Descargar suplemento La Prensa, 13 de julio de 2014

Anuncio
EL DÍA, domingo, 13 de julio de 2014
p1
del domingo
revista semanal de EL DÍA
LA ÚLTIMA PUERTA. La
experiencia del médico Miguel Ángel
Pertierra con pacientes que han
sufrido una experiencia cercana a la
muerte, entre ellos, él mismo. 6/7
II GUERRA MUNDIAL.
LOBOS GRISES EN CANARIAS
(2ª PARTE)
Submarinos alemanes hundidos en
aguas canarias.
unque existen referencias gráficas de la presencia de submarinos
alemanes atracados en
puertos canarios para
al noroeste de Lanseis fueron los U-111,
Texto: Juan Carlos Monteverde García (Monty)
zarote. En el caso
U-118, U-135, U-167,
[email protected]
del U-135, del tipo
U-524 y U-543, de
VII-C, mandado por
los que pasaremos a
el alférez de navío Otto Luther, tamcitar algunas de sus acciones.
bién resultó hundido el 15 de julio de
El U-111 fue un submarino tipo IXB,
1943 por las cargas de profundidad
mandado por el teniente de navío
suministrarse, no hemos podido
precisar si fueron coincidentes con
el tiempo de la contienda. Sin embargo, sí tenemos constancia de las
operaciones de suministro en alta
mar por barcos mercantes de su misma nacionalidad o por otros políticamente afines. Barcos de los que los
“lobos grises” eran absolutamente
dependientes para mantener su autonomía en la vigilancia, seguimiento
y destrucción de los navíos aliados en
su ruta hacia América o Sudáfrica.
Conscientes de su presencia y
amenaza constante, unidades de la
Royal Navy patrullaban incesantemente por el Atlántico medio, apoyados también por medios de vigilancia aérea con base en la cercana
costa africana. De todos los que pulularon por estas aguas, se conocen
datos de seis hundimientos a través
de los informes posteriores, pues todos ellos, salvo el caso del U-167, que
fue reflotado, yacen para siempre en
las profundidades del oceáno. Estos
Wilhelm Kleinschmidt, que acabó
hundido el 4 de octubre de 1941 por
las cargas de profundidad que le
lanzó el guardacostas inglés “Lady
Shirley” al sureste de la isla de El Hierro. A su desaparición contaba con el
balance de cuatro buques hundidos
(24.176 tn.) y uno dañado con serias
averías (13.037 tn.).
En cuanto al U-118, mandado por
el capitán de corbeta Verner Dreschler, fue eliminado por los ingleses
al norte de Lanzarote. Era del tipo XB y resultó hundido el 12 de junio de
1943 por un avión inglés “Halifax” en
colaboración
con ocho aviones “Grumman”, del noveno escua
drón, procedentes del portaaviones de
escolta “Bo
gue”, cuando
se encontraba
A
El petrolero
alemán “Charlotte
Schlieman”,
rebautizado
“Corrientes”,
suministró a muchos
submarinos.
El U-111, en servicio
desde 1940 hasta
octubre de 1941,
cuando fue hundido
al sudoeste de
Tenerife.
del destructor inglés “Rochester”,
auxiliado por las corbetas “Balsam”
y “Mignonette”, al sureste de la
Punta del Viento, de la isla de Fuerteventura. El siguiente submarino fue
el U-524, que fue trasladado del
Atlántico norte a la zona más meridional de las Azores para unirse a
un grupo de otros cuatro con la
misión de interceptar un convoy
procedente de Nueva York, hundiendo el día 15 de marzo de 1943 al
“SS Wyoming” (8.062 tn); no obstante, las patrullas de escolta impidieron otros acercamientos que fueron más tarde
apoyados por
medios aéreos
llegados el 19 a
la zona del
conflicto.
Posteriormente, el día 22,
un avión Liberator del primer escuadrón
de la USAF, pilotado por el teniente
W.L. Sandorf, lo localizaría y hundiría al sureste de Madeira, entre ésta
y la Graciosa. No hubo ningún
superviviente. El penúltimo de la
lista, el U-543, fue botado en febrero
de 1943, y después de una primera
patrulla infructuosa, al mando del
comandante Jürgen Karl Ferdinand
Hellnegel, recaló en una segunda y
última escala hacia aguas más meridionales del Atlántico, siendo suministrado por el U-488 a unas 700
millas al oeste de Cabo Verde. Posteriormente, el 19 de mayo, esquivó
la trayectoria del portaviones “USS
Trípoli” y sus barcos de escolta, permaneciendo operativo sin resultado
al oeste de Freetown y en el golfo de
Guinea. Al regreso a su base después
de su fallida misión, fue localizado el
2 de julio al suroeste de Canarias por
un avión “Avenger” del VC58, pilotado por F.L. Moore y procedente del
portaviones “USS Wake Island”. Entablado el combate, pese a la fuerte
resistencia antiaérea mostrada por el
submarino, el avión logró alcanzarlo
con dos cargas que lo hundieron de
inmediato, pereciendo toda su tripulación. Hecho que se confirmaría
pasa a la pág. siguiente®
p2
domingo, 13 de julio de 2014, EL DÍA
EN PORTADA
Foto aérea del
U-118 en el momento
de ser bombardeado
al noroeste de
Lanzarote.
profundidad lanzadas por la aeronave
(una a popa y otra a proa), originándole serios desperfectos. Pasada la
amenaza aérea, ya sumergidos, el capitán evaluó la gravedad de los
daños ocasionados. Avería irreparable de uno de los dos motores, que
se quemó por la torcedura de su eje,
y una vía de agua que pudieron taponar provisionalmente con una turafalla. Dado que no estaba en condiciones operativas, el propio Sturm
decidió dirigirse hasta la costa sur de
Gran Canaria para buscar un lugar
apropiado para desembarcar a la tripulación y posteriormente hundir la
nave en aguas profundas. Al atardecer del mismo día, después del primer ataque, al emerger frente a la
zona del Castillo del Romeral, fue
avistado de nuevo por otro avión
“Hudson”, tripulado por el teniente
W. Willets, los sargentos W. Thomas
y F. Poole, y el navegante D. Lipman,
perteneciente al mismo escuadrón
233 que el anterior. Detectada su pre-
dos semanas más tarde, después de
una intensa búsqueda por aviones
“Fortress” del Mando Costero de la
RAF con base en las Azores.
