13 NACIONALES CASO CLEVELAND Una década bajo sombras LA CIFRA Ocho millones de dólares es la fianza para Ariel Castro. HORRENDA HISTORIA. Tres mujeres secuestradas y en cautiverio por casi diez años, fueron víctima de repetidas golpizas; fueron atadas e impedidas y abusadas sexualmente. Su captor enfrenta severos cargos. FOTO 2: CULPABLE. FOTO 3: Amanda Berry, de 27 años, Gina DeJesus, de 23, y Michelle Knight, de 32. CLEVELAND. Un hecho que parece salir de una película de horror y misterio ha conmocionado Estados Unidos.Tres mujeres y una menor fueron secuestradas hace casi una década por el estadounidense de origen puertorriqueño Ariel Castro acusado formalmente de tres cargos de violación y tres de secuestro. El lunes, con la ayuda de vecinos, la policía liberó a Amanda Berry, desaparecida en 2003; su hija de seis años, concebida durante el cautiverio; a Gina De Jesús, desaparecida en 2004, y Michelle Knight, cuyo rastro se perdió en 2002. EL JUICIO Castro compareció ante una corte de Ohio (norte) pero no se pronunció durante la audiencia. Permaneció de pie y esposado, mirando al suelo, mientras el tribunal dictó una fianza de dos millones de dólares por cada uno de los cuatro casos, por lo que permanecerá detenido. Castro se presentó ante la corte con la defensora de oficio Kathleen DeMetz, quien dijo que su defendido había sido "acusado de secuestro y violación en un caso, de secuestro y violación en el segundo, de secuestro y violación en el tercero y de secuestro en el cuarto". El fiscal del condado Brian Murphy señaló: "me gustaría decir que los cargos contra el Sr. Castro se basan en decisiones premeditadas para secuestrar a tres jóvenes mujeres de las calles de South Side de Cleveland. Dos de las víctimas sufrieron una horrenda experiencia durante más de una década, una tercera por casi una década, y la dura experiencia resultó en una niña pequeña que se cree nació durante el cautiverio de una de las mujeres", agregó el fiscal. Ellas son Amanda Berry, de 27 años, Gina DeJesus, de 23, y Michelle Knight, de 32. Asimismo, se acusa a Castro del secuestro de Jocelyn, la hija de seis años que tuvo con Berry durante su cautiverio. "Y además, junto con el cautiverio, hubo repetidas golpizas. Fueron atadas e impedidas y abusadas sexualmente, básicamente sin ser nunca libres de dejar esta residencia", señaló el fiscal. Tras la audiencia, DeMetz dijo a los periodistas que Castro tenía riesgo de suicidio y que debía ser colocado bajo vigilancia especial cuando sea llevado a la cárcel del condado más tarde en la jornada. Los dos hermanos de Ariel Castro, Pedro, de 54 años, y Onil, de 50, que también habían sido arrestados, no enfrentan cargos y se ha descartado que tuvieran implicancia en el hecho. LA CASA Los investigadores hallaron cadenas y cuerdas en la casa donde permanecieron cautivas las tres mujeres. El jefe de la policía de Cleveland, Michael McGrath, confirmó que "estuvieron atadas". Tomba señaló que las tres mujeres nunca abandonaron la propiedad del acusado hasta que fueron rescatadas la noche del lunes, y se estima que tan solo se les permitió dejar la casa en dos ocasiones, para ir hasta el garaje de la vivienda aunque disfrazadas. "No estaban en el mismo cuarto, pero se conocían y sabían que las otras estaban ahí", precisó Tomba, sin confirmar versiones de que las cautivas tuvieron múltiples embarazos. EL REENCUENTRO El miércoles fue una jornada llena de emociones para Amanda Berry y Gina DeJesus, quienes se reencontraron con sus familias, mientras que Michelle Knight permanecía hospitalizada en Cleveland. "Este es un día feliz y también triste para Amanda porque su madre ya no está", dijo su primo. La madre de Amanda, Louwana Miller, murió en marzo de 2006, "de dolor" por la pérdida de su hija, según sus allegados. Con el rostro oculto bajo una capucha, Gina DeJesus encontró la casa familiar decorada con una cantidad de globos. "Me pellizco para creerlo", dijo su madre, Nancy Ruiz. "Este es mi mejor regalo del día de la madre", que se celebra el domingo en Estados Unidos. EL LADO OSCURO DEL SECUESTRADOR ( favor) ponerlo en otro lado por Divorciado hace años y nunca visto en compañía de una mujer, Ariel Castro comenzó a aparecer en el barrio principalmente latino y de clase trabajadora con una niña de seis años. Era la hija de su novia, según dijo a los vecinos. Se creía que Castro, de 52 años, vivía solo, aunque en su descanso para comer llevaba a casa suficientes bolsas de comida rápida y bebidas para varias personas. Estaba alejado de su familia, supuestamente tras la muerte de su padre. Fue arrestado en 1993 por violencia doméstica. Durante años, sus vecinos en la avenida Seymour lo veían como una persona amistosa pero reservada, un músico competente que tocaba el bajo en bandas latinas como Borin Plena y el Grupo Fuego. Tenía una casa de dos plantas en una zona desvencijada de Cleveland. Construida en 1890 Era un conductor de autobuses escolares que recibió calificaciones "excelentes" en sus revisiones, pero fue repetidamente sancionado, y en un incidente fue acusado de llamar "zorra" a un estudiante y dejarlo solo en un autobús. Estos incidentes finalmente llevaron a su despido en noviembre pasado.