HERMENEÚTICA DEL ARTÍCULO 246 DE LA CONSTITUCIÓN DE 1991 HERMENEUTICS OF THE ARTICLE 246 IN 1991 CONSTITUTION Nicolás Polo Figueroa1 Recibido: 02 de octubre de 2015 - Aceptado: 16 de octubre de 2015 Resumen Para esta interpretación del artículo 246 de la Constitución de Colombia, hemos dividido el texto en los siguientes seis enunciados: las autoridades de los pueblos indígenas/ los autoridades podrán ejercer funciones jurisdiccionales/el ámbito territorial/ las normas y procedimientos propios/ la fórmula “siempre que no sean contrarias a la Constitución y la leyes de la República/ y la ley establecerá las formas de coordinación entre las jurisdicciones/. Para interpretar la norma constitucional nos hemos valido de las sentencias de la Corte Constitucional y otras leyes vigentes. El propósito es visibilizar la jurisdicción indígena wayuu mostrando cómo sus elementos están directa o indirectamente relacionados con estos enunciados de la Carta Magna. Palabras clave: Jurisdicción indígena – ámbito territorial- coordinación interjurisdiccional – normas y procedimientos del sistema wayuu – autoridades wayuu – intercultural. Abstract To this interpretation of article 246 of Colombia Constitution, we have divided the text into the six following statements: the authorities of the indigenous peoples/ the authorities may exercise jurisdictional functions/ territorial scope/the own norms and procedures/ the formula “as long as they are not contrary to the Constitution and the laws of the Republic/ and the law shall establish the forms of coordination between jurisdictions/. To interpret the Constitutional norm we take advantages of the judgments of the Constitutional Court and other applicable laws. The article purpose is to make visible the wayuu indigenous jurisdiction, showing how its elements are directly or indirectly related with these statements of the Magna Carta. Key words: Indigenous jurisdiction - Territorial scope - Inter-jurisdictional coordination - norms and procedures of the wayuu system – wayuu’s authorities - intercultural. Lingüista de la Université de Besancon. Doctor en Lingüista Hispánica de la Universidad de Iowa. Maestría en Lingüística Española en la Universidad del Valle. Especialista en Metodología del Español del Instituto Caro Y Cuervo. Director/Editor del Comité Editorial de la Revista Verbum de la Escuela de Derecho y Docente Investigador de la Universidad Sergio Arboleda- Sede Santa Marta. [email protected] 1 104 Nicolás Polo F. - Hermeneútica del Artículo 246 de la Constitución de 1991 Este artículo es producto de la investigación del código IN-SM.214.15.002 sobre el “Sustento cultura y ancestral del sistema normativo wayúu”, Universidad Sergio Arboleda-Santa Marta. Introducción especiales indígenas? ¿Cuál es el sentido de la expresión “siempre que no sean contrarias a la Constitución y las leyes de la República? Y Para que exista coordinación entre la jurisdicción especial indígena y la ordinaria ¿se precisa de una ley que establezca las formas de coordinación?. Un tratadista y periodista alemán al disertar acerca de los derechos de los indígenas y la Constitución de 1991 (en adelante Carta Nos anima el propósito de dar a conocer este sistema jurídico y de sensibilizar a los administradores de justicia de Colombia tanto indígenas como no indígenas. constitución indígena. Parte del hecho de que doce artículos de la Carta Magna tienen como referente los derechos de las comunidades indígenas. Sin establecer una jerarquización entre las distintas disposiciones de la Carta, 1. Las autoridades de la etnia wayuu. En el sistema normativo wayuu las autoridades tienen una caracterización muy diferente a la de nuestro sistema nacional, dada la organización social propia de la etnia dividida clanes y artículo 246 constituye la joya de la corona de esta constitución indígena. tradicional del alaü’layuu, o autoridad legítima quien en su calidad de hermano materno de la madre de los miembros del clan ejerce la función de administrar el territorio, salvaguardar los