acción cambiaria directa. es la que tiene a su alcance el avalista en

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185850. II.4o.C.8 C. Tribunales Colegiados de Circuito. Novena Época. Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XVI, Octubre de 2002, Pág. 1312.
ACCIÓN CAMBIARIA DIRECTA. ES LA QUE TIENE A SU ALCANCE EL AVALISTA
EN CONTRA DEL AVALADO, UNA VEZ QUE AQUÉL PAGÓ AL BENEFICIARIO
DEL PAGARÉ, Y NO LA DE REGRESO. La acción cambiaria tiene como base, para su
ejercicio, el título de crédito, esto es, el documento funda el procedimiento de la acción
propia del derecho cambiario, dado el derecho que tiene incorporado; por ello, esta acción se
ejercitará cuando ha habido falta al cumplimiento de las obligaciones contenidas y, por tanto,
contraídas en el propio documento. El artículo 115 de la Ley General de Títulos y
Operaciones de Crédito establece: "El avalista que paga la letra, tiene acción cambiaria contra
el avalado y contra los que están obligados para con éste en virtud de la letra."; por su parte,
el diverso 151 del mencionado cuerpo legal refiere: "La acción cambiaria es directa o de
regreso; directa, cuando se deduce contra el aceptante o sus avalistas; de regreso, cuando se
ejercita contra cualquier otro obligado.". En este contexto, se advierte que si la acción
cambiaria se considera directa cuando "... se deduce contra el aceptante o sus avalistas ...", y
de acuerdo con lo dispuesto en el último párrafo del artículo 174 "... El suscriptor del pagaré
se considerará como aceptante para todos los efectos de las disposiciones enumeradas antes
...", entonces debe decirse que la acción a ejercitar por parte del avalista que ha pagado el
título y acude a juicio en contra del avalado, será la cambiaria directa y no la de regreso. En
efecto, si el avalista pagó al beneficiario del pagaré y, por ello, reclama del suscriptor la
cantidad desembolsada, en términos de los citados numerales 115, 151 y 174 de la Ley
General de Títulos y Operaciones de Crédito, la acción cambiaria a ejercitar será la directa,
pues si ésta se endereza en contra de cualesquiera de los directos obligados, siendo éstos
únicamente el suscriptor del pagaré y los avales, en caso de existir, y la de regreso sólo
procede cuando el título hubiere circulado y a quien se demande sea uno de los responsables,
entendiéndose por éstos, aquellos endosantes que se valieron del título para obtener un
beneficio patrimonial y que, por tanto, están obligados a responder para con su endosatario
(excluyendo al endosatario en procuración), es dable concluir que el avalista que pagó al
beneficiario del título y que reclama del suscriptor la cantidad desembolsada, tiene a su
alcance la acción cambiaria directa y no la de regreso, pues es inconcuso que la parte en
contra de quien endereza el reclamo es el directamente obligado, esto es, el suscriptor del
pagaré.
CUARTO TRIBUNAL COLEGIADO EN MATERIA CIVIL DEL SEGUNDO CIRCUITO.
Amparo directo 655/2001. Alfonso Cruz Garcés. 2 de julio de 2002. Unanimidad de votos.
Ponente: Jorge Mario Pardo Rebolledo. Secretario: Fernando Sánchez Calderón.
Véase: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Novena Época, Tomo XVI, julio de
2002, página 1351, tesis I.11o.C.18 C, de rubro: "PAGARÉ. ACCIÓN CAMBIARIA
DIRECTA Y NO DE REGRESO. LA TIENE EL AVALISTA QUE PAGÓ EN CONTRA
DEL OBLIGADO PRINCIPAL O SUS AVALISTAS.".
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