N Seguro dentro de la puerta ací hace algunos años en un pueblo donde no había luz Eléctrica. Dentro de casa usábamos lámparas y velas para tener un poco de claridad, pero afuera la noche era muy oscura, tanto que casi se podía tocar. Mi papá tenía la mala costumbre de mandarme a comprar a la bodega justo cuando ya todo estaba bien oscuro, él decía que era para que fuera perdiendo el miedo a la oscuridad. Los viejos del pueblo al verme pasar aprovechaban para asustarme aun más diciendo que en la oscuridad salía un hombre sin cabeza sangrando por la nariz así que, de regreso a casa, corría lo más fuerte que podía e imaginaba que aquel hombre sin cabeza me perseguía y ya casi me alcanzaba hasta que llegaba a la puerta de mi casa. Sin mirar atrás cerraba la puerta y sentía esa paz y seguridad de estar a salvo. ¡Qué tranquilidad el sentirme seguro dentro de la puerta! esa misma paz y seguridad es la que ofrece Cristo. Él pudo decir: Yo soy la puerta, el que por mí entrare será salvo. Juan 10:9. Hay peligro fuera Píntame de esta puerta. Afuera hay una condenación eterna, pero hoy la puerta está abierta y puedes entrar, esta puerta es Jesucristo. Entra mientras aun está abierta. Gelson Villegas, Mirimire 30-06-12 N Seguro dentro de la puerta ací hace algunos años en un pueblo donde no había luz Eléctrica. Dentro de casa usábamos lámparas y velas para tener un poco de claridad, pero afuera la noche era muy oscura, tanto que casi se podía tocar. Mi papá tenía la mala costumbre de mandarme a comprar a la bodega justo cuando ya todo estaba bien oscuro, él decía que era para que fuera perdiendo el miedo a la oscuridad. Los viejos del pueblo al verme pasar aprovechaban para asustarme aun más diciendo que en la oscuridad salía un hombre sin cabeza sangrando por la nariz así que, de regreso a casa, corría lo más fuerte que podía e imaginaba que aquel hombre sin cabeza me perseguía y ya casi me alcanzaba hasta que llegaba a la puerta de mi casa. Sin mirar atrás cerraba la puerta y sentía esa paz y seguridad de estar a salvo. ¡Qué tranquilidad el sentirme seguro dentro de la puerta! esa misma paz y seguridad es la que ofrece Cristo. Él pudo decir: Yo soy la puerta, el que por mí entrare será salvo. Juan 10:9. Hay peligro fuera Píntame de esta puerta. Afuera hay una condenación eterna, pero hoy la puerta está abierta y puedes entrar, esta puerta es Jesucristo. Entra mientras aun está abierta. Gelson Villegas, Mirimire 30-06-12 Seguro dentro de la puerta Laberinto Seguro dentro de la puerta Laberinto Yo soy la puerta, el que por mí Entrare será salvo. Juan 10:9 Entra por la puerta donde indica la flecha hasta que llegues al bombillo que alumbra dentro de la casa. Escribe la dirección aquí Yo soy la puerta, el que por mí Entrare será salvo. Juan 10:9 Entra por la puerta donde indica la flecha hasta que llegues al bombillo que alumbra dentro de la casa. Escribe la dirección aquí