Consideraciones sobre la reforma del sistema de gobierno

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CONSIDERACIONES SOBRE LA REFORMA DEL SISTEMA DE GOBIERNO
VENEZOLANO
(LA FIGURA DEL PRIMER MINISTRO EN EL SISTEMA POLITICO
VENEZOLANO)
Dra. Marie Picard de Orsini
Directora del Instituto de Derecho Comparado
Facultad de Derecho
Universidad de Carabobo
SUMARIO
INTRODUCCION
I.UN RÉGIMEN PRESIDENCIAL
II.UN RÉGIMEN PRESIDENCIAL CON MATICES PARLAMENTARIOS
III.- LA CRISIS
IV.- LA CONCIENCIA DE LA CRISIS
V.CONSTITUCION. LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES. REALIDAD.
VI.- LA FIGURA DEL PRIMER MINISTRO FRANCÉS. V REPUBLICA.
VII.- REFLEXIONES FINALES
BIBLIOGRAFIA
INTRODUCCION
Las consideraciones que a continuación presentamos tienen aspiraciones de servir de
reflexión sobre un tema tan importante y actual como es la reforma del sistema de gobierno
venezolano. Estas consideraciones sólo tienen la pretensión de analizar la conveniencia o no
de una reforma en esa área, capaz de adecuarse a las aspiraciones de la Venezuela de fin de
siglo y que dé como resultado una Constitución más normativa y menos nominal, orgánica y
no contradictoria y resistente a problemas que puedan presentarse en el transcurso del tiempo
y en momentos de crisis.
El desarrollo de la democracia moderna es inconcebible sin un proceso de reforma que
ordene las causas de participación ciudadana. Esa participación se encuentra en la base
misma del principio de legitimidad democrática. Del pueblo emanan los poderes del Estado;
los poderes deben responder a la voluntad del conjunto de los ciudadanos, libremente
manifestada.
La Reforma Constitucional presenta una serie de temas relevantes que recogen problemas
atinentes a la vida institucional del país, con el objetivo general de interesar y proyectar la
actual coyuntura por la que el país atraviesa y sus posibles soluciones para vivir en verdadero
Estado de Derecho, con ,mayúscula, imbuido de justicia social y cultural de todos los
venezolanos.
El programa de reformas debe ser producto de la integralidad de concepciones y de
sumatorias de demandas en relación a los distintos aspectos de la vida nacional.
La reforma es todavía un proceso en curso pero inevitable; la sociedad civil y su
fortalecimiento dará origen a la verdadera reforma del Estado.
Estamos inmersos en el tiempo de las reformas: el referéndum revocatorio, la revocatoria del
mandato, la reforma del sistema electoral para facilitar la escogencia nominal de los
candidatos a representar en los distintos niveles políticos, el descongestionamiento de la
función ejecutiva de la República, entre otros importantes (*).
El tema central de nuestras consideraciones se refiere a la reforma del sistema de gobierno, en
especial reformar el presidencialismo y a este tema hacemos el comentario principal.
1. RÉGIMEN PRESIDENCIAL
El Régimen Presidencial Venezolano se caracteriza por una serie de elementos, a saber: el
Presidente de la República y los Ministros no emanan en su titularidad del Congreso de la
República. Su designación y sus funciones son independientes de las Cámaras legislativas: el
Presidente de la República es electa por sufragio, universal, directo y secreto (artículo 183
constitucional); dicho acto se realiza tradicionalmente con las elecciones de Diputados y
Senadores. Los Ministros del Ejecutivo Nacional son designados por el Presidente de la
República (Artículo 190, Ord. 2°) sin la intervención del Congreso y si alguno hubiese sido
elegido Diputado o Senador de una manera previa, no pierde su investidura al aceptar el
cargo de Ministro, pero debe separarse de las funciones de la Cámara respectiva, pudiendo
reincorporarse al cesar en sus funciones ministeriales (artículo 141 constitucional). El
Presidente y los Ministros necesitan de la confianza del Congreso para gobernar debido al
Principio de Separación de Poderes, pero la Cámara de Diputados puede dar su voto de
censura a los Ministros lo cual implica su remoción por el Presidente de la República
(artículo 153, Ord. 2° de la Constitución).
