Jorge Francisco Sáenz Carbonell y Pedro Ramírez Sierra. El

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Jorge Francisco Sáenz Carbonell
Pedro Ramírez Sierra
El Canciller
Lizano
Serie Yvonne Clays N° 24
Ministerio de Rel aciones Exteriores y Culto de Costa Ric a
Instit u to del S erv ic io E xter io r
M anuel M ar í a de Per alta
92
L789S
SáenzCarbonell Jorge Francisco, 1960 El Canciller Lizano / Jorge Sáenz Carbonell y Pedro
Armando Ramírez Sierra. __ San José, CR: MREC, Instituto
Manuel María de Peralta, 2015.
192 p. : 21x14 cm. __ (Serie YvonneClays, no. 24)
ISBN978-9977-76-034-6
1. BIOGRAFÍAS. 2. COSTA RICA. 3. HISTORIA.
4. CANCILLERES. 5. SATURNINO LIZANO
GUTIÉRREZ.
I. Título. II. RAMIREZ SIERRA PEDRO ARMANDO.
III. Serie.
lggc
Edición aprobada por el Instituto del Servicio Exterior Manuel María de Peralta.
Primera Edición: setiembre 2015.
Revisión de pruebas: Jorge Francisco Sáenz Carbonell y Luis Fernando Ceciliano Piedra.
Fotografía de la portada: Fotografía, Pedro Ramírez Sierra.
Edición: Charles S. Hernández Viale.
Diseño y diagramación: Imprenta Nacional.
Preimpresión: Imprenta Nacional.
Impresión: Imprenta Nacional.
Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, Instituto del Servicio Exterior Manuel María de
Peralta, San José, Costa Rica. Avenida 7-9, Calle 11-13, San José. Teléfono (506) 2539-5487.
www.rree.go.cr
El texto es propiedad exclusiva del autor y no debe ser reproducido sin su autorización. Asimismo,
no constituye un documento oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores y Culto, por lo cual
las opiniones expresadas en él son de exclusiva responsabilidad del autor.
Saturnino Lizano Gutiérrez
(1826-1905)
El Canciller Lizano
Índice
DEDICATORIA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
INTRODUCCIÓN. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
CAPÍTULO I.- EL HOMBRE. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
1.-
2.- 3.- 4.- 5.- Los Lizano y los Gutiérrez.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Actividades comerciales y agropecuarias.. . . . . . . . . . . . . . . . .
Los hijos en Puntarenas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Matrimonio con doña Angélica Guardia Solórzano
y descendencia Lizano-Guardia.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Otras actividades. La Junta de Caridad. La masonería y
el catolicismo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
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CAPÍTULO II.- LOS AÑOS ANTERIORES (1860-1876). . . . . . 38
1.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por primera vez.. . .
2. – Miembro de la junta calificadora de Puntarenas para
las elecciones de 1868.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3.- Representante electo por la comarca de Puntarenas.. . . . . . . .
4.- Diputado propietario por la comarca de Puntarenas en la
Convención Nacional Constituyente de 1870. . . . . . . . . . . . .
5.- Jurado de la comarca de Puntarenas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
6.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por segunda vez. . .
7.- Secretario de Estado en los despachos de Guerra,
Marina, Gobernación, Policía y Agricultura e Industria.. . . . .
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CAPÍTULO III.- EL CANCILLER . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60
1.- La Cancillería y los diplomáticos.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
A.- El nombramiento. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
B.- La Cancillería en 1876. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
C.- El cuerpo diplomático y consular de Costa Rica.. . . . . .
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D.- El presupuesto.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 65
E.- El cuerpo diplomático y consular acreditado en
Costa Rica.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
2.- La política exterior. La situación centroamericana y la
misión de don Tomás Guardia a Guatemala y El Salvador.. . . . 68
3.- Otras carteras ministeriales.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 74
4.- Reemplazo de don Saturnino como canciller.. . . . . . . . . . . . . 77
CAPÍTULO IV.- LOS AÑOS INTERMEDIOS: 1876-1882. . . . . 79
1.- 2.- 3.- 4.- 5.- 6.- Secretario de Estado y tercer designado a la Presidencia
de la República.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Comisionado financiero en Europa. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
La caída de don Vicente Herrera. Otras actividades de
don Saturnino Lizano en Europa.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Secretario de Gobernación y carteras anexas y secretario
interino de Guerra y Marina. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Primer designado a la Presidencia.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Primer designado en ejercicio de la Presidencia
de la República.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
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CAPÍTULO V.- EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
( JULIO-AGOSTO DE 1882). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 101
1.- 2.- 3.- 4.- 5.- 6.- Integración del gobierno.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Inicios de la administración. Las elecciones presidenciales
y los funerales de don Tomás Guardia. . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Labor de la administración. Política exterior.. . . . . . . . . . . . . .
Labor de la administración. Política interna.. . . . . . . . . . . . . .
La caída del presidente Lizano.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
El interinato de don Próspero.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
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CAPÍTULO VI.- LOS AÑOS POSTERIORES (1882-1905) . . . . 118
1.- Un respiro financiero a medias.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
2.- Diputado suplente por Alajuela. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3.- Presidente de la Unión Católica de Costa Rica. . . . . . . . . . . .
4.- Diputado propietario por Puntarenas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . .
5.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por tercera vez.. . . .
6.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por cuarta vez.. . . .
7.- Administrador de Licores y Tabacos y gobernador interino
de la comarca de Puntarenas.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
8.- Regidor y presidente municipal de Puntarenas.. . . . . . . . . . . .
9.- La campaña electoral de 1905.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
10.- Fallecimiento y funerales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
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11.- La reparación de un injusto olvido.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 144
CRONOLOGÍA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 150
APÉNDICE.- APUNTES SOBRE LA DESCENDENCIA
DE DON SATURNINO LIZANO GUTIÉRREZ. . . . . . . . . . . . . 153
BIBLIOGRAFÍA. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 174
SOBRE LOS AUTORES. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 181
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
IX
El Canciller Lizano
Dedicatoria
A la memoria de don Roberto Ortiz Brenes
y doña Ligia Volio de Ortiz,
con profundo afecto y gratitud.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
A la memoria de mi adorada abuela, Hortensia Fait Lizano
de Ramírez, quien como tantos otros descendientes de don
Saturnino, sirvió a Costa Rica desde la función pública.
Gracias por enseñar a tus nietos, quienes nacimos fuera
del suelo costarricense, a amar a tu patria, la que con orgullo
llevaste siempre en tu corazón y luchaste por mantener
su nombre en alto.
Hasta el cielo, todo mi amor para ti por siempre.
Pedro Ramírez Sierra
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
1
El Canciller Lizano
Introducción
Don Saturnino Lizano Gutiérrez, quien vino al mundo en
Esparza el 29 de noviembre de 1826 y murió en San José el 19 de
abril de 1905, ha sido, hasta hoy, el único presidente de Costa Rica
nacido en el territorio de la actual provincia de Puntarenas, con la
cual su vida estuvo fuertemente ligada en muchos aspectos, tanto
en el plano institucional y público como en el personal y privado.
Además de presidente de la República, este ilustre esparzano fue
titular de otros muchos cargos públicos: gobernador de la comarca
de Puntarenas, diputado, constituyente, jurado, secretario de
Estado en todas las carteras ministeriales, comisionado financiero
en Europa, designado a la presidencia y regidor y presidente de la
Municipalidad puntarenense.
A pesar de lo expuesto, el nombre de don Saturnino
Lizano ha sido con frecuencia injustamente olvidado, en parte
porque durante mucho tiempo se consideró erróneamente que
había sido un mero designado en ejercicio de la presidencia y
no un presidente titular de la República, y también porque su
administración fue muy corta. No fue sino hasta 1999 cuando la
Asamblea Legislativa, con base en un acuerdo aprobado en 1995,
finalmente hizo colocar su retrato en la galería correspondiente.
Hasta la fecha, don Saturnino ha sido el canciller titular
de más breve desempeño en la historia patria, ya que fue secretario
de Estado en el despacho de Relaciones Exteriores únicamente por
ocho días, del 30 de julio al 7 de agosto de 1876, en los momentos
iniciales de la administración –surgida de un golpe militar- de
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
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El Canciller Lizano
don Vicente Herrera Zeledón, quien lo nombró como secretario
general, a cargo de todas las carteras ministeriales. Naturalmente,
durante ese período tan fugaz no fue prácticamente nada lo que el
canciller Lizano pudo aportar al desarrollo de la política exterior
de Costa Rica, ni hubo casi ningún suceso de trascendencia en
las relaciones internacionales del país. Sin embargo, debido a
la significativa actuación de don Saturnino en muchos otros
ámbitos y la circunstancia de haber sido después presidente de
la República, nos ha parecido importante recordar su paso por
la Cancillería. Esperamos que este modesto apunte biográfico
contribuyan a que se conozcan y se aprecien, además, otros
aspectos de su vida y sus aportes al país.
Agradecemos la colaboración brindada en diversos
aspectos de esta investigación por doña Adriana Chaverri Fonseca,
don Tomás Federico Arias Castro, don Luis Fernando Ceciliano
Piedra, don Luis Chacón Ramírez, don Hugo Luis Dallbosco,
don Joaquín Alberto Fernández Alfaro, doña Ana María Herrera
Sotillo, don Omar Jaén Suárez, don Mauricio Meléndez Obando,
don Emilio Obando Cairol y don Julio Ernesto Revollo Acosta; el
embajador don Juan Carlos Valle Raleigh, director del Instituto
de Servicio Exterior de la Nación de la República Argentina, y el
personal de la Sección Histórica del Archivo Nacional de Costa
Rica.
Cartago, Costa Rica,
y Nueva Guatemala de la Asunción, Guatemala,
marzo de 2015.
4
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
“El empleado público que no cumple su deber, está
obligado a soportar que se lo digan y yo me resigno
a esto, si se me precisa aquello en que haya faltado.”
Saturnino Lizano, 1896
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
5
El Canciller Lizano
Capítulo I
EL HOMBRE
1.- Los Lizano y los Gutiérrez.
Don Saturnino Lizano nació en Esparza y vivió gran
parte de su vida en Puntarenas y sus vecindades, pero sus raíces
familiares eran principalmente heredianas, tanto por parte de
padre como de madre.
Por Lizano, el antepasado paterno más antiguo de don
Saturnino que se conoce con certeza es su bisabuelo Agustín
Antonio Lizano 1, quien fue vecino de Heredia y contrajo allí
nupcias dos veces. Su primera esposa fue Águeda González,
con quien casó en el pueblo de la Inmaculada Concepción de
Cubujuquí (hoy Heredia) el 21 de octubre de 1749 2, y de la que
enviudó poco después, ya que el 27 de setiembre de 1751 volvió
1
Lamentablemente, en sus partidas matrimoniales no consta el nombre de sus padres. Es
posible que fuera hijo de Cristóbal Lizano y Castro, quien casó en el pueblo de la Inmaculada
Concepción de Cubujuquí (hoy Heredia) el 16 de noviembre de 1724 con Doña Nicolasa
Villalobos y Valverde, hija de Pedro Villalobos y Sibaja y de Doña Margarita Valverde, y murió
el 18 de octubre de 1751. Cristóbal era hijo del alférez Bartolomé Lizano, originario del puerto
de Santa María en Andalucía, que contrajo nupcias en Cartago en 1689 con Margarita de
Halhavilla, hija legítima de Antonio de Castro y María de Arrieta. Este alférez fue comerciante,
dueño de una hacienda de cacao en el valle del Reventazón y propietario de recuas de mulas.
2
https://familysearch.org/ark:/61903/1:1:FLQC-QTL
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
7
El Canciller Lizano
a contraer nupcias en la misma localidad 3, esta vez con Doña
Manuela de Jesús Morera y Fajardo, hija del capitán Salvador
Morera y Doña Juana María Fajardo.
Hijo del segundo matrimonio de Agustín Antonio
fue, entre otros, Tomás Marcelino Lizano y Morera, quien
fue bautizado en Heredia el 26 de enero de 1761 4 y contrajo
matrimonio en la misma población el 25 de octubre de 1779
con Juana Ramona Avendaño y Carvajal, hija de Juan Vicente
Avendaño y Juliana Carvajal, mestizos 5. En este hogar nació
Dámaso Lizano y Avendaño, quien fue bautizado en Heredia el 11
de diciembre de 1784, con la calidad de “español” 6. Dámaso Lizano y Avendaño, padre de nuestro
biografiado, contrajo matrimonio dos veces. La primera vez
casó en San José el 1° de octubre de 1810 con María del Carmen
Mondragón, hija de Fermín Mondragón y Luz Salmón-Pacheco 7,
con quien tuvo dos hijas, medias hermanas de don Saturnino:
1.- Mercedes, nacida por 1812 y sepultada en San José el 27
de noviembre de 1858. Casó en San José el 4 de febrero
de 1830 con Dolores Cervantes y Villalta.
2.- María Joaquina, bautizada en Heredia el 21 de noviembre
de 1814.
María del Carmen Mondragón de Lizano murió antes de
que se cumpliera el año del nacimiento de su hija menor, ya que
fue sepultada en Heredia el 1° de noviembre de 1815. Su esposo
contrajo segundas nupcias en Heredia el 1° de enero de 1818 con
3
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12391-257781-28 Al margen de la
partida de la primera boda se dice “mestizos” y en la de la segunda “españoles”. De la segunda
esposa sí consta su filiación española, así que cabe suponer que Águeda González era mestiza;
sin embargo, no queda claro a cuál de las dos castas pertenecía el marido.
4
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12051-145165-55
5
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12391-253756-83
6
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7
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11109-98920-98?cc=1460016&wc=ML
LP-FM9:375534501,376447901,376937701
8
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Dámasa Gutiérrez y Flores, hija de Anselmo Gutiérrez y Ruiz y
Gertrudis Flores y Porras 8.
El antepasado paterno más antiguo conocido de la
familia de Dámasa Gutiérrez y Flores se llamó Luis Gutiérrez,
quien vivió en el siglo XVII otorgó testamento en el valle de
Aserrí el 24 de agosto de 1666 y era casado con María Álvarez de
Ochoa, hija de Juan Rodríguez y María Álvarez de Ochoa. Hijos
de este matrimonio fueron Francisco e Inés Gutiérrez y Ochoa.
Francisco, que fue capitán de milicias, casó en primeras nupcias
en Cartago el 1° de agosto de 1679 con Nicolasa de Flores, viuda,
y en segundas con Gertrudis Ruiz-Guillén y Santiago.
Uno de los hijos del primer matrimonio del capitán
Gutiérrez, que se llamó Luis como su abuelo paterno, tuvo
el grado de sargento mayor de las milicias de Costa Rica y fue
arrendador de terrenos en El Tejar en 1710 9. Contrajo nupcias
con Doña Inés Margarita Martínez-Bernal de Quesada, quien
murió en 1724. Hijo de esta unión fue, entre otros, el capitán
de milicias Luis Gutiérrez y Bernal, quien casó con doña María
Guerrero y Elizondo. Estos fueron los padres del también capitán
Cayetano Gutiérrez y Guerrero, que casó en primeras nupcias
con doña Bárbara Ruiz y Arias y de quien escribe el historiador
Carlos Meléndez:
“Don Cayetano Gutiérrez fue un
cartaginés que al menos desde 1762 figura ya
como vecino de Heredia, por haberse casado
allí con dama principal, doña Bárbara Ruiz.
Debió con el tiempo hacer alguna fortuna,
a más de ganar prestigio en la comunidad.
Su casa de habitación era sin lugar a dudas
una de las principales de Heredia, situada
frente a la Plaza mayor, en la esquina
diagonal al suroeste del templo parroquial…
quedó viudo en 1795 y ya a principios del
97 le hallamos de nuevo casado con doña
8
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11594-103791-72?cc=1460016
9
CASTRO Y TOSI, Norberto de, Armorial General de Costa Rica, expediente Gutiérrez
de Ochoa. Documento inédito conservado en el Archivo de la Academia Costarricense de
Ciencias Genealógicas.
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El Canciller Lizano
Nicolasa Flores… fue un hombre activo en
el campo de la agricultura e incluso de la
construcción… En 1790 se comprometió con
el vecindario de la entonces nombrada Villa
Vieja, hoy Heredia, para la fabricación y
edificación por dos mil pesos, de la nueva
casa de cabildo y cárcel pública…” 10
De su primer matrimonio, don Cayetano tuvo entre otros
hijos a don Francisco Anselmo Gutiérrez y Ruiz, bautizado en
Heredia el 22 de abril de 1764 11, quien casó en la misma población
el 5 de abril de 1785 con doña Manuela Gertrudis Flores, hija
de don Santiago Flores y Escalante Paniagua y doña Manuela
Porras y González 12. De este matrimonio nacieron, entre otros
hijos, doña Dámasa Gutiérrez y Flores, casada con don Dámaso
Lizano y Avendaño, y doña María, que casó con don Rudesindo
de la Guardia y Robles y fue la madre del presidente don Tomás
Guardia. Don Anselmo murió ya viudo en Heredia el 13 de marzo
de 1827 13.
Nos parece interesante mencionar que don Cayetano
Gutiérrez y Guerrero, que de su segundo matrimonio con doña
Nicolasa Flores y Porras tuvo seis hijos, fue abuelo del célebre
músico don Manuel María Gutiérrez, autor de la música del Himno
Nacional, y de don José Gregorio Trejos Gutiérrez, presidente
de la Corte Suprema de Justicia y candidato presidencial de la
Unión Católica en 1894 14. Ambos eran, por consiguiente, primos
hermanos de la madre de don Saturnino Lizano.
En el matrimonio Lizano-Gutiérrez nacieron al menos
cinco hijos, pero solamente se conoce con certeza la fecha
del bautizo de tres de ellos, Paulina, Joaquín y Saturnino, y
el año de nacimiento de otro, Nicolás. A falta de otros datos,
consideramos posible que el hijo restante, Enrique, hayan nacido
10
MELÉNDEZ CHAVERRI, Carlos, Manuel María Gutiérrez, San José, EUNED, 1ª. ed.,
1994, pp. 21-23.
10
11
https://familysearch.org/ark:/61903/1:1:NQGJ-8RS
12
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12391-257177-78
13
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11033-49760-69
14
MELÉNDEZ CHAVERRI, 1994, p. 21.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
antes que Joaquín y Saturnino, porque estos murieron en fechas
muy posteriores a aquel, pero bien podría ser una suposición
infundada. Los cinco hijos fueron:
1.- Paulina. Fue bautizada en Heredia el 12 de marzo de
1819 15. Posiblemente murió en la infancia, porque de ella
no se encuentra ninguna otra referencia.
2.- Enrique. No se conoce la fecha de su nacimiento. Casó
el 28 de noviembre de 1886 en Puntarenas con Adelaida
Obando 16. Aparentemente murió antes de 1888, ya que
no aparece registrada su defunción en el Registro Civil,
establecido a partir de ese año. En Puntarenas fue alcalde
suplente en 1865 17, receptor y administrador de Tabacos
y Licores en 1877 18 y regidor municipal en 1878 19, 1882,
1884 y 1885 20.
3.- Joaquín de Jesús, bautizado en Heredia el 4 de abril de 1824
21
, murió en la misma ciudad el 28 de mayo de 1901. Fue
gobernador de Heredia y de Puntarenas, constituyente,
representante, senador, secretario de Estado y designado
a la Presidencia, que ejerció interinamente en 1875.
Casó en Heredia el 9 de julio de 1859 con Matilde Ulloa
Solares, hija de don Nicolás Ulloa Soto y doña Florencia
Solares y Sandoval 22.
4.- Francisco Cipriano Saturnino.
5.- Nicolás. Nació en 1832. Falleció soltero en Puntarenas el
17 de octubre de 1863 y se le sepultó al día siguiente en
15 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-13036-102231-99?cc=1460016
16 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11856-97783-16?cc=1460016&wc=
MLLK-4WY:375600601,375710601,376019101
17
A. N. C. R., S. H., Municipal Puntarenas, Nº 4269.
18
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento nº 411 vol. I, f. 212.
19 AMADOR, F. de P., Pro-Puntarenas, Imprenta y Papelería Moderna, 1ª. ed., 1914, p.
25.AMADOR, 1914, p. 25.
20
Ibid., p. 95.
21 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11852-165265-59?cc=1460016&wc=
MLLK-7M9:375531701,376270001,376347801
22 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12068-48114-12
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
11
El Canciller Lizano
Esparza 23. Fue regidor de Puntarenas en 1862 y presidente
municipal en 1863 24. Tuvo con Josefa Martínez dos hijos
llamados Joaquín y Nicolás Lizano Martínez 25.
Aunque sus hijos Paulina y Joaquín fueron bautizados
en Heredia, ya desde antes de su nacimiento don Dámaso Lizano
había buscado mejores horizontes en otras regiones de Costa
Rica, ya que en 1820 fue tercenista en Bagaces, es decir, encargado
del establecimiento estatal para la venta de tabacos que existía
en esa población 26. Posteriormente se radicó con su familia en la
ciudad de Esparza.
A fines del siglo XVIII, el puerto de Puntarenas había
empezado a reemplazar al insalubre de Caldera como puerta
de entrada del Pacífico costarricense. En 1814, cuando ya en la
lengüeta arenosa empezaba a surgir un pequeño pero dinámico
centro urbano, el puerto fue habilitado al comercio exterior por
las Cortes españolas. Sin embargo, Puntarenas no fue constituida
jurídicamente como población sino hasta muchos años después.
Desde el punto de vista administrativo y religioso, las principales
autoridades de la región se concentraban en Esparza, ciudad que a
pesar de aletargada existencia y sus reducidísimas dimensiones –
su jurisdicción, que incluía a Puntarenas, contaba apenas con 309
habitantes en 1824 27-, tenía a su haber su venerable antigüedad
y su prosapia española, ya que había sido fundada alrededor de
1577 por el gobernador Diego de Artieda Chirinos y Uclés.
letras
En Esparza, don Dámaso Lizano fue maestro de primeras
, con un sueldo de seis pesos mensuales 29. Además
28
23 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11047-75193-14
24
AMADOR, 1914, p. 25.
25
Debemos los datos sobre los hijos y el año de nacimiento de don Nicolás a la gentileza de
don Emilio Obando Cairol.
26
A. N. C. R., S. H., Complementario Colonial, números 5964 y 6992.
27
THIEL, Bernardo Augusto, “Monograf ía de la población de Costa Rica en el siglo XIX”,
p. 27, en Población de Costa Rica y orígenes de los costarricenses, San José, Editorial Costa
Rica, 1ª. ed., 1977, pp. 15-72.
12
28
A. N. C. R., S. H., Municipal Esparza, nº 365, f. 17 v.
29
A. N. C. R., S. H., Municipal Esparza, nº 166.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
fue elector parroquial en 1827 30, alcalde segundo en 1828
secretario de la Municipalidad en 1829 32.
31
y
Cuando la vetusta Esparza estaba a punto de cumplir
dos siglos y medio de existencia, vino al mundo otro hijo del
matrimonio Lizano-Gutiérrez, que fue bautizado el 29 de
noviembre de 1826 en la parroquia de esa ciudad con el nombre
de Francisco Cipriano Saturnino. Le administró el primer
sacramento el presbítero don Cipriano Cayetano Gutiérrez y Ruiz,
tío materno de doña Dámasa Gutiérrez de Lizano 33. Los padrinos
de bautismo fueron don Santiago Trejos y doña Ana María Flores
34
. El nombre de Saturnino, poco frecuente en Costa Rica, se debió
a que el 29 de noviembre la Iglesia Católica celebra la festividad
de San Saturnino de Tolosa, un obispo que fue martirizado en
el siglo III y es muy venerado en Pamplona. Familiarmente, al
bautizado se le conoció con el diminutivo de Nino.
2.- Actividades comerciales y agropecuarias.
Don Saturnino Lizano seguramente recibió la enseñanza
elemental de su progenitor, que fue maestro de escuela en
su ciudad natal. Sin embargo, no cursó estudios superiores,
posiblemente debido al prematuro fallecimiento de sus padres.
Aunque no conocemos las fechas de muerte de don
Dámaso Lizano y doña Dámasa Gutiérrez, sí se sabe que
fallecieron cuando sus hijos eran aún muy pequeños. En una
semblanza biográfica de don Joaquín Lizano publicada en 1930,
don Luis Felipe González Flores escribió que
30
Ibid.
31
Ibid.
32
Ibid.
33
Fue bautizado en Heredia el 20 de setiembre de 1778, https://familysearch.
org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11601-86608-43?cc=1460016&wc=MLL592S:375531701,376270001,376288101 , y murió el 2 de marzo de 1831, https://
familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11033-49858-44?cc=1460016&wc=ML
LX-168:375531701,376270001,376656901 Fue cura de Nicoya, A. N. C. R., S. H.,
Complementario Colonial, documento nº 942.
34
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11839-152085-76
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
13
El Canciller Lizano
“… quedó huérfano a muy corta edad y
fue recogido por su familiar el Presbítero
don Manuel Gutiérrez quien se encargó de
suministrarle la alimentación, vestido y
educación.
Inició su hoja de servicios con el
nombramiento de sacristán de la iglesia de
Esparza. Después fue maestro de escuela
en un pueblo de Guanacaste y ocupó luego
la Secretaría de la Gobernación de aquella
Provincia.” 35
Es muy posible que don Dámaso y su cónyuge
hayan muerto en Esparza, cuyos registros de defunciones
correspondientes al período entre 1822 y 1834 no se conservan
36
. La última referencia que tenemos de doña Dámasa es el
nacimiento de su hijo Nicolás en 1832, así que su defunción debe
haber ocurrido entre 1832 y 1834, y la de su marido entre 1831 y
1834.
Don Luis Dobles Segreda escribió sobre don Joaquín
Lizano en 1934:
“… niño descalzo y desvalido, huérfano
de padre y madre y recogido por la caridad
pública. Empezó en los más humildes
peldaños; su primera ocupación fue la de
sacristán en la iglesia de Esparza… Se formó
en la pobreza triste, apenas alegrada por la
luz de sy esperanza y un día se disputó la
Presidencia de la República con don Tomás
Guardia… Otro día la ejerció con el carácter
de Designado… El niño descalzo y huérfano,
el sacristán olvidado, llegó a ser el primero
35
GONZÁLEZ, Luis Felipe, Benefactores de Heredia, Publicaciones de la Secretaría de
Educación Pública, 1ª. ed., 1930, p. 29.
36
14
Debemos este dato a la gentileza de don Emilio Obando Cairol.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
entre sus conciudadanos por el esfuerzo
propio…” 37
Si don Joaquín fue niño huérfano, descalzo y desvalido,
es indudable que su hermano don Saturnino corrió la misma
suerte. Posiblemente el presbítero don Manuel Gutiérrez y
Flores (1801-1850), que ayudó a don Joaquín en su infancia, veló
también por los otros niños Lizano-Gutiérrez. El padre Manuel
Gutiérrez, quien era cura de Esparza en la época del bautizo de
don Saturnino y lo siguió siendo por muchos años, era primo
hermano doble de doña Dámasa Gutiérrez de Lizano, ya que era
hijo de don Eusebio Gutiérrez y Ruiz y doña Ana María Flores y
Porras 38, pero además fue padrino de bautismo de don Joaquín,
según consta en la partida correspondiente 39.
Desde época temprana, don Saturnino se dedicó a
actividades agropecuarias y comerciales. Junto con sus hermanos
estableció en Puntarenas en el decenio de 1850 una casa comercial
denominada Lizano y Hermanos, que también fue conocida
años después como Lizano y hermano, por haber quedado
circunscrita a don Joaquín y don Saturnino. Esta empresa, de la
que don Saturnino fue gerente general durante muchos años 40, se
dedicaba a actividades de exportación de café 41 e importación de
mercaderías y, como muestra de su giro, transcribimos uno de sus
avisos comerciales:
“La casa Lizano y Hermanos en
Puntarenas ofrece en venta al contado y
con 10 por ciento menos de principal y
costos, una consignación de 107 cajas aceite
de olivo, envasado en botellas, medias,
cuartas, octavas y algunas cajas en latas de
dos, y cuatro libras; y de tan buena calidad,
37
DOBLES SEGREDA, Luis, “Conservemos la riqueza espiritual”, p. 137, en Heredia…
Historia, tradiciones y vivencias, Heredia, EUNA, 1ª. ed., 1997, pp. 136-139. Debemos estas
referencias a la gentileza de don Emilio Obando Cairol.
38
MELÉNDEZ CHAVERRI, 1994, p. 96.
39 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11852-165265-59?cc=1460016&wc=MLLK7M9:375531701,376270001,376347801
40
El Día, 20 de abril de 1905.
41
V. por ejemplo Gaceta oficial de Costa Rica, 21 de marzo de 1860.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
15
El Canciller Lizano
como tal vez nunca se haya importado al
país igual.
También se vende muy barato un surtido
de vinos, de la acreditada marca “Louis
Babin Féty & Cª”con tres años de depósito.
4000 yardas tubo de hierro galvanizado
para cañería, de media pulgada; y una
cantidad de petates o estera de la India, de
colores.” 42
Puntarenas fue declarada puerto franco por el jefe
de Estado don José María Alfaro el 5 de marzo de 1847. Como
consecuencia de esta franquicia, la población experimentó un
vertiginoso desarrollo. Según expresaron años más tarde unos
puntarenenses, no exentos de vena lírica,
“… como por encanto, en el desierto
arenal que dio nombre a nuestra ciudad,
se ven aparecer casas, almacenes, bodegas,
muelles, máquinas y toda clase de
establecimientos útiles. Se inician y llevan
a cabo, tanto por nacionales como por
extranjeros, toda clase de empresas; y en
las ricas y surtidas tiendas y almacenes
de Puntarenas, el habitante rico del
interior como el carretero, el viajero como
el marinero encuentran todo lo que puede
satisfacer para halagar sus caprichos.
Médicos que alivian nuestras dolencias,
boticas que suministran los necesarios
remedios y lujosos hoteles que brindan con
su hospitalidad al viajero; todo, todo se
encuentra en Puntarenas. Numerosas naves
luciendo en sus elegantes mástiles los colores
de las diferentes naciones comerciales del
mundo surcan sus aguas trayendo ricos
cargamentos de todo lo que pueda consumir
42
16
Gaceta oficial, 11 de marzo de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
el laborioso habitante de Costa Rica, y en
nuestros nacientes astilleros se construyen
lanchas y embarcaciones de todas clases;
y tal es la prosperidad de nuestro puerto
que en pocos años llegó a ser el primero
de Centro América… Y Costa Rica entera
prosperó aún con mayor rapidez que el
mismo Puntarenas.” 43
Aunque efectivamente contribuyó al crecimiento de
Puntarenas, la franquicia no dio los resultados esperados y el 12 de
junio de 1860 el diputado don Braulio Morales Cervantes presentó
en la Cámara de Representantes un proyecto para suprimirla. La
propuesta de Morales pasó a estudio de una comisión formada
por don Ramón Molina, don Jacinto Trejos y don Joaquín Lizano
Gutiérrez. La opinión de este último resultaba especialmente
importante, dado que tenía fuertes intereses en Puntarenas y
era un vecino muy respetado de la localidad. Además, había sido
regidor de la Municipalidad de Puntarenas en 1858 44. El dictamen
de la comisión fue favorable a la aprobación del proyecto, y entre
otras cosas señaló que
“Puntarenas medró algo en los primeros
años de la franquicia: muy presto llegó
a un estado estacionario en el que aún
permanece: la influencia de la franquicia,
lejos de extenderse, ramificarse y atraer
población y recursos de otros países, está
limitada hoy día al pequeño círculo de su
propia población, al corto consumo de su
comercio y a ser un punto de depósito para
el comercio del interior. Por tan pequeños
y pobres resultados la Nación no obtiene
una compensación suficiente, ni el erario
puede continuar erogando considerables
cantidades en un sistema de aduana
inseguro y costoso. Hay además otra
43
GONZÁLEZ VÍQUEZ, Cleto, El Puerto de Puntarenas. Algo de su Historia, San José,
Imprenta Gutemberg, 1ª. ed., 1933, pp. 46-47.
44
AMADOR, 1914, p. 24.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
17
El Canciller Lizano
consideración no menos importante: por
diferentes leyes, ordenanzas y providencias
administrativas, el sistema de restricciones
fue invadiendo poco a poco el de la
franquicia hasta llegar al punto de ser hoy
Puntarenas, bajo muchos respectos, un
puerto franco en el nombre. Hay también
-preciso es confesarlo- falta de equidad en
esta disposición, pues al paso que toda una
comarca y provincia gozan del privilegio de
no pagar derechos por los productos de fuera
que consume, el resto de la República tiene
que sufrir el peso todo de un impuesto tan
considerable.” 45
La casa Lizano y Hermano, que estuvo especialmente
activa en los decenios de 1870 y 1880, fue durante muchos años
una compañía exitosa, y en 1877 participó en una sociedad para
establecer, también en Puntarenas, la empresa de consignación
Casa Herediana 46. Sin embargo, a fines del decenio de 1870 el
crédito de Lizano y Hermano se vio gravemente comprometido
como consecuencia de un enorme desembolso que tuvo que
efectuar don Saturnino en 1877, con motivo de su desempeño
en una misión oficial en Europa, a lo cual nos referiremos
posteriormente 47.
También con su hermano don Joaquín, don Saturnino
Lizano fue copropietario de una hacienda ganadera de
considerables proporciones, llamada El Carrizal, ubicada donde
hoy se encuentra el barrio puntarenense de ese nombre. En la isla
de San Lucas tuvo algunos cultivos y ganado 48. Además, al parecer
también se dedicó durante un tiempo al aprovechamiento de los
cocos de las palmeras que crecían en las vecindades el extremo
de la flecha o lengüeta de arena donde se encuentra Puntarenas,
45
GONZÁLEZ VÍQUEZ, 1933, p. 44.
46
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento Nº 0058, vol. 1, f. 198.
47
SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco, Los días del presidente Lizano, San José,
EUNED, 1ª. ed., 1997, p. 42.
48
18
A. N. C. R., S. H., Fomento, documento nº 1298.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
porque durante muchos años el paraje se conoció con el nombre
de Los Cocales de don Saturnino 49.
Además de su participación en Lizano y Hermano y
de sus actividades agropecuarias en Puntarenas, don Saturnino
también tuvo en 1864 una sociedad en Puntarenas con don
Vicente Montes de Oca 50, que al parecer fue de breve duración.
Años después se asoció con el peruano don Antonio Vallerriestra
y Albarracín, héroe de la Campaña Nacional, para pedir al
gobierno que se les dieran los rieles necesarios para prolongar el
ferrocarril de sangre, es decir, tirado por animales, que existía en
Puntarenas, desde la plaza de la Victoria” hasta la del Mercado.
El 21 de enero, el Consejo de Gobierno acordó conceder a los
solicitantes la entrega de unos rieles que estaban destinados a
la bodega principal o aduana del puerto, y que si estos no eran
suficientes, se completaran con los del ferrocarril. A cambio el
gobierno podría hacer uso gratuito de ese transporte 51, al que
la gente llamaba jocosamente el “burrocarril” 52. Los contratistas
debían llevar un libro de cuentas de los gastos de construcción, y
cuando se hubieran reembolsado el valor de las sumas invertidas,
la obra quedaría exclusivamente a la orden del gobierno 53.
Aunque fue en forma pasajera, don Saturnino además
se interesó por la actividad bancaria, ya que participó con su
primo don Tomás Guardia Gutiérrez, los generales don Pedro y
don Pablo Quirós Jiménez, don Rafael Barroeta Baca, don Braulio
Morales Cervantes y otras personas en la fundación de un
establecimiento bancario privado, denominado Banco de Emisión
de Crédito, que quedó formalmente instituido el 16 de octubre de
1876 y abrió sus puertas a principios de 1877. Aunque el gobierno
de don Vicente Herrera le demostró simpatías, el establecimiento,
enfrentado entre otras cosas con la formidable competencia del
Banco Anglo-Costarricense y del Banco de la Unión, fundado a
49
GONZALEZ VIQUEZ, 1933., p.7.
50
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento Nº º 00806, vol. 5, f. 39.
51
Gaceta oficial, 21 de enero de 1874.
52
SÁENZ MAROTO, Alberto, p. 496.
53
Gaceta oficial, 21 de enero de 1874.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
19
El Canciller Lizano
fines de 1877, no logró levantar vuelo, y finalmente fue clausurado
el 6 de julio de 1878 54.
3.- Los hijos en Puntarenas.
En Puntarenas, cuya condición portuaria tendía a
fomentar una mentalidad más abierta y costumbres menos estrictas
que las imperantes en el Valle Central, don Saturnino Lizano se
vinculó sentimentalmente con una señora llamada María Prado
del Mar, que murió en 1857 de unos veintidós o veintitrés años de
edad 55, por lo que debe haber nacido hacia 1835. De esta relación
nacieron dos hijos, que fueron formalmente reconocidos por su
progenitor en un instrumento notarial otorgado en Puntarenas a
las tres y media de la tarde del 23 de marzo de 1857 56:
1.- Don Manuel de Jesús, nacido alrededor de 1852 (la
escritura de reconocimiento dice que tenía cuatro años
en marzo de 1857) y bautizado en Puntarenas el 28 de
setiembre de 1857 57.
2.- Doña Isabel Herminia, nacida alrededor de 1855 (la
escritura de reconocimiento dice que tenía dos años
y medio en marzo de 1857). Fue maestra de escuela 58.
Casó el 17 de agosto de 1874 en Puntarenas con don
Juan de Dios Guerra y Martínez 59. El hijo primogénito
de este matrimonio, don Juan Rafael Guerra Lizano, fue
el primer nieto de don Saturnino Lizano. Se le bautizó
en Puntarenas el 25 de julio de 1875 y sus padrinos de
bautismo fueron don Saturnino y doña Angélica Guardia
de Lizano 60.
54
VILLALOBOS VEGA, Bernardo, Bancos emisores y bancos hipotecarios en Costa Rica
1850-1910, San José, Editorial Costa Rica, 1ª. ed., 1981, pp. 173-198.
55
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento Nº -000821, vol. 1, fs. 28-29.
56
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento Nº 000821, vol.1, f. 28. El
documento dice expresamente que la madre no compareció por haber fallecido.
20
57
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22046-3
58
http://www.nicaragua-actual.info/tino.html
59
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-7868-86
60
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22395-71
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
En el decenio de 1860, don Saturnino entabló en
Puntarenas otra relación extramatrimonial con una joven llamada
Procopia Casares y Moreno, quien había nacido alrededor de
1848 en Santa Cruz de Guanacaste 61, en el hogar de don José
León Casares y Obando y doña María Liboria Moreno. Su familia
se había establecido en Puntarenas alrededor de 1850. Hermano
de doña Procopia fue, entre otros, don Manuel Telésforo Casares
y Moreno, quien era secretario de la Gobernación de Puntarenas
en 1865, cuando don Saturnino ejercía el cargo de gobernador de
esa comarca 62.
Doña Procopia, que trabajaba como vivandera 63 de la
hacienda El Carrizal y también era comerciante, debió ser una
mujer hermosa y de mucha personalidad. Dio a don Saturnino al
menos tres hijos y fue también amante de su hermano mayor don
Joaquín Lizano, con quien tuvo otros hijos.