El U-167, hundido y reflotado
Finalmente, abordamos el caso
del U-167, por ser el único reflotado
de los seis hundidos en aguas de
Canarias. Este sumergible era un
modelo de los más avanzados de la
época, ya que poseía gran autonomía
y desde su botadura, en julio de 1942,
estaría en febrero del año siguiente,
al comienzo de su segunda patrulla,
al mando del capitán de corbeta
Kurt Sturm, con órdenes de operar
por el Atlántico sur; sin embargo, una
contraorden lo llevaría hasta la zona
de Canarias para interceptar el tráfico
de buques y convoyes procedentes de
Gibraltar y de la costa norteafricana.
De este modo, el 17 de marzo torpedeó al mercante americano “Molly
Pitcher” (7.200 tn), que era parte del
convoy UGS.6, con destino a Gibraltar, y aunque el barco quedó seriamente dañado por el impacto, se
mantuvo a flote hasta que luego fue
también alcanzado por el U-521 del
teniente Bargstein. Más tarde atacaría también al convoy RS.3, frente a
la costa de Sierra Leona, y después
hundiría al mercante belga “Moanda”
(7.700tn), escapando luego sin problemas de la persecución de los
buques escoltas para situarse entre
las aguas de Canarias y la cercana
costa africana en espera de nuevas
víctimas.
Días después, concretamente el 5 de
abril de 1943, fue avistado por un
avión “Hudson” antisubmarino de la
RAF con base en Agadir, cuando navegaba frente a la península de Jandía (Fuerteventura), muy posiblemente después de haberse suministrado
en la base secreta oficiosa de Cofete.
Advertido de la presencia del avión,
el submarino trató de sumergirse
pero fue alcanzado en plena maniobra por dos de las cuatro cargas de
Un buzo realiza las
primeras
inmersiones en 1951
para reflotar el U-167.
Reflotamiento del
U-167. Se observan
los daños en la proa
por las explosiones.
Foto Santiago Guillén.
sencia, el submarino trató de cambiar
el rumbo, aunque sin decidirse a una
rápida inmersión por los daños recibidos anteriormente. Como consecuencia de ello, fue alcanzado de
nuevo por alguna de las cuatro cargas que le fueron lanzadas antes de
sumergirse lentamente y dejar una
amplia mancha de aceite. Después de
algunas pasadas, el avión desapareció poniendo rumbo hacia su base.
Sin embargo, pese a los daños
ocasionados por ambos ataques, el U167 continuaba aún a flote aunque
navegando con dificultad. De nuevo,
con la llegada de la oscuridad, emergió para recorrer todo el litoral de la
zona de Maspalomas hasta decidirse
por una cala más placentera frente a
la playa de Las Burras, donde llevó
a cabo el desembarco de la mayor
parte de su tripulación, incluido un
único herido, Günter Zahnow, quedándose sólo a bordo los cinco oficiales de puente y máquinas res-
p3
EL DÍA, domingo, 13 de julio de 2014
EN PORTADA
ponsables. Una vez logrado el
objetivo, al no poder maniobrar por
la cercanía de la costa, el capitán inició la ciaboga (marcha atrás) para alejar la nave y hundirla a mayor profundidad, pero un fallo inesperado
originó que se hundiera en aguas
poco profundas antes de que pudiera
conseguir su propósito, por lo que
hubieron de abandonarlo antes de
hundirse con él e intentar cubrir a
nado la distancia hasta la orilla,
aunque fueron recogidos por las
lanchas de los propios pescadores del
lugar.
Posteriormente serían embarcados
a bordo del cuardacostas “Xauen” y
trasladados a Las Palmas, alojándose
una parte de la tripulación en el
petrolero alemán “Charlotte Schliemanm”, rebautizado como “Corrientes”, mientras que la oficialidad lo
hizo en el hotel Atlántico de la ciudad, antes de ser definitivamente
repatriados a Alemania mediante un
Los cuatro
náufragos
supervivientes en
Las Burras, con sus
familias. Foto Juan
Santana.
do en 1961; si bien al no dar resultado
fueron definitivamente sustituidos
y eliminados.
Cincuenta años después del hundimiento del submarino U-167, un
residente alemán con conocimiento
del hecho bélico, se puso en contacto
con la asociación de extripulantes del
citado submarino, fraguándose de
esta forma la idea de organizar un
reencuentro de los supervivientes
con algunos de los pescadores que
los rescataron después del naufragio.
De esta manera, los tripulantes
Johann Henkel, Gerhard Borghard,
Heinrich Backus y Hans Joachim
Fuchs, acompañados de sus esposas,
se reunieron con algunos de los salvadores.
plan ideado por el agregado naval de
la Embajada Alemana en Madrid,
capitán Kurt Meyer-Dohner, al
tiempo que el comandante y su tripulación eran objeto de agasajo por
la nutrida colonia alemana, llegándose incluso a celebrar una fiesta de
homenaje a la tripulación en el Colegio Alemán de Las Palmas. Posteriormente, fueron embarcados en un
remolcador de la compañía Woermann-Olinie hasta fuera del límite de
las tres millas del puerto de Las Palmas, para ser transbordados a los
submarinos U-455 y U-159, en una
En los últimos días
de enero de 1952, el
U167 quedó
fondeado frente al
muelle de la Base
Naval de Las Palmas.