bienes patrimoniales del clan, representar a sus miembros y responder de manera colectiva con éstos por los pagos que haya lugar por ofensas de alguno de sus miembros a otros clanes y, por sobre todo, la crianza, educación y formación de sus sobrinos. La autoridad de los alaü’layuu está restringida al territorio y miembros de su clan. Por eso, en el territorio wayúu hay más de 7000 autoridades de esta naturaleza. Nos proponemos describir e interpretar los enunciados problemáticos del artículo 246 de la Carta Política a la luz de las sentencias y tutelas proferidas por la Corte Constitucional y mostrar en qué puntos están relacionados directa o indirectamente con la administración de justicia en el territorio wayuu. El texto, objeto de estudio reza: Las autoridades de los pueblos indígenas podrán ejercer funciones jurisdiccionales dentro de su ámbito territorial, de conformidad con sus propias normas y procedimientos, siempre que no sean contrarios a la Constitución y leyes de la República. La ley establecerá las formas de coordinación de esta jurisdicción especial con el sistema judicial nacional. Para este estudio, hemos segmentado el artículo en 6 enunciados que constituyen el desarrollo de este artículo; esos enunciados pretenden responder preguntas del tenor de: ¿Cuáles son las autoridades de la etnia wayúu? ¿Qué son las jurisdicciones especiales indígenas y cuál es su carácter? ¿En dónde operan las jurisdicciones Este sistema de autoridad intrafamiliar está siendo minado desde el mismo Estado que ha de los resguardos; una división territorial que reproduce las prácticas coloniales impuestas a otras comunidades indígenas, con la consecuente implementación de autoridades que resultan extrañas a la cultura. Además, a causa de la ley de transferencias, muchos de los alaü’layuu han accedido a las peticiones de sus sobrinos “educados” para que les ceden sus funciones de administradores de territorio con transferencia. 105 IURIS ISSN: 0124-6666 - Enero / Diciembre de 2015 - No. 17 (104 - 112) En la cultura wayúu, se ha administrado justicia y resuelto los problemas entre los distintos o palabrero. De hecho, este personaje, de acuerdo con los moldes de nuestra cultura, no es propiamente una autoridad judicial. Sin embargo, es reconocido como la autoridad moral entre los wayúu; no es un simple mensajero que lleva y trae respuestas, como se podría decir del como agente de control social, conocedor de los principios y procedimientos del sistema normativo wayúu” (Ojeda, 2013: 33); es, “un la paz, la convivencia, el progreso y los lazos de que fortalecen la hermandad”. (Mincultura, 2009). Este carácter del pütchipü’üi como controlador social es una de las más arraigadas tradiciones culturales que se pretende salvaguardar mediante el “Plan de salvaguardia del sistema normativo wayúu aplicado por el palabrero”. Un programa que, por fortuna, ha recibido el beneplácito del Ministerio de Cultura; éste, mediante la resolución 2733 del 2009 por “la cual se aprueba el plan de salvaguardia del Sistema normativo wayuu aplicado por el pütchipü’üi (palabrero), declarado como bien de interés cultural del ámbito Nacional e incluido en la lista representativa de Patrimonio Cultural inmaterial”, pone de presente su carácter de controlador social. (Mincultura, 2009). Por otra parte, este reconocimiento de la función jurisdiccional del palabrero no sólo ha sido a nivel interno; es decir, no sólo es reconocida por las mismas autoridades de los clanes, sino que la sala administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, mediante el Acuerdo PSAA-13-9816 del 2013, le asignó a la Junta Mayor Autónoma de palabreros wayuu un puesto, con derecho a voz pero sin voto, en la “Comisión Nacional de Coordinación del Sistema Judicial Nacional y la Jurisdicción Especial Indígena”, creada mediante el Acuerdo PSAA-12-9614 del 2012. 106 Al examinar las entidades que conforman esta comisión observamos que se le está elevando a una categoría similar a las de otras autoridades con función judicial. 