JURISPRUDENCIA Reflexiones sobre las sustituciones a distancia SENTENCIA DE LA SECCIÓN 2ª DE LA AUDIENCIA PROVINCIAL DE HUELVA DE 14 DE ENERO DE 2013 DE LA QUE HA SIDO PONENTE EL MAGISTRADO ANDRÉS BODEGA DE VAL, EN LA QUE, CON INDEPENDENCIA DEL FONDO DEL ASUNTO PLANTEADO, SE EFECTÚAN UNAS SERIAS REFLEXIONES ACERCA DE LAS SUSTITUCIONES A DISTANCIA ENTRE PROCURADORES Y ABOGADOS QUE LLEGAN A PLANTEAR SI LA SUSTITUCIÓN SE CONVIERTE EN SUPLANTACIÓN. JULIÁN CABALLERO AGUADO Procurador S e transcribe en su integridad el fundamento segundo de la sentencia: “Debo comenzar por hacer algunas reflexiones sobre la particular manera en que la demandante se ha personado ante esta jurisdicción. Examinando el expediente observo: que la procuradora de la entidad actora, Sra. X, es colegiada de Madrid; que no se ha personado ante la sala procurador distinto; que sus escritos carecen de firma original; y que ninguna de las actuaciones ante los órganos de este partido ha sido realizada por ella en persona sino, como impone la necesidad dada la distancia, por medio de otra procuradora que parece ser Dª Y. Al folio 7 consta la parte final de la demanda con la firma escaneada de la representante procesal; al folio 37 escrito para pago de la tasa firmado por persona distinta –no identificada–, pero encabezado por dicha causídica; todas las notificaciones a dicha procuradora se han verificado con otra distinta de la que se desconoce la identidad (folio 40, 41, 48, 69 –notifica­ción de sentencia–); al acto de juicio comparece por la actora un procurador diverso, Sra. Z, y un letrado distinto del que firma la demanda. Ya para la segunda instancia, el escrito de apelación tiene firma escaneada (ambas, también la del le­ trado). Es al folio 75 donde aparece la identificación de la Sra. como procuradora que da traslado de los escritos a la parte contraria. Al folio 83 nuevo escrito sin firmas originales, apareciendo un sustituto del letrado, cuya identidad no se reseña. En el rollo de apelación se une el escrito de personación con firmas no originales, y cuando se requiere de subsanación, aparece por fin la única firma original de la procuradora Sra. X, pero no la del letrado, pues quien le sustituye no se identifica de ningún modo. Es obvio que la actora está actuando a distancia, ya que en el momento en que deben realizarse actuaciones que exigen presencia personal, se acude a otro letrado y, lo que es más relevante, a un procurador afincado en este parti- do que no aparece apoderado, y que no encabeza los escritos. Tengo motivos para considerar que la parte no se ha personado ante la Sala, y dar con ello por incumplida esa exigencia formal, y de modo insubsanable, porque cuando se ha pedido que se subsane la carencia observada, el representante procesal tampoco ha hecho acto de presencia (eso es lo que significa comparecer) ni ha presentado por sí el escrito. Desaparece así la esencia misma de la función del procurador, que es la de servir de enlace personal entre la parte poderdante, su letrado y el órgano judicial, como elemento de unión imprescindible que fiscaliza los plazos, controla la tramitación, vigila los intereses formales del cliente en ese terreno y articula el proceso; se suprime la relación de confianza entre representante y representado; se subvierte el régimen de responsabilidades por error profesional; se impide una ágil y adecuada relación entre el órgano judicial y la parte; se pierde la fluida disponibilidad entre ambos. No creo que la posibilidad "Una cosa es que se haya suprimido la limitación geográfica que obligaba a cada causídico a actuar en un partido, y otra que se haya aprovechado esa regla para defraudar la función misma que corresponde a ese cuerpo jurídico" Procuradores • Nº 102 47 JURISPRUDENCIA estatuaria o colegial de sustituirse los procuradores entre sí dé base para esta plena suplantación, ya que no se trata de que de modo ocasional, y por cierto motivo, un procurador actúe por otro, sino que desde el origen del litigio es patente que no podrá actuar por sí el apoderado de la parte, y que por ello encomienda la ­llevanza del pleito en su actuación ante los órganos judiciales a uno distinto. Y en este caso con el añadido de que la procuradora apoderada ha delegado firma, ya que en todos los escritos no aparece ni una sola que sea original, sino copia escaneada de la misma, como la que ya venía estampada en la demanda. Pues bien, una cosa es que se haya suprimido la limitación geográfica que obligaba a cada causídico a actuar en un partido, y otra que se haya aprovechado esa ­regla para defraudar la función ­misma que corresponde a ese cuerpo jurídico, degradando su intervención hasta minimizar su importancia, además de haber abierto un camino para incurrir en competencia desleal, aspecto éste meramente colegial que no me corresponde valorar pero para cuyo conocimiento creo que debo remitir copia de esta sentencia al Ilustre Colegio de Procuradores