Foto S. G.
operación denominada “Vogel” (pájaro). En cuanto al submarino, permaneció hundido a escasa profundidad hasta diciembre de 1951, fecha
en que el Gobierno encargó su rescate a la Compañía de Recuperaciones Marítimas S.A., realizándose el
reflotamiento el 23 de diciembre del
mismo año.
Puesto a flote de nuevo, los operarios se encargaron de taponar
inicialmente las vías de agua, para
luego ser trasladado a la Base Naval
de Las Palmas por el histórico remolcador “Fortunate” (antiguo guarda-
costas inglés ”Empire Griffin”), en
donde permaneció fondeado algunos
años hasta que fue desmantelado
para ser posteriormente desguazado en la zona del Refugio, al norte
del antiguo edificio del Club Náutico.
En su interior se encontraron tres
torpedos preparados para disparar en
los tubos de lanzamiento. Incluso durante su permanencia a flote fue utilizado para el rodaje de una película.
Finalmente, una vez convertido en
chatarra, se aprovecharon sus motores diésel para instalarlos en el mercante español “Río Umia”, construi-
Conclusión
A más de setenta años de este hecho, volvemos a resaltar la importancia estratégica que para el Estado
español ha tenido y tiene el Archipiélago canario, aunque hoy, afortunadamente para los habitantes
de las Islas la pertenencia económica
a la Unión Europea y la circunstancia de estar acogida militarmente a
la OTAN, los sitúa en el paréntesis
político que determina un Estado
democrático, pese a la dificultad de
la coyuntura económica global en la
que estamos inmersos por nuestra
condición insular.
Sin embargo y al igual que los hechos históricos que acabamos de recordar, toda acción negativa suele
generar una reacción positiva posterior. Esperamos que así sea para la
supervivencia y convivencia de las
futuras generaciones, llamadas a
entenderse por la vía del diálogo.
Bibliografía:
de su submarino” (Diario de Las Palmas).
marinos alemanes en Canarias. (Diario de Las Palmas. 16 septiembre
O’DONELL, César: “Hundimiento del sumergible alemán U167 en aguas
“Defensa de Canarias. El Plan Pilgrim”.
1991).
de la isla de Gran Canaria durante la Segunda Guerra Mundial”, cedido
NARANJO, Rubén. “Maspalomas Espacio Natural”. (Ayto. San Bartolomé
SUÁREZ, Gabriel. El día que Franco traicionó a Hitler. (Canarias7).
por la Revista Española de Historia Militar nº 3, Mayo-Junio 2000.
de Tirajana 1999).
ALDAI LÓPEZ, Ángel L. “Maspalomas Antier”.
U167. en http://www.u-historia.com/
PERDOMO, Facundo. Revista Lancelot, nº 1054. 3 octubre 2003.
NIEVES, David J. “Puesta a flote de un submarino al Sur de la Isla”. (La
RUBIO ROSALES, Jaime: “Canarias en la Segunda Guerra Mundial”.
ROS AGUDO, Manuel. La Guerra Secreta de Franco, (1939-1945).
Provincia 1952.
QUINTANA, Antonio. “Cuatro alemanes evocan en el sur el hundimiento
FERRERA JIMÉNEZ, José. Investigaciones sobre las actividades de sub-
MATURIN, Stephen “Los abastecimientos de U-boots en España”.
p4
C
uatro haciendas que con
el paso de los años han
perdido potestad en el
histórico barrio de Tigaiga
son la de La Fuente, la del
Cuchillo, la de La Coronela y la de La
Era. Bien conservadas están la del
Cuchillo, porque sus dueños la han
querido mantener en pie y por ella
han pasado importantes personajes.
Sin embargo, la de La Era, que cuenta
con una casona muy llamativa, ya ha
ido perdiendo interés, pero siempre
hay quien recuerde cuando allí se vendían los famosos vinos de “La Suerte”.
Hace algunos días un amigo me lo
recordaba, sobre todo, los buenos
escaldones que preparaba Elena, la de
La Era, la carne de conejo en salmorejo, o las costillas con millo y papas
nuevas.
La cocina estaba muy negra debido
que a Elena le gustaba cocinar con leña.
Son recuerdos que no se olvidan
cuando la cocina canaria va perdiendo calidad y entusiasmo, pero donde
siempre ha habido, algo queda, y su
forma de cocinar la practican algunos
familiares.
Tanto en la fecha de San Vicente,
como por las Fiestas de Tigaiga,
Elena se encargaba de preparar buenos platos, ya que su hermano Vicente
era el encargado de aquella gran
finca, que perteneció al general
Machado, personaje muy querido en
Tigaiga. Con la muerte tanto de general como de don Vicente, la cosa se
detuvo. Ahora los herederos de general solo han querido mantenerla y conservarla. Y todos aquellos interesados
van hasta ella, previo permiso del encargado en estos momentos.
