28 SISTEMA AGUA ENERGÍA EN CANARIAS 28.1. Introducción ...............................................................................711 28.2. Sistemas de desalación y consumo energético .................................713 28.2.1. Tecnologías de desalación .......................................................713 28.2.2. Consumos energéticos ...........................................................723 28.3. Sistemas de depuración de agua ...................................................723 28.4. Desalación de agua de mar en Canarias. Consumo energético. ..........726 28.5. Perspectivas de la desalación y depuración de aguas con energías renovables en Canarias .....................................................729 28.5.1. Introducción .........................................................................729 28.5.2.- Problemática de la desalación de agua con energía eólica, a gran escala, en redes eléctricas débiles ......................................730 28.5.3. La desalación de agua de mar a expensas de la energía eólica.....733 709 710 28. SISTEMA AGUA ENERGÍA EN CANARIAS 28.1. Introducción Tal como se vio en el capítulo 4, una parte importante de la energía que llega desde el Sol a la Tierra se transfiere en el calentamiento y consiguiente evaporación de las aguas en mares, océanos, lagos, ríos y tierras húmedas (un 18% de la energía que llega del Sol se emplea para este fin) (A presión atmosférica, 1kg de agua consume 539kcal para pasar a vapor) Las nubes de vapor de agua son trasladadas por el viento, y cuando encuentran aire más frío, transfieren parte de su energía térmica a éste, enfriándose y condensando de nuevo en agua, que cae en forma de lluvia (nieve o granizo, dependiendo de las condiciones en que se produce el cambio de estado) El agua que cae sobre la tierra se acumula en lagos (o en embalses construidos por el hombre), se infiltra en el subsuelo (rellenando los acuíferos), y corre por ríos y barrancos, desembocando de nuevo en el mar. El conjunto de estos cambios de estado y movimientos del agua, es lo que se conoce como “ciclo hidrológico”. Evaporación oceánica Evaporación continental Precipitación oceánica Precipitación continental Recolección del agua de las precipitaciones Continentes Océanos Figura 28.1. Ciclo hidrológico 711 Nubes 9-10 días Evaporación Lluvia/nieve Lluvia Océanos 3000-36000 años Lagos 1-100 años Ríos 13 días Aguas subteráneas 300 años Figura 28.2. Tiempo de residencia del agua en diferentes zonas En la figura 28.2 se muestra el tiempo medio de residencia del agua en cada zona. La cantidad total de agua en la tierra (hidrosfera) se estima en 1.386 millones de km3, de los cuales los océanos representan el 97,5% (agua salada, con un 2,5% del total en peso de sales). El resto (2,5%), un 68,9% está en forma de hielo permanente (casquetes polares y glaciales), un 30% se encuentra en el subsuelo (aguas subterráneas) y el resto (menos del 0,3% del total) se encuentra en embalses, ríos, lagos, es decir, disponible para usos humanos. Un aspecto importante de resaltar es que una parte creciente de estos recursos disponibles están siendo contaminados por contaminantes de diversos orígenes, convirtiéndose en aguas no potables. Recursos Hídricos Mundiales 0,3% Lagos y ríos 97,5% Agua de mar 29,9% 2,5% Agua dulce Aguas subterráneas 68,9% Casquetes polares y glaciares Figura 28.3. Distribución del agua en la Tierra 712 0,9% Otros El empleo que se da a este recurso depende del nivel de desarrollo del país, y de la cantidad de lluvia que cae (y de otros factores meteorológicos, como horas de sol –insolación-, temperatura, humedad, tipos de suelos, etc.) En la tabla 28.1 se muestran algunos valores medios por persona y año. Tabla 28.1. Usos del agua % consumo de agua País Consumo total m3/p año Agrícola Industrial Doméstica Estados Unidos 41 49 10 1.692 España 71 22 7 1.174 India 93 4 3 520 En la tabla 28.2 se muestra el consumo doméstico, y su distribución porcentual en los países desarrollados. Tabla 28.2. Distribución del consumo doméstico País l/día Higiene personal Inodoro Lavado (ropa y vajilla) Cocina Bebida Otros (jardín, fregado) Estados Unidos 523 37% 32% 16% 2% 13% España 200 India 25 En muchas zonas del planeta, bien por la escasez de lluvia, o por la contaminación de las aguas, no existe agua potable en cantidad suficiente para satisfacer la demanda. En muchos casos se recurre a diversas tecnologías, como puede ser la construcción de embalses para almacenar el agua en periodos de lluvias intensas, perforar el subsuelo para extraer las aguas (fósiles) almacenadas en el mismo mediante pozos o galerías, desalar agua de mar o salobres y depurar aguas residuales. En todos los casos, el concurso de recursos energéticos es esencial. Al igual que la naturaleza “desaliniza y depura” las aguas mediante la energía solar, la tecnología realiza la misma función empleando fuentes de energía no renovables, dispuestas para tal fin. 28.2. Sistemas de desalación y consumo energético 28.2.1. Tecnologías de desalación En términos generales, la desalación (de agua de mar o salobre) es un proceso mediante el cual se separan las sales contenidas en una disolución acuosa de la propia agua. 713 En el caso de agua de mar, los procesos de desalación consiguen pasar de un contenido en sales de 35.000 ppm (partes por millón) a menos de 500 ppm e incluso, en algunos de ellos, a agua pura. Dependiendo del sistema empleado, el consumo energético puede ser más o menos elevado, a partir de 0,76 kWh/m3 que es el mínimo requerido para separar el cloruro sódico del agua pura. Las tecnologías de desalación pueden dividirse en tres grandes grupos: tecnologías