22-2012-4 CAMARA DE LO CIVIL DE LA PRIMERA SECCIÓN DE OCCIDENTE: Santa Ana, a las quince horas del día dieciocho de abril de dos mil doce. La sentencia que se conoce en grado fue pronunciada a las once horas ocho minutos del día uno de febrero de este año, por el Señor Juez Tercero de lo Civil y Mercantil de esta ciudad , en el proceso ejecutivo mercantil promovido por SCOTIABANK EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, institución Bancaria del domicilio de San Salvador, por medio de su representante procesal Licenciado RAFAEL ERNESTO ANDRADE PEÑATE, mayor de edad, Abogado, de este domicilio, en contra de la señora LORENA ELIZABETH A. M., mayor de edad, estudiante, del domicilio de esta ciudad , a efecto que dicha señora sea condenada al pago del capital, intereses, costas y cláusula penal adeudados. Han intervenido en primera y en esta instancia, únicamente la parte actora por medio de su Apoderado ya mencionado. El fallo apelado literalmente dice: "A NOMBRE DE LA REPUBLICA DE EL SALVADOR, FALLO: I- Estimase la pretensión que originó este proceso en los siguientes términos: A) ORDENASE a la señora LORENA ELIZABETH A. M., de generales ya relacionadas, que en el plazo de QUINCE DIAS HABILES, posteriores a que adquiere firmeza la presente resolución, pague a SCOTIABANK EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, la cantidad de VEINTE MIL QUINIENTOS CINCUENTA Y SEIS DOLARES CON NOVENTA Y NUEVE CENTAVOS DE DOLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, en concepto de deuda principal; B) ORDENASE, a la demandada antes mencionada que en el mismo plazo mencionado cancele los respectivos intereses ordinarios del SIETE PUNTO SESENTA POR CIENTO ANUAL SOBRE SALDOS, a partir del día siete de diciembre del año dos mil diez, pero que en ningún caso podrá exceder del día cinco de agosto de dos mil treinta y ocho, fecha en la cual concluye el plazo de trescientos sesenta meses pactados para el cumplimiento de la obligación tanto principal como accesoria, y c) CONDENASE a la demandada señora LORENA ELIZABETH A. M. , de generales ya relacionadas, al pago de las costas procesales de esta instancia. II) DECLARASE SIN LUGAR el pago de CUARENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA mensuales, que comprende el recargo de penalidad por mora solicitado en la demanda. III) Una vez transcurrido el plazo para interponer el recurso de apelación sin que se haya hecho uso del referido medio impugnativo, se declarará ejecutoriada la presente sentencia y se ordenará su archivo, sin necesidad de notificar dicha ejecutoria por constituir una actuación de mero trámite que no vulneraría ningún derecho. La presente sentencia ha sido dictada por el licenciado Melvin Mauricio Peñate Sánchez, y se advierte a las partes que la misma puede ser controlada mediante el recurso de apelación. NOTIFIQUESE. ANTECEDENTES DE HECHO. I- HECHOS INVOCADOS EN LA DEMANDA Y PRETENSION. "Que su representada SCOTIABANK EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, entregó en calidad de mutuo , a favor de la señora LORENA ELIZABETH A. M., de generales ya indicadas, la suma de VEINTE MIL OCHOCIENTOS NOVENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, para un plazo de treinta años contados a partir de la fecha de su otorgamiento, es decir, que vencerá el día cinco de agosto de dos mil treinta y ocho, las sumas retiradas se pagarían por medio de trescientas cincuenta y ocho cuotas mensuales, vencidas y sucesivas de ciento setenta y un dólares de los Estados Unidos de América, cada una, que comprenden capital, intereses, seguro de daños, seguro de vida, impuesto a la Transferencia de bienes muebles y a la prestación de servicios, mas los intereses devengados y primas de seguro que corresponden a los primeros sesenta días del plazo. Que las sumas retiradas o saldos devengarían un interés convencional del SIETE PUNTO SESENTA por ciento anual sobre saldos, ajustable y pagaderos en forma mensual. Si la deudora no paga la cuota mensual del préstamo indicado, dentro de los diez días siguientes a la fecha estipulada para su pago, el Banco, cobraría mensualmente a la deudora en concepto de penalización por mora hasta la suma de CUARENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, dicha penalización se cobrará mientras dure el incumplimiento antes indicado. Que el crédito mencionado se encuentra garantizado con primera hipoteca abierta, otorgada por la señora LORENA ELIZABETH A. M., a favor de SCOTIABANK SOCIEDAD ANONIMA, y que recae sobre