De otra hacienda como era la de
La Fuente sólo queda el nombre. En
cuanto a La Coronela, decir que allí
vivieron don Francisco y doña Ana
Machado. En esta casona había un oratorio donde se custodiaba la imagen
de la Virgen del Rosario atribuida a
Pereira, que sus dueños llevaron a la
parroquia de la Concepción. Ellos impulsaron su cofradía, y además ayudaron
a costear el magnífico retablo que el
fuego del incendio devoró el 5 de
noviembre de 1978, siendo esta ima-
domingo, 13 de julio de 2014, EL DÍA
LAS HACIENDAS DE TIGAIGA
y la iglesia de
LA CONCEPCIÓN de LOS REALEJOS
gen milagrosamente rescatada, por un
rosarista. Me dicen que fue Antonio
Betancourt. Otros dicen que fue Kiko
Garrido, que, abriendo una puerta que
se encontraba detrás del retablo y
entrando por la sacristía sur, pudo salvarla de las llamas. Fue la única imagen rescatada de aquel incendio. Y una
Dolorosa de Rodríguez de la Oliva que
en ese momento se encontraba en la
casa del Padre Siverio, quien le estada
realizando algunos retoques.
La lámpara central, de cristal de Bohemia, se salvó, porque estaba en la sacristía, y hay quien afirma que fue regalada por los hermanos y hermanas del
Santísimo de Icod el Alto, pero no hay
nada escrito sobre esta posible donación. Otros objetos de culto fueron rescatados a tiempo, pero se perdieron
valiosas obras de arte, como una Dolorosa de Luján Pérez, o una Virgen de
Candelaria, talla de Montañés; un San
Juan de Estévez, y una preciosa imagen de la Virgen de los Afligidos de Pérez
de Andujar y Cantós, entre otras
obras de gran valor artístico, como la
custodia franciscana, otra pequeña de
autor desconocido, etc.
Anteriormente se conocía a la parroquia de La Concepción de Los Realejos como “la catedral del Norte”, por
su elegancia arquitectónica, y un día
desafortunado como lo fue el ya
señalado acabó con este tesoro religioso,
pero la piedad del pueblo no decayó,
y su reconstrucción se la debemos al
padre Siverio, quien, en una reunión
en el teatro cine Realejos, fue elegido
por la multitud como presidente,
para poner en marcha la recuperación
del templo del que vemos hoy mirando
al cielo, como no podía ser de otra
manera.
Don José Siverio Pérez aún no ha sido
reconocido popularmente como se merece, y algunos cercanos le criticaron
cuando el Ayuntamiento decidió ponerle su busto en la que antes de llamó
plaza de General Franco, y la conocemos
hoy como plaza de La Iglesia. Con la
donación de nuevas imágenes por los
fieles se va llenando el hermoso templo realejero, muchas de ellas de Ezequiel de León, sin olvidar el gran trabajo de la techumbre del templo a cargo
de los afamados carpinteros Hernández Siverio.
En fin, mucho hay que escribir sobre la pérdida de la iglesia y la reconstrucción de la que ante nuestros ojos
ha llamado la atención de muchos foráneos y visitantes.
También devoró el fuego la artística
urna, pero los hermanos Siverio lograron construir una de similares características a la que se llevó el fuego.
A ellos también se debe parte del
nuevo retablo del Rosario, un trabajo
magníficamente logrado, así como el
artesonado que vemos. También es importante recordar que con el siniestro señalado se perdió el artesonado
de la capilla mayor, cubierto de pan
de oro, como asimismo el del Rosario.
Algunos calcularon que las pérdidas pudieron rondar los 300 millones
de las antiguas pesetas. Y el solar que
quedó tras el incendio algunos pedían
que se construyera en él un polideportivo, una pista de tenis o un
campo de fútbol.
Gracias a la acción de los vecinos se
pudieron rescatar casullas de gran valor
y ornamentos sagrados, ya que estaban el la sacristía norte, a donde el fuego
no llegó.
Texto: Esteban
Domínguez
Hoy, el templo reconstruido mira al
cielo y sus campanas sonaron con mayor
gloria aquel 27 de junio, cuando nuevamente se abrieron al culto. Acto emotivo y que fue bendecido por el
obispo don Felipe Fernández.
Sin lugar a dudas, reconstruir este
nuevo templo fue tarea de todos, y para
ello se dispuso de tómbolas en las distintas fiestas de municipio y ventorrillos
benéficos. También se recaudaron fondos por los distintos municipios.
Todos unidos como una piña hemos
logrado que “la catedral del Norte” volviera a resurgir de las cenizas. Y no cabe
duda de que el Padre Siverio se echó
sobre sus hombros llevar adelante este
proyecto y no perder estas viejas e históricas paredes, de columnas remordidas por el fuego; por eso aquí pueden servir de testimonio estas fotografías, porque vale más una imagen
que mil palabras.
Y como es normal en estos casos,
entre luces y sombras, la obra se hizo
realidad. Los realejeros deben estar muy
satisfechos por lo que nuestros ojos
ven y el corazón agradece.
Hoy cuenta esta parroquia matriz con
retablos tan importantes como el de
la Capilla Mayor, el del Rosario, el del
Nazareno, el de Afligidos, que está a
punto de ser terminado, el del Calvario,
que aún no ha concluido, y últimamente
se ha comenzado a construir por los
hermanos Siverio el del Señor de La
Cañita. Y así, granito a granito, la parroquia de la Concepción del Realejo de
Abajo ni es un campo del fútbol ni una
pinta de tenis. Es lo que sus fieles deseaban: un lugar de culto a Dios, gracias
a ilustre realejero don José Siverio Pérez
y a cuantos con el pusieron el hombro en tan digna tarea.
p5
EL DÍA, domingo, 13 de julio de 2014
LA INFIDELIDAD
Cuando en la pareja no solo hay dos
R
esulta complicado manejar un constructo que está tan ligado a aspectos
sociales, culturales, individuales y religiosos como es la infidelidad. No todas las culturas ni todas las religiones, ni tan
siquiera todas las personas, tienen el
mismo concepto de infidelidad, por
lo que, solo para poder entendernos,
me referiré aquí a lo que en nuestra
sociedad actual consideran la mayoría de las personas como infidelidad.
