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Diario de Cádiz
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Actualización | lunes, 17 de octubre de 2005, 12:56
TU OPINIÓN
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Iberoamericana
como la de
Salamanca?
Sí
bicentenario de la batalla de trafalgar
Baltasar Hidalgo de Cisneros, un marino
ilustre en el Santísima Trinidad
No
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En las proximidades de la conmemoración de la
batalla de Trafalgar, y estando en Cádiz, creo
que puede resultar interesante recordar la
figura de uno de los marinos españoles más
destacados que participaron en ella, que
ostentaba además el rango de general y jefe
de escuadra y que enarboló su insignia en el
Santísima Trinidad, que era el barco mayor de
todos los que participaron en la batalla y que protagonizó uno de los
episodios más intensos.
Cisneros, como se le nombra con frecuencia, tuvo a lo largo de su vida una
importante relación con Cádiz, pero su figura es, quizás, una de las menos
conocidas de entre aquellos marinos ilustres. He de decir que para mí
resulta especialmente emotivo escribir este artículo que me hace
considerarme un poco como testigo particular de la historia, ya que soy
descendiente de D. Baltasar, pero he de confesar que yo mismo no conocía
todo lo bien que se podría esperar su figura hasta que me decidí a escribir
este artículo y tuve que documentarme para hacerlo. Como fuentes
bibliográficas he utilizado en primer lugar documentos de mi propia familia,
así como una tesis doctoral defendida en la Universidad de Murcia por
Francisca Colomer, titulada Baltasar Hidalgo de Cisneros, último virrey del
virreinato de Río de la Plata. Una biografía histórica, y la información
contenida en varias páginas Web.
La intención del artículo no es, en absoluto, narrar la batalla de Trafalgar
sino dar a conocer más detalles sobre esta figura histórica. El esquema que
voy a seguir será el siguiente: en primer lugar haré una semblanza de su
genealogía, después describiré de forma panorámica los hechos más
significativos de su vida, y finalmente me centraré en su relación con Cádiz.
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Diario de Cádiz
El apellido Hidalgo de Cisneros surge de la unión de otros dos de rancio
abolengo. El apellido Hidalgo tiene un origen muy antiguo, con casas de
nobleza en varias regiones de España, siendo especialmente importantes las
existentes en tierra de Limia (Galicia), en la villa de La Bañeza (León) y otra
establecida en Granada durante la reconquista. El apellido Cisneros tiene su
origen en la pequeña villa palentina del mismo nombre. A principios del siglo
XII D. Pelayo Peláez, bisnieto del rey Fruela II de León, es el primero que
aparece como Señor de Cisneros; sus descendientes, herederos del señorío,
conservaron el apellido. Hubo miembros muy destacados en la familia pero
con seguridad el más relevante de todos, por su importante papel histórico,
fue fray Francisco Jiménez de Cisneros (1436-1517), Cardenal Arzobispo de
Toledo y regente del imperio español. Parece probado que los Hidalgo de
Cisneros están emparentados con el Cardenal Cisneros. La introductora del
apellido Cisneros en la familia fue la tatarabuela de nuestro personaje, Dª
María de Cisneros, nacida en Valderas en 1616. Según los documentos
familiares, el primero en utilizar el apellido compuesto fue el bisabuelo de
nuestro personaje, D. Diego Hidalgo de Cisneros y López, aunque otras
fuentes retrasan el comienzo en la utilización del apellido compuesto hasta
su padre.
La genealogía más próxima a Baltasar Hidalgo de Cisneros se encuentra
plagada de militares, especialmente marinos. Por la línea paterna, su padre,
excmo. Sr. D. Francisco Hidalgo de Cisneros y Ceijas, Teniente General de la
Armada y Caballero de la Orden de Carlos III, fue un reputado marino con el
que Baltasar participó en varias acciones militares; su abuelo, Excmo. Sr. D.
Antonio Hidalgo de Cisneros y Cantarín, fue General de los Reales Ejércitos;
su bisabuelo, Excmo. Sr. D. Diego Hidalgo de Cisneros y López, fue Capitán
de Corazas y Caballero de Santiago. Por parte materna, su abuelo, D. Juan
Marcelo de la Torre y Pérez de Revolledo, fue Capitán de Fragata de la Real
Armada, y su bisabuelo, D. Alonso de la Torre, fue Capitán de Mar y Guerra
de la Real Armada. Entre sus descendientes hay también destacados
militares; sus cuatro hijos (tuvo también una hija) lo fueron, alcanzando dos
de ellos el rango de General y otro el de Brigadier; sus nietos sus biznietos,
sus tataranietos siguieron la tradición militar. Entre éstos últimos podemos
citar de modo especial a dos, D. Francisco Hidalgo de Cisneros y Manso de
Zúñiga, Teniente General del Ejército, Director de la Academia General
Militar de Zaragoza, y D. Ignacio Hidalgo de Cisneros y López de
Montenegro, hermano de padre del anterior, General del Ejército y Jefe de la
Aviación de la República Española, autor de un interesante libro histórico de
carácter autobiográfico titulado Cambio de rumbo.