2. El carácter potestativo de la jurisdicción especial indígena. Interpretado en el apartado anterior lo relativo al concepto de autoridades en el sistema de normas wayúu, nos referiremos ahora a los problemas implicados en la forma verbal “podrán” y del término “jurisdicción especial indígena” del enunciado: “Las autoridades de los pueblos indígenas podrán ejercer funciones jurisdiccionales”. Según la sentencia C-139/96 de la Corte Constitucional, la existencia de autoridades judiciales propias y de un sistema de normas y procedimientos propios de una comunidad indígena son los dos elementos básicos de una jurisdicción especial indígena. Además, sistemas jurídicos indígenas son competentes elementos según la misma Corte conforman el núcleo de autonomía de dichos pueblos. En este orden de ideas, este reconocimiento de una jurisdicción especial indígena implica la existencia real y jurídica de la autonomía de los sistemas normativos de los pueblos indígena, fundamentada en las características propias de estos sistemas; características como son: su diversidad cultural y étnica, sus trayectorias de política. En otros términos, las normas jurídicas de los pueblos indígenas son sistemas que “dependen de sus propios sentidos de espiritualidad, resistencia, justicia y autonomía” (Escuela Rodrigo Lara. 2013:16). Sin ellos, carecería de sentido el resto de este artículo de la Constitución. En lo referente al sistema de normas, lo explicitamos en el apartado No. 4; en cuanto a las autoridades, lo discutimos en el apartado anterior. Nicolás Polo F. - Hermeneútica del Artículo 246 de la Constitución de 1991 La forma verbal “podrán” del enunciado en cuestión, ha sido objeto de varias interpretaciones por parte de jueces y magistrados en busca de cuestionar la puesta en práctica de las jurisdicciones especiales indígenas. Gómez (2014) analiza y refuta cuatro de estas interpretaciones de la forma verbal podrán. Tal vez, las dos más comunes son: 1) que los pueblos indígenas podrán tener una jurisdicción especial cuando tengan las condiciones y formación necesarias para impartir justicia; 2) que las comunidades indígenas podrán ejercer las funciones jurisdiccionales cuando el Congreso de la República expida la ley sobre coordinación. La primera objeción desconoce que las comunidades indígenas han tenido sus propios administradores de justicia, mucho antes que existiera nuestro sistema de justicia. La segunda no es más que unas postura incoherente por cuanto la norma constitucional es de obligatorio cumplimiento; es ley de leyes. De esta manera Gómez, con fundamento en la sentencia C-139/96 de la Corte, considera que las autoridades indígenas que pueden ejercer” (p. 50) funciones jurisdiccionales cuando ellas mismas consideren que está dentro de su competencia el ejercicio de impartir justicia e, incluso, de proponer nuevas normas. s sin que exista una ley de coordinación y el poder T-349/96 en el pasaje antes citado: “los sistemas jurídicos indígenas son competentes para 3. El ámbito territorial de la jurisdicción wayúu. Para responder el interrogante ¿cuál es el ámbito territorial de la jurisdicción wayúu? conviene tener presente los siguientes factores: su sentido de pertenencia a la etnia y a la nación colombiana, la interpretación de la expresión “su ámbito territorial”, y las tensiones de convivencia de los wayúu en ciudades como Riohacha y Maicao. El primer factor acerca del territorio wayúu es su ámbito de acción. Sin territorio no existe cultura. Ahora bien, según la legislación colombiana el territorio wayúu sería “no sólo las áreas habitadas y explotadas sino aquéllas que constituyen el ámbito tradicional de sus actividades económicas y culturales” (Ley, 1998/2001). Estas actividades las efectúa el pueblo wayúu no sólo en el territorio colombiano, en una extensión de doce mil kilómetros cuadrados sino en territorio venezolano en un área de tres mil cuatrocientos kms cuadrados; más una presencia masiva en la ciudad venezolana de Maracaibo. En este sentido se podría decir que esta etnia