Hora Santa para pedir por los fieles difuntos

Anuncio
HORA SANTA PARA PEDIR POR LOS FIELES DIFUNTOS
DIRECTOR
La oración por las Benditas almas del Purgatorio es el más maravilloso acto de amor que un alma puede
dar. Orar por ellas es una demostración de fe en el Reino prometido por Jesús, es una prueba de amor por
aquellos que más lo necesitan ya que nada pueden hacer por cuenta propia para acortar sus penas, y es un
gesto de unión en la Comunión de los santos, de la iglesia peregrina en la tierra, con la iglesia purgante que
está camino a la Iglesia Glorificada, la de los santos que están en el Cielo.
MEDITEMOS:
EN TODAS TUS ACCIONES TEN PRESENTE TU FIN, Y JAMÁS COMETERÁS PECADO”. (Eclo. 7,36)…
“Que es fácil al Señor, el día de la muerte, pagar a cada uno según su proceder. (Eclo.11, 26)…
Antes del fin no llames feliz a nadie, que sólo a su término es conocido el hombre” (Eclo.11, 28)…
La existencia del Purgatorio es una cuestión de fe.
La Sagrada Escritura nos asegura que si existe el Purgatorio. San Pablo explica a los cristianos de Corinto
que según la manera como realicemos nuestra vida, ésta se salvará o no se salvará; pero que habrá algunos
que se salvarán solamente como pasando por el fuego, lo dice textualmente: “su obra quedará de
manifiesto, pues en su día el fuego lo revelará y probará cual fue la obra de cada uno. Aquel cuya obra
subsista recibirá el premio, y aquel cuya obra sea consumida sufrirá el daño. El ,sin embargo, se salvará,
pero como quien pasa por el fuego” (1Cor 3,14-15).
La existencia del Purgatorio supone que el alma humana es inmortal y que por lo tanto permanece
existiendo después de la muerte de cada persona. Y sobre esto dice Jesús en el Evangelio: “no tengáis miedo
a los que matan el cuerpo, pero no pueden matar el alma; temed más bien al que puede hacer perecer en el
Infierno tanto el alma como el cuerpo.”(Mt.10, 28)
Y al final Jesús pone el valor de la salvación del alma por encima de cualquier otro bien: dice Jesús:
¿De qué le sirve al hombre ganar todo el mundo si al final pierde su alma? Y ¿qué podrá dar a cambio para
recuperarla? Mt 16,26. Por eso insiste Jesús en que sigamos el ejemplo de su vida, porque ese es el camino
de la salvación.
Lector 1En todo pecado existen dos elementos:
La mancha de la culpa y el reato de la pena, y ambos elementos deben ser purificados.
La mancha de la culpa se borra por medio de la gracia, que hace volver a Dios el corazón del hombre; y el
reato de la pena es totalmente destruido cuando el hombre satisface a Dios. Esto quiere decir que somos
por el pecado reos de culpa y reos de pena.
La culpa puede ser perdonada pero la pena debe pagarse. Así como en la cruz Jesús le perdonó al ladrón su
culpa:”Hoy estarás conmigo en el paraíso”; pero no le perdonó la pena, ya que Jesús no lo libró de la muerte
en cruz.
1
A nosotros los católicos Dios nos perdona la culpa de nuestros pecados en el sacramento de la penitencia
pero la pena de nuestros pecados debe ser pagada o satisfecha.
En parte, esta pena se paga cumpliendo con la penitencia que nos impone el sacerdote, en parte también
con nuestras obras de caridad, por nuestros actos piadosos y por nuestros sufrimientos ofrecidos a Dios
con la intención de pagar la pena merecida por nuestros pecados.
La pena será mayor por los pecados mortales perdonados y menor por los veniales.
Tenemos la posibilidad de pagarla en nuestra vida temporal, y si no está totalmente saldada la pena, queda
el recurso inevitable del Purgatorio.
La tradición cristiana ha conservado la buena costumbre de orar por los difuntos intercediendo por ellos,
se ofrecen novenarios de Misas y de Rosarios, también se suelen ofrecer las Misas Gregorianas que son 30
misas con la intención de interceder por un difunto determinado.
El pecado es lo que mancha el alma, en cuanto se une desordenadamente a las cosas inferiores; y en esta
vida se purifica tal mancha por la penitencia y los demás sacramentos. Mas algunas veces sucede que tal
purificación no se realiza plenamente en esta vida, sino que aún queda alguna deuda culpable debido a las
ocupaciones, sea porque se haya llegado a la muerte con alguna culpa. Pero no por ello merece verse
totalmente excluida del premio; porque pudiera haber cometido tales faltas sin pecado mortal, único que
quita totalmente la caridad.