Esta ingerencia del Congreso en el gobierno, evidentemente que configura un elemento de
parlamentarismo en la forma presidencial de gobierno. La ingerencia que el Presidente de la
República tiene respecto al funcionamiento del Congreso, se convierte en la posibilidad que
tiene el Presidente de la República de convocar al Congreso a sesiones extraordinarias.
(*) Últimamente el pueblo venezolano está de acuerdo con un llamado a Referéndum sobre la suspensión de Garantías
Constitucionales actualmente en vigencia. Para la celebración de este Referéndum se recurrirá a los artículos 3 y 4 constitucionales,
el pueblo como constituyente originario y legítimo (Andueza, José Guillermo. Diario El Nacional).
Artículo 3 (C.N.). El gobierno de la República de Venezuela es y será siempre democrático, representativo y alternativo.
Artículo 4 (C.N.). La soberanía reside en el pueblo, quien la ejerce mediante el sufragio, por los órganos del Poder Público.
Los Ministros no son miembros del Congreso, como bien sabemos, pero tienen derecho de
palabra en las Cámaras y en sus Comisiones, y están obligados a concurrir a las Cámaras
cuando sean llamados a las respectivas interpelaciones que se les hagan. Tienen además la
obligación de presentar anualmente al congreso, una Memoria razonada y suficiente de su
gestión en el año inmediatamente anterior y de sus planes para el siguiente (artículos 197 y
199 constitucional). Debe hacerse mención de que el propio Presidente de la República puede
dirigir al Congreso personalmente o a través de uno de sus miembros, Informes o Mensajes
Especiales (artículo 190, Ord 2°, constitucional) y debe presentar el Presidente un Mensaje
Anual sobre los aspectos políticos y administrativos de su gestión durante el año
inmediatamente anterior, en el cual debe exponer además, los lineamientos del Plan de
Desarrollo Económico y Social de la Nación (artículo 191 constitucional).
Además, el Presidente de la República y los Ministros tienen iniciativa legislativa (articulo
165, ord. 2°, constitucional), aún cuando el Congreso puede rechazarlos Proyectos de Ley
que presenten. Los Ministros tienen derecho de palabra en la discusión de las leyes (artículo
170 constitucional) pero también tienen restricciones: el Proyecto de Ley propuesto solo
puede ser presentado al Congreso para que inicie su discusión en la Cámara de Diputados por
el Ejecutivo Nacional (artículo 153, Ord. lº, constitucional) y las Cámaras pueden alterarlas
partidas presupuestadas, pero sin poder autorizar gastos que excedan al monto de las
estimaciones de ingresos del respectivo Proyecto de Ley de Presupuesto presentado por el
Poder Ejecutivo (artículo 228, constitucional).
De acuerdo a la Constitución, las relaciones entre el Poder Ejecutivo y Legislativo son
frecuentes pero no ilimitadas. Existe, por ejemplo, la nominación de funcionarios por parte
del Presidente de la República, ya que algunos nombramientos como el Procurador General
de la República o el Jefe de Misiones Diplomáticas Permanentes deben realizarse previa
autorización del Senado o de la Comisión Delegada (artículo 190, Ord.16, y artículo 150,
Ord. 7, constitucional).
Algunos actos del Poder Ejecutivo requieren también de la intervención del Congreso para
que tengan validez: la aprobación del congreso es necesaria para la celebración de contratos
de interés nacional y para el otorgamiento de concesiones de hidrocarburos (artículo 126
constitucional), y la autorización previa de las Cámaras en sesión conjunta o de la Comisión
Delegada es necesaria para que el Presidente de la República pueda enajenar bienes
inmuebles del dominio privado de la Nación (artículo 150, ord. 2°, constitucional), para el
empleo de misiones militares venezolanas en el exterior o extranjeras en el país, a la solicitud
del propio Ejecutivo Nacional y para que el Presidente de la República pueda salir del
territorio nacional (artículo 150, ord 4° y 6°, artículo 189 constitucional).