En líneas generales consideramos
infiel a aquella persona que, estando
de forma más o menos estable y comprometida, mantiene una relación con
otra persona de forma sexual y/o afectiva y eso genera un conflicto en la
pareja. Esto es fundamental puntualizarlo porque muchas personas aceptan sin problemas que ambos miembros de la pareja tengan relaciones con
otras personas, por lo que, en estos
casos, no hablaríamos de infidelidad.
No voy a entrar aquí en datos estadísticos sobre porcentajes, distribución por sexos…, porque, al final, cuando uno sufre la infidelidad en propia
piel, no suele ser de mucho consuelo
pensar en el número de personas a las
que les ocurre lo mismo.
Podríamos establecer dos tipos de
situaciones:
a) Infidelidad esporádica o puntual:
basada fundamentalmente en el sexo
y que resulta fácil de ocultar. No existe
vinculación afectiva y no tiene ninguna consistencia en el tiempo
b) Relación comprometida: es duradera y con gran vinculación. Suele ser
la situación de amante con compromiso (incluso, a veces, mayor que con
la propia pareja “oficial”). Este tipo
de historias son las que tarde o temprano se descubren y causan mucho
sufrimiento a los tres vértices del triángulo, pues el/la amante tiene la expectativa, e incluso la promesa, de que
el/la infiel dejará a su pareja, hecho
que casi nunca llega.
Las causas de la infidelidad son muchas y variadas, entre otras:
–Sensación de vacío, soledad, tristeza y necesidad de “sentirse vivo”.
–Búsqueda de aventura, nuevas experiencias, necesidad de sentirse
deseado/a.
–Fin del enamoramiento y expectativas truncadas. La situación inicial
de enamoramiento suele asemejarse
a un estado de enajenación mental transitoria y, una vez que pasa, aparece
la realidad. No siempre nos encontramos con la persona que creíamos
tener, disminuye la intensidad en la
relación, aparece la rutina diaria,
otras obligaciones…, causando, a ve-
ces, cierta decepción.
–Vida sexual deficiente e insatisfactoria.
–Baja autoestima, inseguridad,
escasa asertividad.
–Prepotencia, egolatría.
–Miedo a perder la libertad, la
juventud, la capacidad de enamorar.
–Pérdida o gran disminución de la
comunicación en la pareja, de actividades de ocio compartidas, de intimidad y complicidad.
–Venganza por infidelidades anteriores.
–Exceso de control y celos por
parte de la pareja.
Cuando se está produciendo una
situación de infidelidad por parte de
uno o de ambos miembros se dan
hechos en el/la infiel como:
Reducción del tiempo compartido
y aumento del propio (más tiempo fuera
de casa por trabajo, por salidas con
amigos/as…).
Cambio en los horarios y costumbres.
Más atención por la propia imagen
(ejercicio físico, ropa, estética…).
Aumento del deterioro de la comunicación.
Despreocupación y desinterés por
la pareja y el sexo.
Alegría, buen humor y mejor
aspecto.
Atenciones inusuales hacia la pa-
Texto: Carmen
García Olid
Psicóloga
Gabinete Practis
www.reflexionesenspicologia.com
reja, como más regalos, más llamadas
o gestos cariñosos, especialmente al
principio, cuando aparecen los sentimientos de culpa.
Actitudes de indiferencia hacia la
pareja o, incluso, críticas, trato duro
o cruel..., sobre todo cuando existe
una relación extrapareja comprometida y se está pensando en dejar la “oficial”.
Obviamente, este tipo de signos no
implican con seguridad una situación
infiel, pero sí suelen acompañarla. El
caldo de cultivo siempre es una relación de pareja deteriorada, por lo que,
más que centrarnos en los hechos anteriores, deberíamos alertarnos previamente cuando comienza el daño
en la comunicación, se disminuye el
tiempo juntos, son cada vez menos
los momentos de ocio compartidos,
no prestamos/no nos prestan atención
a los sentimientos y actitudes de la
pareja… porque siempre es mejor prevenir que curar.
Descubrir la infidelidad
El descubrimiento de la infidelidad
(real, no imaginaria) supone una
grave sacudida porque se vive con humillación, dolor, estupor… se siente
que los cimientos se mueven, que todo
lo vivido y compartido es una mentira, que la estabilidad y expectativas
que se tenían de vida en común se des-
moronan, se sufre un duro golpe en
la autoestima y se pasan por emociones
como dolor, rabia, agresividad, incredulidad… Todo esto es normal puesto
que se destruyen los valores básicos
en la pareja: respeto, sinceridad y confianza.
De repente, saltan en el recuerdo
imágenes, hechos o palabras que
nos daban esas pistas de que algo estaba
pasando y que no queríamos o no podíamos ver. Muchas cosas, hasta entonces inconexas, empiezan a tomar
sentido y aparece esa sensación de ser
tonto/a, de haber sido manipulado/a
o engañado/a. Es cuando la infidelidad da paso a la deslealtad. Hay muchas
personas que pueden perdonar una
infidelidad pero muy pocas perdonan
la deslealtad. Una situación esporádica puede comprenderse y/o aceptarse, pero la deslealtad implica una
mentira constante, una manipulación,
un insulto a la inteligencia de la pareja,
muy especialmente cuando se ha pillado al/a la infiel y aún así continúa
negándolo, mostrándose incluso
ofendido/a por ser puesto en duda y
dándole la vuelta a la situación acusando a la pareja de paranoico/a, celoso/a y controlador/a.
A pesar de todo ese dolor, hay una
serie de recomendaciones básicas que
ayudarían a la persona traicionada para
que el impacto sea menor:
-Mantener la calma y no tomar ninguna decisión de forma precipitada
o impulsiva.