TODOS
ORACION
Señor Jesucristo, por la preciosísima sangre que derramaste durante tu temor a la muerte
en el huerto de Getsemaní, suplico que liberes a las almas de tu servidores de los
sufrimientos de los fuegos del purgatorio, en especial a aquellas que están mas
abandonadas, y llévalas a su lugar en tu esplendor para que te Glorifiquen y Alaben en la
Eternidad
Dios te salve María llena eres de gracia, el Señor es contigo, bendita eres entre todas las
mujeres y bendito es el fruto de tu vientre Jesús. Santa María madre de Dios, ruega por
nosotros los pecadores. Inunda toda la humanidad con las gracias de tu LLAMA DE AMOR
ahora y en la hora de nuestra muerte. AMEN.
Lector 2
LAS PENAS EN EL PURGATORIO.
Las penas en el purgatorio son tan fuertes que superan con mucho los dolores más intensos que podamos
sufrir en nuestra vida temporal.
El alma humana es castigada en su totalidad, sufre toda entera, no hay parte del alma que no sufra porque
el alma no tiene parte, no así el cuerpo.
“Y porque toda la sensibilidad del cuerpo le viene del alma, si esta es herida, por necesidad su aflicción ha
de ser máxima.”
La pena es precisamente pena porque es contraria a la voluntad, sin embargo hay penas que se pueden
aceptar con una voluntad condicionada, como sucede a veces que para conseguir un bien, solamente es
posible mediante medios muy penosos, como los mártires, que aceptan el dolor del martirio porque saben
que es una condición segura de su salvación.
Las almas de Purgatorio aceptan sus penas purificadoras, pues saben que podrán alcanzar la gloria
celestial.
2
Algunas almas pagan sus penas mas pronto que otras y esto se debe a la adherencia hacia el pecado si es
mas fuerte se quedará mas tiempo y sólo los sufragios ofrecidos por ella le podrán dar algún descanso, y
sobre todo reducir su pena en cuanto a la duración.
Para los dolores físicos tenemos medicamentos paliativos materiales; para el dolor espiritual de las
almas del Purgatorio solamente hay paliativos espirituales: nuestros sufragios por ellas, la
intercesión de los santos, especialmente de la Virgen María y sobre todo los infinitos méritos de la
Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo.
ORACION:
Oh Señor Jesucristo, por la preciosísima sangre que derramaste durante la despiadada
flagelación, te suplico que liberes a todas las almas de tus fieles, en especial a aquellas que
están mas cerca de su liberación y llévalas a ti para que te puedan Glorificar y Alabar en la
Eternidad.
Dios te salve……
Lector 3
LAS ALEGRIAS EN EL PURGATORIO:
En el infierno no hay esperanza de salvación mientras que en el purgatorio la misma esperanza de que la
pena terminara algún día, ya es motivo de alegría.
Santa Catalina de Génova comenta que hay tres motivos principales por los cuales se puede hablar de
algunas alegrías en las almas del Purgatorio:
Porque piensan en la misericordia de Dios
1.- La misericordia es que ellas sufren voluntariamente aquellas penas convencidas de que Dios realizó un
gran gesto de misericordia respecto a lo que ellas merecían.
Porque tienen la certeza de su salvación
2.- La absoluta seguridad de estar salvas en una alegría sin comparación, El alma que sabe que está salvada
no le tiene temor a nada, ni a las tentaciones de Satanás ni a las ocasiones de pecado porque ya está libre de
ellas no tiene la duda o el temor de perderse. Estas almas de han salvado para siempre, y esto aligera sus
penas.
Las almas del purgatorio experimentan la alegría de vivir en su grado más perfecto las virtudes teologales
de la fe, la esperanza y la caridad. Santa Catalina de Génova dice que el alma en el Purgatorio vive la fe en el
grado máximo porque todavía no llega a la visión inmediata de Dios, que elimina toda niebla y la hace vivir
en la luz eterna. Lo mismo puede decirse de la esperanza, que es la virtud propia de las lamas del
Purgatorio, porque el alma, al desconocer el término y los límites de sus penas, no obstante, desea
ardientemente a Dios, con una intensidad de amor del que nosotros no podemos hacernos ninguna idea,
Aun el amor que los más grandes santos han tenido en la tierra hacia Dios es algo muy pequeño comparado
con el amor de un alma en el Purgatorio. Por eso muchos santos antes de subir al cielo son pasados por el
3
Purgatorio aunque sea por muy poco tiempo. O sea que estas almas pueden unir en si mismas una gran
alegría en medio de los mayores tormentos.
El consuelo del amor de Dios
3.- El tercer motivo de alegría es el consuelo que les da el amor de Dios porque dice santa Catalina de
Génova. PORQUE EL AMOR VUELVE FACIL TODAS LAS COSAS. Las almas del purgatorio viven en un mar de
AMOR.