Además, en materia legislativa, para que las leyes tengan validez tienen que ser promulgadas
por el Presidente de la República, una vez que han sido sancionadas por las Cámaras
Legislativas, pero pueden ser vetadas con la consecuente devolución al Congreso para su
reconsideración (artículo 173 constitucional). Por otra parte, el Congreso ejerce control sobre
la Administración Pública Nacional (artículo 139 constitucional) y las Cámaras y sus
Comisiones pueden realizar las investigaciones que juzguen conveniente y los funcionarios
públicos y de los Institutos Autónomos están obligados a comparecer ante ellas y
suministrarles las informaciones y documentos que requieren para el cumplimiento de sus
funciones (artículo 160 constitucional).
En el sistema presidencial venezolano todos los actos del Presidente de la República, salvo
los nombramientos y remoción de los Ministros y los que cumpla como Comandante en jefe
de las Fuerzas Armadas Nacionales en ejercicio de la suprema autoridad jerárquica de ellas,
deben estar refrendados para su validez por el Ministro o Ministros respectivos (artículo 190,
ord. T - y 3°-), siendo éstos constitucionalmente responsables de sus actos aún en el caso en
que actúen por órdenes expresas del Presidente de la República (artículo 196) y el propio
Presidente es responsable constitucionalmente de sus actos (artículo 192). Este puede ser
enjuiciado previa declaratoria de la Corte Suprema de Justicia y la autorización del Senado,
en cuyo caso quedará suspendido en el ejercicio de sus funciones (artículo 150, ord. 82).
Presidencial es el régimen político de nuestra Constitución; lo establece el artículo 181
cuando expresa "El Presidente de la República es el Jefe del Estado y del Ejecutivo
Nacional". Las características de los gobiernos presidenciales (presidencialismo
norteamericano) son aplicables a nuestro régimen político-constitucional.
1. La Separación de los Poderes, que sin ser absoluta es suficientemente acentuada para
asegurar su recíproca independencia.
2. El Presidente debe su título al pueblo y así no puede exigir ese pueblo responsabilidad
política.
3. Los Ministros del Ejecutivo son escogidos y removidos libremente por el Presidente
de la República, salvo el teórico voto de censura sin función en Venezuela.
II.- UN REGIMEN PRESIDENCIAL CON MATICES PARLAMENTARIOS
Las relaciones entre el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo determinan el sistema de
gobierno. Sistema de gobierno como existencia de titulares del poder con una competencia
otorgada y delimitada por la propia Constitución y que al actuar tienen la obligación de
cooperar en la realización de la unidad del Estado que se manifiesta en la real estructura del
Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo que determinan el sistema de gobierno.
Venezuela está enmarcada en un sistema presidencial o, al menos, en una forma de gobierno
de "preponderancia presidencial"; los gobiernos, una vez conformados por el sistema
electoral y de partidos, actúan mediante un sistema presidencial pero con sujeción
parlamentaria. Es la presencia de un "Poder" Ejecutivo Presidencial con matices
parlamentarios (*).
Es necesario partir de la idea de reflexionar acerca de la forma de gobierno existente,
evaluando las ventajas y desventajas del régimen presidencialista cace matices parlamentarios
y de su funcionamiento en nuestro medio; todo relacionado col el sistema de partidos, las
relaciones con el Poder Legislativo y Judicial, la eficacia de la acción de gobierno y
concientizar la crisis por la que atraviesa nuestro país y, por ende, el sistema de gobierno.
III. LA CRISIS
La crisis en Venezuela tiene sus raíces en la propia crisis del sistema de gobierno.
La ineficiencia, la ineficacia, la corrupción, la falta de representatividad, la inexistencia de
fórmulas reales de participación, el centralismo y las desviaciones de los partidos políticos,
entre otras, han sido causas de índole política que, evidentemente, fueron catalizadas en
medio de la crisis económica que sufrimos a finales de los años ochenta.
El sistema de gobierno presidencialista venezolano presenció revueltas sociales (1989), dos
intentos de golpes de Estado (1992) y el enjuiciamiento del propio Presidente de la República
la crisis del Ejecutivo Presidencial se vio reflejada en la suspensión del Presidente de la
República elegido directamente por el pueblo, pero visto como acto democrático y legítimo.