un inmueble de naturaleza rustica hoy urbano, situado en el cantón Chupaderos, Hoy Lotificación El Trébol, donde se ha desarrollado la Urbanización Alto verde, de esta jurisdicción. Que la deudora antes mencionada no ha cumplido con la obligación del pago del crédito relacionado, pues cayo en mora el día seis de junio del año dos mil diez, y únicamente ha abonado a capital la suma de trescientos treinta y tres dólares con un centavo de dólar de los estados Unidos de América, adeudando a su mandante a la fecha la cantidad de VEINTE MIL QUINIENTOS CINCUENTA Y SEIS DOLARES CON NOVENTA Y NUEVE CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, mas los intereses convencionales del siete punto sesenta por ciento anual sobre saldos a partir del día siete de diciembre del año dos mil diez en adelante, mas la penalidad por mora de CUARENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, mensuales, a partir del día seis de enero del año dos mil once en adelante y costas procesales, todo hasta su completo pago, transe o remate. Con fundamento en todo lo antes expuesto y específicamente en los argumentos de derecho y normas jurídicas invocadas, que sustentan la pretensión contenida en el presente libelo de demanda, a Usted le Pido: Me tenga por parte, en el carácter expuesto , me admita la presente demanda, se agreguen los documentos ejecutivos presentados, vista la fuerza ejecutiva de los documentos ejecutivos enunciados, se decrete embargo en bienes propios de la demandada LORENA ELIZABETH A. M., por la cantidad de VEINTE MIL QUINIENTOS CINCUENTA Y SEIS DOLARES CON NOVENTA Y NUEVE CENTAVOS DE DÓLAR DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, mas los intereses contractuales o convencionales y penalidad por mora; y que en sentencia estimativa se condene a la demandada LORENA ELIZABETH A. M., A PAGAR A MI MANDANTE, EL CAPITAL, INTERESES, COSTAS Y CLAUSULA PENAL detallados anteriormente." La parte demandada, no obstante fue legalmente citada y emplazada no compareció a ejercer su defensa en la primera instancia. II. PRUEBAS PROPUESTAS Y PRACTICADAS POR AMBAS PARTES EN PRIMERA INSTANCIA. ACTOR: Escritura pública de Constitución de hipoteca abierta, otorgada en esta ciudad, a las nueve horas treinta minutos del dia cinco de agosto de dos mil ocho, ante los oficios del notario Carlos Enrique Avelino Rivera, por la señora LORENA ELIZABETH A. M., a favor de SCOTIABANK EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, inscrita en el Registro de Hipotecas de este departamento a la matricula DOS CERO CERO UNO DOS SIETE CERO TRES- CERO CERO CERO CERO CERO, asiento SIETE, cuya copia debidamente confrontada se encuentra agregada de fs. 9 a 19 de la pieza principal. DEMANDADA: La parte demandada, no compareció a la primera instancia, por lo que no adujo prueba alguna para desvirtuar los hechos alegados por la parte actora. En esta instancia, en la audiencia señalada a efecto de oír a la parte apelada, se ordenó revocar el literal II) del fallo de la sentencia apelada, en el sentido que la deudora deberá pagar a la sociedad apelante, la cantidad de CUARENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA, en concepto de recargo por penalidad por mora. III-DECLARACION DE HECHOS PROBADOS Y NO PROBADOS POR LAS PARTES. Con la escritura de Constitución de hipoteca abierta antes relacionada, como los demás documentos anexos, el actor ha demostrado los extremos de la demanda, consistentes en que la señora LORENA ELIZABETH A. M., es en deberle el capital, intereses, costas, y la multa por penalidad reclamados desde las fechas relacionados en la misma. VI- FUNDAMENTOS DE DERECHO. En el sublite, la sociedad SCOTIABANK, EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, ha demandado en juicio ejecutivo mercantil a la señora LORENA ELIZABETH A. M., siendo el documento base de la acción ejecutiva, un contrato de mutuo con hipoteca abierta, con el cual reclama la cantidad de veinte mil quinientos cincuenta y seis dólares con noventa y nueve centavos de dólar de los Estados Unidos de América, mas intereses y costas, así como el pago de cuarenta dólares en concepto de multa por mora. El juez Aquo después de haberle dado tramite a la demanda, en la sentencia condenó a la referida demandada al pago del capital, intereses y costas, pero declaró sin lugar el pago de la multa a que se ha hecho referencia, por considerar la cláusula que la constituye como abusiva, por lo que de conformidad al articulo 17 de la ley de Protección al consumidor, declaró dicha