–Si hay sospechas, hay que esperar,
observar, mantenerse en calma por si
se trata de algo que no es lo que parece.
–Cuando aparece la evidencia y una
vez que se está más o menos calmado/a,
hablar con la pareja lo más tranquilamente posible, para abordar las causas, los sentimientos hacia la tercera
persona, las expectativas. Es especialmente importante tomarse un tiempo
para reflexionar acerca de los argumentos que se dan, de los sentimientos
propios y de la pareja y, sobre todo,
sobre si existe deseo de mantener la
pareja o no.
Si se decide cortar la relación, debe hacerse tras ese periodo de escucha y reflexión y procurar hacerlo de
la forma menos dolorosa posible. Nunca
debe involucrarse a la tercera persona.
Si se llega a la conclusión de que
ambos desean seguir con su relación,
lo mejor es iniciar una terapia de pareja.
Los amigos y familiares tendrán sus
opiniones y puntos de vista pero es
muy probable que hagan más mal que
bien. La intervención profesional de
un/a psicólogo/a es fundamental para
recomponer la comunicación.
Recordar que para superar la infidelidad no hay que seguir acusando
y reprochando. Cierto es que perdonar no es olvidar, sino aceptar; y aceptar es asumir que los hechos pasados,
los errores, no pueden eliminarse y
recordarlos solo harán daño y aumentarán la brecha que separa a las personas. La relación de pareja es responsabilidad de dos y la infidelidad
no surge de una relación sana, viva
y gratificante para ambos.
p6
domingo, 13 de julio de 2014, EL DÍA
CLAVES DEL CAMINO
Experiencia cercana a la muerte
LA ÚLTIMA PUERTA
Al borde de la muerte con
el Dr. Miguel Ángel Pertierra
Texto:
José Gregorio González
A
unque desde la ciencia
más académica y jerarcodependiente se han esbozado varias explicaciones “racionales” que,
de forma bastante parcial e incompleta, pretenden explicar y reducir
las complejas experiencias cercanas
a la muerte (ECM) a los efectos de la
falta de oxígeno o a chispazos eléctricos que se originan en estas situaciones límite, el fenómeno, con sus
desafiantes manifestaciones de no
localidad de la conciencia y objetividad de la información aportada por
los protagonistas, mantiene su pulso
a la razón y a los convencionalismos.
La casuística se incrementa a
pasos agigantados, mientras se aberruntan escenarios científicos que,
al menos en el marco teórico, pueden dar acomodo a lo que por ahora
sigue siendo inexplicable, y precisamente por ello, injustamente despreciado o ignorado. Miguel Ángel
Pertierra es médico, con una sólida
formación científica y una experiencia
profesional que, de manera innata,
teóricamente, le tendría que situar
en una posición crítica con estas vivencias. Sin embargo, su curiosidad, su
Las experiencias cercanas a la muerte, en las que una persona
experimenta la sensación de abandonar su cuerpo y mantener con
plenitud su conciencia, para posteriormente avanzar por una superficie
tubular al final de la cual se vislumbra una luz, constituyen hoy por
hoy un contundente desafío para la ciencia moderna. Muchos hablan
de cómo salen a su encuentro familiares fallecidos y entes espirituales,
mientras que no faltan los que retornan con profundos cambios
personales. El médico Miguel Ángel Pertierra ha vivido en sus propias
carnes esta desconcertante experiencia, que incluye en su libro
“La última puerta”
necesidad de saber y su honestidad
le llevaron a indagar en éste y en otros
terrenos en los que lo inexplicable
se manifiesta sin importarle nuestros
prejuicios. Por entonces no podía saber
que también él se convertiría en un
protagonista de lo insólito, y que esa
vivencia personal la incluiría en
una apasionante monografía sobre
las ECM, “La última puerta”, de editorial Oberón.
–¿Qué ha supuesto la publicación
de “La última puerta”?
–Cuando empecé a recoger y estudiar cada uno de estos casos, nunca
pensé en la posibilidad de plasmarlos en un libro como “La última
puerta”, que, bien como fruto de la
casualidad o más bien de la causalidad, ha culminado con su publicación. Para mí es la plasmación de
un conjunto de investigaciones llevadas a cabo durante más de tres lustros, que me ha permitido trasmitir
al lector una serie de estudios en el
campo apasionante que hay en el
límite de la vida.
–¿Qué reacciones ha generado el
libro?
–Hasta ahora, muy positivas, en
todos los ámbitos, incluyendo el sanitario, ya que es una forma de acercar estas experiencias al público en
general. Son muchas las muestras de
afecto y apoyo de las personas que
lo han leído, pero incluso si se dan
críticas en contra serán bien recibidas si se formulan de manera respetuosa y constructiva.
–Para alguien del ámbito científico
y médico como usted no habrá
resultado fácil tener visibilidad den-
tro del mundo del “misterio”. ¿Ha
corrido con suerte o por el contrario se ha sentido desplazado, ignorado?
–Precisamente, las personas que
estamos en el ámbito científico tendríamos que estar más en contacto
con lo que se ha llamado “el mundo
del misterio”, porque muchos de los
campos en los que nos movemos e
investigamos son entendidos como
tales y aquello que hoy pueda ser considerado como una entelequia e
irreal mañana será entendido como
una de las “verdades irrefutables” de
la ciencia. El ser desplazado o no
depende mucho del ego de cada uno,
porque si estás seguro de que realizas las cosas desde un punto de vista
serio y honesto, no hay desplazamiento que valga, aunque las corrientes de investigación se desplacen prioritariamente hacia otros campos.
–¿Las experiencias cercanas a la
muerte son más frecuentes ahora que
antes, tal vez por la tecnología en resucitación artificial, o porque la gente
se siente más cómoda contado sus
experiencias ahora y por tanto
emerge una casuística preexistente?