Cuando no existe correspondencia entre la institución "Poder Ejecutivo" y el pueblo, el
descontento y el clima de agitación se hacen presentes. Es menester acomodar las
instituciones de derecho a las cambiantes necesidades de progreso de la comunidad que, a
veces, presenta un exceso de impaciencia por ver un camino y lograr el avance; es la decisión
de encontrar fórmulas auténticas para encarar el reto de desarrollo socio-político del país. Es
lo que se percibe actualmente en el Poder Ejecutivo, al cual no le incomodaría una reforma
para lograr un mecanismo para su destitución en ocasión de la improbación de su gestión por
medio del Referéndum Revocatorio posibilidad de que el electorado pueda solicitar una
consulta popular para evaluar la gestión del Presidente de la República, lo cual puede
conducir a una revocatoria del mandato. Es necesaria la correspondencia entre los
detentadores del poder y los destinarios de ese poder.
Al alejamos del presidencialismo puro debido a los matices parlamentarios, los controles han
sido poco efectivos frente a la figura preponderante del Presidente, que se considera el
corazón de las instituciones politizas y constituye el poder dominante en el Estado. Es
necesaria la revisión de nuestra forma de gobierno presidencialista; dentro de este contexto se
plantea la adición de una nueva figura ejecutiva, cual es el Primer Ministro, a proposición de
la Comisión Presidencial para la Reforma (COPRE) y por la Comisión Bicameral Especial de
Revisión de la Constitución y opiniones de destacadas personalidades de la vida nacional. Sin
hacer un examen exhaustivo de las diversas proposiciones y a pesar de no pensar nosotros en
esta figura ejecutiva para solucionarlos problemas relativos a la crisis profunda en que está
sumida Venezuela y su sistema de gobierno, la participación que todos debemos asumir nos
hace pensar en que llegaremos a una revisión profunda en cuanto a su estructura para el logro
de directrices fumes de acuerdo a las necesidades del país.
(*) Brewer Carías, Alían.-Instituciones Políticas y Constitucionales. Tomo II. Universidad - del Táchira. San Cristóbal. Edit.
Jurídica Venezolana. Caracas, 1985. p: 153.
El problema radica en que tenemos una tradición presidencialista pero "sui generis" y que
existe una excesiva concentración politizo-administrativa en la persona del Presidente de la
República y la puesta en práctica del conjunto de competencias ejecutivas da lugar a dos
problemas: 1) un problema político y es la conciliación de las exigencias del principio
democrático con el ejercicio de un poder personal por parte del Presidente, y 2) un problema
técnico, que consiste en la búsqueda de auxiliares susceptibles de descargar al Presidente de
una tarea cada vez más pesada, todo dependiendo de su autoridad No creemos que la solución
sea cambiar hacia un sistema parlamentario que no tendría arraigo en Venezuela, sino
observar nuevos elementos con miras a perfeccionar el funcionamiento del Poder Ejecutivo,
pero no transplantar instituciones de un país a otro. Los factores que convergen en una
sociedad política han de ajustarse a las circunstancias sociales, económicas y políticas del
país. Tenemos que ajustar el sistema presidencialista a la realidad del país ya que existe crisis
en la gobernabilidad que podría cobrar mayor fuerza en la medida en que la sociedad se ve
desprovista de arias democráticas que le permitan participar de una manera directa en la toma
de las más importantes decisiones, pues la falta de verdadera representación en el conjunto
nacional y Asambleas Legislativas nos ha llevado a pensar más que en una democracia
representativa en una democracia participativa.
La adición de un nuevo personaje en el Ejecutivo no es, por sí solo, suficiente y eficaz para
asegurar resultados positivos de acuerdo a las necesidades del país. Al adicionar un Primer
Ministro o un Vice-Presidente no vamos a redimensionar al Poder Ejecutivo, no vamos a
descentralizar la administración pública, no vamos a desmontar el Estado empresario y
benefactor. El Vice Presidente, como tal, funciona en países de alta cultura politiza como
Estados Unidos de Norteamérica. En Venezuela pasaría a ser otro jefe poderoso, lo cual
acrecentarla la omnipotencia del Poder Ejecutivo, por sus mismas condiciones de elegibilidad
y tiempo de mandato.
En el caso de EEUU, frecuentemente, los partidos eligen para tal cargo a personas de escasa
relevancia e incluso que las convenciones queden poco menos que desiertas cuando se
discute o se vota el candidato a Vice-Presidente. La función potencial del Vice-Presidente
radica en sustituir al Presidente en caso de destitución, muerte, renuncia o incapacidad
(*) Ayala Corao, Carlos.- Reformas del Sistema de Gobierno. Ponencia presentada en el Seminario sobre Reforma Constitucional,
celebrado en Caracas entre el 14y 15104 194.
