EDUCACIÓN PSICOMOTRIZ La educación psicomotriz es una técnica basada en una pedagogía activa, flexible y objetiva que aborda al niño en forma integral durante las diferentes etapas de su desarrollo, con la finalidad de mejorar las capacidades intelectuales, afectivas y sociales a través del movimiento. Es una estrategia educativa utilizada sobretodo en la educación preescolar y escolar. Sin embargo es posible aplicarse en otros ámbitos de acuerdo al uso que se le desee dar, ya sea educativo (preventivo) o reeducativo (terapéutico), es así que el nombre también variará por lo que es importante distinguir los siguientes términos: Psicomotricidad: Encargada de estudiar la manera cómo influye el movimiento en la organización psicológica de las personas. Educación Psicomotriz:Es aquella que está dirigida a los niños que se encuentran en edad preescolar y escolar, con la finalidad de prevenir problemas en el desarrollo, problemas de aprendizaje y de favorecer el aprovechamiento escolar. Reeducación Psicomotriz: Es la que se aplica a niños que presenten dificultades en la adquisición de habilidades psicomotrices, las cuales dificultan la adquisición de sus aprendizajes escolares. La Terapia Psicomotriz: Se aplica a niños con trastornos psicomotores asociados a trastornos de personalidad; con ella se pretende llevar al niño a un estado de equilibrio y armonía que le permita desarrollar su afectividad e inteligencia, con el objetivo de mejorar y optimizar la capacidad de interacción del sujeto con el entorno La educación psicomotriz busca favorecer en el individuo el dominio y conocimiento de su cuerpo, para que partiendo de ella adquiera una experiencia directa con el mundo que lo rodea y logre sus aprendizajes a través de la acción. Los aprendizajes se dan en el momento en que la información almacenada de una experiencia vivida hace conexión con una nueva experiencia que le permita utilizar la información almacenada anteriormente. Entonces, cuantas más experiencias nuevas se le ofrezcan al niño, se le estará dando mayores oportunidades de crear conexiones que le permitan la adquisición de nuevos aprendizajes. Estas experiencias que el niño debe vivenciar deben darse de forma directa, es decir, a partir del uso de su propio cuerpo. Es por este motivo que la educación psicomotriz es una excelente técnica o estrategia de aprendizaje. La educación psicomotriz parte de una necesidad del niño: el movimiento, a través de él explora, investiga y descubre todo aquello que se encuentra a su alrededor, es decir, conoce el mundo que lo rodea. De aquí la importancia de aplicar la educación psicomotriz desde los primeros años de vida del niño y estar atentos si existen dificultades motoras que se presenten para poder tratarlas a tiempo. LA IMPORTANCIA DE LA FLEXIBILIDAD EN LOS NIÑOS Cuando los bebés nacen tienen una elongación (capacidad para estirarse sin ocasionar daño alguno) casi perfecta, pero con la falta de actividad esta se va perdiendo poco a poco. Desde muy pequeño es importante que vayamos inculcando el hábito de la actividad física, es más sencillo empezar desde temprana edad que a los 30 años cuando ya nos hemos acostumbrado al sedentarismo. La flexibilidad podría ser definida como la capacidad que tienen los músculos para estirarse cuando una articulación se mueve. La flexibilidad ayuda a mantener y a mejorar la salud, así también el correcto funcionamiento de las articulaciones, ello en un futuro permitirá prevenir dolores de cualquier índole física. Para mejorar la flexibilidad, se pueden realizar ejercicios individuales (acompañados de implementos), o en parejas, dentro de los cuales podemos nombrar los ejercicios que impliquen los movimientos de las articulaciones y los ejercicios de estiramiento. Los estiramientos siempre deben ser realizados luego de una buena entrada de calor, como caminar o realizar algún juego, porque así los músculos aumentan su nivel de temperatura interna y esto favorece el entrenamiento de la flexibilidad, cuando un músculo está frío, su elasticidad se encuentra disminuida y ello perjudica sumamente la capacidad de alcanzar un estiramiento óptimo. A continuación les detallo algunos ejercicios que se pueden realizar para trabajar estiramientos y/o elongaciones: 1. En parejas, sentados uno frente a otro, tomarse de las manos y jalarse entre ellos. 