario, que es la posesión a ruegos y meramente
temporal, es de carácter revocable en cualquier momento y tiene una antigua tradición cuyas
huellas se pierden en el pasado, pero que han sido recogidas por la jurisprudencia y, de una
manera especial, por los códigos mexicanos, como puede verse en el artículo 18 de la Ley
Procesal Civil del Distrito y Territorios Federales. En el derecho romano se negaba el
interdicto en favor de quien poseía con violencia, clandestinamente o a ruegos; el precario era
definido por la posesión a ruegos y revocable en cualquier momento. Sigue pues esta
tradición el artículo mencionado 18, que en su segundo párrafo establece que no procede el
interdicto contra la persona que con relación al demandado poseía clandestinamente, por la
fuerza o a ruegos. Este precepto evita emplear las palabras posesión precaria y utiliza los
términos posesión a ruegos, conforme a la terminología del derecho romano. Es por estas
razones que la Suprema Corte ha considerado que en estos casos de posesión a ruegos
procede la pretensión reivindicatoria, en la inteligencia de quien posee a ruegos puede
defender la cosa contra cualquier tercero, entablando el interdicto de despojo, que no procede
contra aquél de quien recibió la posesión, situación que este Alto Tribunal ha hecho extensiva
a la reivindicación, determinando que el poseedor a ruegos no puede negar la devolución de
la cosa, porque no proviene de una situación contractual sino de facto; tal circunstancia
obedece a que cuando se otorga la posesión, suele hacerse de buena fe y en la seguridad de
que la persona la devolverá en el momento en que su propietario la pida, por lo que resulta
muy difícil probar una relación contractual después del paso de varios años. Esta
imposibilidad jurídica en que se encuentra quien tiene el dominio pero ha otorgado la
posesión a ruegos, de ejercer una pretensión contractual, como sería la derivada del
comodato, han conducido a la conclusión de que basta para la reivindicación la prueba de la
propiedad o de la posesión a título de dueño y la circunstancia de facto de la posesión a
ruegos.
Amparo directo 345/60. Aurora Fierro Delgado. 6 de abril de 1961. Mayoría de tres votos.
Ponente: Alberto R. Vela.
Sexta Epoca, Cuarta Parte:
Volumen XXII, página 354. Amparo directo 7681/58. María del Refugio Félix de Alcalde. 29
de abril de 1959. Mayoría de cuatro votos. Disidente: José Castro Estrada. Ponente: Gabriel
García Rojas.
Nota: En el Volumen XXII, página 354, esta tesis aparece bajo el rubro "POSESION
PRECARIA. LIBRE REVOCABILIDAD DE LA (LEGISLACION DEL ESTADO DE
ZACATECAS).".
-1-
Descargar