cláusula "por no escrita", siendo este precisamente el punto por el cual apela la parte actora para ante esta Cámara. Por su parte la parte apelante sostiene en su escrito de interposición del recurso, que la penalidad, haciendo alusión a la cláusula penal, constituye un mecanismo de resarcimiento que se genera cuando existe un incumplimiento por una de las partes contratantes. La penalidad por mora, insiste, es complemento del principio de la autonomía de la voluntad, el cual en materia de contratos se considera que la ley suprema, es la voluntad de las partes, por lo que por este principio los particulares son libres para celebrar los contratos que mas convengan a sus intereses, sean o no previstos por la ley. Aduce, que no es cierto como lo sostiene el Juez Aquo, que no consta en forma clara, liquida y determinada a cuanto asciende lo reclamado por dicha cláusula, ya que en la demanda presentada en la parte relativa a la Petición y valor de lo demandado, se consignó que en caso de mora se cobraría en concepto de penalidad por mora CUARENTA DOLARES DE LOS ESTADOS UNIDOS DE AMERICA mensuales y que se cobraría a partir del día seis de enero del ario dos mil once, lo cual quedo plenamente comprobado con la certificación extendida por el contador General de su representada, es decir el Banco Scotiabank El Salvador, sociedad anónima . De lo anterior se deduce que tanto la argumentación del juez Aquo para sostener su decisión, como los alegatos de la parte apelante, se centran en la legalidad de la cláusula penal estipulada en el contrato de mutuo con hipoteca abierta antes relacionado, por lo que sobre ello tratará el análisis de este Tribunal. Esta cláusula conforme lo indica el Art. 1406 C.C., es: "La cláusula penal es aquella en que una persona, para asegurar el cumplimiento de una obligación, se sujeta a una pena, que consiste en dar o hacer algo en caso de no ejecutar la obligación principal o de retardar su ejecución."" Según la doctrina, las características de esta cláusula son: a) Es una obligación accesoria de garantía, porque asegura la obligación principal. b) Constituye una evaluación anticipada de los perjuicios, porque se evalúa la posibilidad de los perjuicios cuantificándolos. c) Es una obligación condicional, debido a que para poder exigirla es necesario que el deudor no cumpla o se retrase en el cumplimiento de la obligación y d) es una caución. Esto es porque se contrae para asegurar el cumplimiento de una obligación. Así, la cláusula penal, tiene como fin asegurar la indemnización de los perjuicios ocasionados al acreedor por el incumplimiento de la obligación por parte del deudor. Esta indemnización puede lograrse de dos maneras: en forma legal, judicial o convencional, mediante la fijación de intereses moratorios; o mediante la evaluación convencional, que puede fijarse en una cantidad de dinero; así tenemos que la cláusula penal, es la evaluación convencional de los perjuicios que los contratantes hacen a priori, señalándola en el propio contrato...Teoría de las Obligaciones, Tomo I, Guillermo Trigueros H., Editorial Delgado, Universidad "Dr. José Matías Delgado.", Pág. 247. Con relación al momento en que puede exigirse la pena, el Art. 1428 C.C., establece: "Se debe la indemnización de perjuicios desde que el deudor se ha constituido en mora, o si la obligación es de no hacer, desde el momento de la contravención; a su vez, el Art. 1408 C.C., establece: "Antes de constituirse el deudor en mora, no puede el acreedor demandar la pena; ni constituido el deudor en mora, puede el acreedor pedir a un tiempo el cumplimiento de la obligación principal y la pena, sino cualquiera de las dos cosas a su arbitrio, a menos que aparezca haberse estipulado la pena por el simple retardo, o a menos que se haya estipulado que por el pago de la pena no se entienda extinguida la obligación principal."" De lo anterior se colige que cuando se ha estipulado en el mismo contrato, que por el simple retardo en el pago puede exigirse la pena, o que por el pago de la pena no se entiende por extinguida la obligación principal, puede exigirse tanto el cumplimiento de la obligación principal como la pena; tal cosa sucede en el caso de autos, pues en el contrato de mutuo con hipoteca abierta antes relacionado se estipuló que si la deudora no pagaba la cuota mensual del crédito dentro de los diez días siguientes a la fecha establecida para su pago, el Banco cobraría mensualmente la cantidad de cuarenta dólares en concepto de penalización por mora, habiéndose