de Huelva”. Estas reflexiones del magistrado ponente estaban relacionadas con el fondo del asunto planteado en el recurso, para lo que necesitaba practicar, como diligencia final, el examen de un contador de gas, a fin de ­leerle por sí mismo, “pero observé que para tal acto debería citar a unos profesionales que no iban a inter­ venir por sí mismos (curiosa tesitura si, a la vista de lo que se apreciase en esa diligencia, quisiera alguna de las partes renunciar a alguna de sus pretensiones, cuando los apoderados o mandatarios originales –procurador y abogado– casi sin duda no estarían presentes), y terminé por entender que aportaba yo más al debate probatorio que lo que los intervinientes en el pleito deseaban mostrar”. Ante la falta de la prueba la sentencia desestimaba el recurso. 48 Procuradores • Nº 102 Constitución extemporánea del depósito para recurrir en el término de gracia del Art. 135 LEC AUTO DE LA SALA DE LO CIVIL DEL TRIBUNAL SUPREMO DE FECHA 4 DE DICIEMBRE DE 2012, DICTADO BAJO PONENCIA DEL MAGISTRADO FRANCISCO JAVIER ARROYO FIESTAS, SOBRE LA CONSTITUCIÓN EXTEMPORÁNEA DE UN DEPÓSITO PARA RECURRIR EN EL DENOMINADO “DÍA DE GRACIA” CONTEMPLADO POR EL ART. 135 DE LA LEC. S e había concedido a la parte recurrente el término de dos días para que efectuase la subsanación a la que se refiere el punto séptimo de la disposición adicional 15 de la LOPJ, con apercibimiento de no dar trámite a los recursos de casación y extraordinario por infracción procesal promovidos contra una sentencia de la Audiencia Provincial de Barcelona. La recurrente consignó sólo 50 euros en los dos días siguientes para recurrir en casación, por lo que fue requerida para que acreditase también la consignación del depósito para la interposición del recurso extraordinario por infracción procesal. El depósito sería constituido y presentado al tercer día de la notifica­ ción de dicho requerimiento en el día de gracia del Art. 135 de la LEC. La Audiencia Provincial acordó no tener por preparado el recurso extraordinario por infracción procesal al considerar que el depósito para recurrir se había realizado de forma extemporánea. Formulado recurso de queja, el Tribunal Supremo lo desestima y ratifica la inadmisión efectuada por la Audiencia en base a los razonamientos que siguen. En primer lugar se nos recuerda que el Tribunal Supremo, al resolver los recursos de queja planteados contra la denegación de la preparación de los recursos de casación y extraordinario por infracción procesal, en los que se planteaba la interpretación de la DA 15ª.7 LOPJ (AATS de 2 de noviembre de 2010, RQ nº 230/2010, 30 de noviembre de 2010, RQ nº 297/2010, 9 de diciembre de 2010, RQ nº 381/2010), ya se ha pronunciado sobre el alcance que debe darse al trámite de subsanación que se establece en la DA 15ª.7 LOPJ, y ha declarado que la amplitud de las expresiones utilizadas –“defecto, omisión o error”– lleva a concluir que es posible la subsanación no sólo en los supuestos en los que no se haya aportado el justificante que acredite o justifique la constitución del depósito verificado en plazo, sino también en los supuestos en los que no se haya efectuado aún la constitución del depósito o se hubiera realizado fuera del plazo legalmente establecido para ello. En el mismo sentido se ha pronunciado la STS nº 4631/2011, de 27 de junio (recurso: 1319/2010), y la STC nº 129/2012, de 18 de junio (recurso de amparo 5510/2010). Manifiesta el auto comentado que “la actuación en el ámbito procesal de la Audiencia Provincial fue la correcta y ajustada a derecho, toda vez que al sancionar la LOPJ la obligatoriedad de constituir depósito como JURISPRUDENCIA No estamos ante la entrega o presentación de un determinado documento, sino ante la realización de un determinado acto, que consiste en el ingreso del depósito requisito ineludible para la admisión del recurso, conforme a lo dispuesto en el apartado séptimo, se le concede el plazo de dos días a la parte que recurre para solventar la deficiencia detectada. Es más, ante la falta de acreditación de la constitución del depósito de uno de los recursos, se le concede un nuevo plazo de dos días”. Para concluir que “no es admisible la pretensión del recurrente de que el depósito efectuado al tercer día, tras la concesión de este segundo plazo de dos días, se le aplique lo dispuesto en el Art. 135 LEC –que establece la posibilidad de presentar escritos hasta las 15 horas del día siguiente del vencimiento del plazo– a los efectos de que pueda entenderse constituido dentro del plazo de dos días. Dicho argumento no es asumido por esta Sala porque no estamos ante la entrega o presentación de un determinado documento, sino ante la realización de un determinado acto, que consiste en el ingreso del depósito necesario en la cuenta del juzgado y resulta de aplicación el Art. 136 LEC. Cuestión diferente es que, una vez realizado el acto requerido en el plazo concedido para ello (Art. 