basadas en proceso de cambio de fase (evaporacióncondensación), tecnologías basadas en el intercambio de sales a través de membranas y otras tecnologías. Entre las tecnologías por cambio de fase destacan la Destilación Multiefecto (MED), la Destilación Súbita Multietapa (Destilación Flash-MSF), Compresión Mecánica de Vapor (MVC) y la Destilación de Simple Etapa. Dentro de las tecnologías de membranas se encuentran la de Osmosis Inversa (R.O) y la de Electrodiálisis Reversible (E.D.R.). Otras tecnologías son las de Separación por Congelación, Intercambio Iónico, etc. De todos estos sistemas, los más empleados, y que se describen brevemente son: Destilación Súbita Multietapa. Compresión Mecánica de Vapor. Osmosis Inversa. Electrodiálisis Reversible. Destilación Súbita Multietapa (MSF) Conceptualmente, el proceso consiste en suministrar energía térmica al agua de mar (o salobre) hasta conseguir que esta se evapore. Luego se pone en contacto este vapor, obviamente carente de sales, con agua fría, a la que cede parte de su energía térmica, cambiando de nuevo el agua de la fase de vapor a la fase líquida (el agua así obtenida es agua pura) Tubo con aletas Gotas de condensado en la pared exterior del tubo Agua fría para condensación Agua caliente Bandeja de condensación Condensado (agua pura caliente) Entrada de salmuera fría Salida de salmuera caliente Mechero Combustible Figura 28.4. Esquema conceptual de la desalación por destilación 714 Para evitar las incrustaciones de sales que se producen cuando se calienta el agua de mar hasta la ebullición a presión atmosférica (próxima a los 100ºC) se produce un vacío en el interior de las cámaras de ebullición, con lo que se consigue que esta tenga lugar a una temperatura más baja. Así mismo, para optimizar el proceso se recupera la energía térmica contenida en el agua de condensación (que esta caliente), así como en la salida de salmuera caliente. La figura 28.5 muestra el esquema básico de una planta desaladora MSF, compuesta en este caso por 4 etapas. 50ºC 40ºC 30ºC Quemador 60ºC Agua de mar Agua destilada 70ºC 60ºC 50ºC 40ºC 75ºC Salmuera 30ºC Figura 28.5. Esquema conceptual de una planta MSF El agua de mar se introduce como fluido de condensación en la 4ª etapa, donde la temperatura del vaporización es más baja (y el vacío más alto, para que pueda hervir a esa temperatura) El agua fria de mar incrementa un poco su temperatura (su energía térmica) y pasa a la 3ª etapa, donde vuelve a actuar como fluido de condensación en un vapor que se encuentra a mayor temperatura (y un vacío menor que el de la 4ª etapa) Lo mismo ocurre en las etapas 2ª y 1ª, saliendo de esta última a la temperatura más alta. Esa agua de mar, calentada por el vapor en las diferentes etapas, recibe más energía del exterior (por medio de un quemador, en este caso, o por vapor más caliente procedente de otro proceso, como puede ser una turbina de vapor), elevando su temperatura e inyectándose por la parte inferior de la 4ª etapa. Aquí se produce su primera Figura 28.6. Planta MSF de Fuerteventura (primera de la isla) 715 ebullición, de acuerdo con la temperatura y presión existente en esa cámara. El agua que continúa líquida tiene ahora una mayor proporción de sales, conformando la salmuera. La salmuera de la primera fase pasa a la 2ª, donde se evapora más agua (la presión es menor), y se concentra aún más. Así continúa hasta la 1ª fase, desde donde se extrae al exterior con el máximo nivel de concentración (la energía térmica contenida en la salmuera se transfiere en parte a la alimentación de agua de mar, para que no entre tan fría en la 1ª etapa) Parte del vapor producido en cada etapa condensa, cae en la bandeja de condensado, y se extrae de la planta. (El agua pura, que necesita ser tratada con posterioridad para convertirla en agua potable) Destilación por comprensión de vapor Conceptualmente, el proceso consiste en suministrar energía mecánica al vapor de agua (comprimiéndolo), para aumentar su temperatura (transfiriendo la energía mecánica externa a energía térmica del vapor de agua) Este vapor, contenido en tubos, se enfría con agua de mar rociada por el exterior, condensando una parte (pasando a fase líquida) y recogiéndose así el agua producto (agua destilada, y por tanto, pura) Rociadores de agua Entrada de agua de mar precalentada Pistón Salida de condensado Orificio de paso de vapor Salida de salmuera caliente Figura 28.7. Esquema conceptual de la desalación por compresión del vapor En la figura 28.7 se muestra el esquema conceptual de este proceso. Inicialmente, en la cámara cerrada se encuentra vapor de agua, incluso dentro del tubo de condensación (previamente se ha evacuado el aire). Al accionar el pistón hacia la derecha, el vapor se comprime (ligeramente) dentro del tubo e incrementa su temperatura (al igual que ocurre en un fuelle de rueda de bicicleta, por ejemplo). En ese momento se deja caer agua de mar por la parte exterior del tubo, con lo cual enfría el vapor que se encuentra dentro del tubo y parte de él se condensa. Parte del agua del mar rociada se evapora y queda en la cámara cerrada. El resto de esta agua, más concentrada en sales, cae al fondo del depósito, constituyendo el concentrado. Para evitar la evaporación del agua de mar a alta temperatura (100ºC), se crea un ligero vacío (el vapor en la cámara se encuentra a una presión inferior a la atmosférica), haciendo que el agua se evapore a 40-60ºC. 716 Rociador de salmuera Tubos de transferencia Compresor Motor eléctrico Condensado Salmuera Evacuación de salmuera Evacuación de agua producto Agua de mar Cambiador de calor Válvula Bomba de recirculación de salmuera Figura 28.8. Esquema