reconocido expresamente por la deudora que por el pago de esta penalización, no se entendía por extinguida la obligación principal. De esta forma, queda establecido la legalidad de la cláusula penal que se ha estipulado en el documento base de la acción, pues el otorgamiento de la misma, según se deduce del texto del documento, ha sido en sustitución de la otra forma de satisfacer la indemnización, es decir los intereses moratorios; por esta razón el Art. 1414 C.C., establece que no puede pedirse a la vez la pena y la indemnización de perjuicios, a menos de haberse estipulado así expresamente, cosa que no se ha verificado en el presente caso. A diferencia de lo que sustenta el Juez Aquo con relación a la cláusula penal, esta Cámara estima que si se ha respetado y cumplido con el principio de autonomía de la voluntad, y el de libre contratación, pues con solo la lectura de dicho documento consta que se han cumplido todos los requisitos de ley para la validez del contrato de mutuo con hipoteca abierta y cláusula penal, con mas razón de que no existe objeción alguna por la parte demandada con relación a dicha cláusula, por lo que las conjeturas del Juez Aquo van encaminadas a sustentar una defensa que no le corresponde, poniendo en riesgo su deber de imparcialidad. Para mayor abundamiento sobre la legalidad de la referida cláusula, nuestra Jurisprudencia ha sostenido: "Cuando el deudor está en mora puede exigírsele el pago de la multa a que se hubiere obligado...." Índice de la Jurisprudencia Civil Salvadoreña, Doctor Ángel Góchez Castro, desde 1901 hasta 1932, Pág. 65. Y el Art. 1413 C.C. que dice: "Habrá lugar a exigir la pena en todos los casos en que se hubiere estipulado, sin que pueda alegarse por el deudor que la inejecución de lo pactado no ha inferido perjuicio al acreedor o le ha producido beneficio.", lo cual sirve para corrobar que la simple mora, es decir el retardo en el cumplimiento de la obligación, es suficiente para exigir dicha penalidad. Con relación a que la cláusula penal es indeterminada por el contenido de la misma, ya que no se observa un parámetro concreto a considerar para definir cual será el monto real que el deudor tendrá que cancelar en caso de incurrir en mora, pues no se sabe si éste tendrá que pagar un dólar o la totalidad de la pena, esta cámara es del criterio, que se debe ser consecuente y lógico en la interpretación de dicha cláusula, ya que de retomar el criterio sostenido por el Juez Aquo, no sólo sería un dólar el mínimo que podría pagarse en un momento dado en concepto de multa, sino hasta un centavo pues está dentro del rango que pretende darle el referido juzgador. La intención con dicha multa, no es un superfluo capricho de pagarse un centavo, o un dólar, sino de responder en forma aproximada a los daños y perjuicios que se ocasionarían por la falta del pago puntual, en este sentido, debe de interpretarse lógicamente que la cantidad estipulada en concepto de multa, no es un centavo, ni un dólar, sino CUARENTA DOLARES, que es lo mas sensato para responder a la indemnización que se pretende, lo que queda confirmado, porque esa es precisamente la cantidad que reclama el acreedor en su demanda, la que tácitamente ha sido aceptada por la demandada al no haberse opuesto a ese reclamo. En este contexto cabe mencionar lo que establece el Art. 1431 CC.: "Conocida claramente la intención de los contratantes, debe estarse a ella mas que a lo literal de las palabras". Por los motivos antes expuestos, resulta que el romano II del fallo de la sentencia apelada, no esta arreglado a derecho, por lo que debe de revocarse pronunciando el conveniente, es decir condenando a la ejecutada al pago de dicha cláusula penal. POR TANTO: de acuerdo a lo antes expuesto, y en base a los Principios de Congruencia, Legalidad y los Artículos 12, 18 y 23 Cn., y Artículos 217, 218, 219, 222 y 515, del Código Procesal Civil y Mercantil, a NOMBRE DE LA REPUBLICA DE EL SALVADOR, FALLAMOS: a) REVOCASE el romano II del fallo de la sentencia apelada, y CONDENASE a la señora LORENA ELIZABETH A. M., a pagar a SCOTIABANK EL SALVADOR, SOCIEDAD ANONIMA, la cantidad de CUARENTA DOLARES MENSUALES en concepto de recargo de penalidad por mora desde el día seis de enero de dos mil once hasta su completo pago, quedando firme dicha sentencia en todo lo demás. b) No hay especial condenación en costas. Devuélvase la pieza principal al Juzgado de origen con la certificación correspondiente.HAGASE SABER PRONUNCIADA POR LOS SEÑORES MAGISTRADOS QUE LA SUSCRIBEN