TODO SE HA CUMPLIDO Juan 19:16-42 Versículo clave: 19:30 "Al probar Jesús el vinagre, dijo: —Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu." ¡Buenas noches! Soy Gustavo Prato de Venezuela. Aunque quise participar en esta conferencia en años pasados, se me fue negada la visa americana tres veces. Pero al final Dios me trajo aquí a hablarles acerca del amor de Dios para todo el mundo. Hay muchas expresiones de amor: dar flores o chocolates, escribir una carta, cantar canciones, etc. Pero ¿Cuál es la más grande expresión de amor? Dios demostró el más grande amor al enviar a su único hijo para morir en la cruz. El amor de Jesús en la cruz no solo te involucra a ti y a mí, sino también a todas las personas alrededor del mundo. Parte Uno: Jesús fue crucificado como Rey de los judíos (16-27) La noche antes de la crucifixión, Jesús demostró su amó por sus discípulos. Él les lavó sus pies. Les enseñó que él era el único camino al Padre. Él les mando amarse uno al otro. Y oró por ellos. Después que la hora vino para que él revelara el amor de Dios en su máxima expresión con su sacrifico en la cruz, los judíos arrestaron a Jesús en el Jardín de Getsemaní. Al siguiente día ellos lo llevaron a Pilato y falsamente lo acusaron. Pilato encontró a Jesús inocente, pero quiso calmar a los judíos (18:38; 19:4,6). Pilato tomo a Jesús y mando que lo azotaran. Los soldados trenzaron una corona de espinas y lo pusieron en su cabeza. Los vistieron con un manto de purpura y se le acercaban una y otra vez, diciendo, “¡Viva el rey de los judíos!” bofeteándolo en su cara (19:1-3). Más tarde, Pilato trato de soltarlo, pero la presión de la gente era muy fuerte. A sí que finalmente se lo entregó a los judíos y condenaron Jesús a muerte. La forma de ejecución era la crucifixión la cual era reservada solo para los peores criminales, esclavos y prisioneros políticos. Verso 17 dice, “Jesús salió cargando su propia cruz hacia el lugar de la Calavera (que en arameo se llama Gólgota).” Jesús cargó su propia cruz al lugar de ejecución. Este fue un camino doloroso, lleno de sufrimiento y lágrimas. Jesús cargo su propia cruz a lo largo de este camino duro para cumplir su misión. Llegó al Calvario, una colina fuera de Jerusalén donde fue expuesto públicamente. Allí lo crucificaron, y con él otros dos, uno en cada lado y Jesús en el medio (18). Sus manos y tobillos fueron clavados en una cruz. Él fue colgado entre dos criminales. De acuerdo a la ley de Moisés todo hombre colgado en un madero estaba bajo la maldición de Dios (Dt. 21:23). ¿Por qué Jesús fue condenado y colgado sobre la cruz? Porque él llevó la maldición que merecíamos. Isaías 53:5-6 dijo “Él fue traspasado por nuestras rebeliones, y molido por nuestras iniquidades; sobre él recayó el castigo, precio de nuestra paz, y gracias a sus heridas fuimos sanados. Todos andábamos perdidos, como ovejas; cada uno seguía su propio camino, pero el Señor hizo recaer sobre él la iniquidad de todos nosotros.” Jesús fue expuesto a la vergüenza como como un criminal para llevar toda nuestra vergüenza 1 por causa del pecado. Jesús fue golpeado, herido y crucificado en nuestro lugar, pagando por nuestros pecados. Pilato colocó un aviso sobre la cruz. Este se lee, “Jesús de Nazaret, Rey de los judíos.” (19). El aviso fue escrito en tres lenguajes ampliamente usados en ese tiempo: Arameo, Latín y Griego (20). Jesús es el Salvador para toda la gente en todas las naciones. Jesús es el rey espiritual. Él dijo, “Mi reino no es de este mundo. Si lo fuera, mis propios guardias pelearían para impedir que los judíos me arrestaran. Pero mi reino no es de este mundo.” (18:36). Jesús fue flagelado, escupido, golpeado, burlado y