En un instrumento notarial otorgado en Puntarenas
a las cinco de la tarde del 24 de abril de 1869, don Saturnino
reconoció formalmente a los tres hijos que había tenido con
doña Procopia. Esta, que tenía veintiún años en ese momento, no
suscribió la escritura por no saber hacerlo, y en su lugar la firmó
su hermano don Manuel Telésforo Casares y Moreno 64. Los tres
hijos reconocidos fueron:
1.- Don Francisco, nacido alrededor de 1862-1863 (la
escritura de reconocimiento de 1869 dice que tiene de
cinco a seis años); hacendado, murió en Puntarenas el 25
de setiembre de 1898, soltero 65.
2.- Don Nicolás, nacido alrededor de 1864 y fallecido en
San José el 11 de julio de 1934 66. Fue diputado suplente
por Puntarenas de 1906 a 1908 y senador suplente por
61
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22433-94 Debemos estos datos
a la amabilidad del genealogista don Emilio Obando Cairol.
62
A. N. C. R., S. H., Municipal Puntarenas, Nº 4269.
63
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22433-94
64
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento nº 000817, vol. 6, fs. 38v. -39 v.
65
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11841-21067-45
66
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12390-70471-21
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
21
El Canciller Lizano
Puntarenas de mayo a setiembre de 1909 67. Casó con
doña Cristina Matamoros Sandoval, hija de don Juan
Matamoros Lobo y doña Josefa Sandoval Rodríguez.
Nieta de este matrimonio fue doña Estrella Zeledón
Lizano, primera dama de 1978 a 1982.
3.- Don Benito de Jesús, nació en Puntarenas el 15 de abril
de 1867 68 y murió en 1931, casó con doña Rosario Huete
Mancia, hija de don Modesto Huete y doña Luz Mancia.
En la misma acta de reconocimiento, don Saturnino
donó a los tres niños la finca “La Esperanza”, ubicada en Puerto
Escondido, que tenía rancho, corrales, huerta y ganado bovino
y caprino. Esta propiedad la había recibido don Saturnino ese
mismo día como pago de un crédito que tenía con él don Manuel
Telésforo Casares y Moreno, tío materno de los donatarios 69.
Doña Estrella Zeledón Lizano, bisnieta de don Saturnino, primera dama de Costa Rica
de 1978 a 1982, con su esposo don Rodrigo Carazo Odio
67
OBREGÓN LORÍA, Rafael, El Poder Legislativo en Costa Rica, San José, Asamblea
Legislativa, 1966, pp. 433 y 464.
22
68
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22454-57
69
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento nº 000817, vol. 6, fs. 38-38 v.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Después de estos hijos, doña Procopia tuvo otros nueve,
nacidos entre 1868 y 1887, todos los cuales fueron bautizados sin
que en la partida respectiva se indicara el nombre del progenitor:
1.- María Julia, nació en Puntarenas el 3 de setiembre de
1869 70; casó en Puntarenas el 17 de mayo de 1891 con
Emilio Chiappe Verme, italiano 71.
2.- Miguel Víctor Manuel, bautizado en Puntarenas el 8 de
mayo de 1872 72. Contrajo nupcias en 1899.
3.- Fernando de Jesús, nacido en Puntarenas el 7 de enero de
1876 73, tuvo sucesión con doña Eva Méndez.
A continuación, doña Procopia tuvo cuatro hijos que
fueron reconocidos por don Joaquín Lizano Martínez, hijo de
don Nicolás Lizano Gutiérrez y por consiguiente sobrino de don
Saturnino:
1.- Josefa María Luisa, nació en Puntarenas el 19 de
setiembre de 1877 y fue bautizada el30 de ese mes 74. Fue
reconocida por don Joaquín Lizano Martínez el 23 de
agosto de 1882 75. Fue reconocida por don Joaquín Lizano
Martínez el 23 de agosto de 1882 76. Con el nombre de
Josefa María Luisa Casares Lizano, casó en Puntarenas el
13 de setiembre de 1896 con don Fermín Sánchez Tapia
y sus padrinos de bodas fueron don Saturnino y doña
Angélica Guardia de Lizano 77.
2.- María Carolina Visia, bautizada en Puntarenas el 28 de
abril de 1879 78. Fue reconocida por don Joaquín Lizano
70
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22264-99
71
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-6539-56
72
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-21776-46
73
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-21886-57
74
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22433-94
75
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento n° 00816, vol. 7, folio 162.
76
Ibid.
77
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-8112-75
78
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22309-3
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
23
El Canciller Lizano
Martínez el 23 de agosto de 1882 79. casó el 23 de agosto
de 1900 con don Juan Lippi Fait, italiano 80.
3.- Emma María de los Ángeles, nacida el 1° de agosto de
1880 81. Fue reconocida por don Joaquín Lizano Martínez
el 23 de agosto de 1882 82. Casó en Puntarenas en 1897, a
los dieciséis años, con don Célimo Guido Alvarado 83.
4.- José Joaquín, nacido en Puntarenas el 4 de abril de 1882
y bautizado el 17 de ese mes; su padrino fue don Enrique
Lizano Gutiérrez 84. Fue reconocido por Joaquín Lizano
Martínez el 2 de diciembre de 1882 85.
Todavía tuvo doña Procopia tres hijos más, en cuyas
partidas de bautismo no se consignó el nombre del progenitor.
Sin embargo, en las partidas de nacimiento de los hijos del mayor
de ellos se cita como abuelo a don Joaquín Lizano 86, y como
este además fue padrino del primero y el tercero, consideramos
muy posible que todos fueron hijos suyos. Cabe mencionar que
don Joaquín Lizano Martínez murió en Puntarenas el 11 de julio
de 1889, a los 38 años de edad, de una congestión cerebral. Es
posible que esa muerte repentina le haya impedido efectuar el
reconocimiento formal de los tres niños, que no había tenido
inconveniente en otorgar a sus cuatro hijos anteriores con doña
Procopia. Estos tres hijos fueron:
1.- José Nicolás Gonzalo, nacido en Puntarenas el 18 de
diciembre de 1883 y bautizado el 2 de enero de 1884;
su padrino fue don José Joaquín Lizano 87. Casó en San
79
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento n° 00816, vol. 7, folio 162.
80
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-7180-67
81
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12396-99173-10
82
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento n° 00816, vol. 7, folio 162.
83
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-6378-59
84
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12396-99454-12
85
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento n° 000815, vol. 1, folio 103.
86
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11932-164712-91,
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11763-21983-94,
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11763-23676-82
87
24
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12396-99700-23
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Ignacio de Acosta el 2 de enero de 1915 con doña Jesús
Vindas 88.
2.- Juan José Manuel, nació en Puntarenas el 28 de julio de
1885 89, y
3.- Josefa María, nació en Puntarenas el 2 de mayo 1887 y
fue bautizada el 12 de ese mes, su padrino fue don José
Joaquín Lizano 90.
Como ya indicamos, de todos los hijos de doña Procopia,
tres fueron reconocidos formalmente el 24 de abril de 1869 por
don Saturnino como hijos naturales suyos: Francisco, Nicolás y
Benito 91. La legislación vigente entonces en Costa Rica permitía
el reconocimiento de los hijos extramatrimoniales única y
exclusivamente si ambos padres gozaban de libertad de estado
civil en la época de la concepción, el embarazo o el nacimiento.
Al ser tanto don Saturnino como doña Procopia solteros, no
hubo ningún impedimento legal para el reconocimiento, y
como anteriormente él había declarado también como suyos a
los hijos que tuvo con doña María Prado, cabe concluir que no
tenía problemas para reconocer legalmente sus paternidades en
soltería. Cabe indicar que su hermano don Enrique Lizano, antes
de casarse con doña Adelaida Obando, fue padre en Puntarenas de
cinco hijos extramatrimoniales y no tuvo tampoco inconveniente
en reconocerlos legalmente 92.
Por lo expuesto nos parece que puede descartarse la
posibilidad de que María Julia y Miguel Víctor Manuel, los dos
hijos que doña Procopia tuvo después de Benito, fueran hijos
de don Saturnino. Tampoco estimamos verosímil que lo fuera
88
Ibid.
89
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12396-99181-6
90
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12396-100020-67
91
A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento nº 000817, vol. 6, f. 38.
92
Escritura de reconocimiento de los hijos Cristobalina María, Santiago Virgilio, Leoncia
Julia, Felipa Sof ía y Pedro María, por parte de Enrique Lizano (28 de enero de 1878) A. N.
C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento nº 000805, vol. 4, f. 4. Cabe mencionar
que doña Sof ía Lizano contrajo nupcias en Puntarenas el 21 de mayo de 1886 con don Juan
Rafael Mora Montes de Oca, hijo del expresidente de la República don Miguel Mora Porras y
su esposa doña Felipa Montes de Oca y Gamero. V.
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-6907-80
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
25
El Canciller Lizano
Fernando de Jesús, nacido el 7 de enero de 1876, tanto por
razones prácticas como jurídicas. Si el niño nació el 7 de enero
de 1876, la fecha de su concepción debería ubicarse alrededor
del 7 de abril de 1876, y no parece razonable suponer que don
Saturnino quisiera arriesgarse a sufrir las iras de su poderoso
suegro inaugurando su matrimonio con una reanudación de
sus amoríos con doña Procopia Casares. Aun así, bien podría
haberse sostenido jurídicamente que el niño había sido concebido
inmediatamente antes de la boda, en un momento en el cual tanto
don Saturnino como doña Procopia gozaban de libertad de estado
y en consecuencia el padre podía válidamente reconocerlo.
Con respecto a los hijos que tuvo doña Procopia a partir
de 1877, ya hemos indicado que unos fueron reconocidos por don
Joaquín Lizano Martínez y hay fuertes indicios de que los demás
también eran hijos suyos.
Doña Procopia Casares y Moreno murió en Puntarenas
de una afección pulmonar, a los cuarenta y cinco años de edad, y
fue sepultada en esa ciudad el 11 de abril de 1895 93, cuando don
Saturnino era gobernador de la comarca.
4.- Matrimonio con doña Angélica Guardia Solórzano y
descendencia Lizano-Guardia.
Posiblemente debido a sus anteriores relaciones de
convivencia en Puntarenas con doña María Prado y doña
Procopia Casares, don Saturnino Lizano no contrajo matrimonio
sino hasta los cuarenta y ocho años de edad, edad inusitada en esa
época para que un soltero se casara.
Don Saturnino se desposó a las ocho de la noche del
domingo 4 de abril de 1875 con doña Angélica de la Trinidad
Guardia Solórzano, quien era hija de su primo hermano don
Tomás Guardia Gutiérrez, en ese momento presidente de la
República, y su segunda esposa doña Emilia Solórzano Alfaro. El
novio era treinta y un años mayor que doña Angélica, quien al
contraer nupcias tenía diecisiete cumplidos, porque había nacido
93
26
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11841-22367-30
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
el 7 de febrero de 1858 en la ciudad de Alajuela, en cuya iglesia
parroquial fue bautizada el 12 del mismo mes 94.
Según una tradición familiar, que nos fue referida por
su descendiente doña Adriana Chaverri Fonseca, el matrimonio
de don Saturnino y doña Angélica fue decidido por el padre de
esta, don Tomás Guardia, que cuando la muchacha tenía quince
años le anunció que don don Saturnino iba a ser su marido. Años
después, ya viuda cuando una de sus descendientes le preguntó
cómo se había casado sin estar enamorada, doña Angélica se refirió
dulcemente a su difunto esposo diciendo, “Era tan bueno…” 95
Doña Angélica fue educada por institutrices europeas y
en 1872 efectuó un viaje a Europa con sus padres. Airosa y de
correctas facciones, era de menuda estatura, lo cual resultaba
especialmente notorio cuando estaba al lado de don Saturnino,
hombre muy alto y delgado, con aires de figura de El Greco 96.
Había heredado mucho del temperamento enérgico de don
Tomás Guardia, quien la consideraba su hija predilecta. También
fue una mujer muy religiosa y caritativa, que pudo haber influido
en su esposo para que se acercara a la Iglesia y terminara siendo
un católico devoto. En Puntarenas fue mayordoma de la iglesia
parroquial 97.
La familia Guardia de Costa Rica es oriunda de la villa
de Zafra en Andalucía 98. Su fundador en América fue Don Diego
Félix de la Guardia y Benítez-Marchena, quien se estableció a
principios del siglo XVIII en el reino de Tierra Firme (Panamá),
donde llegó a alcanzar una encumbrada posición social y política.
Fue regidor del Ayuntamiento de Panamá, alcalde ordinario
94
OBREGÓN LORÍA, Rafael, Familias alajuelenses en los libros parroquiales de Alajuela
1790-1900, Alajuela, Museo Histórico Cultural Juan Santamaría, 1ª. ed., 1995, vol. III, p. 582.
95
Debemos estos datos a la gentileza de doña Adriana Chaverri Fonseca, 12 de marzo de
2015.
96
SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco, y otros, Las Primeras Damas de Costa Rica,
San José, 1ª. ed., 2001, pp. 413-414.
97
Debemos este dato a la gentileza de doña Ana María Herrera Sotillo.
98
Sobre la familia Guardia de Panamá y Costa Rica hay un estudio muy documentado de
JAÉN SUÁREZ, Omar, Evolución de la familia De la Guardia (siglo XVII a siglo XX). Un caso
ejemplar en la formación social panameña, Panamá, 1ª.ed., 1998, del cual tomamos la mayoría
de los datos que hemos incluido sobre los orígenes de esta familia y sus primeras generaciones
en Panamá.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
27
El Canciller Lizano
y veinticuatro de esa misma ciudad y además logró amasar un
patrimonio considerable. Un documento panameño de la época
lo menciona como “… uno de los vecinos más principales que hay
en esta Ciudad, de muchísimo lustre y decencia, cristiano viejo
y como tal noble” 99. Don Diego había casado en España con
Doña Sebastiana de Ávila y Mancebo, con la cual tuvo dos hijos,
Don Pedro y Don Juan de Dios de la Guardia y Ávila Mancebo.
En Panamá, alrededor de 1721, Don Diego, ya viudo de Doña
Sebastiana contrajo segundas nupcias con Doña Ana Francisca
López de Espejo, mencionada como “una de las más principales
señoras del lustre en esta dicha ciudad, por ser de distinción sin
mezcla alguna de moros, indios ni de recién convertidos.” 100
Fruto de este segundo matrimonio fue, entre otros, don
Víctor de la Guardia y López de Espejo, quien contrajo nupcias
con Doña Isabel María de Ayala y Medina, hija del tesorero real
oficial, regidor, alcalde ordinario y veinticuatro de Panamá Don
Tomás Francisco de Ayala Álvarez, oriundo de Sevilla, y de Doña
Juana de Medina y Calderón. Esta familia era muy prominente.
Doña Isabel fue hermana de Don Manuel José de Ayala y Medina,
quien pasó a España y fue consejero de Indias; de Don Antonio
de Ayala y Medina, relator de la Real Audiencia de Quito, y de
Don Félix de Ayala y Medina, alcalde mayor de Natá, juez de
residencia de Veragua y oficial mayor de Portobelo. Hijos de Don
Félix fueron Don Francisco de Ayala, gobernador del Darién y de
Antioquia y teniente de rey de la Plaza de Panamá; Don Manuel
de Ayala, capitán retirado de la Plaza Mayor de Panamá, y Don
Juan de Dios Ayala, gobernador de Veragua y de Costa Rica 101.
Hijo de Don Víctor y Doña Isabel, fue entre otros, Don
Tomás Esteban de la Guardia y Ayala, quien trasladó su residencia
a Natá y después a Penonomé en 1764. Fue teniente de justicia
de Penonomé, regidor del Ayuntamiento de Natá y alcalde mayor
de Natá. Casó en primeras nupcias alrededor de 1766 con una
hacendada de Penonomé, quizás de la familia con mayores
99
Información proporcionada por don Omar Jaén Suárez en junio de 2014, tomada del
Archivo General Militar de Segovia. “Expediente matrimonial de D. Tomás de Grimaldo,
1776”
100
Ibid.
101 Archivo Histórico Nacional de Colombia, Bogotá, Colombia. Genealogías, tomo 3,
Expediente sobre don Víctor de la Guardia y Ayala.
28
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
hatos ganaderos y esclavos en la región, “antigua y de la mayor
consideración” 102, Doña María Isabel Jaén de Abelda, hija de
Don Francisco José Sánchez Jaén, regidor del Cabildo de Natá en
varias ocasiones, y de Doña María Josefa de Albelda, también de
importante familia natariega 103. Al final de su vida, don Tomás
Esteban, viudo ya por segunda vez, se ordenó sacerdote.
El más destacado de los hijos de Don Tomás Esteban y su
primera esposa fue Don José Víctor de la Guardia y Jaén 104 (usó
los apellidos “de la Guardia y Ayala”), quien nació en Penonomé
el 11 de marzo de 1772 y contrajo nupcias con Doña Petra Josefa
Robles y Jiménez, “niña de distinguida nobleza” 105, hija legítima
de Don Sebastián de Robles, muchas veces alcalde ordinario de
Natá, y de doña Petra Josefa Jiménez y Yangües; nieta paterna del
capitán Don Manuel de Robles, oriundo de España, y de Doña
Clemencia Ruiz de Torres, oriunda de la ciudad de Natá; nieta
materna del Capitán Don Juan José Jiménez y de Doña Juana
de Jesús Yangues, “todos caracterizados en nobleza” 106. Bajo el
dominio español, Don José Víctor fue alcalde mayor de Natá,
oidor de la Real Audiencia de Guatemala y jefe político subalterno
del partido de Granada de Nicaragua. En 1823, debido a las
turbulencias políticas y bélicas de Nicaragua se trasladó con su
familia a Costa Rica, donde fue elegido como vicepresidente del
Congreso Constituyente inaugurado en setiembre de 1824. Murió
en diciembre de ese mismo año, en su hacienda de Bagaces.
Además de su actuación política, cabe mencionar que fue autor de
una tragedia alegórica de corte neoclásico, La Política del Mundo,
primera obra teatral originaria de Panamá y única conocida de la
época del dominio español, que se estrenó en su ciudad natal en
1809 y que casi un siglo después sería publicada en Costa Rica por
su bisnieto don Ricardo Fernández Guardia.
102
Ibid.
103
Información proporcionada por don Omar Jaén Suárez.
104 Sobre Don Víctor, V. FERNÁNDEZ PERALTA, Álvaro, “Don Víctor de la Guardia y
Jaén” en Revista de la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas, San José, N° 2, 1955,
pp. 29-30.
105 Archivo Histórico Nacional de Colombia, Bogotá, Colombia. Genealogías, tomo 3,
Expediente sobre don Víctor de la Guardia y Ayala.
106
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
29
El Canciller Lizano
El hijo menor de Don José Víctor y Doña Petra fue Don
Rudesindo de la Guardia y Robles, nacido en Penonomé el 1° de
marzo de 1809, cuando su padre era alcalde mayor de Natá y su
jurisdicción. Fue bautizado en la misma ciudad el 12 del mismo
mes y año, con los nombres de Miguel José Rudesindo, habiendo
sido sus padrinos el ilustrísimo señor doctor Manuel Joaquín
Gonzales de Acuña, obispo de Panamá, y doña Petra Celestina
Villarreal 107. Don Rudesindo, quien murió en Alajuela el 27 de
noviembre de 1862, fue gobernador de Guanacaste y Puntarenas
y coronel del ejército costarricense. Casó en 1828 con doña María
Gutiérrez y Flores (1808-1891), tía materna de don Saturnino
Lizano. De este matrimonio del que nacieron, entre otros hijos,
los generales don Víctor, don Tomás y don Miguel Guardia
Gutiérrez. Entre las hermanas de estos cabe mencionar a doña
Cristina, esposa del también general y presidente de la República
don Próspero Fernández Oreamuno, y a doña Isabel, quien casó
con el abogado e historiador don León Fernández Bonilla 108.
Al igual que la familia Lizano, los Guardia tuvieron una
importante vinculación con Puntarenas, ya que don Rudesindo
Guardia fue gobernador de la comarca 109 y su hijo primogénito
don Víctor Guardia Gutiérrez desempeñó allí el cargo de juez de
primera instancia 110 y fiscal 111.
Don Tomás Guardia Gutiérrez, nacido en Bagaces el
16 de diciembre de 1831, casó en primeras nupcias en Rivas el
15 de noviembre de 1849 con doña Perfecta Barrios y Ladrero,
nicaragüense, quien falleció en Alajuela el 25 de abril de 1856 112.
De este matrimonio solamente quedó una hija, doña Petronila
(Petra), nacida en Rivas el 19 de marzo de 1851, que casó el 30
de marzo de 1872 con don Adolfo Bonilla Carrillo y murió en
107 Información proporcionada por Mauricio Meléndez Obando, tomada del Archivo
Histórico Arquidiocesano Bernardo Augusto Thiel, sección de Fondos Antiguos, Caja N° 38, f.
347 y 347 v.
108 FERNÁNDEZ PERALTA, Álvaro, “Familia de La Guardia. Principios del Siglo XVII” en
Revista de la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas, San José, N° 6, 1958, pp. 1931.
30
109
Gaceta oficial de Costa Rica, 9 de mayo de 1860.
110
Gaceta oficial de Costa Rica, 9 de noviembre de 1859.
111
Gaceta oficial de Costa Rica, 9 de mayo de 1860.
112
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11848-421-38
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Alajuela el 13 de julio de 1880, de una enfermedad pulmonar 113.
El 18 de abril de 1857, don Tomás contrajo segundas nupcias en
Alajuela con doña Emilia Solórzano Alfaro, hija de don Rafael
del Pilar Solórzano y Alvarado y doña Canuta Alfaro y González.
De este matrimonio nacieron cinco hijos: doña Angélica; don
Rudesindo (1862-1948), casado en primeras nupcias el 2 de
febrero de 1885 con doña Rosa Tinoco Granados, hermana del
presidente don Federico Tinoco Granados, y en segundas el 26
de diciembre de 1914 con doña Eva Rodríguez Quesada; doña
Rosario (1869-1938), casada en primeras nupcias el 5 de abril
de 1888 con don Odilón Jiménez Bonnefil y en segundas el 9
de agosto de 1903 con don Emilio de Mézerville Ossage; doña
Emilia (1871-1919), casada el 5 de abril de 1888 con don José
María Soto Alfaro, hermano del presidente don Bernardo Soto
y candidato a la presidencia en 1919, y doña Isabel (1873-1953),
casada el 7 de mayo de 1892 con don Alejandro Jiménez Bonnefil
114
. Don Tomás tuvo además tres hijos extramatrimoniales, que
no pudo reconocer legalmente por estar ya casado con doña
Emilia Solórzano: con doña Manuela García Santana tuvo a doña
Pacífica García Santana, nacida en 1867 y casada en Liberia el 5 de
noviembre de 1900 con don Federico Sobrado Carreras, español
115
, y con doña Rosaura Jinesta tuvo a doña Francisca Adelaida
Elisa Jinesta, nacida en Alajuela el 23 de marzo de 1871 y casada
el 25 de junio de 1889 con su primo hermano don José León
Fernández Guardia 116, y a don Francisco Julio de Jesús Jinesta,
nacido en Alajuela el 30 de junio de 1874 117, quien casó con doña
María Araceli Rivas Solórzano 118, salvadoreña 119.
La ceremonia religiosa del desposorio de don Saturnino
y doña Angélica fue oficiada por el presbítero don Ramón
Isidro Cabezas Alfaro, quien veló a los novios al día siguiente, y
se efectuó en el salón principal del Palacio Presidencial, donde
113
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11765-46266-73
114
FERNÁNDEZ PERALTA, 1958, p. 25.
115
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11817-140798-75
116
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11808-63057-87;
FERNÁNDEZ
PERALTA, Álvaro, “Familia Fernández-Val. Principios del Siglo XVII”, p. 79, en Revista de la
Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas, San José, 1961, N° 9, 35-86.
117
OBREGÓN LORÍA, 1996, vol. IV, p. 120.
118
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11074-11593-58?cc=1460016
119
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-1-17395-14721-59?cc=1821208
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
31
El Canciller Lizano
residían don Tomás Guardia y su familia 120. Como padrinos
actuaron don Joaquín Lizano Gutiérrez, secretario de Hacienda
y Comercio y hermano del novio, y doña Cristina Guardia
Gutiérrez de Fernández, prima hermana de don Saturnino,
hermana del presidente y esposa del general don Próspero
Fernández Oreamuno. El semanario El Costarricense reseñó así el
acontecimiento en su edición del 10 de abril de 1875:
“El Domingo 4 del corriente, a las ocho de
la noche, se verificó el enlace de la Señorita
doña Angélica Guardia, con el Señor don
Saturnino Lizano.
El acto tuvo lugar en el salón principal
del Palacio en que reside S. E. el General
Presidente, padre de la desposada.
Hizo el matrimonio el Presbítero don
Ramón I. Cabezas, quien también veló a los
novios el siguiente día; sirvieron de padrinos
el Señor Don Joaquín Lizano y la Señora
Doña Cristina Guardia de Fernández.
El Señor Presidente y su Señora
hicieron un convite bastante general, para
el casamiento de su hija. Con muy pocas
excepciones, indudablemente justificadas,
los convidados acudieron a la invitación.
Una inmensa concurrencia presenció el
matrimonio al que aludimos, acompañando
al Jefe de la República en ese acontecimiento
doméstico; estaban muchas personas
notables por sus antecedentes y posición
social; los principales funcionarios, los
120 El Palacio Presidencial estaba ubicado donde hoy se encuentra la sede principal del
Banco Nacional de Costa Rica en San José, sobre la avenida primera. Este edificio, muy bello y
elegante, que fue residencia de varios gobernantes y también sirvió de sede a la Secretaría de
Guerra y Marina y a la Comandancia de Plaza de San José, fue bárbaramente demolido en el
decenio de 1950 para ampliar el edificio original del Banco Nacional.
32
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Cónsules de varias naciones extranjeras, y
los amigos particulares del Presidente.
Los seis salones, cuatro apartamentos y
aun las galerías del Palacio Presidencial,
estaban llenos de Señoras y Caballeros:
después que pasó la ceremonia religiosa,
una de las bandas militares amenizó
aquella agradable velada.
La parte baja de la entrada al Palacio se
convirtió instantáneamente en un animado
salón de baile; y a las doce de la noche se
sirvió una magnífica cena, prolongándose la
reunión hasta eso de las tres de la mañana.
El General Presidente y su Señora
hicieron los honores a todos los concurrentes,
con la mayor cortesanía, franqueza y
exquisita finura.
Un grupo bastante considerable de
personas del pueblo, llenaba la parte baja
e interior del Palacio; todas ellas fueron
convenientemente obsequiadas.
Deseamos al Señor Lizano y su Señora,
felicidad nunca interrumpida; la merecen por
sus distinguidas circunstancias personales.” 121
Poco después de su boda, el 18 de abril de 1875, don
Saturnino y su esposa llevaron como padrinos a la pila bautismal a
Ana María Angélica de Jesús Bonilla y Guardia, hija de don Adolfo
Bonilla Carrillo y doña Petra Guardia Barrios, media hermana de
doña Angélica 122.
121
El Costarricense, 10 de abril de 1875.
122
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11396-135063-78 Doña Angélica
Bonilla fue la única hija de don Adolfo y doña Petra que llegó a la edad adulta, ya que sus
hermanos Alberto Rafael Francisco (1873-1875) y María Clemencia Perfecta de la Trinidad
(1877-1880) murieron en la infancia. Contrajo nupcias en 1892 con Charles H. Windham,
norteamericano, con quien se estableció en California, y dejó allí copiosa descendencia.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
33
El Canciller Lizano
En el matrimonio Lizano-Guardia nacieron dos hijos:
1.- Rafael Francisco Gonzalo de Jesús, nació en San José el 9
de diciembre de 1875 y murió el 1° de mayo de 1950. Fue
el primer nieto varón del presidente don Tomás Guardia,
por lo que este gobernante y sus allegados celebraron
de modo especial su nacimiento. Fue bautizado el 23 de
diciembre de 1875 de ese mes por el presbítero don Carlos
María Ulloa y Pérez y sus padrinos fueron sus abuelos
maternos don Tomás y doña Emilia de Guardia 123. Antes
de casarse tuvo un hijo extramatrimonial con doña
Rosalía Arrizola, don Humberto Lizano Arrizola (19001934), quien casó con doña Amalia Volio Sancho 124. Casó
en Managua, Nicaragua, el 8 de diciembre de 1906, con
doña Hortensia Ramírez Martínez, nicaragüense, hija de
don Alberto Ramírez y doña Leonor Martínez.
2.- María del Rosario Ramona Josefa de Jesús, nació en
San José el 28 de agosto de 1881. Fue bautizada en San
José el 7 de setiembre siguiente en el Palacio Episcopal
por el obispo monseñor Bernardo Augusto Thiel y sus
padrinos fueron don Próspero Fernández Oreamuno y
doña Emilia Solórzano de Guardia 125. Casó en Alajuela,
el 25 de noviembre de 1903, con don Roberto Fonseca
Calvo, médico, hijo de don Pantaleón Fonseca y doña
Inés Calvo. Ofició la ceremonia el presbítero don Claudio
María Volio Jiménez 126.
Con respecto a las relaciones que don Saturnino había
mantenido anteriormente con doña María Prado y doña Procopia
Casares, doña Angélica posiblemente aplicaba la filosof ía de que
lo que no fue en mi año no fue en mi daño, ya que tuvo vínculos
bastante cercanos con los hijos que su marido había tenido
antes de su matrimonio e incluso fue madrina, junto con don
Saturnino, de uno de los hijos de doña Isabel Lizano Prado y su
esposo don Juan de Dios Guerra. En su casa vivieron los jóvenes
34
123
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11783-112269-81
124
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11823-81839-3
125
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11860-83149-97
126
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11808-60967-70
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
don Nicolás y don Benito Lizano, hijos de don Saturnino y doña
Procopia Casares. Además crió como hija a una niña llamada
Eloísa Coronado Zapata, quien casó con don Mercedes Araya 127.
Familiarmente, a doña Angélica se le llamaba mama Yeca.
Don Saturnino y doña Angélica Guardia de Lizano
5.- Otras actividades. La Junta de Caridad. La masonería y el
catolicismo.
Don Saturnino Lizano fue integrante de la Junta de
Caridad de Puntarenas, que presidió en 1865. Además de
don Saturnino, los miembros del directorio en ese año fueron,
en calidad de vocales propietarios, don Federico Fernández
Oreamuno, hermano del que después fue presidente de la
República don Próspero de iguales apellidos; don Dionisio Jirón,
vocal tesorero, y don Bernardino Alvarado. Los vocales suplentes
eran don L. Angulo y don M. Castillo. El secretario de la Junta
era don Manuel Casares y Moreno, hermano de doña Procopia
Casares, quien también desempeñaba el cargo de secretario de
127
SÁENZ CARBONELL y otros, 2001, p. 415.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
35
El Canciller Lizano
la Gobernación de Puntarenas 128. Don Saturnino presidió la
Junta en otras ocasiones, durante sus posteriores épocas como
gobernador 129.
Como ya indicamos, la condición portuaria de
Puntarenas era propicia para generar una mentalidad más liberal
que la existente en otras poblaciones. Según indica el historiador
don Ricardo Martínez Esquivel,
“… el desarrollo socioeconómico de la
ciudad de Puntarenas caracterizado por
ser un punto de encuentro de diferentes
culturas y la casa de personas de distintas
nacionalidades llevó a esta ciudad a ser
más abierta a nuevas ideas y normas
de sociabilidad, permitiendo así la
organización de dos sociedades de ideas
masónicas entre 1870 y 1876.” 130
Como muchos integrantes de la élite costarricense de la
segunda mitad del siglo XIX, don Saturnino Lizano se unió a las
filas de la masonería. Consta que participó como fundador en la
logia Amistad Sincera, constituida en 1874 y que fue una de las
dos existentes en Puntarenas en esa época 131. Sin embargo, no
cabe duda de que se había iniciado en otra, porque fue secretario
del cuadro logial o junta directiva de Amistad Sincera 132, y de
conformidad con las regulaciones de la masonería, un miembro
debe tener al menos de cinco a siete años de haberse iniciado
para desempeñar un cargo en el cuadro logial. Como quiera que
fuese, la logia Amistad Sincera subsistió hasta julio de 1876.
128
Municipal Puntarenas nº 4269.
129
El Pacífico, 28 de abril de 1899.
130 MARTÍNEZ ESQUIVEL, Ricardo, Actividades masónicas en la ciudad de Puntarenas
(1870-1876), en https://www.academia.edu/490459/Actividades_mas%C3%B3nicas_en_la_
ciudad_de_Puntarenas_1870-1876
131 MARTÍNEZ ESQUIVEL, Ricardo, Masones y su participación política en Costa Rica
(1865-1899), en
http://historia.fcs.ucr.ac.cr/articulos/2008/especial2008/articulos/06-politica/76.pdf
132 FAITH LEÓN, Arturo y OBREGÓN LORÍA, Rafael, Álbum conmemorativo del 80
aniversario de la fundación de la Francmasonería en Costa Rica, Gran Logia de Costa Rica, San
José, 1945, p. 22. Debemos estos datos a la amabilidad de don Tomás Federico Arias Castro.
36
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Tiempo después de su participación en la logia Amistad
Sincera, las ideas de don Saturnino se orientaron cada vez más
notoriamente hacia un estricto apego a los dogmas de la Iglesia
Católica, aunque no consta que haya renunciado formalmente a la
masonería. Creemos que en este cambio de actitud pueden haber
influido su matrimonio en 1875 con doña Angélica Guardia y la
fuerte personalidad de esta y su madre doña Emilia Solórzano
de Guardia, ambas mujeres muy devotas y en cuya compañía
don Saturnino visitó el Vaticano en 1878. En 1889 fue uno de
los fundadores y presidente de la Unión Católica de Costa Rica,
asociación de laicos fundada en 1889 para defender los intereses
del catolicismo en el país y cuyos objetivos eran diametralmente
opuestos a la masonería. Ya en el ocaso de su vida apoyó al Partido
Unión Demócrata, de tendencia católica tradicional, y antes de
morir recibió los últimos sacramentos de la Iglesia.
La familia Lizano-Guardia a fines del siglo XIX. De izquierda a derecha: María del Rosario,
don Saturnino, doña Angélica y Gonzalo
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
37
El Canciller Lizano
Capítulo II
LOS AÑOS ANTERIORES (1860-1876)
1.- Gobernador de la comarca de Puntarenas.
Don Saturnino Lizano sin duda vio con simpatía el golpe
que en agosto de 1859 derrocó al gobierno de don Juan Rafael
Mora y llevó a la presidencia a don José María Montealegre, ya
que el 30 de abril de 1860, al día siguiente de que Montealegre
tomara posesión como presidente constitucional, suscribió en
Puntarenas un documento de apoyo al nuevo gobernante, junto
con su tío político don Rudesindo Guardia, gobernador de la
comarca de Puntarenas; los integrantes de la Municipalidad
porteña y un grupo de vecinos de la población, entre ellos su
hermano don Nicolás Lizano. El texto decía:
“Sr. Presidente de la República
Señor.
Ocupado de vuestros propios negocios
vivíais casi ajeno a la cosa pública, mientras
la patria no necesitó de vuestros servicios;
pero llamado en momentos de conflicto para
poneros al frente del movimiento político
del 14 de Agosto último, no titubeasteis en
38
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
arrostrar el peligro, y con toda la abnegación
de un verdadero republicano abandonasteis
la vida privada para correr los azares
de la pública en beneficio de su patria; os
habéis conducido con la moderación y el
tino que cumplían al delicado encargo que
os dieron; correspondisteis dignamente a
las esperanzas de vuestros comitentes, y
habéis llenado cumplidamente vuestra
misión contribuyendo en gran manera
a la salvación de la República, sin que
para ello haya sido preciso hacer grandes
sacrificios, ni derramar la sangre de vuestros
conciudadanos. Habéis por ello merecido
bien de la patria, y ella os acaba de dar
una prueba de gratitud designándoos tan
uniformemente para ocupar en propiedad
la silla presidencial por el período que
la nueva Constitución demarca, y que
corre desde el 29 actual en que os habéis
posesionado de vuestro alto encargo. La
Municipalidad, empleados y vecinos que
suscriben os felicitan con toda la efusión
de un corazón patriótico, esperando que
como habéis salido airoso en la época dif ícil
y transitoria en que os habéis encontrado
a la cabeza de los negocios públicos con
omnímodas facultades, no seréis menos
feliz bajo el régimen constitucional en que
acabamos de entrar. Sí, la Providencia
os guiará como hasta aquí y bajo su
sombra bienhechora reconciliaréis los
partidos, promoveréis reformas saludables
y conduciréis la República por la vía del
progreso, hacia su engrandecimiento.
Tales son nuestros votos.
Puntarenas, Abril 30 de 1860.” 133
133
Gaceta oficial de Costa Rica, 9 de mayo de 1860.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
39
El Canciller Lizano
Don Joaquín Lizano, hermano de don Saturnino, fue
elegido como representante por Puntarenas para el período 18601862 134.
El 5 de octubre de 1863, el presidente don Jesús Jiménez
nombró a don Saturnino Lizano como gobernador en propiedad
de la comarca de Puntarenas. Tomó posesión del cargo el 8 de ese
mismo mes 135.
El artículo 136 de la Constitución Política de 27 de
diciembre de 1859 disponía:
“Habrá en cada provincia un
Gobernador, agente del Poder Ejecutivo y de
nombramiento de este, con las calidades y
atribuciones que le señale la ley.” 136
Aunque Puntarenas no era una provincia, sino una
comarca, su régimen era muy similar y también en ella se
nombraban gobernadores.
Una de las obras realizadas por don Saturnino como
gobernador fue la construcción de las primeras instalaciones para
bañistas con que contó el puerto:
“Las primeras instalaciones para los
bañistas se construyeron en 1864, siendo
gobernador de la comarca Saturnino
Lizano. Se trataba de un rancho con
aposentos para desvestirse y guardarropía,
y un enorme cerco en la playa, para darle
cierta privacidad.” 137
A fines de 1864 se hizo evidente la dificultad de
integrar la Municipalidad de Puntarenas, debido a la carencia de
134
Gaceta oficial de Costa Rica, 11 de abril de 1860.
135
Gaceta oficial, 17 de octubre de 1863.
136
Constitución de 27 de diciembre de 1859, art° 136.
137 ROSS, Marjorie, Entre el comal y la olla: fundamentos de gastronomía costarricense,
San José, EUNED, 1ª. ed., 2001, p. 168.
40
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
suficientes vecinos idóneos, ya que la mayoría de sus habitantes
eran extranjeros o transeúntes, y don Saturnino hizo presente
a la Secretaría de Gobernación la imposibilidad de encontrar
personas que reuniesen los requisitos de ley para servir los cargos
municipales. En atención a que tales dificultades eran insuperables,
por acuerdo de 23 de noviembre de 1864 la Secretaría dispuso que
en cuanto cesaran los regidores en funciones el gobernador de la
comarca reasumiera las funciones de la corporación municipal
138
. Esta decisión fue confirmada por el Congreso en mayo de
1865, mediante una ley que dispuso suprimir la Municipalidad
y reasumir sus funciones en la Gobernación, aunque en los
casos graves el gobernador debía aconsejarse de tres vecinos
convocados por él, aunque no fueran costarricenses 139.
El 2 de junio de 1865, un grupo importante de vecinos de
Puntarenas firmó un escrito dirigido al presidente Jiménez, para
pedir el auxilio del gobierno en la reedificación de la iglesia de
la localidad 140. Don Saturnino y otros vecinos se sumaron a esta
petición en un escrito posterior 141.