IV.- LA CONCIENCIA DE LA CRISIS
La conciencia de la crisis se manifiesta en la insatisfacción de los destinatarios del poder
hacia los detentadores del mismo, porque al agotarla relación entre las instituciones y las
necesidades cambiantes no existe la seguridad de evitar catástrofes mayores como pueden ser
las revueltas o revoluciones armadas. El valor máximo necesario es la estabilidad política y la
participación.
V.- CONSTITUCION. LAS REFORMAS CONSTITUCIONALES.
REALIDAD
Si partimos de la realidad constitucional, podemos decir que todo Estado tiene necesidad de
ese orden fundamental que constituye la Constitución; pero no debemos paramos allí,
tenemos que verla como un orden fundamental, una organización que tiene raíz en el cuerpo
social que representa principios determinados: ideas, creencias, fines, intereses. La
Constitución debe penetrar en la vida personal del hombre y a la vez los miembros de la
sociedad influir sobre ella; de allí derivan su legitimidad, su validez y su vigor.
Si importante es el texto constitucional, los ideales políticos sirven de muy poco sin el
desarrollo económico, social, cultural y político, partes de una positiva evolución del proceso
político. La Constitución es un medio, no un fin.
El estudio de las reformas a la Constitución ha interesado a todos los especialistas; en
apariencia se trata de un tema muy debatido y, a veces, agotado en cuanto a posibilidades de
nuevos planteamientos. El proceso evolutivo de las instituciones es diferente en cada país y
por ello, al dirigir nuestra mirada hacia el Derecho Comparado, examinamos y
sistematizamos los problemas planteados en cada país y las consecuencias de la Reforma
Constitucional en el nuestro. Creemos que el Derecho Comparado sirve de base para
modernizar algunas instituciones pero los textos constitucionales, al ser sometidos a reformas
mediante las cuales se introducen instituciones complejas sin arraigo en la realidad e
idiosincrasia del país denotan ausencia de vida parlamentaria, ausencia de jego de los
partidos, en una palabra, falta o ausencia de cultura política.
Se dice que los países que han descuidado las reformas necesarias a la Constitución tienen
dificultad para enfrentar los problemas del mundo moderno, pero toda reforma tiene que
cuidar poner en práctica nuevas instituciones para una sociedad que necesita, no de la ilusión
de un avance efímero que se puede disipar en poco tiempo, sino de la solidez y permanencia
que a los procesos sociales confieren bases jurídicas suficientemente cimentadas. Se debe
comprender que la Reforma debe ser salvaguardada contra exceso e improvisaciones y, por
ende, garantía de un desarrollo ordenado y estable. No implica lanzar un programa
irrealizable ni proyectar la máxima maravilla de la creación constitucional.
La Reforma debe tener como norte la consolidación de un régimen de gobierno electivo, de
origen popular, estable, eficiente, que respete los derechos humanos y que sea apto para
lograr cabios encausados y alcanzables.
VI. LA FIGURA DEL PRIMER MINISTRO FRANCÉS. V REPÚBLICA
En Francia, el Primer Ministro es el Jefe de Gobierno y Presidente del Consejo de Ministros.
1. Nominación:
-
El Primer Ministro es nominado directamente por el Presidente de la República y sin
la anuencia del Congreso (Cámara de Diputados).
Se presenta ante el Congreso (Cámara de Diputados), cuando lo juzga oportuno, para
obtener sobre su programa un voto de confianza.
Tiene directa libertad en relación con la Cámara de Diputados.
2. Revocación:
-
Es el Jefe de Estado quien pone fin a la presentación de la renuncia del gobierno.
El Presidente no tiene entonces el derecho de revocar, por propia iniciativa, al Primer
Ministro.
Pero, el Primer Ministro puede siempre retirarse voluntariamente a instancia del
Presidente, o por razones de conveniencia personal o de oportunidad política.
3. "Status":
-
El Primer Ministro es el segundo personaje del Estado. Le sigue inmediatamente al
Presidente de la República en orden de prelación.
Puede delegar algunos de sus poderes a un Ministro.