136 LEC), se pueda presentar el documento que lo acredite al día siguiente hábil, hasta las 15 horas, en aplicación del Art. 135 LEC. En consecuencia, por las razones expuestas, la constitución del depósito para el recurso extraordinario por infracción procesal se ha producido en fecha posterior a los dos días concedidos para subsanar el defecto procesal, y resulta procedente el dictado de auto que ponga fin a la tramitación del recurso, sin que en ningún caso se haya producido una vulneración de la tutela judicial efectiva prescrito en el Art. 24 CE, toda vez que a la parte recurrente se le ha ofrecido –en dos ocasiones– la posibilidad de subsanar la falta de constitución del depósito”. JURISPRUDENCIA Efectiva notificación y requerimiento en forma telemática por procurador AUTO DICTADO POR LA SALA DE LO CIVIL DEL TRIBUNAL SUPREMO EL 21 DE MARZO DE 2013, BAJO PONENCIA DEL MAGISTRADO XAVIER O’CALLAGHAN MUÑOZ, POR EL QUE SE DA VALIDEZ A LA NOTIFICACIÓN Y REQUERIMIENTO TELEMÁTICO CERTIFICADO EFECTUADO POR EL PROCURADOR A SU CLIENTE, DEMANDADO EN JURA DE CUENTA. E n procedimiento de jura de cuenta se ordenó la práctica del pertinente requerimiento a la persona a quien se reclamaban los derechos del procurador, que era ilocalizable por sus cambios de domicilio, practicándose requerimiento telemático certificado por empresa privada. La Sala no aceptó el requerimiento efectuado telemáticamente por la empresa privada, que certificó su recepción y su conocimiento por el requerido, y frente a ello el procurador instante del expediente formuló recurso de reposición alegando la infracción del Art. 162 de la Ley de Enjuiciamiento Civil y de la Ley 59/2003, de 19 diciembre, de firma electrónica. La Sala admite el recurso y, en su lugar, se acuerda tener por válidamente efectuada la notificación y requerimiento al demandado de jura de cuenta, con los efectos legales pertinentes a la misma, manifestando en su fundamento segundo que: “La situación fáctica parte de los múltiples intentos de localizar a la persona a que se refiere la jura de cuentas, intentos por la vía prevista en la Ley de Enjuiciamiento Civil y, ante su fracaso, el procurador de los tribunales obtuvo la efectiva notificación y requerimiento en forma telemática, con los certificados electrónicos acredi­ tativos de la práctica de ello emitidos por un prestador de servicios de certificación. La situación jurídica parte del Art. 162 de la Ley de Enjuiciamiento Civil que prevé que las partes o los destinatarios de los actos de ­comunicación dispusieren de medios electrónicos, telemáticos (…) que permitan el envío y la recepción de escritos y documentos, de forma tal que esté garantizada la autenticidad (…) los actos de comunicación podrán efectuarse por aquellos medios, con el resguardo acreditativo de su recepción que proceda. Cuya norma procesal viene completada por la Ley 59/2003, de 19 diciembre, de firma electrónica, que contempla los certificados re­ 50 Procuradores • Nº 102 conocidos (Arts. 11 y siguientes) y los dispositivos de firma electrónica y sistemas de certificación de prestadores de servicios de certificación y de dispositivos de firma electrónica (a partir del Art. 24)”. Concluye esta interesante e innovadora resolución manifestando en su fundamento tercero que: “Como consecuen­ cia de la aplicación de la normativa expuesta a la situación de hecho, aparece la seguridad de la práctica de la notificación y requerimiento, intentada anteriormente por los medios tradicionales. Por los medios electrónicos se ha practicado, conforme a la Ley de Enjuiciamiento Civil, con la seguridad que contempla la citada ley de firma electrónica. Por tanto, procede estimar el recurso interpuesto y aceptar la validez de la comunicación electrónica del procurador instante del expediente con la parte”. Este auto comentado avala la validez de las notificaciones realizadas a través de la plataforma certificadora del Consejo General de Procuradores, que permite el envío de escritos, documentos y actos de comunicación judicial, garantizando su autenticidad. A estos efectos, el Sistema de Certificación de Envíos y Actos de Comunicación Judicial del Consejo General de Procuradores almacena de forma segura las evidencias electrónicas de todos los envíos realizados, incluida una copia del mensaje original, las evidencias de entrega en el servidor de destino y, en su caso, de apertura por parte del destinatario del mensaje enviado. Todas estas trazas y evidencias digitales quedan almacenadas en los sistemas por un periodo no inferior a cinco años, lo que permite al Consejo General de Procuradores emitir una certificación firmada digitalmente de cualquier envío realizado en ese periodo, garantizando tanto la autenticidad del envío como los pasos que el mismo ha seguido hasta su destinatario. Por medios electrónicos se ha practicado conforme a la Ley de Enjuiciamiento Civil con la seguridad que contempla la Ley de firma electrónica