básico de una planta de desalación CV Esta operación se repite con cada embolada del pistón, obteniéndose así un cierto caudal de agua producto. La salmuera se va evacuando, de manera que se mantenga un nivel constante en el fondo de la cámara. Para optimizar el proceso, el agua de mar se calienta utilizando la más alta energía térmica de la salmuera, mediante un intercambiador de calor (no dibujado en el esquema) La figura 28.8 muestra un esquema básico de una planta de Comprensión de Vapor. Consta de un compresor rotativo accionado por energía eléctrica (similar a un ventilador) que impulsa el vapor de agua de mar a través de un haz de tubos, haciendo que se incremente (ligeramente) su temperatura (proporcionalmente el aumento de presión) Figura 28.9. Planta de CV del Consorcio de Abastecimiento de Agua de Fuerteventura Como se ve, el vapor retorna al compresor por la parte interior del haz de tubos. 717 En la parte superior se encuentran los rociadores de salmuera la cual, al caer por el exterior de los tubos, enfría el vapor de su interior, haciendo que se condense en parte, al tiempo que parte de esta propia salmuera se evapora (en estos sistemas industriales, es la salmuera la que se recircula). El agua de mar se va mezclando con la salmuera, a medida que Figura 28.10. Detalle del rotor del compresor el nivel de esta va bajando (obviamente, el descenso de nivel es debido a la evacuación de agua producto) El agua condensada en el interior de los tubos (agua producto) se recoge en unos depósitos laterales, y se evacua al exterior. Osmosis Inversa Conceptualmente, el proceso de Osmosis Inversa consiste en aplicar energía mecánica sobre una disolución, para provocar sobre ella el fenómeno contrario a la osmosis natural. El fenómeno de osmosis natural o directa consiste en el paso de disolvente a través de una membrana semipermeable que separa dos disoluciones, con el mismo soluto y el mismo disolvente, pero con diferentes concentraciones. En la figura 28.11 se encuentran a ambos lados de la membrana dos disoluciones (agua salada), a la derecha poco concentrada en sales, y a la izquierda con una concentración mucho mayor (en ambos lados, con la misma presión hidráulica –misma altura-) (a) (b) �h Agua Cl Na Moléculas de Cl Na Membrana semipermeable Moléculas de H2 O Figura 28.11. El fenómeno de la ósmosis natural 718 P > Posm �h Figura 28.12. El fenómeno de la ósmosis inversa Las moléculas de agua pura atraviesan fácilmente la membrana (debido a su agitación térmica y a fenómenos de difusión) mientras que las de cloruro sódico ClNa, de mayor tamaño, no pueden hacerlo. Como resultado se produce un flujo neto de disolvente de la parte derecha a la izquierda, en el sentido de diluir la solución más concentrada. Ese flujo continúa hasta que la diferenta de nivel ∆h produzca suficiente presión hidrostática, en cuyo momento se iguala el flujo de disolvente en ambos sentidos. Esta presión hidrostática se denomina presión osmótica, y depende directamente de la concentración del soluto en la disolución a ambos lados de la membrana semipermeable. En el caso de agua sin sales y agua de mar, la presión osmótica (Posmo) alcanza los 26,1 bares. El proceso de Osmosis Inversa consiste en provocar el paso de disolvente de la disolución más concentrada a la más diluida, aplicando sobre el primero una presión (exterior), superior a la osmótica (Figura 28.12) Esquemáticamente (figura 28.13), una planta para desalar agua de mar estaría constituida por una bomba, capaz de suministrar una presión superior a la osmótica (en la práctica por encima de los 60 bares, dependiendo del tipo de membrana), un tubo por donde se hace circular el agua de mar a presión de paso del agua salada (que se va concentrando en sales a medida que pasa agua pura al otro lado de la membrana), una válvula para regular la presión, la membrana semipermeable y otro tubo por donde sale el agua sin sales (o con muy poca cantidad), que atravesó la membrana. Las membranas semipermeables suelen fabricarse de acetato de celulosa, poliamidas, etc. Las membranas semipermeables pueden adoptar diversas Válvula de control de la presión P > Posm Salmuera Membrana semipermeable Agua dulce Agua de mar Figura 28.13. Esquema básico de la desalación por ósmosis inversa 719 configuraciones, intentando conseguir la máxima superficie de intercambio en el menor espacio. Las configuraciones más usuales son las membranas de fibra hueca y las membranas arrolladas en espiral (estas últimas son las más extendidas en la actualidad) En la figura 28.14 se observa la composición de una membrana arrollada en espiral. Consta de varias “capas”. Por una de ellas circula el agua de mar (en paralelo al eje del tubo soporte); luego se encuentra la membrana semipermeable propiamente dicha; por último se encuentra otra capa que evacua el agua producto. Figura 28.14. Membrana arrollada en espiral En la figura 28.15 se muestra el esquema básico de plantas de Osmosis Inversa. Filtro de arena Filtro de cartucho Bomba de alta presión Tubos de membranas Agua de mar Pretratamiento químico Salmuera a alta presión Recuperador de energía Salmuera a baja presión Agua producto Figura 28.15. Esquema básico de una planta de Osmosis Inversa Consta del sistema de filtración del agua de mar o salobre (filtrado grueso, mediante filtros de arena, y fino, mediante filtros de cartucho), un sistema de tratamiento químico del agua de mar, la bomba de alta presión (60-70 bares), las membranas de Osmosis Inversa, (colocadas en baterías de tubos, para grandes producciones), la válvula de control de presión, el sistema de 720 Figura 28.16. Planta de Osmosis Inversa de INALSA, en Lanzarote recuperación de energía (la salmuera sale a una presión de 57-68 bares, y esa energía es “recuperada” en las plantas más modernas), y el sistema de lavado de las membranas ( no representado en la figura) Figura 28.17. Planta de Ósmosis Inversa Las Palmas III, en Gran Canaria En las plantas de Osmosis Inversa, el porcentaje de agua de producto, respecto del agua salada introducida en la planta, suele oscilar un 30% y un 40%. 