estaría regida por tres sistemas de normas: las propias, las colombianas y las venezolanas. La interpretación de la frase “ámbito territorial” ha sido objeto de diversas interpretaciones por los administradores de justicia. La sentencia de la Corte Constitucional T-496/96 limita el fuero de la jurisdicción especial indígena a dos variables: algunos administrados de justicia, al interpretar la frase “dentro de su ámbito territorial” le asignan el sentido: “dentro del territorio indígena”. Esta anterior de territorio indígena, consagrada en la ley 1998 del 2001. Por ende, habría necesidad de entender el término “ámbito” en un sentido más amplio en concordancia con de la frase “aquellas que constituyen el ámbito tradicional de sus actividades económicas y culturales”. (la negrilla es nuestra). Por otra parte, una restricción del ámbito del fuero indígena a que sea “dentro de su territorio” sería condenar a las etnias del país a tener que vivir en los territorios abruptos a los que han sido empujados por obra de los colonizadores. En el caso del pueblo wayúu, sería obligar a sus miembros a abandonar núcleos de población tan importantes como Riohacha y Maicao; ciudades en las que hay presencia masiva de wayúu y en las que realizan “sus actividades económicas y culturales”; por otra parte, sería coaccionarlos a habitar en las regiones más inhóspitas de la geografía de la Guajira para poder conservar su carácter de wayüu. A este respecto vale el 107 IURIS ISSN: 0124-6666 - Enero / Diciembre de 2015 - No. 17 (104 - 112) interrogante de Herinaldy Goméz: “¿Acaso los indígenas para ser considerados como tales deben estar condenados a vivir solo en sus territorios ancestrales?” ((2014: 52). Asimismo, si analizamos el extenso párrafo de la tutela T-496/96 en que la Corte Constitucional puede encontrarse al establecer los límites de la competencia del fuero, podemos concluir que las jurisdicciones indígenas esté condicionada a que “hayan ocurrido los hechos dentro de a considerar que el ámbito territorial no está necesariamente ligado a los linderos de los resguardos establecidos por normas inferiores, dado que la norma sobre la diversidad étnica y cultural prima sobre cualquier otra variable. 4. Las normas y procedimientos del sistema normativo wayúu. Una de las prácticas generalizadas en los se materializa “en una permanente reinvención ello hace imposible el tratamiento del sistema jurisdiccional como un ente autónomo” (Perafán, 1995:175). Segundo, al no estar escritas las normas, no es posible pegarse de una coma o de de la lengua para buscar una interpretación que permita al actor volcar la ley a su favor. Tercero, en el sistema normativo wayúu no se trata de la “violación de un código” sino de la generación de un daño cuya solución se enmarca en “una lógica situacional muy rica”. (Gómez, 2014:2627). Cuarto, las normas del sistema wayúu son derivadas de prácticas culturales de gran arraigo entre los miembros de la etnia. De hecho, el módulo de sensibilización intercultural, organizado por la Escuela Rodrigo Lara Bonilla, tiene como propósito crear conciencia en jueces, magistrados y autoridades civiles de los valores culturales que dan vida a las normas de entiende por intercultural. sistemas desconocidos es aplicarles los sistemas de categorías de otras con las cuales se está familiarizado. Con gran frecuencia, se pretende interpretar y explicarlos tratando de meterlos en los moldes del sistema conocido. En relación con las normas y procedimientos empleados entre clanes y familias, se ha buscado encontrar una correspondencia entre las normas y procedimientos de nuestros códigos y las normas y procedimientos del sistema normativo de esta etnia. Es una postura que no obedece ni siquiera a los preceptos del nivel descriptivo de con muchas descripciones que se han empleado para presentar el sistema normativo wayuu. Ahora bien, el campo referencial del concepto de norma en el sistema del pueblo wayúu no se corresponde con el nuestro. Varias son las explicaciones posibles. Primero, las