Concluido el 8 de mayo de 1866 el primer período
presidencial de don Jesús Jiménez, don Saturnino presentó su
renuncia al cargo de gobernador de Puntarenas, mediante una nota
que el 14 de ese mes dirigió al nuevo presidente don José María
Castro Madriz, en la que expresaba como motivo de su dimisión
la necesidad de tener que viajar a otros países centroamericanos y
no saber cuánto tardaría, además de que era socio administrador
de la casa Lizano y Hermano y debía atender los asuntos de la
empresa. La renuncia fue aceptada por el presidente Castro el 21
de mayo 142.
138
Gaceta oficial, 13 de mayo de 1865.
139
Decreto n° 4 de 17 de mayo de 1865.
140
GONZÁLEZ VÍQUEZ, 1933, p. 12.
141
Ibid., p. 13.
142
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 7432.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
41
El Canciller Lizano
2. – Miembro de la junta calificadora de Puntarenas para las
elecciones de 1868.
El 1° de noviembre de 1868 un golpe militar derrocó
a Castro y llevó nuevamente al poder a don Jesús Jiménez. En
muchas poblaciones del país, vecinos prominentes suscribieron
actas en apoyo del golpe. En Puntarenas, el documento que
secundaba el pronunciamiento se emitió el 5 de noviembre en
una reunión celebrada en el despacho de la Gobernación de la
comarca y entre sus primeros firmantes figuraba don Saturnino
Lizano. Los treinta y dos “principales vecinos” suscriptores, vista
el acta revolucionaria de San José, declaraban:
“… que se adhieren a ella, y que como
ciudadanos amigos de la tranquilidad y
buen nombre de Costa Rica, ofrecen su
cooperación, si fuera necesaria, a efecto de
que sean llevados a buen término los medios
proclamados para establecer un Gobierno
verdaderamente popular.” 143
El 13 de noviembre, don Jesús Jiménez convocó a
elecciones para una asamblea constituyente, y dispuso que
en cada cabecera de provincia y en la ciudad de Puntarenas se
formara una junta integrada por el gobernador y dos “vecinos
notables” para dirigir el proceso de organización de las elecciones
en la jurisdicción respectiva y nombrar las juntas electorales de
las cabeceras de cantón. Los comicios debían efectuarse en el mes
de diciembre. En el mismo decreto de convocatoria, el gobernante
designó a los dos vecinos notables que debían formar la junta con
el gobernador, y para el caso de la comarca de Puntarenas nombró
a don Gregorio Escalante Nava y a don Saturnino Lizano. Don
Joaquín Lizano fue uno de los escogidos para la junta de Heredia
144
.
42
143
Gaceta oficial, 14 de noviembre de 1868.
144
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
3.- Representante electo por la comarca de Puntarenas.
En febrero de 1869 la Asamblea Constituyente convocada
a raíz del golpe contra Castro aprobó una nueva Constitución
Política, para reemplazar a la de 1859. De conformidad con esta
nueva Carta, el 28 de marzo de 1869 se efectuaron elecciones
presidenciales y legislativas. En estos comicios, don Jesús Jiménez
fue elegido como presidente para el trienio 1869-1872, y don
Saturnino Lizano como representante propietario por la comarca
de Puntarenas, también para un período de tres años 145.
El 30 de abril de 1869, a poco de que le fuera comunicado
el resultado de los comicios y se le citara para la sesión inaugural
del Congreso, don Saturnino, que no había buscado aquella
elección, se dirigió a los secretarios de la cámara para manifestar
que
“Muy lejos de suponer que en mí recayera
tal nombramiento, no había pensado en
desocupar mi tiempo que con anticipación
tenía deslindado a mis propios negocios y
otros ajenos que en calidad de agente son
a mi cargo; y cuya traslación repentina al
cuidado de otra persona me expondría a
sufrir pérdidas y trastornos de más o menos
consideración…” 146.
En la misma nota, don Saturnino se excusó de asistir
a la sesión inaugural y a una parte de las sesiones y suplicó
a los secretarios que lo hicieran presente a la Cámara de
Representantes para que se llamara al suplente, mientras le
era posible concurrir 147. Posteriormente solicitó una licencia
indefinida, pero el 3 de mayo de 1869 solo le fue concedida
por el plazo de treinta días 148. Sin embargo, una vez expirado
este, continuó sin presentarse en la capital. Al poco tiempo, el
145 Sobre las elecciones de 1869, V. OBREGÓN QUESADA, Clotilde, El proceso electoral
y el Poder Ejecutivo en Costa Rica 1808-1998, San José, Editorial de la Universidad de Costa
Rica, 1ª. ed., 2000, p. 173.
146
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 8413.
147
Ibid.
148
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 13486.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
43
El Canciller Lizano
Legislativo entró en receso y ya no volvió a reunirse, ya que el 27
de abril de 1870 un golpe militar ejecutado por el coronel don
Tomás Guardia derrocó al gobierno de don Jesús Jiménez y quedó
nuevamente roto el orden constitucional.
4.- Diputado propietario por la comarca de Puntarenas en la
Convención Nacional Constituyente de 1870.
La revolución del 27 de abril proclamó como jefe
provisorio de la República al licenciado don Bruno Carranza
Ramírez, prominente médico josefino de ideología liberal radical.
Don Tomás Guardia asumió la comandancia del ejército y su
primo don Joaquín Lizano Gutiérrez fue nombrado secretario de
Gobernación y carteras anexas.
El nuevo régimen se consolidó rápidamente y recibió
adhesiones de todas partes del país. En Puntarenas, un grupo
de dieciséis de los principales vecinos, en el cual figuraba don
Saturnino Lizano, se reunieron en las oficinas de la Gobernación
con don Gregorio Escalante, recién designado como nuevo
gobernador de la comarca, e impuestos del movimiento
revolucionario, suscribieron un acta mediante la cual
“… SECUNDAN el grito de insurrección,
y se ADHIEREN espontáneamente a aquel
movimiento en razón a los motivos que lo
han ocasionado, y que ya ha mencionado la
Junta Popular de San José, declarando que
aceptan las resoluciones tomadas por esta,
en todo y conforme se han publicado; así
como a las disposiciones del Jefe Provisorio
de la Nación.” 149
proclamado como jefe provisorio de la República por la revolución
del 27 de abril, convocó el 20 de junio a elecciones para una
nueva asamblea constituyente, que se denominaría Convención
149
44
Gaceta oficial, 7 de mayo de 1870.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Nacional 150. En estos comicios, don Saturnino fue elegido por la
comarca de Puntarenas como diputado propietario.
La Constituyente, que adoptó el nombre de Convención
Nacional, se inauguró el 9 de agosto de 1870, bajo la presidencia
de don José Gregorio Trejos Gutiérrez, primo de don Saturnino,
pero este no se presentó a la primera sesión ni a las siguientes.
Cabe mencionar que en esa sesión del 9 de agosto, como el
licenciado Carranza había presentado su renuncia irrevocable,
la Constituyente efectuó la elección de un nuevo presidente
provisorio. Los pareceres se dividieron entre don Tomás Guardia,
quien resultó victorioso con diecisiete votos (los de don Juan
Rafael Carazo, don Álvaro Contreras y Membreño, don León
Fernández Bonilla, don Pedro García Oreamuno, don Víctor
Guardia Gutiérrez, don Ezequiel Herrera Zeledón, don Miguel
Macaya de la Esquina, don Félix y don Juan Rafael Mata y Lafuente,
don Vicente Montes de Oca, don Carlos Sancho y Alvarado, don
Jesús Solano Gutiérrez, don Antonio María Soto Quesada, don
José María Ugalde, don Juan Nepomuceno Venero y López y
don Carlos y don Julián Volio Llorente); su primo hermano don
Joaquín Lizano Gutiérrez, secretario de Gobernación y hermano
de don Saturnino, que obtuvo nueve (de don Antonio Álvarez,
don Napoleón Escalante, don Salvador Jiménez Blanco, don
Braulio Morales Cervantes, don Paulino Ortiz Campos, don
Rafael Ramírez Hidalgo, don José Gregorio Trejos Gutiérrez,
don Nicolás Ulloa Solares y don Pedro Zamora) y el general don
Buenaventura Carazo, que recibió uno solo (de don Francisco
Pinto y Castro) 151.
El 16 de agosto, don Joaquín Lizano fue transferido a la
Secretaría de Hacienda y Comercio 152.
No fue sino hasta la sesión del 27 de setiembre de
1870 cuando don Saturnino se hizo presente en la Convención
Nacional y prestó el juramento correspondiente 153. De allí en
adelante asistió a todas las sesiones, pero prácticamente no pudo
150
OBREGÓN LORÍA, 1966, pp. 339-347.
151
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 13613.
152
Gaceta del 20.
153
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 13613.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
45
El Canciller Lizano
brindar ningún aporte a las tareas constituyentes, porque el 10 de
octubre de ese mismo año, después de graves enfrentamientos con
el alto cuerpo, el presidente Guardia disolvió la Convención 154.
En 1870 don Saturnino estuvo encargado interinamente
de la gobernación de Puntarenas durante un corto tiempo, hecho
que se repitió en 1871 155.
5.- Jurado de la comarca de Puntarenas.
Mediante una ley de 10 de julio de 1873, el Congreso
Constitucional dispuso crear en el procedimiento penal
costarricense la institución anglosajona del jurado y dispuso que
las asambleas electorales procedieran a nombrar a los ciudadanos
que desempeñarían esa función por el resto del año. La comarca
de Puntarenas debía elegir treinta jurados 156.
Don Saturnino Lizano fue uno de los vecinos del puerto
elegido para desempeñar la función de jurado, según informó
el 27 de julio el gobernador don Clodomiro Escalante 157. Sin
embargo, poco después se le excluyó de dicha función, debido a
que el 2 de setiembre fue nombrado gobernador de la comarca de
Puntarenas y una ley sancionada el 4 de setiembre dispuso que los
gobernadores de provincia y comarca no podrían ser nombrados
como miembros del tribunal de jurado 158.
6.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por segunda vez.
El 2 de setiembre de 1873, el presidente don Tomás
Guardia nombró a don Saturnino como gobernador de la comarca
de Puntarenas 159. El periódico El Costarricense anunció así la
designación:
46
154
OBREGÓN LORÍA, 1966, pp. 351-352.
155
GONZÁLEZ VÍQUEZ, 1933, p. 12.
156
Decreto n° 18 de 10 de julio de 1873.
157
Gaceta oficial, 2 de agosto de 1873.
158
Decreto n° 2 de 4 de setiembre de 1873.
159
Gaceta oficial, 6 de setiembre de 1873.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
“Parabienes
Se los damos muy cordiales a la Comarca
de Puntarenas, por haber sido nombrado
Gobernador el Señor Don Saturnino
Lizano. Propietario honrado, ciudadano
lleno de patriotismo, ha aceptado aquel
destino sin otro interés que servir a la
República, en aquel punto interesante, cuyo
progreso y engrandecimiento se marcan
de una manera notable; y mucho bueno
tiene derecho a esperar de las apreciables
circunstancias y distinguidas cualidades de
nuevo Gobernador.” 160
Efectivamente, en aquellos momentos Puntarenas
experimentaba un modesto auge, que se acentuó especialmente a
partir de 1874, cuando el presidente Guardia
“… ordenó construir el muelle pequeño
del estero, con lo que se abrió amplia
facilidad al comercio de cabotaje dentro del
golfo y con el Guanacaste.” 161
Otro motivo que contribuyó al dinamismo de Puntarenas
por aquellos años fue el establecimiento de presidios en las islas
del Coco y San Lucas, que
“… forzaba al gobierno a mantener
en servicio buques de calado mayor y
tripulación numerosa, cuyo sostenimiento
ayudaba a dar vida y movimiento al puerto
y su comercio.” 162
Como gobernador de Puntarenas, don Saturnino Lizano
emitió un reglamento para el presidio de San Lucas, en el cual
se regulaban minuciosamente las actividades de la guarnición, el
160
El Costarricense, 12 de setiembre de 1873.
161
GONZÁLEZ VÍQUEZ, 1933, p. 74.
162
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
47
El Canciller Lizano
trabajo de los reos, los horarios, las labores de vigilancia y la llegada,
salida y registro de embarcaciones y de la correspondencia. El
régimen del presidio era muy riguroso, incluso para los miembros
de la guarnición, ya que por ejemplo en el artículo primero de este
reglamento se disponía:
“Ningún soldado de la guarnición puede
comunicarse con los reos bajo pena de diez
palos; y cincuenta si estuviese de centinela o
haciendo cualquier otra fatiga.” 163
Otra de las acciones que le correspondió realizar a don
Saturnino como gobernador en esta segunda oportunidad fue la
firma el 15 de enero de 1875 de un contrato con el doctor don José
de Irías para prestar servicios en la medicatura de la comarca y el
hospital de Puntarenas 164.
El episodio más dramático de este segundo desempeño
de don Saturnino como gobernador de Puntarenas fue la
intentona revolucionaria dirigida en octubre de 1874 por don
Joaquín Fernández Oreamuno, distinguido veterano de la
Campaña Nacional y adversario político del presidente Guardia.
El señor Fernández, que había salido del país como exiliado
unos meses atrás y se había radicado en Nicaragua, se acogió a
una amnistía y llegó a Puntarenas en la tarde del 12 de octubre
en el vapor norteamericano Winchester, junto con seis hijos 165
de corta edad, con el aparente propósito de dirigirse al interior
del país y establecerse en San José. Sin embargo, a las once de la
noche del sábado 17 de octubre166, con un grupo de alrededor de
ciento cincuenta hombres, que lo vitoreaban como presidente de
la República, logró ingresar en el cuartel de Puntarenas, gracias
a que el inspector de bodegas don Martín Zeledón le había
entregado as llaves. Los partidarios de Fernández se apoderaron
del cuartel rápidamente, no sin causar algunas bajas en la
48
163
A. N. C. R., S. H., Policía, documento n° 4860.
164
A. N. C. R., S. H., Policía, documento n° 5519.
165
Gaceta oficial, 17 de octubre de 1874.
166
El Costarricense, 28 de octubre de 1874.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
pequeña guarnición, que estaba formada por soldados bisoños y
adolescentes 167, la mayoría aprendices de la banda de música 168.
El comandante del cuartel, don Pedro Ávila, en compañía
del oficial don Juan Álvarez, después de enfrentarse a tiros con
los atacantes y de matar a uno de ellos, logró escapar arrojándose
a tierra desde el corredor del segundo piso. Avisado por Ávila y
Álvarez, y con el apoyo del jefe de correos don Orontes Quesada
169
, don Saturnino Lizano opuso firme resistencia a los partidarios
de Fernández:
“Los conspiradores se apoderaron
del armamento; pero contenidos por un
muy reducido número de empleados,
que no excedía de cinco, contando con el
Gobernador-Comandante y su segundo,
se limitaron a la ocupación del Cuartel
durante la noche.” 170
Mal armados y sin posibilidades de recuperar el cuartel
por sí solos, don Saturnino y varios de sus acompañantes,
después de enfrentarse con los revolucionarios en varios puntos,
se embarcaron en el vapor General Cañas, surto en el puerto, al
parecer con el propósito de ir a la isla de San Lucas y regresar al
puerto con la guarnición destacada allí:
“Cuando el grupo de los buenos
defensores de la autoridad legítima, viéndose
sorprendidos, algunos desarmados y otros
heridos, determinaron salir a embarcarse
en el vapor General Cañas, los sediciosos no
pudieron evitarles la salida.” 171
Enterado de este hecho, don Joaquín Fernández ordenó
colocar un cañón cerca del muelle del estero y otra ametralladora
167
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
168
El Costarricense, 28 de octubre de 1874.
169
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
170
Gaceta oficial, 16 de mayo de 1875.
171
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
49
El Canciller Lizano
en otro punto, con el ánimo de echar a pique el General Cañas si
regresaba 172.
Contrariamente a lo que esperaba don Joaquín
Fernández, la población de Puntarenas no se mostró dispuesta a
reconocer su autoridad 173, ya que solamente fue apoyado por el
juez de primera instancia don Francisco Zamora 174. Cuando se
dirigió a la Administración de Correos y allí instó al jefe de esa
oficina don Orontes Quesada, uno de los que había luchado horas
antes junto con don Saturnino, a reconocerlo como presidente de
la República, el señor Quesada le manifestó: “No puedo reconocer
a un revolucionario por presidente de la República; reconozco ese
carácter en el general don Tomás Guardia; y cuando sepa que ha
dejado de serlo dejaré el destino, porque no le pertenezco a Usted.”
175
El jefe revolucionario insistió y le ofreció don Orontes que lo
mantendría en su cargo, pero el digno funcionario rechazó el
ofrecimiento. Fernández le preguntó entonces si había peleado
contra su movimiento, y don Orontes le respondió con firmeza y
energía: “Sí señor, lo hecho con rifle en mano, porque es mi deber.”
176
El presidente Guardia, que se encontraba en Alajuela,
tuvo noticias de lo ocurrido en Puntarenas al mediodía del
domingo 18 de octubre, y enseguida tomó medidas para enfrentar
la revolución y enviar tropas al puerto 177. A fin de cuentas, ante la
perspectiva del regreso del gobernador Lizano con la tropa de San
Lucas y la llegada de otras desde el interior, don Joaquín Fernández
decidió desistir de aquella aventura y abandonar el puerto, para
lo cual aprovechó la llegada del vapor norteamericano Mohongo,
en la mañana del mismo domingo 178. A bordo de esa nave, el
fracasado jefe revolucionario escribió una nota que dirigió a un
vecino de Puntarenas, el capitán Francisco Roger, que en unión
50
172
Ibid.
173
Ibid.
174
Gaceta oficial, 24 de octubre de 1874.
175
El Costarricense, 28 de octubre de 1874.
176
Ibid.
177
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
178
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
de otros habitantes de la ciudad al parecer le ofreció que trataría
de evitar represalias contra sus hombres:
“Octubre 18 de 1874.
Vapor Mohongo.
Sr. Don Francisco Roger.
Deseoso de evitar los males que la
anarquía pudiera traer a mi patria por
cuya felicidad sacrificaré mi vida, he
dispuesto retirarme de Puntarenas, dejando
a U. el mando de la provincia para que dé
garantías y seguridad al vecindario.
Voy, confiado en que cumplirá U. su
deber como buen patriota y que tanto U.
como todo el comercio, harán lo que puedan
para que no se moleste a los que se han
comprometido en el movimiento de anoche:
haciendo notar la conducta honrosa de
todos los que me han acompañado; y
teniendo presente que influye mucho en mi
ánimo, al separarme de mis compañeros, la
promesa que ustedes me hacen de respetar
las personas de aquellos, y garantizarles en
lo posible respecto a los comportamientos
del Gobierno con ellos.
Soy de U. atento servidor.
Joaquín Fernández.” 179
En la madrugada del 19, don Joaquín abandonó
Puntarenas en el Mohongo 180, dejando el cuartel en manos de
sus partidarios y no sin asegurar que volvería 181. Enseguida un
grupo de vecinos, encabezado por el capitán Roger, se dirigió
179
El Costarricense, 28 de octubre de 1874.
180
Gaceta oficial, 16 de mayo de 1875.
181
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
51
El Canciller Lizano
al edificio y logró que los revolucionarios lo entregaran, sin
más efusión de sangre. Solo ocho de los hombres de Fernández
eran costarricenses; los restantes eran nicaragüenses y de otras
nacionalidades, y habían participado en la intentona por el
ofrecimiento de una gratificación de cien pesos 182.
En la misma mañana del 19 de octubre, mientras avanzaba
desde Alajuela la vanguardia de las tropas gubernamentales,
un nutrido grupo de vecinos de Puntarenas encabezado por el
secretario de la Gobernación, don Vicente Segreda, se reunieron
para tomar medidas
“… por motivo de estar acéfalo el
Gobierno de esta Comarca, con motivo
de la ausencia del señor Gobernador y
Comandante de Armas, originada por los
criminales y lamentables acontecimientos
llevados a cabo por un número de forajidos
que ya emprendieron la fuga…” 183
Los vecinos acordaron nombrar a Segreda como
gobernador provisional; repudiaron la intentona de don Joaquín
Fernández, que calificaron de absurda y descabellada, y
“… manifestaron sus simpatías por todos
aquellos que han sabido cumplir con su
deber, como son los Señores Lizano, Letona,
Orontes Quesada, Villavicencio, Ávila y
Álvarez.” 184
Don Saturnino volvió a Puntarenas inmediatamente y
fue recibido como un héroe:
“El Gobernador y Comandante de
Puntarenas, Don Saturnino Lizano, al
regresar a aquella ciudad, fue recibido por
los vecinos con las muestras del más vivo
52
182
Ibid.
183
Gaceta oficial, 24 de octubre de 1874.
184
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
entusiasmo, agradecidos a su conducta,
llena de lealtad y valor, en la noche del 17
del corriente, en la que probó que es digno
de los altos puestos con los que el Gobierno
lo ha honrado.” 185
En la noche del 19, sin conocer el resultado de la
intentona de Fernández, un grupo de partidarios suyos se apoderó
del cuartel de Liberia, pero tampoco encontró ningún apoyo en
la población local 186. En la villa de Bagaces, población natal del
presidente Guardia, otro conato revolucionario topó con la firme
resistencia de los vecinos 187.
El presidente Guardia salió de Alajuela el jueves 22 de
octubre y llegó a Puntarenas a las dos de la tarde del día siguiente.
Enseguida dispuso una investigación de los hechos y la salida de
una fuerza en el General Cañas con rumbo a la bahía de Salinas,
con el fin de evitar que los revolucionarios de Liberia pudieran huir
a Nicaragua. Otra tropa fue enviada en el vapor General Guardia
al puerto del Bebedero, con el propósito de reprimir el movimiento
de Bagaces. El 26, Guardia salió de Puntarenas hacia el Bebedero,
con el estado mayor y el cuerpo de reserva, y a su llegada a ese
puerto, casi a las once de la noche, tuvo noticia de que los sediciosos
de Liberia habían abandonado esa ciudad desde el día anterior y
emprendido la fuga hacia el norte. En las vecindades de la bahía de
Salinas fueron atacados por las fuerzas gubernamentales y varios
de ellos fueron hechos prisioneros 188. El presidente llegó a Liberia
en la mañana del 28 de octubre y fue recibido con gran entusiasmo,
salvas de artillería, disparos de cohetes y otras manifestaciones de
regocijo. El 4 de noviembre abandonó la población con destino a
Bagaces; el 6 llegó a Puntarenas y el 10 regresó a Alajuela, donde fue
recibido con delirante entusiasmo 189. El 15 hizo su triunfal entrada
en San José 190.
185
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
186
Gaceta oficial, 16 de mayo de 1875.
187
Ibid.
188
Gaceta oficial, 31 de octubre de 1874.
189
Gaceta oficial, 18 de noviembre de 1874.
190
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
53
El Canciller Lizano
El 28 de mayo de 1875, en medio de otraa situación
política tormentosa, el presidente Guardia llamó a ejercer
interinamente el poder a don Joaquín Lizano Gutiérrez, quien el
3 de ese mes había sido nombrado por el Congreso como primer
designado a la Presidencia para el período 1875-1876. Desde el 19
de mayo, la cámara le había concedido a Guardia una licencia, que
había solicitado alegando la necesidad de restablecer su salud 191.
El hermano de don Saturnino desempeñó la primera magistratura
durante más de cinco meses, hasta el 5 de noviembre de 1875,
fecha en que fue reasumida por el general Guardia.
7.- Secretario de Estado en los despachos de Guerra, Marina,
Gobernación, Policía y Agricultura e Industria.
Como en mayo de 1876 debía concluir el período
constitucional de don Tomás Guardia y la Constitución de 1871
no permitía la reelección sucesiva, el general decidió impulsar
como candidato presidencial al acaudalado abogado y empresario
don Aniceto Esquivel Sáenz, con la esperanza de que sería su dócil
instrumento. De conformidad con las instrucciones dadas a los
gobernadores provinciales, Esquivel fue elegido por unanimidad
para el cuatrienio 1876-1880.
Don Aniceto tomó posesión de la primera magistratura
el 8 de mayo de 1876, y el mismo día procedió a nombrar a los
miembros de su gabinete. Aunque en otras secretarías el nuevo
presidente nombró a personas más de su confianza que de la
de Guardia, la designación más importante fue la que recayó,
sin duda por indicación del general, en don Saturnino Lizano,
quien fue nombrado como secretario de Estado en cuatro
carteras ministeriales: Guerra y Marina, Gobernación, Policía y
Agricultura e Industria 192.
Un decreto de 25 de junio de 1870 del presidente don
Bruno Carranza había establecido doce carteras ministeriales
y regulaba el ámbito de acción de cada una. Sin embargo, lo
54
191
Gaceta oficial, 22 de mayo de 1875.
192
Decreto n° 21 de 8 de mayo de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
habitual, desde esa época y durante muchos decenios, fue confiar
varias carteras a un solo secretario de Estado.
Según el artículo 4° de este decreto, a la cartera de
Gobernación, que era entonces una de las más importantes tanto
en lo político como en lo administrativo,
“… pertenece lo relativo a orden
público, garantías individuales, imprenta,
elecciones, Municipalidades, conservación
y reparación de localidades para el
Congreso y demás Autoridades nacionales,
demarcación territorial, estadística general,
cartas geográficas, administración de postas
y correos, alojamientos, bagajes, cargas y
servicios públicos, suministro de víveres y
forraje.” 193
El artículo 5° describía la competencia de la cartera de
Policía:
“… lo relativo a comercio de víveres,
solidez de los edificios, leyes y Reglamentos
sobre juegos, uso de armas prohibidas,
vagancia, cuidado de la seguridad en los
caminos, calles, plazas, paseos, teatros y
demás espectáculos públicos.” 194
Con respecto a la cartera de Guerra y Marina, el artículo
11 disponía que era competencia suya
“… lo perteneciente a la Guardia
nacional, al Ejército y armada, moralidad y
disciplina de la fuerza pública, conservación
y reparación de los establecimientos
militares, Vicariato del Ejército, cuerpo de
sanidad, conservación y reparación de los
establecimientos militares, hacienda militar
193
Decreto N° 29 de 20 de junio de 1870, art° 4°.
194
Ibid., art° 5°.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
55
El Canciller Lizano
y sus comisarios, arsenales, astilleros,
buques de guerra, presas, observancia de las
ordenanzas navales de armada.” 195
El artículo 14 fijaba los asuntos que correspondían a la
cartera de Agricultura e Industria:
“… lo relativo a cultivo de tierras, siembras,
plantaciones y frutos, jornales rurales,
cerramiento de heredades, circulación de
los productos de la tierra, riegos, acueductos
rústicos, daños en las sementeras, pastos,
cría de ganados, sociedades agrícolas,
agrimensura, protección de las artes
mecánicas, manufacturas y oficios.” 196
Don Saturnino se encontraba en Puntarenas cuando se
efectuó su nombramiento, y el mismo 8 de mayo el secretario de
Hacienda y Comercio don Braulio Morales Cervantes le dirigió
una nota para comunicárselo y citarlo para que se presentara en el
Palacio Nacional a prestar el juramento correspondiente 197. El 10
de mayo, don Saturnino contestó a la nota del secretario diciendo:
“Suplico a U. ponga en conocimiento
de S. E. el Presidente: que acepto gustoso el
elevado encargo con que me honra, y que
mañana mismo estaré en camino para esa
Capital, al efecto de tomar posesión de mis
destinos lo más pronto posible.” 198
Mientras llegaba don Saturnino, las mencionadas
carteras ministeriales se mantuvieron recargadas a don Braulio
Morales. No fue sino hasta el 12 de mayo cuando don Saturnino
suscribió con el presidente Esquivel su primer acuerdo como
56
195
Ibid., art° 11.
196
Ibid., art° 14.
197
Gaceta oficial, 13 de mayo de 1873.
198
Gaceta oficial, 13 de mayo de 1873.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
secretario, que fue la designación como subsecretario de esas
carteras del doctor don Uladislao Durán Martínez 199.
Dada la enorme importancia que tenía en esa época la
cartera de Gobernación, cuyo titular era casi como un primer
ministro, es evidente que en la naciente administración le iba
a corresponder a don Saturnino el papel de vigilante de los
intereses de su suegro y primo el general Guardia. Esa dif ícil
responsabilidad se volvió aún más delicada por el hecho que,
desde su primer discurso como presidente, don Aniceto Esquivel
manifestó deseos de hacer política propia y librarse de la tutela de
don Tomás.
Entre las disposiciones más importantes que le
correspondió suscribir a don Saturnino como secretario de
Estado de la administración Esquivel cabe mencionar la sanción
ejecutiva a las siguientes decisiones del Congreso Constitucional:
la concesión de un privilegio al general don Próspero Fernández
para extraer concha de Perla en el litoral del Pacífico 200; la
aprobación de varios decretos de la Comisión Permanente y la
improbación de otro 201; la autorización al Poder Ejecutivo para
destinar hasta 20 000 pesos en la exhumación y traslación de los
restos de don Braulio Carrillo y los funerales de don Juan Rafael
Mora, don José Joaquín Mora y don José María Cañas 202; la fijación
del máximum de la fuerza armada del país 203; la declaratoria de
don Tomás Guardia como benemérito de la Patria 204; la concesión
de dos leguas de tierras a la ciudad de Cartago para invertir
su producto en la construcción de la iglesia parroquial 205, y la
clausura de las sesiones ordinarias de la cámara 206.
199
Acuerdo n° 9 de 12 de mayo de 1876.
200
Decreto N° 29 de 30 de mayo de 1876.
201
Decreto N° 35 de 6 de julio de 1876.
202 Decreto N° 37 de 18 de julio de 1876. Este decreto no se ejecutó, debido a la caída del
gobierno.
203
Decreto n° 38 de 19 de julio de 1876.
204
Decreto n° 40 de 25 de julio de 1876.
205
Decreto n° 44 de 29 de julio de 1876.
206
Decreto n° 45 de 29 de julio de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
57
El Canciller Lizano
Como secretario de Estado, don Saturnino también
sometió a la consideración del Congreso varios proyectos de
ley, que no llegaron a aprobarse debido a la prematura caída
del gobierno. Uno de ellos, presentado el 1° de julio de 1876,
se dirigía regularizar la titulación de ciertas propiedades que
la Municipalidad de Puntarenas había enajenado, pero cuyos
dueños no contaban con el título correspondiente y se valían
de tal circunstancia para evadir obligaciones hacendarias. Este
proyecto pasó el 3 de julio a la comisión de Gobernación 207.
Otro, presentado el 22 de julio, tenía como propósito lograr que
el Congreso concediera el grado de coronel al teniente coronel
don Manuel María Gutiérrez, compositor de la música del Himno
Nacional. El proyecto pasó a estudio de la Comisión de Guerra,
cuyos miembros, que eran don Miguel Guardia Gutiérrez y don
Manuel Moreira, rindieron el 25 de julio un dictamen favorable
208
. Sin embargo, la ruptura del orden constitucional impidió que
el Congreso votara el asunto. No fue sino hasta mucho tiempo
después el 5 de enero de 1883, cuando se concedió a don Manuel
María ese grado militar 209.
Con el paso del tiempo, las relaciones entre el presidente
y el general se fueron agriando, y para junio el rompimiento entre
ambos era evidente. En este clima de tensión, el 14 de junio de
1876 se produjo la partida del país de don Tomás Guardia, quien
viajó con rumbo a El Salvador y Guatemala en calidad como
enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Costa
Rica en misión especial. Le acompañaban don Uladislao Durán
Martínez como secretario y don Rafael Orozco González como
agregado. Al parecer, Guardia estaba interesado en estrechar
lazos con el gobernante guatemalteco Rufino Barrios, de cara a
un posible conflicto bélico entre Costa Rica y Nicaragua; por su
parte, aparentemente don Aniceto y sus partidarios pensaron que
con Guardia ausente sería más fácil separar de los altos cargos
militares y civiles a los guardistas y eliminar la influencia de don
Tomás en el gobierno 210.
207
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento nº 8481.
208
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento nº 8485.
209
MELÉNDEZ CHAVERRI, 1994, p. 78.
210 Sobre la misión de Guardia, V. SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco, Los meses de
don Aniceto, San José, EUNED, 1ª. ed., 2002, pp. 98-100 y 107-113.
58
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
El 30 de julio de 1876, mientras Guardia se hallaba ausente,
se produjo en Cartago un intento de secuestrar al comandante de
plaza don Vicente Vargas y Chacón y de apoderarse del cuartel de
la ciudad, como primer paso de un movimiento revolucionario
destinado a liquidar el poder político y militar de don Tomás
Guardia y sus allegados. Sin embargo, la intentona de Cartago,
conocida como la asonada de la misa de tropa, fue mal concebida
y peor ejecutada, y terminó en un rotundo fracaso. Sin embargo,
los militares guardistas de San José, en ejecución de instrucciones
secretas que había dejado don Tomás al salir del país, procedieron
con suma rapidez a derrocar a don Aniceto Esquivel ese mismo
día. Quedó nuevamente roto el orden constitucional y se proclamó
como presidente provisorio de la República al doctor don Vicente
Herrera Zeledón, en esa época persona muy allegada al general
Guardia 211.
211
Ibid., pp. 137-165.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
59
El Canciller Lizano
CAPÍTULO III
EL CANCILLER
1.- La Cancillería y los diplomáticos.
A.- El nombramiento.
El 30 de julio de 1876, al asumir el poder como
consecuencia de la caída de don Aniceto Esquivel, el presidente
provisorio don Vicente Herrera Zeledón nombró tres designados
para que lo reemplazaran en caso de ausencias temporales o
absolutas. Como primer designado fue nombrado el general don
Tomás Guardia Gutiérrez, quien en esos momentos se encontraba
ausente del país en misión diplomática; como segundo don Manuel
Antonio Bonilla Nava, consuegro del mismo general Guardia 212, y
como tercero su yerno y primo don Saturnino Lizano Gutiérrez 213.
El golpe militar dejó cesantes a los secretarios de Estado
de Esquivel, pero el mismo 30 de julio de 1876, el presidente
Herrera nombró don Saturnino Lizano, quien había sido
secretario de Guerra, Marina, Gobernación, Policía y Agricultura
212 Don Manuel Antonio Bonilla Nava fue padre de don Adolfo Bonilla Carrillo, quien casó
con doña Petronila (Petra) Guardia Barrios, hija de don Tomás Guardia y su primera esposa
doña Perfecta Barrios Ladrero.
213
60
Gaceta oficial, 2 de agosto de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
e Industria del gobierno caído, como titular de todas las carteras
ministeriales, mediante un decreto cuyo texto literal decía:
“Vicente Herrera, presidente provisorio
de la República de Costa Rica,
En uso de las facultades extraordinarias
de que estoy investido, y mientras se organiza
el Poder Ejecutivo con los Secretarios de
Estado correspondientes, decreto:
Art. Único. Nómbrase Secretario
General al Sr. D. Saturnino Lizano, quien se
presentará en el acto a tomar posesión de su
destino.- Dado en el Palacio Presidencial, a
treinta de julio de mil ochocientos setenta y
seis.- Vicente Herrera.” 214
De esta manera sui generis, don Saturnino fue nombrado
como titular de la Cancillería. Al día siguiente, 31 de julio,
el presidente Herrera nombró como secretario de Estado en
los despachos de Hacienda y Comercio a don Joaquín Lizano
Gutiérrez 215. Sin embargo, por razones que no hemos logrado
determinar, don Joaquín no asumió ese cargo, y su hermano don
Saturnino, con el título de secretario general de Estado, continuó
al frente de todas las carteras ministeriales.
B.- La Cancillería en 1876.
Cuando don Saturnino fue nombrado como canciller,
las oficinas de la Secretaría de Relaciones Exteriores y carteras
anexas, al igual que las de otras secretarías de Estado, se hallaban
ubicadas en el segundo piso del elegante Palacio Nacional, que
se erigía en el sector sudeste de la manzana donde hoy (2015) se
erige el edificio del Banco Central de Costa Rica. El Palacio, que
por espacio de un siglo sirvió de sede al Poder Legislativo, varios
ministerios y otras oficinas gubernamentales, fue bárbaramente
214
Decreto n° 46 de 30 de julio de 1876.
215
Decreto n° 47 de 31 de julio de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
61
El Canciller Lizano
demolido a fines del decenio de 1950, para construir el edificio del
Banco.
De conformidad con el decreto-ley N° 29 de 20 de
junio de 1870 que regulaba la competencia de las diversas
carteras ministeriales, a la Secretaría de Relaciones Exteriores le
correspondía
“… la dirección de las Relaciones
diplomáticas, nombramiento y remoción
de los Agentes Diplomáticos y Consulares,
correspondencia con los Gobiernos
extranjeros, protección de los costarricenses
en el extranjero, legalización de los
documentos para el exterior, comprobación
de los otorgados en el extranjero y expedición
de pasaportes para fuera de la República.
§ UNICO.- A la misma corresponde todo
lo relativo a Concordatos.” 216
Para cumplir con estas labores, la Secretaría tenía en
aquella época un personal remunerado relativamente reducido
en la sede central. De conformidad con la ley de presupuesto
para 1876, además del secretario de Estado, la sede central de la
Cancillería contaba con un subsecretario, un oficial mayor, un
escribiente gratificado, dos escribientes más, un traductor de
idiomas y un portero, que estaba además encargado de despachar
los impresos al exterior 217.
C.- El cuerpo diplomático y consular de Costa Rica.
Además de los escasos funcionarios de la sede central,
el personal de la Secretaría de Relaciones Exteriores incluía a los
agentes diplomáticos y consulares de Costa Rica en otros países,
todos los cuales desempeñaban sus cargos en forma ad honorem,
con excepción del ministro residente en los Estados Unidos de
América y el cónsul en Panamá.
62
216
Decreto N° 29 de 20 de junio de 1870, art° 3°.
217
Decreto N° 60 de 28 de agosto de 1908.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Según la memoria ministerial presentada en 1876 218,
el personal diplomático en el exterior lo integraban cuatro
funcionarios: tres enviados extraordinarios y ministros
plenipotenciarios, que eran don Francisco María Iglesias
Llorente en Gran Bretaña; el conde Adolfo Cristián de
Lindemann en Francia, con la concurrencia de Italia, y don
Fernando de Lorenzana y García, marqués de Belmonte, ante
la Santa Sede; y dos ministros residentes, el señor Siegfried
Borchardt en Austria-Hungría y don Manuel María de Peralta
y Alfaro en los Estados Unidos de América. Además, desde
junio se había nombrado a don Tomás Guardia Gutiérrez como
enviado extraordinario y ministro plenipotenciario en misión
especial en Guatemala y El Salvador a don Uladislao Durán
como secretario de la misión.
El personal consular remunerado se limitaba a don
F. A. Hurtado, cónsul en Panamá. Sin embargo, había una
enorme cantidad de extranjeros que servían cargos consulares
en forma honoraria. La utilidad y conveniencia de muchos
de estos nombramientos eran dudosas, pero las autoridades
costarricenses parecían sentirse complacidas de que, sin gastar un
céntimo, el país estuviera presente de algún modo en cuanto país
y ciudad fuera posible y actuaban con suma despreocupación con
respecto a tales designaciones, sin indagar mayor cosa sobre los
antecedentes y las cualidades del nombrado. Asombrosamente,
esa mentalidad habría de perdurar en los gobiernos de Costa Rica
por más de un siglo.