ORACION:
Oh Señor Jesucristo, por La preciosísima sangre que derramaste durante tu dolorosa
coronación, te suplico que liberes a todas las almas de tus fieles cristianos del calabozo del
purgatorio en especial, a aquellas que deben sufrir allí por mas tiempo, y llévalas a la
comunión santa de tu elegidos, para que te puedan Glorificar y Alabar en la Eternidad.
Dios te salve….
Lector 4
LA COMUNION DE LOS SANTOS
Todos nos debemos de sentir solidarios con los demás en el divino proyecto de salvación. Y así
como nosotros pedimos a Dios por las almas del Purgatorio también los bienaventurados del Cielo piden a
Dios por nosotros y por las almas del Purgatorio.
A los santos del cielo solo les falta la glorificación del cuerpo por lo que oran; pero también oran por
nosotros que estamos privados de las bienaventuranzas, nuestra última perfección. Y sus oraciones tienen
eficacia impetratoria en virtud de sus méritos anteriores y de la divina aceptación. Son eficaces porque si
inteligencia y su voluntad coinciden con lo que DIOS QUIERE PARA NOSOTROS.
Dios quiere esta solidaridad entre todos los bautizados y reparte su gracia a través de la Virgen María, de
todos los demás santos y del misterio santificador de la Iglesia mediante los sacramentos.
La eficacia de nuestras oraciones está garantizado por Jesús mismo que nos invita a orar cuando nos dice:
“Pedid y recibiréis, buscad y encontraréis, llamad y se os abrirá.”
Para que nuestra oración sea escuchada debemos de tener en cuenta cuatro condiciones:
Pedir por todos
Pedir cosas necesarias para la salvación
Hacerlo con piedad
Hacerlo con perseverancia
ORACION:
Oh Señor Jesucristo, por la preciosísima sangre que derramaste durante tu dolorosa
crucifixión, te suplico que liberes a todas las almas de los difuntos, en especial a la de mi
padre, mi madre, mis hermanos y hermanas, mis parientes, mis benefactores, y llévalas a la
dicha eterna, para que te puedan Glorificar y Alabar en la Eternidad.
Dios te salve…
4
Lector 5
LA VIRGEN MARIA Y LAS ALMAS DEL PURGATORIO
Es importante reconocer el papel de la Santísima Virgen María, madre nuestra, corredentora y medianera
de todas las gracias que también quiere que todos sus hijos se salven.
Nuestra Señora del Carmen es reconocida como la abogada de las almas del purgatorio, y Ella ha hecho
diversas promesas de conseguir la reducción de la pena a las personas que durante su vida se hayan
encomendado a Ella y hayan portado su escapulario rezando por lo menos tres Aves Marías diarias. Una de
las promesas reveladas el año 1246 a San Simón Stock, superior general de la orden carmelitana decía que
serán librados del Purgatorio el primer sábado después de su llegada. Ella se acerca a sus hijos
principalmente con los más necesitados y abandonados.
La virgen visita y socorre a las almas del Purgatorio mitigando sus penas.
Ella obtiene también gracias y bendiciones para los fieles devotos de estas almas, especialmente si tales
fieles recitan la oración del santo rosario en sufragio por las almas del Purgatorio.
Los sacrificios y especialmente el ofrecimiento de la Misa ayudan a las almas.
Oración:
Oh Señor Jesucristo, por la preciosísima sangre que mano de tu bendito costado, te suplico
que liberes a todas las almas del purgatorio, en especial a aquellas que durante sus vidas
sirvieron de forma especial a tu santísima Virgen Madre, y llévalas a tu Gloria Eterna para
que te puedan Glorificar y Alabar en la Eternidad.
Dios te salve…
Orar por las almas del Purgatorio no es solamente una cuestión de conveniencia sino que se trata de un
deber de caridad que debemos cumplir por amor al prójimo¿Quién no siente la necesidad de hacer llegar a los propios seres queridos que ya se fueron un signo de
bondad, de gratitud o también de petición de perdón?
Además de las indulgencias podemos ofrecer por ellos toda clase de obras buenas, desde la Santa Miso, que
es el mismo sacrificio redentor de Jesucristo, hasta los rosarios, horas santas, visitas al Santísimo
Sacramento, retiros espirituales, limosnas, obras de misericordia y de caridad, y hasta nuestras mismas
penas y mortificaciones. Quien ayuna a pan y agua el lunes, librará cada vez un alma sacerdotal del lugar
del sufrimiento.
“Las obras que se hacen por alguien pasan a ser de él.”
El purgatorio es una obra de la misericordia de Dios
TODOS:
"Oh Padre Eterno, os ofrezco la más preciosa Sangre de vuestro Divino Hijo, Jesús, unido a las Misas
celebradas hoy alrededor del mundo, por todas las santas almas del Purgatorio. Amén".
(Oración enseñada por Jesús a Santa Gertrudis para liberar mil almas del Purgatorio)
5
Descargar