721 Electrodiálisis Conceptualmente, el proceso de electrodiálisis consiste en aplicar un campo eléctrico sobre el agua de mar, el cual ioniza las moléculas de cloruro sódico (ClNa) produciendose los iones cloro (Cl-) y sodio (Na+), y los atrae hacia las respectivas placas positiva y negativa. Interponiendo en este movimiento dos membranas selectivas (una que sólo deje pasar los aniones (Cl-) –membrana aniótica- y otra que sólo deje pasar los cationes (Na+) –membrana catiónica-, se consigue eliminar estas sales, y obtener agua dulce. Cátodo + (a) Situación sin aplicar corriente eléctrica Ánodo - Agua de mar - + (b) Al aplicar una corriente eléctrica - + (c) Resultado final después de aplicar una corriente eléctrica Agua producto (sin sales) Membrana aniónica Membrana catiónica Salmuera (agua con alta concentración de sales) Placa metálica Anión Catión Figura 28.18. Esquema básico de la desalación por electrodiaslisis Normalmente las plantas de electrodiálisis se componen de varios pares de membranas formando las denominadas “pilas de membranas”. Cuando se puede invertir la polaridad de las placas (para evitar las incrustaciones de las membranas selectivas con el paso del tiempo), reciben el nombre de plantas de electrodiálisis reversible. 722 Membranas selectivas Aporte agua salada + + - - Ánodo - - + + + Cátodo + - + Rechazo Agua producto Figura 28.19. Esquema básico del funcionamiento de una planta desaladora EDR Figura 28.20. Planta de EDR de ELMASA, en San Agustín, Gran Canaria Por su alto consumo de energía eléctrica, sólo se emplean con aguas salobres (obteniéndose un agua producto de gran calidad) 28.2.2. Consumos energéticos En la tabla 28.3 se muestran los consumos energéticos para desalación de agua de mar, en kWh/m3 para los diferentes sistemas de desalación descritos. Tabla 28.3. Consumos energéticos de los sistemas de desalación Calidad del agua entrada Mar o salobre Agua salobre Calidad agua producto Consumo kWh/m3 Ósmosis Inversa sin recuperación < 500ppm 4,5-5,5 Osmosis Inversa con recuperación <500ppm 2,5-3,5 Comprensión de vapor <100ppm 6-7 Electrodiálisis <100ppm 2-3 Sistema de desalación 28.3. Sistemas de depuración de agua Existen muchos sistemas para la depuración de aguas residuales, desde los sistemas naturales hasta los más complejos utilizados para la depuración de grandes caudales de agua, procedentes de ciudades o complejos fabriles. En la figura 28.21 se muestra el esquema de una Estación Depuradora de Aguas Residuales (EDAR), con las cinco etapas posibles: pretratamiento, tratamiento primario, tratamiento secundario, tratamiento terciario y tratamiento de lodos (además de la obtención de biogás) 723 Tratamiento primario Pretratamiento Aguas residuales Depósito Decantación secundaria Arenas y grasas Estación de bombeo Desarenado. Desengrasado Producción de biogás Espesado de lodos Lodos utilizables en agricultura Reactor de lecho bacteriano Decantación primaria Desbaste por rejillas Tratamiento secundario Lodos primarios Lodos secundarios Digestión de lodos Agua depurada Biogás Desalación por ósmosis inversa Filtro Tratamiento de lodos Generador eléctrico a partir de la combustión de biogás Rechazo Agua producto Tratamiento terciario Figura 28.21. Esquema básico de una EDAR En el tratamiento se eliminan los sólidos de gran tamaño (papeles, plásticos, etc.) y los sólidos finos (arenas), mediante unas tamices de rejillas y desarenadores y desengrasadores. El tratamiento primario consta de unos tanques donde se depositan en el fondo, por gravedad, los sólidos en suspensión de mayor densidad (un 60% de estos, y un 30% de materia orgánica). Para eliminar los sólidos en suspensión que quedan flotando y semisumergidos (cuya densidad es próxima a la del agua), así como las grasas, se introducen burbujas de aire que fijan estas partículas y las hacen flotar, retirándose de la superficie por medios mecánicos. Las partículas coloidales se desestabilizan mediante coagulantes, agrupándose en “flóculos”, que se retiran con los dos anteriores, según floten o caigan al fondo (los lodos de fondo se retiran, periódicamente, por medios mecánicos) El tratamiento secundario, o tratamiento biológico, se realiza por medio de seres vivos, microorganismos aerobios, y con ellos se eliminan las sustancias orgánicas que aún permanecen en el agua. Para el tratamiento secundario suelen emplearse tres métodos diferentes: los “lodos activados”, los “lechos bacterianos” y la “desinfección”. Con el primero se dejan crecer bacterias en el tanque de agua, agitando y aireando ésta, de manera que los flóculos formados no sedimentan. Luego 724 se envía esta mezcla de bacterias y residuos a un clarificador o decantador, desde donde caen al fondo, formando una masa de fangos, muy ricos en microorganismos y materia orgánica. Por este motivo, una parte de los lodos se devuelven al tanque de aireación. Con la retirada y tratamiento de estos fangos se elimina un 85-90% de la materia orgánica disuelta. En el segundo método, el agua residual procedente del tratamiento primario se hace pasar por un filtro “vertical”, de varios metros de altura, formados por piedras en cuya superficie se encuentran los microorganismos descomponedores formando una película. Los filtros