En 1876 Costa Rica tenía funcionarios consulares en
diecisiete países 219:
a.- Alemania: un cónsul general honorario en Hamburgo
(Gustav Mutzenbecker) y cónsules honorarios en
Bremen (Juan H. Hantzen), Hamburgo (Enrique Breuker)
y Westfalia (Francisco Ellendorff ).
b.- Bélgica: un cónsul general honorario en Amberes (León
Ferwagne); cónsules honorarios en Amberes (Francisco
218
A. N. C. R., S. H., Archivo del Congreso, documento n° 8490.
219
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
63
El Canciller Lizano
van Dyck), Bruselas Augusto Meulemans), Gante Alfred
Blanquaert van Inshot), Hasselt (Gaspar Bamps) y
Lieja (León de Pitteurs), y un vicecónsul honorario en
Amberes (Albert van Nuffel).
c.- Brasil: cónsules honorarios en Río de Janeiro (José
Ferreira Leal), Bahía de los Santos (Antonio Lacerda) y
Pernambuco (Juan José Calvaho).
d.- Chile: un cónsul general honorario en Valparaíso
(Alberto Murphy) y un cónsul honorario en la misma
ciudad (Luis M. Cerveró).
e.- Colombia: un cónsul general honorario en Bogotá
(Eustacio Latorre Narváez) y un cónsul remunerado en
Panamá (F. A. Hurtado).
f.- Dinamarca y sus dominios: un cónsul honorario en Saint
Thomas, Islas Vírgenes danesas (Jacobo L. Maduro).
g.- El Salvador: un cónsul honorario en San Salvador
(Manuel Trigueros).
h.-España: cónsules honorarios en Alicante (Juan
Maisonnave), Barcelona (José Ventura Espinach), Cádiz
(Francisco Guisado y González), La Coruña Eduardo
Carricarte), La Habana (Lorenzo Barreto), Málaga
(Ramón Portal y Porta), Pamplona (Isidro Victoriano),
Puerto de Santa María (Federico Fedriani), San Juan de
Puerto Rico (Eusebio Hernández), Sevilla (Francisco de
Paula Santa Cruz), Tarragona (Agustín Peyra Vildisola),
Valencia (Roberto Lanuza), Valladolid (Cándido
González) y Vigo (Mariano Pérez), y un vicecónsul
honorario en Tarragona (Rafael Cañedas y Galliza).
i.- Estados Unidos de América: un cónsul general honorario
en Nueva York y Filadelfia José María Muñoz), y cónsules
honorarios en Charleston (Andrés Cassard), Kentucky
(Allan A. Bruton), Nueva Orleans (J. Agustín Quintero)
y Nueva York (Gustavo Thiesen).
64
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
j.- Francia: un cónsul general honorario en París (Samuel
Piza) y cónsules honorarios en Burdeos (Hipólito
Tournon), Lyon (Jorge Dieulafoy), Marsella (Camilo
Roussier) y París (Elías L. Maduro).
j.- Gran Bretaña y sus dominios: un cónsul general honorario
en Londres (Juan A. Le Lacheur); cónsules honorarios en
Belice, Honduras Británica (Alexander Morrice); Escocia
(Tomás Skimer); Kingston, Jamaica (Pedro B. Desnoes) y
Liverpool (Víctor Shakery), y vicecónsules honorarios en
Falmouth (Howard Cox) y Liverpool (F. G. Horne).
k.-
Honduras: cónsules honorarios en Tegucigalpa
(Tranquilino Bonilla) y Trujillo (Eduardo Morrice).
l.- Nicaragua: un cónsul general honorario en León (Pedro
J. Alvarado) y un cónsul honorario en Chinandega
(Mariano Montealegre y Romero).
m.- Países Bajos: un cónsul honorario en Rotterdam (Huibert
van Ryckevorsel).
n.- Perú: un cónsul honorario en Lima (Ricardo H. Hartley)
y un vicecónsul honorario en El Callao (Miguel P. Grace)
o.- Suiza: cónsules honorarios en Ginebra (Benjamin Haas)
y Zurich (Guillermo Yoos de Escafusa).
p.- Venezuela: un cónsul general honorario en Caracas
(Ricardo Becerra).
Durante la gestión de don Saturnino como canciller no
hubo ningún cambio en el servicio diplomático y consular de la
República.
D.- El presupuesto.
El presupuesto de egresos de la Secretaría de Relaciones
Exteriores comprendía partidas para el pago de salarios,
suscripción a periódicos, compra de libros, adquisición de útiles
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
65
El Canciller Lizano
de oficina y los llamados eventuales, es decir, gastos imprevistos,
especialmente en razón de misiones especiales que fuera necesario
enviar al exterior.
El presupuesto fijado para 1876, de conformidad con lo
aprobado por el Congreso Constitucional en 1875, era el siguiente 220:
Al mes
Al año
Secretario de Estado
350
4200
Subsecretario
150
1800
Oficial Mayor
100
1200
Escribiente gratificado
70
840
Escribiente
50
600
Escribiente
41
492
Traductor de idiomas
25
300
Cónsul en Panamá
50
600
Portero
30
360
Portero como encargado de
despachar los impresos al
exterior
10
120
Útiles de oficina
25
300
Suscripción de periódicos y
compra de libros
2000
Eventuales
10000
Total
10812
12000
En el proyecto de presupuesto para 1877, que había
sido aprobado por el Congreso Constitucional el 29 de julio
de 1876, es decir, un día antes del golpe militar, pero que no
fue sancionado por el presidente Herrera sino hasta el 29 de
agosto, cuando don Saturnino ya había salido de la Cancillería,
las partidas destinadas a la Secretaría de Relaciones Exteriores
tuvieron un aumento apreciable, debido a que si bien se
suprimió una plaza de escribiente, se incrementó el salario del
subsecretario de 150 a 200 pesos mensuales y se creó una plaza
220
66
Decreto N° 55 de 23 de setiembre de 1875.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
para el ministro residente en los Estados Unidos de América.
Este presupuesto era el siguiente 221:
Al mes
Al año
Secretario de Estado
350
4200
Subsecretario
200
2400
Oficial Mayor
100
1200
Escribiente gratificado
70
840
Escribiente
50
600
Traductor de idiomas
25
300
Ministro residente en
Washington
400
4800
Cónsul en Panamá
50
600
Portero
30
360
Portero como encargado de
despachar los impresos al
exterior
10
120
Útiles de oficina
25
300
Suscripción de periódicos y
compra de libros
2000
Eventuales
10000
Total
17700
E.- El cuerpo diplomático y consular acreditado en Costa Rica.
Al asumir don Saturnino la Cancillería, únicamente tres
países tenían acreditados agentes diplomáticos en Costa Rica,
pero todos eran concurrentes y tenían su residencia en otros
países centroamericanos. En Guatemala estaba la sede de los
ministros residentes de los Estados Unidos de América (George
Williamson) y Gran Bretaña (Sidney Locock) y en Nicaragua la
del encargado de Negocios y cónsul general de Francia (Julien
Tallien de Cabarrus) 222.
221
Decreto N° 68 de 29 de agosto de 1876.
222
A. N. C. R., S. H., Archivo del Congreso, documento n° 8490.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
67
El Canciller Lizano
En San José había cónsules generales de España (don
Gaspar Ortuño y Ors) y Honduras (doctor don Joaquín Romero);
cónsules de Alemania (don Juan Federico Lahmann), AustriaHungría (don Jorge Andrés), Chile (don Luis Diego Sáenz Carazo),
Colombia (don Justo Facio), los Estados Unidos de América
(Arturo Morrel), Italia (O. J. Hübbe), Nicaragua (don Dionisio
Jirón) y el Perú (don José Sother), y un vicecónsul de Francia
(don Eduardo P. Charpentier). En Cartago había un vicecónsul
de España (don Valeriano Fernández Ferraz). Los Estados Unidos
tenían agentes consulares en Limón (Minor C. Keith) y Puntarenas
(don Ernesto Rohrmoser) 223.
2.- La política exterior. La situación centroamericana y la
misión de don Tomás Guardia a Guatemala y El Salvador.
Cuando se produjo el golpe militar que derrocó a don
Aniceto Esquivel y llevó a don Vicente Herrera a la presidencia de
la República y a don Saturnino Lizano a la Cancillería, la situación
política centroamericana era algo turbulenta.
Desde 1871, cuando una revolución había derrocado
al secular régimen conservador de Guatemala, ese país
estaba gobernado por el llamado partido liberal, que se había
caracterizado por su apoyo a la idea de restablecer la unión política
centroamericana y un extremo anticlericalismo. El general Rufino
Barrios y Auyón, presidente de Guatemala desde 1873, había
combinado una política interna de brutal autoritarismo con una
política exterior orientada a asegurar al país la hegemonía en
Centroamérica.
Desde fecha temprana, Barrios había considerado a don
Tomás Guardia un adversario y un obstáculo para sus propósitos.
Bajo la égida de Barrios, El Salvador, Guatemala y Nicaragua
constituyeron el 26 de agosto de 1873 la denominada la Triple
Alianza, una coalición expresamente dirigida contra el gobierno
de Guardia, por considerarlo hostil a la paz de Centroamérica.
Honduras no tardó en sumarse a la coalición, que pasó a ser
conocida entonces con el nombre de Cuádruple Alianza.
223
68
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
La coalición no llevó a cabo ninguna acción efectiva,
y poco a poco se normalizaron las relaciones entre Costa Rica
y Guatemala. En setiembre de 1875, el gobierno de Guatemala
invitó a los otros cuatro países centroamericanos a celebrar una
conferencia en la capital guatemalteca, con el fin de promover
la unión política regional. Costa Rica aceptó la invitación y
designó al ex canciller don Juan Rafael Mata para representarla
en la conferencia, pero poco después surgió un nuevo motivo
de distanciamiento con Guatemala, debido a la decisión del
general Guardia de permitir la permanencia en Costa Rica de
varios sacerdotes jesuitas, algo absolutamente inaceptable para el
anticlericalismo casi obsesivo del general Barrios 224.
A pesar de todo, la conferencia de Guatemala se inauguró
el 15 de enero de 1876 y concluyó el 28 de febrero con la firma de
un tratado que contenía varias medidas destinadas a promover
la unión regional, pero ya para entonces nuevas circunstancias
políticas habían hecho inútiles los esfuerzos diplomáticos. El 27
de marzo, Guatemala declaró la guerra a El Salvador, conflicto que
terminó con una victoria guatemalteca y la caída del presidente
salvadoreño don Andrés Valle Rodríguez, a quien Barrios hizo
reemplazar por don Rafael Zaldívar y Lazo el 1° de mayo de 1876.
Por su parte, una guerra civil en Honduras dio al traste con el
gobierno de don Ponciano Leiva y Madrid y, tras algunos fugaces
interinatos, el 13 de junio de 1876 ascendió a la presidencia el
licenciado don Crescencio Gómez Valladares.
A pesar de que Barrios veía con recelo la presencia
jesuita en Costa Rica, la política de Guatemala más bien se volvió
contra el régimen conservador de Nicaragua, país que también
había admitido a miembros de esa orden religiosa. El cambio en
la política de Guatemala coincidió con un progresivo deterioro
de las relaciones entre Costa Rica y Nicaragua, por cuestiones
limítrofes. Para principios de 1876, el presidente Guardia estaba
decidido a emprender una guerra contra Nicaragua, empresa en la
cual esperaba contar con el apoyo de los liberales nicaragüenses,
ávidos de derrocar al gobierno conservador del presidente don
Pedro Joaquín Chamorro. El conflicto militar entre Costa Rica
224 SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco, Historia diplomática de Costa Rica (18211910), San José, Editorial Juricentro, 1ª. ed., 1996, pp. 361-363.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
69
El Canciller Lizano
y Nicaragua solamente se evitó gracias a que desde su toma de
posesión el 8 de mayo de 1876, don Aniceto Esquivel manifestó
expresamente que no era partidario de la guerra. Poco después
dispuso además que se retirara del Guanacaste el ejército que
Guardia había emplazado allí con miras al inicio de las acciones
bélicas.
Fue en estas circunstancias en las que se produjo el envío
a Guatemala de la misión diplomática especial de Costa Rica,
integrada por don Tomás Guardia como ministro plenipotenciario
y don Uladislao Durán Martínez como secretario.
Guardia llegó a Guatemala el 21 de junio de 1876, pero
no fue sino hasta el 6 de julio cuando pudo verse por primera
vez con el presidente Barrios. La presentación formal de cartas
credenciales se efectuó a la una de la tarde del día siguiente, ocasión
en la cual Barrios manifestó que la unión de Centroamérica
“… nunca podrá alcanzarse, sino por
pactos amistosos que destierren ideas
condenadas por la sana filosof ía y el espíritu
de la época.” 225
La misión de Guardia tenía como propósito visible la
concertación de un tratado de paz y amistad entre Costa Rica
y Guatemala. El gobierno guatemalteco designó para tratar
con Guardia a don José Antonio Salazar, quien desde el primer
momento insistió en que Costa Rica debía comprometerse a no
admitir en su territorio comunidades religiosas ni individuos
pertenecientes a la Compañía de Jesús. La proscripción de los
jesuitas por parte de las autoridades costarricenses se convirtió
en una condición indispensable para las buenas relaciones con
Guatemala, y el general Guardia, quien necesitaba el apoyo
de Barrios ante la inminente caída de don Aniceto Esquivel o
si estallaba la guerra con Nicaragua, aceptó que en el tratado
de paz y amistad, que fue firmado en la capital guatemalteca el
24 de julio, se incluyera un artículo según el cual ambos países
se comprometían a no permitir en sus respectivos territorios
comunidades religiosas de ninguna especie ni el ingreso de
225
70
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año 1876, nº 18828.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
individuos que fueran miembros de la orden de los jesuitas.
Costa Rica debía además hacer ver a los jesuitas residentes en su
territorio lo inconveniente que resultaba su permanencia allí para
el mantenimiento de las relaciones con el resto de Centroamérica
y aprovecharía toda ocasión para obligarlos a abandonar el país 226.
Guatemala ratificó el tratado el mismo 24 de julio 227.
El 30 de julio, mientras en Costa Rica era derrocado
Esquivel, don Tomás dirigió desde la capital guatemalteca una
nota al canciller de Costa Rica, sin saber que desde ese día el
cargo lo ocupaba su yerno y primo don Saturnino Lizano. En
esta comunicación informaba que en la misma fecha había girado
contra el gobierno de Costa Rica la suma de mil libras esterlinas,
pagaderas en noventa días, para cubrir los gastos de la misión
especial a Guatemala y a El Salvador 228.
Guardia aprovechó su estadía en la ciudad de Guatemala
para asistir a una presentación de la ópera Hernani. El prócer
cubano José Martí escribió al respecto:
“Se recuerdan todavía en Guatemala
los ademanes originales y fantásticos de
Tomás Guardia, el adversario de Barrios…
se presentó en un teatro muy lindo de
Guatemala, cubierto de un sombrero negro
con pluma blanca, la casaca caprichosa, la
capa roja, bordada con oro, flotando sobre
sus hombros, y bastante inclinada de lado.
Aquella noche se representaba Hernani: el
público guatemalteco, que es muy ingenioso,
y que lo es alegremente, se preguntaba si
aquel hombre no era uno de los cortesanos
de Carlos Quinto que se había escapado
del escenario, y que con ademán altanero,
la cabeza cubierta por el sombrero, entraba
226
La Gaceta, 16 de junio de 1877; SÁENZ CARBONELL, 1996, pp. 389-390.
227
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año 1876, nº 18828.
228
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. El Salvador, año 1876, nº 18805.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
71
El Canciller Lizano
en el palco. Guardia parece ser un hombre
valeroso… inteligente y vanidoso.” 229
El 4 de agosto de 1876, el secretario de la misión, don
Uladislao Durán, dirigió al canciller Lizano la nota siguiente:
“Señor:
Para cubrir los últimos gastos de la
Legación en esta ciudad, y conforme a las
instrucciones que recibí del señor Ministro
Plenipotenciario, tuve que girar contra el
Gobierno y a favor de Saturnino Tinoco, por
la suma de £ 1000, a que asciende la cuenta
del “Gran Hotel”, que me ha sido presentada
por su propietario.
Suplico honre una vez más la firma del
Ministro Plenipotenciario a cuyo nombre se
ha hecho el giro.” 230
Don Saturnino Tinoco, de origen nicaragüense, era un
importante hombre de negocios que había residido en Costa
Rica y se había casado allí con doña María Joaquina Iglesias
Llorente. Aunque desde 1856 se había establecido en Guatemala,
conservaba fuertes vínculos con Costa Rica, donde residían
hijos y yernos suyos. El 27 de julio, días antes de su partida de
Guatemala, don Tomás Guardia había propuesto a la Cancillería
costarricense que se nombrara al señor Tinoco como cónsul
honorario en Guatemala, lo cual se hizo efectivo a fines de agosto
de 1876. El 9 de octubre le fue concedido el exequátur 231.
Al llegar a la ciudad salvadoreña de Santa Ana, en camino
hacia San Salvador, don Tomás Guardia se enteró de la caída de
don Aniceto Esquivel
72
229
MARTÍ, José, Obras completas, La Habana, Editorial Lex, 1ª. ed., 1946, vol. III, p. 550.
230
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año 1876, nº 18828.
231
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año 1876, nº 18826.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
“… y aunque apuró su marcha a la
Capital para tener informes detallados, no
pudo adquirir más que los que contenían
dos telegramas dirigidas a Puntarenas
en los primeros momentos del conflicto y
cuando, en esta Ciudad [San José], no se
tenían más que las primeras noticias de lo
ocurrido en Cartago.” 232
Don Tomás llegó a San Salvador el jueves 3 de agosto de
1876 y fue recibido por el presidente don Rafael Zaldívar y Lazo
los miembros de su gabinete 233. Dado que el gobierno de Zaldívar
era hechura del general Barrios, la visita se caracterizó por su
calidez, y El Salvador se adhirió al tratado Guardia-Salazar 234.
En otros ámbitos, el fugacísimo paso de don Saturnino
Lizano por la Secretaría de Relaciones Exteriores no se reflejó
en ningún hecho digno de mención. Ni siquiera le correspondió
dirigir a los cancilleres de los países con los que Costa Rica tenía
relaciones la nota diplomática destinada a informarles de la caída
de don Aniceto Esquivel y el ascenso al poder de don Vicente
Herrera. Dado que el gobierno de Guatemala era en aquellos
momentos y por las circunstancias que ya hemos explicado, el
aliado más importante con que podía contar el gobierno de Costa
Rica, hubiera sido lógico que fuera también el primero o uno de
los primeros a los que se le informara oficialmente del cambio
político. Sin embargo, la nota de estilo no le fue dirigida sino
hasta el 10 de agosto, cuando ya estaba al frente de la Cancillería
don Rafael Machado. Así se deduce de una nota de 28 de agosto
de 1876, en la que el canciller guatemalteco don Joaquín Macal
expresó a Machado:
“… por el estimable despacho de V. E. del
día 10, he tenido la honra de informarme de
que el señor Esquivel se retiró del Gobierno,
entrando a sucederle en ese alto puesto el
señor Herrera.
232
Gaceta oficial, 19 de agosto de 1876.
233
El Costarricense, 17 de agosto de 1876.
234
SÁENZ CARBONELL, 1996, p. 390.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
73
El Canciller Lizano
Con
instrucciones
del
señor
Presidente de la República, tengo el gusto de
decir a V. E. en respuesta, que el Gobierno
de Guatemala se esforzará también, por su
parte, en que sean cada día más estrechas y
provechosas las relaciones que le ligan con el
de Costa Rica.” 235
Dos días antes, el 26 de agosto, Macal había escrito a
Machado para remitirle original y copia autorizada de una nota en
la que el general Barrios daba respuesta a la que con fecha de 10
de agosto le había dirigido don Vicente Herrera para participarle
de su proclamación como jefe supremo de Costa Rica 236.
3.- Otras carteras ministeriales.
El decreto de 1870, al que ya hemos hecho referencia
con respecto a la competencia de la Cancillería y de las carteras
que don Saturnino desempeñó durante la administración de don
Aniceto Esquivel, es decir, las de Gobernación, Policía, Guerra
y Marina, y Agricultura e Industria, también definía la de las
otras carteras gubernamentales, de las que el señor Lizano fue
titular como secretario general a partir del 30 de julio de 1876, es
decir, las de Justicia y Gracia, Obras Públicas, Culto, Instrucción
Pública, Hacienda y Comercio. Transcribimos a continuación lo
dispuesto en esa normativa con respecto a estas seis carteras:
“Art. 6°.- A la Cartera de Justicia,
corresponde lo relativo a la Administración
Judicial, codificaciones, Magistraturas
y Ministerio Fiscal, presidios y cárceles,
administración de presos, cumplimiento
de condenas, rebajas y conmutaciones de
penas y rehabilitaciones de delincuentes.
Art° 7.- A la Cartera de Obras Públicas,
toca todo lo concerniente a la apertura y
74
235
A. N. C. R., S. H., Guatemala. Gobiernos extranjeros, año 1876, n° 18827.
236
A. N. C. R., S. H., Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año 1876, nº 18826.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
conservación de caminos, establecimiento
de telégrafos, construcción de puentes,
ferrocarriles, cárceles, presidios, aduanas,
muelles, casas de Gobierno y demás
edificios costeados por los fondos nacionales
o municipales.
Art° 8.- A la Cartera de Culto,
corresponde lo que concierne al Patronato
nacional, pase de Decretos conciliares, bulas,
breves, rescriptos pontificios, beneficios
eclesiásticos, cementerios, jurisdicción y
disciplina eclesiástica.
Art° 9.- A la cartera de Instrucción
Pública, concierne lo relativo a Dirección de
Estudios, inspección de los establecimientos
de enseñanza, cumplimiento de Reglamentos
y administración de rentas de este ramo,
propiedades
literarias,
monumentos
históricos y artísticos, bibliotecas, museos,
conservatorios de artes y jardines botánicos.
Art° 10.-A la Cartera de beneficencia,
pertenece lo relativo a la administración de
hospitales, casas de refugio y maternidad,
montes de piedad y de socorros públicos,
nombramiento de médicos titulares, fomento
de la facultad de medicina y obstetricia,
establecimientos de farmacia, medidas
sanitarias, conservación y propagación del
fluido vacuno y cuidado de baños termales.
(…)
Art° 12.- A la Cartera de Hacienda,
está anexo lo relativo a creación,
recaudación e inversión de rentas públicas
ordinarias y extraordinarias, minas,
baldíos, casas de moneda y todas las
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
75
El Canciller Lizano
oficinas y establecimientos de Hacienda,
administración de los bienes del Estado,
cumplimiento de las sentencias en el ramo
de Hacienda, arreglo y pago de la deuda
pública.
Art° 13.- A la Cartera de Comercio
corresponde lo concerniente a Tribunales
y Juzgados de este ramo, inspección de
bolsas, bancos, cajas de ahorro, mercados,
muelles, diques y demás obras que no sean de
fortificación en los puertos, observancia de los
reglamentos y tarifas, arsenales de comercio,
fomento y mejora del cabotaje y regularidad
de monedas, pesas y medidas.” 237
Durante la semana en la que don Saturnino estuvo al
frente de la Secretaría de Relaciones Exteriores y todas las demás
carteras ministeriales, se expidieron los siguientes decretos:
237
76
-
Número 47, de 31 de julio de de 1876: se nombra a don
Joaquín Lizano como secretario de Hacienda y Comercio.
Este decreto no tuvo efecto.
-
Número 48, de 31 de julio de 1876: autoriza al directorio
nombrado por el extinto Congreso al entrar en receso,
para que despache los asuntos ya acordados.
-
Número 49, de 31 de julio de 1876: autoriza los jueces
de primera instancia y autoridades subalternas del ramo
judicial para continuar en el ejercicio de sus funciones.
-
Número 50, de de 31 de julio de 1876: nombra nuevos
magistrados de la Corte Suprema de Justicia y dispone
que presten el juramento correspondiente el 1° de agosto.
-
Número 51, de 1° de agosto de 1876: concede el grado de
coronel al teniente coronel don Vicente Vargas y Chacón.
Decreto n° 29 de 20 de junio de 1870.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
- Número 52 de 1° de agosto de 1876: faculta a
municipalidades, gobernadores y demás funcionarios del
orden público a continuar en sus funciones.
-
Número 53, de 1° de agosto de 1876: aprueba la memoria
presentada al Congreso por el secretario de Hacienda y
Comercio del gobierno de Esquivel, don Braulio Morales
Cervantes, con algunas salvedades.
-
Número 54, de 31 de julio de 1876: señala a los capellanes
del ejército la dotación de los tenientes coroneles.
- Número 55, de 1° de agosto de 1876: otorga una
subvención de cien pesos mensuales al colegio San
Agustín de la ciudad de Heredia.
-
Número 56, de 3 de agosto de 1876: se aclara que la
subvención de 25 pesos al cura de Turrialba y el Naranjo
comprende la administración de ambas localidades.
-
Número 57, de 3 de agosto de 1876: por haber declinado
el licenciado don Vicente Sáenz Llorente el cargo de
presidente de la Corte Suprema de Justicia, se nombra en
su lugar al doctor don Eusebio Figueroa Oreamuno.
-
Número 59, de 7 de agosto de 1876: nombra al licenciado
don Rafael Machado Jáuregui como secretario de Estado
en los despachos de Relaciones Exteriores, Justicia,
Instrucción Pública, Culto y Beneficencia.
4.- Reemplazo de don Saturnino como canciller.
El brevísimo desempeño de don Saturnino Lizano como
canciller, con el título de secretario general de Estado, concluyó el
7 de agosto de 1876, fecha en que mediante un decreto suscrito
por el presidente Herrera y el propio don Saturnino, se designó
como secretario de Estado en los despachos de Relaciones
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
77
El Canciller Lizano
Exteriores, Justicia, Instrucción Pública, Culto y Beneficencia al
licenciado don Rafael Machado y Jáuregui 238.
238
78
Decreto n° 59 de 7 de agosto de 1876.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
CAPÍTULO IV
LOS AÑOS INTERMEDIOS: 1876-1882
1.- Secretario de Estado y tercer designado a la Presidencia de
la República.
La separación de don Saturnino de la Secretaría de
Relaciones Exteriores y carteras anexas no significó en absoluto
que perdiera su papel predominante en el gabinete del presidente
Herrera, ya que continuó como titular de todas las demás carteras
ministeriales, a saber, Gobernación, Policía, Obras Públicas,
Guerra y Marina, Hacienda, Comercio y Agricultura e Industria,
además de ser tercer designado a la Presidencia.
Aparte de continuar la obra del ferrocarril 239, en la que
estaba vivamente interesado Guardia y que la administración
Esquivel había en cierta forma amenazado con interrumpir debido
a la crítica situación fiscal, entre las actividades desarrolladas
por las carteras ministeriales que don Saturnino desempeñó
durante el gobierno de Herrera, cabe mencionar el inicio de la
construcción del hospital de Heredia 240 y de un nuevo edificio
para el hospital San Juan de Dios 241 y el restablecimiento de
239
Gaceta oficial, 15 de mayo de 1877.
240
El Costarricense, 8 de marzo de 1877.
241
Gaceta oficial, 17 de marzo de 1877.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
79
El Canciller Lizano
las municipalidades en las cabeceras de cantón, que habían
desaparecido desde 1859 242. Sin embargo, lo limitado de los
recursos disponibles impidió hacer una obra material importante
y más bien fue necesario tomar algunas medidas de austeridad y
ahorro en la administración pública, así como elevar en un 50%
los impuestos de importación 243.
Uno de los problemas más acuciantes que enfrentaba el
gobierno era la situación creada por los desastrosos empréstitos
ferrocarrileros contratados en Londres y los costos del litigio
iniciado en Londres contra dos de las casas prestatarias, Knowles
& Foster y Émile Erlanger & Co. El pleito se había confiado al bufete
Strousberg & Co., encabezado por un inescrupuloso abogado
llamado Ferdinand Strousberg, y se hallaba paralizado. Para
investigar lo que ocurría, el gobierno de Herrera decidió enviar a
don Saturnino a Europa, como comisionado financiero. Por este
motivo, el 31 de marzo de 1877 se recargó a don Rafael Machado
la Secretaría de Gobernación y carteras anexas y se nombró a don
Tomás Guardia como titular de la de Hacienda y Comercio, con el
recargo interino de las de Guerra y Marina y Obras Públicas 244.
2.- Comisionado financiero en Europa.
El 7 de abril de 1877 se nombró a don Saturnino
comisionado financiero en Europa y el 9 se le dieron las
instrucciones necesarias para la misión, que fueron ampliadas el
24 de setiembre de 1877 245.
En Londres, don Saturnino tuvo varias reuniones con
los tenedores de bonos de la deuda de Costa Rica, en las cuales
se planteó la posibilidad de firmar un convenio para terminar el
ferrocarril y explotarlo por cuenta de una compañía formada por
aquellos, pero no fue posible suscribirlo, porque don Saturnino
no llevaba poderes para tal efecto. Los solicitó entonces a San
242
Decreto n° 84 de 16 de diciembre de 1876.
243
El Costarricense, 14 de abril de 1877.
244 GRUB, Udo, Boceto Cronológico y Genealógico del Poder Ejecutivo de Costa Rica, 1994,
pp. 123-124.
245
80
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 5268, f. 1.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
José, pero los que se le enviaron no estaban autenticados, y a fin
de cuentas, según explicó el propio comisionado, las pretensiones
e intrigas de los especuladores hicieron fracasar el plan 246.
En cuanto al litigio iniciado por Costa Rica contra las
casas prestatarias, fue necesario realizar los mayores esfuerzos
y desplegar gran tacto y prudencia para averiguar su verdadero
estado. En sus comunicaciones con el gobierno de Costa Rica,
don Saturnino “escribió poco pero habló claro” 247. En octubre de
1877 informó que el abogado Strousberg pedía la astronómica
suma de £ 47,000 para dar continuidad al litigio, el cual, según él,
podría estar ganado en tres meses. Sin embargo, don Saturnino,
“malicioso por carácter y prevenido contra el abogado” 248, no
se dejó engañar por tales promesas y manifestó al gobierno
costarricense:
“… yo tengo la mayor desconfianza,
porque si bien es cierto que estos y otros
argumentos parecen puestos en razón,
también hay muchos hechos que ponen de
manifiesto la mala fe de nuestros abogados…
El Gobierno ha mandado como depósito de
garantía de costas como £ 7,000; yo he estado
en la Cancillería y no existen depositadas
sino £ 120. Es natural que las otras £ 6,880
que faltan están en poder de ellos, puesto
que no aparecen destinadas al objeto para
el cual fueron pedidas… no encuentro más
que un medio que deberá emplearse como
último extremo, y es quitar el pleito de
manos de Strousberg, pues de lo contrario
no se terminará jamás y el Gobierno tendrá
que seguirse sacrificando infructuosamente.
Pero para poder llevar a cabo esta idea, es
necesario tener abogados listos y darle a
246
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 10863.
247 GONZÁLEZ VÍQUEZ, Cleto, Capítulos de un libro sobre historia financiera de Costa
Rica, San José, Editorial Costa Rica, 1ª. ed., 1977, p. 198.
248
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
81
El Canciller Lizano
Strousberg un golpe repentino que no le dé
tiempo de prepararse para hacernos mal.” 249
En otro informe de enero de 1878 dijo:
“Grandes sacrificios pecuniarios he
tenido que hacer para descubrir la verdad
en este asunto, que hombres muy hábiles
mantenían oculto bajo el velo de la más
pérfida intriga. Usted conoce la fabulosa
suma que a la Nación cuesta ese pleito y
que sobre esta están los abogados pidiendo
225,000 pesos fuertes (£ 45,000). Sin los
cuales no darán una plumada más en el
pleito, COMO NO LA HAN DADO EN
MÁS DE UN AÑO… A su tiempo daré a
ustedes informe detallado de este asunto,
que es el único que me detiene en Europa,
porque quiero hacer el último esfuerzo para
salvar las £ 900,000 que están en poder de
Erlanger y librar al país de nuevos agstos
que no tendrían fin si el pleito continuara en
las manos en que está.” 250
En mayo de 1878, don Saturnino intentó que la
empresa A. C. Edwards & Co., cuyos abogados actuaban como
procuradores en el litigio por designación de Strousberg, le diera
informes sobre la marcha del juicio y el destino de lo que había
adelantado el gobierno de Costa Rica, pero le fueron negados, en
razón de no tener instrucciones del abogado, al que debía acudirse
para cualquier información. Los procuradores alegaron además
que Lizano no les había hecho ver que estuviese nombrado en
capacidad alguna por el gobierno de Costa Rica y que, a pesar de
haber estado largo tiempo en Londres, no se había comunicado
con ellos sino hasta pocos días antes de su partida. En un
pormenorizado informe que rindió el 17 de julio de 1878, ya de
82
249
Ibid., pp. 198-199.
250
Ibid., p. 199.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
regreso en Costa Rica, don Saturnino recomendó que se retiraran
los poderes a Strousberg & Co. y se buscaran otros abogados 251.
3.- La caída de don Vicente Herrera. Otras actividades de don
Saturnino Lizano en Europa.
El 11 de setiembre de 1877, mientras don Saturnino
estaba en Europa, el presidente Herrera fue forzado a separarse de
la primera magistratura y llamar a don Tomás Guardia a ejercerla,
en su condición de primer designado. Según anunció La Gaceta de
ese día, el presidente Herrera, teniendo necesidad de restablecer
su salud, se separaba “temporalmente” de las funciones de jefe de
la Nación y llamaba al primer designado don Tomás Guardia al
ejercicio del Poder Ejecutivo. El editorial del periódico defendía la
“decisión” de Herrera y, por supuesto, dedicaba expresivos elogios
al general 252.
Teóricamente, don Tomás era sólo un designado
en ejercicio, y el presidente de la República, con facultades
“omnímodas”, seguía siendo don Vicente Herrera, quien (también
teóricamente) podía reasumir la primera magistratura en el
momento que se le antojara. Pero la verdad, desde ese mismo
11 de setiembre nadie pareció acordarse de eso, y el 15 de
setiembre Guardia se adjudicó el papel protagónico en todas las
celebraciones de la fiesta patria 253. Don Vicente Herrera brilló por
su ausencia en esos festejos, y en los días siguientes su nombre
prácticamente desapareció de las columnas del periódico oficial.
Guardia resolvió consultas, aprobó contratos y hasta emitió una
especie de manifiesto para anunciar que Costa Rica estaría bajo la
bandera del orden y el progreso, como si Herrera ya no contara
para nada y él estuviera inaugurando administración.
A las doce del día del domingo 23 de setiembre, don
Tomás reunió una especie de junta de notables en el salón
de sesiones del antiguo Congreso, ubicado en la planta baja
del Palacio Nacional. Los concurrentes, elegidos a gusto del
251
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 10863.
252
Gaceta oficial, 11 de setiembre de 1877.
253
Gaceta oficial, 18 de setiembre de 1877.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
83
El Canciller Lizano
convocante, eran miembros de las municipalidades de Alajuela,
Cartago, Heredia y San José o figuras prominentes de la vida
económica y política del país, aunque por supuesto brillaban por
su ausencia los personajes desafectos al régimen. Una vez que los
“notables” tomaron asiento, Guardia les expresó:
“Encargado del poder, en concepto de
Primer Designado, no debo hacer más
que mantener la situación, tal como la he
recibido, sin dar un solo paso trascendental
devolviendo el mando, llegada la hora,
al mismo que me lo entregó. Pero el
Excelentísimo señor Presidente, Doctor
Don Vicente Herrera, ha tenido a bien
significarme su propósito de no volver a
ocupar el sillón presidencial. Desconsolado
ante una oposición que, sin respetar sus
asiduos y bien intencionados esfuerzos a
favor del país, se reveló ostensiblemente en
el movimiento revolucionario que fracasó
el 29 de julio de éste, me ha llamado al
Poder… el propósito manifestado por el
Excelentísimo señor Presidente, de no volver
al mando, constituye a la República en una
especie de acefalia.” 254
Si eso de que don Vicente estaba tan desconsolado y no
quería volver al poder hubiera sido cierto, lo más lógico es que
él mismo se lo hubiera manifestado así a los notables, o por lo
menos hubiera suscrito una carta de renuncia. Por lo demás,
lo de la “acefalia” era una pura fábula, porque precisamente los
designados estaban llamados a sustituir al presidente en sus
ausencias temporales o definitivas, y el mejor testimonio de ello
estaba en que Guardia llevaba ya doce días de estar encargado
del Ejecutivo, sin que se hubieran visto síntomas ningunos de
anarquía. Pero al parecer, don Vicente no quiso renunciar por
las buenas, ni a don Tomás le pareció agradable continuar en
el poder a título de mero designado, y se le ocurrió legitimar en
254
84
Gaceta oficial, 25 de setiembre de 1877.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
cierta forma la deposición de aquel mediante la argucia de la junta
de notables.
Después de comunicarles la “decisión” de Herrera, don
Tomás planteó a los concurrentes a la asamblea la posibilidad de
que lo eligieran como presidente, con el fin de “legitimarse” en el
poder y permitirle gobernar (como si necesitara permiso) con las
facultades propias del cargo. También les planteó la posibilidad de
convocar a elecciones para una asamblea constituyente. Después
se retiró del recinto, con el propósito de que los presentes
deliberaran y votaran en “libertad” 255.
El médico cartaginés don Andrés Sáenz Llorente
manifestó que no era necesario elegir presidente, ya que el general
Guardia era ya primer designado con amplias facultades. En el
mismo sentido opinaron don Francisco Echeverría, don Juan
Rafael Mata y Lafuente y don Carlos Sancho y Alvarado. Sin
embargo, las miras del régimen andaban por otro lado, y casi
todos los concurrentes, cumpliendo a la perfección con el papel
que se les había asignado en aquella comedia, opinaron que debía
efectuarse la elección. Aceptada esa tesis, se procedió a votar 256.
No había ni para qué contar los votos, si ya se sabía de
antemano a quién iban a favorecer los números. En efecto de los
cincuenta y cuatro “notables”, cincuenta votaron porque Guardia
asumiese el poder como presidente de la República. Otro, don
Francisco Peralta y Alvarado, expresó que se abstenía de votar en
razón de su nacionalidad española, pero acto seguido, para no
quedar mal, indicó que apoyaba la propuesta de que el general
quedara como presidente. De los tres sufragios restantes -tímida
y por demás inútil voz de protesta-, dos favorecieron al licenciado
don Juan José Ulloa Solares, prominente abogado y cafetalero
herediano que había sido presidente de la Corte y secretario de
Estado. Y el otro, que equivalía casi a una broma, fue emitido a
favor de don Aniceto Esquivel Sáenz, el presidente derrocado en
1876 257. Con aquella votación concluyó oficial y definitivamente,
255
Ibid.
256
Ibid.
257
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
85
El Canciller Lizano
después de catorce meses, la administración de don Vicente
Herrera.
En su condición de esposa de un jefe de Estado, doña
Emilia de Guardia pudo asistir junto con su hija y su yerno a la
boda del rey Don Alfonso XII de España con su prima la princesa
Doña María de las Mercedes de Orleans y Borbón, a los funerales
del papa Pío IX y a la coronación de su sucesor León XIII.
En enero de 1878, don Saturnino, su esposa y su madre
política se encontraban en Madrid, para asistir al matrimonio de
Don Alfonso XII, que se celebró el 23 de ese mes en la basílica
de Atocha. En uno de los bailes que ofreció la corte española
con motivo del acontecimiento, a doña Angélica de Lizano le
correspondió desfilar del brazo del joven monarca 258.
