El derecho de Acceso a la Cultura

1.- El derecho de acceso a la cultura
Un punto de vista desde la disposición constitucional
Santana Fraga Jesús Efrén
Cultura es el desarrollo o mejoramiento de las facultades físicas, intelectuales o morales, mediante la
educación. En ese sentido, puede notarse la amplitud del campo en que puede actuarse para bien de la
cultura en México.
El último párrafo del artículo 4°. de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, a la
letra dice:
"Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura y al disfrute de los bienes y servicios que presta el
Estado en la materia, así como el ejercicio de sus derechos culturales. El Estado promoverá los medios para
la difusión y desarrollo de la cultura, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y
expresiones con pleno respeto a la libertad creativa. La Ley establecerá los mecanismos para el acceso y
participación a cualquier manifestación cultural."
Del análisis de lo dispuesto por la Carta Magna en su artículo 4°. párrafo último, antes trascrito, se
obtiene lo siguiente:
Contiene derechos y obligaciones. En efecto, puede verse que los derechos son propios de los
individuos, cuando el párrafo Constitucional establece:
Derechos.
Están dispuestos para las personas, ya que,
•
En primer lugar, no se limita a los mexicanos sino se refiere a toda persona, es decir, mexicanos o
extranjeros;
•
Toda persona tiene derecho al acceso a la cultura. Esto significa que las personas tienen el derecho
a desarrollar o mejorar sus facultades físicas, intelectuales o morales, mediante la educación.
•
Toda persona tiene derecho a disfrutar de los bienes y servicios que presta el Estado en la materia.
•
Toda persona tiene derecho al ejercicio de sus derechos culturales.
Obligaciones.
Están a cargo del Estado, ya que éste, según se establece en el artículo 4° párrafo último, de nuestra
Carta Magna, debe:
•
Promover los medios para la difusión y desarrollo de la cultura.
•
Atender a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y expresiones.
•
Respetar plenamente la libertad creativa.
•
Tener leyes ordinarias para establecer los mecanismos para el acceso y participación a cualquier
manifestación cultural.
Lo que se cumple.
A la fecha, es innegable que ha habido avances en el cumplimiento de las obligaciones por parte
del Estado Mexicano en materia de cultura.
Sin embargo, al someter a la realidad el cumplimiento de su encomienda, podemos darnos cuenta
que el nivel cultural mexicano procurado por el Estado Mexicano, está por debajo del nivel cultural que los
países que invierten primeramente en una educación de muy buena calidad a su población.
Lo deseable.
La educación de buena calidad es pilar indiscutible para cimentar en ella el alcance de un buen
nivel cultural, muy superior al que se tiene entre la población mexicana.
Es a través de la educación como se desarrollan o mejoran las facultades físicas, intelectuales o
morales de la población de un País.
Por ello, lo deseable es que la educación de México se base en programas, cuyo establecimiento
queda a cargo del Estado Mexicano, que tengan objetivos que cumplirse con base al desarrollo o
mejoramiento de las facultades físicas, intelectuales o morales, de manera integral, sólida y sobre todo que
sean sometidos a medición de resultados obtenidos cada determinado periodo de tiempo, ya que ello
llevaría a detectar los posibles errores y corregirlos de inmediato con el fin de seguir por el buen camino.
Los programas educativos oficiales han servido para inyectarles recursos, y los hay actores en la
materia que desde su trinchera buscan darle el destino que le conviene, perdiendo de vista que lo que
finalmente importa es que la población mexicana alcance la buena educación y por ende la cultura
establecidos para ella por la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, como un derecho
para esa población y como una obligación para el Estado Mexicano.
Derecho al acceso a la cultura.
Como antes se ha dicho, éste es un derecho constitucional para todas las personas. Sin embargo, de
la manera como queda enunciado puede prestarse a confusión en cuanto se entienda como el derecho de las
personas para que por sí mismas puedan procurarse los medios para poder acceder a la cultura.
Es decir, si se entiende desde el punto de vista literal, el derecho que la Constitución le garantiza a las
personas es que éstas tengan acceso a la cultura expuesta para quien pueda alcanzarla por los medios que le
sean posibles.
La garantía constitucional establecida en ese sentido, se cumple desde el momento en que quedan
las personas en libertad de lograr el nivel cultural que pretenda, sin importar cual sea el medio por el que lo
logre.
Sin embargo, interpretado ese derecho como parte integral del último párrafo del artículo 4°.
Constitucional, debe entenderse como el derecho que toda persona tiene de acceder a la cultura procurada
por el Estado Mexicano, como obligación suya.
El disfrute de los bienes y servicios que presta el Estado.
Los bienes muebles e inmuebles del Estado, quedan a disposición de las personas en el Estado
Mexicano. Los libros en las bibliotecas, las bibliotecas mismas, las atenciones que pudieran las personas
obtener de ellas.
Éste es un solo ejemplo de los múltiples bienes y servicios que quedan a disposición de las
personas cumplida como obligación del Estado Mexicano en cuanto la garantía estimada.
Sin embargo, los tiempos modernos imponen retos constantes con los cuales el Estado Mexicano
debe actualizar sus programas para cumplir cabalmente su obligación constitucional en materia de cultura.
Nuevamente cabe señalar que la educación de buena calidad ha de imponer en las personas la
necesidad de apropiarse de un alto nivel cultural.
El ejercicio de los derechos culturales.
La educación de buena calidad ha de inculcar en las personas la necesidad de alimentar su espíritu
de conocimiento, para que en base a lo aprendido se exija cada vez más la cultura de mejor nivel que
pueda encontrarse en el mundo, que por el efecto globalizador se hace todavía más asequible.
Sin embargo, en cuanto a éste señalamiento último, debe estarse atento a que los instrumentos y
tecnologías que la hagan posible, ha de quedar a cargo del Estado Mexicano, por sus costos considerables a
los cuales no estaría la mayoría de la población del país en la posibilidad de acceder por sí mismos a través
de ese medio a la cultura disponible en la actualidad.
Consecuentemente, de no ser así, las personas no podrían ejercer su derecho a acceso a la cultura por
los medios de la modernidad, con el riesgo de caer nuevamente en el rezago cultural mundial.
Lo que se propone.
Sería muy pertinente darle continuidad a los programas de educación de buena calidad, para que a partir de
los logros medidos que se obtengan, tengan como consecuencia una nueva generación de mexicanos con
altos requerimientos de cultura de buen nivel que supere el nivel cultural actual, requerimientos que se
traducirían en la necesidad de aportar los medios adecuados por el Estado Mexicano, a fin de que se
obtenga un mejor desarrollo o mejoramiento de las facultades físicas, intelectuales o morales de la
población mexicana.
Mérida, Yucatán a 30 de Junio de 2010.