VII Congreso SEAE Zaragoza 2006 Nº 67 ESTUDIO DE COMPETENCIA DE MALAS HIERBAS EN CULTIVO DE GUISANTE PROTEAGINOSO EN SEGUNDO AÑO DE AGRICULTURA ECOLÓGICA M. Oliver, G. Pardo, F. Perea y J. M. Urbano EUITA. Universidad de Sevilla. Carretera de Utrera, Km. 1, 41013 Sevilla. [email protected] RESUMEN Un problema frecuente en la Agricultura Ecológica es el manejo de la flora arvense. En cualquier cultivo es importante conocer la magnitud de la competencia que causa y el momento en que ésta se produce porque ayuda a elegir el modo de actuación y su momento para preservar las cosechas. En este trabajo, realizado en el segundo año de una rotación ecológica, tras un cultivo de girasol, se implantó un cultivo de guisantes proteaginosos, con el objetivo de conocer la pérdida de rendimiento asociada a una infestación natural de arvenses y precisar el periodo crítico de tolerancia y el periodo crítico libre de malas hierbas para este cultivo. El ensayo se realizó en una finca de secano representativa de la campiña andaluza. El periodo crítico de tolerancia se pretendía estimar con escardas manuales puntuales en distintas parcelas a las 4, 8, 12 y 16 semanas de la nascencia del cultivo, mientras que para calcular el periodo crítico libre de malas hierbas se mantuvo el cultivo sin arvenses hasta las semanas 4, 8, 12 y 16 tras la nascencia. Además se dispuso de un testigo completamente limpio de malas hierbas y de otro sin escardar. En todas las variables ensayadas se evaluó el nivel de infestación de malas hierbas en varias fechas y la producción de guisante al final de ciclo. La densidad de arvenses fue baja durante todo el periodo de crecimiento del guisante y ni siquiera en las parcelas sin escardar descendió la cosecha de forma significativa. No se consiguió obtener ni el periodo crítico de tolerancia ni el periodo critico libre de malas hierbas por falta de competencia de éstas. Estos resultados indican que, en aquellas explotaciones con reducidos bancos de semillas de malas hierbas, la infestación de arvenses en el segundo año de agricultura ecológica no representa todavía un problema ni siquiera para un cultivo poco competidor como es el guisante. Palabras clave: Pisum sativum, arvenses, escarda. INTRODUCIÓN En agricultura ecológica existe la necesidad de incluir leguminosas en las rotaciones, pues de lo contrario la fertilidad seria un factor limitante muy importante en los cultivos sucesivos de carácter nitrófilo. Por ello en muchas ocasiones se plantea una rotación con leguminosa como abono verde. En esas situaciones las malas hierbas no representan muchos problemas ya que se entierran junto con la leguminosa en estadios en que todavía no han generado semillas viables, con lo que se logra un efecto positivo desde un punto de vista de fertilidad del suelo y control de malas hierbas. Como aspecto negativo de este abono verde hay que señalar que el agricultor no obtiene ningún producto comercial. Esta estrategia cambia si se implanta una leguminosa para obtener un producto comercial, ya que las malas hierbas interferirán con el cultivo y además completarán su ciclo generando semillas viables, siendo esto un inconveniente para el futuro. En el caso de cultivar una leguminosa como es el guisante el problema puede ser todavía más acuciante ya que es una especie poco competidora (González García, 2001). VII Congreso SEAE Zaragoza 2006 Nº 67 En agricultura ecológica, la principal medida preventiva para evitar los problemas de malas hierbas es conseguir una adecuada rotación de cultivos. Sin embargo, no siempre es posible conseguir bancos de semillas reducidos, por lo que es preciso utilizar otros métodos de control entre los que se encuentran el laboreo, el manejo de la siembra del cultivo (dosis y fecha), efectuar falsa siembra, o utilizar variedades competidoras con la flora arvense. Los estudios de competencia son importantes en agricultura ecológica porque ayudan a conocer el impacto real de las malas hierbas en la rentabilidad del cultivo y permiten optimizar la aplicación de medidas de control en postemergencia, como por ejemplo los mecánicos (Rasmussen, 1993). Para determinar la perdida de rendimiento asociada a la infestación suele comparar el rendimiento de una parcela infestada frente al de otra próxima que se mantenga limpia de malas hierbas. Adicionalmente es interesante determinar el periodo crítico de tolerancia (PCT), que es el