contienen unos drenajes por su parte inferior, para extraer el agua depurada. La desinfección se usa a continuación de cualquiera de los dos tratamientos anteriores, y tiene por objeto eliminar las bacterias patógenas. Consiste en una cloración, ozonización (tratamiento con ozono) o mediante radiación ultravioleta (menos empleada) El tratamiento terciario tiene como objeto la eliminación de metales pesados, sales, fósforo, nitrógeno y otras sustancias inorgánicas. Los métodos más empleados son la micro y ultrafiltración, la osmosis inversa y la electrodiálisis. En el tratamiento de los lodos, las fases más usuales son su concentración (en espesadores), la destrucción de la materia orgánica con la correspondiente producción de biogás (en digestores aerobios o anaerobios), el secado, la incineración (para producción de energía) y/o la evacuación (a vertederos) También puede fabricarse “compost”, para su aplicación como abono, siempre que los fangos no contengan componentes químicos tóxicos. Figura 28.22. Planta EDAR de Las Palmas de Gran Canaria 725 28.4. Desalación de agua de mar en Canarias. Consumo energético. Las Islas Canarias constituyen un paradigma en todo lo que se refiere al binomio agua-energía. Estas islas no se encuentran geográficamente situadas en una zona de lluvias elevadas, por lo que siempre han sufrido problemas de sequía. Sin embargo, las islas de mayor altitud se benefician de la “lluvia horizontal”, que no es más que la condensación en las laderas norte de la gran cantidad de vapor de agua arrastrada por los vientos alisios. Ello originó en estas islas una extensa capa vegetal, que al tiempo que favorece la condensación, sirve de retención de agua de escorrentía, y a la consecuente recarga de los acuíferos. En los últimos dos siglos, el aumento de la agricultura intensiva en agua, así como de la población, ha conducido a la extracción de agua del subsuelo, mediante pozos y galerías. En el caso de la isla de Gran Canaria se construyeron más de 6.000 pozos, algunos de mas de 400 metros de profundidad, con la consecuencia de la práctica desaparición del acuífero y la consecuente desertización producida por este hecho (la extracción de aguas fósiles superó, con mucho, la recarga natural del mismo) Infiltración Galería improductiva Naciente Galería productiva Pozo improductivo Pozo productivo Nivel freático Acuífero Rocas impermeables Figura 28.23. Acuífero y extracción de aguas en una isla En las islas de Fuerteventura y Lanzarote la situación era aún más dramática, por la escasez de lluvias y la fuerte salinización de las aguas de sus acuíferos. Esta situación de carencia de agua potable solo pudo paliarse con la introducción en las islas de las desaladoras de agua de mar. La primera planta desaladora, del tipo MSF, se instaló en la isla de Lanzarote en el año 1964; a esta siguió otra del mismo tipo en Gran Canaria, de 20.000 726 m3/día, en el año 1970 (producía agua y electricidad). En 1972 se instala la primera planta de Comprensión de Vapor en Lanzarote y en 1976 se instala la primera planta osmosis inversa para uso agrícola en Fuerteventura. En la década de 1980-90 se instalan plantas de C.V. y O.I. en las islas de Lanzarote, Fuerteventura y Gran Canaria, destacando la unidad de Las Palmas II, de O.I., con una producción de 36.000m3/día, primera en el mundo que incorpora membranas en espiral. En el año 1999 se instala la primera planta desaladora en Arona, isla de Tenerife, con una producción de 20.000m3/día. La mayor planta de desalación en las Islas Canarias es Las Palmas III, con una capacidad de producción de agua potable de 58.000m3/día y que abastece a una parte de la ciudad de Las Palmas, en la Isla de Gran Canaria. La isla que tiene una mayor dependencia del agua de mar desalada es Lanzarote (el 99% del consumo), seguida de Fuerteventura (más del 60% del consumo total) y Gran Canaria. En todas estas islas, además de Tenerife, el agua desalada es el apoyo fundamental del desarrollo alcanzado y especialmente del gran auge turístico. (En Fuerteventura, por ejemplo, la población actual supera 100.000 habitantes, sin contar los turistas residentes. Antes de la incorporación de las plantas de desalación, la isla, a duras penas, podía soportar 10.000 personas, con aguas insalubres en muchos casos) En la actualidad se desalan en las Islas Canarias más de 154 Hm3/año, y se depuran más de 53 Hm3/año. En las tablas 28.4 y 28.5, y en la figura 28.23 pueden verse estos valores para cada isla. Tabla 28.4. Desaladoras en Canarias Isla Fuerteventura Gran Canaria Capacidad m3/día 32.615 249.553 Producción m3/año 11.190.206,5 85.621.634,3 Principales instalaciones Puerto del Rosario 15.000 m3/día (Consorcio de Abastecimiento de Agua de Fuerteventura CAAF) Las Palmas 100.000 m3/día (Empresa Mixta de Aguas de Las Palmas EMALSA) Sureste 25.000 m3/día Lanzarote 69.680 23.907.208,0 Arrecife 40.000 m3/día (Insular de Aguas de Lanzarote INALSA) Santa Cruz de Tenerife 21.000 m3/día (Empresa Municipal de Aguas de Santa Cruz EMMASA) Adeje-Arona 20.000 m3/día Tenerife 96.094 32.969.851,4 El Hierro 600 205.860,0 50 17.155,0 La Graciosa 727 Fuerteventura Gran Canaria Tenerife Gomera El Hierro 11,4 8,5 57,3 70,2 1,7 0,5 Producción total de agua residual (hm3/año) 9,1 6,8 45,8 56,2 1,4 0,4 3,7 A.R. urbana disponible para depurar (hm3/año) 6,7 5,0 34,8 28,3 0,5 0,2 2,1 A.R. urbana depurada (hm3/año) 6,1 3,9 27,0 14,2 0,4 0,1 1,8 A.R. urbana reutilizada (hm3/año) 3,8 1,4 7,2 8,0 0,0 0,0 0,1 Número de plantas depuradoras operativas 5,0 6,0 40,0 11,0 5,0 2,0 6 Concepto Consumo urbano, turístico e industrial (hm3/año) Figura 28.24. Plantas desaladoras y depuradoras en las Islas