Volvamos ahora la vista hacia la vida de novela de este marino y político
español, de la que daré sólo algunas fechas significativas para poder
centrarme más en su relación con Cádiz: 1758, nace en Cartagena el 5 de
enero. 1770, ingresa como Guardiamarina en la Real Armada y a partir de
ahí comienza una carrera durante la que participa en numerosísimas
acciones militares, lo que le vale que varios de sus ascensos lo sean por los
méritos contraídos en ellas. Bajo el mando de su padre participa en la
expedición de socorro a Melilla (1775) y las expediciones contra Argel de
1783 y 1784. En 1780, al mando de la balandra Flecha, rechaza el ataque de
la fragata Cerbero y consigue el apresamiento del corsario Rodney y la
balandra Nimbre, todos ellos ingleses. 1788, se casa con Dª Inés de
Gastambide y Ponce.
1790 - 1795, participa en la guerra contra Francia y realiza el bloqueo de
varios puertos franceses. 1802, jefe de Escuadra. 1805, participa en la
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Batalla de Trafalgar; asciende por méritos en la batalla a Teniente General.
1808, participa en Cartagena en la rebelión antifrancesa, siendo elegido
Capitán general del Departamento y presidente de la Junta local. 1809, es
nombrado por la Junta Central virrey de Río de la Plata cuando la provincia
se encuentra ya en una situación plenamente prerrevolucionaria. No puede
evitar el triunfo final de la Revolución de Mayo de 1810, en la que es
depuesto. De regreso a España permanece en Cádiz entre 1811 y 1820,
etapa de la que hablaremos posteriormente. En 1823 vuelve a ser nombrado
Capitán General del Departamento marítimo de Cartagena. En 1827 muere
su esposa Inés y él fallece dos años después, el 9 de junio de 1829.
Veamos ahora los hechos de su vida que me hacen afirmar que su relación
con Cádiz fue especialmente intensa:
Cisneros tuvo su primer encuentro trascendente con su vocación y con su
pasión, la Marina y el mar, precisamente en Cádiz pues fue en la Academia
de esta Ciudad donde ingresó como Guardiamarina en 1770, a la edad de
doce años. En 1777 se incorpora a la escuadra de D. Miguel Gastón, en el
Vencedor, mandado por el Brigadier D. Francisco Hidalgo de Cisneros. En
1778 y en 1781 participa en la Primera y Segunda Campañas al Canal de la
Mancha, respectivamente, en la escuadra de D. Luis de Córdova; en el
mismo 1781, participa en el apresamiento de tres balandras inglesas. En
1797 como comandante del San Pablo tiene una destacada actuación en la
batalla de San Vicente, contribuyendo a evitar el apresamiento del Santísima
Trinidad; se le expide carta de gracias por su conducta.
En 1805, Siendo General del Arsenal de Cartagena, a petición propia se
traslada a Cádiz y transborda su insignia al Santísima Trinidad con el que
participa en la batalla de Trafalgar y consigue infringir graves daños al
Victory del almirante Nelson. Cae herido y, tras rendir el buque cuando éste
estaba ya condenado a muerte y era imposible seguir resistiendo, es hecho
prisionero; los ingleses le rinden honores militares y le dan tratamiento de
héroe.
Su estancia más larga de forma continuada en Cádiz se da entre 1811 y
1820, siendo sucesivamente vocal de la Regencia (1812), Capitán General
del Departamento de Cádiz (1813) y Ministro de Marina (1818). Pero el
vínculo más especial con Cádiz, que pocos conocen, lo llevaba Cisneros en
las raíces de su árbol genealógico ya que por sus venas corría la sangre
gaditana de su familia materna. Efectivamente, su madre era gaditana
aunque por ser hija de militar había nacido circunstancialmente en Ceuta,
pero además el padre de ésta y la madre de éste y toda su ascendencia, es
decir el abuelo, la bisabuela y otros ascendientes anteriores de nuestro
personaje, eran de Cádiz.
Para finalizar este artículo he de decir que para mí, que soy cartagenero
como mi antepasado pero que me siento también gaditano por llevar
veintiocho años afincado en Cádiz, que tengo ramas murcianas (un hijo y
una hija) y ramas gaditanas (un hijo y una hija) ha constituido un orgullo y
una satisfacción descubrir estas raíces de mi antepasado, que son también
mis propias raíces gaditanas.
José Luis Hidalgo de Cisneros