tiempo en el que el cultivo es capaz de convivir con las arvenses sin pérdida de rendimiento, suponiendo nascencias simultáneas, y el periodo critico libre de malas hierbas (PCLMH), que es el tiempo durante el cual las hierbas que nacen pueden competir con el cultivo (Zimdahl, 1999). La determinación de los mencionados parámetros suponen una importante ayuda para decidir qué medida de control se debe aplicar y cual es el momento más adecuado para su uso. En la actualidad se dispone de resultados de estudios de competencia realizados en diferentes cultivos en agricultura convencional. Sin embargo la problemática de malas hierbas en agricultura ecológica es diferente, entre otras cuestiones porque la composición florística de la infestación es más diversa. En la revisión bibliográfica realizada no se ha encontrado ningún estudio previo de competencia de malas hierbas en el cultivo ecológico del guisante proteaginoso. Este trabajo, pretende conocer la pérdida de rendimiento asociada a una infestación natural de arvenses, e igualmente precisar el PCT y el PCLMH en un cultivo de guisantes proteaginosos MATERIAL Y MÉTODOS El ensayo se ha localizado en la finca experimental de Tomejil, perteneciente al CIFA las Torres, dicha finca esta situada en la campiña de Carmona, (37º 25´N, 5º 35´W), considerándose representativa del secano en la provincia de Sevilla. Es el segundo año de una rotación en la que el año anterior se cultivó girasol. La variedad de guisante “Ideal” fue sembrada el 19 de diciembre de 2005 a razón de 200 kg/ha. La fecha de siembra fue ligeramente tardía para mitigar problemas de enfermedades, de malas hierbas y jopo, practica recomendable en Agricultura Ecológica. La precipitación recogida durante el ciclo de cultivo (diciembre-mayo) fue de 277 mm, coincidiendo con la media de los últimos 5 años de los que se dispone de datos (278 mm), además se distribuyó favorablemente de acuerdo a las necesidades del cultivo. El diseño experimental fue el de bloques al azar con 4 repeticiones y parcelas elementales de 28 m2. Se ensayaron 10 tratamientos para tratar de determinar el PCT y el PCLMH, tal y como se describe en el cuadro 1. La flora arvense dominante estuvo compuesta por Phalaris paradoxa, Diplotaxis erucoides, Picris echioides, Polygonum aviculare, Anagalis arvensis, y Convolvulus arvensis. Las escardas re realizaron manualmente en todos las casos. Durante todo el ciclo de cultivo se tomaron datos de densidades de malas hierbas mediante un marco cuadrado de 0,1 m2. Por último se obtuvieron datos de producción para cada uno de los tratamientos ensayados. VII Congreso SEAE Zaragoza 2006 Nº 67 Cuadro 1: Descripción de los tratamientos utilizados. Tratamiento PCT PCLMH Pérdidas 1.- Testigo sin tratar X X X 2.- Testigo sin malas hierbas X X X 3.- Una escarda en semana 4 X 4.- Una escarda en semana 8 X 5.- Una escarda en semana 12 X 6.- Una escarda en semana 16 X 7.- Limpio hasta semana 4 X 8.- Limpio hasta semana 8 X 9.- Limpio hasta semana 12 X 10.- Limpio hasta semana 16 X (PCT): periodo crítico de tolerancia; (PCLMH): periodo critico libre de malas hierbas, Perdidas: disminución de rendimiento asociado a la infestación. RESULTADOS Y DISCUSIÓN Evolución de la flora arvense La presencia de flora arvense fue muy baja durante todo el ciclo del cultivo, como se aprecia en el cuadro 2. En ninguno de los tratamientos ensayados y en ninguna fecha las densidades superaron las 2 pl/m2. Debido a esta escasa densidad de malas hierbas en ningún momento las diversas escardas efectuadas en el cultivo representaron una reducción significativa sobre parcelas sin desherbar (cuadro 2). En el cultivo del girasol (previo al guisante), las labores preparatorias de siembra son en primavera. Este hecho hace que se eliminen prácticamente aquellas hierbas de los cultivos de invierno y se limite la lluvia de semillas para el siguiente cultivo, de ahí los resultados obtenidos. Los beneficios de las rotaciones para mantener las arvenses en niveles bajos son mucho mayores si se intercalan cultivos de ciclo de invierno con cultivos de verano como describen algunos autores en nuestro país (Dorado, 1995; García Muriedas et al., 1997; López Bellido y López Bellido, 2000). Cuadro 2 : Evolución de la flora arvense (pl/m2) en el ensayo. Tratamiento 03/3 13/3 28/3 1.- Testigo sin tratar 0,11 0,15 0,23 2.- Testigo sin malas hierbas 0,11* 0,07* 0,10* 3.