De España, don Saturnino y sus acompañantes regresaron
a París. Estando allí, murió en Roma el papa Pío IX, y decidieron
concurrir a sus funerales. El joven diplomático don Manuel
María de Peralta, quien recientemente había sido nombrado
como encargado de Negocios en Londres y había ido a París para
reunirse con don Saturnino, acompañó a este y a las señoras a
Roma. Se alojaron en el hotel de Roma, en la vía del Corso, frente
a la iglesia de San Carlos Borromeo 259. y allí escribió en su diario:
“El 7 de febrero muere su s. s. el Papa Pío
IX y el Sr. L [izano], su señora y la Señora
de Guardia resuelven venir a Italia a pagar
un último tributo de respeto a Pío IX. No
soñaba yo en este viaje, cuando tres horas
antes de partir, viendo los obstáculos que
sin razón alguna les suscitaba Fr. les ofrecí
acompañarlas. Aceptó mi compañía la
Sra. de Guardia y salimos de París el 10 de
febrero. El 12 a las dos de la tarde estábamos
en Roma… Mis visitas a los museos o a las
iglesias han sido menos satisfactorias que
258
SÁENZ CARBONELL y otros, p. 415.
259 Diario de don Manuel María de Peralta 1918-1922, 30 de enero de 1922. Museo
Diplomático Braulio Carrillo, documentos de la Colección Ortiz.
86
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
cuando he ido solo en otro tiempo… Asistí
a la deposición en el Sepulcro de Pío Nono y
a uno de los tres funerales que le consagró el
Sacro Colegio de Cardenales; pero ninguna
de estas ceremonias impuso mi ánimo, pues
no las acompañó esa solemne grandeza que
ha caracterizado las funciones pontificias…”
260
Gracias a que doña Emilia era la esposa del presidente
de Costa Rica, la delegación recibió un trato privilegiado, según
escribió don Manuel María:
“Asistimos en San Pedro a las exequias
del Papa. Como esposa de un Jefe de
Estado se dio a la Señora de Guardia y a
sus compañeros asiento en la tribuna de los
Príncipes y pudimos ver perfectamente la
ceremonia.” 261
El 20 de febrero, el cardenal Gioacchino Pecci fue elegido
como nuevo papa y adoptó el nombre de León XIII. El 24, doña
Emilia de Guardia, sin duda en su condición de esposa de un jefe
de Estado, y acompañada por don Manuel María de Peralta, se
entrevistó con el cardenal Alessandro Franchi, quien se disponía a
asumir el cargo de secretario de Estado, y el 25 toda la delegación
costarricense, aumentada con don Manuel Alvarado y Barroeta y
don Santiago de la Guardia y Fábrega, fue recibida por el nuevo
pontífice. Fueron los primeros extranjeros que tuvieron audiencia
con León XIII. Ese mismo día, don Manuel María de Peralta
escribió en su diario:
260 Diario de don Manuel María de Peralta 1878-1880, 24 de febrero de 1878. Museo
Diplomático Braulio Carrillo, documentos de la Colección Ortiz. La abreviatura “Fr.” puede
referirse a Francia o más probablemente a don Tomás de Franco, representante diplomático
de Nicaragua en París. También podría tratarse de don Fernando de Lorenzana y García,
marqués de Belmonte y ministro plenipotenciario de Costa Rica ante la Santa Sede, aunque
en su caso la abreviatura “Fr.” resulta menos verosímil, ya que Peralta siempre se refiere a él en
su diario como “el señor marqués de Lorenzana” u otras expresiones semejantes, sin caer en la
familiaridad de llamarlo “Fernando”.
261
Diario de don Manuel María de Peralta 1918-1922, 30 de enero de 1920.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
87
El Canciller Lizano
“Hoy a las doce y media del día en
compañía de Doña Emilia de Guardia, del
Sr. Lizano y su Sra de S. de la Guardia y Dn.
Manuel Alvarado fui recibido en audiencia
particular por Su Santidad el Papa León
XIII.
Permanecimos con él más de diez
minutos.
Hechas las reverencias de costumbre,
hizo algunas preguntas con voz clara y
vibrante y en un tono afable… El Papa es de
gallardo continente, alto, delgado, nervioso,
de ojos vivos… El tono de su voz como su
aspecto, denotan inteligencia y decisión…
habló del Cónclave en términos justos y
necesariamente favorables. Los Cardenales
habían obrado con una prontitud y una
armonía que solo se encuentra en la Iglesia
Católica. Me preguntó respecto a nuestra
permanencia en Roma y le dije que vinimos
a los funerales de Pío IX y a ver si era posible
tener el honor de recibir la bendición del
futuro Papa y asistir a su coronación. Él dijo
entonces “sí”, y a esperar las decisiones del
Cónclave .
Hizo otras varias preguntas sobre Costa
Rica etc. y trató de decir algo a cada uno.
La Señora de Guardia le presentó una
colección de rosarios pertenecientes a la
compañía y dos cadenitas facsímiles de las
que se dicen lignum a S. Pedro y a S. Pablo
(de mi propiedad) para que las bendijese. El
Papa dijo que las iba a tocar y a bendecir
queriendo que esa bendición tuviese todos
los efectos de la bendición papal… Al
mismo tiempo dio a cada uno de nosotros su
bendición para cada uno en persona, para
88
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
sus padres, familia, amigos y en fin para
Costa Rica. Dio todo el énfasis necesario
a estas bendiciones y estuvo León XIII tan
amable y benigno como no era más dable
desearlo… La impresión clara que deja el
Papa es la de que es un digno y eminente jefe
de la Iglesia y que en el día, dif ícil hubiera
sido hallar un cardenal tan digno de ceñir
la tiara.” 262
Muchos años más tarde, en 1920, don Manuel María de
Peralta recordó:
“Estuvimos en Roma durante la
celebración del Cónclave y la elección del
gran Pontífice León XIII. A pesar de que Su
Santidad no había aún recibido al cuerpo
diplomático y de las dificultades que oponía
el Sr. Marqués de Lorenzana, Ministro
de Costa Rica, logramos con el Cardenal
Franchi que obtuviera una audiencia de S.
S. y así fuimos a la presencia de León XIII
en audiencia privada… Fuimos los primeros
extranjeros recibidos por S. S. Salimos de
Roma para Nápoles al día siguiente…” 263
Además de visitar Nápoles, según consignó Peralta en su
diario de 1878, fueron
“… a Baia y Pozzuoli, al Lago Averno,
al Vesubio y la Solfatara, a la Gruta Azul
y al Salto de Tiberio en Capri; a Salerno,
a Paestum, a Amalfi; recorrí en coche ese
magnífico camino de Salerno, Vetri, Amalfi
– Fui por Foggia y Ancona a Bolonia; vi
la Santa Cecilia de Rafael. Fui a Venecia
y Padua; a Milán y Pavía y vi la Cartuja;
262
Diario de don Manuel María de Peralta 1878-1880, 25 de febrero de 1878.
263
Diario de don Manuel María de Peralta 1918-1922, 30 de enero de 1920.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
89
El Canciller Lizano
a Génova, a Niza y Menton y luego por
Marsella a París.” 264
Poco tiempo después de la visita a Italia, don Saturnino,
su esposa y su suegra emprendieron el regreso a Costa Rica, a
donde llegaron en el vapor Granada, procedentes de Panamá, a
las 3:30 p. m. el 31 de mayo de 1878 265. La Gaceta del 1º de junio
de 1878 anunció:
“En el vapor de ayer llegaron a
Puntarenas, la Sra. Dª Emilia de Guardia,
esposa del Gral. Presidente, y el Sr. Don
Saturnino Lizano y familia, que regresan de
Europa. Damos la bienvenida a los recién
llegados, y felicitamos al Señor General
Presidente porque su importante familia
vuelve sin novedad, después de algunos
meses de ausencia.” 266
La misión en Europa originó para don Saturnino un grave
problema financiero. El 7 de diciembre de 1877, el secretario de
Hacienda don Salvador Lara Zamora se dirigió a don Saturnino
para comunicarle que el Consejo de Ministros había resuelto
recomendar al presidente Guardia que se fijara una mensualidad
de 2000 pesos tanto para los gastos del litigio de los empréstitos
como para los gastos particulares del comisionado. La suma era
por demás insuficiente, y debido a que don Saturnino, meses
más tarde, giró una letra por mil libras esterlinas, el 23 de marzo
de 1878 el ministro Lara le manifestó que no se podía aceptar
esa letra ni las que en adelante girara, porque debía atenerse al
máximo de la mensualidad de la que podía disponer 267.
Según la Secretaría de Hacienda, el monto de las
mensualidades correspondientes desde el 8 de abril de 1877 hasta
el 23 de marzo de 1878 en que el ministro había negado los fondos
(un año y quince días), con un mes más para el regreso de don
90
264
Diario de don Manuel María de Peralta 1878-1880, 8 de agosto de 1878.
265
La Gaceta, 1º de junio de 1878.
266
Ibid.
267
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 5268.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Saturnino a Costa Rica, ascendía a 25,000 pesos. Entre el 8 de
abril y el 8 de junio de 1878, fecha esta última correspondiente
al regreso efectivo del diplomático, este había devengado otros
tres mil pesos. Ahora bien, a don Saturnino se le había girado,
según las cuentas de la Secretaría, un monto de 38,850 pesos, y en
consecuencia más bien resultaba que resultaba una diferencia de
10,850 pesos en contra suya 268.
Don Saturnino planteó ante la Secretaría de Hacienda un
reclamo por la suma de 24,135.23 pesos, correspondientes a los
gastos que había tenido que hacer de su propio peculio durante
la misión, y que habían comprometido gravemente el crédito
de Lizano y Hermano 269. La Secretaría trasladó el reclamo al
Consejo de Estado, y aunque el peticionario era yerno y primo del
presidente y además primer designado y titular de varias carteras
ministeriales, los consejeros resolvieron en su sesión del 27 de
febrero de 1882, aprobar un dictamen que recomendaba devolver
a la Secretaría de Hacienda el reclamo y la documentación anexa,
y manifestar a don Saturnino que de no ser aceptado su reclamo,
“… son los tribunales, por el carácter
contencioso que el asunto envuelve los
llamados a resolver sobre la justicia que al
Honorable Señor Lizano pueda asistir para
exigir el reintegro de las cantidades que en
beneficio del Tesoro nacional asegura haber
invertido.” 270
4.- Secretario de Gobernación y carteras anexas y secretario
interino de Guerra y Marina.
El 19 de julio de 1880, el presidente Guardia nombró
a don Saturnino como secretario de Estado en las carteras de
Gobernación, Policía y Agricultura e Industria, en sustitución de
don Rafael Machado Jáuregui. En la misma fecha también se le
268
Ibid.
269
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 8472.
270 Ibid.; SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco, Los días del presidente Lizano, San José,
EUNED, 1ª. ed., 1997, p. 43.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
91
El Canciller Lizano
recargaron interinamente las carteras de Guerra y Marina, que
desempeñó hasta el 7 de mayo de 1881, fecha en que se nombró
como titular al general don Víctor Guardia 271.
La situación de las carteras ministeriales fue algo inestable
en esa época. El 4 de octubre de 1880, se le encargó la cartera de
Policía al secretario de Hacienda y Comercio don Salvador Lara
272
. Mediante acuerdo nº 7 de 1º de junio de 1881 fueron agregados
a la Secretaría de Gobernación los ramos de Culto y Beneficencia,
que hasta ese momento habían estado adscritas a la Secretaría de
Relaciones Exteriores 273.
Como secretario de Gobernación, le correspondió a
don Saturnino suscribir con el presidente Guardia los decretos
de instalación 274 y de suspensión de las sesiones de la ef ímera
Asamblea Constituyente de 1880 275, de la que don Tomás
decidió prescindir cuando sus integrantes empezaron a criticar
a su gobierno. También firmó con don Tomás el acuerdo de
naturalización del nuevo obispo de Costa Rica, monseñor
Bernardo Augusto Thiel 276, y el nombramiento de regidores y
alcaldes para el año de 1881, uno de los cuales fue su hermano
don Enrique Lizano, designado como regidor propietario de la
Municipalidad del cantón de Puntarenas 277. Además, presentó al
Gran Consejo el 14 de octubre de 1880 un proyecto de ley dirigido
a que se expulsara del país a los extranjeros que intervinieran en la
política nacional 278.
Don Saturnino fue secretario de Gobernación y carteras
anexas hasta el 17 de junio de 1882, cuando tuvo que asumir la
presidencia de la República como primer designado en ejercicio,
por enfermedad del presidente Guardia.
271
GRUB, 1994, pp. 127-128.
272
Acuerdo n° 42 de 4 de octubre de 1880.
273
La Gaceta, 10 de junio de 1881.
274
Decreto n° 13 de 29 de agosto de 1880.
275 Decreto n° 2 de 23 de setiembre de 1880. Este decreto fue suscrito además por todos los
otros secretarios de Estado.
92
276
Acuerdo n° 40 de 4 de setiembre de 1880.
277
Decreto n° 29 de 18 de diciembre de 1880.
278
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 8733.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Como subsecretario de Gobernación estuvo don
Francisco Chaves Castro, desde el 28 de abril de 1880 al 20 de
julio de 1881 y del 16 de febrero al 5 de julio de 1882. Como
subsecretario de Guerra estuvo don Miguel Guardia, desde el 11
de setiembre de 1877 hasta el 7 de julio de 1882.
5.- Primer designado a la Presidencia.
El 19 de octubre de 1877, poco después de la caída de don
Vicente Herrera, el presidente Guardia nombró como designados
a la Presidencia al general don Pedro Quirós y Jiménez y a don
Rafael Barroeta Baca. Este último murió el 21 de junio de 1880,
por lo que el general Quirós quedó como único designado. Don
Pedro y su hermano el también general don Pablo Quirós habían
sido personas muy cercanas a don Tomás, al extremo de que un
estribillo popular los había designado en conjunto con el nombre
de “la trinidad del diablo” 279, pero para comienzos de 1881 estaban
muy distanciados. En abril de ese año, tomando como pretexto el
fallecimiento de don Rafael Barroeta, ocurrido diez meses atrás,
Guardia decidió efectuar un nuevo nombramiento de designados
a la presidencia. Sin embargo, en vez de limitarse a dos o a lo
sumo tres, como había sido lo habitual desde la emisión de la
Constitución de 1859, aumentó el número a siete. El 23 de abril,
un decreto del presidente dispuso nombrar como designados a la
presidencia a don Saturnino Lizano Gutiérrez, don Salvador Lara
Zamora, don José María Castro Madriz, don Manuel Argüello
Mora, don Pedro Quirós y Jiménez, don Víctor Guardia Gutiérrez
y don Próspero Fernández Oreamuno.
A mediados de 1881 don Tomás decidió efectuar un nuevo
viaje a Europa, pero para gobernar el país durante su ausencia no
llamó al primer designado, su yerno y primo don Saturnino, como
hubiera sido lo lógico, sino al segundo, don Salvador Lara, quien
se hizo cargo del poder el 10 de junio de 1881. Guardia regresó
a Costa Rica el 15 de enero de 1882 y se dirigió a San José por la
vía de Toro Amarillo, a donde llegaron a saludarlo don Saturnino
y otros numerosos funcionarios y particulares. El 23 de enero, ya
en la capital, reasumió la primera magistratura, y el mismo día se
279
SÁENZ CARBONELL, 1997, p. 11.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
93
El Canciller Lizano
trasladó a Alajuela, en compañía de don Saturnino, el secretario
de Fomento don Manuel Argüello y otras personas.
Ya para entonces la afección pulmonar que padecía el
general presidente se había agravado mucho, y en el seno de su
familia se empezaron a elaborar planes con respecto a la sucesión.
Según relató en sus memorias su hermano mayor don Víctor
Guardia, se forjó una alianza para impedir que don Tomás lo
nombrara como heredero político, en la cual participaban doña
Emilia, doña Angélica, don Saturnino y el general don Próspero
Fernández, esposo de doña Cristina Guardia:
“El General Fernández insinuó al señor
Lizano, que una vez descartados del último
obstáculo, que era yo, este último caballero,
entonces Primer Designado, se quedaría
con el mando, apoyado por el General
Fernández, que sería su General en jefe.” 280
Cabe recordar que además de que doña Angélica Guardia
era sobrina política de don Próspero, este había sido el padrino de
bautismo de su hija Rosario, y por consiguiente era compadre de
don Saturnino, vínculo que tenía notoria importancia en aquellos
tiempos.
El 26 de abril de 1882, don Tomás puso en vigencia,
mediante un decreto, la Constitución Política de 1871, y además
convocó a elecciones presidenciales y legislativas, que se iniciaron
el 15 de junio siguiente.
6.- Primer designado en ejercicio de la Presidencia de la
República.
El 17 de junio de 1882, en atención a que su estado
de salud no le permitía ocuparse de los negocios públicos, el
presidente Guardia llamó temporalmente al ejercicio de la
primera magistratura de la República a don Saturnino Lizano, en
280 GUARDIA GUTIÉRREZ, Víctor, “Memorias del señor Víctor Guardia Gutiérrez,
General de División del ejército de Costa Rica”, p. 206, en Documentos Históricos, San José,
Academia de Geograf ía e Historia de Costa Rica, 1ª. ed., 1990, pp. 167-215.
94
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
su condición de primer designado, y nombró como comandante
en jefe del ejército, también temporalmente, al general don
Próspero Fernández Oreamuno 281.
Al día siguiente, la plana mayor del ejército nacional,
encabezada por el propio don Próspero, suscribió una entusiasta
felicitación a don Saturnino:
“… el cuerpo militar… ve en el
Excelentísimo señor Don Saturnino
Lizano la encarnación genuina, y el
continuador, sin tropiezo de los principios
de engrandecimiento y progreso que
tanto tiempo ha sostenido con indomable
energía el Excelentísimo Señor Don Tomás
Guardia.” 282
El 19 de junio, tanto el cuerpo militar de Alajuela 283 como
la Municipalidad local 284 dirigieron felicitaciones a don Saturnino
y a don Próspero, y el editorial de La Gaceta del 20 expresó:
“… conocidos el carácter personal del
Señor Lizano, sus antecedentes políticos y los
estrechos vínculos que lo unen a la persona
y a la política del general Guardia, el nuevo
gobernante será, sin duda alguna, el fiel
sucesor de la obra de redención iniciada,
y con tantos y tan nobles y poderosos
esfuerzos seguida por el que hoy, víctima de
tan patriótica tarea, se encuentra postrado
en el lecho del dolor… el país puede estar
tranquilo. El orden establecido de cosas
seguirá siendo el mismo....” 285
281
Decreto nº 15 de 17 de junio de 1882.
282
La Gaceta, 21 de junio de 1882.
283
La Gaceta, 21 y 23 de junio de 1882.
284
La Gaceta, 23 de junio de 1882.
285
La Gaceta, 20 de junio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
95
El Canciller Lizano
En los días siguientes, muchos otros funcionarios
públicos, corporaciones municipales, sacerdotes, militares y
particulares se sumaron a los parabienes a don Saturnino y a don
Próspero 286.
El primer decreto suscrito por don Saturnino como primer
designado en ejercicio de la presidencia fue una modificación de
la Constitución Política de 1871, recién resucitada por el general
Guardia el 26 de abril. De conformidad con el voto unánime del
Consejo de Estado, y con las firmas del designado en ejercicio
y todos los secretarios de Estado, el 19 de junio se emitió en
Alajuela el decreto n° 16, mediante el cual se reformó el inciso 19
del artículo 102 de la Constitución para que concordara con lo
dispuesto en el Código Penal emitido en 1880 287.
Con respecto a las relaciones exteriores, mediante
acuerdo n° 51 de 19 de junio se reconoció a don Gaspar Ortuño y
Ors como encargado del consulado de España, por ausencia de su
titular don Francisco Manuel de Peralta y Alvarado 288.
Con miras a las elecciones presidenciales y legislativas
de segundo grado, que debían efectuarse el 9 de julio, mediante
decreto n° 24 de 6 de julio de 1882 se dispuso que la comarca de
Limón elegiría un diputado propietario y otro suplente 289.
En materia hacendaria, mediante decreto n° 17 de 19
de junio se declaró vigente por los meses de junio y julio y hasta
que el nuevo Congreso que debía reunirse en agosto decretara un
nuevo presupuesto, el emitido en 1881 290.
Mediante acuerdo n° 53 de 5 de julio de 1882 se acordó
otorgar al Instituto Nacional una subvención mensual de
trescientos pesos 291.
96
286
SÁENZ CARBONELL, 1997, p. 90-91.
287
Decreto n° 16 de 19 de junio de 1882.
288
Acuerdo n° 51 de 19 de junio de 1882.
289
Decreto n° 24 de 6 de julio de 1882.
290
Decreto n° 17 de 19 de junio de 1882.
291
Acuerdo n° 53 de 5 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
En temas de gobernación, mediante el acuerdo n° 49 de
19 de junio de 1882 se creó una plaza de mensajero de telégrafos
en la villa de la Unión 292, y mediante el acuerdo n° 50 de la misma
fecha una plaza de agente de policía de Río Sucio 293.
En materia de justicia, mediante decreto n° 18 de 21 de
junio se aprobó una decisión del Gran Consejo Nacional del 24
de abril anterior, relativa a los términos probatorios en juicios
civiles y causas penales y su eventual prórroga 294. Este decreto
tuvo una vigencia ef ímera, ya que sus efectos fueron suspendidos
por el designado en ejercicio don Próspero Fernández mediante el
decreto n° 42 de 22 de julio de 1882 295. Mediante decreto n° 19 de 27
de junio de 1882 se restablecieron los salarios de los jueces civiles
y de Comercio y otros funcionarios de los tribunales, suprimidos
por disposiciones de 1881, que habían dispuesto remunerarlos
con las costas judiciales 296. Con respecto a la cartulación, el
decreto n° 20 de 27 de junio dispuso que en asuntos que bajaran
de 5000 pesos, la cartulación correspondería exclusivamente a
los alcaldes y no a los jueces de primera instancia 297 y el decreto
n° 22 de 27 de junio permitió a los jueces de primera instancia
recibir la totalidad de los derechos de cartulación, que un decreto
de 1881 había rebajado a la mitad y destinado la otra mitad al
Tesoro Público 298. Otras disposiciones en temas de justicia fueron
el decreto n° 21 de 27 de junio, que restableció el Juzgado del
Crimen de Alajuela, suprimido en 1881 299, y el acuerdo N° 54 de
5 de julio de 1882, que derogó el acuerdo de 12 de julio de 1881
relativo a la organización económica del Juzgado de Hacienda
Nacional 300.
292
Acuerdo n° 49 de 19 de junio de 1882.
293
Acuerdo n° 50 de 19 de junio de 1882.
294
Decreto n° 18 de 21 de junio de 1882.
295
Decreto n° 42 de 22 de julio de 1882.
296
Decreto n° 19 de 27 de junio de 1882.
297
Decreto n° 20 de 27 de junio de 1882.
298
Decreto n° 22 de 27 de junio de 1882.
299
Decreto n° 21 de 27 de junio de 1882.
300
Acuerdo n° 54 de 5 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
97
El Canciller Lizano
Mediante acuerdo n° 55 de 6 de julio se emitieron reglas
con respecto a la designación del apoderado de los barrios de San
Nicolás, Pascón y Cervantes, de la provincia de Cartago 301.
Una de las actuaciones más notables del gobierno
durante la interinidad de don Saturnino fue el apoyo prestado
a la expedición misionera que recientemente había efectuado
el obispo monseñor Bernardo Augusto Thiel a los palenques de
los indígenas guatusos. Mediante acuerdo n° 52 de 26 de junio
de 1882, el gobierno decidió pagar del Tesoro Público la suma
de 1029.40 pesos, a que ascendieron los gastos de la expedición.
Al respecto, el secretario interino de Culto y Beneficencia don
Francisco Chaves Castro expresó al prelado:
“Es de mi deber manifestar a SS. Ilma.
y Reverendísima, el entusiasmo que anima
al Gobierno por la brillante adquisición
hecha por SS. Ilma. y Rvma., atrayendo a
aquellos indígenas a la civilización; bajo
tal impresión, S. E. el Señor Designado en
ejercicio de la Presidencia de la República,
ha dictado, con la mayor satisfacción, el
preinserto acuerdo, en cuya virtud se ha
librado hoy contra el Tesoro Nacional,
y a favor de SS. Ilma. y Revma., el giro
correspondiente, que será entregado tan
luego como se presente a esta Secretaría,
persona recomendada al efecto.” 302
El 2 de julio, don Saturnino escribió a monseñor
Thiel para exponerle su plan de que en gobierno formara en la
región donde vivían los guatusos una hacienda para educarlos,
enseñarles técnicas de agricultura y hacerles apreciar los animales
domésticos, y pedirle al obispo que el indicara el nombre de
algunas personas capaces de llevar a cabo esa obra. También le
manifestó al obispo su intención de enviarle instrumentos de labor
y otros utensilios para fomentar la agricultura entre los indígenas.
El prelado contestó al día siguiente y expresó a don Saturnino
98
301
Acuerdo n° 55 de 6 de julio de 1882.
302
Acuerdo n° 52 de 26 de junio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
su reconocimiento y la satisfacción que le había producido su
carta; además se refirió a la posible ubicación de la proyectada
hacienda y para llevar a cabo el plan indicó los nombres de don
José Benavides y don Maximino Quesada, a quienes consideraba
hombres honrados y capaces 303. En otra carta fechada el 15 de
julio, cuando ya don Saturnino era presidente de la República,
le volvió a mencionar los nombres de los señores Benavides
y Quesada, que se habían ofrecido para poner en ejecución el
proyecto de la hacienda de los guatusos, “tan luego que vuestra
excelencia les llame para ese fin” 304. Sin embargo, don Saturnino
tuvo que abandonar la primera magistratura el 20 de julio y al
parecer eso significó el olvido de su proyecto.
Durante la interinidad de don Saturnino se efectuaron
los siguientes nombramientos en los poderes Ejecutivo y Judicial
305
:
-
Don Tiburcio Ruiz, como agente de policía de Río Sucio
(18 de junio de 1882)
-
Don Hilario Ruiz, como juez del Crimen de Alajuela (27
de junio de 1882)
-
Don Juan Rafael Mora Garita, como juez del Crimen de
San José (30 de junio de 1882)
- Don Pedro Acosta, como juez civil y del Crimen de
Puntarenas (3 de julio de 1882)
-
Don Enrique Villavicencio, como director del Instituto
Nacional (5 de julio de 1882).
- Don José María Oreamuno y Oreamuno, gobernador
de la provincia de Cartago, en sustitución de don Luis
Pacheco Bertora (6 de julio de 1882)
303 HERRERA SOTILLO, Ana Isabel, Monseñor Thiel en Costa Rica: visitas pastorales
1880-1901, Cartago, Editorial Tecnológica de Costa Rica, 1ª. ed., 2009, pp. 625-626.
304
Ibid., p. 626.
305 Estos nombramientos figuran en una lista al final del tomo de la colección de leyes y
decretos correspondientes a 1882, en una sección sin paginar.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
99
El Canciller Lizano
306
100
-
Don Alberto Moya, gobernador de la comarca de Limón,
en sustitución de don Mariano Castro (6 de julio de 1882)
-
Don Otoniel Pinto, como médico de Higiene Pública (6
de julio de 1882) 306
La Gaceta, 9 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
CAPÍTULO V
EL PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA
(JULIO-AGOSTO DE 1882)
1.- Integración del gobierno.
A las 7:25 p. m. del 6 de julio de 1882 falleció en Alajuela
el general Guardia, y don Saturnino Lizano se convirtió en
presidente de la República.
Al asumir la primera magistratura en propiedad, don
Saturnino automáticamente perdió la condición de primer
designado a la Presidencia y en consecuencia debía nombrar otro,
pero no lo hizo, posiblemente en atención a que su permanencia
en el poder iba a ser de breve duración. Continuaron en sus
puestos los otros seis designados, que eran, como ya se indicó,
don Salvador Lara Zamora, don José María Castro Madriz, don
Manuel Argüello Mora, don Pedro Quirós Jiménez, don Víctor
Guardia Gutiérrez y don Próspero Fernández Oreamuno.
El presidente Lizano conservó en su cargos a los cinco
secretarios de Estado de su predecesor: el doctor don José
María Castro Madriz era titular de las carteras de Relaciones
Exteriores, don Manuel Antonio Bonilla Carrillo de las carteras
de Gobernación y Policía, con el recargo de Obras Públicas;
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
101
El Canciller Lizano
don Luis Diego Sáenz Carazo de las de Hacienda y Comercio,
don Miguel Guardia Gutiérrez de las de Guerra y Marina y don
Francisco Chaves Castro de Justicia, Culto y Beneficencia. Como
subsecretario de Relaciones Exteriores y carteras anexas estaba
nombrado don Santiago de la Guardia y Fábrega, uno de los
acompañantes de don Saturnino en su audiencia con León XIII
en febrero de 1878.
De conformidad con el decreto n° 32 de 24 de setiembre
de 1877, existía un Consejo de Estado, con voto consultivo en los
asuntos ordinarios de la Administración en que se le pidiera su
dictamen. Tenía siete miembros, que duraban en sus funciones
un año: dos nombrados por el gobierno, cuatro nombrados por
mayoría relativa de votos por cada una de las municipalidades de
Alajuela, Cartago, Heredia y San José, y otro por las de Guanacaste
y Puntarenas. En el período 1881-1882, el Consejo de Estado,
que había iniciado funciones el 10 de octubre de 1881, estaba
integrado del siguiente modo:
102
Por el gobierno: don Luis Diego Sáenz Carazo y don
Andrés Sáenz Llorente 307.
Por Alajuela: don Jesús Soto Quesada 308.
Por Cartago: don Jesús Solano Gutiérrez 309.
Por Guanacaste y Puntarenas: don Gregorio Escalante
Nava 310.
Por Heredia: don Braulio Morales Cervantes 311.
Por San José: don Bruno Carranza Ramírez 312.
307
Decreto N° 38 de 29 de setiembre de 1881.
308
Circular N° 3 de 3 de octubre de 1881.
309
Ibid.
310
Ibid.
311
Ibid.
312
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
El Consejo era presidido por don Bruno Carranza y
tenía como secretario al licenciado don Jesús Solano Gutiérrez,
representante de Cartago.
El Consejo de Estado se unía a los secretarios de Estado
para formar un órgano denominado Gran Consejo Nacional, que
tenía voto deliberativo en la elección de los magistrados de la
Corte Suprema de Justicia, en todos los negocios que afectaran
los grandes intereses nacionales y en la declaratoria de si había
o no lugar a formación de causa contra los consejeros, los
secretarios de Estado, los magistrados y los agentes diplomáticos
de la República.
La Corte Suprema de Justicia estaba integrada del
siguiente modo:
Presidente de la Sala de Tercera Instancia y de la Corte:
don Rafael Orozco González (nombrado el 10 de octubre
de 1881 como presidente de la Corte 313, y el 20 de octubre
de 1881 como presidente de la Sala de Tercera Instancia
314
).
Sala Primera: presidente, don Vicente Sáenz Llorente
(nombrado el 20 de octubre de 1881 315); magistrados,
don José María Ugalde y don Alejandro Alvarado García
(ambos nombrados el 10 de octubre de 1881 316).
Sala Segunda: presidente, don Pedro María de LeónPáez Brown (nombrado el 10 de octubre de 1881 317);
magistrados, don Rafael Chacón (nombrado el 20 de
octubre de 1881 318) y don José María Acosta (nombrado
el 10 de octubre de 1881 319).
313
Decreto N° 39 de 10 de octubre de 1881.
314
Decreto N° 53 de 21 de octubre de 1881.
315
Decreto N° 54 de 21 de octubre de 1881.
316
Decreto N° 39 de 10 de octubre de 1881.
317
Ibid.
318
Decreto N° 54 de 21 de octubre de 1881.
319
Decreto N° 39 de 10 de octubre de 1881.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
103
El Canciller Lizano
Magistrado para completar las salas en la tercera
instancia: don Ramón Loría Vega (nombrado el 10 de
octubre de 1881 320).
Fiscal: don Gerardo Castro Méndez (nombrado el 10 de
octubre de 1881 321).
Se mantuvieron en sus cargos los gobernadores
provinciales de Alajuela, don Bernardo Soto Alfaro; de Cartago,
don José María Oreamuno y Oreamuno; de Guanacaste don
Manuel Esquivel Sáenz; de Heredia, don Pedro Ulloa Solares
(hermano de doña Matilde Ulloa de Lizano, la esposa de don
Joaquín Lizano Gutiérrez), y de San José, don Camilo Esquivel
Sáenz, así como los de las comarcas de Limón y Puntarenas,
que eran don Alberto Moya y don Salvador Jirón y Zapata
respectivamente.
2.- Inicios de la administración. Las elecciones presidenciales y
los funerales de don Tomás Guardia.
El primer decreto emitido por el presidente Lizano,
suscrito en Alajuela el 7 de julio de 1882, fue para organizar los
funerales del general Guardia, que debían efectuarse en la catedral
de San José, y disponer que los empleados civiles guardaran luto
por treinta días 322. Este decreto fue complementado en la misma
fecha por el acuerdo n° 56 de la Secretaría de Guerra y Marina, que
facultó al comandante en jefe don Próspero Fernández para dictar
el programa de los honores militares que se tributarían al extinto,
y el n° 57 de la Secretaría de Culto, que definió el programa de las
exequias. El 8 de julio, el acuerdo n° 58 de la misma Secretaría de
Culto dispuso que el cuerpo de don Tomás sería trasladado de
Alajuela a San José en la mañana del 12 de julio, y que los funerales
se iniciarían a las diez de la mañana del 13.
El fallecimiento de don Tomás Guardia no detuvo las
elecciones presidenciales y legislativas de segundo grado, que
104
320
Ibid.
321
Ibid.
322
Decreto N° 25 de 7 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
se efectuaron el domingo 9 de julio de 1882 en las cabeceras de
provincia y comarca. Don Próspero Fernández obtuvo un triunfo
apabullante, ya que fue favorecido con 359 de los 362 votos
emitidos. Apenas hubo tres votos disidentes: uno en Cartago
a favor del expresidente don José María Castro Madriz y dos
en Heredia, uno a favor del también expresidente don Aniceto
Esquivel Sáenz y el otro de don Joaquín Lizano Gutiérrez,
hermano del presidente de la República. Además, hubo un elector
de Cartago que no se presentó a la votación 323.
Concluidos los comicios, se continuó con los preparativos
de los funerales de don Tomás Guardia. Mediante el acuerdo
n° 59 de 10 de julio, la Secretaría de Culto dispuso que una vez
concluidas las exequias, las condecoraciones e insignias civiles
y militares del extinto serían recogidas y oportunamente los
secretarios de Estado las entregarían a su familia. El 12 de julio, un
decreto del presidente Lizano dispuso que el corazón del general
sería conducido a Alajuela por una comisión especial y entregado
a la municipalidad de esa ciudad 324.
Los funerales de don Tomás se efectuaron con gran
solemnidad en la catedral de San José el 13 de julio. El presidente
Lizano no asistió, sino que se hizo representar por el canciller
don José María Castro Madriz. Don Saturnino permaneció en
Alajuela durante varios días, ya que no fue sino hasta el 17 de julio
cuando se emitió el primer decreto firmado por él en el Palacio
Presidencial de San José 325.
3.- Labor de la administración. Política exterior.
Mediante notas diplomáticas suscritas por el canciller
don José María Castro Madriz, se puso en conocimiento de los
países con los que Costa Rica tenía relaciones oficiales la muerte
de don Tomás Guardia y el ascenso de don Saturnino Lizano a la
323 A. N. C. R., S. H., Congreso, documentos números 8923 y 6847; OBREGÓN QUESADA,
2000, p. 191.
324
Decreto n° 26 de 12 de julio de 1882.
325
Decreto n° 30 de 17 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
105
El Canciller Lizano
presidencia de la República. Transcribimos el texto de la dirigida
a la República Argentina, fechada el 17 de julio de 1882:
“Palacio Nacional, San José, a 17 de
Julio de 1882.
Exmo. Señor:
Participo a V. E. un doloroso y
trascendental acontecimiento para esta
Nación, es el motivo del presente despacho
que tengo el honor de dirigir a V. E.: la muerte
de nuestro ilustre Presidente, el Benemérito
General D. Tomás Guardia, acaecida en la
Ciudad de Alajuela el día 6 del corriente a
las 7 y 25 minutos de la noche.
Tan infausto suceso, a virtud del cual
ha venido a ocupar la Presidencia de la
República el Exmo. Sr. D. Saturnino Lizano,
llamado por la ley en su calidad de Primer
Designado para ejercer el Poder Ejecutivo,
no será parte en manera alguna para que
sufran la menor alteración las buenas
relaciones que felizmente existen entre
Costa Rica y la Argentina.
Con el sentimiento de la más alta
estima y consideración, tengo el honor de
suscribirme de V. E. muy atento servidor.
José M. Castro
A S. E. el Señor Ministro de Relaciones
Exteriores de la República Argentina.” 326
326 Nota de don José María Castro Madriz de 17 de julio de 1882. Archivo Diplomático
del Ministerio de Relaciones Exteriores de la República Argentina. Debemos este dato a la
gentileza de don Hugo Luis Dallbosco y del embajador don Juan Carlos Valle Raleigh, director
del Instituto de Servicio Exterior de la Cancillería argentina.
106
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
En cuanto a la representación diplomática de Costa Rica,
la administración Lizano decidió, mediante un acuerdo suscrito
el 18 de julio por el presidente y el vicecanciller don Santiago de
la Guardia, reemplazar a don Manuel María de Peralta como jefe
de misión en Europa y nombrar al licenciado don León Fernández
Bonilla como ministro plenipotenciario en Bélgica, España y
Francia. Don León declinó la designación, porque consideraba
insuficiente la dotación asignada al cargo y que sus circunstancias
de ese momento no le permitía hacer tal sacrificio por la patria
327
. El 10 de abril de 1883, en una carta a don Manuel María de
Peralta, el canciller Castro Madriz le advirtió que el presidente
don Próspero Fernández se disponía a nombrar nuevamente a
don León en Europa:
“Efectivamente León ha obtenido un
éxito completo contra U. en el ánimo de
Próspero, obteniendo de éste la resolución
definitiva de enviarle á Europa en Mayo
próximo con las mismas misiones que le
había conferido el torpe acuerdo de don
Saturnino, que tan ingratamente se prestó
á autorizar el inconsistente y charlatán
Santiago de la Guardia.” 328
Cabe indicar que efectivamente, el 30 de mayo de 1883
don León fue nombrado ministro en Bélgica, España y Francia 329,
y además se logró que el Congreso aumentara la remuneración
del enviado.
El 24 de julio de 1882, durante la presidencial nominal de
don Saturnino, aunque ya cuando don Próspero Fernández había
asumido el poder como designado, el Gran Consejo Nacional
aprobó el tratado Castro-Ferro 330, suscrito en la ciudad de
Panamá el 11 de enero de ese año, mediante el cual Colombia y
327 CASCANTE SEGURA, Carlos Humberto, y SÁENZ CARBONELL, Jorge Francisco,
Ad ardua per alta: una biograf ía del marqués de Peralta, San José, Editorial de la Universidad
de Costa Rica, 1ª. ed., 2004, pp. 48-49.
328 “Cartas de don José María Castro Madriz a don Manuel María de Peralta (1883-1884)”,
p. 118, en Revista Costarricense de Política Exterior, Nº 1, junio de 2012, pp. 118-126.