finalmente crucificado. Pero a través de su sufrimiento y humillación, el venció a Satanás (Heb. 2:14-15). Jesús es el rey humilde que vino para conquistar nuestros corazones, no por las fuerzas sino con sacrificio amor. Después que lo crucificaron, los soldados tomaron su ropa y la dividieron en cuatro partes, una para cada soldado. Luego tomaron su túnica, y echaron suerte para ver a quien le tocaba (2324). Parecía que el Imperio Romano y los líderes Judíos tenían el control porque su maldad se estaba saliendo de control. Pero la Biblia dice que esto paso para que las escrituras se cumplieran: “Se reparten entre ellos mis vestidos y sobre mi ropa echan suertes.” (24; Ps. 22:18). Dios estaba siempre en control cumpliendo su plan de salvación. Los soldados eran ignorantes del sufrimiento de Jesús. Sin embargo Jesús era consciente del sufrimiento de su madre. Desde la cruz Jesús le dijo, “Mujer, ahí tienes a tu hijo. Luego dijo al discípulo: Ahí tienes a tu madre. Y desde aquel momento ese discípulo la recibió en su casa.” En su más difícil momento, Jesús estaba más consiente de otros que en sí mismo. Parte Dos: Última palabra de Jesús, “Todo se ha cumplido.” (28-42) Verso 28 dice, “Después de esto, como Jesús sabía que ya todo había terminado, y para que se cumpliera la Escritura, dijo: —Tengo sed.” Después que Jesús agonizaba en la cruz y perdía mucha sangre, estaba cansado y tuvo sed. Salmos 22:15 profetizó acerca de la sed de Jesús en la cruz. “Se ha secado mi vigor como una teja la lengua se me pega al paladar. ¡Me has hundido en el polvo de la muerte!” En esa dura condición, Jesús supo que tenía que cumplir una cosa más. La escritura acerca del Mesías. Él dijo “Tengo sed.”(Salmos 69:21). Aún en su agonía, Jesús fue absolutamente obediente a Dios el Padre para cumplir su plan de salvación. Finalmente, el momento que Jesús había anticipado había llegado. Leamos el verso 30a. “Al probar Jesús el vinagre, dijo: —Todo se ha cumplido. Luego inclinó la cabeza y entregó el espíritu.” ¿Qué significa estas palabras? Primero: “Todo se ha cumplido” significa Dios cumplió su promesa de enviar un Salvador. Dios había prometido a Adam y Eva que enviaría un Salvador que sufriría, pero que aplastaría la cabeza de Satanás (Gn. 3:15). A través de los siglos, Dios confirmó su promesa a través de sus profetas. Los seres humanos frecuentemente olvidan o rompe sus promesas. Pero nuestro amoroso Dios no olvida su preciosa promesa. Él la ha cumplido y envió el salvador. 2 Segundo: “Todo se ha cumplido” significa que al morir en la cruz, Jesús completaría el trabajo de salvación. Él se convirtió en el perfecto sacrificio por nuestros pecados. Anteriormente, Dios proveyó el camino para que las personas se le acercaran a través de sacrificio de animales. Esos sacrificios necesitaban hacerse todos los días. Ellos eran una sombra del perfecto sacrificio que vendría. Dios envió a Jesús quien vivió una vida sin pecado en completa obediencia a Dios en esta tierra. Jesús fue este perfecto e intachable cordero. Juan el Bautista le dijo, “¡Aquí tienen al Cordero de Dios, que quita el pecado del mundo!” (1:29). Al dar su cuerpo y derramar su sangre el pagó por el pecado de toda la gente. A través del sacrifico de este Salvador, Dios completamente resolvió el problema del pecado humano. El problema de pecado es el más serio problema. Al principio el pecado se ve tentador pero luego trae terribles consecuencias. Pecados como adulterio, lujuria, conflictos, envidia, y muerte causan relaciones rotas, depresión y ansiedad. Estos pecados hacen difícil el amar a otros, aún a nosotros mismos. También el pecado lleva a la destrucción de vidas, familias y sociedad. La