-
En caso de impedimento o ausencia, éste es llenado por un Ministro que el Jefe de
Gobierno escoge como él lo considere.
Bajo reserva de estas observaciones, el Primer Ministro tiene el "status" de un
Ministro en lo que concierne a las incompatibilidades y la responsabilidad
4.- Funciones:
-
Los Ministros son nombrados a proposición del Presidente de la República bajo
presentación del Primer ministro.
Igualmente, a proposición del Primer Ministro, el Jefe del Estado pone fin a las
funciones de los Ministros.
Jurídicamente, al Primer Ministro le pertenece la decisión tanto para la nominación
como para la revocación
De hecho, este poder es compartido con el Presidente de la República.
5.-Incompatibilidades:
Prohibición de toda actividad que no tenga que ver con la función de gobierno, especialmente
la parlamentaria. En consecuencia, la función de Primer Ministro es incompatible con el
ejercicio de:
a.- Todo mandato parlamentario, lo que implica que el Diputado o Senador que se
transforma en Ministro cesa de pertenecer al Parlamento.
b.- Todo empleo público:
-
De carácter nacional: duración nacional de sindicatos de organismos
profesionales.
De toda actividad profesional.
El Primer Ministro solo puede ser Primer Ministro.
6.- Modalidades y Efectos de la Incompatibilidad
-
-
Se establece una incompatibilidad, no una inelegibilidad; un Primer Ministro puede
ser elegido Diputado o Senador pero debe escoger su mandato parlamentario y su
función ministerial.
La incompatibilidad solo tiene efecto a partir de la expiración de un plazo de un mes a
partir de la nominación del Parlamento como Ministro: si en ese intervalo el nuevo
Ministro o el gobierno renuncian, la incompatibilidad no funciona.
VII.- REFLEXIONES FINALES
Es pertinente, para finalizar, presentar algunas ideas generales sobre el tema, a modo de
conclusión:
1. Necesidad de Cambios: En nuestro país son necesarios importantes cambios; no debe
haber un sometimiento resignado a la adversidad de las circunstancias políticas. Debe
existir una actitud realista de un compromiso con las ideas y creencias y la realidad
social. Realismo como conocimiento de la realidad, de la viabilidad del cambio que se
propicia, conocer los intereses en juego, sus fuerzas, sus perspectivas de ventajas o
desventajas del modelo constitucional propuesto, tomando en cuenta más que
argumentos jurídicos y políticos el elemento sociológico, que la Reforma no esté
disociada de la idiosincrasia del pueblo para una verdadera democracia participativa.
2. Legitimidad del Sistema de Gobierno: Debe imperar la legitimidad del sistema de
gobierno, ya que el poder se legitima solo cuando se ejerce conforme al Derecho, el
imperio de la norma de Derecho que va a regular no solamente a los gobernantes sino
también a los gobernados, a los cuales mantendrá dentro de un orden justo y legítimo
que depare en la realidad, a los ciudadanos, las garantías fundamentales y el goce
efectivo de ellos. Cuando existe un estado de crisis es imprescindible encontrar el
origen de la legitimidad, ponerla en práctica en los procesos constituyentes.
3. Gobernabilidad: Es decir, que el gobierno gobierne, porque gobierno y administración
van de la mano y, por ende, no administrar es desgobernar y así el Estado no podrá
cumplir con lo fines propuestos. Para lograr los fines debe existir una correlación
entre las condiciones constitucionales de elegibilidad del Presidente, las cuales han
sido reducidas al mínimo en nuestra Constitución y lo que representa el desempeño de
esta alta investidura; es necesaria la encarnación del poder de conducción en la
persona de un verdadero Hombre de Estado que refuerce el prestigio de la institución
presidencial.
4. Descentralización: Teniendo como objetivo profundizar la democratización de la
gestión pública y hacer más eficiente el funcionamiento del Estado, pero
estableciendo límites constitucionales claros en la redistribución del poder en cada
uno de los Estados y Municipios de este sistema federal. La realidad social y política
son las que deben llevar a la mejor descentralización para una mayor participación y
representatividad. La presión por la descentralización llevó al fortalecimiento de la
sociedad civil y a la reforma de la Constitución en relación a materias atinentes al
sistema político venezolano.
Ahora queda el verdadero control sobre los gobernadores en un marco de realidad,
cordura y dejando de lado factores políticos de parte de las Asambleas.