Canarias 728 La Palma Lanzarote Tabla 28.5. Depuración en Canarias (Los valores anteriores no incluyen las plantas de desalación privadas. En la isla de Lanzarote, estas plantas suponen el 28% de la producción) Como es fácil de suponer, el consumo energético para producir toda esta agua desalada es elevadísimo, superándose en el caso de Lanzarote el 20% de la demanda de energía eléctrica para este fin. En el caso de la isla de Gran Canaria, al consumo de electricidad de las plantas desaladoras hay que sumar el consumo de bombeo de agua en pozos profundos, también muy elevados. En todos los casos, la energía eléctrica se obtiene a partir de fuentes de energía no renovables (petróleo en este caso), en centrales térmicas con un bajísimo nivel de eficiencia. Por eso puede afirmarse que el futuro del agua en Canarias, y por tanto, del mantenimiento del número de habitantes actuales y de la calidad de vida alcanzada dependen, casi totalmente, del suministro (y precios) del petróleo. De ahí el gran interés, auténticamente estratégico, de poder desalar estas ingentes cantidades de agua de mar con recursos energéticos propios (energías renovables, eólica y solar, principalmente) En la tabla 28.6 puede verse el consumo de energía eléctrica para desalación de aguas en las Islas Canarias. Tabla 28.6. Consumo de energía eléctrica en desalación Isla Fuerteventura Capacidad m3/día Producción m3/año Consumo eléctrico (MWh y %) 32.615 11.190.206,5 55.950 (17,0 %) 249.553 85.621.634,3 428.105 (15,0 %) Lanzarote 69.680 23.907.208,0 119.535 (19,8 %) Tenerife 96.094 32.969.851,4 164.845 ( 6,3 %) El Hierro 600 205.860,0 1.025 ( 4,5 %) 50 17.155,0 Gran Canaria La Graciosa 28.5. Perspectivas de la desalación y depuración de aguas con energías renovables en Canarias 28.5.1. Introducción En el punto anterior se ha visto el gran consumo de electricidad) generado con petróleo) que se produce en la desalación de agua de mar en la mayoría de las islas canarias. Las perspectivas son que este consumo (próximo al 20% del total de energía eléctrica en la actualidad) se incrementará, considerablemente, en los próximos años. 729 Ello supone una dependencia creciente del agua potable que se consume en las islas de la disponibilidad y precio del petróleo, con todo lo que esto significa. Al mismo tiempo, las islas cuentan con elevados recursos en energías renovables, especialmente eólica (la mas desarrollada y competitiva) y solar. La cuestión es ¿podrán las energías renovables, por si solas, abastecer las demandas de agua potable de las islas?. Y si no en su totalidad, ¿en que proporción, y a que costes? Todos estos interrogantes fueron estudiados en el marco del proyecto CANARIAS EÓLICA 2000, desarrollado en varios departamentos de la UNIVERSIDAD DE LAS PALMAS DE GRAN CANARIA. En particular, en el DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA MECÁNICA se llevó a cabo un proyecto de investigación, entre los años 1988 y 1991, titulado OPTIMIZACIÓN TÉCNICO – ECONÓMICA DE SISTEMAS DE DESALACIÓN ACCIONADOS POR ENERGÍA EÓLICA que permitió responder, con bastante exactitud, a todos los interrogantes anteriores. 28.5.2.- Problemática de la desalación de agua con energía eólica, a gran escala, en redes eléctricas débiles En el Capítulo 6 se vio que en todo sistema eléctrico la igualdad entre la potencia de generación y la potencia demandada tiene que ser total (si se producen desequilibrios, la frecuencia y la tensión en la red se ven modificadas – el sistema se desestabiliza- con todos los problemas que ello acarrea, como roturas de aparatos eléctricos, etc.) Esta igualdad, dependiendo del tamaño del sistema eléctrico, ha de ser prácticamente instantánea. Como la evolución de la demanda es incontrolable (depende de los usuarios del sistema eléctrico), el sistema de generación W Generación térmica 500 Demanda h 0 1 2 Figura 28.25. Curvas de generación – demanda en un sistema eléctrico equilibrado 730 ha de ir ajustando su potencia n cada momento. (Si la generación estuviera soportada por varios grupos diesel, en las horas de menor consumo – horas valle- varios de ellos podrían estar parados. Los que estén funcionando deberán ir “ajustando” su potencia a la demanda de cada instante, inyectando mas o menos combustible en sus motores. Obviamente, en las horas de máxima demanda –horas “punta”- todos los grupos estarían funcionando, unos a plena carga, y otros “regulando”). Si en un sistema de este tipo se introduce un parque eólico, con una potencia nominal relativamente alta (por ejemplo, el 80% de la potencia térmica), se introduce una doble aleatoriedad: la de la demanda y la de generación eólica (que depende de la fuerza del viento en cada momento, y que puede oscilar entre amplios valores en cortos periodos de tiempo, así como a lo largo de las 24 horas del día, y de un día a otro. En la figura 28.26 se ha superpuesto la potencia de un hipotético parque eólico con la curva de producción térmica y de demanda. W Generación eólica Generación térmica Demanda total h 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Figura 28.26. Generación eólica en un sistema eléctrico Se observa que entre las 0 y las 9 horas la producción del parque eólico supera a la demanda, con lo cual este sería suficiente para abastecerla, e incluso habría de pararse cierto número de aerogeneradores del parque. Entre las 9 y las 13 horas la demanda supera a la potencia eólica, con lo cual habrían de arrancarse grupos diesel (excepto que de alguna manera pudiera “disminuirse la demanda”). Entre las 13 y las 17 horas la oferta eólica vuelve a superar a la demanda, con los mismos efectos que en el periodo 0 – 9 horas. Entre las 17 y las 21 horas de nuevo habría que arrancar grupos diesel (en número diferente al periodo 9 – 13 horas). Finalmente, entre las 21 y las 24 horas de nuevo la oferta eólica es superior a la demanda, y podrá volverse a desconectar la potencia térmica. (Es fácil de comprender que si en lugar de grupos diesel, de fácil arranque y parada, la central térmica esta compuesta por grupos de vapor, estas maniobras son prácticamente imposibles). 