normas no tienen un carácter taxativo como en el derecho positivo. Se trata más bien de principios acerca 108 las familias tiene procedimientos singulares de carácter cultural. Primero, no se trata de un juicio del Estado contra un miembro de una familia. Ni siquiera la responsabilidad recae en un solo individuo; es todo el clan quien queda involucrado como responsable del daño causado a otro miembro de otro clan; un pütchipü’üi ha se deba encarcelar – en el caso de un joven que hurtó unas reses- es al tío materno o a la madre por no haber sabido educar a su sobrino o hijo. Segundo, los actores son las autoridades del clan quienes a través de un pütchipü’üi ejerce la función de mediador entre las partes; pero, en muchos casos, es más que un mediador, como La reivindicación de la existencia y ejercicio de este sistema de normas propio de la etnia está en pleno desarrollo a través de la acción del PES. Además, la organización “akuaipa Nicolás Polo F. - Hermeneútica del Artículo 246 de la Constitución de 1991 waimakat”, con el proyecto “Fortalecimiento del Derecho propio del pueblo wayúu”, ha logrado la puesta en funcionamiento de la Casa de Justicia de Uribia y la publicación del libro “Sutchiin wakuaipa” (fortaleciendo el derecho propio del pueblo wayúu”). Este documento es de consulta obligada para quienes deseen saber cómo se aplica el sistema normativo de la etnia. manera potestativa a las autoridades de las comunidades, a la luz del principio de la diversidad cultural, pues si bien 5. Limitación al ejercicio de la jurisdicción indígena. El enunciado “siempre que no sean contrarios a la Constitución y leyes de la República” se ha constituido en una de las principales barreras para que jueces y magistrados de la justicia ordinaria sean reticentes a aceptar la autonomía de las autoridades indígenas para aplicar justicia de acuerdo con sus sistemas normativos. Entre otras cosas, el enunciado no hace más que reproducir una manida fórmula proveniente de la legislación indiana colonial que sentenciaba: (T-349/96). sus propios usos y costumbres; siempre y cuando no resulten claramente injustas”. Analizado el enunciado dentro del contexto que contradice el espíritu de la misma, al reproducir una concepción del monismo jurídico que va en contravía de los principios básicos del bloque constitucional que abogan por un pluralismo jurídico de tipo igualitario, a pesar de que el enunciado dijera literalmente lo contrario. ¿Cómo interpretar este enunciado en concordancia con el espíritu de una constitución pro indigenista; una constitución que desde sus primeros artículos propende por la diversidad étnica y cultural de la nación?. el espíritu de la Constitución ha quedado expresamente consignado en sendas sentencia de la Corte Constitucional. Son las sentencias T- 349/96 y C-139/96 que a la letra dicen: Interesa aquí particularmente, el estudio de las jurisdiccionales conferidas de general “a la constitución y la ley” como parámetros de restricción, resulta claro que no puede tratarse de todas las normas constitucionales y legales; de lo contrario, el reconocimiento a la diversidad cultural En este texto hay que subrayar el enunciado “no puede tratarse de todas las normas constitucionales y legales explícito en el texto de la sentencia C-139/96 que determina: […] no cualquier precepto constitucional o legal prevalece sobre la diversidad étnica y cultural, por cuanto ésta también tiene el carácter de principio constitucional; para que una limitación a dicha diversidad necesario que se funde en un principio constitucional de valor superior al de la diversidad étnica y cultural. De lo pluralismo que inspira al texto de la Carta. (C-139/96). Los colofones de los dos textos citados, que comienzan con la frase: de lo contrario, nos la Constitución es pro indigenista, y pluralista; en suma, respetuoso de la diversidad étnica y cultural de la nación. No obstante, la Corte no ha podido despojarse de esos principios considerados universales de la cultura occidental los cuales enumera en esa misma sentencia T349/96. 