329
330
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 13543.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
107
El Canciller Lizano
Costa Rica se comprometían a someter a arbitraje los diferendos
que pudieran surgir entre los dos países 331.
4.- Labor de la administración. Política interna.
Para el fomento de la población de la comarca de Limón,
el decreto n° 20 de 27 de junio de 1881 había eximido de derechos
de introducción y muellaje durante un año una serie de materiales
de construcción. La exención había concluido el 1° de julio, pero el
gobierno de don Saturnino, por considerar que se término había
sido insuficiente, dispuso mediante el decreto n° 29 de 15 de julio
de 1882 prorrogarla por un año más.
Para auxiliar a los fondos municipales de Alajuela,
Heredia y San José, que se hallaban exhaustos, mediante decreto
n° 37 de 19 de julio de 1882 se dispuso conceder a cada una de las
tres municipalidades un lote a orillas de la línea férrea al Caribe,
entre los ríos Reventazón y Destierro. En la misma fecha, el decreto
n° 38 concedió a don Juan Myers un privilegio, por el término de
veinticinco años, para establecer en San José el alumbrado de gas,
con los elementos necesarios para producir diariamente 25,000
pies cúbicos. Para que el privilegio fuera efectivo, Myers debía
establecer el alumbrado en el término de dieciocho meses a partir
de la fecha del decreto.
En materia de educación pública, la principal disposición
de la administración Lizano fue el acuerdo n° 61 de 19 de julio,
mediante el cual se otorgó una subvención de cincuenta pesos
mensuales al Colegio Central que dirigía en San José don Juan
Vicente Quirós. Además, mediante decreto n° 36 de esa misma
fecha se otorgó el grado de doctor en Leyes al licenciado don
Francisco Chaves Castro, en reconocimiento a su experiencia y
conocimientos en Derecho y a los importantes servicios prestados
por él al gobierno de don Tomás Guardia.
En materia de salud pública, la primera decisión del
nuevo gobierno estuvo referida a un establecimiento denominado
el Hospicio de Sanidad, que tenía a su cargo el control de las
331
108
SÁENZ CARBONELL, 1996, p. 414.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
enfermedades venéreas y estaba a cargo de un médico de
higiene. En criterio del gobierno, la institución no había dado los
resultados esperados y demandaba fuertes erogaciones. Por estas
circunstancias, mediante el acuerdo N° 60 de la Secretaría de
Policía de 10 de julio de 1882 se eliminó temporalmente la plaza de
médico de higiene, y se dejaron sus funciones a cargo del médico
de pueblo 332. Cabe indicar que esta supresión fue ef ímera, ya que
mediante el decreto n° 54 de 29 de julio de 1882, el designado en
ejercicio don Próspero Fernández Oreamuno dispuso restablecer
el Hospicio de Sanidad.
Por otra parte, mediante decreto n° 30 de 17 de julio se
dispuso que se nombrara a un profesional en medicina, con una
dotación mensual de ciento cincuenta pesos, para encargarse del
examen higiénico del trayecto del camino entre Río Sucio y la
capital, principalmente en cuanto a la desinfección y desecación
de los pantanos. Este médico debía efectuar al menos dos visitas
mensuales a esa zona, rendir un informe de sus actividades a la
Secretaría de Gobernación y Policía cada primero de mes y auxiliar
a todos los enfermos que se lo solicitaran dentro del trayecto a
su cargo, sin devengar ninguna remuneración adicional. En la
misma fecha se nombró con ese propósito al expresidente de la
República don Bruno Carranza, quien era licenciado en medicina.
El 7 de agosto de 1882, ya durante la interinidad del designado
don Próspero Fernández, se ampliaron las funciones del médico
inspector de higiene a todo el trayecto de la línea férrea entre Río
Sucio y Limón 333.
Con respecto a la administración de justicia, la más
importante disposición del gobierno de don Saturnino fue el
decreto n° 31 de 17 de julio de 1882, mediante el cual se reformó
sustancialmente la legislación relativa al jurado, emitida en 1873.
En lo relativo al ejército nacional, la administración
de don Saturnino se circunscribió a conferir algunos grados
militares. El 15 de julio de 1882, mediante el decreto n° 27 se
ascendió a general de división a don Buenaventura Carazo, que
ya lo era de brigada, y mediante el decreto n° 28 se ascendió a
332
Acuerdo N° 60 de 10 de julio de 1882.
333
Acuerdo N° 84 de 7 de agosto de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
109
El Canciller Lizano
general de brigada al coronel don Fadrique Gutiérrez Flores. El 18
de julio, mediante decreto n° 32, se ascendió a general de brigada
al coronel don Federico Fernández Oreamuno, y mediante los
decretos n° 33 y n° 34 se concedió el grado de coronel efectivo al
doctor don Roberto Cortés y Cortés, médico de cabecera de don
Tomás Guardia, y a don Luis Goeris, comandante de los vapores
nacionales, respectivamente.
Durante la administración Lizano se efectuaron los
siguientes nombramientos en los poderes Ejecutivo y Judicial 334:
-
Don Arturo Sáenz Pacheco, como escribiente del Juzgado
de Hacienda (6 de julio de 1882)
-
Don Dolores Ardón como notificador de la Alcaldía 1ª de
Alajuela (8 de julio de 1882) 335
-
Don José Castro Araya, como tasador de costas (15 de
julio de 1882) 336
-
Don Elías Rivas, como escribiente notificador del Juzgado
de Hacienda (15 de julio de 1882) 337
-
Don Abraham Guillén, como escribiente notificador del
Juzgado de 1ª Instancia de Liberia (15 de julio de 1882) 338
-
Don Bruno Carranza Ramírez, como médico e inspector
de Higiene de la ruta entre San José y Río Sucio (17 de
julio de 1882) 339
-
Don Rosendo Segreda Zamora, como agente de policía
de Limón (18 de julio de 1882) 340
334 Estos nombramientos figuran en una lista al final del tomo de la colección de leyes y
decretos correspondientes a 1882, en una sección sin paginar. Cuando se pudo encontrar el
dato, citamos también la fecha del nombramiento y de su publicación en La Gaceta.
110
335
La Gaceta, 9 de julio de 1882.
336
La Gaceta, 16 de julio de 1882.
337
La Gaceta, 18 de julio de 1882.
338
La Gaceta, 18 de julio de 1882.
339
La Gaceta, 18 de julio de 1882.
340
La Gaceta, 19 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
-
Don José María Víquez Zamora, como juez del Crimen
de Heredia (18 de julio de 1882)
-
Don Manuel María Dávila Gutiérrez, como juez civil y de
Comercio de Heredia (18 de julio de 1882)
-
Don Manuel G. Escalante Castillo, como administrador
general de Correos (19 de julio de 1882) 341
-
Don Cipriano Soto, como escribiente de la Secretaría de
Gracia y Justicia, en reemplazo de don Octavio Béeche
Argüello (19 de julio de 1882) 342
- Don Ramón Brenes Vargas, como notificador de la
Alcaldía de Santo Domingo, en lugar de don Rafael
Argüello Benavides (19 de julio de 1882) 343
-
-
-
Don Juan Vicente Marchena, como administrador de la
aduana de Puntarenas (19 de julio de 1882) 344
Don Moisés L. Maduro, como contador de la aduana de
Puntarenas (19 de julio de 1882) 345
Don Pedro Gutiérrez, como subinspector de bodegas y
muelle de Puntarenas de la aduana de Puntarenas (19 de
julio de 1882) 346
5.- La caída del presidente Lizano.
De acuerdo con el calendario político fijado por don
Tomás Guardia para la transición al régimen constitucional, la
administración de don Saturnino Lizano debía extenderse hasta
341
La Gaceta, 20 de julio de 1882.
342
La Gaceta, 20 de julio de 1882.
343
Ibid.
344
Ibid.
345
Ibid.
346
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
111
El Canciller Lizano
el 10 de agosto de 1882, fecha en que tomaría posesión el nuevo
presidente constitucional. Sin embargo, el general Fernández,
favorecido con una abrumadora mayoría en los comicios de
segundo grado, empezó a temer que don Saturnino intentara
de alguna manera perpetuarse en la primera magistratura. Es
posible que en el ánimo de don Próspero haya pesado también
la posibilidad de que doña Angélica Guardia de Lizano, conocida
como mujer inteligente y decidida, y que hasta ese momento había
permanecido en Alajuela por razones de duelo, se trasladara en
cualquier momento a San José y tratara de convencer a su marido
para no entregar el poder.
Según relató don Luis Dobles Segreda en su biograf ía del
general don Fadrique Gutiérrez, don Próspero
“Contó los días y le parecieron muchos
y descubrió que cada uno trae su fatiga y
que podían suceder muchas cosas en ese
interregno, ya que la dictadura desaparecida
había dejado el terreno sembrado de
enemigos y él, como continuador del
régimen, los tenía sobre sí.” 347
Finalmente, el general Fernández decidió exigirle a don
Saturnino que le entregara el poder, y así lo hizo el 19 de julio
348
, alegando que él había sido ya electo presidente y que tenía
las armas. Como dice el mismo Dobles Segreda, “lo segundo no
admitía duda y era contundente” 349.
Ante las veladas amenazas de su compadre, no era mucho
lo que podía hacer el presidente, quien carecía de influencia en
el ejército y no era figura de arrastre popular. No era hombre
347 DOBLES SEGREDA, Luis, Fadrique Gutiérrez, San José, Editorial Costa Rica, 1ª. ed.,
1975, p. 149.
348 Aunque el decreto mediante el cual se depositó la presidencia en Fernández lleva fecha
de 20 de julio, la entrevista entre don Próspero y don Saturnino debió ocurrir la víspera,
ya que precisamente el 19 de julio un numeroso grupo de vecinos de Alajuela, encabezado
por el gobernador provincial don Bernardo Soto y el cura párroco don Francisco de Paula
Matamoros, dirigió un efusivo mensaje de felicitaciones a don Próspero por su ascenso al
poder, según consta en La Gaceta, 22 de julio de 1882.
349 DOBLES SEGREDA, Luis, Fadrique Gutiérrez, San José, Editorial Costa Rica, 1ª. ed.,
1975, p. 149.
112
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
de grandes ambiciones políticas, ni de intrigas de altos vuelos.
Una negativa suya a entregar el poder posiblemente hubiera
precipitado un golpe militar con cualquier pretexto, y le hubiera
podido significar confinamiento y exilio, en momentos en que no
había logrado todavía reponerse de los quebrantos financieros
que le había conllevado su misión a Europa. ¿Y todo por el prurito
de conservar la presidencia por veinte días más y entregarla a don
Próspero en una ceremonia en el Congreso? Realmente no tenía
sentido, y don Saturnino se resignó a lo inevitable:
“En un gesto que no deja de tener
cierta grandeza y algo de desprendimiento
patriótico, el Presidente decide acceder a las
pretensiones de su tío político y abandonar
el poder.” 350
Posiblemente, don Próspero hubiera querido que don
Saturnino renunciara de modo irrevocable. El problema que eso
conllevaba es que en tal caso, la primera magistratura hubiera
recaído no en el general Fernández, que era el sétimo y último
designado a la Presidencia, sino en don Salvador Lara Zamora,
que era el segundo. Por tal circunstancia, era imperativo que
don Saturnino conservara teóricamente la titularidad del Poder
Ejecutivo hasta que el 10 de agosto se iniciara el período de
don Próspero, y que este asumiera el poder en la condición de
designado en ejercicio 351.
Lo cómico del caso estuvo en que, para la separación de
don Saturnino del mando supremo, se invocó como pretexto la
necesidad de ir a consolar a su suegra doña Emilia de Guardia
(ni siquiera a su esposa) por la muerte de don Tomás y se señaló
que para ello le era indispensable exonerarse de las obligaciones
presidenciales. Así se consignó en el decreto que el 20 de julio
firmaron don Saturnino y sus secretarios de Estado:
“SATURNINO LIZANO,
PRESIDENTE DE LA REPÚBLICA DE
COSTA RICA,
350
SÁENZ CARBONELL, 1997, p. 124.
351
Ibid., pp. 124-125.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
113
El Canciller Lizano
Llamado por estrechos vínculos de
familia a atender a la que, por muerte del
Benemérito General Don Tomás Guardia, ha
quedado sumergida en el dolor y la aflicción;
y siéndome indispensable para llenar tan
sagrado deber, ya que he conservado la
República en perfecta paz, exonerarme de
las atenciones del Gobierno que me está
confiado, encargándolo al Designado que,
además de reunir las condiciones necesarias
para su buen desempeño, es la persona
en quien espontáneamente han recaído
los votos de la Nación para Presidente
Constitucional en el inmediato período, lo
cual demuestra la alta confianza pública
que justamente merece; en uso de las
facultades de que estoy investido,
DECRETO:
Art. Único.- Deposítase el Mando
Supremo de la República en el Señor
Designado, General de División y
Comandante en Jefe del Ejército, Don
Próspero Fernández.
Dado en el Palacio Presidencial.- San
José, a los veinte días del mes de julio de
mil ochocientos ochenta y dos.- S. Lizano.El Secretario de Estado en el Despacho de
Relaciones Exteriores.- José Mª Castro.- El
Secretario de Estado en el Despacho de
Gobernación y Policía.- Ml. A. Bonilla.El Secretario de Estado en el Despacho de
Hacienda.- Luis D. Sáenz.- El Secretario de
Estado en el Despacho de Justicia y Culto.- F.
Chaves Castro.- El Secretario de Estado en
el Despacho de Guerra y Marina.- Miguel
Guardia.” 352
352
114
Decreto n° 39 de 20 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Adicionalmente se hizo imprimir y circular la siguiente
proclama, donde se daban motivos más verosímiles para el
inesperado retiro del presidente, aunque no se hacía referencia a
que su voluntad hubiera sido forzada en ningún sentido:
“Saturnino Lizano,
Presidente de la República de Costa
Rica,
a sus conciudadanos:
Llamado temporalmente al ejercicio del
Poder Supremo de la Nación, por decreto de
17 de junio último, vine a este alto puesto
en cumplimiento de la ley, y obedeciendo
la voluntad del Ilustre Magistrado, a quien
la muerte arrebató poco tiempo después,
dejando enlutado el solio mismo de la
Presidencia.
La continuación no interrumpida de
los trabajos públicos; la marcha reglar de
la Administración, sin obstáculo de ningún
género; y la necesidad de evitar que la
incertidumbre por el restablecimiento de
la salud del Benemérito General Guardia,
pudiera poner en ansiedad a los amigos del
orden, decidieron a este egregio Magistrado
a depositar el Mando Supremo, que recayó
en mí como Primer Designado para ejercerlo.
Pero tanto por el mandato terminante
del decreto aludido, que me confirió la
Presidencia temporalmente, como por la
voluntad expresa de mi ilustre antecesor,
que quiso que no permaneciese yo en el
Poder sino el tiempo que las circunstancias
exigieran, me obligan hoy a separarme del
Mando, creyendo que con esto satisfago un
alto deber de mi conciencia.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
115
El Canciller Lizano
La marcha de la Administración ha
seguido su no interrumpida normalidad,
y el orden público no ha tenido siquiera el
riesgo de la transición que se ha verificado.Por tales motivos, la misión que me
encomendó el Benemérito General Guardia
está cumplida; y ahora debo cumplir su
voluntad de que no conservara en mis
manos el Poder.
Hay un Ciudadano, a quien por
unanimidad casi absoluta de votos, han
llamado los pueblos para que sea el Jefe de la
Nación en el próximo período constitucional.
Este Ciudadano es uno de los Designados
por la ley para ejercer en la actualidad la
Presidencia; y cuando su popularidad ha
sido manifestada tan terminantemente
en las elecciones que se verificaron el 9 del
corriente mes, creo obedecer al pensamiento
público llamando a ese Ciudadano para
que, haciéndose desde ahora cargo del Poder,
prepare con medios expeditos la benéfica
transformación que el Benemérito General
Guardia ha creado con todo el empeño de
su acendrado patriotismo.
Mis votos por la paz pública y por
el progreso de la Nación, serán realizados,
porque en manos expertas y robustas quedan
desde hoy los destinos de la República.
Palacio Presidencial.- San José, 20 de
julio de 1882.
Saturnino Lizano.” 353
353
116
La Gaceta, 20 de julio de 1882.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
6.- El interinato de don Próspero.
Del 20 de julio de 1882 hasta el 10 de agosto, el general
don Próspero Fernández Oreamuno, en su condición de sétimo
designado, ejerció interinamente la presidencia de la República,
cuyo titular seguía siendo don Saturnino. Por consiguiente, todas
las disposiciones emitidas durante esos veinte días corresponden,
teóricamente, a la administración Lizano. Sin embargo, cabe
señalar desde el mismo 20 de julio, de un modo que consideramos
altamente irrespetuoso para con don Saturnino, el general
Fernández empezó a utilizar en sus decretos el título de Presidente
de la República, sin tener ningún derecho a ello.
El 1° de agosto de 1882 se inauguraron las sesiones
del Congreso Constitucional, que el 3 de ese mes efectuó el
nombramiento de los nuevos magistrados de la Corte Suprema
de Justicia y declaró la elección de don Próspero Fernández como
presidente de la República. Al día siguiente, la cámara nombró a
los nuevos designados a la Presidencia, que fueron don Luis Diego
Sáenz Carazo, don José María Castro Madriz y don José María
Oreamuno y Oreamuno.
El 10 de agosto, en sesión solemne del Congreso,
don Próspero, los magistrados y los designados prestaron el
juramento constitucional y tomaron posesión de sus cargos. En
su discurso inaugural, el presidente Fernández no hizo la más
mínima referencia a su predecesor, aunque reconoció que hasta
esa fecha había ejercido la primera magistratura únicamente
como designado.
Todos esos detalles, y el hecho de que no se llamara al
expresidente Lizano a desempeñar ningún cargo en la nueva
administración, no obstante su vasta experiencia de gobierno y
los vínculos de parentesco por afinidad y espiritual que tenía con
el general Fernández, nos lleva a suponer que el distanciamiento
entre ambos personajes fue bastante grave y que don Saturnino
se alejó del poder de modo involuntario y ante el hecho innegable
de que no contaba con respaldo militar ni político como para
conservarlo hasta el 10 de agosto.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
117
El Canciller Lizano
CAPÍTULO VI
LOS AÑOS POSTERIORES (1882-1905)
1.- Un respiro financiero a medias.
El 26 de marzo de 1883, don Saturnino solicitó al
Congreso disponer que se le reembolsaran las sumas que le
adeudaba el Tesoro Público, pero con base en un dictamen de la
comisión de Hacienda, la cámara resolvió el 26 de julio siguiente
que si no se llegaba a un arreglo con el gobierno debía plantear
el reclamo en los tribunales de justicia y declaró improcedente la
solicitud 354.
El 29 de enero de 1884, el secretario de Hacienda y
Comercio don Bernardo Soto, vista la instancia de don Saturnino
para que se le reconocieran y pagaran los anticipos hechos al
gobierno por la casa Lizano y Hermano, por la suma de 11,693.76
pesos y en atención a lo resuelto por el Congreso en julio de 1883,
y con miras a evitar un litigio, dispuso por fin que se le reconociera
a esa compañía la suma de 10,239.59 pesos, que era en su criterio
la que aparecía comprobada. De conformidad con la resolución
ministerial, el Estado le entregaría a don Saturnino la suma de
3000 pesos y pagaría el resto en mensualidades de 500. Sin
embargo, como era el Congreso el que al aprobar el presupuesto
354
118
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 10356.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
nacional dispondría o no que se incluyera una partida para esos
pagos, don Saturnino debería comprometerse a devolver los 3000
pesos y garantizar hipotecariamente su pago e intereses del 1%,
para el caso de que el Congreso no aprobara la inclusión en el
presupuesto de la partida en cuestión 355.
Aunque la suma reconocida por la cartera de Hacienda
no llegaba ni a la mitad de lo que don Saturnino venía reclamando
desde hacía años, el expresidente debe haber concluido que
era mejor obtener siquiera esos 10,239.59 pesos, en lugar de
arriesgarse a un largo litigio en los tribunales, cuyo resultado
además podía serle total o parcialmente adverso. A fin de cuentas
decidió aceptar los términos de la resolución de la Secretaría de
Hacienda, y el 30 de enero, el Estado reconoció su crédito ante
el juez de Hacienda Nacional don Ángel Anselmo Castro. En la
misma fecha, don Saturnino compareció para otorgar hipoteca
sobre tres propiedades: un lote de 192 manzanas en Santa Clara,
valorada en 500 pesos; una casa de habitación, cuyo valor era
de otros 500, y derechos en la mitad de una casa en Alajuela,
diagonal a la esquina noroeste de la Plaza Principal, valorados en
2000 pesos (Es interesante mencionar que en esta última casa,
conocida en la ciudad con el nombre de Palacio Viejo, murió don
Tomás Guardia, el 5 de julio de 1882; más tarde don Saturnino la
vendió por la suma de 7000 pesos a don Jesús Soto Quesada para
su hijo don José María Soto Alfaro 356).
El 26 de setiembre de 1884, debido a que el Congreso
había aprobado la partida presupuestaria de 10,239.59 pesos
destinada a pagar el crédito reconocido a favor de don Saturnino,
el fiscal de Hacienda Nacional canceló las hipotecas otorgadas
por el ex presidente a favor del Estado y lo declaró libre de toda
responsabilidad 357.
355
Protocolos Lara y Chamorro, documento nº, vol. I, f. 221.
356 ALARMVOGEL [Francisco Picado Soto], Apuntes para la Historia de la Ciudad de
Alajuela 1782-1966, San José, Imprenta Nacional, 1ª. ed., 1966, p. 151. La casa, que en el
siglo XX alojó diversas oficinas administrativas y judiciales y en 1965 era sede de la biblioteca
pública de Alajuela, se conservó hasta el decenio de 1970, cuando fue estúpidamente demolida
para construir una edificio “moderno”.
357
Ibid., vol. I, f. 323.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
119
El Canciller Lizano
2.- Diputado suplente por Alajuela.
Debido a la repentina muerte de don Próspero Fernández,
ocurrida en la villa de Atenas el 14 de marzo de 1885, asumió
la primera magistratura el primer designado don Bernardo Soto
Alfaro, hasta la conclusión del período presidencial de Fernández.
En los siguientes comicios, Soto fue elegido por unanimidad
como presidente de la República para el cuatrienio 1886-1890.
En esas elecciones de 1886 don Saturnino Lizano fue
elegido como diputado suplente por la provincia de Alajuela al
Congreso Constitucional 358, condición que mantuvo durante
todo el período. En julio de 1889, cuando el Congreso se disponía
clausurar sus sesiones ordinarias, fue nombrado como miembro
suplente de la Comisión Permanente que debía funcionar durante
el receso de la cámara y hasta la reunión del nuevo Congreso el 1° de
mayo de 1890 359. Aunque don Saturnino no tuvo que desempeñar
funciones en la Comisión Permanente, su designación es una
muestra de que gozaba de las simpatías de la administración Soto,
ya que habitualmente se elegía como integrantes de ese órgano a
diputados muy cercanos al gobierno.
3.- Presidente de la Unión Católica de Costa Rica.
La campaña política de 1889, que se desarrolló mientras
don Saturnino Lizano era diputado suplente por Alajuela, fue
sumamente apasionada. Con el apoyo del gobierno de don
Bernardo Soto, los liberales respaldaron la candidatura del
licenciado don Ascensión Esquivel Ibarra, segundo designado a
la Presidencia, a quien se motejaba de notorio anticlerical. Sus
adversarios postularon al licenciado don José Rodríguez Zeledón,
hasta entonces presidente de la Corte Suprema de Justicia, y su
candidatura fue calurosamente acogida en los sectores populares
y en la mayoría del clero. Don Joaquín Lizano, hermano de don
Saturnino, fue activo líder del rodriguismo en Heredia.
120
358
OBREGÓN LORÍA, 1966, p. 395.
359
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 10611.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
En medio de la campaña electoral, don Saturnino Lizano y
otros trece laicos católicos decidieron formar una asociación para
defender los intereses de su credo, que posiblemente consideraban
gravemente amenazados si en los comicios triunfaba Esquivel, y el
7 de setiembre de 1889 formaron en San José la Unión Católica de
Costa Rica, cuyo documento fundacional rezaba:
“Los infrascritos, convencidos de que
por las necesidades de los tiempos es
indispensable que los católicos estrechemos
los santos lazos que nos unen y compactemos
nuestras filas para trabajar eficazmente
en pro de los intereses de nuestra sagrada
Religión íntimamente ligados con los de
la Patria; siguiendo el ejemplo de las
demás naciones civilizadas de Europa y de
América, después de conferenciar sobre el
asunto, hemos acordado por unanimidad
lo siguiente: 1.) Establecer una asociación
que se denominará Unión Católica de Costa
Rica. Esta Asociación tendrá por objeto la
defensa de los intereses católicos en toda
su amplitud, o lo que es lo mismo, trabajar
por restablecer y consolidar el reinado
social de Nuestro Señor Jesucristo. 2.) La
Unión Católica será una asociación bien
organizada, fundada en la Fe, sostenida
por la sumisión de la Iglesia, fortalecida
por la Caridad y alentada por la Esperanza
cristiana. 3.) Medios especiales para la
realización de sus fines serán además de
la oración y la práctica de la caridad, la
prensa en todas sus formas, la palabra viva,
la educación y la enseñanza cristiana, la
política en su recto sentido. 4.) La Unión
Católica se gobernará de conformidad con
los Estatutos que oportunamente se emitan.
Para redactar el proyecto de Estatutos y
presentarlos dentro de ocho días, quedan
nombrados los señores Manuel Vicente
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
121
El Canciller Lizano
Jiménez, don Antonio de Barruel, don José
María Sánchez G., y don Pedro Nolasco
Gutiérrez. 5.) El Directorio provisional,
por ahora, de la Unión Católica, queda
organizado como sigue: Presidente, don
Saturnino Lizano. Primer Vocal: Alejo
Jiménez. Segundo Vocal: Odilón S. Jiménez.
Tercer Vocal: Antonio (sic) de Barruel.
Secretario: José M. Sánchez. Tesorero:
José Navarro. 6.) La próxima reunión de
la Sociedad se efectuará el viernes 13 del
corriente a las 8 y 30 a. m. en cuyo día
deberá presentarse el proyecto de Estatutos.
Con lo cual terminó el acto. San José, 7 de
noviembre de 1889. Firman: S. Lizano.A. E. Jiménez.- O. S. Jiménez.- Manuel V.
Jiménez.- José Navarro.- Manuel Dávila.Cirilo J. Meza.- Jerónimo Benavides.Salomón V. Escalante.- Jesús Roldán.Antonio de Barruel.- Tomás Peñaranda.- P.
N. Gutiérrez.- José M. Sánchez, Srio.” 360
En opinión de monseñor Sanabria, aunque don
Saturnino fuera la figura más notoria del grupo, “era hombre de
escasas ambiciones y de muy relativas capacidades políticas” 361.
Sanabria consideró que posiblemente el verdadero iniciador de la
asociación fue el colombiano don José María Sánchez, quien era
periodista. Por su parte, don Alejo Jiménez Bonnefil y su hermano
don Odilón llegarían a ser el alma de la Unión Católica, cuando
esta entró de lleno en la política nacional 362. Ambos eran muy
jóvenes: don Alejo había nacido en noviembre de 1858 363 y don
Odilón había nacido el 22 de febrero de 1863 364; es decir, que en
la época de la constitución de la Unión Católica de Costa Rica
tenían treinta y veintiséis años respectivamente, mientras que el
360 SANABRIA M., Víctor, Bernardo Augusto Thiel, segundo obispo de Costa Rica.
Apuntamientos históricos, San José, Editorial Costa Rica, 1ª ed., 1982, pp. 398-399.
361
Ibid., p. 400.
362
Ibid., p. 401.
363
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12126-136742-18
364
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11619-13460-21. Su nombre de
bautismo era Pedro María Santana Atilón Jiménez Bonnefil.
122
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
expresidente Lizano ya contaba sesenta y dos. Cabe indicar además
que don Odilón era concuño de don Saturnino, porque había
contraído nupcias el 5 de mayo de 1888 con doña Rosario Guardia
Solórzano, hermana de doña Angélica 365. Tiempo después, otro
matrimonio estrechó los lazos entre ambas familias, porque un
hermano menor de los Jiménez Bonnefil, don Alejandro, contrajo
nupcias el 7 de mayo de 1892 con doña Isabel Guardia Solórzano,
hermana de doña Angélica y doña Rosario 366.
La Unión Católica de Costa Rica al parecer no llegó
a desarrollar ninguna actividad política de importancia,
posiblemente gracias a que el abrumador triunfo de don José
Rodríguez en las elecciones de noviembre de 1889 tranquilizó
temporalmente a sus fundadores 367. Sin embargo, pronto
surgieron recelos acerca de las verdaderas intenciones del
candidato victorioso con respecto a los temas que interesaban
a la Iglesia Católica, y el 27 de febrero de 1890, algunos de los
integrantes de la Unión Católica de Costa Rica suscribieron,
junto con otros laicos y varios sacerdotes, el acta constitutiva
de una nueva asociación, denominada Unión Católica, cuyo
propósito “la defensa de los intereses católicos en toda su
amplitud, basándose en la fe, sometiéndose incondicionalmente a
la autoridad de la Iglesia y obedeciendo estricta y humildemente
la voz de nuestro Santo Padre el Papa” 368. Don Saturnino no
participó en la constitución de esta nueva entidad, cuya dirección
fue prácticamente monopolizada por don Alejo Jiménez Bonnefil.
La asociación fue reconstituida en noviembre de 1891 como una
sociedad sacerdotal 369. Sin embargo, con el apoyo de la mayoría
de los sacerdotes y de buena parte de los fieles católicos, no tardó
en transformarse en un verdadero partido político. Participó por
primera vez en las elecciones municipales de diciembre de 1891, y
para sorpresa de los liberales obtuvo una clara victoria en muchas
circunscripciones 370.
365
https://familysearch.org/ark:/61903/1:1:FL36-Z58
366
https://familysearch.org/ark:/61903/1:1:FL36-2SD
367
SANABRIA M., 1982, p. 401.
368
Ibid., p. 402.
369
Ibid., pp. 408-413.
370 MONGE ALFARO, Carlos, Historia de Costa Rica, San José, Imprenta Trejos Hnos.,
12ª. ed., 1963, p. 221; SANABRIA M., 1982, p. 413.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
123
El Canciller Lizano
En la administración de don José Rodríguez, don
Saturnino no desempeñó ningún cargo de relevancia, pero su
hermano don Joaquín fue segundo designado a la Presidencia
de 1890 a 1894 y secretario de Estado en los despachos de
Gobernación, Policía y Fomento del 8 de mayo de 1890 al 4 de
marzo de 1892 371.
4.- Diputado propietario por Puntarenas.
En los inicios de la campaña política de 1893-1894,
dirigida a elegir al sucesor del presidente Rodríguez, pareció
que las principales fuerzas políticas serían la Unión Católica y el
liberalismo, cuyo candidato don Ascensión Esquivel había sido
derrotado por Rodríguez en las famosas elecciones de 1889.
Desde el principio de la justa electoral quedó de
manifiesto que el partido más fuerte era la Unión Católica, que
el 22 de setiembre designó como candidato a la Presidencia de
la República al magistrado don José Gregorio Trejos Gutiérrez,
pariente cercano de don Saturnino Lizano. Por su parte, unos
grupos liberales postularon al ex canciller don Manuel de Jesús
Jiménez Oreamuno, notable escritor y orador, y otros al eminente
médico don Carlos Durán Cartín. Surgieron además otros
dos partidos, pero claramente minoritarios: el Independiente
Demócrata, acaudillado por el licenciado don Félix Arcadio
Montero Monge, y el Agrícola, cuyo candidato era el general don
Fadrique Gutiérrez Flores, otro pariente de don Saturnino.
Ante la obvia superioridad de la Unión Católica, varios
eminentes personajes políticos empezaron a expresar la necesidad
de que sus adversarios se unieran 372, y finalmente el doctor
Durán sumó sus fuerzas a las de don Manuel de Jesús Jiménez
373
. Para entonces ya había surgido otra agrupación política,
que se denominaba Partido Civil y que, sin candidato aparente,
impulsaba en realidad el nombre del secretario de Guerra y
371
GRUB, 1994, p. 153.
372 CALVO GAMBOA, Carlos, Rafael Yglesias Castro, San José, Ministerio de Cultura,
Juventud y Deportes, 1ª. ed., 1980, pp. 79-80.
373 OCONITRILLO, Eduardo, Un siglo de política costarricense, San José, EUNED, 1ª. ed.,
1981, pp. 23-24.
124
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Marina don Rafael Yglesias Castro 374, yerno del presidente de la
República. El progresivo surgimiento del Partido Civil fortaleció
a la Unión Católica, porque contribuyó a dividir al liberalismo y
algunos liberales empezaron a atacar a los civilistas 375.
Después de varios meses de agresiva y enconada
campaña política, las elecciones de primer grado se efectuaron
del 4 al 6 de febrero de 1894 y la Unión Católica obtuvo la mayoría
absoluta, es decir, más de la mitad de los sufragios emitidos, lo
cual le permitiría ganar sin dificultad en abril las elecciones de
segundo grado. Sin embargo, hubo múltiples acusaciones de
irregularidades y varias juntas provinciales anularon votos en
cantidad suficiente como para que la Unión Católica perdiera la
mayoría absoluta y quedara solamente con mayoría relativa. Ante
esta situación la Unión Católica, aliada con el Partido Agrícola,
decidió hacer lo mismo que los habían hecho los rodriguistas
en noviembre de 1889, es decir, movilizar partidarios hacia San
José para exigir al gobierno que respetara su triunfo o derrocarlo.
Según se dijo después, en la mañana el 24 de febrero el general
don Fadrique Gutiérrez, candidato del Partido Agrícola, atacaría
los cuarteles 376. Decidido a evitar el triunfo del partido clerical,
el 23 de febrero el Presidente Rodríguez suspendió las garantías
individuales 377. Enseguida se procedió a arrestar a don José
Gregorio Trejos y al general Gutiérrez, a varios sacerdotes, a
numerosos electores y a muchos partidarios y simpatizantes de la
Unión Católica. Hubo algunos conatos de revolución en Grecia y
otros lugares, pero todos fueron rápidamente dominados por las
autoridades 378.
Era tan descarnada y evidente la voluntad del gobierno
de imponer como presidente a don Rafael Yglesias, que para las
elecciones de segundo grado se formó la más inverosímil coalición:
la Unión Católica y los liberales decidieron hacer a un lado sus
abismales diferencias ideológicas y unir sus fuerzas para tratar de
evitar la victoria del partido gobiernista y llevar a la presidencia
374
Ibid., p. 25.
375
CALVO GAMBOA, 1980, pp. 83-85.
376
OCONITRILLO, 1981, p. 26.
377
Decreto N° 15 de 23 de febrero de 1894.
378
OBREGÓN LORÍA, 1981, pp. 236-239.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
125
El Canciller Lizano
al doctor don Juan José Flores Umaña, yerno del desventurado
candidato católico, que se encontraba detenido. Sin embargo, el
empeño resultó inútil, ante los brutales abusos de las autoridades
379
. En las elecciones de segundo grado, que se efectuaron el
domingo 1º de abril, el Partido Civil triunfó abrumadoramente.
En la comarca de Puntarenas, los comicios se iniciaron
en la ciudad cabecera a las doce y media del día, con la elección
de presidente, y al contrario de lo ocurrido en otras provincias,
el resultado fue rotundamente adverso al civilismo. Solo tres de
los treinta y tres electores de Puntarenas apoyaron la candidatura
de don Rafael Yglesias. De los otros treinta, quince votaron por
don Juan José Flores Umaña y los otros quince por don Fadrique
Gutiérrez Flores. Cabe indicar que en todo el país, don Fadrique
solamente obtuvo esos votos puntarenenses 380.
La elección para diputados estuvo muy reñida, ya que la
coalición católico-liberal y el Partido Agrícola tenían cada uno
quince electores. Esto quería decir que los tres electores civilistas
serían en definitiva los que decidirían el resultado.
Los quince electores que habían votado por la candidatura
de don Juan José Flores votaron a favor de don Luis Matamoros
y don Agustín Guido para diputados propietario y suplente, y
en la votación para escoger al otro diputado propietario catorce
apoyaron la candidatura de don Andrés Venegas García y otro
la de don Uladislao Guevara. Sin embargo, los electores civilistas
sumaron sus tres votos a los de los quince de los agrícolas, y de
este modo, con dieciocho votos cada uno, quedaron elegidos
don Saturnino Lizano y don Enrique Solera como diputados
propietarios y don Carlos Miranda como suplente 381.
A fin de cuentas, a escala nacional el Partido Civil logró
elegir veinte diputados propietarios, frente a nueve de la coalición
católico-liberal, dos del Agrícola y uno del Independiente
Demócrata; es decir, que los yglesistas controlarían el Congreso a
su gusto y sabor. Don Joaquín Lizano, el hermano mayor de don
126
379
OCONITRILLO, 1981, pp. 26-27.
380
A. N. C. R., S. H., Congreso 2392.
381
A. N. C. R., S. H., Congreso documento nº 2393.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Saturnino, fue uno de los diputados elegidos por el civilismo en la
provincia de Heredia 382.
El Congreso inició sus sesiones el 1° de mayo de 1894.
Contrariamente a lo que había sucedido en 1869 y 1870, esta
vez don Saturnino sí se estuvo presente en la sesión inaugural,
prestó el juramento correspondiente sin contratiempos y fue
escogido para formar parte de la comisión de Fomento. El que no
compareció fue su hermano don Joaquín, diputado civilista por
Heredia, a pesar de lo cual fue elegido como vicepresidente de
la cámara. El 2 de mayo, don Joaquín envió una nota en la que
manifestaba que no había podido ir a la sesión inaugural ni podría
ir en algunos días a tomar posesión de su curul, por lo cual en la
misma fecha el Congreso le concedió un mes de licencia 383.
Desde el comienzo de las sesiones, varios diputados de
la oposición empezaron a criticar de modo virulento la manera
en que se habían realizado los comicios e incluso pidieron la
nulidad de estas, pretensión que fue apasionadamente adversada
por los legisladores civilistas. Dado que su elección había sido
promovida por el Partido Agrícola, adversario del civilismo, cabía
esperar que don Saturnino fuera un diputado de oposición, pero
durante las pocas sesiones a las que asistió prácticamente no hizo
uso de la palabra y votó con la mayoría gobiernista cada vez que
los opositores intentaron poner en duda la legitimidad de las
elecciones 384.
Como en otras oportunidades, don Saturnino encontraba
dif ícil combinar las tareas legislativas en San José con la atención
de sus negocios en Puntarenas, y pronto solicitó al Congreso
un mes de licencia, que le fue concedido. La última sesión a la
que asistió fue la del 14 de mayo. Para reemplazarlo durante su
ausencia, la cámara llamó entonces al diputado suplente electo,
don Carlos Miranda, pero este alegó estar enfermo. El 5 de junio
de 1894, desde Puntarenas, el expresidente presentó su renuncia
382
Ibid.
383
Boletín del Congreso, Nº 1, 14 de mayo de 1894.
384
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
127
El Canciller Lizano
al cargo de diputado, fundamentada en “la necesidad de atender a
los intereses que poseo en esta comarca” 385.