5. La Descentralización: Con esta figura podemos descongestionar el aparato estatal y
ser el vehículo para la descentralización de un ente y puede ser usado a nivel de Poder
Ejecutivo Nacional.
El Presidente de la República solo debe ocuparse de los problemas fundamentales; sin duda,
debe estar al corriente de todos los problemas a través de las deliberaciones del Consejo de
Ministros que preside, pero debe dejar a éstos el cuidado de decidir sobre los problemas
corrientes. El Presidente solo debe intervenir en los problemas más importantes.
El Consejo de Ministros, democráticamente investido, debe tener la efectividad jurídica y
política de la dirección global dula cosa pública, de la que es responsable. La figura destacada
del Presidente de la República encarna. el factor unipersonal de dirección de los asuntos
capitales del Estado.
Para evitar la concentración del poder político en un solo hombre tenemos que observar la
calidad de sus colaboradores dada la complejidad de los problemas actuales, éstos deben
asumir su cuota de trabajo y responsabilidad. De la función potencial de cada uno de los
Ministros, tomando resoluciones en lo que se refiere al régimen económico y administrativo
de sus respectivos Ministerios, esta facultad no desnaturaliza el carácter unipersonal del
Organo Ejecutivo. Los titulares de los órganos ministeriales son funcionarios Vivos, jefes
superiores dentro de sus respectivos departamentos y 'deben asistir al Presidente en el
ejercicio de sus atribuciones constitucionales, además de ser controlados realmente por el
Congreso Nacional para que la figura del voto de censura tenga vigencia plena.
6. Cuidado con el abuso de la palabra Crisis!. No debemos abusar de la palabra "crisis";
tenemos que preguntarnos ¿qué es lo que todavía no está o no ha estado en crisis?
Podríamos llegar a la crisis mismas del propio diagnóstico de la crisis.
El Estado jamás ha dejado de estar en crisis, ya que nunca ha dejado de transformarse y toda
transformación trae consigo su crisis, una reconstrucción de elementos, ya que el Estado no
se concentra en un algo definitivo sino en una readaptación de su estructura, de sus funciones
en medio de la realidad presente.
7. Personalmente, creemos que las vías antes expuestas pueden ofrecer cambios al
sistema presidencial, sin necesidad de enmienda, para la incorporación del sistema
semi presidencial francés o del Primer Ministro Ejecutivo tipo Perú. Sin embargo, no
estamos cerrados a la figura del Primer Ministro. Si realmente estuviese en el tapete
de las reformas por parte del Congreso Nacional o de una Asamblea Constituyente,
nos inclinaríamos por el sistema semipresidencial y con la inserción del Primer
Ministro al estilo francés de la V República, pero no deformado ni desnaturalizado,
aunque debemos reconocer que autores franceses consideran el sistema como híbrido
y peligroso ya que dirigir la acción del gobierno es considerable en si misma, pero es
disminuida en la práctica porque tiene que compartirla con el Jefe de Estado.
8. Por último, quiero hacer la siguiente reflexión: La Reforma del Estado no tendrá
sentido si no va acompañada de una toma de conciencia de la sociedad gobernante y
gobernada. Cada uno de los poderes tiene que desempeñar su papel de una manera
legítima y transparente. El poder del Presidente de la República para dictar medidas
extraordinarias como facultad presidencial solo debe estar condicionada a una
autorización del Congreso y no a una delegación legislativa. El Congreso no puede
establecer condicionamientos a esta autorización sino otorgarle un voto de confianza
y de responsabilidad al actual Presidente de la República.
Venezuela requiere soluciones acordes con los requerimientos del pueblo, soluciones de
cambio en paz que no aumenten la fractura de la solidaridad social y el desmembramiento de
todo lo que hemos logrado.
BIBLIOGRAFÍA
¥ AYALA CORAO, Carlos.-Reformas al Sistema de Gobierno. Ponencia presentada en
el Seminario sobre Reforma Constitucional, celebrado en Caracas entre el 14 y 15 de
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¥ BURDEAU, Georges.-Droit Constitutionnel et Institutions Politiques. Librairie de
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¥ DUVERGER, Maurice.- Instituciones Politiques et Droit Constitutionnel. Presses
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Madrid, 1927.
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