731 Así como la desconexión de los grupos diesel implica un ahorro de combustible, la desconexión de aerogeneradores implica el “desaprovechamiento” de esta energía, cosa que no ocurriría si pudiera almacenarse este energía excedentaria. Para almacenar grandes cantidades de energía caben varias opciones: bombear agua entre dos pantanos, cuando la producción eólica supere a la demanda y generar luego energía eléctrica cuando la potencia eólica sea inferior a la demanda; producir hidrógeno con la energía eólica excedentaria y almacenarlo para luego “quemarlo” en motores o pilas de combustible cuando la energía eólica sea deficitaria; convertir la energía eólica excedentaria en un “producto” de alta demanda, que necesite energía eléctrica para su fabricación, y que pueda se almacenado. Este último es el caso, precisamente, del agua potable obtenida por desalación del agua de mar. En la figura 28.27 se observa que se podría desalar agua como modo de almacenar el exceso de energía eólica en los intervalos 0 a 9 horas, 13 a 17 horas y 22 a 24 horas. Pero hay que tener en cuenta que las plantas desaladoras tendrán que tener una capacidad variable para acomodar su potencia a los excesos de energía disponibles en cada Generación eólica instante (lo que se conoce en el argot técGeneración nico como “demanda térmica controlada”). El resto de las horas del día las plantas desaladoras habrán de estar paradas, o funcionando a expensas de la energía térmica. W Demanda sin desalación h 0 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 Otra opción posible para aprovechar la energía eólica en la desalación de aguas sería el accionamiento de las plantas desaladoras a expensas, exclusivamente, de la energía del viento, aún estando conectadas al sistema eléctrico. Además del ahorro de combustibles fósiles producido (petróleo en el caso de Canarias), y de la contaminación consecuente, esta opción implica una mayor estabilidad en las redes eléctricas débiles, dado que o bién la conexión de parques eólicos a la red es menor, o bien es inexistente (en el caso de parques eólicos aislados de la red y destinados solamente a la producción de agua potable) Figura 28.27. Excedentes de energía eólica destinados a desalación de agua de mar Esto supone, en el caso de algunas islas, la disminución de la curva de demanda de energía eléctrica en un 20% en algunos casos (línea de trazos en la figura). Este es el supuesto que se estudió en profundidad en el marco del proyecto de investigación CANARIAS EÓLICA 2000. 732 28.5.3. La desalación de agua de mar a expensas de la energía eólica En los estudios técnicos–económicos efectuados en el marco del proyecto CANARIAS EÓLICA 2000 se diseñó y analizó el comportamiento de tres sistemas de desalación de agua de mar con accionamiento eléctrico, para acoplarlos a parques eólicos en forma aislada: Tales fueron la Ósmosis Inversa, la Electrodialisis Reversible y la Compresión de Vapor. Los estudios condujeron a desechar los sistemas de Compresión de Vapor y Electrodialisis, mostrándose el de Ósmosis Inversa como el mas factible. En el caso de parques eólicos aislados de la red y acoplados a plantas desaladoras de ósmosis inversa se consideraron varias alternativas de funcionamiento de estas últimas: planta “modular”, compuesta de varios módulos de igual capacidad (cada uno de ellos constituía una auténtica planta desaladora), y que se van acoplando o desacoplando (arrancando y parando) de acuerdo con la potencia eólica disponible en cada momento, y funcionando todas ellas en régimen nominal (a caudal y presión constantes); planta también modular, pero en la que las condiciones de trabajo de los diferentes módulos podían hacerse varia entre ciertos límites (lo que equivale a variar, dentro de un cierto rango, la potencia absorbida por los módulos, y con ellos, de la planta completa) El estudio comprendió una fase teórica, con la construcción del correspondiente modelo matemático de todo el sistema parque eólico –planta desaladora modulada y aislada de la red eléctrica, y otra fase experimental, donde se ensayaron los diferentes sistemas de desalación acoplados a un parque eólico en aislado. En la fase teórica se simularon parque eólicos de diferentes potencias (distintos tipos de aerogeneradores, y en diferente número) y plantas desaladoras con diferente número de módulos y diferentes potencias de estos. Se plantearon dos objetivos: la máxima capacidad de desalación que podría obtenerse a partir de un área eólica dada (lo que suponía que la selección de un tipo de aerogenerador condicionaba el número de Parque eólico estos que podían ser (Con un número instalados en el área), fijo de máquinas) y la máxima capacidad de desalación que podría obtenerse con el coste mínimo del agua desalada. (Cada módulo es una planta desaladora de O.I. completa, con todos sus sistemas) Para un área eólica determinada, con un perfil del viento también determinado, resulta sencillo determinar el tipo de aerogenerador del mercado que pro- M1 M2 M3 M4 M5 Área eólica Planta desaladora modulada Figura 28.28. Sistema parque eólico–planta de desalación de O.I. modulada 733 duce la máxima energía eléctrica anual (potencia unitaria y número de máquinas). A partir de este dato