–Por las investigaciones y mi experiencia personal yo diría que ambas
cosas. Por una parte, la RCP, o reanimación cardiopulmonar, es cada
vez más frecuente y gracias a ella se
salvan más vidas de ese punto de no
retorno; y por otra, el tema de las ECM
ha dejado de ser tabú en la sociedad
y en el entorno científico y sanitario, por lo que se habla de ellas abiertamente y las personas que las tienen se encuentran más cómodas contando sus experiencias.
–Tras estudiar las ECM, ¿piensa
usted que estas experiencias apuntan directamente a la trascendencia
del ser humano, a la existencia de un
componente inmaterial y consiente
p7
EL DÍA, domingo, 13 de julio de 2014
CLAVES DEL CAMINO
que sobrevive a la muerte física?
–No sólo lo pienso, sino que tengo
la certeza de que es así. La ECM no
es más que la punta del iceberg que
muestra una pequeña parte de una
realidad que se halla detrás de esa
“última puerta” de la vida, o de la
“primera puerta” de una realidad que
todavía desconocemos en gran parte,
pero que nos hace atisbar la existencia
tras la vida física de una forma distinta y con algo que, para mí al menos,
es fundamental: la persistencia de
la identidad de la persona tras el fallecimiento del cuerpo físico.
–¿Considera factible que la idea de
trascendencia, conceptos como
“vida más allá de la muerte”, “resurrección al final de los tiempos”,
inmortalidad, etc. estén directamente relacionados con que se
hayan vivenciado las ECM desde
antaño?
–Sin entrar en alegatos de creencias de ningún tipo, habría que
considerar que el concepto de trascendencia está directamente relacionado con las ECM, así como la existencia de una realidad más allá del
cuerpo material. Lo que desde luego
habría que definir primordialmente
es qué es lo que ocurre después, pues
es como el símil de la persona que
está en una playa, a la orilla del océano,
y solo conoce el borde del mismo sin
vislumbrar lo que hay en su interior.
–Sin embargo, y como alternativa
a los que entienden que hay un
componente trascendente, existen teorías más racionales que sitúan este tipo
de fenómenos en la esfera de la falta
de oxígeno, estallidos bioquímicos y
eléctricos, etc. ¿Cuáles son las evidencias que invitan a ser escépticos
con estas posturas racionales?
–Bastantes son las evidencias que
hacen que muchas de las ECM puedan ser explicadas desde el punto de
vista científico, y desde luego, una
parte de mis investigaciones ha
estado encaminada a descartar aquellos casos en los que eso era lo factible, dado que la respuesta racional
es la primera que debemos aceptar.
Pero siendo esto así, no significa que
esa respuesta racional sea la única,
ya que hay muchos, muchos, casos
en los que aun reconociendo nuestro desconocimiento de aspectos de
la fisiología humana, no podemos atribuir a alteraciones orgánicas ciertos
eventos, ni tampoco al producto de
la casualidad.
–En la actualidad ¿hay algún estudio que desde su punto de vista resulte más interesante, o especialmente
revelador, en esta materia?
–Muchos son los estudios y proyectos que están en marcha y que son
muy interesantes, como el llamado
“Proyecto Túnel”, del Dr. José Miguel
Gaona; o el estudio AWARE, del Dr.
Sam Parnia, así como múltiples
investigaciones realizadas por muchos
científicos a lo largo del planeta y de
las que en un tiempo breve tendremos noticias. Desde luego quien se
introduce en la investigación de este
tema no suele abandonar en su
El doctor Miguel
Ángel Pertierra.
Portada del libro
“La última puerta”
intento de llegar al conocimiento más
profundo, a la respuesta de la pregunta de las preguntas: qué hay detrás
de la muerte física.
–En estos días se edita en España
un libro precisamente de Sam Parnia, “Resurreciones”, en el que propone reconsiderar la temporalización
del proceso de la muerte, algo que
ya parecía tenerse en cuenta por diversas culturas del pasado. ¿Qué opina?
–Sam Parnia es uno de los investigadores más importantes de estas
experiencias y su bagaje personal y
científico lo avalan, horadando cada
vez de una forma más profunda en
el proceso de la vida y la muerte. En
cuanto a la temporalización de la
muerte, o el “efecto Lázaro”, es uno
de los grandes retos que tiene el ser
humano desde los albores del tiempo:
la resucitación humana. Debido a los
medios y conocimientos que tenemos, vamos avanzando cada vez más
en la noción sobre la vida y la
muerte, la posibilidad de vencer a
nuestro antojo y necesidad a ese reloj
de arena que todos damos vuelta al
nacer y que más tarde o más temprano
se agota.
–¿Cambia realmente la vida de quienes viven estas experiencias, o es un
tópico? Y de ser auténtico ese cambio, ¿es explicable como consecuencia de haber estado en una situación extremadamente crítica,
más que por haber vivido la ECM?
–El cambio existe y está ahí, de una
u otra forma y de una u otra manera.
Cada uno lo vive y lo siente diferente
dependiendo de la idiosincrasia
personal, pero en todos y cada uno
de los casos he podido encontrar cambios personales muy profundos de
distinta índole. Desde mi punto de
vista, son atribuibles a las ECM
porque desde luego he podido constatar, por mi profesión, otros muchos
casos tan impactantes y críticos
que no han estado acompañados de
ECM, en los que ese cambio no ha
existido en ninguno de los campos.
Creo que habría que plantearse la pregunta de qué es lo que ocurre en las
ECM, que la persona transmuta
hasta experimentar en muchos casos
una metamorfosis de su vida.