- Una escarda en semana 4 0,13* 0,12 0,21 4.- Una escarda en semana 8 0,13 0,30 0,48* 5.- Una escarda en semana 12 0,15 0,21 0,38 6.- Una escarda en semana 16 0,14 0,15 0,18 7.- Limpio hasta semana 4 0,18* 0,15 0,20 8.- Limpio hasta semana 8 0,13* 0,13* 0,15* 9.- Limpio hasta semana 12 0,28* 0,20* 0,30* 10.- Limpio hasta semana 16 0,19* 0,11* 0,09* En cada fecha, sin diferencias significativas entre escarda manual tras el conteo. 10/4 19/4 02/5 10/5 17/5 24/5 0,29 0,03 0,83 0,48 0,52 0,49 0,08* 0,04* 0,67* 0,13* 0,04* 0,11* 0,22 0,15 0,36 0,32 0,02 0,04 0,03 0,04 1,08 0,78 1,12* 0,64 0,38 0,37 0,21 0,53 0,38 0,40 0,16 0,09* 0,35 0,31 0,19 0,09 0,21 0,14 0,11* 0,09* 0,03 0,03 0,02* 0,01* 0,78 0,67 0,58 0,52* 0,40 0,27 0,17 0,11* 0,19 0,37 0,24 0,06 0,18 0,26 0,16 0,08 tratamientos. (*) Realización de una VII Congreso SEAE Zaragoza 2006 Nº 67 Esta escasez de flora arvense, es un resultado interesante que permite concebir expectativas sobre la posibilidad de mantener la densidad de arvenses en niveles razonables utilizando una adecuada rotación de cultivos como método preventivo. Producción de grano Debido a la escasa presencia de malas hierbas durante el ciclo del cultivo la cosecha obtenida fue similar en todos los tratamientos ensayados (figura 2). Las parcelas limpias de arvenses durante todo el ciclo, obtuvieron la mejor cosecha, pero las diferencias con aquellas sin escardar en ningún momento (tratamiento 2 vs 1) fueron escasas y no significativas. Este resultado permite afirmar que no existe perdida en la producción del guisante asociada a la infestación natural de arvenses en estas condiciones y niveles de infestación. Los resultados son lógicos ya que la mayor densidad de arvenses contabilizada en todo el ensayo fue de 1,2 pl/m2, demasiado baja para que el guisante, incluso siendo poco competitivo, sufra competencia por parte de estas. Este hecho no permite cumplir con los objetivos previstos de conocer le PCT y el PCLMH, por lo que se deberá esperar a años sucesivos para poder conocerlos cuando previsiblemente aumente la infestación de malas hierbas. Sin embargo si permite tener expectativas halagüeñas sobre la posibilidad del cultivo ecológico del guisante en estas condiciones. Cuadro 3 : Producción (kg/ha) obtenida en el ensayo Tratamiento 1.- Testigo sin tratar 2.- Testigo sin malas hierbas 3.- Una escarda en semana 4 4.- Una escarda en semana 8 5.- Una escarda en semana 12 6.- Una escarda en semana 16 7.- Limpio hasta semana 4 8.- Limpio hasta semana 8 9.- Limpio hasta semana 12 10.- Limpio hasta semana 16 kg/ha 3222 3365 3101 2927 2908 2946 3014 3095 3021 2640 Sin diferencias significativas entre tratamientos. CONCLUSIONES La densidad de arvenses, tras el cultivo del girasol, fue baja durante todo el ciclo de crecimiento del guisante en todos los casos. No se pudieron obtener ni el periodo crítico de tolerancia ni el periodo critico libre de malas hierbas por falta de competencia de éstas al cultivo. Por ello, la pérdida de rendimiento asociada a la infestación natural de arvenses fue despreciable en estas condiciones. De los resultados se vislumbra la posibilidad del cultivo ecológico del guisante en estas condiciones. BIBLIOGRAFÍA -González García, M.R (2001. Interacción genotipo x ambiente en guisante proteaginoso (Pisum sativum L.).Tesis doctoral. Escuela Técnica Superior de Ingenierías Agrarias. Universidad de Valladolid. Palencia. VII Congreso SEAE Zaragoza 2006 Nº 67 -Garcia Muriedas, G., Estalrich, E., Lacasta, C., Meco. (1997). Efecto de las rotaciones de cultivos herbáceos de secano sobre las poblaciones de adventicias. Actas 1997 del congreso de la Sociedad Española de Malherbología, 33-36. -López-Bellido Garrido, R.J., Lopez Bellido, L. (2000). Efectos ambientales de la rotación trigo-girasol. Vida Rural, 104: 24-29 -Torner, C., Aibar, J., Bellostas, A., De Lucas, C., Esparza, M., FernándezQuintanilla, C., Gonzalez-Andujar, J.L., Gonzalez Ponce, R., Izquierdo, J., Navarrete, L., Royuela, M., Salas, M.L., Sánchez Del Arco, M.J., Santin, I., Tiebas, M.A., Vitta, J., Zaragoza, C. (1999) Conclusiones de los trabajos sobre competencia de las malas hierbas con los cereales de invierno en España. Actas del Congreso1999 de la Sociedad Española de Malherbología, 205-211. -Rasmussen, J. 1993. Yield response models for mechanical weed control by harrowing at early growth stages in peas (Pisum sativum L.). Weed Research . 33. 231-240.