La dimisión se leyó en el Congreso el 7 de junio y pasó a
dictamen de la comisión de Credenciales, junto con la que había
presentado también don Carlos Miranda 386.
Pocos días después llegó a Puntarenas, proveniente
de San José, el líder independentista cubano José Martí. En el
puerto, Martí asistió como invitado a la botadura del primer
vapor costarricense, el Rosana, armado en el astillero que poseía
el próspero empresario italiano don Alberto Fait Rocchi. A doña
Angélica Guardia de Lizano le correspondió un papel protagónico
en la ceremonia, según relató uno de los compañeros de Martí:
“El bautizo fue noble y hermoso, la
señora de Lizano con gracia y pericia estrelló
contra la proa una botella de champaña,
adornada de cintas y banderitas.” 387
Años después, don Andrés Fait Casalvolone, uno de los
hijos del armador, contraería matrimonio con doña Nora Lizano
Ramírez, nieta de don Saturnino y doña Angélica.
El 26 de junio de 1894, el Congreso aprobó las renuncias
de los diputados Lizano y Miranda 388. Para reemplazarlos,
los electores de Puntarenas eligieron en enero de 1895 a dos
civilistas, que fueron el expresidente don Aniceto Esquivel como
propietario y don Federico Tinoco Iglesias como suplente 389.
Los liberales postularon a don Cleto González Víquez, pero su
candidatura sufrió una derrota apabullante 390.
385
A. N. C. R., S. H., Congreso, documento n° 2395
386
Ibid.
387 VARGAS ARAYA, Armando, Idearium Maceísta, San José, Editorial Juricentro, 1ª ed.,
2002, p. 303.
128
388
Decreto n° 16 de 30 de junio de 1894.
389
La República, 21 de enero de 1895.
390
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
5.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por tercera vez.
El 4 de julio de 1894, el presidente don Rafael Yglesias
Castro designó a don Saturnino Lizano como gobernador de la
comarca de Puntarenas, claro testimonio del respeto y la confianza
que el gobernante profesaba al expresidente, aun cuando este
hubiera llegado al Congreso con los votos de adversarios políticos
suyos.
El decenio final del siglo XIX fue muy sombrío para
Puntarenas. Debido a la apertura del ferrocarril entre San
José y Limón, su movimiento comercial y portuario menguó
considerablemente, y la decadencia de la población se vio
acentuada por el anuncio de que la terminal ferrocarrilera del
Pacífico ya no sería Puntarenas sino Tivives, a donde se trasladaría
también el puerto principal. El espíritu de construcción decayó
notablemente y hubo una depreciación casi total de la propiedad
urbana 391.
Entre las labores que don Saturnino apoyó en este tercer
desempeño como gobernador, cabe mencionar la continuación
del relleno de un pantano para ubicar en su lugar el parque de la
ciudad 392. La instalación de este espacio público, que recibió el
nombre de Parque de la Victoria, avanzó especialmente gracias a
la actividad de la Municipalidad de 1900 393.
Nos parece además interesante recordar un episodio
referido a una publicación del periódico puntarenense El Pacífico,
que editaba el español don Carlos Clavera Masís. En su edición
del 13 de agosto de 1896, este periódico publicó un comentario
titulado “Malos síntomas”, que literalmente decía:
“La susceptibilidad de algunas personas,
a quienes como empleados nos referimos en
nuestro periódico, hace que reciban a mal
las indicaciones que hacemos.- Esto es mal
síntoma, porque sería obligarnos al silencio
391
AMADOR, 1914, p. 22.
392
El Pacífico, 5 de diciembre de 1902.
393
AMADOR, 1914, p. 22.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
129
El Canciller Lizano
en todo lo que el buen servicio reclama, y
de ahí, que la misión de la prensa sería un
mito, una planta exótica que más valdría
que no existiera. Nuestra intención es buena
y no debe pensarse que seamos capaces de
bajar a alusiones personales ni a la vida
privada que sabemos respetar. Eso no se
aviene con el carácter serio que hemos
tratado de imprimir a esta hoja, que si es
insignificante por su tamaño, no lo será por
falta de circunspección.
TRANQUILOS pueden quedar los
que tengan alguna responsabilidad en
las faltas de cumplimiento a los acuerdos
municipales. Los datos que sin que los
solicitáramos se nos habían ofrecido, no se
nos darán – hay temores. Bienaventurados
los que temen la ira del Señor, porque ellos
quedarán en paz.” 394
El gobernador Lizano se sintió aludido de alguna
manera por estos comentarios y dirigió una carta al editor de El
Pacífico, que la publicó en la edición del 16 de agosto. La carta
de don Saturnino, que por transcribimos a continuación, es muy
interesante y nos parece que expresa bien sus ideas en relación
con la función pública:
“Señor Editor de “El Pacífico”.
MALOS SÍNTOMAS
Es el lema que encabeza la gacetilla
inserta en su periódico, número 12 de 13 del
presente.
Dejo a las personas entendidas
y de recto criterio el análisis de esa
394
130
El Pacífico, 13 de agosto de 1896.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
argumentación y me concreto a su parte
resolutiva.
El encargado por la ley de dar
cumplimiento a los acuerdos municipales
es el Gobernador, y en mi carácter de tal,
no puedo quedar tranquilo en la forma
que el gacetillero lo concede.- Quiero la
tranquilidad, emanada del cumplimiento
de mi deber, y si por olvido hubiese dejado
de cumplir algún acuerdo que se roce con
el “adelanto y progreso” de esta población,
estoy presto a subsanar la falta. Como dice
se le han negado los datos ofrecidos, pongo a
disposición del gacetillero todos los acuerdos
municipales, para que de allí tome los datos
que desea.
El empleado público que no cumple
su deber, está obligado a soportar que se lo
digan y yo me resigno a esto, si se me precisa
aquello en que haya faltado.
Quiero para esta comarca el mayor
bien posible, pues en ello soy más interesado
que el gacetillero; y ojalá que él y todos
aquellos que están inspirados en el mismo
deseo, concurran con su contingente,
indicando privadamente o por la prensa,
todas las mejoras que a su juicio y en relación
con los recursos del tesoro municipal, se
puedan llevar a efecto.
Mis esfuerzos hasta hoy los consagro,
en primer término, a proteger la agricultura,
como base de la riqueza pública, de donde
se desprende el bienestar y la prosperidad
de los pueblos.
S. Lizano ” 395
395
El Pacífico, 16 de agosto de 1896.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
131
El Canciller Lizano
A fines de 1896, don Saturnino, que acababa de cumplir
setenta años de edad, sufrió una grave fractura 396 en un pie, en
el transcurso de un viaje a San José 397. Las consecuencias de esta
lesión lo obligaron a pedir una licencia de tres meses en su cargo
de gobernador, que le fue concedida el 17 de diciembre de 1896.
Como gobernador interino fue designado el colombiano don
Clodomiro G. Figueroa, hasta entonces jefe político de Esparta 398.
Sin embargo, al término de la licencia, don Saturnino no reasumió
la gobernación, que continuó en manos del señor Figueroa.
6.- Gobernador de la comarca de Puntarenas por cuarta vez.
El 2 de julio de 1898 el presidente Yglesias aceptó a
don Clodomiro Figueroa la renuncia al cargo de gobernador de
Puntarenas, que había presentado por motivos de salud 399. El 6
del mismo mes, considerando que habían cesado las causas que
obligaron a don Saturnino a separarse del cargo de gobernador de
la comarca de Puntarenas, el presidente dispuso que volviera al
desempeño de esas funciones 400.
El 10 de julio de 1898, el periódico puntarenense El
Pacífico dio la noticia en el puerto y felicitó a don Saturnino por
su nombramiento 401. Sin embargo, el 30 de noviembre, el editorial
del mismo periódico insinuó que las autoridades locales pretendían
ejercer influencia indebida con miras a las elecciones municipales
del mes siguiente. Don Saturnino remitió entonces a El Pacífico la
siguiente carta, que fue publicada el 2 de diciembre 402:
“Gobernación de la Comarca de
Puntarenas.- 30 de Noviembre de 1898.
Señor Redactor de El Pacífico.
132
396
El Pacífico, 3 de diciembre de 1896.
397
El Pacífico, 5 de diciembre de 1902.
398
El Pacífico, 24 de diciembre de 1896.
399
Acuerdo n° 73 de 2 de julio de 1898.
400
Acuerdo n° 78 de 6 de julio de 1898.
401
El Pacífico, 10 de julio de 1898.
402
El Pacífico, 2 de diciembre de 1898.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
He leído detenidamente el artículo
editorial que, con el mote “Municipalidad”,
ha visto la luz pública en la edición de ese
periódico correspondiente a esta misma
fecha, y como en él se hacen de una manera
bastante velada cargos a la primera
autoridad política, suponiendo imposición,
vengo por medio de la presente a protestar
contra tales cargos, y a rechazarlos, como
los rechazo, de la manera más enérgica.
Este despacho no ha trabajado ni piensa
trabajar por conseguir que el próximo
Municipio sea compuesto por personas de
su agrado, ni mucho menos, como insinúa
Ud., de individuos que se dejen manejar
como “maniquíes inconscientes”.
El actual Municipio, del cual es
Presidente don Francisco Montagné, está
compuesto de personas tan competentes
como las que han formado el de años
anteriores; y fue electo en contraposición a
otras candidaturas. En aquel entonces, como
siempre, la autoridad política ha dejado a
los electores en completa libertad de acción,
y esa misma línea de conducta sigue ahora
el infrascrito, limitándose a insinuar que
los electores deben elegir para el próximo
período una Municipalidad compuesta de
hombres patriotas, probos y tan ilustrados
cuanto pueda tenerlos el cantón.
Este despacho, pues, ni tiene
instrumentos en los munícipes actuales, ni
aspira a tenerlos en los que resulten electos,
y no aspira a tenerlos, por que todos sus
actos, como hasta aquí, serán inspirados en
la más sana honradez y buena intención,
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
133
El Canciller Lizano
no necesitando, por consiguiente, de ocultar
nada, absolutamente nada.
Yo excito a Ud. para que trabaje por
sacar triunfante la Municipalidad que
desee, seguro de que encontrará en mí todas
las garantías necesarias.
Ruego a Ud. se sirva dar a publicidad a
la presente.
De Ud. atto. S. servidor,
S. Lizano” 403
La nota de don Saturnino fue publicada en El Pacífico
el 2 de diciembre, junto con una nota del editorialista diciendo
que no había querido referirse en ningún sentido al expresidente
404
. Sin embargo, en el número del 4 de diciembre, alguien que
firmaba como Un Munícipe expresó diversas quejas sobre las
actuaciones de don Saturnino en la Gobernación, especialmente
en lo referente a nombramientos de personal 405. El mismo 4 de
diciembre, don Saturnino respondió a los cargos, mediante una
nota que fue publicada el 14 de diciembre y en la que justificaba la
legalidad de sus actuaciones 406.
El Pacífico del domingo 8 de enero de 1899 dio cuenta
de una reunión social celebrada en la noche del 2 de ese mes
en la casa de los Lizano-Guardia, a la que asistieron entre otros
invitados el expresidente de Nicaragua don Adán Cárdenas y el
cónsul de Colombia y vicecónsul de Gran Bretaña don Manuel
Amador:
“El salón, arreglado sencillamente,
presentaba
muy
bonito
aspecto,
destacándose en él el mobiliario de palo
403
404
134
405
4 de diciembre
406
14 de diciembre de 1898.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
dorado, de riquísimo gusto artístico… Se
bailó y se charló con grande entusiasmo
hasta las 4 a. m. Los concurrentes fueron
obsequiados con una magnífica cena, que
puso de manifiesto una vez más el gusto
refinado del señor Gobernador y su señora
esposa… todos salieron agradablemente
satisfechos de las atenciones que se les
prodigaron, así como haciéndose lenguas
de la amabilidad exquisita de la simpática
María del Rosario, candorosa niña de
circasiana belleza, hija de los esposos
Lizano.” 407
Ese mismo domingo 8 de enero don Saturnino recibió
la visita del comandante del buque francés Papin, anclado en
Puntarenas, y en la tarde correspondió a la atención vistando su
nave 408. A pesar de su edad, el gobernador también cumplió con
el deber de visitar el presidio de San Lucas, el 1° de mayo de 1899,
y al día siguiente partió a visitar Chomes 409.
Don Saturnino estuvo a cargo de la Gobernación hasta el
21 de febrero de 1900, fecha en la cual se le nombró administrador
de Licores y Tabacos de Puntarenas 410. Como nuevo gobernador de
la comarca fue designado en la misma fecha don Samuel Uribe 411.
7.- Administrador de Licores y Tabacos y gobernador interino
de la comarca de Puntarenas.
El 21 de febrero de 1900 don Saturnino Lizano fue
nombrado como administrador de Licores y Tabacos de
Puntarenas, cargo que había desempeñado en 1877 su hermano don
Enrique. Hasta la designación de don Saturnino, tales funciones
habían correspondido al capitán del puerto de Puntarenas.
407
8 de enero de 1899.
408
11 de enero de 1899.
409
3 de mayo de 1899.
410
Acuerdo nº 40 de 21 de febrero de 1900.
411
Acuerdo nº 230 de 21 de febrero de 1900.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
135
El Canciller Lizano
Sin embargo, con el propósito de que ese funcionario pudiera
dedicarse exclusivamente a las labores de la Capitanía, se decidió
descargarle de tales labores y designar para desempeñarlas al
expresidente Lizano. Cabe recordar que en esa época, el expendio
y distribución de licores y tabacos eran monopolio estatal.
En setiembre de 1900, cuando por una licencia de ocho
días concedida al gobernador Uribe, se encargó interinamente de
la gobernación a don Saturnino, mientras duraba el permiso de
aquel 412. El señor Uribe, que solicitó la licencia por motivos de
salud y de intereses particulares, salió hacia San José el 22 de ese
mes 413 y regresó al puerto el 3 de octubre 414.
8.- Regidor y presidente municipal de Puntarenas.
En diciembre de 1900 don Saturnino Lizano fue elegido
por el cantón central de Puntarenas como regidor municipal para
el año siguiente. La municipalidad, que estaba formada por tres
miembros propietarios, se instaló el 3 de enero de 1901, bajo la
presidencia de don Saturnino 415. El periódico local El Pacífico, en
su edición del 6 de enero, expresó: “Mucho espera Puntarenas del
patriotismo y buena voluntad de los nuevos Munícipes.” 416
El 28 de mayo de 1901, mientras don Saturnino
desempeñaba la presidencia de la Municipalidad de Puntarenas,
murió en Heredia su hermano don Joaquín, a la edad de setenta
y siete años. Fue sepultado en Heredia al día siguiente. El 30 de
mayo, el diario josefino El Heraldo de Costa Rica le dedicó un
elogioso artículo, que empezaba con una melancólica reflexión:
“Los antiguos servidores del país se
van, después de haber llenado su destino
humano; pero por la natural que esto
sea, la desaparición de las personas que
136
412
El Día, 25 de setiembre de 1900.
413
El Pacífico, 23 de setiembre de 1900.
414
El Pacífico, 3 de octubre de 1900.
415
El Pacífico, 6 de enero de 1901.
416
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
han figurado en nuestra historia causa
general sentimiento, y obligados estamos a
tributarles honores póstumos y a conservar
su recuerdo con respeto y gratitud.” 417
Don Saturnino fue reelegido como regidor en diciembre
de 1901 y presidió nuevamente la Municipalidad porteña durante
el año 1902 418.
9.- La campaña electoral de 1905.
En fecha relativamente temprana se inició la campaña
política dirigida a elegir al sucesor del presidente don Ascensión
Esquivel, cuyo período concluía el 8 de mayo de 1906. Desde fines
de 1904 se anunció la candidatura del licenciado don Máximo
Fernández Alvarado, quien había sido el rival de Esquivel en las
elecciones de 1901 y dirigía un partido llamado Republicano;
por su parte, un grupo de católicos conservadores, varios de los
cuales habían militado en las filas de la Unión Católica, formó
otra agrupación con el nombre de Unión Demócrata, cuyo vocero
fue desde octubre de 1904 el bisemanario La Unión 419, aunque de
momento no escogió candidato. A principios de 1905 surgieron
las candidaturas del licenciado don Tobías Zúñiga Castro, por el
partido del Pueblo; del licenciado don Cleto González Víquez,
por el Partido Nacional, y del expresidente don Bernardo Soto
Alfaro, cuyo partido se denominaba Republicano Independiente.
La Unión Demócrata, por su parte, escogió como candidato al
licenciado don Ezequiel Gutiérrez Iglesias.
Aunque don Saturnino Lizano, que cumplió setenta y
ocho años de edad en noviembre de 1904, estaba retirado de la
política, apoyó la causa de la Unión Demócrata, que defendía el
respeto a la Iglesia Católica y a sus enseñanzas e instituciones. Un
miembro del partido escribió que el expresidente:
417
El Heraldo de Costa Rica, 30 de mayo de 1901.
418 A. N. C. R., S. H., Juzgado 1º de lo Contencioso Administrativo de San José, expediente
n° 1320.
419 Este periódico existía desde el mes de junio pero no fue sino hasta principios de octubre
cuando empezó a titularse “órgano del partido político “La Unión Demócrata””.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
137
El Canciller Lizano
“… fue una de las primeras personas
importantes del país que supieron apreciar
los esfuerzos de los jóvenes fundadores de
la “Unión Demócrata” y comprender la
importancia del movimiento iniciado por
estos, y así espontánea y entusiasta vino a
ofrecer a nuestro partido el apoyo de sus
esfuerzos y de su nombre.” 420
10.- Fallecimiento y funerales.
Durante largo tiempo 421, don Saturnino había soportado
resignadamente los efectos del llamado mal de Bright 422,
enfermedad renal, que se describiría en la medicina moderna
como una nefritis degenerativa aguda o crónica. Mientras
se desarrollaba la campaña electoral, su salud se deterioró
rápidamente. Recibió los últimos sacramentos de la Iglesia, y
finalmente murió a las seis de la mañana del 19 de abril de 1905, a
los setenta y ocho años y cuatro meses de edad.
Mediante un acuerdo rubricado por el presidente don
Ascensión Esquivel y suscrito por el secretario de Guerra y
Marina don Vidal Quirós Escalante, el gobierno de la República
dispuso:
“En atención a los importantes servicios
prestados a la Patria por el eximio
ciudadano don Saturnino Lizano, muerto
en esta ciudad el día de hoy,
El Presidente de la República
Acuerda:
Que se tributen a su memoria honores
militares con un destacamento de tropa,
138
420
C. I. M., “Don Saturnino Lizano Gutiérrez”, en La Unión, 19 de abril de 1905.
421
Ibid.
422
A. N. C. R., S. H., Mortuales San José, Juzgado 2º Civil, documento 11204.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
banda y bandera en el acto de la inhumación
del cadáver.- Comuníquese y publíquese.Rubricado por el señor Presidente.- Quirós.”
423
Adicionalmente, se destinó la suma de 1500 colones para
sufragar los gastos del funeral y entierro del expresidente 424.
Los funerales de don Saturnino se efectuaron el mismo
19 de abril en horas de la tarde. Fue sepultado en el Cementerio
General. Era Miércoles Santo, y aunque las exequias se realzaran
con los honores militares, la circunstancia de que el deceso
se hubiera producido en medio de la Semana Mayor muy
posiblemente les restó notoriedad y concurrencia.
Ese mismo día, el periódico La Unión, órgano de la
Unión Demócrata, anunció:
“En momentos de entrar en prensa
nuestro periódico, recibimos la tremenda
noticia de la muerte de nuestro venerable
cuanto excelente amigo don Saturnino
Lizano ex Presidente, Ministro, Diputado,
Gobernador y eximio ciudadano de la
República.
En el estupor de la desgracia que
cae sobre el país en general y sobre “La
Unión Demócrata” de la cual era una
de las columnas no podemos menos que
callar entristecidos y que enviar a la
distinguidísima familia doliente nuestros
sentimientos de sincera condolencia.
La Unión se inclina ante el muerto ilustre
y enluta sus columnas.” 425
423
Acuerdo n° 25 de 19 de abril de 1905; La Gaceta, 20 de abril de 1905.
424
A. N. C. R., S. H., Gobernación, documento n° 030.
425
La Unión, 19 de abril de 1905.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
139
El Canciller Lizano
Un colaborador del mismo periódico escribió:
“Miembro de una de las primeras
familias de esta sociedad, ex Presidente
de la República, hombre de posición y de
fortuna, cargado de años y de experiencia…
Su muerte deja en nuestras filas un vacío
tan sensible como dif ícil de llenar, porque
el Señor Lizano significaba en ellas la
simpatía de buena parte de las poblaciones
del Pacífico, o sea de Puntarenas y del
Guanacaste.” 426
El diario El Derecho, que respaldaba la candidatura de
don Máximo Fernández, publicó también el 19 de abril la siguiente
nota:
“Don Saturnino Lizano Gutiérrez
A la avanzada edad de 78 años, acaba
de bajar a la tumba el distinguido caballero
con cuyo nombre encabezamos estas líneas.
Figura importante de nuestra Patria el
señor Lizano, ocupó diferentes culminantes
puestos públicos, entre otros el de Presidente
de la República, y mostró en el desempeño
de todos ellos, las más altas dotes de
ilustración, talento e integridad.
En su vida privada fue un caballero sin
tacha; en el hogar, modelo; en su amistad,
completo.
Descanse en paz el ilustre patricio,
descanse con la satisfacción del deber
cumplido, y de que, para felicidad de la
Patria, deja un digno heredero de sus
426
140
C. I. M., “Don Saturnino Lizano Gutiérrez”, en La Unión, 19 de abril de 1905.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
virtudes y sus dotes, su hijo don Gonzalo
Lizano Guardia.
EL DERECHO envía sus más sinceras
expresiones de condolencia a la distinguida
familia del finado, y en especial a su viuda,
la hija del ilustre General Guardia y a sus
hijos, don Gonzalo Lizano y don Roberto
Fonseca Calvo y señora.” 427
El Heraldo de Costa Rica, defensor de la postulación de
don Bernardo Soto, también dedicó una nota a la muerte de don
Saturnino en su edición del 19 de abril:
“Don Saturnino Lizano Gutiérrez
Hoy a las seis de la mañana falleció
en esta ciudad el caballero cuyo nombre
figura a la cabeza de estas líneas. El luto
ha descendido sobre una de las familias
más notables de Costa Rica, y en ese luto la
acompañamos todos los que hemos sabido
apreciar los altos merecimientos a que se
han hecho acreedores, por servicios a la
Patria, los Guardias y los Lizanos, estirpe
antigua de hombres inteligentes, vigorosos y
buenos.
Don Saturnino era sobradamente
conocido de los costarricenses para que
hagamos aquí un boceto de su vida laboriosa
y honesta, o para que nos detengamos a
revelar cualidades y virtudes por todos
sabidas. En sus relaciones privadas como en
su vida pública, fue modelo de pundonor, de
honradez, de bondad y de cultura, virtudes
sociales que le granjearon siempre el aprecio
más sincero de los que fuimos honrados con
su amistad.
427
El Derecho, 19 de abril de 1905.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
141
El Canciller Lizano
Ocupó altos puestos públicos, como la
Presidencia de la República que ejerció
por un tiempo después de la muerte del
general Guardia, y Ministro de Estado que
fue en varias ocasiones. La patria pierde
con él un excelente servidor, la familia un
verdadero patriarca, sus relacionados un
bondadoso amigo, y el Partido Republicano
Independiente uno de sus adeptos más
fervientes y sinceros.
Descanse en paz el inolvidable patricio
que fue don Saturnino Lizano y reciba
su respetable familia nuestra sentida
manifestación de duelo.” 428
La Gaceta del Jueves Santo, 20 de abril, que apareció
orlada de luto, dedicó su editorial al ilustre desaparecido:
“En la mañana de ayer falleció en esta
capital, después de penosa dolencia, el señor
don Saturnino Lizano y Gutiérrez, conspicuo
servidor de la República y persona que por
las altas prendas de su espíritu era gala de
la sociedad costarricense… Modesto por la
ingénita sencillez de su carácter, bondadoso
y afable en todos los actos de su existencia,
alejado por temperamento de ruidos y
vanidades, trabajador incansable y probo,
su vida fue siempre la de un hombre de bien,
y la muerte le sorprende después de setenta y
ocho años de lucha levantada y tenaz, lleno
de méritos... Prestó importantes servicios al
país en distintas épocas… dio numerosas
pruebas de patriotismo, de cordura y de
virtud… enviamos respetuoso pésame a los
deudos del notable hombre público que tan
428
142
El Heraldo de Costa Rica, 19 de abril de 1905.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
hondo vacío deja en el grupo de los viejos
servidores del Estado.” 429
El periódico El Día, que defendía los intereses del Partido
del Pueblo, manifestó el mismo 20 de abril:
“Don Saturnino Lizano Gutiérrez
Ayer dejó de existir en esta capital
el distinguido ciudadano cuyo nombre
encabeza estas líneas. Frisaba en los 80
años. Era hijo de don Dámaso Lizano y
de doña Dámasa Gutiérrez. Fue Ministro
del General don Tomás Guardia y, como
designado, ejerció la Presidencia de la
República, a la muerte de aquel mandatario
Más tarde pasó a Puntarenas, en donde
fue Gobernador y desempeñó, por mucho
tiempo, el cargo de gerente de la casa
comercial Lizano Hermanos. También fue
hombre entendido en agricultura. Su finca
del Carrizal es una de las más valiosas del
país.
Al evocar su memoria, al consignar
en estas cortas líneas algunos datos que
servirán para su biograf ía, no podemos
menos que desear paz a sus restos y
resignación a su familia.
El entierro del señor Lizano se verificó
ayer mismo a las cinco de la tarde, con
selecta y numerosa concurrencia.” 430
El 26 de abril de 1905, doña Angélica Guardia de Lizano
solicitó al juez segundo civil de San José don Amadeo Johanning
la apertura de la mortual de su esposo, quien no había otorgado
testamento. El único bien dejado por el extinto era un inmueble de
429
La Gaceta, 20 de abril de 1905.
430
El Día, 20 de abril de 1905.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
143
El Canciller Lizano
109 hectáreas en Puntarenas, descrito como un terreno de pastos
y montes, a orillas del océano Pacífico y del río Naranjo, es decir,
en las vecindades del actual Parque Nacional Manuel Antonio. El
inmueble se valoró en 25,000 colones y estaba gravado con una
hipoteca a favor de Jaime Gordon Bennett Record, por un monto
de 24,000 colones, de modo que el activo de la sucesión apenas
alcanzaba a 1000 colones 431.
Los años de viudez de doña Angélica fueron bastante
dif íciles:
“… se vio pronto enfrentada a la pobreza
y hubo de pedir una modesta pensión al
Poder Legislativo. En esa oportunidad Don
Ricardo Jiménez, cuyo padre Don Jesús
había sido derrocado por Guardia, salió
caballerosamente en defensa de la solicitud
y dijo que si los diputados le negaban la
pensión a la viuda de don Saturnino, mejor
quitaran el retrato de Don Tomás que lucía
en el salón de sesiones del Congreso.” 432
Doña Angélica Guardia de Lizano murió en San José el
22 de mayo de 1938, a los ochenta años de edad, y fue sepultada
en el Cementerio General 433.
11.- La reparación de un injusto olvido.
Aunque desde la muerte de don Tomás Guardia el 5 de
abril de 1882 don Saturnino fue presidente de la República y no
fue un mero designado en ejercicio de la primera magistratura
por enfermedad o ausencia del titular, hubo varias circunstancias
que ante la historia hicieron confusa la verdadera naturaleza de su
gobierno. Entre esas circunstancias cabe indicar el hecho de que
al principio don Saturnino sí asumió el poder como designado
y no como presidente, la brevedad de su administración y las
144
431
A. N. C. R., S. H., Mortuales San José, Juzgado 2º Civil, documento número 11204.
432
SÁENZ CARBONELL y otros, 2001, p. 418.
433
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
circunstancias de su salida del poder. Y a todo ello hay que añadir el
propio carácter de don Saturnino, hombre modesto y poco amigo
de las vanidades y el figurón, a quien no parece haber preocupado
gran cosa que ni la administración de don Próspero Fernández ni
las posteriores le reconocieran su condición de expresidente de la
República.
A lo largo del siglo XX, para muchas personas, incluso
historiadores de prestigio, don Saturnino Lizano había sido un
mero designado en ejercicio temporal. En múltiples textos de
historia política de Costa Rica o en obras que contenían datos
biográficos de sus gobernantes se le mencionaba como designado
o se le ignoraba del todo.
En el colmo de la injusticia, el retrato de don Saturnino
estuvo ausente por más de un siglo de la galería de gobernantes
dignos existente en el Poder Legislativo, aunque ese honor sí le
fue otorgado a don Salvador Lara Zamora y a don Carlos Durán
Cartín, quienes solamente desempeñaron la presidencia en
condición de designados en ejercicio temporal. No fue sino hasta
1994 cuando, por iniciativa de uno de los autores de esta obra,
los diputados don Antonio Álvarez Desanti, don Alberto F. Cañas
Escalante, don Mario Carazo Zeledón y don Gonzalo Fajardo
Salas presentaron un proyecto para que se colocara el retrato de
don Saturnino en la mencionada galería. El proyecto fue discutido
en el plenario de la Asamblea Legislativa el 13 de febrero de 1995.
En esa oportunidad, el diputado Fajardo, representante
de Puntarenas, manifestó:
“Deseo pedirles, en forma muy especial,
el voto favorable de los señores diputados
para hacer justicia a un expresidente de la
República, don Saturnino Lizano Gutiérrez,
quien merece, conforme se ha indicado, con
algún grado de detalle, en la exposición de
motivos de este acuerdo legislativo, figurar
en la Galería de exgobernantes de esta
Asamblea Legislativa.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
145
El Canciller Lizano
El licenciado Jorge Sáenz Carbonell,
a fines de diciembre -e igual ocurrió con
otros señores diputados- nos comentaba en
relación con el estudio que había concluido,
relacionado con el Presidente Lizano, nacido
en Esparza de Puntarenas y radicado en
la ciudad que represento y como dice el
licenciado Sáenz, quizá por ese paso fugaz
por la Presidencia de la República -que pasó
como de puntillas, al decir del licenciado
Sáenz -al final de la Administración del
General Tomás Guardia y al inicio de la
Administración de don Próspero Fernández,
quizá por esta circunstancia, del paso fugaz
por la Presidencia de la República, no se
le ha considerado históricamente como un
Presidente que dirigió los destinos de este
país.
Así como lo señalaba nuestro Presidente,
don Alberto Cañas, cuando hizo la
presentación, para similares propósitos,
en relación con don Santos León Herrera,
figuran en esa Galería de Exgobernantes,
incluso un designado, don Salvador Lara,
que no llegó a ocupar la Presidencia de la
República y, nos ha parecido, un acto de
justicia, de reconocimiento a una persona
que posiblemente, la historia le señaló un
papel a jugar, fundamentalmente para
producir esa transición suave, esa transición
entre don Tomás Guardia y el inicio de un
período constitucional, a partir del 10 de
agosto de 1882; quizá esa circunstancia,
en nuestra memoria y en los estudios de
historia patria que uno realiza, no ha tenido
presente la figura de don Saturnino Lizano
Gutiérrez.
146
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
He querido, como representante de
Puntarenas, y a partir de la investigación
hecha por el licenciado Sáenz Carbonell,
profundizar en las raíces de don Saturnino
Lizano, no tan fugaz, no tan pasajera como
surge de la lectura de este estudio de Jorge
Sáenz, porque únicamente menciona que
nació en Esparza pero que es de linaje
herediano.
Quise profundizar y me he encontrado,
tanto los testimonios de parientes de la
descendencia directa de don Saturnino,
como en otros hechos históricos que he podido
analizar, la vinculación tan fuerte de don
Saturnino con la comunidad puntarenense
y la descendencia de don Saturnino, que
realmente han dado honor, que han hecho
extraordinarias obras y labores en pro de la
comunidad puntarenense.
Como representante de Puntarenas
y siendo don Saturnino, hasta ahora, el
primero y único Presidente de la República,
oriundo de Puntarenas, no he querido,
de ninguna manera, dejar pasar este
hecho histórico, con la solicitud que estoy
formulando, señores diputados, para
pedirles el voto favorable a esta iniciativa.
Mucho agradezco a don Mario Carazo
Zeledón, descendiente de don Saturnino,
a don Alberto Cañas Escalante y a don
Antonio Álvarez Desanti, haber participado
y haber firmado esta iniciativa.” 434
Por su parte, el diputado Cañas Escalante dijo:
434
http://www.asamblea.go.cr/Plenario/HistoricoActasPlenario/Aprobadas/
Aprobadas%201992-1999/9502-138.pdf
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
147
El Canciller Lizano
“Cuando mi querido compañero don
Gonzalo Fajardo Salas, me pidió que lo
acompañara en este proyecto, lo hice con
una gran satisfacción. Me había dado
cuenta, como él, en conversaciones con don
Jorge Sáenz Carbonell, de la existencia de un
hombre que gobernó a Costa Rica, por poco
más de un mes y al que teníamos olvidado.
Cabalmente, hace una semana,
interpreto que el proyecto que aprobamos
para colocar el retrato de don Santos León
Herrera en la Galería de Exgobernantes,
tiende a garantizar que don Santos León
Herrera no será olvidado, como lo ha sido
don Saturnino Lizano.
En el siglo XIX, se produjeron muchos
interinatos, muchos gobiernos provisionales.
La República se estaba formando. Nuestros
tatarabuelos no tenían experiencia.
La estabilidad política de Costa Rica,
fue algo que fuimos adquiriendo poco a
poco. Lo que hoy nos parece que es un
hecho irrefutable, inamovible, que es la
estabilidad, no lo era en otros tiempos.
Pensemos que en el siglo XX,
dichosamente sólo dos etapas de interinato
hemos tenido, pero en el siglo XIX fueron
muchas. Don Saturnino Lizano además
del mes, de poco más de un mes, mes y
cuatro días que gobernó, fue un hombre
de larga trayectoria en la política y en la
administración. Hombre que se granjeó
el respeto de sus conciudadanos por su
conducta privada y por su conducta pública
y que, en realidad, llegó al gobierno, como
ocurría en aquellos tiempos, por una especie
148
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
de carambola, pero el hecho es que llegó
limpiamente y limpiamente entregó el poder
a quien debía entregarlo.
Vamos así señores diputados, haciendo
justicia a los padres fundadores de Costa
Rica… Le pido a la Asamblea que nos
apoye, a los diputados Fajardo, Carazo y a
este quien les habla, la idea de colocar en
nuestra Galería de Gobernantes, la efigie de
un gran ciudadano, que merece estar en esa
Galería.” 435
La iniciativa fue votada favorablemente por cuarenta de
los cuarenta y un diputados presentes en la sesión. Después de
la votación, el diputado Carazo Zeledón, descendiente de don
Saturnino, hizo brevemente uso de la palabra para agradecer el
reconocimiento a su antepasado 436.
Pasaron más de cuatro años sin que el acuerdo legislativo
se cumpliera. No fue sino hasta el 19 de agosto de 1999 cuando
el retrato fue develado 437 y desde entonces, la efigie de don
Saturnino Lizano figura en la galería, entre las de don Salvador
Lara Zamora y don Próspero Fernández Oreamuno. Su retrato
también se encuentra en la galería de cancilleres de Costa Rica en
el Instituto Diplomático del Ministerio de Relaciones Exteriores
y Culto, entre las de don Salvador Jiménez Blanco y don Rafael
Machado Jáuregui.
435
Ibid.
436
Ibid.
437
La Nación, 20 de agosto de 1999.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
149
El Canciller Lizano
CRONOLOGÍA
1826: nace en Esparza el 29 de noviembre, en el hogar de don
Dámaso Lizano y Avendaño y doña Dámasa Gutiérrez y Flores.
1863: es designado gobernador de la comarca de Puntarenas.
1866: renuncia al cargo de gobernador y se dedica a actividades
agropecuarias y comerciales.
1868: es nombrado miembro de la junta calificadora de Puntarenas
para las elecciones de diciembre de ese año.
1869: es elegido como representante propietario por la comarca
de Puntarenas, pero no asume el cargo.
1870: es elegido como diputado por la comarca de Puntarenas a
la Convención Nacional constituyente, pero poco después de su
juramentación la asamblea es disuelta.
1873: es elegido como uno de los jurados de la comarca de
Puntarenas, cargo del que se ve separado poco después, porque
se le nombra por segunda vez como gobernador de la misma
comarca.
1875: el 4 de abril contrae matrimonio con doña Angélica Guardia
Lizano, hija del presidente don Tomás Guardia Gutiérrez.
1876: en mayo es nombrado por el presidente don Aniceto
Esquivel como secretario de Estado en los despachos de Guerra y
Marina, Gobernación, Policía y Agricultura e Industria. El 30 de
150
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
julio, al ser derrocado el gobierno el gobierno de Esquivel, el nuevo
presidente don Vicente Herrera lo nombra tercer designado a la
presidencia y como secretario general, titular de todas las carteras
ministeriales.
1877: es nombrado como comisionado financiero en Europa.
1878: asiste en Madrid a la boda del rey Alfonso XII y en Roma
a los funerales del papa Pío IX y a la entronización de León XIII.
Regresa a Costa Rica.
1880: es nombrado por el presidente don Tomás Guardia como
secretario de Estado en los despachos de Gobernación, Policía
y Agricultura e Industria, que desempeña hasta junio de 1882,
y además se le recargan interinamente las carteras de Guerra y
Marina, que desempeña hasta mayo de 1881.
1881: es nombrado como primer designado a la presidencia.
1882: en junio asume interinamente la presidencia, por
enfermedad del general Guardia. El 5 de julio, por muerte de
Guardia, se convierte en presidente titular de la República. El
20 de julio llama al ejercicio del poder al sétimo designado don
Próspero Fernández, aunque conserva la condición de presidente
titular hasta el 10 de agosto.
1886: es elegido como diputado suplente por Alajuela para el
período 1886-1890.
1889: en julio es nombrado como miembro suplente de la
Comisión Permanente del Congreso Constitucional para el
período 1889-1890. En setiembre participa en la fundación de la
Unión Católica de Costa Rica y es designado como su presidente.
1894: es elegido como diputado propietario por la provincia de
Puntarenas, pero poco después de su juramentación renuncia al
cargo. En julio es nombrado por tercera vez como gobernador de
la comarca de Puntarenas.
1896: un accidente lo obliga a separarse de la gobernación.
1898: en julio es nombrado por cuarta vez como gobernador de la
comarca de Puntarenas, cargo que ejerce hasta febrero de 1900.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
151
El Canciller Lizano
1900: en febrero es nombrado como administrador de Licores
y Tabacos de Puntarenas. En octubre se encarga interinamente
por varios días de la gobernación de la comarca, por licencia
concedida al titular.
1901: es elegido como regidor de Puntarenas y se le designa como
presidente de la Municipalidad.
1902: es reelegido como regidor y presidente de la Municipalidad
de Puntarenas.
1905: muere en San José el 19 de abril y se le sepulta en el
Cementerio General.
1999: se coloca su retrato en la galería de gobernantes dignos en
la Asamblea Legislativa.
152
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
APÉNDICE
APUNTES SOBRE LA DESCENDENCIA DE DON
SATURNINO LIZANO GUTIÉRREZ
En las páginas siguientes presentamos algunos apuntes
sobre los descendientes de don Saturnino Lizano, hasta sus
bisnietos inclusive. Entre ellos ha habido un vicepresidente de
la República y una primera dama de Costa Rica, diplomáticos,
artistas, intelectuales y otros personajes de significación. Estos
datos, sin embargo, son limitados, y con respecto a algunas ramas
solamente hemos podido obtener parte de la información.
