PRESENTACIÓN En el territorio argentino y latinomericano, muchos ecosistemas que hasta hace apenas un par de décadas permanecían bajo vegetación natural y eran destinados a usos ganaderos y forestales muy extensivos, e incluso en algunos casos considerados como “áreas de desperdicio”, están cediendo espacio para el avance de la frontera agropecuaria a tasas sin precedentes. El mejoramiento genético, la biotecnología, el control químico de plagas, los sistemas de labranza, irrigación y drenaje han progresado de forma notable y permiten responder rápidamente a las demandas del mercado internacional por alimentos y fibras, así como de su nuevo competidor, los biocombustibles. La información sobre la distribución y las técnicas de explotación de los recursos naturales ha sido un motor fundamental para el desarrollo de las naciones, y las instituciones gubernamentales de investigación y transferencia han cumplido y cumplen un rol fundamental en el acceso público a ese conocimiento. Pero el aumento de la capacidad productiva basado sobre ese conocimiento no es suficiente para lograr un desarrollo ambiental, económico y socialmente sustentable si no es confrontado con conocimientos e información, también de acceso público, acerca de sus costos ambientales, económicos y sociales. En ausencia de conocimientos y políticas adecuadas, las últimas décadas no sólo han dado lugar a pérdidas severas en la capacidad de los ecosistemas para sostener la productividad de los suelos, proveer agua limpia, controlar los caudales de ríos e inundaciones, o para regular la composición de la atmósfera y el clima (entre otros beneficios); también han dado lugar a una asimetría marcada en la forma en que el perjuicio de esas pérdidas se distribuye entre distintos sectores geográficos y económicos de la sociedad. El progresivo reconocimiento científico y el mayor nivel de conciencia sobre los múltiples beneficios, tanto tangibles como intangibles, que brindan los ecosistemas ha vuelto inadmisible el reemplazo indiscriminado de bosques, pastizales y humedales remanentes para su aprovechamiento agrícola, forestal, pecuario, minero o inmobiliario sin una adecuada evaluación de los efectos colaterales o externalidades que los acompañan. Este libro aborda los beneficios o servicios provistos por los ecosistemas a la sociedad desde perspectivas múltiples, entre las cuales se incluyen su percepción humana, el análisis de sus dimensiones ecológicas, económicas, sociales y legales, su cuantificación y su optimización. Todos estos abordajes comparten como fin último el de proveer a la sociedad elementos que ayuden en la búsqueda de usos de la tierra más virtuosos y justos para el presente y para las generaciones futuras, por lo que esperamos que resulte de interés para los distintos observadores y actores que intervienen en los procesos de planificación y gestión del uso del territorio rural. La evaluación de los servicios ecosistémicos no está reservada a un único enfoque, no es tarea para una disciplina particular, ni está restringida al interés de un sector de la sociedad. El presente libro integra las contribuciones de 101 autores, volcadas en 31 capítulos, buscando representar la multiplicidad de intereses, enfoques, y abordajes relacionados a la evaluación de los servicios ecosistémicos. Se puede apreciar claramente que no todas las dimensiones de los servicios ecosistémicos y su análisis y evaluación se encuentran de igual manera representadas aquí, ni todos aquellos que han contribuido a su estudio en nuestro país han podido ser incluidos como autores. Sin embargo, creemos que este libro ofrece un panorama bastante amplio, crítico y actualizado del tema en Argentina como para facilitar la selección y la aplicación de las herramientas disponibles en la actualidad, orientar futuras líneas de investigación, e identificar algunos de los principales impulsores de la evaluación de servicios de los ecosistemas en Argentina y también en Chile y México. Este libro surge como producto del Taller “Expansión e intensificación agrícola en Argentina: Valoración de bienes y servicios ecosistémicos para el ordenamiento territorial”, auspiciado por INTA, IAI y ANPCY. Este Taller tuvo lugar en Buenos Aires del 5 al 7 de noviembre de 2009 y sus objetivos fueron: a) analizar los enfoques y las herramientas disponibles para la valoración de los servicios ecosistémicos, acordar cuáles se articulan más efectivamente al ordenamiento territorial y reconocer qué problemas necesitan ser comprendidos con mayor profundidad, b) identificar patrones y trayectorias de los servicios ecosistémicos en las distintas ecorregiones de nuestro país y destacar situaciones de riesgo ambiental, c) revisar el estado de la investigación sobre servicios ecosistémicos en Argentina, valorar la experiencia de otros países de Latinoamérica y del resto del mundo y proponer caminos para mejorar su calidad, su capacidad y su respuesta a las necesidades de la sociedad. Este libro refleja hasta qué punto se han logrado esos objetivos. Por otra parte, y al reconocer un abanico amplio de intereses y experiencias entre los futuros lectores de este libro, los distintos autores han preparado cada capítulo para que puedan ser abordados en forma independiente. No obstante, a fin de facilitar una lectura comprehensiva, hemos organizado esos capítulos dentro de seis grandes secciones. En la Sección I (capítulos 1 a 5) se presentan las bases conceptuales de la evaluación de los servicios ecosistémicos desde puntos de vista diferentes, aunque en gran medida complementarios. En la Sección II (capítulos 6 a 11) se desarrolla en profundidad la valoración biofísica o funcional de distintos tipos de servicios. La Sección III (capítulos 12 a 15) refleja aspectos legales, económicos y sociales de los servicios ecosistémicos. La Sección IV (capítulos 16 a 19) presenta la aplicación de distintos métodos orientados a la evaluación de conjuntos amplios de servicios ecosistémicos en el contexto del ordenamiento del territorio rural. La Sección V (capítulos 20 a 27) incluye una amplia gama de casos de evaluación en la que se valoran servicios ecosistémicos y/o ecosistemas particulares. Por último, la Sección VI (capítulos 28 a 31) introduce el producto de las discusiones entre los autores de los capítulos previos junto a otros participantes del taller y se orienta en torno a cuatro ejes de integración y síntesis de las perspectivas desarrolladas en las secciones previas. Estos ejes incluyen la definición y justificación del concepto de servicios ecosistémicos, sus múltiples dimensiones, los métodos para abordarlos y las acciones que el sistema de ciencia y tecnología puede emprender para acercar su uso a la sociedad. Las páginas que siguen existen gracias a muchas instituciones y personas. El Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Inter-American Institute for Global Change Research (IAI, a través de su proyecto CRN 2031) y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Técnica (ANPCyT) financiaron la realización del taller que dio origen a este libro, y el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca financió la publicación del mismo. El apoyo de la Universidad Nacional de Mar del Plata, la Universidad Nacional de San Luis, la Universidad de Buenos Aires, el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y el INTA a las líneas de investigación de los editores ha permitido que las mismas confluyan en esta iniciativa. Al entusiasmo, esfuerzo y paciencia de los autores de este libro volcadas en los capítulos que siguen debemos sumar la de otros participantes del Taller por su compromiso con el desarrollo de este área del conocimiento. Por último, agradecemos muy particularmente a los revisores pares que posibilitaron mejorar la calidad de los distintos capítulos que integran este libro, cuyo listado se detalla más adelante, a Pablo Roset y Alejo Paglilla como responsables de la revisión y edición de estilo y edición gráfica, y a Laura Amdan, Natalia Murillo, Gisel Booman y Marisa Puente por su colaboración en la organización del Taller. P.L., E.J. y J.P, 14-9-2010