270954. . Tercera Sala. Sexta Época. Semanario Judicial de la Federación. Volumen LI, Cuarta Parte, Pág. 78. DIVORCIO NECESARIO. SENTENCIA EN EL DIVORCIO VOLUNTARIO POSTERIOR, PROMOVIDO POR LOS MISMOS CONYUGES. Es verdad que el juicio de amparo es un medio de impugnación de la sentencia reclamada, de tal manera que su interposición implica la posibilidad de que dicha sentencia se modifique o quede sin efecto en cumplimiento del fallo pronunciado en el juicio constitucional. Sin embargo, la interposición del amparo no priva a la sentencia de segunda instancia, de su carácter de sentencia ejecutoria que le otorga el artículo 426, fracción II, del Código de Procedimientos Civiles, ni de sus efectos de cosa juzgada formal que el propio precepto le atribuye; lo cual se traduce en la consecuencia de que solamente por virtud del juicio constitucional podrá ser modificada, y de ninguna manera lo será por la sola voluntad de las partes. Puede decirse que se trata de una sentencia ejecutoria sujeta a una condición resolutoria consistente en la concesión del amparo, de tal modo que sólo por el cumplimiento de la condición podrá quedar sin efecto. En consecuencia, la sola manifestación de voluntad de las partes en el sentido de dar por terminado el juicio de amparo, es del todo ineficaz dada la existencia del fallo reclamado; con tanta mayor razón cuando que se trata de una sentencia de carácter constitutivo que resuelve cuestiones de interés público, y que no atañen tan sólo a los contendientes sino que afectan otros intereses jurídicos, como son los referentes a la patria potestad sobre los hijos, y a derechos alimentarios que son irrenunciables. Por similares razones debe estimarse que no es posible admitir que la sentencia dictada en el divorcio voluntario promovido con posterioridad por los mismos cónyuges, determine que la sentencia reclamada dictada en el juicio de divorcio necesario, deje de surtir efectos: la sentencia reclamada tiene, según se ha visto, el carácter de sentencia ejecutoria. Mientras el amparo no se conceda, dicha sentencia conserva ese carácter. En estas condiciones, es claro que la sola existencia de otra ejecutoria, dictada en juicio posterior, no es causa suficiente para dejar sin efectos la primera, que tiene igual calidad de ejecutoria y es anterior en tiempo. Por todo lo expuesto, debe resolverse que no procede admitir que se ha operado el cambio de situación jurídica y en consecuencia no procede sobreseer por tal causa el juicio de amparo en contra de dicha sentencia dictada en el juicio de divorcio necesario. Amparo directo 7247/59. Agustín Chardi Córdova. 29 de septiembre de 1961. Cinco votos. Ponente: José Castro Estrada. -1-