6. Coordinación interjurisdiccional. La coordinación inter jurisdiccional es la exigencia establecida para que entre la jurisdicción ordinaria y las jurisdicciones especiales indígenas se establezcan mecanismos o formas de cooperación y solidaridad sin distinción de jerarquía y con respeto a la 109 IURIS ISSN: 0124-6666 - Enero / Diciembre de 2015 - No. 17 (104 - 112) autonomía de cada uno de los sistemas jurídicos en contacto. Estas formas y procedimientos están basadas en el pluralismo jurídico de tipo igualitario que tenga en cuenta la autonomía de los pueblos indígenas de Colombia. La práctica de administración de justicia, fundamentada y alimentada por la concepción del monismo jurídico, ha incrementado la reticencia de los jueces y magistrados a poner en práctica la coordinación con el argumento de que los legisladores no han creado la ley respectiva; adoptan la tesis de que el enunciado “la ley establecerá las formas de coordinación” es taxativo sobre la necesidad de la ley. Este argumento ha sido refutado por la Corte en la T-514/09 y T-903/09. En esta última dictaminó: “mientras el parlamento regula la coordinación interjurisdiccional, la jurisprudencia del Consejo Superior de la Judicatura y de la Corte Constitucional trazan las pautas a seguir en competencia entre las referidas jurisdicciones”. Además, hay que recalcar que el mismo texto de la norma constitucional tiene de por si carácter normativo y que, de acuerdo con la pirámide de Kelsen, la norma de mayor rango prevalece sobre la menor, la ley. Por otra parte, para suplir la ausencia de la ley de coordinación, la sala administrativa del Consejo Superior de la Judicatura expidió el acuerdo principios generales y establece las medidas y mecanismos de coordinación e interlocución entre los organismos de la Rama Judicial y los sistemas normativos de los pueblos indígenas. Hay que agregar que el mismo Consejo Superior de la Judicatura y la Escuela Rodrigo Lara Bonilla han programado seminarios y talleres sobre la cultura y tradiciones indígenas con el propósito de sensibilizar a jueces, magistrados y administradores de justicia de las distintas jurisdicciones indígenas. Según el módulo de la Escuela esa sensibilización tiene como ejes de formación: la coordinación, la interculturalidad y las tradiciones indígenas. 110 En consonancia con esta directriz, el Consejo no sólo pretende que se reconozca “la existencia real y jurídica de la autonomía diferencial de los sistemas jurídicos de los pueblos indígenas”, sino que se los conozca; sólo el conocimiento de los fundamentos culturales de las normas y principios que emplean las autoridades de los permitiría a los administradores de la justicia ordinaria comprender, respetar y valorarlas. Igualmente, los administradores de la justicia especial indígena deben conocer los principios culturales de la legislación nacional. Ahora bien, este conocimiento de las manifestaciones de la cultura debe estar precedido de lo que se podría llamar la coordinación básica cuyo eje central es el respeto de las competencias de la autoridades tradicionales de cada comunidad, establecidas en el fuero indígena (cfr. Sentencia de la Corte Constitucional T -728/02). El módulo de sensibilización se centra en tres aspectos: coordinación básica, saberes interculturales y tradicionales; sobre la coordinación básica con la jurisdicción wayúu; poco es lo logrado por los administradores del plan organizado por la Escuela. Hay que señalar, sin embargo, que, para reconocer la existencia de autoridades jurisdiccionales en la etnia wayuu,. la sala administrativa del Consejo Superior de la Judicatura, mediante el Acuerdo PSAA-13-9616 del 2013, le asignó a la Junta Mayor Autónoma de palabrero wayuu un puesto, con derecho a voz pero sin voto, en la “Comisión Nacional de Coordinación del Sistema Judicial Nacional y la Jurisdicción Especial Indígena”, creada mediante el Acuerdo PSAA-12-9614 del 2012. Por otra parte, se notan vientos de reconocimiento positivo a la labor de los miembros