58 LATERCERA Viernes 29 de abril de 2016 Sociedad Espectáculos Chuck Norris vs Communism: Rumania, los 80 y la locura por los VHS de acción R El documental estrenado en Netflix, cuenta la historia del tráfico de cintas de acción. R El registro muestra los doblajes que una mujer hizo a más de mil películas prohibidas. RR Una escena de Chuck Norrris vs Communism. FOTO: PROMOCIONAL Matías de la Maza Casi 30 años antes de la saga Los indestructibles, nombres como Sylvester Stallone, Chuck Norris, Arnold Schwarzenegger o JeanClaude Van Damme ya se habían juntado para derrotar a uno de los enemigos de Estados Unidos. Por lo menos, eso es lo que postula el documental Chuck Norris vs Communism, de la debutante Ilinca Calugareanu, que tras pasearse por múltiples festivales en 2015, este mes llegó a Netflix. Co producido por Passion Pictures, el estudio detrás de Searching for Sugar Man, el registro cuenta a través de entrevistas y recreaciones la historia de la victoria más curiosa que Estados Unidos consiguió contra la Unión Soviética. Corría el año 1985 y Rumania estaba bajo el régimen comunista de Nicolae Ceausescu. Bajo la censura propia de los países tras la Cortina de Hierro, la televisión trans- mitía casi exclusivamente mensajes oficialistas. Irina Nistor trabajaba traduciendo el contenido extranjero que entraba al país para el comité censor del gobierno, quienes le instruían qué partes cortar o alterar. Eso hasta que un día un colega se le acercó con una propuesta de un misterioso empresario, Teodor Zamfir, quien le solicitó algo inédito: doblar películas norteamericanas prohibidas, sin cambiar el diálogo. Ese fue el punto de partida para un cambio radical en la cultura rumana. Zamfir empezó a importar como contrabando cientos de cintas VHS con títulos como Terminator, Soldado Universal, Scarface, El Excorcista, Purple rain y más. Comenzó a correrse el rumor y el interés por este material fue creciendo. La población comenzó a organizar secretamente funciones en departamentos con cintas que mostraban un mundo que los rumanos no conocían. Héroes increíbles CRITICA DE SERIES THE GIRLFRIEND EXPERIENCE Isabel Plant Editora de Espectáculos S contra villanos que les recordaban a sus gobernantes, autos deportivos, grandes banquetes, romances épicos y más. En la base de todo, la aguda voz de Nistor, que doblaba todos los personajes, masculinos y femeninos. Las cintas de acción fueron las que mayor impacto generaron. “Salíamos distintos de verlas. Queríamos ser héroes”, dice uno de los testimonios del documental, que recuerda su infancia levantándose a las 6 AM para imitar la rutina de entrenamiento de Rocky. El mensaje nacionalista del cine norteamericano de la época no era exactamente sutil: Stallone corriendo por las calles de Filadelfia llenas de banderas de Estados Unidos, o Chuck Norris mirando a la cámara y sonriendo mientras hace estallar un complejo vietnamita. “Sabíamos que era propaganda, pero que sea no era su propaganda”, dice otro entrevistado, con “su” viniendo a ser el gobierno de ERIES donde el ambiente, la atmósfera, están tan bien hechos que se transforman en un personaje más: Mad Men, Game of Thrones, a veces The Leftovers, Girls, Fargo, y, ahora, The girlfriend experience. La última serie, recién estrenada, muestra a una ciudad de grises y concreto, líneas rectas y estructura, por donde la protagonista se mueve misteriosa. Pareciera siempre estar en control de sí misma y pareciéramos nunca terminar de saber lo que está pensando. Y en medio de estos restaurantes de vidrios y acero, de oficinas de abogados cuadradas, ella, silencionamente, rompe las reglas y márgenes. El título de la serie viene originalmente de la película de 2009 de Steven Soderbergh, quien aquí hace de productor ejecutivo, dejándole la historia y dirección a la estupenda dupla de Lodge Kerrigan y Amy Seimetz. Las similaridades entre pantalla grande y RRChuck Norris en su época de gloria. FOTO:ARCHIVO Ceausescu. A ratos cómico por la particularidad de la situación, el documental no deja de lado la tensión y peligro que vivieron sus protagonistas reales. Tanto Zamfir como Nistor co- chica son sólo inspiración: la cinta seguía a una escort de clase alta en Estados Unidos pre Obama. Acá, es una joven estudiante de Leyes, que mientras hace una pasantía en una oficina de abogados, decide probar como acompañante para hombres maduros y adinerados. Más que sólo un momento de cama, lo que vende es oreja y simular, o a veces realmente sentir, interés por sus problemas. Una polola a sueldo. La actriz protagónica es uno de los grandes aciertos de una serie absorbente. Riley Keough, a quien pueden haber visto en la última Mad Max; también su cara les puede parecer familiar porque a su familia sí que la han visto: es la hija de Lisa Marie Presley, nieta de El Rey y Priscilla. Keough parece imperturbable incluso cuando está perturbada, y entre las maquinaciones que hace para dejar de rendirle cuentas a la madame que la reclutó para el negocio, la cara de buena chica que le pone a sus clientes y el goce que menzaron a ser monitoreados de cerca y la dictadura rumana inició fuertes redadas incautando reproductores de VHS. Aun así, el interés por estas películas fue tal, que hasta altos mandos de la po- licía secreta del país comenzaron a ser clientes frecuentes del negocio clandestino. Entre 1985 y 1989, Nistor dobló más de un millar de películas. Su voz se transformó en algo más célebre que cualquier rostro de Hollywood para la población rumana. Más voces se sumaron a la traducción a medida que el negocio fue creciendo, pero la clientela prefería la de la mujer. En diciembre de 1989, una masiva revolución derrocó al régimen comunista. Chuck Norris no estuvo presente (que sepamos) y la causalidad con respecto al contrabando de VHS puede parecer antojadiza. Pero por lo menos, coincide que durante cuatro años los rumanos comenzaron en masa a recibir un mundo de cultura pop que antes no tenían. Una vez llegada la democracia, Nistor se transformó en crítica de cine. Hasta hoy, su voz es mucho más célebre que su rostro.b RRRiley Keough en The girlfriend experience. FOTO:FOX siente con el sexo -es una serie con mucha piel, que a veces se ve hot y otras veces fría-, siempre pareciera tener un secreto. Es como si no sintiera, por lo mismo se vuelve intrigante. La trama gira en torno a su doble vida, enredos de oficina entre sus jefes, los clientes que la requieren y la amiga loca que fue la que la introdujo a todo esto. No es una serie rápida, y lo que importa aquí no son ni los detalles de la historia, ni los giros, ni si- quiera el sexo (aunque por supuesto da para debatir sobre la moralidad o inmoralidad de, literalmente, prestar el cuerpo). Lo que sí entrega es un mundo: una sensación atmosférica, guiada por un personaje principal que incluso cuando hace cosas normales y corrientes, no permite apartar los ojos de ella. Disponible en FOX Play y los domingos a la medianoche por FOX1.