jueves 20 de mayo de 2004 «Los verdes campos del Edén» Busca en nuestro Web Versión para imprimir Como a Juan, el protagonista de «Los verdes campos del edén», e intuyo que como a Antonio Gala, los cementerios siempre me han parecido lugares apacibles. La idea de esta obra, estrenada en 1964, es un manantial de posibilidades: un hombre regresa de la guerra ¬no importa cuál¬, pero sólo hallará su hogar en el panteón familiar, donde nace un oasis de alegría. Allí invita a sus amigos ¬mendigos, prostitutas, chaperos, viejas solitarias...¬, hasta que el sistema, inexorable, les pasa por encima. El punto de partida es hermoso y la prosa de Gala fue celebrada en su día: además de lírica, servía de vehículo para una elegante crítica social. Ritmo de teleserie. Pero han pasado cuatro décadas y los usos sociales han cambiado. Cuesta trabajo sentir complicidad alguna con personajes como la pareja de recién casados. Ese recatamiento para besarse en público, esas maneras franquistas del alcalde de la ciudad, esas formas neorralistas de la dueña de la pensión... Hay cierto olor a naftalina en el texto, que necesitaría una revisión a fondo. Poco ayuda la dirección de Antonio Mercero, que cuenta con un sólido plantel de actores, a los que imprime un ritmo de teleserie en el que muchos no encuentran el tono adecuado. Joan Crosas muestra un único registro: el hombre bonachón hasta decir basta. Eva Higueras y Rubén Ochandiano lo intentan, pero sus personajes, empalagosos, les obligan a un derroche de cursilería; y se nota que Chema de Miguel tiene oficio, pero su mendigo acaba por cansar. Sólo algunos intérpretes consiguen escapar a las ataduras del montaje. Es el caso de una magnífica Lola Cardona, o el de Fernando Ransanz, émulo del Gila más entrañable con su guarda del cementerio. La nostalgia es un error. 1964 está demasiado cerca y a la vez demasiado lejos. Y reestrenar no es desempolvar. [ Inicio | Portada | Canela Fina | Opinión | Nacional | Internacional | Cultura | Madrid | Sociedad ] [ Religión | Economía | Deportes | Espectáculos | Gente | Toros ] [ El Tiempo | Clasificados | Ocio | Cartas al Director ] PUBLICIDAD © Copyright, 1999 La Razón C/Josefa Valcárcel 42, 28027 Madrid (España)