2. Sentados en el suelo con las palmas de las manos sobre el mismo tratar de levantar el cuerpo del piso. 3. Realizar saltos imitando los movimientos de una rana, canguro, conejo, etc 4. Boca abajo, empujar el tronco hacia arriba mientras se doblan las piernas intentando llegar los pies a la cabeza. 5. Tratar de empujar con las manos o los pies la pared, el suelo, un árbol, etc. IMPORTANCIA DE UNA BUENA POSTURA Mantener una buena postura corporal, no es solo un tema de interés estético también lo es desde el punto de vista de la salud. Hoy en día los dolores de espalda se han vuelto comunes entre los niños, ello se debe a la adopción de posturas viciosas las cuales producen dolor, malestar, síntomas de enfermedad y alteraciones a nivel de columna vertebral. Entre las posturas inadecuadas más comunes tenemos el encorvarse ya sea en la posición de sentado o de pie. Cuando se quiere alcanzar algo y esforzamos nuestras articulaciones, cuando deseamos levantar algo del suelo y flexionamos todo el tronco, así mismo los chicos que pasan largo tiempo frente al computador, mirando televisión o participando en videojuegos, a menudo también tienen una mala postura. Consejos: Enséñale cómo es una buena y una mala postura. Recuérdale la importancia de adoptar una postura adecuada. Corrígele cuando adopte una postura inadecuada. Llevar la mochila, repartiendo el peso entre ambos hombros. El peso de la mochila no debe superar el 10% del peso del niño. Al levantar un peso del suelo, doblar las rodillas, acerca el peso lo más posible y levantarlo. Utilizar una silla con respaldo y altura adecuada a la talla, tener en cuenta que los pies siempre deben estar apoyados en el suelo y deben hacer un ángulo de 90°. Adaptar el mobiliario a la medida del niño, no al contrario. Los ejercicios de relajación y estiramiento son importante para mantener los músculos fuertes y en buen estado. ESCOLIOSIS INFANTIL El niño que constantemente y pese a las ?advertencias? en sentido contrario adopta una postura asimétrica cuando está sentado, no desarrolla una escoliosis, sino que ya padece una. La posición de descanso de un niño escoliótico es justamente una postura escoliótica porque es la que requiere un menor esfuerzo y cualquier otra postura le resulta fatigosa, lo que hace que ya no sean posturas de descanso en ningún sentido (Farkas). La escoliosis es una deformación o desviación de la columna vertebral. La mayoría de estas se presentan por herencia sin embargo también las malas posturas o tener un miembro inferior más largo que el otro, puede condicionar su aparición. La escoliosis trae consigo problemas a nivel de cadera, rodillas y pies. El tratamiento está a cargo del área de ortopedia y fisioterapia, el primero indicará si es o no necesario algún material correctivo mientras que el segundo se encargará de los ejercicios a realizar tomando en cuenta la severidad, la zona y el tipo de escoliosis, dichos ejercicios deben ser repetidos en casa y de ser posible en el centro educativo. Signos y síntomas que puedes observar: ? Un hombro más alto que el otro. ? Pecho hundido. ? Una pelvis más alta que la otra. ? Dolor de espalda. ? Un omoplato o escápula que sobresale más respecto del otro. ? Cintura desnivelada. ? Para observar esta curvatura puedes pedirle al niño que flexione el tronco, tiene que lograr un ángulo de 90°, desde esa posición es más fácil observar los signos señalados anteriormente. ? La postura escoliótica puede provocar que las costillas de un lado se junten y del otro se separen ocasionando dificultades respiratorias y cardiacas. Considerar: ? Actividades como