es fácil suponer que cuantos más pequeños sean los módulos de desalación que se acoplan, más energía puede aprovecharse, y más agua puede producirse. Por ejemplo, si el parque eólico tiene 10 MW, y se colocan 100 módulos de desalación de 100 KW cada uno, con una producción unitaria de 125.000 m al año y si el viento soplara con la máxima intensidad todo el año, podrían obtenerse 12,5 Hm/año. Cuando el viento desciende un poco su intensidad, se pararía un módulo y se perdería la capacidad de desalación correspondiente. Si siguiera descendiendo, se irían desconectando 2,3,4…n módulos sucesivamente. Sin embargo, si los módulos hubieran tenido cada uno de ellos una potencia de 500KW, es obvio que una pequeña disminución de la intensidad del viento, que obligase a la parada del primer módulo, hubiera supuesto una pérdida de producción de agua desalada mucho mayor. Sin embargo, si ahora se contempla el sistema parque – planta desde el punto de vista económico, es evidente que cuanto mas pequeño sean los módulos (y por tanto, cuanto mas numerosos), mas costoso resultara el conjunto, y mas costosa el agua producida. En el ejemplo anterior, de 100 módulos de 100 KW cada uno, acoplados a un parque eólico de 10MW, es fácil suponer que los “últimos módulos” (por ejemplo, del número 80 en adelante) entrarán en funcionamiento muy pocos días al año (solo cuando el viento sople a una intensidad muy elevada). En consecuencia, si se prescinde de esos módulos (solo se instalan 80, por ejemplo), la producción de agua será menor al cabo del año, pero el precio de la planta también será menor. La consecuencia puede ser que el coste del m3 de agua producida también será menor. €/m3 0 10 20 30 40 50 60 70 Nº módulos Figura 28.29. Curva coste agua desalada–número de módulos (para un aerogenerador y tamaño del módulo determinados) El modelo matemático indicó que para cada “área eólica” (en la que se podía “jugar” con diferentes tipos de aerogeneradores y diferentes números de estos – cuanto mas pequeños, mas cabrían en el área-) había una combinación óptima entre el tipo de aerogenerador y el tamaño y número de los módulos de desalación que producía la mayor cantidad de agua posible a un coste mínimo de la misma. 734 Dado los costes muy diferentes de los aerogeneradores y de las plantas de Ómosis Inversa, la simulación también indicó que era preferible “desaprovechar” energía del parque eólico y “maximizar” el aprovechamiento de la planta de desalación mdulada. (Un factor de capacidad de la planta de desalación del 70% frente a un factor de capacidad del parque eólico del 20% serian valores mas convenientes) También se constató la alta sensibilidad del coste del m3 de agua desalada a la velocidad media anual del viento en el área del parque eólico. En cualquier caso, para vientos medios superiores a los 7 m/s de media anual, los costes del agua eran similares a los obtenidos a partir de las energías fósiles (a los costes de estas correspondientes al año 1990) En el año 1991, y con las tecnologías de aerogeneradores y plantas desaladoras de la época, se realizó un estudio del potencial desalador del viento en las íslas de Gran Canaria, Fuerteventura y Lanzarote, con los resultados mostrados en a tabla 28.7. Tabla 28.7. Potencial desalador del viento Isla Potencia parque MW Nº módulos OI 1000 m3/día c/u Caudal anual obtenible Hm3 % sobre el consumo de la isla en 1990 Gran Canaria 286 852 99 57 Fuerteventura 162 480 12 120 Lanzarote 300 902 7 32 (Con la tecnología actual, y con una mejor optimización de las áreas eólicas en estas tres islas, las cifras podrían multiplicarse por un factor de 1,5 – 2). En el caso de la isla de Gran Canaria, el caudal de agua obtenible a partir de le energía eólica, 99 Hm3 al año, equivale a la capacidad de todos los embalses existentes en la isla, lo que los expertos denominarían un “buen año pluviométrico”. La fase experimental se llevo a cabo en el Centro de Investigación en Energía y Agua (CIEA), del Instituto Tecnológico de Canarias (ITC), mediante el proyecto SDAWES (SEA WATER DESALINATION PLANT CONNECTED TO AN AUTONOMOUS WIND ENERGY SYSTEM) (Figura 28.30) Este proyecto, con un presupuesto superior a los 2 millones de euros, fué financiado por la Unión Europea y participarón en el mismo, además del CIEA-ITC, lider del proyecto, la empresa alemana ENERCON, la Figura 28.30. Parque eólico del proyecto SDAWES 735 Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (departamentos de Ingeniería Mecácnica, de Electrónica y de Procesos), el Ministerio de Industria (CIEMAT), el National Energy Laboratory (NEL) y CREST, estas dos últimas instituciones del Reino Unido. El sistema estaba compuesto por dos aerogeneradores de 220KW cada uno, capaces de funcionar sin conectarlos a la red eléctrica, ocho plantas desaladoras de Osmosis Inversa (OI) de 25 m3/día de capacidad cada una, una planta de Compresión de Vapor (CV) de 90 m3/días y otra de Electródialis Reversible (EDR) de 200 m3/día. (Figuras 28.31 y 28.32) Figura 28.31. Plantas desaladoras del proyecto SDAWES Figura 28.32. Detalles de las diversas instalaciones del proyecto SDAWES El sistema tenía un funcionamiento totalmente automatizado, y estaba dotado de un completo sistema de adquisición de datos (que registraba los datos de viento, producción de energía eléctrica del parque, consumos energéticos de las plantas, producción de agua desalada, calidad de estas, etc.) En esta fase experimental se confirmarón los resultados teóricos, determinadose la plena viabilidad técnica y económica para desalar agua de mar, con el solo consurso de la energía eólica, utilizando preferentemente, el sistema de Osmosis Inversa. 736 737