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Abandono del hábito de fumar y embarazo
Contenido
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Lo que sabemos
Lo que podemos hacer
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Evidence-Based Care Sheet
By: Penny D. March, Psy.D.; Carita Caple, RN, BSN
Edited by: Diane Pravikoff, RN, PhD, FAAN
Cinahl Information Systems
Lo que sabemos
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El hábito de fumar durante el embarazo crea riesgos de salud significativos tanto para la madre como para
el bebé, y está asociado a un mayor riesgo de que el bebé tenga un bajo peso al nacer, retraso del
crecimiento intrauterino, síndrome de muerte súbita (SIMS) del lactante, embarazo ectópico y aborto
espontáneo. También está asociado con problemas de salud en lactantes y niños, como el asma, la
bronquitis y un reducido desarrollo cognitivo y somático. (2)(5)(8)
Las intervenciones para dejar de fumar para mujeres embarazadas pueden reducir las tasas de madres
fumadoras y, por consiguiente, prevenir la mortalidad perinatal. Por ejemplo, los lactantes de mujeres que
dejaron de fumar en el primer trimestre tienden a presentar medidas y pesos corporales comparables con
los de lactantes nacidos de madres no fumadoras. Además, los programas prenatales para dejar de fumar
han disminuido la incidencia de retrasos del crecimiento intrauterino y nacimientos antes de término. (2)(5)(8)
 Dejar de fumar de forma temprana (es decir, antes de finalizar el primer trimestre) produce una
reducción significativa de los gastos de atención sanitaria, ya que disminuye la cantidad de bebés
con bajo peso al nacer. Aunque dejar de fumar al comienzo del embarazo ofrece los mayores
beneficios para la madre y el feto, también se pueden lograr beneficios significativos cuando la
madre abandona el hábito más adelante en el embarazo.(1)(8)
 Aproximadamente entre el 20% y el 40% de las fumadoras deja de fumar durante el embarazo.
Aunque los estudios han sugerido que más de la mitad de las madres que dejan de fumar durante
el embarazo vuelven a hacerlo dentro de los 30 días posteriores a dar a luz, las actividades de
apoyo para reducir el hábito y dejar de fumar en el caso de las pacientes embarazadas sigue
siendo meritorio y efectivo.(2)(6)(8)
Aunque las intervenciones casuales para dejar de fumar durante el embarazo resultan efectivas, como
regla general, cuanto más intensa es la intervención, más efectivos son los resultados, con excepción de
las intervenciones intensivas grupales para las mujeres embarazadas, que habitualmente no están bien
atendidas y por lo tanto, resultan menos efectivas que los programas de intervenciones personales. (8)
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Las intervenciones para dejar de fumar incluyen la terapia cognitivo conductual, programas
motivacionales que ofrecen incentivos, terapia de reemplazo de nicotina y brindar a las mujeres
embarazadas la oportunidad de conocer en tiempo real el estado de salud del bebé mediante
ultrasonido. De estas, una revisión Cochrane reciente identificó los programas que ofrecen
incentivos como la intervención más efectiva.(4)(8)
 La mayoría de los fumadores que intentan dejar de fumar reinciden una vez o más antes de
abandonar el hábito en forma definitiva. Las fumadoras embarazadas que han reincidido también
suelen interrumpir la lactancia.(2)
 El uso de tabaco en las parejas o familias puede convertirse en esencial para la interacción entre
los miembros. Por lo tanto, la participación de la pareja o la familia es fundamental para el éxito
a largo plazo de las intervenciones para dejar de fumar de las pacientes embarazadas. (7)
Los estudios clínicos indican que el uso de la terapia de reemplazo de nicotina (TRN) por las mujeres
embarazadas aumenta el riesgo de nacimientos antes de término y bebés con bajo peso al nacer. No está
claro si estos resultados están relacionados con el hecho de que la TRN se indica a las mujeres que fuman
mucho y que pueden haber estado en riesgo de problemas de la salud fetal, o si la TRN realmente ejerce
un efecto teratogénico en el desarrollo del feto.(3)
 La TRN está clasificada como un fármaco de categoría B por la Dirección de Fármacos y
Alimentos (FDA) de los EE. UU., lo que indica que se ha asociado con un mayor riesgo para el
feto, pero que sus beneficios para ciertas mujeres embarazadas pueden superar los riesgos para el
feto.
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