la natación o la equitación son especialmente beneficiosas para tratar la escoliosis porque tonifican y refuerzan los músculos de la espalda. ? Corregir las posturas inadecuadas a tiempo. ? Una evaluación temprana puede prevenir una deformidad mayor. MOVIMIENTO Y ESTADOS DE ÁNIMO El movimiento se manifiesta en las personas desde el momento en que nacemos, siendo éste el que inicialmente nos domina por tratarse de reacciones involuntarias (reflejos) pero conforme vamos creciendo y madurando vamos adquiriendo la capacidad de controlarlos y usarlos de acuerdo a nuestras necesidades. Para los niños, toda actividad que involucre movimiento, les causa placer, es por ello que disfrutan del juego. Así mismos los primeros logros visibles son a nivel motor, los mismos que serán la base para las próximas adquisiciones en otros ámbitos (intelectual, lenguaje y emocional), lo cual le dan al niño mayor seguridad en sí mismo, por tanto, se siente bien y les causa alegría. Es a través del movimiento que el niño empieza a explorar su entorno, comienza a darse cuenta que hay muchas cosas a su alrededor que necesita conocer y que para conseguir este propósito su cuerpo debe adaptarse. Por ejemplo, si desea abrir una puerta deberá empinarse para alcanzar la manija o quiere sacar algo de debajo de un mueble debe agacharse, cada acción que intente realizar estará acompañada de movimiento. Cuando este es reprimido el niño se siente frustrado y molesto. Cada vez que el niño logra una nueva habilidad se siente bien consigo mismo y necesita que las personas que se encuentran a su alrededor lo feliciten o que manifiesten el mismo entusiasmo que él siente porque aún está afectivamente ligado a las opiniones del adulto que se encuentra a su cuidado (maestra, padres u otros). Los estados de ánimo de las personas que lo rodean animarán o desalentarán al bebé en su intento por descubrir nuevas habilidades. Al reforzar positivamente estaremos motivando al niño a que siga intentando descubrir nuevas posibilidades de movimiento con su cuerpo, propiciar situaciones de juego que involucren el movimiento también ayudarán en este propósito, para ello es importante conocer cuáles son sus actuales posibilidades y a ellas darles un grado mayor de dificultad, de tal manera que el niño busque nuevas formas de llevarlas a cabo. Cada logro es causa de asombro para él. Si bien es cierto que todos los niños, con un desarrollo motor normal, tienen la capacidad para lograr las mismas habilidades no todos lo logran al mismo tiempo o simplemente no los logran debido a que cada niño es un ser individual, con una personalidad y un desarrollo motor propio. El observar que otros niños avanzan más a diferencia de él puede causarle angustia o tristeza, afectando a su normal desarrollo emocional. Es muy común observar en las salas de psicomotricidad niños que evitan realizar ciertas actividades y prefieren otras más sencillas o que se sienten seguros de poder realizar. En estos casos es necesario conversar con el niño para saber a qué se debe esa reacción, de tal manera que podamos tomar las medidas necesarias para ayudar a lograrlo. Las actividades de movimiento también permiten al niño enfrentar y superar ciertos temores como a las alturas o a caer. Es posible que en estos casos se debido a que el niño aún no haya adquirido todas las destrezas necesarias para poder efectuar determinados movimientos o simplemente se trate de un miedo a que no le salga. Si se trata del primer caso propiciar actividades que permitan observar detenidamente si el niño tiene las destrezas para realizar el movimiento que deseamos, por ejemplo, si deseamos que salte un obstáculo podemos observar si logra el impulso necesario o no y en el segundo caso se podría darle un momento en la sesión para trabajar individualmente con él y guiar la realización del ejercicio para que sienta que puede hacerlo, tal vez inicialmente con apoyo pero luego lo hará solo. Como se ha podido notar, todas estas