–¿Incluye ese cambio el desarrollo de ciertas habilidades que podríamos llamar “psíquicas” o es un
tópico?
–Para mí es uno de los conceptos
y realidades que más me ha costado
aceptar: la existencia de una serie de
capacidades, desconocidas hasta
ese momento por la persona que te
lo relata. Sobre todo la capacidad de
precognición, o quizás de afinado discernimiento, que se ha presentado
en muchas de estas personas, independiente de la condición particular de cada una de ellas. Otros refieren otra serie de capacidades muy
variopintas pero que, al no poder constatarlas por el momento, no debo más
que proponerlas como otra línea de
investigación.
–Casi nunca se habla de ECM negativas… los porcentajes son muy bajos,
¿qué opina al respecto? ¿La gente evita
hablar de ellas o la ECM es mayoritariamente placentera? ¿Ha encontrado
algún caso de este tipo?
–Existen, están descritas, y en mi
caso he tenido la ocasión de encontrarme un episodio de este tipo
para el que, como en todos los
casos, no tenemos explicación por
el momento de qué es lo que ocurre
para que así haya sido. Sí podemos
sacar en “beneficio” que la existencia
de las mismas podría desbaratar en
gran parte la explicación racional y
uniforme de las ECM, porque los
pacientes o personas que las han experimentado también han recibido
un tratamiento estándar por parte del
colectivo sanitario, de manera que
deberían haber respondido homogéneamente al tratamiento o a las
acciones efectuadas. En cambio,
presentan circunstancias y actitudes
totalmente diferentes a la mayor parte
de los casos. Ante la pregunta ¿qué
ocurre aquí?, seguimos sin tener
repuesta plausible, aunque están ahí
y son un desafío a explicar.
–¿Ha sido fácil confesar en un libro
y retratar su propia ECM? ¿No le puede
traer más problemas, en el ámbito
de la credibilidad frente a los hipercríticos, que beneficios? Le pueden
acusar de estar condicionado.
–Ni ha sido, ni fue nada fácil
poder reconocer y relatar el haber
tenido una ECM, pero no solamente
en el ámbito público, sino también
en el familiar y personal. A mí me
costó más de ocho meses contar esta
experiencia a mi entorno más cercano, que contaba con personal
sanitario de toda índole. La credibilidad o no de lo relatado me es del
todo indiferente, ya que para mí ha
sido y es una realidad irrefutable que
por mor del destino ha tenido la oportunidad de hacerse pública, aunque
no está en mi intención, como en cualquier estudio científico, la búsqueda de una aceptación gratuita a
toda costa. Contar o no mi experiencia
ha sido un gran reto para mí, bien
para dejar que se pierda en los anales del conocimiento más cercano o
para trasmitirlo para aquellos que
quieran conocer una verdad que está
ahí y que, aunque se niegue una y
otra vez, no va a dejar de estar presente.
p8
domingo, 13 de julio de 2014, EL DÍA
www.eldia.es/laprensa
Revista semanal de EL DÍA. Segunda época, número 936
EN PORTADA
TURISMO
El último Balón
de Oro en su
último gol
Le puedo asegurar, querido lector,
que esta semana mientras pintaba este retrato del hombre que inventó el futbol –nadie puede negar esta denominación– he
activado involuntariamente la mente 60
años atrás y me he visto en el estudio de
casa de mis padres, apoyado sobre el caballete-mesa articulado de dibujo, con un
papel blanco, pequeños tinteros de la denominada tinta china, con una plumilla
entre las manos, lápiz de mina afilada, una
goma blanca de marca “Milán”, un arrugado paquete de cigarrillos “Bisonte” y lo
más importante, al lado de una radio de
madera marrón de las de capilla donde escuchaba al comentarista Matías Prat cantar un ¡gooool!
Esta semana se ha marchado otro de los
grandes, parece como si toda una generación de grandes se encontrara en una
imaginaria estación del ferrocarril de la vida
y fueran subiendo pausadamente a los vagones para emprender ese viaje del que todo
desconocemos y es por desgracia muy largo.
Alfredo Di Stéfano, como ha dicho el periodista Carlos Toro, “fue en sí mismo el fútbol, era una fusión mágica del juego y el
jugador; en una simbiosis, en una identificación reciproca de resonancias inmortales”. Y yo me preguntó: ¿no se estarán
dando cuenta –quien corresponda– de que
hay que comenzar a valorar y dar nombre a toda esta generación de grandes personajes en todos los campos que se nos
están marchando y reconocerlos, lo
mismo que se hizo con la generación del
27 o la del 39?
Alfredo Di Stéfano Laulhé nació un 4 de
julio de 1926 en Argentina, concretamente
en Buenos Aires. Fue jugador del fútbol
desde niño, Martín Fierro era su héroe, como
siempre recordaba, y el fútbol su vida. Pateó
primero en modestos equipos de barrio
y, cumplidos los 18 años, se asomó victoriosamente a una prueba en el fabuloso
River Plate de La Máquina, la venerada
delantera formada solo por grandes.
Un periodista entusiasta le acuñó líricamente el apodo de “la Saeta Rubia” y
la afición de River cantaba a coro: “¡Socorro, socorro, que viene la Saeta con su propulsión a chorro”! Santiago Bernabeu, otro
mítico personaje cuyo nombre perdura en
el primer estadio de España, lo trajo a Madrid
y quedó deslumbrado por su juego. De su
trayectoria en España ya se ha escrito todo
y de su calidad humana también, mas permítame, lector, que le recuerde la curiosa
anécdota de un hombre sin complejos que
llegó a hacer publicidad femenina vestido
con medias de mujer.
José Carlos Gracia
Alfredo Di Stefano
(técnica mixta sobre papel de dibujo de 70 cmx50 cm)
Descargar