de la Junta Mayor Autónoma de palabreros. En cuanto a la sensibilización sobre los aspectos interculturales, se dice que la Escuela dictó el modulo arriba referenciado. Sin embargo, las averiguaciones, realizadas por los alumnos del Nicolás Polo F. - Hermeneútica del Artículo 246 de la Constitución de 1991 regional de la Judicatura, parecieran evidenciar que los objetivos propuestos por la Escuela no se alcanzaron porque no es posible que ni siquiera se localizara un ejemplar del módulo empleado. A diferencia de esta desidia de la rama regional en entablar un diálogo intercultural la Junta de palabreros se ha empeñado en divulgar el plan de salvaguardia del sistema normativo wayuu aplicado por el palabrero, publicado en un opúsculo del mismo nombre, y complementado en un opúsculo sobre la mujer oütsuu, líder espiritual de la comunidad. Colombia. Corte Constitucional (1996). Sentencia C-139. Magistrado ponente, Carlos Gaviria Díaz. A manera de conclusión __________ (2009) Sentencia de tutela T-514. Magistrado ponente, Luis Ernesto Vargas Silva Este artículo de la Constitución es fundamental para aplicar en la práctica ese gran principio consagrado en el artículo séptimo sobre la diversidad cultural de la Nación colombiana. Una correcta interpretación, basada en la jurisprudencia de la Corte, debería permitir a jueces, magistrados y administradores de justicia despejar sus dudas acerca de la competencia que tienen las autoridades de los pueblos indígenas para administrar justicia de acuerdo con las normas y procedimientos de sus sistemas jurídicos propios, reconocidos por la Carta Magna. Por otra parte, hay que señalar que no basta con este reconocimiento de la jurisdicción indígena; es necesario un conocimiento del sistema jurídico wayuu para que sea posible una coordinación interjurisdiccional; una exigencia de la norma constitucional que, como norma de normas, no necesita para su aplicación de la existencia de una ley, como reza la letra de la misma norma. Akuaipa waimakat (s.f). Sutchiin wakuaipa (fortaleciendo el derecho propio del pueblo wayúu”). Uribia. Colombia (1991). Constitución política. Bogotá: Legis __________ (1996) Sentencia de Tutela T-349. Magistrado ponente, Carlos Gaviria Díaz __________ (1996) Sentencia de tutela T-496. Magistrado ponente, Carlos Gaviria Díaz __________ (1994) Sentencia de tutela T-254/. Magistrado ponente, Eduardo Cifuentes Muñoz ___________ (2009) Sentencia de tutela T-903. Magistrado ponente, Luis Ernesto Vargas Silva. Colombia. Congreso de la República (2001). Ley, 1998/2001) Escuela Rodrigo Lara Bonilla ( s.f.). Módulo de formación intercultural. Bogotá. Gómez, H. (2014) Caracterización de los sistemas jurídicos de los pueblos indígenas de la región andina de Colombia. Bogotá: Consejo Superior de la Judicatura. Colombia. Consejo Superior de la judicatura (2012). Acuerdo PSAA-12-9614. __________ (2013) Acuerdo PSAA-13-9816 Colombia.) Ministerio de Cultura (2009). Resolución No. 2733. Bogotá: Diario Ojeda, G. (2013). “Sistema normativo wayúu aplicado por el palabrero” en Plan especial de Salvaguardia del sistema normativo wayúu aplicado por el palabrero. Maicao: Junta Autonoma de palabreros. Perafán, C. (1995). Sistemas jurídicos, Páez, Kogi, Wayúu y Tule. Bogotá: Colcultura. 111 IURIS ISSN: 0124-6666 - Enero / Diciembre de 2015 - No. 17 (104 - 112) Biodata: Nicolás Polo Figueroa. Doctor of Philosophy, University of Iowa (USA). Magister en lingüística de la Universidad del Valle (Colombia). Filólogo de la Universidad Libre de Bogotá. Investigador del grupo Joaquín Arón Manjarrés de la Universidad Sergio Arboleda- Santa Marta. Director- editor de la revista Verbum de USA-Santa Marta. Autor de varios libros: “Fundamentos teóricos y pedagógicos para la escritura” (2008); “Aproximaciones a la escritura” (2010); “Normas y convenciones para (2014); “Estructuras semántico sintácticas en español”(1980). Sobre esta temática, el artículo: “A gaze to wayuu’s culture, base of his normative system”, en Paripex-Indian Journal of Research. 112