acciones influyen en el estado de ánimo del niño y es por ello que el adulto debe involucrarse para ayudar a mejorar la autoestima del niño, a confiar en sí mismo, en sus posibilidades y finalmente estaremos formando un niño autónomo, capaz de hacer las cosas por sí mismo y con un estado emocional sano. HIPERTONÍA INFANTIL La Hipertonía es la alteración del tono muscular, este presenta un aumento en su tonicidad, esta condición puede ser transitoria o en el peor de los casos por compromiso neurológico. Existe una hipertonía en la infancia, se produce en los recién nacidos, es una hipertonía en las extremidades, debido a una posición fetal, con la características que presenta una flexión en los brazos y piernas. Entre los dos y 6 meses de edad, se da una disminución en el tono muscular, empezando por la cabeza y luego siguiendo por los brazos, lo que permite una mayor libertad de movimiento en las extremidades. A los 6 meses se produce un aumento del tono muscular del tronco, permitiendo la incorporación de la posición sentada, llegando al año el tono muscular del cuello, columna y miembros inferiores se encuentran lo suficientemente desarrollados para el inicio a la posición de pie. Al año se obtiene mayor control en la postura. ¿Cómo saber si es una hipertonía transitoria o sospechar de una Parálisis cerebral? La hipertonía transitoria, suele comenzar a notarse alrededor de los tres meses de edad. Tiende a extenderse desde los músculos del cuello, a los músculos del tronco y luego hacia las piernas, en dirección de la cabeza a los pies. La hipertonía desaparece a los 18 meses de edad. Características: Dificultad en controlar el inicio y termino del movimiento. Se mueven lentamente o tienen escasez de movimiento. Frecuentemente presentan daños en el sistema visual que incluyen problemas oculares motores. Problemas en la localización, seguimiento fluido de objetos en movimiento y percepción de profundidad a menudo están afectados. Los niños tienen gran sensibilidad al sonido. Sonidos altos o inesperados a menudo despiertan una respuesta motora exagerada. Se presenta muy a menudo la deformidad de la comuna (escoliosis). Problemas para la flexión plantar, por lo tanto alteraciones al caminar. A menudo desempeñan muchos de sus movimientos gruesos y finos con la respiración retenida. Los resultados son que el niño habla con una voz forzada, puede hablar solo con frases cortas y puede moverse solamente por cortos períodos. Algunas recomendaciones: Realizar ejercicios respiratorios, controlar que los realice correctamente. Realizar masajes relajantes extremidades superiores e inferiores. Realizar movimientos de todas las articulaciones en especial de las extremidades inferiores y superiores, el niño puede colocarse sobre una colchoneta y la facilitadora puede asistirlo moviendo cada extremidad. Controlar la higiene postural del niño para evitar deformidades de columna, así mismo trabajar fortaleciendo los músculos que intervienen en dicha zona. Estimularlo a nivel sensorial, puede valerse de algunos materiales como una esponja o una escobilla de cerdas suaves, estas deberán pasarse lentamente por las extremidades superiores e inferiores en dirección de abajo hacia arriba y viceversa. Las recomendaciones brindadas son ejercicios que pueden ser trabajados en casa o la escuela con los niños hipertónicos, que si bien son de mucha ayuda no garantizan el mejoramiento total del problema, para ello es necesario que éstos sean indicados por un fisioterapeuta y a su vez usar los accesorios adecuados que indique el ortopedista. HIPOTONÍA El tono muscular y el movimiento tienen mucha relación con el cerebro, la médula espinal, los nervios y los músculos. La disminución del tono normal y flacidez del músculo de forma generalizada o focal es denominada hipotonía. Podríamos decir que la hipotonía es un signo de alarma el cual sugiere la presencia de un trastorno genético, muscular o a nivel del sistema nervioso central. Características: - Flacidez - Carencia de movimiento o menor movilidad - Debilitamiento de la musculatura - Reducción del tono muscular - Disminución de los movimientos espontáneos - Posturas anormales y poco habituales En el bebé: - Tienen poco o muy poco control sobre su cabeza - Duermen con las articulaciones de codos o rodillas estiradas, mientras que lo normal es que mantengan flexionadas las extremidades. - Al cargarlo pareciera que levantamos a un muñeco de peluche. En el niño: - No hay armonía en su caminar, ni al correr. - Movimientos desorganizados. - Dificultad en cuanto a motricidad fina y gruesa. Recomendaciones: - Masajes de percusión: Colocamos al bebé boca arriba y aplicamos pequeños golpecitos suaves con ambas manos, empezamos por el pie y seguimos ascendentemente hasta la cadera, luego continuamos con la mano, antebrazo, brazo y codo del bebé. Primero se realizará por el lado derecho del cuerpo y luego con el izquierdo. El objetivo de este ejercicio es lograr ejercitar y activar el músculo débil. - Masaje en aspa: Con el bebé en posición boca arriba, cogemos el pie derecho y manito izquierda y le aplicamos masajes como si estuviéramos amasándolo, conforme se van realizando los masajes, iremos acercando ambas extremidades a la pancita del bebé, se repite lo mismo con el pie izquierdo y mano derecha. - Los primeros 6 meses es importante acudir al control del bebé mensualmente, después de los 6 meses acudir al pediatra en intervalos de dos meses. - No dejarlo acostado o sentado todo el tiempo, es bueno cambiarlos de posición constantemente. PIE PLANO Se define como pie plano a la falta del arco interno del pie, el cual ayuda a crear un puente o empeine, en condiciones normales durante la marcha se apoya solo la punta, talón y borde externo de los pies, sin embargo en la ausencia de este arco los niños caminan apoyando toda la planta del pie. Es importante recalcar que todos los bebés nacen con pie plano, este arco se termina de formar entre los dos y cuatro años de edad. Las principales causas de esta condición son conexiones articulares flojas, y grasa formada en los huesos de los pies, otro factor que puede predisponer el pie plano en los niños es el sobrepeso y este a su vez favorecer a otros problemas como las rodillas en X. Los síntomas más comunes son dolor constante en el talón, arco interno, o la parte baja de la pierna, este se intensifica al realizar actividades como caminar y correr. La presencia de alguno de estos síntomas es señal de que debemos acudir a un ortopedista infantil, el tratamiento básicamente está constituido por ejercicios de fortalecimiento, plantillas o calzados ortopédicos. Ejercicios en casa: Caminar apoyando el peso del cuerpo en la parte externa del pie, esto es importante para fortalecer los músculos de las piernas, pies y tobillos. Realízale movimientos de la articulación tobillo-pie, la punta del pie hacia abajo, arriba, afuera y adentro. Coloca su pie sobre una pelota pequeña y que realice los mismos movimientos anteriores y circulares. Motívalo a caminar descalzo sobre la punta de los pies y talones de preferencia en la arena, esto ayudará a formar el arco interno de la planta del pie. Pídele a tu pequeño que recoja objetos pequeños con el del pie, por ejemplo chapas, tapa roscas, lápices, esto le ayudará a formar el arco del pie y también a ejercitar las articulaciones de los huesos. Andar descalzos, esto facilita el constante movimiento del pie y una mayor facilidad al movimiento de los dedos y demás articulaciones, ello se puede trabajar sobre terrenos variados y desiguales. En la posición de sentado, tu pequeño deberá extender las rodillas por 3 minutos, luego las flexionará pegadas al pecho, se repite el ejercicio por 15 minutos diarios. Pídele que suba las escaleras, ya que tendrá que apoyar la parte interior de su pie para impulsarse en la subida. Para fortalecer los ligamento pídele que salte, puedes hacerlo en forma de juego así le resultará más divertido.