PRIMERA GENERACIÓN
HIJOS
LIZANO-PRADO (hijos de Saturnino Lizano Gutiérrez y
María Prado del Mar)
Estos hijos fueron reconocidos mediante instrumento
notarial otorgado en Puntarenas el 23 de marzo de 1857 438:
438 A. N. C. R., S. H., Protocolos Lara y Chamorro, documento Nº 000821, vol.1, f. 28. El
documento dice expresamente que la madre no compareció por haber fallecido.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
153
El Canciller Lizano
1.- Don Manuel de Jesús, nacido alrededor de 1852 (según la
escritura de reconocimiento, tenía cuatro años en marzo de 1857)
y fue bautizado en Puntarenas el 28 de setiembre de 1857 439.
2.- Doña Isabel Herminia, nacida alrededor de 1855 (según la
escritura de reconocimiento, tenía dos años y medio en marzo de
1857). Casó en Puntarenas el 17 de agosto de 1874 con don Juan
de Dios Guerra y Martínez 440.
LIZANO-CASARES (hijos de Saturnino Lizano Gutiérrez y
Procopia Casares y Moreno)
Estos hijos fueron reconocidos mediante instrumento
notarial otorgado en Puntarenas el 24 de abril de 1869:
1.- Don Francisco, nacido alrededor de 1862-1863 (la escritura
de reconocimiento de 1869 dice que tiene de cinco a seis años);
hacendado, murió en Puntarenas el 25 de setiembre de 1898,
soltero 441.
2.- Don Nicolás, nacido alrededor de 1864 y fallecido en San José
el 11 de julio de 1934 442. Fue boticario en Puntarenas 443. Casó con
doña Cristina Matamoros Sandoval, hija de don Juan Matamoros
Lobo y doña Josefa Sandoval Rodríguez.
3.- Don Benito de Jesús, nació en Puntarenas el 15 de abril de
1867 444 y murió en 1931, casó con doña Rosario Huete Mancia,
hija de don Modesto Huete y doña Luz Mancia.
154
439
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22046-3
440
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12340-7868-86
441
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11841-21067-45
442
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12390-70471-21
443
El Pacífico, 3 de julio de 1898.
444
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22454-57
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
LIZANO-GUARDIA (hijos de Saturnino Lizano Gutiérrez y
Angélica Guardia Solórzano)
1.- Rafael Francisco Gonzalo de Jesús, nació en San José el 9 de
diciembre de 1875 y murió el 1° de mayo de 1950. Fue bautizado el
23 de ese mes por el presbítero don Carlos María Ulloa y Pérez, en la
capilla del Sagrario de la catedral de San José y sus padrinos fueron
sus abuelos maternos don Tomás y doña Emilia de Guardia 445.
Don Gonzalo Lizano Guardia y doña Hortensia Ramírez Martínez de Lizano
Don Gonzalo cursó con distinción estudios en el
Colegio de San Luis Gonzaga de Cartago 446 y posteriormente
en Nueva York, a donde llegó el 30 de junio de 1896 a bordo del
barco Adirondack 447. De regreso en Costa Rica, se estableció
en la ciudad de Puntarenas, donde fue en 1901 secretario de la
junta edificadora de la iglesia parroquial. También fue regidor
municipal de esa población y gobernador de la provincia de
Puntarenas, así como director general de Estadística. Heredó de
445 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11783-112269-81
446 LIZANO M., Víctor, “El Colegio de San Luis Gonzaga”, p. 479, en Revista de los Archivos
Nacionales, San José, setiembre-octubre de 1944, números 9 y 10, pp. 477-492.
447
Ellis Island, The Statue of Liberty- Ellis Island Foundation, Inc. www.ellisisland.org
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
155
El Canciller Lizano
su padre la hacienda Carrizal, ubicada en Puntarenas, y además
participó en 1908 en la fundación del Banco Mercantil de Costa
Rica, junto con personajes como el expresidente don Bernardo
Soto, don Ricardo Jiménez Oreamuno y don Alfredo González
Flores 448.
En 1900, cuando todavía era soltero, don Gonzalo tuvo
un hijo extramatrimonial con doña Rosalía Arristola 449.
En el puerto, don Gonzalo trabó amistad con el
expresidente de Nicaragua don Adán Cárdenas del Castillo y su
esposa doña Gertrudis Martínez y Solórzano de Cárdenas, quienes
residieron durante un tiempo allí, y por medio de ellos conoció
a las sobrinas de doña Gertrudis, que ocasionalmente pasaban
temporadas en su casa. Contrajo matrimonio con una de ellas,
doña María Hortensia Ramírez Martínez, nacida en Managua el
16 de abril de 1888, en el hogar de don Alberto Cristóbal Ramírez
y Briones y doña María Leonor Martínez y Solórzano. Don
Alberto Cristóbal, hacendado, había cursado estudios en Francia,
en el Liceo de Versalles y la Sorbona de París. Dominaba siete
idiomas y fue dueño de una de las mayores bibliotecas privadas de
Managua. Su padre, el hacendado y empresario don Pedro Ramón
Ramírez Goyeneche, fue ministro de Nicaragua en varias cortes
europeas, en los Estados Unidos de América y en algunos países
centroamericanos; su madre, doña Úrsula Briones e Hidalgo,
pertenecía a una rica familia de Estelí. Por parte de madre,
doña María Hortensia era nieta materna del general de división
don Tomás Martínez y Guerrero, presidente de Nicaragua de
1858 a 1867, héroe de la guerra contra los filibusteros, que fue
condecorado por varios países centroamericanos, Francia y la
Santa Sede, y de doña Gertrudis Solórzano y Zavala, de ricas
familias de Granada.
Don Gonzalo y doña Hortensia contrajeron nupcias en
Managua el 8 de diciembre de 1906, pero después se radicaron en
Costa Rica, donde nacieron sus hijos. Doña Hortensia falleció en
la ciudad de San José, el 8 de febrero de 1951.
448 CORRALES, José R., El Banco Anglo Costarricense y el desarrollo económico de Costa
Rica, 1863-1914, San José, Universidad de Costa Rica, 1ª. ed., 2000, p. 45.
449 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11823-81839-3
156
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
2.- María del Rosario Ramona Josefa de Jesús, nació en San José el
28 de agosto de 1881. Fue bautizada en San José el 7 de setiembre
siguiente en el Palacio Episcopal por el obispo monseñor Bernardo
Augusto Thiel y sus padrinos fueron su tío político don Próspero
Fernández Oreamuno y su abuela doña Emilia Solórzano Alfaro
de Guardia 450. Casó en la casa de habitación de sus padres, en
Alajuela, el 25 de noviembre de 1903, con don Roberto Fonseca
Calvo, hijo de don Pantaleón Fonseca Salazar y doña Inés Calvo
Mora. Ofició la ceremonia el presbítero don Claudio María Volio
Jiménez 451. Don Roberto, médico graduado en Montpellier,
Francia, fue el primer presidente de la Cruz Roja Costarricense.
Dr. don Roberto Fonseca Calvo y doña María del Rosario Lizano Guardia de Fonseca
450 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11860-83149-97
451 https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11808-60967-70
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
157
El Canciller Lizano
SEGUNDA GENERACIÓN
NIETOS
GUERRA-LIZANO (hijos de Isabel Lizano Prado y Juan de
Dios Guerra y Martínez)
1.- Juan Rafael, bautizado en Puntarenas el 25 de julio de 1875,
cuyos padrinos de bautismo fueron don Saturnino y doña
Angélica Guardia de Lizano 452.
2.- Celina, casada con el doctor don Eduardo López Robelo,
nicaragüense 453.
LIZANO-MATAMOROS (hijos de Nicolás Lizano Casares y
Cristina Matamoros Sandoval)
1.- Manuel María de Jesús, nacido en Esparta el 3 de octubre de
1893, casó en Puntarenas el 6 de enero de 1929 con doña Matilde
Guevara Cano 454.
2.- María Graciela de Jesús, nacida en Esparta el 11 de marzo de
1895 455, casó en Puntarenas el 23 de abril de 1916 con don Juan
Matamoros Loría.
3.- Guillermo Horacio María de Jesús, nacido en Esparta el 24 de
abril de 1898 456, casado el 25 de mayo de 1930 con doña Amelia
Josefina Fait Casalvolone, hija de don Alberto Fait de Rocchi y de
doña Rosa Casalvolone Rivolta, nacida en Monza, Italia, donde
fue bautizada el 10 de mayo de 1909.
452
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11118-22395-71
453 Esta pareja residió en Nicaragua, donde quedó de ella abundante descendencia,
http://www.manfut.org/chinandega/familmontealegre.html
158
454
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11849-145008-79
455
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11849-145020-79
456
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11849-144691-40
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
4.- María Isabel del Carmen, nacida el 20 de enero de 1903 457 y
fallecida el 21 de julio de 1993, casó en Puntarenas el 5 de febrero
de 1920 con don Alfredo Oreamuno Pacheco;
5.- Nicolás Saturnino, nacido el 1º de setiembre de 1904 458 y
fallecido el 23 de setiembre de 1995, casado en San José el 11 de
diciembre de 1927 con doña Carmen Zamora Escalante.
6.- María del Rosario, nacida el 2 de enero de 1911 y fallecida el 31
de mayo de 1997, casada el 21 de octubre de 1928 con don Jorge
Zeledón Venegas 459.
LIZANO-HUETE (hijos de Benito Lizano Casares y Rosario
Huete Mancia)
1.- Oscar Francisco, nació en Puntarenas el 22 de mayo de 1902
460
y murió en 1934
2.- Carlos Alfredo, nacido en Puntarenas el 18 de noviembre de
1903 461.
3.- Mercedes Ramona del Socorro, nacida en Puntarenas el 14 de
setiembre de 1905 462, casada en San José el 24 de abril de 1925 con
don Francisco de la Guardia de la Guardia, panameño 463.
4.- Emilia, nacida en Puntarenas el 24 de setiembre de 1908 464,
casada en Puntarenas el 13 de diciembre de 1925 con don Alfredo
Cooper Holmann, nicaragüense 465.
457
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11617-111295-10
458
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12056-16306-70
459
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12339-125283-60
460
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12056-14803-66
461
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12056-16000-1
462
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11617-111137-31
463
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11603-99951-80
464
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-1942-24136-16141-61?cc=1925429
465
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-13029-154214-22
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
159
El Canciller Lizano
5.- Jorge, nacido en Puntarenas el 6 de noviembre de 1910 466 y
fallecido en San José el 6 de enero de 1996, casado con doña Olga
Lutz Salazar.
6.- Margarita del Carmen, nacida en Puntarenas el 20 de julio de
1913 467 y fallecida en San José el 4 de enero de 1990.
LIZANO-ARRISTOLA (hijos de Gonzalo Lizano Guardia y
Rosalía Arristola)
1.- Rafael Modesto Humberto, en Puntarenas el 15 de junio de
1900 y fue bautizado en esa ciudad el 29 de julio de ese mismo
año. Su padrino de bautismo fue su tío paterno don Benito Lizano
468
. Murió trágicamente en las cercanías de Pejivalle de Turrialba
el 28 de junio de 1934, cuando lo asesinaron para robarle. Había
casado en Cartago el 25 de setiembre de 1925 con doña Amalia
María de las Mercedes Volio Sancho 469.
LIZANO-RAMÍREZ (hijos de Gonzalo Lizano Guardia y
Hortensia Ramírez Martínez)
1.- María del Rosario Leonor del Carmen (Nora), nacida en
San José el 4 de junio de 1908. Fue bautizada en la parroquia
del Carmen el día 27 de junio de 1908 y sus padrinos fueron su
tío político el Dr. don Roberto Fonseca Calvo, esposo de doña
María del Rosario Lizano Guardia, y su tía abuela doña Gertrudis
Martínez Solórzano de Cárdenas. Cursó estudios en el Colegio
Superior de Señoritas en San José.
160
466
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11862-80845-84
467
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11862-83550-92
468
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-12056-13438-51
469
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-11063-207344-44
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Don Gonzalo Lizano Guardia, doña Hortensia Ramírez Martínez de Lizano
y doña Nora Lizano Ramírez.
Junto con sus primas hermanas doña Angélica y
doña Inés Fonseca Lizano, en su juventud doña Nora pasaba
frecuentemente temporadas veraniegas en Puntarenas con su
abuela doña Angélica Guardia Solórzano de Lizano. En el puerto,
la señorita Lizano Martínez conoció a quien sería su primer
esposo, don Andrés Mario Fait Casalvolone, en el transcurso de
un elegante baile efectuado a bordo del barco Rosana, propiedad
de la familia Fait. Contrajeron nupcias en la parroquia de la
Soledad de la ciudad de San José el día 12 de mayo de 1927. Don
Andrés Mario Fait Casalvolone había nacido el 1° de mayo de 1901
en la hacienda “La Lombardía”, propiedad de sus padres, ubicada
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
161
El Canciller Lizano
en Cañas, Guanacaste, y fue bautizado en la parroquia de esa
localidad el 21 del mismo mes. Fue hijo del ingeniero mecánico
y empresario don Alberto Fait de Rocchi, italiano nacido en
San Maurizio della Costa en el Piamonte, quien fue uno de los
hombres más acaudalados de Puntarenas, y de su esposa doña
Rosa Casalvolone Rivolta, nacida en la ciudad piamontesa de
Vercelli. Cursó estudios en Italia y en los Estados Unidos (capital
de la provincia del mismo nombre, en la región de Piamonte).
Hermana de don Alberto Fait de Rocchi, fue doña Carmen Fait de
Frova, condesa de Frova.
Don Andrés Fait Casalvolone falleció ahogado en el
mar, en las cercanías de Manzanillo, en Puntarenas, a mediodía
del 8 de abril de 1932, cuando una ola volteó la lancha en que se
dirigía hacia uno de los barcos de su padre. Se cree que se golpeó
la cabeza contra alguna roca al caer, pues todos los peones que se
hallaban con él en la lancha, nadaron, excepto él, pese a que sabía
nadar, pues había recibido una esmerada educación militar en
Italia. A pesar de que se realizaron intensas búsquedas, su cuerpo
jamás fue encontrado.
Doña Nora Lizano Ramírez y don Andrés Fait Casalvolone
Cuando ocurrió el fallecimiento de don Andrés, el
matrimonio Fait Lizano residía en una finca de 3,000 hectáreas
propiedad de don Andrés, ubicada en las playas de Montezuma,
162
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
Puntarenas, en el extremo sur de la Península de Nicoya. Viuda
de don Andrés, doña Nora vendió la propiedad de Montezuma y
se trasladó a la ciudad de San José, en donde vivió en casa de sus
padres en compañía de sus dos hijos.
El 15 de agosto de 1951, doña Nora contrajo segundas
nupcias en la parroquia de La Dolorosa de San José, con don
Guillermo Arroyo Morales, nacido en esa ciudad el 30 de mayo de
1922, en el hogar de don Constantino Arroyo Ramírez y de doña
Esperanza Morales, y fallecido el 17 de febrero de 1995. En 2005,
doña Nora se trasladó a residir a la ciudad de Guatemala, donde
falleció el 19 de setiembre de ese año, a los 97 años de edad.
2.- Saturnino Alberto Ramón de Jesús, nacido en San José, Costa
Rica el 15 de noviembre de 1909. Fue bautizado en la parroquia
del Carmen el 29 de noviembre de 1909. Sus padrinos fueron su
abuelo materno don Alberto Ramírez Briones y su tía paterna
doña María del Rosario Lizano Guardia de Fonseca. Murió soltero.
3.- Juan María Gonzalo de Jesús, nacido en San José el 27 de mayo
de 1911. Fue bautizado en la parroquia del Carmen el 4 de agosto
de 1911 y sus padrinos fueron el doctor don José María Soto
Alfaro, esposo de su tía abuela doña Emilia Guardia Solórzano, y
su abuela materna doña Leonor Martínez Solórzano de Ramírez.
Ingeniero topógrafo. Fue diputado y gobernador de Puntarenas.
Contrajo matrimonio con doña Claudia Mora Madriz.
4.- Gastón Alberto del Rosario, nacido en San José el 29 de marzo
de 1919, y fallecido en San José el 27 de agosto de 1996. Fue
bautizado en la parroquia del Carmen el 12 de mayo de 1919 y
fueron sus padrinos don Salvador Calderón y doña Teresa Jiménez.
Contrajo matrimonio en la citada parroquia del Carmen, el día 5
de febrero de 1942, con doña Gladis María Calzada Carboni.
5.- María Hortensia del Rosario, nacida en San José el 2 de junio
de 1925. Fue bautizada en la parroquia de la Dolorosa el 16 de
junio de 1925 y fueron sus padrinos su tío político don Juan
(Hans) Raven Evelyn y su tía abuela doña Gertrudis Martínez
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
163
El Canciller Lizano
Solórzano viuda de Cárdenas. Contrajo matrimonio con don
Andrés Escobedo Calderón 470.
FONSECA-LIZANO (hijos de María del Rosario Lizano
Guardia y Roberto Fonseca Calvo)
1.- Angélica Isabel del Carmen, nacida en San José el 19 de
noviembre de 1904. Contrajo matrimonio el 26 de mayo de 1926
con don Enrique Gay Laprade Visser.
2.- Inés Carmen de Jesús, nacida en San José el 24 de diciembre
de 1905, soltera.
3.- María Valentina Carmen de Jesús, nacida en San José el 20 de
enero de 1907, soltera.
4.- Pantaleón José Francisco, nacido en San José el 23 de marzo
de 1908, soltero.
5.- Roberto Alfredo del Carmen, nacido en San José el 18 de mayo
de 1909, casado con doña Delia Alejandrina Quesada Lizano.
6.- Carlos Alberto de la Asunción, nacido en San José el 7 de
julio de 1910, casado en primeras nupcias con doña Betty Ugalde
Corrales y en segundas el 8 de abril de 1976 con doña Lilliam
Sequeira Chavarría.
7. María Emilia del Rosario, nacida en San José el 11 de enero de
1913, casada con don Paul Chaverri Rodríguez.
8.- María del Pilar Beatriz de la Esperanza, nacida en San José el
24 de febrero de 1915. Contrajo matrimonio el 19 de noviembre
de 1938 con don Edgar Fernández Madrigal.
9.- Fernando Augusto de Jesús, nacido en San José el 8 de enero
de 1917 y murió en California, Estados Unidos de América, el 21
de febrero de 2005, casó en los Estados Unidos de América el 7 de
setiembre de 1996 con doña Alma Rosa Gómez Chaves.
470
164
SÁENZ CARBONELL y otros, 2001, p. 419.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
10.- María del Rosario Antonia de Jesús, nacida en San José el 13
de enero de 1918, soltera.
11.- Hortensia de las Mercedes Fonseca Lizano, nacida en la
ciudad de San José el 22 de octubre de 1919.
12.- María Cecilia, nacida en la ciudad de San José el 24 de
diciembre de 1921, contrajo matrimonio con don Francisco
García Reyes, colombiano 471.
TERCERA GENERACIÓN
BISNIETOS
LÓPEZ-GUERRA (hijos de Celina Guerra Lizano y Eduardo
López Robelo)
1.- María Luisa, casada en Nicaragua con don Edmundo Deshón
Montealegre.
2.- Constantino, casado en Nicaragua con Consuelo Rosales.
Poeta y músico, conocido en Nicaragua como Tino López Guerra.
Fue autor de la famosa canción Mi linda Costa Rica, popularizada
por el cantante mexicano Miguel Aceves Mejía 472.
3/6.- Otros cuatro hijos, dos varones y dos mujeres.
MATAMOROS-LIZANO (hijos de María Graciela Lizano
Matamoros y Juan Matamoros Loría)
1.- Luis María de Jesús, nació en San José el 2 de julio de 1919 y
murió en la misma ciudad el 20 de octubre de 2005. Casó en San
José el 11 de diciembre de 1947 con doña Margarita Rivera 473.
471
Ibid.
472
http://www.nicaragua-actual.info/tino.html
473
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11689-54336-33
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
165
El Canciller Lizano
2.- Juan, nació en San José el 2 de setiembre de 1927 (mellizo) y
murió en Santo Domingo de Heredia el 6 de agosto de 2011. Casó
en primeras nupcias en San José el 16 de agosto de 1957 con doña
Rosa Castro, de quien enviudó, y en segundas en Panamá el 7 de
enero de 1959 con doña Carmela Arosemena Franciscani 474.
3.- Edgar (bautizado como Edgardo) nació en San José el 2 de
setiembre de 1927 (mellizo) 475 y fallecido el 26 de junio de 2001.
Casó en primeras nupcias en San José el 17 de setiembre de 1955
con doña Julieta Jurado Guardia, de quien enviudó, y en segundas
en San Vicente de Moravia el 26 de julio de 1966 con doña Virginia
Cecilia Sáenz Pacheco, de quien enviudó el 20 de octubre de 1993.
Doña Virginia fue hija de don Carlos Sáenz Herrera, benemérito
de la Patria y segundo vicepresidente de la República de 1962 a
1966.
LIZANO-FAIT (hijos de Guillermo Lizano Matamoros y
Amelia Josefina Fait Casalvolone)
1.- Eduardo Guillermo de Jesús, nacido en San José el 8 de
febrero de 1934. Economista con estudios en las universidades de
Zürich y Ginebra y la Escuela de Economia de Londres. Ha sido
presidente del Banco Central de Costa Rica en dos ocasiones y es
uno de los costarricenses más prolíficos en la creación y difusión
de pensamiento económico. Casó en San José el 1° de julio de
1961 con doña Teresa Di Mare Fuscaldo.
2.- Amelia de los Ángeles, nació en San José el 10 de octubre de
1936 y murió en la misma ciudad el 29 de noviembre de 2005.
Casó con don José Rafael Cordero Croceri, quien fue diputado,
ministro de la Presidencia y embajador de Costa Rica en Colombia,
Argentina y Nicaragua.
166
474
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-266-12880-153852-35
475
Ibid.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
OREAMUNO LIZANO (hijos de Isabel Lizano Matamoros y
Alfredo Oreamuno Pacheco)
1.- María Eugenia, nació en San José el 3 de setiembre de 1921.
Soltera.
2.- Roberto Alfredo, nació en San José el 6 de febrero de 1928 y
murió en San Rafael de Escazú el 16 de noviembre de 2011. Casó
en San José el 3 de abril de 1954 con doña Olga Robert Góngora.
LIZANO-ZAMORA (hijos de Nicolás Lizano Matamoros y
Carmen Zamora Escalante)
1.- Zulay Francisca del Carmen, nació en San José el 26 de enero
de 1929.
ZELEDÓN-LIZANO (hijos de María Lizano Matamoros y
Jorge Zeledón Venegas)
1.- Estrella, nacida en San José el 21 de abril de 1929. Casó en San
José el 16 abril de 1947 con don Rodrigo Carazo Odio, presidente
de la República de 1978 a 1982. Fue integrante del Consejo
Ejecutivo de la Organización de las Naciones Unidas para la
Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) en el período 19811985.
2.- Jorge Alfredo Francisco Zeledón Lizano, nacido en San José
el 7 de febrero de 1931. Casó en Turrialba el 14 de diciembre de
1957 con doña María Eugenia Carazo Laurito.
3.- María Cristina, nacida en San José el 5 de febrero de 1934.
Casó con don Enrique Lahmann Volio.
4.- Mariela Ester Zeledón Lizano, nacida en San José el 3 de mayo
de 1935.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
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El Canciller Lizano
FAIT-LIZANO (hijos de Nora Lizano Ramírez y Andrés Fait
Casalvolone)
Don Alberto y doña Hortensia Fait Lizano
1.- José Alberto Fait Lizano, nació en San José el día 5 de julio de
1928 y murió el 2 de junio de 1997. Fue bautizado en la parroquia
de Puntarenas el 2 de setiembre de 1928 y fueron sus padrinos su
tío materno don Saturnino Lizano Ramírez y su tía paterna doña
Carmen Fait Casalvolone de Casalvolone Rivolta, representada
por doña María Fait Casalvolone de Cordiale Casalvolone. Cursó
sus estudios primarios y secundarios en San José; se graduó como
ingeniero civil en la Universidad de Tulane, Luisiana, Estados
Unidos de América, y posteriormente obtuvo un posgrado en
presupuestación de edificios en la Universidad de Costa Rica,
donde también fue profesor 476. Fue primer vicepresidente de
la República de 1982 a 1985 y ejerció interinamente la primera
magistratura en varias oportunidades. Además fue precandidato
presidencial en 1985 y diputado por San José de 1986 a 1990. Casó
en Cartago el 6 de enero de 1951, con doña Ana Teresa Pacheco
476 AGÜERO ECHEVERRÍA, José Manuel, “Alberto Fait”, La Nación, 20 de julio de
1997.
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El Canciller Lizano
Jiménez y tuvo además sucesión con doña Luz María Meza Peralta
y doña Bernardita Valverde Brenes.
2.- Hortensia Teresa, nació en San José el 24 de abril de 1930 y
murió en la ciudad de Guatemala el 20 de junio del año 2014. Fue
bautizada el día 12 de mayo de 1930 en la residencia particular
del internuncio apostólico monseñor José Fietta, con los nombres
de Hortensia Teresa. Sus padrinos fueron su abuelo paterno
don Alberto Fait de Rocchi y su abuela materna doña Hortensia
Ramírez Martínez de Lizano. Cursós estudios en el Colegio de
Nuestra Señora de Sión y en la Escuela de Comercio Isabel de
Mendiola, de donde se graduó el 20 de diciembre de 1950 como
secretaria comercial. En la Embajada de Costa Rica en El Salvador
fue agregada de prensa de 1966 a 1970, y en la de Costa Rica en
Guatemala desempeñó los cargos de agregada cultural de 1978
a 1982, consejera de 1982 a 1986, ministro consejero y cónsul
general de 1986 a 1990, encargada de negocios en 1990 y 1994 y
ministro consejero de 1990 a 1994. En mayo de 1995 fue también
observadora por Costa Rica en el Parlamento Centroamericano
y en 1997 delegada a la XX reunión del Consejo Superior de la
FLACSO y además participó en otras conferencias y reuniones
de carácter internacional. Casó en la iglesia de la Soledad en
San José el 29 de junio de 1951 con don Pedro Manuel Ramírez
Martínez, nicaragüense, quien era hijo de don Pedro Ramón
Ramírez Martínez y de doña Ofelia Martínez Solórzano y nieto
paterno de don Alberto Cristóbal Ramírez Briones y de doña
Leonor Martínez Solórzano, es decir, primo hermano de la madre
de doña Hortensia, doña Nora Lizano Ramírez de Fait, aunque
mucho menor que ella.
LIZANO-MORA (hijos de Gastón Lizano Ramírez y Claudia
Mora Madriz)
1.- Alberto, nació en San José el 14 de febrero de 1937. Ingeniero
civil. Casó en primeras nupcias en Cartago el 24 de marzo de 1962
con doña Emilce Arias Mora y en segundas en San José el 16 de
agosto de 1991 con doña Miriam María San Martín Díaz-Galazo.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
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El Canciller Lizano
2.- Olga Eugenia, nació en San José el 20 de octubre de 1941. Casó
en San José el 11 de agosto de 1962 con don Hernán Alvarado
Rees.
3.- Marisela, nació en San José el 21 de febrero de 1946. Casó en
primeras nupcias en Puntarenas el 1° de julio de 1964 con don
Fernando Caamaño León y en segundas en los Estados Unidos
de América el 8 de junio de 2011 con don Manuel Javier Dobles
Mora.
4.- Anayansi, nació en San José el 18 de junio de 1951. Contrajo
matrimonio con don Lino Andrade Hernández.
LIZANO-CALZADA (hijos de Gastón Lizano Ramírez y Gladis
María Calzada Carboni)
1.- Tahís Hortensia, nació en San José el 18 de diciembre de 1942.
Casó en Elmhurst, Nueva York, Estados Unidos de América, el 2
de agosto de 1964, con don Álvaro Mejía Díaz, colombiano.
2.- Virginia, nació en San José el 13 de noviembre de 1945. Gerente
general del Club Unión de San José durante muchos años.
3.- Ricardo, nacido en San José el 22 de enero de 1952.
Periodista. Fue ministro consejero de la Misión de Costa Rica
en la Organización de los Estados Americanos de 1990 a 1994
y embajador de Costa Rica en Venezuela de 1998 a 2002. Casó
en San Rafael de Escazú el 11 de agosto de 1979 con doña Flora
Saborío Muñoz.
ESCOBEDO-LIZANO (hijos de Hortensia Lizano Ramírez y
Mario Escobedo Calderón)
1.- Francisco Javier, nació en San José el 26 de enero de 1954. Casó
en primeras nupcias en Heredia el 31 de enero de 1976 con Sylvia
Peñaranda Contreras; en segundas el 20 de diciembre de 1985
con doña Katya Kovie Londergan, y en terceras el 8 de octubre de
1989 con Karine Smit Michel.
170
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
COOPER-LIZANO (Hijos de Emilia Lizano Huete y Alfredo
Cooper Hollmann)
1.- Gracia Cabrini, nació en Puntarenas el 28 de setiembre de
1926 477.
LIZANO-LUTZ (Hijos de Jorge Lizano Huete y Olga Lutz
Salazar)
1.- Jorge Arturo, nació en Puntarenas el 18 de febrero de 1938,
casó en San José el 13 de setiembre de 1968 con Ana Lorena
Jiménez Apéstegui.
LIZANO-VOLIO (Hijos de Humberto Lizano Arristola y
Amalia Volio Sancho)
1.- Ana Cecilia, nació en San José el 11 de diciembre de 1928,
casó en San José el 14 de mayo de 1949 con don Enrique Brenes
Oreamuno.
2.- Álvaro Carlos Ramón, nació en San José el 28 de enero de
1931, casó en Escazú el 28 de diciembre de 1962 con doña Rita
María Chacón Soto.
3.- Olga, nació en San José el 31 de octubre de 1933, casó con don
Carlos Francisco Atmetlla González.
LAPRADE-FONSECA (Hijos de Angélica Fonseca Lizano y
Enrique Gay Laprade Visser)
1.- León Roberto de Jesús, nació en Guadalupe de Goicoechea el
1° de diciembre de 1926, casó con doña Miriam Coto Pintado.
2.- Carlos Enrique de Jesús, nació en San José el 27 de diciembre de
1928 y murió en la misma ciudad el 17 de junio de 1998. Soltero.
477
https://familysearch.org/pal:/MM9.3.1/TH-267-11773-22456-4
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
171
El Canciller Lizano
3.- Álvaro Ramón de Jesús, nació en San José el 11 de febrero de
1930, casó con doña Isabel Guevara Mora.
4.- Henry Eugenio Ramón, nació en San José el 10 de diciembre
de 1932, casó el 10 de mayo de 1968 con doña Eugenia Chavarría.
FONSECA-UGALDE (hijos de Carlos Alberto Fonseca Lizano
y Betty Ugalde Corrales)
1.- Carlos Alberto, nació en San José el 25 de junio de 1942 y
murió en San José el 20 de mayo de 1991, casó en San José el 1° de
abril de 1967 con doña Ana Teresa Arguedas Retana.
2.- Roberto, nació en San José el 22 de abril de 1941, casó en San
José el 8 de mayo de 1967 con doña Gloria López Bonilla.
3.- Ana Isabel, nació en San José el 2 de octubre de 1947 y murió
el 2 de enero de 1985, casó en San José el 19 de julio de 1973 con
don Edgar Zeledón Portuguez.
FONSECA-SEQUEIRA (hijos de Carlos Alberto Fonseca
Lizano y Lilliam Sequeira Chavarría)
1.- Rebeca, nació en San José el 30 de agosto de 1976.
CHAVERRI-FONSECA (hijos de Emilia Fonseca Lizano y Paul
Chaverri Rodríguez)
1.- Amalia, nació en San José el 26 de enero de 1941. Integrante
de la Academia Costarricense de la Lengua y correspondiente
de la Real Academia Española de la Lengua; fue viceministra de
Cultura, Juventud y Deportes. Casó en San José el 12 de enero de
1961 con don Luis Uribe Montealegre.
2.- Eugenia, nació en San José el 24 de octubre de 1943. Laureada
actriz y directora teatral. Casó en Santa Rosa de Santo Domingo
172
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
de Heredia el 12 de setiembre de 1975 con don Álvaro Quesada
Soto.
3.- Cecilia María, nació en San José el 6 de diciembre de 1947,
casó en primeras nupcias en San Pedro de Montes de Oca el 29 de
junio de 1974 con don Ronald José Casas Ulate y en segundas el 2
de abril de 1986 con don Roberto Enrique Fletes Guerrero.
FERNÁNDEZ-FONSECA (hijas de María del Pilar Fonseca
Lizano y Edgar Fernández Madrigal)
1.- Lucía, nació en San José el 22 de octubre de 1939, casó con don
Luis Fernando Fonseca Martínez.
2.- María de los Ángeles, nació en Cartago el 23 de julio de 1943,
soltera.
3.- Olga María, nació en San José el 3 de agosto de 1948, casó en
San José el 8 de enero de 1972 con don Víctor Manuel Arias Leiva.
4.- Edgardo, nació en San José el 1° de agosto de 1949, casó en
primeras nupcias en San José el 18 de octubre de 1980 con doña
Carmen Lía Garrote Salas y en segundas en San Juan de Tibás el 4
de julio de 1997 con doña Lorena Corrales Cubillo.
5.- Dialá, nació en San José el 19 de junio de 1951, casó en San
Juan de Tibás el 25 de abril de 2006 con don Juan Bautista Solano
Bejarano.
FONSECA-GÓMEZ (hijos de Fernando Fonseca Lizano y Alma
Rosa Gómez Ramírez)
1.- Álvaro, nació en San José el 20 de marzo de 1952.
2.- Ana Isabel del Rosario, nació en San José el 28 de febrero de
1957.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
173
El Canciller Lizano
BIBLIOGRAFÍA
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DOCUMENTOS DEL ARCHIVO DIPLOMÁTICO DEL
MINISTERIO DE RELACIONES EXTERIORES DE LA
REPÚBLICA ARGENTINA
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DOCUMENTOS DEL MUSEO DIPLOMÁTICO BRAULIO
CARRILLO
DEL
MINISTERIO
DE
RELACIONES
EXTERIORES Y CULTO DE COSTA RICA
Diario de don Manuel María de Peralta 1918-1922.
Diario de don Manuel María de Peralta 1878-1880.
DOCUMENTOS DE LA SECCIÓN HISTÓRICA DEL
ARCHIVO NACIONAL DE COSTA RICA
Complementario Colonial, documentos números 942, 5964 y
6992.
Congreso, documentos números 2395, 6847, 8413, 8472, 8481,
8485, 8490, 8733, 8923, 10356, 10611,13486, 13543.
Fomento, documento número 1298.
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Gobernación, documentos números 030, 5268, 7432, 10863.
Juzgado 1º de lo Contencioso Administrativo de San José,
expediente nº 1320.
Mortuales San José, Juzgado 2º civil, documento número 11204.
Municipal Esparza, documentos números 166, 365.
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Protocolo Lara y Chamorro, documentos números 00411, 0058,
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Relaciones Exteriores. Gobiernos extranjeros. Guatemala. año
1876, n° 18827.
Relaciones Exteriores. Legaciones de Costa Rica. El Salvador, año
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Relaciones Exteriores. Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año
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Relaciones Exteriores. Legaciones de Costa Rica. Guatemala, año
1876, nº 18826.
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COLECCIÓN DE LEYES Y DECRETOS
Años 1859, 1865, 1866, 1869, 1870-1884, 1894-1898, 1905, 1908
LIBROS
ALARMVOGEL [Francisco Picado Soto], Apuntes para la
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Nacional, 1ª. ed., 1966.
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C. I. M., “Don Saturnino Lizano Gutiérrez”, en La Unión, 19 de
abril de 1905.
El Costarricense, 1873-1877
El Derecho, 1905.
El Día, 1905.
El Heraldo de Costa Rica, 1901, 1905.
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Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
El Pacífico, 1896-1902
Gaceta oficial, 1863, 1865-1866, 1873-1877.
Gaceta oficial de Costa Rica, 1859, 1860
La Gaceta, 1878, 1882, 1894, 1901, 1905.
La Nación, 1999.
La República, 1895.
La Unión, 1904-1905.
REVISTAS
“Cartas de don José María Castro Madriz a don Manuel María de
Peralta (1883-1884)”, en Revista Costarricense de Política Exterior,
Nº 1, junio de 2012, pp. 118-126.
FERNÁNDEZ PERALTA, Álvaro,
“Familia de La Guardia. Principios del Siglo XVII” en Revista de
la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas, San José, N°
6, 1958, pp. 19-31.
“Familia Fernández-Val. Principios del Siglo XVII”, en Revista de
la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas, San José,
1961, N° 9, 35-86.
LIZANO M., Víctor, “El Colegio de San Luis Gonzaga”, en Revista
de los Archivos Nacionales, San José, Setiembre-octubre de 1944,
números 9 y 10, pp. 477-492.
III.- OBRAS INÉDITAS.
CATRO Y TOSI, Norberto de, Armorial General de Costa Rica,
Archivo de la Academia Costarricense de Ciencias Genealógicas.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
179
El Canciller Lizano
GRUB, Udo, Boceto Cronológico y Genealógico del Poder Ejecutivo
de Costa Rica, 1994.
IV.- FUENTES ELECTRÓNICAS.
ACTAS DE LA ASAMBLEA LEGISLATIVA, en
http://www.asamblea.go.cr/Plenario/HistoricoActasPlenario/
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MARTÍNEZ ESQUIVEL, Ricardo,
Actividades masónicas en la ciudad de Puntarenas
(1870-1876), en
h t t p s : / / w w w. a c a d e m i a . e d u / 4 9 0 4 5 9 / A c t i v i d a d e s _
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Masones y su participación política en Costa Rica (18651899), en
http://historia.fcs.ucr.ac.cr/articulos/2008/especial2008/
articulos/06-politica/76.pdf
V.- OTROS.
Datos suministrados por doña Adriana Chaverri
Fonseca, doña Ana María Herrera Sotillo, don Omar Jaén Suárez,
don Mauricio Meléndez Obando y don Emilio Obando Cairol.
180
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
El Canciller Lizano
SOBRE LOS AUTORES
JORGE FRANCISCO SÁENZ CARBONELL (San José, 1960),
es licenciado en Derecho y doctor en Educación. Es catedrático
de la Universidad de Costa Rica. Ha publicado numerosos
libros sobre temas históricos, jurídicos y literarios, así como
artículos en revistas especializadas. Es miembro de la Academia
Costarricense de la Lengua y de la Academia Costarricense de
Ciencias Genealógicas.
PEDRO RAMÍREZ SIERRA (Guatemala, 1984), es licenciado
en Derecho. Fue consejero de la embajada de Costa Rica
en Guatemala. Ha publicado varios artículos sobre temas
genealógicos. Es miembro de la Academia Guatemalteca de
Estudios Genealógicos, Heráldicos e Históricos.
Jorge Francisco Sáenz Carbonell
181
El Canciller Lizano
se terminó de imprimir en el mes de setiembre de 2015,
en los talleres gráficos de la Imprenta Nacional.
Su edición consta de 200 ejemplares impresos en papel bond 75 g
con forro de cartulina barnizable tipo C.
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