raíz del pecado es que el pecado nos separa de Dios. El pecado nos hace sentir culpables y últimamente nos lleva a la condenación eterna en el infierno, porque la paga de pecado es la muerte (Ro. 6:23). Pero el terrible sufrimiento de Jesús y su muerte pagaron en total todas las consecuencias de nuestros pecados. En ese tiempo el vendedor usaba la frase, “Todo se ha cumplido,” para mostrar que toda la deuda fue pagada. No 90% ni 99.9%, pero 100% pagadas. Ahora no tenemos más deuda para pagar porque Dios pagó completamente por nuestros pecados al dar a su Hijo. ¿Qué debemos hacer para recibir esta deuda? Juan 3:16 dice, “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio su hijo unigénito, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga la vida eterna. Para recibir esta salvación, Dios pide que sólo creamos lo que él ha hecho por nosotros a través de Jesús. “Todo se ha cumplido” es escrito en griego en tiempo perfecto. Esto indica que el sacrificio expiatorio de Jesús continúa siendo efectivo en el presente y en el futuro hasta que Jesús venga de regreso. Ahora podemos ir a Jesús en todo momento todo los días y recibir su perdón una y otra vez porque “Todo se ha cumplido.” 1 Juan 1:9 dice, “Si confesamos nuestros pecados, Dios es fiel y justo, nos los perdonará y nos limpiará de toda maldad.” ¡Alabado se Jesús! Romanos 8:1 dice, “Por lo tanto no hay ninguna condenación para los que están unidos a Cristo Jesús.” Algunas veces somos torturados por la culpa y la vergüenza y no podemos dormir. Tal vez pensamos que siempre seremos torturados por el pasado. Pero no importa cuán sucio son nuestros pecados, Dios pagó completamente por ellos a través de la muerte de Jesús. Ahora podemos ser libres de condenación. Tenemos paz con Dios. Nuestra relación con Dios es restaurada. Podemos ser llamados hijos de Dios. Experimentamos su compañía y amor todos los días. También recibimos vida eterna, y nos alegraremos de la compañía de Jesús en su reino celestial (17:3). Jesús rompió el poder de pecado. Por lo tanto, podemos salir de los pasados fracasos y tener un nuevo comienzo. El pecado es como una cadena de hierro. No podemos romperla pero Jesús si puede. Luego podemos salir libres y nuestras vidas podrían ser cambiadas. 3 Personas egoístas pueden ser transformadas para servir y amar a otros con el amor de Dios. Hombres y mujeres lujuriosos que pueden ser purificados para formar una familia saludable. Una pareja de matrimonio cercanamente se divorció por el pecado de adulterio. Pero los dos se arrepintieron y creyeron en Jesús. Ellos renovaron los votos matrimoniales en la iglesia. Después de algunos años ellos se fueron a otra ciudad y plantaron una nueva iglesia. El pasado marzo ellos terminaron su primer programa de discípulos. Cinco hermanos y hermana se levantaron como discípulos de Jesús. ¿Cómo esto fue posible? ¡Porque no hay condenación para los que están en Cristo Jesús! La gracia de Dios nos permite tener un nuevo comienzo. Después de decir, “Todo se ha cumplido,” Jesús inclino su cabeza y entrego su espíritu. (30b). “Entrego su espíritu” indica una acción voluntaria de Jesús. Jesús resistió todo dolor y voluntariamente entregó su vida (10:18). 1 Juan 3:16 dice, "En esto conocemos lo que es amor: en que Jesucristo entregó su vida por nosotros. Así también nosotros debemos entregar la vida por nuestros hermanos.” Jesús nos muestra que el verdadero amor no solo es sentimiento, o palabras como “te quiero,” pero el verdadero amor es acción (1 John 3:18). Es entregar una vida por otros. Dios realmente quiere que nos amemos unos a otros de esta forma. Él dijo “Así como yo los he amado, también ustedes deben amarse los unos a los otros.” (13:34b). No es fácil el amarnos uno a los otros de esta forma. Pero somos tan amados por Dios a través de la muerte de Jesús que podemos crecer en el amor de Dios hasta que podamos amar a nuestros hermanos tal como Jesús. Los soldados confirmaron la muerte de Jesús al clavar en su costado una lanza. Así, la Escritura fue cumplida: “Le protegerá todos los huesos, y ni uno solo le quebrarán” (Ps 34:20). Y “Harán lamentación por el que traspasaron.” (Za. 12:10). El escritor del evangelio de Juan testificó, “El que lo vio ha dado testimonio de ello, y su testimonio es verídico. Él sabe que dice la verdad, para que ustedes también crean” (35). Dios hizo todo el trabajo para pagar nuestros pecados. El proveyó el perfecto cordero en Jesús. Dios también dio testimonio en la Biblia para que nosotros que viviríamos 2000 años más tarde pudiéramos creer. Creamos en Jesús y recibamos su perdón. Yo sufrí de complejo de inferioridad. Tuve muchos fracasos amorosos. Era esclavo de la pornografía. Tenía resentimientos escondido hacia mi padre por la pobreza. Pensé estudiar Ingeniería de Petróleo en la Universidad Central de Venezuela. Este fue el camino a la felicidad. A pesar de ser uno de los mejores estudiantes, me sentía vacío. Sufría de depresión e inquietud. Un día fui a mi cuarto y ciertamente comencé a llorar. Entonces Dios me mostró su amor. En 2002 fui invitado a una conferencia bíblica. Allí escuche la voz de Jesús que le dijo a la mujer adúltera, “Tampoco yo te condeno. Ahora vete y no vuelvas a pecar” (8:11). Por primera vez, entendí que los deseos lujuriosos eran pecados.” Tuve que arrepentirme por ellos. Yo oré, “Dios si tú quieres esto para mí, muéstramelo.” Después de ver el drama acerca de la crucifixión y escuchar el mensaje de la cruz, no pude contener mis lágrimas. No pude hablar sintiendo realmente culpa por el sufrimiento doloroso de Jesús. Tomé una decisión de escribir una reflexión. Confesé mis pecados voluntariamente esa noche y acepté a Jesús como mi salvador. Recibí perdón de pecados y una pesada carga me dejó. 4 A través de los estudios bíblicos pude profundizar mi entendimiento que la causa de todo mi dolor era el pecado, como un impuro corazón y orgullo. También escuché a Jesús decir, “Todo está terminado.” Jesús a través de su sufrimiento y muerte venció a Satanás y pagó por mis pecados en la cruz. Así todos los días tenía un nuevo comienzo. Era fortalecido interiormente gradualmente superé malos hábitos y depresión. El Espíritu Santo está conmigo. El me conforta y me da alegría en todas las circunstancias. También perdoné a mis padres y ahora estoy agradecidos por ellos. Esto me trajo paz. Supere mi fatalismo acerca del matrimonio y me casé con la mejor mujer del mundo: la pastora Katiuska. Dios aparto de mí el sentido de fatalismo. Me dio misión de levantar discípulos entre los estudiantes universitarios a través de uno a uno estudio bíblico. El me levantó como pastor de UBF de Venezuela, sucediendo al pastor Juan Seo. Latino América tiene muchos problemas como familias rotas, inmoralidad, orgullo, violencia, drogas, etc. ¿Cómo puedo ayudarlos? Debo amar las ovejas de Dios al entregar mi vida por ellas como Jesús lo hizo por mí. Debo creer y enseñar la palabra de Jesús, “Todo se ha cumplido.” Luego Dios levantará a Latino América en una fuente de bendición para todas las naciones. Jesús dijo, “Todo se ha cumplido.” Nuestra vida era empobrecida por el pecado. Pero Dios tanto nos amó que pagó nuestras deudas a través de la muerte de Jesús. Él hizo todo el trabajo para que tengamos una nueva vida. Vengamos a Jesús por la fe y recibamos su perdón. Vivamos una nueva vida en compartir el amor de Dios. Amen. 5